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Orientaciones para el desarrollo

de los encuentros de núcleo de


desarrollo

Dirección de Niñez y Adolescencia 1


“Programa Generaciones 2.0”
1. Tabla de Contenido

INTRODUCCIÓN. ............................................................................................................................... 3
2. NÚCLEO: DEPORTE Y RECREACIÓN.................................................................................... 3
EL DEPORTE ........................................................................................................................................ 3
LA RECREACIÓN ................................................................................................................................... 5
¿CÓMO DESARROLLAR ENCUENTROS NÚCLEO DE DESARROLLO DE DEPORTE Y RECREACIÓN?. ................ 5
3. NÚCLEO: CIENCIA Y TECNOLOGÍA ...................................................................................... 7
LA CIENCIA Y LA TECNOLOGÍA .............................................................................................................. 7
¿CÓMO DESARROLLAR ENCUENTROS NÚCLEO DE DESARROLLO DE CIENCIA Y TECNOLOGÍA? ................... 8
4. NÚCLEO: ARTE Y CULTURA ................................................................................................. 10
EL ARTE Y LA CULTURA ......................................................................................................................... 10
¿CÓMO DESARROLLAR ENCUENTROS NÚCLEO DE DESARROLLO DE ARTE Y CULTURA? ........................... 11
5. NÚCLEO: JUEGO Y LITERATURA........................................................................................ 13
LA LITERATURA .................................................................................................................................. 13
EL JUEGO .......................................................................................................................................... 14
¿CÓMO DESARROLLAR ENCUENTROS NÚCLEO DE DESARROLLO DE LITERATURA Y JUEGO? .................... 15

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“Programa Generaciones 2.0”
Introducción.

Todos tenemos derecho a un conjunto de conocimientos culturales básicos, que nos ayuden a
afianzar nuestra identidad, así como nuestra pertenencia a una determinada comunidad,
grupo étnico, grupo social o simplemente a la humanidad. Por esta razón, el programa
generaciones 2.0 crea los núcleos de desarrollo.

Los núcleos de desarrollo son espacios de exploración temática y desarrollo de intereses,


vocaciones y talentos, pensados para disfrutar de un tiempo de calidad y de aprendizaje. A
través de su participación en estos espacios, las niñas, niños y adolescentes tendrán la
oportunidad de explorar actividades relacionadas con:

(i) El deporte y la recreación;


(ii) La ciencia y la tecnología;
(iii) El arte y la cultura; y
(iv) La literatura y el juego

De esta manera se podrán generar reflexiones acerca de sus intereses y vocaciones; y se


desarrollan y fortalecen habilidades físicas, competencias socioemocionales y talentos.

Los núcleos de desarrollo son también la agrupación de un conjunto de contenidos alrededor


de un tema central, escogido en función de los intereses y necesidades de los niños, niñas y
adolescentes participantes. Desde el programa, los núcleos para el desarrollo tienen como
propósito facilitar el fortalecimiento de las capacidades de niños, niñas y adolescentes, así
como de sus habilidades sociales y emocionales, mediante el reconocimiento de intereses
particulares y diferencias por grupos de edad y la promoción del disfrute del tiempo libre y
de aprendizaje.

2. Núcleo: Deporte y recreación

El DEPORTE y la RECREACIÓN son esenciales para el desarrollo de los niños, niñas y


adolescentes porque contribuyen a su bienestar físico, cognitivo, social y emocional y porque
ofrecen a los padres, cuidadores y educadores una oportunidad para conectarse con ellos.

El deporte

Durante la última década, la investigación en el campo del desarrollo juvenil basado en el


deporte (Sports-Based Youth Development – SBYD, por sus siglas en inglés) ha venido

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promoviendo la idea de que los programas juveniles pueden utilizar el deporte como un
catalizador para fomentar el desarrollo físico y socioemocional (Wright & Burton, 2008; Holt
et al., 2011) de los niños, niñas y adolescentes.
La literatura SBYD sostiene que las habilidades que se desarrollan en el marco de
actividades deportivas estructuradas 1 de acuerdo con la edad y necesidades de los
participantes son valiosas porque son transferibles y aplicables a otros ámbitos de la vida
(Gould y Carson, 2008).

Sobre los beneficios físicos de la literatura es extensa y especializada. Sin embargo, entre los
beneficios más citados por pediatras y otros profesionales de la salud se encuentran: (i) ayuda
a mejorar la función cardiorrespiratoria; (ii) fortalece el sistema inmunológico; (iii) ayuda a
reducir la obesidad y controlar el peso; (iv) reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares
y metabólicas posteriores, tales como la hipertensión arterial, derrames, diabetes, colesterol
elevado, osteoporosis, etc.; (v) ayuda a mejorar los niveles de movilidad, contribuyendo al
mantenimiento de la flexibilidad de las articulaciones y al fortalecimiento de músculos y
tendones; (vi) promueve el desarrollo de habilidades motoras; (vii) ayuda a controlar los
niveles de ansiedad y estrés; entre otros. (Health Canada, 2003; Cote´ & Hay, 2002).

Adicionalmente, los estudios parecen demostrar que los jóvenes involucrados en actividades
deportivas regulares desarrollan hábitos de autocuidado que perduran incluso en la adultez
y que ayudan a reducir la incidencia de prácticas nocivas como el consumo de cigarrillo,
drogas, alcohol, así como malos hábitos alimenticios (Robertson-Wilson et al., 2003; Fraser-
Thomas et al., 2005).

Con respecto a los beneficios psicológicos y socioemocionales, el deporte y la actividad física


ofrece a niños, niñas y jóvenes la oportunidad de experimentar retos, disfrutar del tiempo
libre y divertirse, ayudándolos a mejorar su percepción de si mismos, fortalecer su autoestima
y reducir o controlar sus niveles de ansiedad y estrés (Fraser-Thomas et al., 2005; Health
Canada, 2003). En un estudio, Gilman (2001) encontró que la participación en actividades
extracurriculares estructuradas como el deporte, estaba correlacionado con mayores niveles
subjetivos de felicidad y satisfacción personal, lo que se ha demostrado que promueve un
desarrollo psicológico y emocional positivo en niños, niñas y jóvenes (Park, 2004).

Adicionalmente, la participación en actividades deportivas estructuradas, dirigidas y en las


que se fomenta la interacción con pares, parece estar correlacionado negativamente con el
ausentismo, la deserción escolar y el comportamiento delincuencial en los jóvenes (Fraser-
Thomas et al., 2005), porque como sugiere Cote (2002) y Carpenter (2001), el deporte y la
actividad física promueve el desarrollo de habilidades sociales tales como compromiso,
responsabilidad, disciplina, esfuerzo dirigido a metas u objetivos, auto-control, manejo de la
frustración, la ansiedad y el estrés, empatía y trabajo en equipo que son transferibles a otros
ámbitos de la vida como la educación y el trabajo.

Finalmente, la literatura más reciente sugiere que actividades extracurriculares


estructuradas como el deporte ayuda a reducir el aburrimiento y promueve el desarrollo de
habilidades como el liderazgo y iniciativa, porque al ser voluntarias promueven la
automotivación o motivación intrínseca y demandan atención y un esfuerzo sostenido en

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enfocado en el tiempo. Tanto el liderazgo como la iniciativa son habilidades consideradas
esenciales dado el estilo de vida dominante y las exigencias actuales en el mundo académico
y laboral (Fraser-Thomas et al., 2005; Gilman, 2001; Larson, 2000).

La recreación

Estudios recientes asocian la participación en actividades recreativas estructuradas 2 ,


socialmente contextualizadas y acordes con la edad, con el desarrollo de competencias
socioemocionales en niños, niñas y jóvenes, y con la disminución de comportamientos
antisociales, agresivos y relacionados con la delincuencia (Kisiel et al., 2006; Mahoney, 2000;
Mahoney and Stattin, 2000), así como con una menor incidencia en el consumo de alcohol y
sustancias psicoactivas y deserción escolar (Bohnert et al., 2009). Los mismos estudios
sugieren, que los efectos positivos son mayores cuando las actividades recreativas
estructuradas involucran la participación de los padres o cuidadores principales y son
adecuadas para la edad y el entorno social de los participantes (CPRN and CCSD, 2001).

Las actividades recreativas ofrecen a los niños, niñas y jóvenes espacios para la socialización,
el aprovechamiento del tiempo libre, la extensión y enriquecimiento de espacios de
aprendizaje y la inclusión y la promoción de la diversidad y, en consecuencia, ayuda a
madurar sus habilidades sociales, emocionales y cognitivas. La participación en espacios
recreativos estructurados promueve la socialización positiva, la inclusión, el aprendizaje
sobre las diferencias individuales, la empatía, el desarrollo de habilidades comunicativas, de
resolución de conflictos, la persistencia, el autocontrol y ayuda a fortalecer la autoconfianza,
la autoestima y (Hoffer et al. 2011; Witt y Caldwell, 2010).

Finalmente, la participación voluntaria en este tipo de actividades promueve el compromiso,


la autodeterminación, la exploración gustos e intereses y el involucramiento cívico y ayuda a
reducir el tiempo de exposición/consumo de televisión, redes sociales y videojuegos (Greenhow
y Robelia, 2009; Roberts et al., 2005)

Dependiendo del contenido de las actividades recreativas que se diseñen e implementen,


otras habilidades de tipo cognitivo y motor pueden ser fortalecidas, por ejemplo, en
actividades relacionadas con el arte y el teatro, la imaginación, la expresión corporal, la
exploración de roles, etc.

¿Cómo desarrollar encuentros núcleo de desarrollo de deporte y recreación?.

2 Entiéndase por actividades estructuradas aquellas que se desarrollan periódicamente de acuerdo aun
cronograma establecido, la participación sucede con base en reglas conocidas por los participantes, hacen énfasis
en el desarrollo de habilidades específicas y son lideradas por uno o varios adultos que conocen del tema. Los
mismos estudios sugieren que la participación en actividades poco estructuradas, en donde los jóvenes se
involucran en actividades recreativas o de uso del tiempo libre sin reglas claras y la guía de un adulto pueden
tener el efecto contrario, dada la mayor exposición no mediada a pares con comportamientos agresivos,
antisociales o criminales.

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“Programa Generaciones 2.0”
El programa “Generaciones 2.0” ofrece una propuesta metodológica para el desarrollo de
encuentros para cada uno de los grupos de edad. Sin embargo, los operadores encargados de
la implementación del programa podrán desarrollar su propia metodología. En ese sentido,
por su experiencia, bien podrán adaptar una metodología que ya hayan implementado, o
desarrollar una nueva, de acuerdo con los parámetros sugeridos por el ““Programa
Generaciones 2.0””

Si los operadores han decidido implementar actividades diferentes a las propuestas por el
programa, se recomienda tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

1. Comience por responder las siguientes 5 preguntas:

- ¿Cuál es el objetivo de la actividad?


- ¿Qué capacidad(es) y/o habilidad(es) específicas se trabajarán con los niños, niñas y
adolescentes?
- ¿Existe una relación clara y directa entre el objetivo de la actividad específica y los
objetivos y momento del ““Programa Generaciones 2.0””?
- ¿Es posible adaptar la actividad a los grupos de edad definidos por el ““Programa
Generaciones 2.0””?
- ¿Es la actividad pertinente para la población objetivo y para el entorno social, cultural,
familiar, político y económico de los niños, niñas y adolescentes con los que se va a
trabajar?

2. Tenga en cuenta los parámetros básicos para el desarrollo de actividades:

- Duración entre 2 y 2,5 horas


- Deben tener un objetivo claro en relación con la práctica deportiva y una relación
también clara en términos de las habilidades que se van a trabajar.
- Pueden ser deportes individuales (Tennis, Boxeo, Atletismo, Gimnasia, Ciclismo, etc)
o colectivo en grupos, (Béisbol, Softbol, Ultimate) etc.
- Debe tener entre tres y cuatro momentos: Una actividad inicial, a manera juego,
rompehielo y calentamiento, y una actividad final, de estiramiento y reflexión sobre
lo trabajado en cada sesión. Los dos momentos intermedios deben estar relacionados
con las actividades del núcleo de desarrollo.

3. Ponga por escrito el diseño de la actividad, incluyendo, el objetivo general y específico,


la duración (entre 2 y 2.5 horas), la población objetivo (grupo etario), los recursos
humanos y materiales necesarios para su implementación, lo momentos que
componen la actividad y los pasos que el orientador deberá seguir para una
implementación efectiva, incluyendo los mensajes que se deberán trasmitir en los
momentos de inicio y cierre.

4. Para el diseño específico de actividades deportivas y recreativas, se recomienda que:

- Identifiquen los intereses y preferencias del grupo.

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- Privilegien actividades basadas en la cooperación, que promuevan actitudes positivas
hacia el trabajo en equipo, el respeto, el juego limpio y la importancia de esforzarse y
perseverar a pesar de las dificultades.
- Tengan en cuenta la necesidad de incluir momentos para la preparación
(calentamiento), la recuperación e hidratación adecuada de los participantes.
- Privilegien actividades que sean retadoras y promuevan el entusiasmo, la creatividad,
imaginación y solución de problemas.
- Privilegien actividades pertinentes, relacionadas con el entorno de los participantes y
su comunidad.
- Privilegien actividades pertinentes, en relación con cada grupo de edad.
- Establezcan reglas claras y no se abstenga de ofrecer una demostración si es necesario
para la implementación efectiva de la actividad y la seguridad de los participantes.

5. Toda actividad debe garantizar la seguridad física y emocional de niños, niñas y


adolescentes. Tenga esto en cuenta a la hora de seleccionar los materiales didácticos,
así como los espacios para el desarrollo de la actividad.

6. Toda actividad deberá garantizar la participación en igualdad de condiciones de niños,


niñas y adolescentes, independientemente de diferencias asociadas a preferencias
sexuales, genero, pertenencia étnica o variables socioeconómicas o políticas. De ser
posible, las actividades deben incluir a niños, niñas o adolescentes con discapacidades
que les permitan hacer actividad física.

3. Núcleo: Ciencia y Tecnología

LA CIENCIA Y LA TECNOLOGÍA hacen parte del acervo de conocimientos esenciales para


el desarrollo de los niños, niñas y adolescentes contemporáneos, no sólo porque pueden
contribuir a su bienestar cognitivo, social y emocional e inclusión productiva como ciudadanos
del mundo moderno, sino también, porque se han erigido como uno de los pilares
fundamentales para el desarrollo cultural, social y económico de las sociedades
contemporáneas y como una dimensión ineludible de la vida actual.

La ciencia y la tecnología

Exponer a los niños, niñas y adolescentes a actividades relacionadas con ciencia y tecnología
tiene como propósito principal hacer de ellos personas competentes para participar de
sociedades basadas en el conocimiento. Los niños, niñas y adolescentes de hoy requieren
desarrollar y consolidar la habilidad de entender información compleja que proviene de
múltiples fuentes, analizarla críticamente, evaluar los contenidos, juzgar su veracidad,
asumir posiciones basadas en evidencia, argumentar, comparar y ser capaces de tomar
decisiones justificadas. La ciencia y la tecnología, atraviesan todas las dimensiones de la vida
moderna y su importancia seguirá creciendo a medida que los niños, niñas y adolescentes de
hoy se desarrollan y crecen.

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“Programa Generaciones 2.0”
Entre los beneficios de la exposición a actividades relacionadas con la ciencia y la tecnología
se destacan:

Mayor familiaridad con el lenguaje y los conceptos básicos de la ciencia y la tecnología. En la


medida en que los niños, niñas y adolescentes se empiezan a sentir cómodos en espacios
relacionados con estas áreas del conocimiento, aumenta su interés por aprender, se reducen
los niveles de ansiedad y aversión hacia estas materias y mejora su desempeño. Algunos
estudios han demostrado que cuando los niños, niñas y adolescentes participan de actividades
extracurriculares relacionadas con la ciencia y la tecnología se reduce la inasistencia escolar,
la deserción y mejora su desempeño en matemáticas, ciencias y lenguaje.

Por otro lado, la exposición a la ciencia y la tecnología estimula la curiosidad y el deseo de


aprender. Con base en una serie de experimentos, Bowman, Donovan y Burns (2001) han
demostrado que los niños que han sido expuestos a experiencias de aprendizaje apropiadas
para su edad, en dominios específicos como las matemáticas o la ciencia, muestran mayor
disposición para aprender y dominar habilidades más complejas, porque la exposición a estas
actividades estimula su curiosidad, el deseo de aprender, explorar y comprender el mundo
que los rodea.

De la mano de lo anterior, el acercamiento a la ciencia y la tecnología y a sus métodos ofrece


a los niños, niñas y adolescentes oportunidades para desarrollar habilidades específicas que
son transferibles a otros ámbitos de la vida. En particular, se destaca el fortalecimiento del
pensamiento crítico y metódico, la habilidad para hacerse preguntar, buscar y recopilar
información, analizarla, interpretarla, describirla y someterla a pruebas para corroborar su
veracidad, extraer conclusiones, argumentar, explicar y predecir (OME, 2007).

Por otro lado, en la medida en que los niños, niñas y adolescentes son expuestos a actividades
apropiadas y bien dirigidas, ganan confianza en sus talentos y habilidades para resolver
problemas y para entender la realidad que los rodea. Las actividades de ciencia y tecnología
ofrecen oportunidades para que los niños, niñas y adolescentes aprendan a ver los problemas
como retos y oportunidades de aprendizaje y a fortalecer su autoconfianza y autoestima. Así
mismo, ofrecen oportunidades para que los niños, niñas y adolescentes aprendan a enfrentar
el fracaso y a tolerar y manejar los errores. Con el tiempo, esto puede ayudarlos a ser más
flexibles, menos rígidos y más capaces de enfrentar física y emocionalmente las dificultades
y tropiezos de la vida cotidiana.

Adicionalmente, la ciencia y la investigación científica son esfuerzos colectivos y colaborativos


en el que trabajar con otros, escuchar, discutir, argumentar y aunar esfuerzos es de vital
importancia. Por lo tanto, las actividades de ciencia y tecnología son oportunidades para
fortalecer el trabajo colaborativo y las habilidades comunicativas (escuchar, expresar
opiniones y argumentos, hacer cuestionamientos y presentar resultados) de los niños, niñas
y adolescentes.

¿Cómo desarrollar encuentros núcleo de desarrollo de ciencia y tecnología?

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“Programa Generaciones 2.0”
1. Comience por responder las siguientes 5 preguntas:

- ¿Cuál es el objetivo de la actividad?


- ¿Qué capacidad(es) y/o habilidad(es) específicas se trabajarán con los niños, niñas y
adolescentes?
- ¿Existe una relación clara y directa entre el objetivo de la actividad específica y los
objetivos y momento del “Programa Generaciones 2.0”?
- ¿Es posible adaptar la actividad a los grupos de edad definidos por el programa
Generaciones 2.0?
- ¿Es la actividad pertinente para la población objetivo y para el entorno social, cultural,
familiar, político y económico de los niños, niñas y adolescentes con los que se va a
trabajar?

2. Tenga en cuenta los parámetros básicos para el desarrollo de actividades:

- Duración entre 2 y 2,5 horas


- Deben tener un objetivo claro en relación con la práctica científica y una relación
también clara en términos de las habilidades que se van a trabajar.
- Actividades que generen interés en los niños y niñas, que sean divertidas apropiadas
para su edad y que les permitan aprender sobre ciencia y tecnología
- Debe tener entre tres y cuatro momentos: Una actividad inicial, a manera de
rompehielo y una actividad final de reflexión sobre lo trabajado en cada sesión. Los
dos momentos intermedios deben estar relacionados con las actividades del núcleo de
desarrollo.

3. Ponga por escrito el diseño de la actividad, incluyendo, el objetivo general y específico,


la duración (entre 2 y 2.5 horas), la población objetivo (grupo etario), los recursos
humanos y materiales necesarios para su implementación, lo momentos que
componen la actividad y los pasos que el orientador deberá seguir para una
implementación efectiva, incluyendo los mensajes que se deberán trasmitir en los
momentos de inicio y cierre.

4. Para el diseño específico de actividades en ciencia y tecnología, por favor tenga en


cuenta:

- Identifique y tenga en cuenta los intereses y preferencias del grupo.


- Promueva actividades basadas en el método científico, que incluyan momentos para
la observación, el establecimiento de hipótesis, la experimentación y la formulación de
conclusiones.
- Establezca objetivos claros, relacionados de manera inequívoca con la problemática a
tratar y que tengan un concepto científico detrás.
- Seleccione actividades sencillas que los niños, niñas y adolescentes puedan desarrollar
por si mismos de manera segura.
- Proponga actividades relacionadas con aportes científicos en distintas áreas del
conocimiento y que den cuenta del aporte de hombres, mujeres y en general individuos
con orígenes diversos.

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- Proponga actividades que hagan uso de materiales seguros, de fácil acceso,
preferiblemente relacionados con la cotidianidad de los participantes y de sus
comunidades.
- Promueva un balance entre actividades individuales y cooperativas.

5. Toda actividad debe garantizar la seguridad física y emocional de niños, niñas y


adolescentes. Tenga esto en cuenta a la hora de seleccionar los materiales didácticos,
así como los espacios para el desarrollo de la actividad.

6. Toda actividad deberá garantizar la participación en igualdad de condiciones de niños,


niñas y adolescentes, independientemente de diferencias asociadas a preferencias
sexuales, genero, pertenencia étnica o variables socioeconómicas o políticas.

4. Núcleo: Arte y cultura

El ARTE y la CULTURA son esenciales para el desarrollo de los niños, niñas y adolescentes
porque contribuyen a su bienestar físico, cognitivo, social y emocional y porque ofrecen a los
padres, cuidadores y educadores una oportunidad para conectarse con ellos.

El arte y la cultura

Cada vez son más los pedagogos, investigadores y maestros que abogan por una relación más
estrecha entre el arte y la educación. Desde los años 60, numerosos estudios han demostrado
que la educación en artes tiene beneficios importantes para el desarrollo de los niños, niñas
ya adolescentes, no sólo a nivel de la formación de una consciencia estética, sino también, a
nivel socioemocional, académico y cognitivo.

A nivel estético, los programas de educación en arte o de exposición estructurada a las formas
artísticas para niños, niñas y adolescentes promueven el desarrollo de su consciencia estética,
es decir, ayudan a formar y fortalecer la sensibilidad de los niños, niñas y adolescentes
respecto a las distintas experiencias perceptuales, intelectuales y emocionales que pueden
encontrar en el espacio artístico y en la vida (Lowenfeld et al., 1980; Appell, 1979). El
desarrollo de la consciencia estética está ligado al desarrollo de la capacidad de percibir y
observar la realidad y de tomar posición y emitir juicios con relación a ello. Adicionalmente,
la exposición al arte, la educación artística, mejora la disposición o el interés de los niños,
niñas y adolescentes hacia el arte, abre la puerta para que tengan acceso a bienes culturales
intangibles, así como a otras formas de ver y percibir el mundo y estimula la creatividad y la
imaginación, dos habilidades importantes no sólo en el mundo artístico, sino también en la
vida cotidiana para la concepción de realidades alternativas y la resolución de problemas y
conflictos.

Con relación al desarrollo socioemocional, las actividades artísticas fortalecen la capacidad


de los niños, niñas y adolescentes para reconocer sus propias emociones y la manera en la

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que estas afectan su estado de ánimo; fortalece su autoestima y la confianza en lo que pueden
lograr, especialmente en aquellos niños, niñas y adolescentes que tienen procesos de
aprendizaje marcadamente distintos; promueve el empoderamiento, al ofrecer vías
alternativas para darse a conocer y expresarse y ayuda a entender y valorar la diferencia, así
como la aceptación de la presencia del otro. A este respecto, algunos estudios han demostrado,
que la exposición a las expresiones artísticas de otras culturas reduce las actitudes basadas
en estereotipos y promueve un interés positivo sobre la diferencia y mayor consciencia sobre
el valor de la diversidad cultural y de ideas (Iwai, 2002; AAAE, 2001).

Dependiendo del tipo de actividad artística que se trabaje, la educación artística puede
ayudar a fortalecer habilidades como el trabajo en equipo, la comunicación asertiva y el
desarrollo de habilidades motoras y de expresión verbal y no verbal.

Por otro lado, con relación al colegio, la disponibilidad de espacios de formación artística
parece estar correlacionado con una mejor actitud hacia la escuela y hacia el aprendizaje
(Bamford y Wimmer, 2012) por que los niños, niñas y adolescentes encuentran en estas
actividades una fuente de placer y diversión. Los niños expuestos a actividades de formación
artística estructurada parecen estar mas entusiasmados, motivados y dispuestos a hacer un
esfuerzo adicional para aprender (Catterall, 1998). De acuerdo con algunos estudios, la
educación artística esta correlacionado con mayores niveles de lectura, mayor asistencia
escolar y menores niveles de deserción, particularmente en estudiantes en riesgo.

Algunos estudios como el de la AAAE han concluido que cuando la actividad artística se
utiliza como mediador pedagógico para el aprendizaje en otras áreas del conocimiento, los
niños, niñas y adolescentes muestran mayor interés y comprenden y retienen más sobre lo
que se les enseña (Iwai, 2002; AAAE, 2001). Otros estudios han demostrado que la exposición
a actividades artísticas relacionadas con la música, la poesía y el drama están relacionadas
con un mejor desempeño en el área de lenguaje (vocabulario y comprensión) y mayor interés
en la lectura (Rosen y Koziol, 1990). Así mismo, el involucramiento en actividades de reflexión
artística parece estar correlacionado con el desarrollo de habilidades de lectura crítica y
escritura.

Finalmente, el acceso a las expresiones culturales es un derecho de los niños, las niñas y los
adolescentes. Su participación de la cultura requiere del acceso y del goce de las expresiones
artísticas y culturales a través de las cuales la cultura se expresa y transmite. La exposición
al arte y la cultura ayuda a afianzar la identidad y permite el desarrollo de expresiones
propias que ayudan a configurar la participación cívica y social de los niños, niñas y
adolescentes (UNICEF, 2006; Unesco, 2001).

¿Cómo desarrollar encuentros núcleo de desarrollo de arte y cultura?

1. Comience por responder las siguientes 5 preguntas:

- ¿Cuál es el objetivo de la actividad?

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“Programa Generaciones 2.0”
- ¿Qué capacidad(es) y/o habilidad(es) específicas se trabajarán con los niños, niñas y
adolescentes?
- ¿Existe una relación clara y directa entre el objetivo de la actividad específica y los
objetivos y momento del “Programa Generaciones 2.0”?
- ¿Es posible adaptar la actividad a los grupos de edad definidos por el programa
Generaciones 2.0?
- ¿Es la actividad pertinente para la población objetivo y para el entorno social, cultural,
familiar, político y económico de los niños, niñas y adolescentes con los que se va a
trabajar?

2. Tenga en cuenta los parámetros básicos para el desarrollo de actividades:

- Duración entre 2 y 2,5 horas


- Deben tener un objetivo claro en relación con la práctica deportiva y una relación
también clara en términos de las habilidades que se van a trabajar.
- Actividades que generen interés en los niños y niñas, que sean divertidas apropiadas
para su edad y que les permitan aprender sobre ciencia y tecnología
- Debe tener entre tres y cuatro momentos: Una actividad inicial, a manera de
rompehielo y una actividad final de reflexión sobre lo trabajado en cada sesión. Los
dos momentos intermedios deben estar relacionados con las actividades del núcleo de
desarrollo.

3. Ponga por escrito el diseño de la actividad, incluyendo, el objetivo general y específico,


la duración (entre 2 y 2.5 horas), la población objetivo (grupo etario), los recursos
humanos y materiales necesarios para su implementación, lo momentos que
componen la actividad y los pasos que el orientador deberá seguir para una
implementación efectiva, incluyendo los mensajes que se deberán trasmitir en los
momentos de inicio y cierre.

4. Para el diseño específico de actividades en arte y cultura, por favor tenga en cuenta:

- Identifique y tenga en cuenta los intereses y preferencias del grupo.


- Privilegie actividades divertidas que apelen a la curiosidad e interés natural de los
niños, niñas y adolecentes por entender el mundo y su entorno.
- Seleccione materiales seguros, variados y pertinentes para cada grupo de edad.
- Escoja actividades que promuevan la libre expresión, la creatividad, propongan retos
interesantes y estén relacionadas con la solución de problemas físicos y sociales
concretos.
- Encuentre un balance entre actividades individuales y cooperativas, actividades
basadas en la música, la danza, las artes dramáticas, las manualidades, la pintura y
escultura y los juegos de roles.
- Promueva la reflexión sobre el proceso creativo y sobre su significado para el
individuo, su comunidad y su entorno.
- Si va a realizar visitas, tenga en cuenta los costos de desplazamiento y de acceso.

5. Toda actividad debe garantizar la seguridad física y emocional de niños, niñas y


adolescentes. Tenga esto en cuenta a la hora de seleccionar los materiales didácticos,
así como los espacios para el desarrollo de la actividad.

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“Programa Generaciones 2.0”
6. Toda actividad deberá garantizar la participación en igualdad de condiciones de niños,
niñas y adolescentes, independientemente de diferencias asociadas a preferencias
sexuales, genero, pertenencia étnica o variables socioeconómicas o políticas.

5. Núcleo: Juego y literatura

La LITERATURA y el JUEGO son esenciales para el desarrollo de los niños, niñas y


adolescentes porque contribuyen a su bienestar cognitivo, físico, social y emocional y porque
ofrecen a los padres, cuidadores y educadores una oportunidad para conectarse con ellos.

La literatura

El acercamiento y la exploración de literatura de calidad puede ayudar al desarrollo


académico, cognitivo, social y emocional de los niños, niñas y adolescentes. La literatura
puede ser un mediador educacional, una herramienta didáctica importante no sólo para la
enseñanza y el aprendizaje de la lengua, sino también, para el desarrollo de habilidades para
la vida.

A nivel académico, aprender a leer es un hito crucial en el proceso educativo y de aprendizaje


de una persona. Leer es una forma de acceder al conocimiento (Abdelhalim, 2015). La
comprensión lectora es una habilidad estratégica no sólo para el aprendizaje de la lengua,
sino de manera transversal en otras áreas del conocimiento, desde la historia y las ciencias
sociales, hasta las ciencias y las matemáticas y para la vida.

La evidencia sugiere que las actitudes de los niños, niñas y adolescentes hacia la lectura se
vuelven más y más negativas a medida que envejecen (Sainsbury y Schagen, 2004) porque la
mayoría de los niños, niñas y adolescentes tienen dificultades de comprensión lectora que no
sólo limitan su desempeño académico (Cullinan,2000; Grimm, 2008; Cromley, 2009), sino
también frustran el desarrollo del hábito lector y en consecuencia, limitan su acceso gradual
y acumulativo al conocimiento. Aproximarse y explorar obras literarias de calidad,
apropiadas para la edad y para el nivel de lectura de cada niños, niñas y adolescentes
permitirá no solo aprender mejor la lengua, su estructura y su gramática, enriquecer el
vocabulario y fortalecer sus habilidades lingüísticas (lectura, escritura, habla y escucha) y
comunicativas, sino también, desarrollar apego a la lectura como instrumento para acceder
a información y como fuente de placer.

Con respecto al fortalecimiento de habilidades cognitivas, el uso de la literatura como


herramienta didáctica no sólo ayuda a aprender la lengua sino también, a aprender a pensar
en esa lengua (De Naples, 2002, Abdelhalim, 2015). A través de la literatura los niños, niñas
y adolescentes pueden fortalecer sus habilidades de razonamiento, toma de decisiones y
pensamiento crítico, mediante ejercicios sencillos de manipulación directa de los textos
(preguntas, análisis, toma de apuntes, resumen y síntesis) (Oxford, 2003) y emulación de los
personajes. Adicionalmente, con base en lo que sucede cuando los personajes de un libro se

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“Programa Generaciones 2.0”
ven forzados a enfrentar situaciones de conflicto o dilemas morales y cognitivos similares a
los que ellos mismos viven, han vivido o pueden llegar a vivir, los niños, niñas y adolescentes
pueden aprender a reconocer y cuestionar sus propios prejuicios, así como las nociones
preconcebidas sobre raza, etnia, genero, sexo, poder, riqueza, etc., que prevalecen en su
comunidad o que pueden sesgar la opinión de los expertos o de otras figuras de autoridad,
transitando de niveles básicos de razonamiento, en los que priman la confianza casi
irrestricta en lo que se percibe de manera directa a través de los sentidos o en las respuestas
de los expertos y de las figuras de autoridad a otros estadios más avanzados, en los que hay
espacio para cuestionar, investigar, evaluar, debatir, disentir y proponer (Friedman y
Cataldo, 2002).

En cuento a habilidades sociales y emocionales, la literatura y la vida se encuentran en el


campo de las relaciones humanas (Abdelhalim, 2015). La literatura como herramienta
didáctica puede ayudar a acercar los espacios de aprendizaje y formación con la realidad que
los niños, niñas y adolescentes viven (Pires, 2011) y es un mecanismo para la transmisión de
valores, patrones culturales y para la construcción de la identidad. La literatura ofrece a los
niños, niñas y adolescentes la oportunidad de aprender sobre ellos mismos (Santora, 2006),
sobre su entorno y a resolver preguntas y hacerse nuevos cuestionamientos.

La literatura permite a los niños, niñas y adolescentes vivir nuevas experiencias, explorar
emociones y aprender sobre el mundo que los rodea y sobre los demás. La lectura de literatura
promueve la imaginación, la curiosidad, la autorreflexión, la autoconfianza y la autoestima.
Hablar y discutir sobre una obra, contar historias e involucrarse en otras actividades
relacionadas que pueden desarrollarse a partir de la lectura individual o en grupo, promueve
el relacionamiento con los demás, enseña a ponerse en los zapatos de los otros y ayuda al
desarrollo de habilidades comunicativas y discursivas que son estratégicas no solo para el
estudio, sino principalmente para la vida en comunidad.

Por último, la literatura puede convertirse en una fuente de placer y de entretenimiento.


Acceder a textos de calidad, pertinentes, relacionados con sus intereses y necesidades, que
promuevan la imaginación, la curiosidad, la exploración, hará que los niños, niñas y
adolescentes desarrollen el habito de leer y conciban el acceso al conocimiento como un
proceso entretenido y enriquecedor (Brewster et al., 2002; Abdelhalim, 2015).

El juego

Jugar es un derecho y una de las formas más importantes a través de las cuales los jóvenes
y los niños adquieren conocimientos y habilidades esenciales (Fundación Lego, 2018). Aunque
no hay consenso sobre la definición de juego, uno de los aspectos más importante es la agencia
y el control y apropiación de los niños sobre esta experiencia. Los niños generalmente
expresan alegría durante el juego y se sumergen en el durante un periodo sostenido de tiempo
(Ackermann et al., 2012; Lillard et al., 2013; Paes y Eberhart, 2019). Aunque el juego puede
utilizarse como mediador para fines pedagógicos específicos, en general, el juego se trata de
si mismo y no tiene un resultado específico esperado (Fisher et al., 2013; Paes y Eberhart,
2019).

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“Programa Generaciones 2.0”
Sin embargo, el juego desempeña un papel fundamental en el desarrollo de competencias
para la vida. A través del juego los niños, niñas y adolescentes crean y experimentan mundos
alternativos y a través de este ejercicio desarrollan su creatividad e imaginación. Como el
juego depende del niño y sus reglas se transforman y modifican a través del desarrollo del
juego y como resultado de la voluntad del niño y de su autodeterminación, su pensamiento
creativo se ejercita todo el tiempo (Paes y Eberhart, 2019). Jugar con frecuencia brinda a los
niños oportunidades para desarrollar sus habilidades de pensamiento creativo, como, por
ejemplo, a asumir distintos papeles y ver situaciones desde múltiples perspectivas, pensar y
colaborar en el desarrollo de estrategias alternativas para resolver un problema y explorar
distintos razonamientos, todo esto sin consecuencias punitivas (Ackermann et al., 2012, Paes
y Eberhart, 2019).

Así mismo, a través del juego, los niños desarrollan habilidades sociales y emocionales
esenciales para la vida en comunidad. Jugando los niños aprenden a colaborar, a compartir,
resolver conflictos, a tolerar la frustración y manejar otras emociones, a comunicarse con sus
pares y a negociar con ellos (Hirsh-Pasek et al., 2009 Fundación Lego, 2018). Adicionalmente,
a través de este proceso de interacción, el juego permite desarrollar habilidades relacionadas
con el pensamiento crítico, ya que el marco del juego y de su interacción con otros, el niño va
aprendiendo a procesar información y a reflexionar sobre sus acciones, las de los demás y sus
consecuencias.

También es importante resaltar el papel del juego para el desarrollo de habilidades motrices
y físicas relacionadas con hitos importantes del desarrollo de los niños y de las niñas A través
del juego con objetos los niños aprenden a manipular el mundo, a transformarlo y en este
proceso desarrollan sus habilidades motoras. Así mismo, jugando aprenden a relacionar
objetos y conceptos abstractos como en el caso de las figuras y de las formas (Fundación Lego,
2018).

Aunque la evidencia aun no es concluyente, hay estudios que demuestran una relación
positiva entre el aprendizaje en distintas áreas del conocimiento y el uso del juego como
mediador en este proceso. Entre los puntos que se destacan se encuentran: mayor atención,
interés e involucramiento del niño niña en las actividades de aprendizaje basadas en el juego,
aprendizajes más duraderos y la creación de un vínculo positivo con el aprendizaje: aprender
puede ser divertido.

¿Cómo desarrollar encuentros núcleo de desarrollo de literatura y juego?

1. Comience por responder las siguientes 5 preguntas:

- ¿Cuál es el objetivo de la actividad?


- ¿Qué capacidad(es) y/o habilidad(es) específicas se trabajarán con los niños, niñas y
adolescentes?
- ¿Existe una relación clara y directa entre el objetivo de la actividad específica y los
objetivos y momento del “Programa Generaciones 2.0”?
- ¿Es posible adaptar la actividad a los grupos de edad definidos por el programa
Generaciones 2.0?

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- ¿Es la actividad pertinente para la población objetivo y para el entorno social, cultural,
familiar, político y económico de los niños, niñas y adolescentes con los que se va a
trabajar?

2. Tenga en cuenta los parámetros básicos para el desarrollo de actividades:

- Duración entre 2 y 2,5 horas


- Deben tener un objetivo claro en relación con la práctica deportiva y una relación
también clara en términos de las habilidades que se van a trabajar.
- Actividades que generen interés en los niños y niñas, que sean divertidas apropiadas
para su edad y que les permitan aprender sobre ciencia y tecnología
- Debe tener entre tres y cuatro momentos: Una actividad inicial, a manera de
rompehielo y una actividad final de reflexión sobre lo trabajado en cada sesión. Los
dos momentos intermedios deben estar relacionados con las actividades del núcleo de
desarrollo.

3. Ponga por escrito el diseño de la actividad, incluyendo, el objetivo general y específico,


la duración (entre 2 y 2.5 horas), la población objetivo (grupo etario), los recursos
humanos y materiales necesarios para su implementación, lo momentos que
componen la actividad y los pasos que el orientador deberá seguir para una
implementación efectiva, incluyendo los mensajes que se deberán trasmitir en los
momentos de inicio y cierre.

4. Para el diseño específico de actividades en literatura y juego, por favor tenga en


cuenta:

- Identifique y tenga en cuenta los intereses y preferencias del grupo.


- El principal criterio de selección es la calidad o relación armónica entre diseño, textos
y materiales.
- El material debe ser pertinente para la edad de los participantes, su nivel de
competencias en lectura y escritura y su entorno.
- Los temas a tratar deberán guardar relación con el objetivo de la actividad y del
programa, el entorno y la cotidianidad de los participantes y apelar a su curiosidad,
interés y emociones.
- Seleccione textos, cortos, claros y que propongan un tratamiento sencillo del tópico a
tratar.
- En caso de duda, acuda a herramientas para la selección de textos como las ofrecidas
por el Plan Nacional de Lectura y Escritura del Ministerio de Educación Nacional,
MAGUARED del Ministerio de cultura o Fundalectura.
- Promueva un balance entre actividades individuales y cooperativas.

5. Toda actividad debe garantizar la seguridad física y emocional de niños, niñas y


adolescentes. Tenga esto en cuenta a la hora de seleccionar los materiales didácticos,
así como los espacios para el desarrollo de la actividad.

6. Toda actividad deberá garantizar la participación en igualdad de condiciones de niños,


niñas y adolescentes, independientemente de diferencias asociadas a preferencias
sexuales, genero, pertenencia étnica o variables socioeconómicas o políticas.

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“Programa Generaciones 2.0”
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