ENFERMERÍA EN LA ÉPOCA COLONIAL

La época colonial abarca los siglos XVI, XII y XVIII. El concepto de enfermería ya
se estaba expandiendo por los países de Europa, mientras que en México esto
no sucedió hasta el final de nuestra independencia. Los cuidados de enfermería
estuvieron a cargo de órdenes religiosas. Recordemos que España no entró a la
reforma protestante y continuósiendo un país católico. Hasta que Benito Juárez
decretó que se eliminaran todas las órdenes religiosas, a excepción de las hijas
de la caridad y ellas quedaron a cargo del cuidado de los enfermos. Hasta que
en el año de 1874 las expulsó definitivamente de México dando origen a
nuestro "Periodo obscuro de la enfermería" la Reforma Protestante tuvo graves
consecuencias para los cuidados de salud,debido a la supresión de las
instituciones de caridad. La filosofía protestante indica que no son necesarias
las obras de caridad para obtener la salvación.
Enfermería.
A las enfermeras se les conocía a las mujeres que se encargaban del cuidado
de los enfermos, estas mujeres no tenían preparación alguna mucho menos
conocimientos técnicos, todos los aprendizajes eran empíricos, estos se
lograba gracias al gran apoyo que le brindaban a los médicos, los que fungían
como enfermeros y enfermeras eran religiosas y frailes con gran caridad, que
les gustaba ayudar y cuidar a los enfermos.
Un grupo de tres enfermeras religiosas eran regidas por un enfermero jefe o
enfermero mayor, los hospitales eran manejados por religiosos, que sin
preparación alguna se dedicaban a curar enfermos. También servían como
enfermeras aquellas mujeres que tenían conocimiento de las propiedades
curativas de yerbas.
La atención de enfermos por religiosas en los hospitales y orfelinatos se
comenzó con los trabajos de enfermería empírica que llevaban a cabo las
religiosas del convento de Las Hermanas de la Inmaculada Concepción, dichos
hospitales fundados por Fray Pedro de Gante y Motolita.
Los indios y las mujeres que estaban al cuidado de los enfermos, servían por
turnos semanales, y el reglamento exigía a las mujeres que vistieran con
sencillez y modestia, durante el tiempo que un enfermo se encontraba en los
hospitales no se les cobraba ninguna cuota, al salir los enfermos dejaban una
ofrenda al hospital, según sus medios, ofrendas que consistían en cereales,
animales, lienzos y vestidos.En un hospital se llegaban a albergar a 400
pacientes.
Para cubrir los gastos del hospital enfermeros y enfermeras, en horas de
descanso, hacían trabajos a mano que se vendían para aumentar el patrimonio
del hospital. Mientras servían en el hospital, se ajustaban a un programa diario
de oraciones, régimen que pretendía elevar a una alta espiritualidad con el
ejercicio conjunto de la oración y la caridad al prójimo. Un doble fin se
perseguía: sanar a los enfermos y adoctrinar al sano. La jornada de labores era
de seis horas y el producto del trabajo se distribuía entre todos, según las
necesidades del hospital.

En la Época Colonial la enfermería no se consideraba una

profesión médica, por lo que las enfermeras eran vistas como
sirvientas del hospital o del doctor al que estaban asociadas.
Las enfermeras no recibían un entrenamiento formal y sus
obligaciones se limitaban a asistir a los doctores en tareas
diversas.

Los deberes de una enfermera colonial

Las responsabilidades de las enfermeras coloniales no pueden compararse con las de las
enfermeras actuales debido a que en el pasado ellas no recibían ningún tipo de entrenamiento
formal. Durante la Guerra Revolucionaria las enfermeras se encargaban de preparar los
alimentos de los enfermos o heridos, limpiar y hacer las camas, vendar heridas y aplicar
medicina. Las enfermeras asociadas a la milicia eran consideradas seguidoras de los
regimientos y muchas de ellas eran las esposas de los soldados.

Medicinas

Uno de los deberes de las enfermeras era llevar a cabo la preparación de medicinas a base de
hierbas, y algunas incuso llegaron a venderlas de manera profesional. El cataplasma (una
mezcla de hierbas húmedas que se presiona contra una parte inflamada o dolorida del cuerpo)
se considera uno de los más importantes instrumentos de enfermería utilizados durante la
Época Colonial. Las medicinas también podían administrarse en forma de bolos: una gran dosis
de medicina parecida a una píldora.

Entablillados, torniquetes y suturas

En la Época Colonial se utilizaron entablillados, torniquetes y suturas. Los entablillados servían

para inmovilizar huesos rotos, los torniquetes detenían el sangrado al rodear la herida con
fuerza y las suturas eran puntadas de hilo utilizadas para cerrar y unir los bordes de una herida.
También se llevaron a cabo inoculaciones de viruela (un método parecido a una vacuna) al
realizar un corte en la yaga virulenta de un enfermo en recuperación, introducir un hilo en la
cortada y luego sacar el hilo para hacerlo pasar a través de la persona que iba a ser inoculada.

Vendajes e incenso

Los vendajes estaban entre los primeros utensilios de las enfermeras coloniales, ya que vendar
y atender heridas eran dos de sus trabajos más importantes. Además de esto las enfermeras
estaban a cargo de quemar incienso hecho con hierbas, con el objetivo de fumigar el hospital y
purificar el aire.
En la Época Colonial la enfermería no se consideraba una profesión médica, por lo que las
enfermeras eran vistas como sirvientas del hospital o del doctor al que estaban asociadas. Las
enfermeras no recibían un entrenamiento formal y sus obligaciones se limitaban a asistir a los
doctores en tareas diversas.