Está en la página 1de 14

1.

Héroe Nacional
Tecun uman
El 20 de febrero de cada año se celebra al héroe nacional de Guatemala Tecún Uman, sin
embargo la mayoría de la población desconoce totalmente de este importante personaje de
Guatemala y lamentablemente muchos aun creen en la historia oficial tergiversada que
narra cómo fue su muerte al enfrentarse al señor Pedro de Alvarado.
Según Blanca Estela Colop Alvarado, presidenta de la Comunidad Lingüística Maya Kiche’
de la Academia de Lenguas Mayas de Guatemala, Tecún Umán fue un personaje real y no
mítico como algunos autores tratan de imponer y por esas tendencias despertó en ella una
curiosidad por conocer más de su vida y su historia, ello la llevó a iniciar una serie de
investigaciones.
La entrevistada indicó que Tecún Umán fue de la familia de los descendientes de kikab’,
pues su nombre aparece en uno de los Títulos llamado Otzoyal donde se describe de
manera concreta y en idioma k’iche’ cómo fue realmente su muerte y las circunstancias que
motivaron su deceso.
Agregó que en estos textos se revela que realmente Tecún Uman existió y fue un personaje
multi-diciplinario o polifacético, porque además de ser guía espiritual era un guía del
pueblo, no era un guerrero sino defensor de las causas del pueblo k’iche’ por eso fue el guía
de los que enfrentaron físicamente a los invasores y su muerte fue el resultado de una
traición.
Colop indica que en el escrito literalmente aparece la frase “Xt’iq chirij” al referirse a la
muerte de Tecún Umán, lo que significa que “fue matado por la espalda” por lo tanto se
desvirtúa aquella historia de que él se enfrentó a Alvarado y que primero mató al caballo
pensando que con matarlo el invasor también moriría, éste si es un mito inventado por
quienes escribieron una falsa historia, indicó.
Tecún fue un hombre que dio su vida para que la invasión no llegara a tener consecuencias
más lamentables como está pasando actualmente con tanta invasión de mucha índole que ha
destruido a la sociedad pero nuestros ancestros defendieron la vida, la cultura y la
espiritualidad de nuestros pueblos porque además de él existieron otros grandes personajes
como Asumanche, Kaibil Balam, entre otros que debemos conocerlos.
Tecun Uman se estaba preparando para ser un personaje importante, se cree que nació en el
reino Kiche y formado en el linaje de Qumarkahaj, pero por su influencia y su importancia
recorrió muchos lugares como lo hace en la actualidad cualquier personaje importante, se
sabe que el frecuentaba mucho un cerro denominado pui’ K’ieq ubicado en Cantel de
Quetzaltenango a donde llegaba a ofrendar.
Finalmente Colop indica que Tecún no era un nombre ni apellido sino un título, además el
nombre correcto no es Tecun sino Tucum y Tucum Umam significa el nieto del gran
Tucum pues “mam” significa abuelo en muchos de los idiomas mayas de Guatemala.
El 20 de febrero de cada año se celebra al héroe nacional de Guatemala Tecún Uman, sin
embargo la mayoría de la población desconoce totalmente de este importante personaje de
Guatemala y lamentablemente muchos aun creen en la historia oficial tergiversada que
narra cómo fue su muerte al enfrentarse al señor Pedro de Alvarado.
Según Blanca Estela Colop Alvarado, presidenta de la Comunidad Lingüística Maya Kiche’
de la Academia de Lenguas Mayas de Guatemala, Tecún Umán fue un personaje real y no
mítico como algunos autores tratan de imponer y por esas tendencias despertó en ella una
curiosidad por conocer más de su vida y su historia, ello la llevó a iniciar una serie de
investigaciones.
La entrevistada indicó que Tecún Umán fue de la familia de los descendientes de kikab’,
pues su nombre aparece en uno de los Títulos llamado Otzoyal donde se describe de
manera concreta y en idioma k’iche’ cómo fue realmente su muerte y las circunstancias que
motivaron su deceso.
Agregó que en estos textos se revela que realmente Tecún Uman existió y fue un personaje
multi-diciplinario o polifacético, porque además de ser guía espiritual era un guía del
pueblo, no era un guerrero sino defensor de las causas del pueblo k’iche’ por eso fue el guía
de los que enfrentaron físicamente a los invasores y su muerte fue el resultado de una
traición.
Colop indica que en el escrito literalmente aparece la frase “Xt’iq chirij” al referirse a la
muerte de Tecún Umán, lo que significa que “fue matado por la espalda” por lo tanto se
desvirtúa aquella historia de que él se enfrentó a Alvarado y que primero mató al caballo
pensando que con matarlo el invasor también moriría, éste si es un mito inventado por
quienes escribieron una falsa historia, indicó.
Tecún fue un hombre que dio su vida para que la invasión no llegara a tener consecuencias
más lamentables como está pasando actualmente con tanta invasión de mucha índole que ha
destruido a la sociedad pero nuestros ancestros defendieron la vida, la cultura y la
espiritualidad de nuestros pueblos porque además de él existieron otros grandes personajes
como Asumanche, Kaibil Balam, entre otros que debemos conocerlos.
Tecun Uman se estaba preparando para ser un personaje importante, se cree que nació en el
reino Kiche y formado en el linaje de Qumarkahaj, pero por su influencia y su importancia
recorrió muchos lugares como lo hace en la actualidad cualquier personaje importante, se
sabe que el frecuentaba mucho un cerro denominado pui’ K’ieq ubicado en Cantel de
Quetzaltenango a donde llegaba a ofrendar.
Finalmente Colop indica que Tecún no era un nombre ni apellido sino un título, además el
nombre correcto no es Tecun sino Tucum y Tucum Umam significa el nieto del gran
Tucum pues “mam” significa abuelo en muchos de los idiomas mayas de Guatemala.

Tecún Umán o Tekun Umam en lengua k´iche´ moderna (1500?-1524) fue un gran
guerrero y último mandatario de los maya-k´iche´ en Guatemala. Según los anales de los
Kaq'chik'el, fue vencido por el conquistador español Pedro de Alvarado mientras combatía
contra los españoles en los prados de El Pinal (Valle de Olintepeque, Quetzaltenango) el 20
de febrero de 1524.

La leyenda
La historia sobre la batalla del príncipe quiché contra la invasión española sufrió de una
mitificación, la leyenda sobre el héroe quiché cuenta que éste luego de resistir ferozmente a
las tropas del conquistador español Alvarado en Xelajú (actual Quetzaltenango) se encontró
cara a cara en batalla con el mismísimo Pedro de Alvarado. Tecún Umán clavó su lanza en
el pecho del caballo de Alvarado. El jinete, después de levantarse mató con su espada de
acero al cacique clavándosela en el corazón. La leyenda cuenta que un Quetzal se posó en
su sangre y de allí viene el rojo en el pecho del ave. El "mito" creció durante 400 años de
colonización y fue acogido como símbolo de libertad durante la conspiración para la
independencia.

Publicado 28th July 2012 por Unknown

2
Ver comentarios
2.
JUL

28

Tecun Human
Tecún Umán (1499? - 1524)
Después de que los conquistadores sojuzgaron fácilmente
algunos lugares del istmo de Tehuantepec y de haber dominado
los señoríos de Soconusco, primera tierra que se incoporaría al
reino de Guatemala, pasaron luego a tierras de la actual
República de Guatemala habitada en su mayoría por los
señoríos de origen tolteca: los quichés, cakchiqueles,
tzutuhiles, etc. Como países organizados que eran y dueños de
una avanzada cultura, opusieron una feroz resistencia al
invasor.

Gobernaban el Quiché Oxib Quej y Belejep-Tzy, estos señores


buscaron entablar una alianza con los otros señoríos, pero los
odios provocados por las guerras continuadas entre ellos
impidieron una alianza defensiva contra los hispanos. Esta
rebeldía ante el conquistador era una manifestación evidente de
la noción clara que tenían los señoríos de su derecho de
propiedad sobre la tierra que habitaban y la cual defendían con
todos sus medios guerreros.

Siete grandes combates cruelmente sangrientos fueron


necesarios para dominar al señorío de los quichés, quienes
lanzaron sus huestes a los conquistadores, siendo capitaneadas
muchas de ellas por el valiente príncipe y señor Tecún Umán.

El primer combate sangriento en tierras de Guatemala fue a


orillas del río Tilapa,
limítrofe entonces entre Suchitepéquez (Xuchiltepéquez) y Soconusco. De allí pasó a
combatirse en Zapotitlán, en el mismo departamento de Suchitepéquez. Aunque las batallas
eran sangrientas, los indios no se acorbardaban ni ante la caballería, que causaba los máximos
estragos ni ante la artillería, que a la mayoría de otros pueblos había aterrorizado.
La tercera gran batalla fue en la cuesta que sube a Quetzaltenango (hoy llamada de Santa
María Jesús), en la cual, a pesar de la desventaja del terreno, lograron imponerse las fuerzas de
Alvarado.

Los indios no desisten en su empeño de dominar a los españoles y aunque derrotados en la


cuesta, preparan un nuevo ataque para cuando bajen los castellanos hacia las barrancas de
Olintepeque, donde una poderosa escuadra bélica de seis mil indios del señorío quiché de
Utatlán preparaba la cuarta batalla.

El príncipe Azumanché fue uno de los héroes y el capitán de las fuerzas quichés en ese
combate tan sangriento en el que se tiñeron enrojecidas por la sangre las aguas del río
Olintepeque, al cual llamaron Xequijel y que quiere decir "rio de sangre".

La populosa Xelajú, que gobernaban diez príncipes, cada uno administraba sobre 8,000 indios,
al saber el desastre de Xequijel, quedó deshabitada.

La dirección de la guerra pasó a Tecún Umán, príncipe del Quiché y se aprestaron a la última
contienda en las llanuras de Quetzaltenango. Durante más de dos horas la suerte pareció
indecisa. Entonces Pedro de Alvarado decidió que la caballería, al mando de don Pedro de
Portocarrero y Juan de Chávez, atacara un ala del escuadrón de Tecún Umán que trataba de
dividir en dos la infantería de Alvarado para cercar una parte y personalmente don Pedro atacó
a la parte que iniciaba el movimiento envolvente.

Allí se hallaron frente a frente el gran guerrero quiché, Tecún Uman y el capitán invicto, Pedro
de Alvarado. Cuenta la leyenda que sobre el príncipe Tecún volaba, por arte de magia un
Quetzal que lo protegía. Tecún Umán atacó tres veces al capitán don Pedro y logró en una,
darle muerte a su caballo, fue socorrido don Pedro con otro caballo y logró atravesar con su
lanza el pecho de Tecún Umán, y el Quetzal cayó sobre su pecho ensangrentado, y desde
entonces el Ave Nacional conserva el color rojo en su pecho.

Al saberse la muerte de Tecún, los de Utatlán se enardecieron en la lucha; pero ante la


inutilidad de sus esfuerzos, procuraron, en buen orden, retirarse a los montes. Cuando los
españoles victoriosos regresaron a Quetzaltenango, sólo encontraron una ciudad desierta, sin
víveres, ni utensilios.

Publicado 28th July 2012 por Unknown

0
Añadir un comentario
3.
JUL

28

La Conquista
La Conquista
Pedro de Alvarado era un capitán español que se distinguió en la conquista de
México por su valor y su capacidad de mando, por lo que Hernán Cortés decidió
enviarlo a conquistar estas tierras y tratar de someterlas.
Según Bernal Díaz del Castillo, Alvarado salió de Tenochtitlán, México el 13
de noviembre de 1523, al frente de 300 soldados y numerosos indios auxiliares
tlaxcaltecas. La llegada de la expedición conquistadora a Guatemala no fue una
sorpresa; diversos hechos la habían anunciado ya a los naturales. Primero
llegaron las noticias sobre la presencia de extraños en las costas.
Guatemala estaba habitada por muchos grupos indígenas. Los reyes Quichés
habían tratado de unir a todos los grupos por la fuerza de las armas, pero no lo
habían logrado. Los indios se enfrentaron a los españoles divididos entre ellos.
El primer combate fue a orillas del Río Tilapa. Esta batalla fue sangrienta, el
invasor era poderoso, sus hombres montaban a caballo y tenían armas de fuego,
pero los indígenas eran valientes, flechadores certeros y expertos en la lucha
cuerpo a cuerpo. A Alvarado le fue duro vencerlos.
Luego de su primera victoria, los conquistadores se dirigieron a Zapotitlán, la
capital de Xuchiltepec, en donde se libraron nuevas y reñidas batallas. La ciudad
cayó finalmente en poder de los invasores. Después continuaron su avance hacia
Xelajú, en Quetzaltenango, pero en el camino se encontraron con tropas
indígenas comandadas por el principe Azumanché, pariente de Tecún Umán, se
produjo una batalla en las faldas del volcán Santa María en la que murieron
muchísimos guerreros, al grado que las aguas del Río Olintepeque se tiñieron de
sangre; desde entonces los nativos le llamaron Xequijel, que quiere decir "río de
sangre". En esta batalla perdió la vida el príncipe Azumanché.
El mando del ejército quiché pasó a manos de Tecún Umán, que se enfrentó a
los invasores en las llanuras de Quetzaltenango, en los llamados Llanos del Pinal.
Fue tan duro el combate que los hombres pelearon cuerpo a cuerpo. En esta
sangrienta batalla muere heroicamente Tecún Umán y los quichés son vencidos.
Luego de la muerte de Tecún Umán, los reyes Quichés Oxib Quej y Belejeb
Tzii pretendieron engañar a los españoles, instándoles a trasladarse a Gumarcaaj,
capital de los Quichés, conocida también como Utatlán. Desde el principio, los
castellanos sospecharon que el propósito de los reyes Quichés era atraerlos a la
ciudad para quemarlos en ella. Alvarado mostró desconfianza, por lo que decidió
alojarse en unos llanos de las afueras y no en la capital. A pesar de la insistencia
de los reyes el conquistador se negó a entrar, y éste a su vez los invitó a visitarlo
en su campamento. Alvarado tomó prisioneros a los reyes quichés, los acusó de
traición e hizo que los quemaran vivos. También mandó a incendiar la ciudad de
Gumarcaaj, según el Memorial de Sololá esto ocurrió el 7 de marzo de 1524.
Los reyes cakchiqueles Belejep-Qat y Cahi-Imox al saber de la derrota de los
Quichés, recibieron a Alvarado en la ciudad de Iximché con toda clase de
atenciones y le pidieron que los ayudara a combatir a sus enemigos los
Tzutujiles. Estos vivían en las márgenes del lago de Atitlán, su capital era
Chitinamit y su rey Tepepul. Alvarado aceptó gustosamente, envió mensajes a
los tzutujiles ordenándoles que se rindieran pero éstos se negaron dándoles
muerte a los emisarios. Entonces Alvarado decidió someterlos por la fuerza, se
puso al frente de su ejército y atacó la ciudad; los tzutujiles se resistieron, pero
terminaron al dominio español.
Desde la ciudad de Iximché los conquistadores emprendieron un ataque contra
Izquintepeque (actualmente Escuintla), en la que resultaron victoriosos.
Continuaron hacia el oriente a lo largo de la Costa Sur de Guatemala, entrando en
lo que hoy es conocido como Guazacapán, en varios pueblos no hubo
enfrentamiento, ya que los españoles eran recibidos en paz, pero luego los indios
dejaban los pueblos y huían hacia las montañas. Pero al llegar a Pasaco los
españoles fueron recibidos por un ejército desafiante al cual derrotaron con
facilidad. Siguieron la expedición hasta cruzar el Río Paz, penetrando en lo que
actualmente es El Salvador. En Acajutla, El Salvador, sostuvieron una batalla en
la cual Alvarado resultó herido de una pierna quedando cojo para toda su vida.
De Acajutla se dirigieron a Tucuxcalco, y de allí a Miguaclán (que encontraron
despoblado), luego a Atehúan (Ateos), y finalmente llegaron a Cuscatlán, en
donde fueron bien recibidos al principio, pero debido a los abusos de los
españoles, los indígenas terminaron por huir hacia las montañas, de donde
Alvarado ya no los pudo hacer bajar.

Publicado 28th July 2012 por Unknown

0
Añadir un comentario
4.
JUL

21

batalla de tecún umán

Batalla de Tucumán.
Al subdividirse administrativamente el Virreinato del Río de la Plata, conforme a la Real
Ordenanza de Intendentes del 28 de enero de 1782, la actual provincia de Tucumán quedó
ubicada dentro de la Gobernación Intendencia de San Miguel de Tucumán. La Real
Cédula del 5 de agosto de 1783, suprimió la Gobernación Intendencia del Tucumán, con lo
cual Tucumán junto con Catamarca, Santiago del Estero, Jujuy, Salta y la Puna de
Atacama, pasó a integrar la nueva Gobernación Intendencia de Salta del Tucumán, con
sede gubernativa en la ciudad de Salta. Mientras el resto del territorio formó la de
Gobernación Intendencia de Córdoba del Tucumán que incluía a Córdoba, San Luis,
Mendoza, San Juan, La Rioja y pequeños sectores occidentales de la actual provincia de
Santa Fe.
El 26 de junio de 1810 el Cabildo tucumano adhirió a la Revolución de Mayo nombrando
al presbítero Manuel Felipe de Molina diputado ante la Primera Junta.
La población tucumana prestó apoyo a Manuel Belgrano en 1812. En esa ocasión los
pobladores del lugar convencieron a Manuel Belgrano para detener el éxodo hacia el sur de
los habitantes de la región y presentar en ese lugar batalla contra el ejército realista
comandado por Pío Tristán. Tras vencer el 24 de septiembre de 1812 en una batalla
desventajosa realizada en el Campo de Las Carreras se adjudicó el triunfo a la Virgen de
la Merced, otorgándole Manuel Belgrano después de la batalla el bastón de mando y el
título de Generala que actualmente conserva en la Iglesia de N.S. de la Merced.
Por decreto del 8 de octubre de 1814, el Director Supremo, Gervasio Antonio de
Posadas, dividió la Intendencia de Salta del Tucumán y creó la Gobernación Intendencia
del Tucumán, con asiento en San Miguel de Tucumán y cuya jurisdicción integraron,
además, Catamarca y Santiago del Estero.
El 9 de julio de 1816 se declaró la Independencia Nacional durante el Congreso de
Tucumán.

Interior de la Casa Histórica de Tucumán donde se declaró la Independencia en 1816


Tras la disolución del Directorio y del Congreso, el Gobernador Intendente de Tucumán,
Coronel Bernabé Aráoz, erigió, el 22 de marzo de 1820, la "República Federal del
Tucumán", integrada por los territorios que formaban la gobernación intendencia (Santiago
del Estero, Catamarca y Tucumán). Sancionando una Constitución el 6 de septiembre
de 1820.
A fines de 1821 Catamarca y Santiago del Estero obtuvieron su autonomía quedando
Tucumán reducida a sus límites actuales.
El 19 de marzo de 1856 se sanciona la Constitución de la Provincia, dentro de la nueva
organización Argentina.
En febrero de 1975 durante el Proceso de Reorganización Nacional se lanzó
el Operativo Independencia, para reprimir a la guerrilla marxista del Ejército
Revolucionario del Pueblo (ERP), que actuaba en las sierras selváticas de Monteros, en
Tucumán.
El límite con la Provincia de Salta fue fijado mediante la Ley Nacional N° 22264 dictada
por el gobierno militar y publicada en el Boletín Oficial el 12 de agosto de 1980.
Por el Decreto-Ley N° 22.312 del 31 de octubre de 1980, se aprobó el Convenio
Interprovincial entre Santiago del Estero y Tucumán, que fijó los límites entre ambas
provincias y que había sido firmado previamente en Termas de Río Hondo. Poniendo fin a
un conflicto secular.4
El límite con la Provincia de Catamarca fue fijado mediante la Ley Nacional N° 22449
dictada por el gobierno militar y publicada en el Boletín Oficial el 9 de abril de 1981.

Publicado 21st July 2012 por Unknown

0
Añadir un comentario
5.
JUL

21

historia de tecún umán

Historia de tecún umán


En el territorio de la hoy provincia de Tucún mán se dio el asiento de
antiguas civilizaciones autóctonas entre las que se destacan las de la Cultura
Candelaria, Cultura Tafí (que ha dejado como más llamativos relictos sus menhires) y la
modernamente llamada Cultura Condorhuasi (el nombre quechua le ha sido dado recién en
el pasado siglo), bastante posterior a estas culturas es la cultura Santa María que se
desarrolló principalmente en los Valles Calchaquíesoriginando a las pequeñas ciudades
fortificadas de Quilmes y Tolombón, la cultura Santa María fue una fase que se
correspondió con el apogeo de la etnia pazioca (diaguita), etnia que habitó la región
montañosa del oeste y entre la que se destacaron diversas parcialidades como las de
los calchaquíes, quilmes, tolombones, amaichas, pueblos sedentarios asentados en toda el
área montañosa del oeste tucumano, eran hábiles tejedores y alfareros. Cultivaban elmaíz,
el zapallo, diversas variedades de la papa, porotos y la quinoa en un sistema de andenes y
terrazas dotados de irrigación, recolectaban las bayas del algarrobo criollo.
Criaban llamas, alpacas y vicuñas, que les brindaban carne, leche y lana. Su organización
política era la de jefaturas y, en algunos casos de acumulación del poder, señoríos.
Practicaban una rudimentaria minería y estaban bien organizados al mando de un cacique.
Esencialmente pacíficos, eran buenos y tenaces guerreros cuando la situación lo requería.
Hacia 1480 el área "diaguita", es decir la extremo occidental correspondiente a la actual
provincia de Tucumán fue ocupada por el Tahuantinsuyu que estableció en las laderas de la
Sierra del aconquija su límite oriental (La Sierra del Aconquija y Las Cumbres
Calchaquíes fueron las que los incas consideraron la cordillera del Anti), estableciendo en
los elevados faldeos de esta
algunas pequeñas fortificaciones (pukara) como la de La Ciudacita en el sector del
hoy Parque Nacional Campo de los Alisos, los inca apenas fueron soportados por las
poblaciones locales y sus incursiones por el Valle de Tafí o por la Quebrada del
Portugués fueron rechazadas por los despectivamente llamados en quechua "surí", es decir:
los luley los vilela pueblos que habitaban la mayor parte del actual territorio provincial (el
centro y este del mismo), los lule como los vilela y los toconoté aunque eran sedentarios y
horticultores basaban gran parte de su estructura económica en la caza y recolección esto
debido a la feracidad y gran cantidad de recursos alimenticios silvestres del territorio que
habitaban.
Juríes o Xuríes fue la trascripción que los españoles hicieron de la palabra quechua o runa
sini surí, que en ese idioma es el nombre que se le da al ñandú, mote despectivo que los
quechuas durante su invasión dieron a los pueblos lule y toconoté, los lules habitaban la
mayor parte de la actual provincia de Tucumán, ubicándose los toconoté en el oeste de la
provincia de Santiago del Estero.
En 1533 llegó el conquistador del Perú Diego de Almagro para explorar las actuales
regiones de la quebrada de Humahuaca y los Valles Calchaquíes. En 1543 otro
español: Diego de Rojas recorrió el territorio. La región dependía administrativamente de
Chile pero estaba casi en el límite con el territorio dependiente de Charcas, lo que motivó
disputas jurisdiccionales que originaron los traslados poblacionales.
Desde la creación del Virreinato del Perú por Real Cédula del 1 de marzo de 1543, la
región del Tucumán quedó integrada en él.
El primer asentamiento español en el actual territorio tucumano fue El Barco, fundada
en 1550 por Juan Núñez de Prado, proveniente del Perú. La población fue luego trasladada
dos veces (El Barco II y El Barco III), hasta establecerse definitivamente a orillas del Río
del Estero en 1553, con el nombre de Santiago del Estero fuera de los límites de la
jurisdicción chilena. El núcleo humano que conformaron los primeros vecinos de Santiago
del Esterofue el primero con el que la corona de Castilla logró un asiento definitivo en lo
que actualmente constituye territorio de la República Argentina.
La provincia fue creada en 1564, con el nombre de Provincia de Tucumán, Juríes y
Diaguitas, su primer gobernador fue Francisco de Aguirre desde Santiago del Estero. Con
la creación de la Gobernación del Tucumán en 1566 y del Obispado en 1570, esta región
empezó a cobrar importancia.
Por orden de Aguirre, Diego de Villarroel fundó San Miguel de Tucumán el 31 de mayo
de 1565 en un sitio llamadoIbatín por los nativos de etnia lule.
En pleno momento fundacional de la ciudad de San Miguel del Tucumán arreciaba
la Guerra Calchaquí, una de las más denodadas resistencias habidas a la ocupación
española, al punto que en octubre de 1578 los "diaguitas"calchaquíes estuvieron casi a
punto de destruir la ciudad de origen español, en efecto los principales protagonistas de tal
resistencia fueron los "diaguitas" quienes tras prácticamente un siglo de enconada lucha
fueron develados pueblo por pueblo y ciudad por ciudad, siendo en muchas ocasiones
desarraigados y casi todas sus pequeñas ciudades arrasadas.
La ciudad fue trasladada a su actual emplazamiento el 27 de septiembre de 1685 por el
teniente gobernador Miguel de Salas y Valdez cumpliendo órdenes del
gobernador Fernando de Mendoza y Mate de Luna.
Hasta prácticamente 1814, la palabra Tucumán o el Tucumán era dada por los españoles a
un extenso territorio de 700.000 km² que abarcaba de norte a sur los territorios y actuales
provincias de Tarija, Jujuy, Salta, Catamarca, la actual provincia de Tucumán, Santiago del
Estero, La Rioja, San Juan, Córdoba, San Luis y Mendoza.
En 1776 el Tucumán pasó a formar parte del recién creado Virreinato del Río de la Plata.
Publicado 21st July 2012 por Unknown

1
Ver comentarios
6.
JUL

21

historia de tecún umán


Historia de tecún umán
Con tal respaldo documental, Tecún Umán fue declarado Héroe Nacional y
símbolo de defensa de la nacionalidad guatemalteca por el Congreso de la
República, mediante el Decreto No. 1334, el 22 de marzo de 1960 y se
estableció el 20 de febrero como el día de Tecún Umán, héroe nacional.

La figura de Tecún Umán ha sido exaltada de muchas formas, pero se destaca


la monumental escultura del artista guatemalteco Roberto González Goyri, la
cual se encuentra al noroccidente del zoológico La Aurora.

Akkeren concluye entonces que Tecún Uman indiscutiblemente existió y que


su posición en la estructura de poder quiché queda bien clara.

Tecún Uman es un símbolo cuyo recuerdo y conmemoración debe servir para


fomentar patriotismo.

Patriotismo es: respeto, amor por la patria, sentirnos orgullosos de nuestra


tierra, de nuestras costumbres y tradiciones.

Muchos guatemaltecos no experimentan este sentimiento. Se avergüenzan de


su tierra y de su nacionalidad. Buenos motivos tienen, pero deben asumir su
condición y trabajar para el cambio.

Respeto por la patria es acatar: la constitución, las leyes y autoridades de la


república. Amor por la patria es mostrar y transmitir valores, es generar
actitudes positivas que den ejemplo y motiven al cambio de conducta de
aquellos desmotivados que recurren al abuso, el menosprecio de su identidad y
a la ilegalidad, para compensar sus múltiples insatisfacciones, provocadas por
un sistema imposible de enderezar sin un cambio de actitudes.

El guatemalteco debe conocer sus orígenes, su Historia, sus tradiciones, sus


glorias y sus infortunios. Debe saturarse hasta el fin de su vida, del estudio de
todo cuanto concierne a su Patria, porque tiene la obligación de conocerla.
Debe conocerla para poder llegar a amarla y debe llegar a amarla porque sólo
así podrá honrarla; y honrando a su Patria honrará a su padre, a su madre, a
sus antepasados, al suelo que pisa, a su tradición, a su religión. El patriotismo
nos ayuda a entender que el más puro de los amores, después de Dios, es el de
la Patria.
TECUN HUMAN HEROE NACIONAL:

Por tanto, como militares, nuestro compromiso de ejemplo y patriotismo es


superior. El militar debe mantener una actitud positiva, llenando de ánimo a la
población a pesar de la situación actual. ¿Cómo? Trabajando y cumpliendo
cada quien con lo que le corresponde. Conducta ejemplar para que cesen
publicaciones cuyo contenido es un desafortunado, y que produce molestia e
incomodidad.

Este proceso dará inicio cuando cambiemos de actitud nosotros mismos, al


cumplir con el deber, al convertirse en guardián y seguidor del respeto y de las
más altas tradiciones de honor militar.

Sólo la actitud positiva y proactiva, basada en el espíritu de cuerpo de sentirse


militar profesional, inmuniza contra el germen destructor de la desmotivación,
que proviene en parte de la crítica intolerante, destructora, incomprensiva e
irreconciliable de algunos sectores de la sociedad hacia el ejército de hoy.

Pero también proviene de la desesperanza profesional, que da a luz la


polémica, excusas sin fundamento y murmuración. Nuestra historia es grande,
llena de aciertos y glorias, pero también de errores; hemos aprendido, no
volveremos a cometerlos.

Es imposible atravesar la vida sin que alguien se equivoque, lo que importa es


como se reacciona ante el error; el hombre crece cuando no hay debilitamiento
de voluntad; cuando reconoce sus errores y construye lo que tiene por delante.

El hombre crece trazándose metas, sin importarle comentarios negativos


porque da el ejemplo; sin importarle burlas ni desdenes por cumplir con sus
obligaciones.

Soldados aquí presentes, entréguense de corazón a su profesión, denle a su


institución más de lo que reciben; plántense para no retroceder, sean fuertes
por el carácter de su formación, así cosecharán donde no sembraron; y
recogerán donde no esparcieron.

Cultiven las virtudes militares, las que llevamos dentro, las que nos inculcaron
nuestros primeros instructores; que el sistema corrompido no amargue el
amanecer que vimos al recibir nuestro titulo de oficial del ejército; amen las
letras y las ciencias, teman a Dios y honren a su familia
Publicado 21st July 2012 por Unknown

0
Añadir un comentario
7.
JUL

21
historia de tucún umán
TECUN UMAN:
Afortunadamente existe El Título K’oyoi que fue descubierto y publicado por
el antropólogo Robert Carmack, pionero y experto en los estudios sobre los
quichés. El manuscrito está en la Colección Robert Garrett de Manuscritos
Mesoamericanos en la Biblioteca de la Universidad de Princeton. El
manuscrito dedica en total 8, de las 56 páginas al evento de la llegada de los
españoles y a Tecún. Basándose en este texto, Carmack ya planteó la
historicidad del personaje de Tecún Umán en 1979.

El texto declara que los quichés ya estaban enterados del avance de los
españoles. Estaban preparándose, construyendo obstáculos en forma de
grandes lajas de piedras, fortificaciones y zanjas con estacas. Luego describe a
los invasores y se muestran impresionados por sus armas, su armadura y los
caballos.

Narra además cómo los españoles y sus tropas auxiliares simplemente


derribaron las fortificaciones. Los señores quichés estaban asustados y
mandaron mensajeros a Q’umarkaj (Utatlán) para pedir refuerzos. Enseguida
salió por Tzijbachaj (hoy Totonicapán) el gran capitán adelantado Tecún nieto
del rey don Kikab.

Aquí se menciona por primera vez a Tecún Umán. Vemos que se llama Tecún,
y que Umán se refiere a su parentesco con el famoso señor quiché Kikab.

El manuscrito narra que por siete días fue cargado en hombros como
preparándose para el combate. Tenía plumas de quetzal en la espalda adornado
con piedras y joyas.

Está claro entonces que Gumarcaj ya estaba tomando sus medidas, y


coordinando la marcha de su sumo capitán Tecún hacia el área del conflicto.
Las procesiones, bailes y festividades previas a la guerra parecen pertenecer a
antiguas tradiciones mayas. Tenemos un buen ejemplo de ellas en los murales
de Bonampak.

Efectivamente, el manuscrito narra como el capitán Tecún Uman mata al


caballo de Don Pedro de Alvarado pero este, inmediatamente se incorpora y
da muerte al guerrero quiché.
Aunque no es muy detallado, el Título K’oyoi es un texto escrito entre 1550 y
1560, que ya contiene todos los elementos que hoy en día forman parte de la
historia oficial del héroe nacional.

Al comparar la carta de Alvarado con el título Koyoi es donde surgen


interrogantes. Según Alvarado la muerte de uno de los cuatro señores quichés
y la sangrienta batalla definitiva estaban separadas cinco días una de la otra. El
manuscrito indica que junto con Tecún, en la segunda batalla, murieron
muchos guerreros y que la sangre tiñó el río Olintepeque y por eso lo llamaron
Xequijel.

También podría gustarte