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001

Sengoku Nadeko era la compañera de clase de mi hermana. Tengo dos hermanas pequeñas, y
Sengoku Nadeko era amiga de la menor. A diferencia del patético estado actual de mis
relaciones personales, en la escuela primaria yo era un niño bastante normal en cuanto a la
cantidad de amigos que tenía, pero incluso en ese entonces supongo que podrías decir que
aunque disfruté jugando con todos, nunca disfruté jugar con alguien en específico. Así que
podría haberme divertido con mis compañeros de clase durante el recreo, pero rara vez hice
algo con ellos después de la escuela. Qué chico tan desagradable. Es desagradable hablar de
ello, y pensar en ello. De hecho, preferiría no hacerlo. Aun así, no puedes enseñarle trucos
nuevos a un perro viejo, o quizás era al revés, como sea, estoy tratando de decir que siempre
he sido así. Es por eso que siempre me iba a casa justo después de la escuela, o incluso los
días que no tenía clase, algunas veces encontraba a Sengoku Nadeko jugando en mi casa.
Mis dos hermanas son unidas, una al lado de la otra, sin importar cuándo, dónde, qué o por
qué, hasta el punto de que estoy más asustado que preocupado, pero en la escuela primaria
tendían a actuar por su cuenta. La mayor era del tipo de actividades al aire libre, mientras
que la más joven prefería permanecer en casa, y una vez cada tres días traía a una amiga de
la escuela a nuestra casa. Sengoku Nadeko no era particularmente buena amiga de mi
hermana menor, pero me parecía que era una de sus muchas amigas. Califico esa afirmación
con un tanto incierto “creo que fue así” porque para ser honesto no recuerdo ese momento de
mi vida, pero cuando lo intento, de las amigas que mi hermana menor solía llevar a casa, por
lo menos recuerdo a Sengoku Nadeko. Eso es porque, al volver a casa sin haber jugado con
mis amigos, tuve que jugar con mi hermana menor (en ese entonces mis dos hermanas y yo
compartimos una habitación. Mis padres me asignaron mi propia habitación una vez que
comencé la escuela media), principalmente para animar las cosas llenando un lugar libre en
un juego de mesa o similar, pero me llamaban con una frecuencia ridícula si Sengoku
Nadeko era con quien jugaba mi hermana menor. En otras palabras, mi hermana menor tenía
muchos amigos (esto todavía se puede decir de mis dos hermanas, pero ambas son
increíblemente talentosas cuando se trata de estar en el centro de atención. Como su hermano
mayor no podría estar más celoso), pero de todos los compañeros que trajo a casa, Sengoku
Nadeko era la chica rara que le gustaba hacer cosas sola. Para ser sincero, todas las amigas
de mi hermanita me parecían iguales, pero, al menos, por supuesto que recordaría el nombre
de la chica que siempre estaba sola.
Sé que ese es su nombre.

Sí, después de todo, no recuerdo mucho.

Y, entonces, tendré que disculparme por agregar otra calificación incierta, pero Sengoku
Nadeko era una chica reservada de pocas palabras que constantemente miraba hacia el piso,
eso pensé. Eso es lo que pensé, pero, bueno, no lo sé. Tal vez esté describiendo a otra de las
amigas de mi hermana menor, o tal vez a una de sus amigas actuales. Cuando estaba en la
escuela primaria, en realidad, siempre me resultaba molesto e irritante cuando mi hermana
pequeña traía amigas. A esto se añade el hecho de que me vi obligado a jugar con ellas y, por
supuesto, me quedaría con una mala impresión. Cuando miro hacia atrás, debe haber sido
más molesto para esas chicas tener que jugar con el hermano mayor de su amiga, pero en
cualquier caso, eso fue en el pasado, así que por favor trata de entender la sensibilidad de un
estudiante de escuela primaria. Una vez que comencé la escuela media, mi hermana menor
invitaba a sus amigas con menos frecuencia, e incluso cuando lo hacía, dejó de invitarme a
jugar con ellas. Estaba el hecho de que para ese entonces nuestras habitaciones ya estaban
separadas, pero debió existir alguna otra razón más importante. Así son las cosas. La
mayoría de sus relaciones personales debieron ser borradas cuando se graduó porque mis dos
hermanas pequeñas terminaron asistiendo a una escuela media privada. Sengoku Nadeko era
compañera de clase de mi hermana en la escuela primaria, pero no ahora, porque iban a
diferentes escuelas. Entonces, según la estimación más favorable, la última vez que la vi fue
hace más de dos años, pero en realidad probablemente fue hace más de seis.

Seis años.

Tiempo más que suficiente para que una persona cambie.

Al menos, pensaba que había cambiado por completo. Incluso cuando digo que siempre fui
así, el yo de aquel entonces y el yo de ahora simplemente no son los mismos. Echar un
vistazo a mi álbum de fotos de graduación de la escuela primaria o algo parecido es
demasiado doloroso. Sé que acabo de decir algo acerca de la “sensibilidad de un estudiante
de escuela primaria”, pero comparándome conmigo mismo en mi actual condición de
estudiante de secundaria, no me atrevería a argumentar que ahora soy mejor o superior.
Tendemos a mirar el pasado a través de lentes color rosa, sí, pero lo que aquí es bastante
espantoso tal vez no sea yo cuando estaba en la escuela primaria, sino la persona que soy
ahora viendo como era antes. No, de manera vergonzosa, incluso si él y yo nos encontramos
en la calle, no reconoceríamos a la persona que este frente a nosotros como a nosotros
mismos.

No sé si eso es algo malo o no.

No poder jactarme de mi yo actual ante mi yo pasado.

Pero a veces es así.

Tal vez todos somos así.

Por eso, cuando volví a encontrarme con Sengoku Nadeko, al principio no me di cuenta de
que era ella; me llevó algo de tiempo recordarla. Si solo lo hubiera notado de inmediato, o
incluso un poco más rápido, si me hubiera percatado que estaba entrelazada con una
serpiente, tal vez esta historia no hubiera terminado como lo hizo. Un pensamiento
conmovedor, pero no es como si mi pesar significara algo para ella o para la excentricidad,
para empezar esta historia con su conclusión, parece como si Sengoku Nadeko, una amiga de
mi hermana menor a quien apenas recordaba, terminara siendo una persona única que nunca
podría olvidar.
002
“Lo siento, te hice esperar, Araragi-senpai.”

11 de junio, domingo.

No estoy seguro de si “burlona” es la mejor manera de expresarlo, pero a las 10:55 am,
exactamente cinco minutos antes de la hora que acordamos encontrarnos frente a la puerta
principal de nuestra escuela secundaria, Kanbaru Suruga, la ex estrella del equipo de
baloncesto y un año más joven que yo, llegó corriendo, e incapaz de detenerse, saltó,
fácilmente paso por encima de mi cabeza, aterrizó, giró y pronunció esas palabras con una
nueva sonrisa en su rostro y su mano derecha en frente de su pecho... Me di cuenta de que no
era particularmente alto para un estudiante de secundaria, pero nunca había considerado que
mi estatura fuera algo que una chica más baja que yo pudiera superar con un salto de tijera.
Parecía que tenía algunas cosas que reconsiderar.

“No, acabo de llegar. No había estado esperando.”

“Wow... Ser tan transparentemente considerado solo para evitar causarme un indebido estrés
mental atestigua tu buena naturaleza. Reafirmas tu magnanimidad. Mis amigos solo pueden
retroceder tres pasos y admirar todo lo que eres, estoy realmente sorprendida de que me
conmovieras con tu amplitud en tan solo unos pocos segundos de verte. Parece que no tengo
más remedio que usar todo el respeto que puedo mostrar solo en ti. Cielos, creo casi me
molesto por eso.”

“…………”

Ella era la misma de siempre.

Y oye, no andes llamando transparente a la gente.

La mejor respuesta a la amabilidad casual es fingir ignorancia, ¿de acuerdo?

“No, realmente acabo de llegar.” Le aseguré. “Y en cualquier caso, también llegaste


temprano. No hay razón para que te disculpes.”

“No hare nada de eso. No importa lo que digas, el hecho de que no estuviera aquí antes que
mi senpai es causa suficiente para tener que disculparme. Creo que es un pecado
imperdonable hacerle perder el tiempo a alguien más importante que yo.”
“No soy nadie más importante que tú.”

“Eres un año mayor que yo, así que lo eres.”

“Es cierto, pero…”

Eso era solo una cuestión de edad.

O de qué tan altos éramos, supongo (físicamente hablando, estaba por encima de ella).

Sin embargo, no es que ella no pudiera saltar sobre mí fácilmente.

Kanbaru Suruga: segundo año en la escuela Secundaria Naoetsu.

Hasta hace solo un mes fue nuestra mejor jugadora de baloncesto, y su nombre era conocido
en toda la escuela como el de una celebridad y la estrella más grande. Ya sea que quisiera
admitirlo o no, fue ella quien llevó al pequeño y débil equipo de nuestra escuela privada al
torneo nacional el mismo año en que se unió a él. Era una kouhai aterradora, y un cualquiera
de tercer año como yo, normalmente no sería capaz de hablar con ella, o ni siquiera sería
capaz de pisar su sombra. Justo el otro día, ella le dio su posición de capitana del equipo a
una de sus kouhais debido a una lesión en su brazo izquierdo, luego abandonó el equipo de
básquetbol, y la manera en que toda la escuela se vio sacudida por el impacto de la noticia
aún estaba fresca en mi mente. Dudé que el recuerdo se desvaneciera.

El brazo izquierdo de Kanbaru.

Todavía estaba envuelto en un largo y apretado vendaje blanco.

“Sí.” Comenzó a decir Kanbaru en voz baja. “Como sabes, me he retirado. Lo único en lo
que fui buena era el baloncesto, y ahora no tengo nada que ofrecerle a la escuela. Así que
deberías tomar la responsabilidad.”

“¿Qué quieres decir con ‘tomar la responsabilidad’? Por toda la confianza que pareces tener,
tu autoestima puede ser extrañamente baja. Lo que has hecho por el equipo de baloncesto no
desaparecerá solo porque te retiraste temprano.”

La culpa por su retiro anticipado… no, no era exactamente eso, pero, de nuevo, parecía
irrazonable esperar que su situación fuese a permanecer igual después de todo lo que le
sucedió. Personalmente, sin embargo, deseaba que Kanbaru no fuera tan autocrítica.
“Gracias.” Me dijo. “No podría apreciar más tu preocupación. Con gusto tomaré en
consideración esos sentimientos.”

“También toma en consideración mis palabras. Está bien, ¿por qué no nos vamos?”

“Sí.” Dijo antes de correr hacia mi lado y tomar mi mano izquierda abierta en su mano
derecha en lo que solo podría describirse como un movimiento natural. Ella no ‘tomó mi
mano’ tanto como envolvió sus dedos alrededor de los míos. Desde allí, empujó su cuerpo
sobre mi brazo, pegándose a mí como si estuviera a punto de abrazarme. Debido a nuestra
diferencia de altura su pecho estaba justo alrededor de mi codo, y la delicada y densa área de
mi cuerpo termino acosada por una sensación como de puré de papas.

“No.” Corrigió Kanbaru. “Creo que la comparación habitual es una sensación como de
malvaviscos.”

“¡Espera, ¿qué?! ¿¡Expresé ese estúpido monólogo en voz alta!?”

“Ah, no, no lo hiciste, no lo hiciste. No te preocupes, solo lo escuché telepáticamente.”

“¡Eso solo lo convierte en un problema aún mayor! ¡Entonces todos los que están por aquí
debieron oírlo!”

“Jejeje. Bueno, en ese caso tendremos que mostrarles. No es como si fueras alguien que se
preocupe por parecer escandaloso.”

“¡Deja de sonreír y decir lo que solo debería decir mi novia cuando eres mi kouhai! Sabes
que no eres tú con quien estoy saliendo, ¡soy el senpai al que respetas mucho!”

Senjougahara Hitagi.

Mi compañera de clase.

Y mi novia.

Y… La senpai que admira Kanbaru Suruga.

Ella, Senjougahara, era lo que había conectado a la estrella más grande de la escuela con el
estudiante promedio, que nunca ha sido descrito como tal, que soy. Kanbaru y Senjougahara
habían sido senpai y kouhai desde la escuela media, y mientras esto, aquello y lo otro ocurría
entre aquel momento y el ahora, las dos seguían siendo amigas y el Combo Valhalla. Por un
tiempo, Kanbaru Suruga me acosó porque yo era la persona que estaba saliendo con su
admirada senpai.

Le dije: “No es como si alguna vez te hubieras preocupado por los escándalos. Ahora, aléjate
de mí.”

“No. Leí que se supone que debes tomarte de manos cuando estás en una cita.”

“¿¡Una cita!? ¿En qué momento mencione que esto fuera una cita?”

“¿Hrm?” Kanbaru inclinó la cabeza como si eso fuera lo último que esperaba escuchar.
“Ahora que lo mencionas, tal vez nunca lo hiciste. Estaba tan emocionada cuando me pediste
que fuera contigo a algún lugar que realmente no le preste atención a lo que estabas
diciendo.”

“Oh... supongo que todo el tiempo estuviste murmurando tus respuestas...”

“Aun así, no me percate de eso. Estoy en el lado abierto cuando se trata de sexo, y siempre
que sea posible quiero seguir tus deseos, pero ¿deberías ir directo a la acción sin siquiera
tener una cita? Me preocupa tu futuro.”

“¡No haremos ningún tipo de acción, así que deja de preocuparte por mí! ¡Y en tu segundo
año de secundaria no deberías estar hablando de lo abierta que eres con respecto al sexo!”

“Una vez más, ya hemos llegado a ese punto. Este crucero de placer ya ha zarpado.”

“¡Así que después de todo lo estás disfrutando!”

Eché un vistazo a cómo estaba vestida Kanbaru.

Jeans y una camiseta, con una camisa de manga larga en la parte superior. Zapatillas de
deporte de aspecto caro. En su cabeza llevaba una gorra de béisbol, probablemente en parte
porque el sol se estaba haciendo más fuerte. Se adaptaba perfectamente a una chica deportiva
como ella, pero por ahora dejaremos eso de lado.

“Técnicamente estás usando mangas largas y pantalones largos como te dije...”

Sus jeans estaban desgarrados con estilo por aquí y allá, mientras que su camiseta mostraba
un montón de la curvatura de su cintura. Casi parecía mostrar un poco demasiado. Por
supuesto, los domingos las personas podían vestirse como querían, pero aun así...

“... Realmente no estabas escuchando una palabra de lo que dije, ¿verdad?”


“¿Qué quieres decir?”

“Estamos a punto de subir a las montañas.”

“¿Las montañas? ¿Así que tendremos acción en las montañas?

“No habrá nada de eso.”

“Hm, bastante salvaje. Creo que me gusta, es muy varonil de tu parte. De vez en cuando me
gusta que me traten mal.”

“¡Dije que no pasara nada! ¡Escúchame!”

Estaba seguro de que le había dicho que usara mangas largas y pantalones largos para
protegerse contra insectos, serpientes y cosas parecidas que pueden aparecer en las
montañas, sin embargo, ella apareció con ropa con muchas aberturas... No parecía como si le
fuesen a ser de mucha utilidad...

“Bien.” Dijo ella. “Dondequiera que vayas, estoy dispuesta a acompañarte. Incluso si
intentas decirme que no lo haga. Ni la lluvia, ni la nieve, ni el calor, ni los cielos cubiertos de
nubes me detendrán.”

“Cielos cubiertos de nubes no suenan como un elemento disuasorio...”

De hecho, algunas nubes hubieran estado bien con todo el sol que estábamos recibiendo.

Pero incluso el día anterior, cuando llamé a la casa de Kanbaru, ella no escuchó ni una
palabra de lo que estaba diciendo e hizo el mismo tipo de respuestas distraídas (“Ni siquiera
necesitas decirme a dónde vamos. La aguja de mi brújula siempre apunta en la dirección
hacia la que te diriges”, y así sucesivamente)... En realidad, en cierto modo fue
impresionante lo propensa que era a hacer suposiciones. Ella lo hizo de una manera diferente
a Hanekawa, como si tuviera una visión de túnel y solo pudiera ver al frente.

“En cualquier caso, esto no es una cita.” Aclaré.

“Oh, entonces no lo es... estaba tan segura de que lo era. Me había entusiasmado por eso.”

“¿Entusiasmado?”

“Sip. Quiero decir, esta es mi primera cita heterosexual.” Decidí no comentar sobre la parte
de heterosexual. No estaba seguro de poder hacer una buena broma al respecto. “Estaba tan
entusiasmada.” Continuó. “Que he roto mi voto solemne y compre un teléfono celular sólo
por este día, el primero de mi propiedad en mis diecisiete años de vida.”

“…………”

... ¡Por favor, mantengamos esto bajo control!

“Sería horrible si de alguna manera me separara de ti y no pudiera ponerme en contacto.”


Explicó. “Vivimos en una época en la que los teléfonos públicos han desaparecido, por lo
que un teléfono celular es una herramienta esencial para las citas.”

“B-Bueno... tienes razón. Je, jeje. Pero todavía hay un buen número de teléfonos públicos
aquí en el campo...”

“Eso no es todo. Me desperté a las cuatro para hacernos almuerzos. Uno para mí y otro para
ti. Como nos íbamos a reunir a las once, asumí que podría almorzar contigo.”

Mientras decía esto, Kanbaru me entregó un paquete que sostenía con su brazo izquierdo
vendado... Sí, me había dado cuenta desde el principio, pero a juzgar por su alta forma
rectangular, era uno de esos contenedores de múltiples cajas...

¿Podríamos mantener esto bajo control, por favor?

Quiero decir, literalmente...

Ciertamente sabía que terminaríamos almorzando juntos, así que mi plan había sido llevarla
a un lugar de comida rápida una vez que termináramos, como un buen senpai.

Pero parecía que esta kouhai mía tenía un enfoque mucho más directo.

Así que ese fue su movimiento. Almuerzos caseros...

Fue un ataque sorpresa.

“Estaba tan feliz y emocionada de tener una cita con mi venerado senpai que apenas podía
dormir y aparte de eso me levanté temprano, así que fue una diversión agradable.”

“Una diversión, ¿eh? ¿Todo eso es para el almuerzo? Sin embargo, es un montón de
comida... Debería decirte desde el principio que no puedo comer tanto.”

“Lo hice para que tuviésemos mitad y mitad, pero puedo comer lo que no termines. No me
gusta desperdiciar la comida, así que lo tuve en cuenta.”
“Bueno...”

Eché un vistazo al ombligo completamente expuesto de Kanbaru.

Tal vez, como mucho, alrededor del diez por ciento es grasa corporal.

Básicamente ella tenía una figura de reloj de arena.

Podrías llamarla figura de reloj de arena Suruga.

Casi parecía un palíndromo...

Aunque no lo era.

“Espera, Kanbaru. ¿Eres una de esas personas que no engorda sin importar cuánto coma?”

“Uhm, es más como si yo fuera una de esas personas que pierden toneladas de peso a menos
que coman como locos.”

“¿Personas como esa existen?” Eso haría que las chicas tuvieran envidia de ella... De hecho,
aunque soy hombre, ¡estaba envidioso de ella! “¿Exactamente cómo consigues que tu cuerpo
haga eso?”

“Simple. Primero, comienza con dos series de carreras de velocidad de dieciséis kilómetros
cada mañana.”

“Ok, no importa.”

Así que eso era todo.

Lo que ella consideraba una cantidad normal de ejercicio estaba en un nivel diferente.

Parecía que Kanbaru Suruga seguía asegurándose de hacer ejercicio todos los días, incluso
después de su retiro del equipo de baloncesto. Impresionante. Sin embargo, tenía bastante
sentido. Ella podría haber dicho que renunció debido a una lesión en su brazo izquierdo, pero
la verdad estaba en otra parte.

“Ah...” Dejó escapar un suspiro exagerado. “Pero parece que todo fue un desperdicio... Así
que después de todo no era una cita. Estaba esperando esto con ansias. Me siento como una
idiota, la forma en que me imagine cosas y me emocioné por nada. Estoy roja de vergüenza.
Mis sueños eran demasiado grandes para la realidad. Parece tan obvio que un noble senpai
como tú nunca se molestaría en salir con una tonta como yo. No podría haber sido más
presumida... Lamento haberte molestado con mis suposiciones salvajes. Bueno, este teléfono
celular y estas loncheras ya no tienen sentido. Solo nos van a pesar, así que los arrojaré a
alguna parte. Espera aquí un minuto, me pondré con rapidez un atuendo más deportivo.”

“¡En realidad, esto es una cita!”

Perdí.

Que hombre tan débil soy...

“¡Después de todo esta salida es una cita, Kanbaru! Sí, acabo de recordar que también estaba
muy ansioso por hoy. ¡Hurra, finalmente tengo una cita con Kanbaru-san! ¿Ok? ¡Así que
conserva tu teléfono y esos almuerzos! ¡Tampoco necesitas cambiarte de ropa!”

“¿En serio?” La expresión de Kanbaru comenzó a brillar.

Uh oh. Ella se ve súper linda.

“Me alegro. Eres muy amable.” Dijo.

“Sí... Aunque tengo la sensación de que uno de estos días mi amabilidad va a ser mi
perdición...”

Estaba yendo a una cita con Kanbaru, incluso antes de tener una con Senjougahara, la
mismísima Senjougahara, mi novia. Dudé que ella considerara esto como una infidelidad,
dado lo inusualmente indulgente que era la chica Tsundere con Kanbaru, pero todavía era
una prueba innegable de lo débil que era mi voluntad...

Además, durante toda esta conversación seguíamos tomándonos de las manos, con nuestros
dedos aún entrelazados. Hice un esfuerzo astuto para desenredarlos, pero estábamos
atrapados como si nuestras manos estuvieran en una melé de rugby. Sentí que mi mano era
una pieza en un rompecabezas de alambre o la víctima de una sujeción de sumisión.

Como si una serpiente se hubiese envuelto alrededor de mi mano.

“Aun así, Kanbaru. Abróchate la camisa que llevas encima. Tienes que estar de acuerdo en
que mostrar el ombligo es una mala idea cuando se va a las montañas. En cuanto a esos jeans
desgastados, bueno, supongo que estarás bien mientras tengas cuidado.”

“Hmm. Está bien, como quieras.”


Kanbaru siguió mis instrucciones y se abotonó la camisa de manga larga, ocultando la
curvatura de su cintura. Tuve que admitir que una pequeña parte de mí lo lamentaba, pero
sabía que no debería tener tantos pensamientos perversos sobre la kouhai de mi novia.

“Oh, ahora que lo mencionas. ¿Hoy vas a caminar?”

“Sí. Nos dirigimos a una montaña. No sé dónde podría estacionar una bicicleta, y además no
puedo permitirme que me roben mi única bicicleta.” Después de todo, la bicicleta de
montaña que había usado para viajes paso a mejor vida gracias al brazo izquierdo de cierta
persona. Era imposible que le dijera eso, ya que sonaría sarcástico. “No es como si esto fuera
un viaje muy largo. Mira, incluso desde aquí puedes ver a dónde vamos. Esa montaña de
allí...”

Cuando dije esto, de repente recordé algo. Cuando comencé a hablar con Kanbaru hace un
mes, ella no quería tocar el cuerpo del chico que salía con su ídolo Senjougahara y se negó a
montar en la parte trasera de mi bicicleta, optando ir contra todo el sentido común para
terminar corriendo junto a mí mientras pedaleaba... Y ahora esa misma chica sostenía mi
mano, envolvía sus dedos alrededor de los míos y recostaba su pecho en mi cuerpo...

“Jejeje.” Kanbaru tenía una sonrisa inocente y tímida, una que resaltaría en la calle.
“Araragi-senpai, Araragi-senpai, Araragi, Araragi, Araragi-senpai~~~.”

“……..”

Bueno, parece que se ha encariñado bastante.

¡Hasta tararea para sí misma!

“Por cierto, Kanbaru... siempre quise preguntarte esto, pero ¿podrías dejar de llamarme
senpai?”

“¿Eh?” Parecía sorprendida, como si no hubiera esperado oír eso. “¿Por qué? Te llamo
senpai porque eres mi senpai. No puedo imaginarme llamar a mi senpai de otra forma
además de senpai.”

“Bueno, hay muchas otras formas de las que podrías llamarme.”

“¿Cómo ‘Kesennuma-senpai’?”

“No cambies mi nombre.”


No, la otra parte.

Además “Kesennuma” era el nombre de un lugar.

“Estoy hablando de la parte de ‘senpai’. Es muy rígido y formal.”

“Por favor, no digas eso. Rígido y formal es exactamente como quiero que sea.”

“O... Okay. Bueno, claro, supongo que soy tu senpai, pero suena demasiado serio. Y
‘Araragi-senpai’ es casi tan largo como mi nombre completo.”

Mi nombre completo es Araragi Koyomi.

Siete sílabas.

Al igual que “Araragi-senpai1”.

“Hmm. ¿En ese caso debería llamarte ‘Araragi-san’?”

“Supongo que esa es una solución. Pero soy mayor por un año, así que no creo que haya
ninguna necesidad de que seas así de formal conmigo. Me siento un poco raro acerca de ser
llamado con ‘-san’. Hay una chica de escuela primaria que conozco que siempre me llama
así, pero en su caso, me habla de esa manera porque es extrañamente educada.”

Sin embargo, su personalidad no podría ser peor.

Eso me recordó. Últimamente no había visto a Hachikuji.

……

Eso me hizo sentir un poco solo.

“Kanbaru, sé que sucedió mucho entre nosotros debido a Senjougahara, pero me gustaría que
nos tratáramos como iguales.”

“Ya veo. Me alegra oír eso.”

“Entonces, una vez más, no estoy seguro de estar a la altura de la estrella más grande de
nuestra escuela.”

1
Algo me impide dejar pasar esto, como tal en castellano (creo) la palabra senpai serían dos silabas, siendo así
un diptongo, debido a que la letra i no está acentuada: sen-pai, sin embargo tal palabra no existe en el castellano
y en japonés (debido a que ellos poseen silabario y no abecedario) dicha palabra se compone de tres silabas:
sen-pa-i.
“Oh, no seas ridículo. Nada podría hacerme más feliz que estar contigo de esta manera. Estar
contigo me hace tan feliz como reconciliarme con mi estimada Senjougahara-senpai. Si hay
algo de ti en lo que estoy insatisfecha, es que no te conocí antes.”

“... Uh huh.”

Ella realmente tenía baja autoestima.

Sin embargo, pude entender por qué, considerando lo que aprendí hace un mes.

Ella también tenía muchas cosas con las que tratar.

“Entonces.” Confirmó conmigo. “Tengo la sensación de que estaría bien si me refiriera a ti


de una manera más íntima que ‘senpai’.”

“Sí. Puedes llamarme como quieras.”

“Está bien, Koyomi.”

“………….”

.......

¡Solo mi familia me llama así!

“Koyomi, puedes llamarme Suruga.”

“¡Vuelves a hacer que suene como si fuésemos pareja! ¿¡Y por qué siguen ocurriendo estos
eventos entre la kouhai de mi novia y yo!? ¡Incluso Senjougahara aún me llama ‘Araragi-
kun’! ¿¡Tienes idea del gran salto que acabas de dar!?”

“Por favor, no te pongas tan nervioso. Se supone que te des cuenta que es una broma,
Koyomi.”

“¿Por qué sigues llamándome así, Suruga?”

“El ‘Elegante Caballero de los Relámpagos’ Koyomi.”

“¿Y ahora estás colocando un título extraño a mi nombre? ¡Mi abuelo me dio mi nombre,
deja de jugar con él! No hay nada relacionado a mí que parezca un relámpago, ¡y tampoco
soy un caballero! Además, ¡eso es el doble de largo que mi nombre completo! ¡Estás
perdiendo de vista nuestro objetivo inicial!”

“El ‘Último Héroe de Nuestro Siglo’ Koyomi.”


“¿¡El último de este siglo!? ¿¡No es un poco prematuro!?”

“Bueno, en cualquier caso, no me atrevo a hablar casualmente con mi senpai. Así que
‘Koyomi’ está fuera de cuestión. No me siento cómoda sin usar un título u honorifico. Y si
los que propuse son demasiado, ¿podemos intentar un apodo?”

“Un apodo...” Su sensibilidad podría estar un poco fuera de lugar... o más bien fuera del
objetivo. No podía imaginar que me diera un apodo adecuado, pero una vez más, nunca se
sabe. “Bien, intenta pensar en uno.” Le dije.

“Sip.” Como si estuviera deliberando, Kanbaru cerró los ojos por un momento. Después de
unos segundos, levanto su cabeza. “Pensé en uno.” Dijo ella.

“Wow, eso fue rápido. Dispara.”

“Ragi.”

“¡Eso es mucho más genial de lo que pensé que sería! ¡De hecho es demasiado genial!”

Como si ella estuviera usando a propósito un apodo que era demasiado bueno solo para
burlarse de mí... Sonaba demasiado vanguardista como para ser el apodo de un chico de
secundaria japonesa.

“Lo halle al tomar la mitad inferior de ‘Araragi’.”

“Me di cuenta... ¿Pero los apodos no deberían ser un poco más suaves y encantadores?”

“Tienes un punto. En ese caso, se puede tomar la mitad inferior de ‘Araragi’ y el inicio de
‘Koyomi’ para obtener...”

“¿Para obtener?”

“Ragiko.”

“¡Obviamente te estás burlando de mí!”

“No seas tímido, vamos Ragiko-chan.”

“¡Vete a casa! ¡Después de todo no te necesito!”

“Ragiko-chan está siendo malo conmigo... Pero en realidad no me importa, jejeje...”

“¡Agh! ¡Se me olvidó, gritar no funciona en una masoquista! ¿¡Eres el oponente más fuerte
que he enfrentado!?”
Me estaba divirtiendo al hablar con ella.

Tal vez me estaba divirtiendo un poco demasiado.

Casi estaba perdiendo de vista lo que nos propusimos hacer.

“Sé que probablemente sea inapropiado decir esto, pero... Kanbaru. No es para aprovechar lo
que dijiste antes, pero si te hubiera conocido antes de empezar a salir con Senjougahara, me
pregunto si habríamos terminado saliendo...”

“Sí. En realidad estaba pensando lo mismo. ¿Qué pasaría si te hubiera conocido antes de que
me sintiera atraída por ella? Es muy raro que me sienta así por alguien del sexo opuesto.”

Suspiré.

Por supuesto, no habría llegado a conocer a Kanbaru si no fuera por Senjougahara, y lo


mismo sucedió con Kanbaru, haciendo que esta hipótesis no sea más que eso.

“¿Qué dices?” Ofreció ella. “¿Matamos y enterramos a esa molestia de mujer?”

“¡Me estás asustando!”

Ya hemos hablado lo suficiente, pero sigo sin ser capaz de precisar su carácter.

¡No puedo comprender su profundidad! ¿Cuánto hay de ti, Kanbaru Suruga?

“Sé que respetas a Senjougahara como senpai, pero... Eres sorprendentemente malvada.”

“No me bañes de elogios. Me harás sonrojar.”

“Eso no fue un elogio.”

“Me alegrare sin importar lo que me digas.”

“No te puedo creer, pequeña masoquista...”

“Ooh, pequeña masoquista, eso me gusta. Sigue.”

“……”

Aunque albergaba temores de que Kanbaru pudiera encontrarse perdida luego de entrar en
contacto con la verdadera naturaleza de su ídolo de la escuela media, Senjougahara, parecía
que gracias a tal inclinación no tenía que preocuparme.

En cualquier caso, sobre Kanbaru Suruga.


Ella era en realidad lesbiana.

Como probablemente se podría decir de nuestra conversación hasta este momento, no solo
adoraba a Senjougahara Hitagi como su senpai sino que también la amaba desde el fondo de
su corazón. Incluso se podría decir que sí, Kanbaru y yo éramos rivales en el amor, y sin
embargo estábamos caminando de la mano. Era difícil decir lo que estaba pasando. Por otra
parte, probablemente fue que ella se sintió en deuda conmigo por lo que sucedió a fines de
mes, o tal vez que se sintió agradecida, o algo así...

No se sintió mal que una kouhai fuese apegada a mí, pero no se sintió muy bien que la
atracción se debiera a un malentendido.

Tomare prestada la frase que Oshino uso con Senjougahara. Kanbaru simplemente actuó y se
salvó a si misma...

“......”

Pero sí, no pude negarlo.

Endeudamiento, malentendido o lo que sea, parecía que necesitaba hacer al menos algo para
ajustar la imagen exagerada que Kanbaru tiene de mí. O tal vez para destruir la imagen que
tiene de mí... Si su impresión de mí fuera demasiado positiva, se sentirá mucho más
decepcionada cuando las cosas vayan de un modo desfavorable.

Es por eso que tramé la Operación Arruinar la Imagen de Araragi Koyomi.

Parte uno.

Un hombre que anda por la vida sin dinero.

“Kanbaru, olvidé mi billetera. ¿Crees que podrías prestarme algo de dinero? Prometo
devolvértelo apenas pueda.”

“Está bien, claro. ¿Treinta mil yenes son suficientes?”

¡Ella era rica!

Hmm... Alguien que no respeta el tiempo de otras personas... no sería muy convincente
después llegar antes que ella al lugar donde dijimos que nos reuniríamos...

Operación Arruinar la Imagen de Araragi Koyomi.

Parte Dos.
“Soy un pervertido sin remedio, Kanbaru, ¿ahora sabes en qué estoy interesado? Ropa
interior femenina.”

“Oh, qué coincidencia, yo también, considero a la ropa interior femenina como una obra de
arte. Nunca pensé que estaríamos de acuerdo en este punto.”

¡Ella estuvo de acuerdo!

Claro, nunca podría aspirar a igualar a Kanbaru en lo que respecta a la flexibilidad... ¡Espera,
no! La lujuria normal podría estar fuera de cuestión, pero tal vez tuviera una oportunidad si
tomaba una dirección extraña...

“Estoy particularmente interesado.” Proclamé. “¡En ropa interior de colegialas de primaria!”

“¡No podría estar más de acuerdo! Woah, siempre supe que no eras el tipo de persona que
estaba limitada por lo que piensa la sociedad. ¡Sabes cómo vivir!”

“¿¡Mi imagen mejoro!?”

¿Por qué?

Hmm. De acuerdo, entonces es el momento de la Operación Arruinar la Imagen de Araragi


Koyomi, Parte Tres (Me estaba divirtiendo mucho con esto y ya estaba perdiendo de vista mi
objetivo original).

Un megalómano que sigue y sigue sus sueños.

“¡Kanbaru, estás hablando con un hombre que algún día va a ser importante!”

“No necesitas decirme eso. De hecho, creo que ya eres bastante importante. No sé si quedará
espacio a tu lado si te haces más importante.”

“¡Nkk...!”

¡No, esto era de esperar!

¡Necesitaba seguir!

“¡Me voy a hacer músico!”

“¿Oh? Entonces creo que me convertiré en tu instrumento.”

“Ni siquiera sé lo que eso significa, ¡pero qué línea tan genial!
Sus acciones invertidas en mi habían sufrido una repentina alza.

Hombre, ¿por qué?

“¿De qué se trata todo esto?” Me preguntó Kanbaru. “No necesitas decirme estas cosas
porque posiblemente no podría amarte y respetarte más de lo que ya lo hago.”

“Sí, es inútil...” Así como ella estaba feliz con lo que sea que le dijera, iba a adorarme sin
importar qué tipo de persona era o fuese. “Sin embargo, no lo entiendo. ¿Por qué me
sobrevaloras tanto?”

“Escúchate.” Kanbaru se rio. “Hasta ahora, siempre había pensado que no había tal cosa
como una pregunta estúpida, pero creo que es momento de corregirme.”

“………”

Por un breve momento me sonó como una frase genial, pero luego pensé en ello y me di
cuenta de que alguien aquí era sólo una idiota.

“Me comprometí a dedicar esta vida mía a ti.” Agregó. “No porque ayudaste a mediar entre
ella y yo, sino porque creo que eres digno de ese tipo de voto.”

“Un voto, dices...”

“Sí. Pensé que haría mi voto al sol, que nunca deja de brillar sobre nosotros y de otorgarnos
sus dones, pero el pensamiento me vino de noche, así que en su lugar elegí la farola más
cercana.”

“¡Esa es la cosa más arbitraria que he escuchado!”

“Pero las farolas brillan sobre nosotros y también nos otorgan sus dones, ¿no? La vida sería
bastante difícil sin ellas.”

“Cierto, pero...”

En ese caso al menos hazle un voto a la luna.

Tal vez había estado nublado.

“Pero tal vez.” Admitió Kanbaru. “Yo, mi persona, no es digna de jurar gastar mi vida
aprovechando tus grandes dones.”

“No sé por dónde empezar, pero ese uso de pronombres...”


Urkk.

¡La Operación Arruinar la Imagen de Araragi Koyomi estaba en un callejón sin salida!

“... Hmph.”

Araragi Koyomi.

Kanbaru Suruga.

Ahora que lo pienso, hay una cosa que no es Senjougahara que tenemos en común.

Ninguno de nosotros es humano.

Bueno, en realidad, ambos somos en su mayoría humanos, es solo que…

La sangre de Araragi Koyomi.

El brazo izquierdo de Kanbaru Suruga.

Cada uno es algo distinto de un ser humano.

No es solo una pequeña parte de mi sangre la que pertenece a la de un vampiro y el brazo


izquierdo de Kanbaru es totalmente el de un mono. Justo cuando me dejé crecer el cabello
para ocultar las marcas de colmillos que un vampiro dejó en mi cuello, Kanbaru escondió su
brazo izquierdo parecido al de un mono envolviéndolo en una larga venda, la verdadera
razón por la que la brillante y resplandeciente estrella se vio obligada a retirarse de forma
temprana. ¿Qué otra cosa podía hacer? No se puede jugar al baloncesto con el brazo de un
mono.

Tanto Kanbaru como yo nos habíamos involucrado con excentricidades.

... Y hablando de excentricidades, Senjougahara Hitagi, mi novia y también la senpai de


Kanbaru, se encontró con una.

Para mí, una vampira.

Para Kanbaru, un mono.

Para Senjougahara, fue un cangrejo.

Pero Kanbaru y yo fuimos diferentes de ella de una manera decisiva: Senjougahara enfrentó
su excentricidad todos los días durante más de dos años, pero la exorcizó y nuevamente se
volvió humana. Kanbaru y yo nos liberamos de nuestras excentricidades, pero partes de
nuestro cuerpo aún no eran humanas. Se podría decir que nosotros mismos éramos
excentricidades, nos habíamos involucrado con ellas y nos convertimos en ellas.

Era…

Una cosa triste para tener en común.

“¿Hm? ¿Qué pasa?” Ella me preguntó.

“Oh... Er, nada.”

“Vas a arruinar esta cita con esa expresión tuya tan sombría.”

“Cita... Bien, lo que sea.”

“Por cierto, he querido preguntarte antes, pero ¿qué vamos a hacer una vez que lleguemos a
la cima de la montaña? ¿Hay algo que hacer allí, aparte de lo que haremos nosotros?”

“Si en este momento estás hablando en serio, mantente alejada de cualquier Club de
Wandervogel... ¿Pero supongo que no has estado mucho en las montañas?”

“Mi equipo hizo algunas carreras a través de las montañas como parte del entrenamiento en
la escuela media, pero al final tuvimos que cancelarlas después de que algunas estudiantes
empezaron a sufrir esguinces.”

“Hunh.”

Así que para ella, incluso las montañas eran solo un lugar para ejercitarse.

Por otra parte, no fue su propia técnica lo que la convirtió en el As del equipo de baloncesto,
sino la fuerza abrumadora de sus piernas que fácilmente saltaron por sobre mi altura.

“¿Eso significa que te sientes en casa estando en las montañas?” Ella preguntó.

“No, no particularmente...”

“¿Pero cuando son pequeños los chicos no andan buscando escarabajos rinocerontes y
ciervos?”

“Escarabajos ciervos...”

“Sí. Son preciados como el moho negro.”

“Eso no suena muy valioso...”


¿Pero por qué buscaría en las montañas por esos insectos?

Eso es llamado recolección ilegal.

“Supongo que no es exactamente el tipo de lugar para una cita, especialmente teniendo en
cuenta la temporada.” Admití. “Estoy bastante seguro de que ayer te di una explicación
completa, pero sabes, es un trabajo que me encargo Oshino.”

“¿Oshino? Oh, Oshino-san.”

Tan pronto como escuchó el nombre la expresión de Kanbaru se volvió ambivalente. La


reacción fue poco común por parte de ella, pero tenía sentido.

Oshino Meme.

Kanbaru, Senjougahara y yo, ese hombre nos había salvado a todos. No, él nunca aceptaría
esa elección de palabras. Nos salvamos por nuestra cuenta, esa era la única manera de
decirlo.

Un especialista en excentricidades, alguien que es como una piedra rodante y vagabunda.

Un hombre frívolo que vestía una camisa hawaiana de mal gusto.

Él no era de ninguna manera un adulto respetable, pero el hecho de que le debemos mucho
es una verdad inmutable.

“Sí.” Dije. “Aparentemente hay un pequeño santuario en las montañas que ya no se usa, y él
dijo que pegara este talismán en su sala principal, ese fue el trabajo que nos dio.”

“... ¿Qué pasa con eso?” Kanbaru sonaba desconcertada. “La parte del talismán no tiene
ningún sentido, pero para empezar, ¿no puede Oshino-san simplemente hacerlo él mismo?
Tiene todo el tiempo del mundo, ¿verdad?”

“Estoy de acuerdo, pero este es nuestro trabajo, me endeudé ridículamente con él cuando me
ayudó... ¿No es tu mismo caso, Kanbaru?”

“Huh.”

“Sé que en tu caso es un poco más vago, pero a pesar de todo lo demás sobre él es un
profesional. No es tan amable como para ayudar por caridad. Estás en deuda con él, y
necesitas trabajar para pagarle.”

“Ohh, así que es por eso...” Kanbaru asintió, aparentemente convencida.


“Sí.” Retomé donde ella lo había dejado. “Por eso te pedí que vinieras aquí. Ayer Oshino me
pidió que hiciéramos esto cuando fui a pedirle a Shinobu que bebiera mi sangre. Dijo que me
asegurara de traerte conmigo.”

“Ahora que lo mencionas, Oshino-san insistió en que me estaba echando una mano. Huh. Ya
veo, significaba que estaría en deuda con él.”

“Ahí lo tienes.”

“Está bien. Si ese es el caso no tiene sentido discutir.”

Kanbaru apretó y se aferró a mi brazo aún más fuerte. Parecía haber un significado
complicado detrás del acto, uno que no podía esperar entender, pero de todos modos, parecía
que ella había tomado una decisión. Ella ciertamente se presentó como la persona honrada
que realzó su parte del trato.

“Aun así.” Dijo. “He estado cerca de esa montaña varias veces, pero nunca supe que había
un santuario.”

“Yo, tampoco... Incluso si está fuera de uso, al menos esperarías saberlo. ¿Por qué Oshino
sabe sobre lugares que los lugareños como nosotros no conocemos? Supongo que lo mismo
ocurre con esa escuela de preparación abandonada en la que está viviendo ahora.”

Tal vez en realidad tenía más conocimientos sobre las ruinas que sobre las excentricidades.
Al mismo tiempo, al igual que nuestros teléfonos públicos, realmente es la marca de una
ciudad rural tener un santuario y escuela de preparación olvidadas que no están siendo
invadidas por bichos raros. Entonces, sin embargo, podrías decir que era exactamente lo
contrario ya que la escuela de preparación estaba habitada por Oshino y Shinobu...

“Pero, si lo vas a poner de esa manera.” Preguntó Kanbaru. “¿Por qué no ha venido mi otra
querida senpai junto con nosotros? Ambas le debemos a Oshino-san...”

“Senjougahara es astuta con ese tipo de cosas, así que ya pagó su deuda. ¿Recuerdas que le
di a Oshino cien mil yenes cuando estuviste allí? Eso fue todo.”

“Ah, ahora que lo mencionas, hablaste acerca de eso. Ya veo, así que eso es lo que quisiste
decir. Hm, esa es mi senpai.”

“En su caso, no se trata de ser honesta, es más como que odia estar en deuda con la gente. Es
el tipo de persona que soportaría vivir completamente sola.”
“¿Ella dijo algo sobre hoy?”

“¿Hmm? No, en realidad no. Ni siquiera un ‘cuídate’.”

Ella realmente no lo había hecho.

Ya que técnicamente estaba yendo con “su” kouhai, me aseguré de mencionarlo antes de
llamar a Kanbaru, pero la reacción de Senjougahara había sido insulsa, como si no la hubiera
molestado con un asunto tan trivial. Me encontré con ganas de quejarme de que fue gracias a
su actitud que terminé yendo a una cita con su kouhai antes de tener una con ella, haciendo
caso omiso a mi propia voluntad débil.

“¿Ella te dijo algo, Kanbaru?”

“Mm. Ella dijo que me mimaras.”

“……….”

Ella es realmente complaciente con Kanbaru.

Dios, se suponía que una tsundere debía mostrar su lado dulce a su novio, no a su kouhai.

“Ella me dijo algo más. ‘Si Araragi-kun trata de ponerte un dedo encima, no me lo ocultes e
infórmamelo de inmediato. Él puede elegir entre ser enterrado en las montañas o convertirse
en comida para peces, lo que más odie’.”

“¿¡El que más odie!?”

Ella es despiadada.

Pero bueno.

Parecía que Senjougahara Hitagi iba en la dirección correcta. Había encontrado una
excentricidad antes de ingresar a la escuela secundaria, y aparentemente había tirado todo,
abandonado todo, así que eso significaba que estaba regresando a como solía ser. Para
alguien que soportaría vivir sola, aprender a interactuar con otros no podría ser algo malo.

En realidad me alegré de verlo.

Ya que ella es humana, eso era bueno.

“Oh, cierto, Kanbaru. Hablar de Senjougahara me recordó algo. Su cumpleaños será pronto,
¿no es así?”
“Sí. El 7 de julio.”

“... Parece que no necesitas revisar un calendario para decirlo.”

“Estamos hablando de alguien que amo.”

“Bueno, tengo una petición al respecto.”

“Cualquier cosa que quieras. Para empezar, este cuerpo te pertenece. No hay necesidad de
consultar conmigo cada pequeña cosa, úsame como mejor te parezca.”

“No, no es nada tan grande, solo que es un día especial que pensé que podríamos celebrar.
Lo único es que desde hace un tiempo he estado bastante alejado de ese tipo de eventos, y no
sé qué hacer. Ahí es donde esperaba que pudieras ayudarme, Kanbaru.”

“Ya veo. ¿Necesitas que me desnude?”

“¡Incluso yo sé que los cumpleaños no son ese tipo de evento! ¿¡En qué tipo de ocasión estás
tratando de convertir el día especial de mi novia!?”

“Ah. Me precipité.”

“No va a haber un momento en que necesites precipitarte. Calma tus ansias y baja a la tierra.
Por el resto de tu vida. Bueno, en realidad, te agradecería que me ayudaras con el montaje y
la planificación. Sé que hubo un vacío en su relación, pero probablemente tú sabes más sobre
Senjougahara que yo. Eso es todo.”

“Hmm. No lo sé, este es su primer cumpleaños desde que empezaron a salir, así que, ¿no
crees que deberías establecer el estado de ánimo y pasar el día ustedes dos juntos? Siento que
si me involucrara solo estaría estorbando.”

“¿Estorbando?”

“Sí. Una amabilidad no deseada puede ser un dolor en el trasero, solo una molestia.”

“Ahh. Lo consideré, pero pensé que una celebración más animada podría ser buena para su
primer cumpleaños mientras estamos juntos. Estaba pensando en invitar a Oshino y a
Shinobu, y tal vez a cierta estudiante de primaria que conozco y celebrar una pequeña fiesta
de cumpleaños.”
La idea en si presentaba problemas, ya que a Senjougahara no le gustaba Oshino, Shinobu ni
tampoco Hachikuji, pero eso era algo que necesitaba superar. Tenía que esforzarme al
máximo para crear una situación en la que ella no pudiera rechazarlos de manera directa.

“Bueno, si estás de acuerdo con eso, yo también.” Consintió Kanbaru.

“¿En serio? Eso suena evasivo.”

“Bueno, si no te importa que lo diga, si bien tengo el mayor respeto por tus intenciones, es
posible que ella quiera pasar el tiempo a solas contigo.”

“¿Crees que ella es tan sensata con nuestra relación?”

Ella ni siquiera había ido a una cita conmigo.

También le había estado pidiendo que saliéramos con bastante claridad.

Por supuesto, no había sido el momento adecuado, ya que ocurrió lo de Kanbaru e


inmediatamente después los exámenes.

Sus defensas estaban en tal estado de alerta.

“En cualquier caso.” Noté. “Parece que te preocupas por mí y por Senjougahara de una
manera bastante normal cuando se supone que tú y yo somos rivales peleando por ella.”

“Bueno, es verdad... Pero ahora mismo, es como si estuviera enamorado de ella mientras sale
contigo... Y te quiero a ti, su novio, casi tanto como a ella.”

“……”

¿Se me acaba de confesar?

Uh oh, mi pulso está aumentando.

Incluso podría sentir el latido de mi corazón a través de nuestros brazos.

Qué simplón soy.

“... Ya sabes, estás dejando que Senjougahara te influya demasiado.” La regañé. “El sol, una
farola o a lo que sea que hiciste este voto, no tienes que verme bajo tal luz positiva solo
porque soy el novio de Senjougahara. No es necesario que te guste alguien solo porque a ella
sí...”
“No, no es por eso.” Dijo Kanbaru sin rodeo alguno. Si era necesario decir algo, lo dijo, los
kouhais y senpais pueden estar condenados.

“Entonces.” Le pregunté a ella. “¿Todavía estas cargando con lo que ocurrió el mes pasado?
No me importa en absoluto, en serio... Ya sabes lo que dicen, odia el pecado, no al
pecador...”

“Tampoco es eso.” Dijo Kanbaru, aparentemente pasando por alto mi incomodidad. “Soy
afortunada de que eres capaz de olvidar y olvidar, pero eso no es a lo que refiero.”

“Olvidar y olvidar…”

Ella me hizo sonar tan débil de mente.

Aunque tenía la sensación de que ella no estaba equivocada.

Y ciertamente fue más sencillo de esa manera.

“Por favor, escúchame.” Dijo ella. “Te estaba acosando, ¿de acuerdo?”

Qué cosa tan descarada para decir en mi cara.

Como si yo fuera quien hubiese estado haciéndolo.

“Entonces...” Continuó ella. “Creo que tengo una muy buena idea sobre el tipo de persona
que eres. Realmente creo que no mereces menos. Incluso si no fueras su novio, incluso si lo
que ocurrió el mes pasado nunca hubiese sucedido, no importa cómo nos hubiésemos
conocido, te habría visto como alguien digno de mi respeto. Lo juro, por mis piernas.”

“... Oh.”

Bueno, en ese caso.

Era una tontería incluso contemplar otros escenarios donde Kanbaru y yo podríamos
habernos conocido...

Sin embargo.

“Si lo juras por tus piernas, ¿qué puedo decir?”

“Cierto... Te respeto tanto que incluso si me llevas a una montaña solitaria con el pretexto de
que Oshino-san tiene un trabajo para nosotros, solo para obligarme a cada deseo lujurioso
que tu corazón acuna, puedo perdonarte con una sonrisa.”
“¡No quiero ese tipo de respeto!”

¿Y ‘pretexto’?

¡Ella no confiaba en mí en absoluto!

“¿Eh? Espera.” Dijo ella. “¿De verdad no estamos procediendo a eso?”

“¡No actúes tan genuinamente sorprendida!”

“Espera, ¿estás haciendo que la chica haga el primer movimiento? A-ja... Tu plan es
insistirle a tu novia que no la engañaste porque te sentiste tentado.”

“¡Ahora lo entiendo, Kanbaru, eso es lo que estás tratando de hacer! ¡Estás planeando
arruinar mi relación con Senjougahara a través de esto! ¡Estás usando tu cuerpo!”

“Oops...”

“¡No me saques la lengua! ¡Te ves tan adorable, imbécil!”

Tan intrigante.

Bueno, sabía que tenía que ser una broma, por supuesto.

... Era una broma, ¿verdad?

“Pero hablando del cumpleaños.” Dijo. “Me pareció un poco sugestivo cuando escuché que
un cangrejo la había poseído.”

“No sé si ‘poseído’ es la palabra correcta, pero... ¿perdón? ¿Sugestivo? ¿Qué es sugestivo de


un cangrejo? ¿Y qué tiene que ver con su cumpleaños?”

“Bueno, su signo zodiacal es cáncer, ¿verdad?”

“¿Eh?” Siete de julio, ¿verdad? “¿De qué estás hablando? Para el siete de julio sería
géminis.”

“¿Eh? No... um, no creo que eso sea correcto.”

“¿En serio? ¿Soy el que está equivocado? Cuando me enteré de que ella nació el 7 de julio,
asumí que era géminis...” Lo recuerdo bien porque en ese entonces pensé que si
Senjougahara tuviese una gemela idéntica con la misma personalidad sería un fracaso.
“Bueno, no es como si supiera las fechas exactas del zodiaco ni nada... No, pero espera. ¿El
signo de cáncer no empieza el 23 de julio?”
“Oh.” Kanbaru parecía haberse dado cuenta de algo. “... Una prueba rápida de conocimiento
popular.”

“¿Por qué?”

“¿Qué signo tienen aquellos nacidos el primero de diciembre?”

“¿Eh?” Vamos, eso ni siquiera cuenta como prueba. “Al menos conozco la respuesta a esa.
Ofiuco, ¿verdad?”

Suruga Kanbaru se echó a reír. “Ja... jaja, ajaja.”

Parecía reírse tan fuerte que le temblaban las rodillas y no podía mantenerse de pie, e incluso
se aferraba a mi brazo. Pasó de empujar su pecho contra mi codo a atrapar la parte superior
de mi brazo en su escote, pero su risa irritante hizo extremadamente difícil registrar mi buena
fortuna.

“¿Q-Qué es tan divertido...? ¿Me equivoqué?”

“O-Ofiuco... ¡Pff, pffajaja! Ofiuco... Ajaja, en este día y época, estás usando el zodíaco de
trece signos...”

“……….”

Oh.

Así que eso es lo que ocurría.

Bien, ya lo entendí. El siete de julio es el signo de cáncer en el zodiaco de doce signos...

“Ah, esa fue una buena risa. Tiene cinco años de valor.”

Finalmente Kanbaru levantó la cabeza. Había lágrimas en sus ojos. Entendí por qué ella
podría haberlo encontrado tan gracioso, pero se había reído demasiado de mí.

“Está bien, vamos, Ragiko-chan.”

“¡Me tratas abiertamente peor! ¡Todo el respeto que sentiste por mí como tu senpai ha
desaparecido! ¡Esto realmente duele mucho!”

“O-Oh. Mi error, querido Araragi-senpai.”

“Como agradecimiento por hacerte reír tanto haz como si esto nunca hubiese pasado.”
“¿Hacer como si no hubiese pasado? ¿Cómo, cuándo parecías tan seguro? Para empezar,
¿por qué estás usando el zodíaco de trece signos?”

“Bueno, ¿qué puedo decir? ¿No cambiamos de un zodíaco de doce a trece signos hace un
tiempo?”

“Lo intentamos, pero no se extendió y la gente se rindió. ¿Cómo es posible que mi estimado
Araragi-senpai no lo sepa?”

“Hmm... tal vez eso fue justo cuando dejé de preocuparme por la astrología...”

Está bien...

Así que nunca se extendió...

“Supongo que lo mismo ocurre con las excentricidades.” Reflexioné. “Podrías tener un
demonio o el fantasma más aterrador que te puedas imaginar, pero si no te diste cuenta
nunca existió.”

“No, no creo que sea algo tan profundo...”

“De todos modos, me pregunto qué es el Ofiuco.”

“Es una constelación de verano, la cual contiene la estrella Alfa Ras Alhague. Es bien
conocida por también contener la estrella Bernard, que tiene el mayor movimiento propio de
cualquier estrella fija.”

“No, no estoy hablando de las estrellas en sí... Me pregunto por qué tiene ese nombre. ¿Tiene
que ver con serpientes o algo así?”

“Hasta donde se representa al médico maestro Asclepio de la mitología griega. En la


constelación está agarrando una serpiente, que se conoce como Ofiuco, o el ‘portador de la
serpiente’.”

“Huh.” Asentí. No tenía ni idea. “Kanbaru, me sorprende que sepas todo eso, tanto sobre las
estrellas como sobre la constelación. ¿Sabes mucho sobre las estrellas o algo así?”

“¿No parece algo propio de mí?”

“Ese es el caso.”
“Hm. Bueno, no me atrevería a decir que sé mucho sobre ello, pero me gusta mirar el cielo
nocturno. Es simple, pero también tengo un telescopio. Dos veces al año, voy a un evento de
observación de estrellas que tiene lugar en un observatorio en otra prefectura.”

“Huh. Entonces no solo un planetario. Experiencia por sobre el conocimiento, ¿eh?”

“También me gustan los planetarios, pero esos lugares no tienen estrellas fugaces, ¿verdad?
Las estrellas fijas y las constelaciones son agradables, pero prefiero las estrellas fugaces.”

“Ya veo. Que romántico.”

“Sí. Espero que algún día, uno no muy lejano, la Tierra también se convierta en una estrella
fugaz.”

“¿¡La humanidad va a estar bien!?”

No podía creerle.

¿Dónde estaba el romance en eso?

Esa era una película de desastres.

“... Y parece que después de toda esa charla hemos llegado.” Le dije. “Según Oshino por
aquí beberían haber escaleras... oh, ahí están... Bueno, es más como un sendero…”

Una montaña cerca de la carretera.

No sabía su nombre.

Oshino tampoco.

Yo diría que el camino había sido pavimentado para evitar la montaña, pero ramificándose
desde la acera, hacia la cima, habían escalones, o al menos sus vestigios. Bueno, en realidad,
aún se les podría llamar así. Había oído que nuestros equipos de atletismo venían corriendo
hasta aquí, como también mencionó Kanbaru, pero dudé de que alguno de ellos subiera por
estas escaleras, ya que la montaña estaba cubierta de follaje, y si no lo hubiera sabido de
antemano, probablemente no me habría dado cuenta o no los habría reconocido como tales.

Algo parecido a un sendero.

Mm, no, cuando miré más de cerca vi señales de hierba pisoteada. Huellas de pasos. Así que
las escaleras no estaban totalmente sin usar, pero entonces, ¿de quién podían ser las huellas?
Si recordaba correctamente, Oshino ni siquiera se había acercado al santuario, por lo que no
podían ser suyas. También dijo que el santuario ya estaba fuera de uso, por lo que era
imposible que alguien trabaje allí.

¿Estaba lleno de bichos raros?

Improbable.

“……”

Miré a la chica aferrada a mi brazo izquierdo.

Su guardia estaba siempre tan baja, como ahora, pero era una chica tan linda... ¿Ella estaría
bien? Si allá arriba hubiera varios de los estereotípicos bichos raros... yo solo podría
protegerla bastante bien. Algo de sangre vampírica seguía corriendo por mis venas, pero de
todos modos eso simplemente mejoraba mi metabolismo y mi curación.

“Espera un momento, kouhai.”

“¿Qué pasa, Ragiko?”

“Tu brazo izquierdo, ¿cómo lo sientes?”

“¿Eh? ¿Qué quieres decir?”

“Bueno, solo me preguntaba si ocurrió algo nuevo o inusual al respecto.”

“Nada en particular.”

Nada en particular, dijo ella.

Cierto, todo este tiempo ella estuvo sosteniendo ese bolso de aspecto pesado en su mano
izquierda, como si no fuera nada...

Tal vez no había necesidad de preocuparse... El poder de ese brazo izquierdo sumado a su
resistencia base era la nueva norma para Kanbaru...

“Sí.” Aseguró. “Este brazo es lo suficientemente fuerte como para poder empujarte sobre
una cama.”

“Realmente no veo por qué tiene que ser sobre una cama.”

“Entonces, este brazo es lo suficientemente fuerte como para poder llevarte como una novia
solo con él.”
“No, para cargar a alguien como una novia se necesitan si o si los dos brazos, como tú dices
es más bien como cargar a una chica de pueblo... Pero creo que estoy bien con eso.”

“Jejeje.” Kanbaru soltó una risa vagamente obscena en respuesta. Parecía estar disfrutando.
“En verdad eres amable... preocupándote por mí de todas las personas. Ahh, podría sentirme
segura confiándote mi cuerpo y mi alma...”

“¿Por qué te sonrojas y dices eso como si estuvieras profundamente conmovida? ¿Qué eres,
un lector de mentes? Deja de desenterrar cada pequeña cosa que estoy pensando o tendré que
sacar mi sombrero de papel de aluminio.”

“Puede que no lo veas ahora, pero una vez fui nuestro As del baloncesto. Puedo entender la
mayoría de lo que la gente piensa al mirar en sus ojos. ¡Y estamos hablando de los
pensamientos de un senpai al que respeto mucho! Como tu fiel subordinada, prácticamente te
tengo alrededor de mi dedo meñique.”

“Entonces no me tengas alrededor de tu dedo meñique. ¿Qué eres, una femme fatale?
Hmph... ¿Todo lo que necesitas es una mirada en mis ojos? Vaya. Quiero decir, eso
realmente suena como telepatía... Bien, Kanbaru, ¿en qué estoy pensando ahora?”

“Probablemente algo como, ¿‘esta mujer se quitaría el sostén si se lo pidiera’?”

“¿Así es como me ves, Kanbaru?”

“¿Quieres que me lo quite?”

“Um, nkk... ¡No, por supuesto que no!”

A pesar de mí mismo había dudado por un momento.

Kanbaru solo me dio un enérgico movimiento de cabeza junto con un: “Oh, ya veo.” Y
continuó aferrándose a mi brazo... Su completa no reacción a mi vacilación parecía ser una
muestra de tolerancia, casi de alcance maternal, para los motivos ocultos de los hombres, y
honestamente me dio una gran impresión...

Ella era la que había ido en esa dirección.

¿Cuándo comenzó a actuar como si yo fuera más joven que ella y además su marido?

“Vamos.” Insté. “Ni siquiera hemos subido esta montaña y ya estoy cansado...”

“Mm.”
“Pero ten cuidado por donde caminas. Aparte de las picaduras de insectos, parece que hay un
montón de serpientes por aquí.”

“¿Dijiste ‘serpiente’?”

Pfft, se rio Kanbaru.

Debo haberle recordado nuestra conversación anterior sobre el Ofiuco.

Continué, sin ser perturbado: “Bueno, al parecer no son venenosas. Sin embargo, las
serpientes tienen colmillos largos, y no querrás que te muerdan y hagan una herida.”

“... La tuya está en tu cuello, ¿verdad?”

“Sí. Sin embargo es de un vampiro, no de una serpiente.”

Hablamos mientras subíamos las escaleras de la montaña. Nuestras coordenadas no habían


cambiado mucho, pero la humedad pareció dispararse en el momento en que entramos en la
montaña, y era sofocante. Según Oshino las escaleras conducían a un santuario, pero no
había preguntado qué tan alto estaba. No me imaginé que en realidad estuviese en la cima,
pero... eso estaría bien. No una montaña tal alta.

“Mi brazo izquierdo.” Dijo Kanbaru. “Oshino-san me dijo que debería sanar cuando tenga
veinte años.”

“¿Qué? ¿En serio?”

“Sí. Bueno, solo si no lo hago de nuevo.”

“Es bueno escuchar eso. Así que significa que podrás volver a jugar al baloncesto después de
los veinte.”

“Claro. Por supuesto, esa esperanza se destruirá si me aflojo, así que necesito seguir
trabajando por mi cuenta.” Después de decir eso, ella me preguntó: “¿Qué hay de ti?”

“¿Eh? ¿Yo?”

“¿Vas a ser un vampiro por el resto de tu vida?”

El resto de mi vida.

Un vampiro, por el resto de mi vida.

Un simulacro de humano.
Algo más que humano.

“Estoy bien con eso. En cualquier caso, a diferencia de tu brazo izquierdo, no es un gran
problema. El sol, las cruces, el ajo y todas esas cosas no me molestan en absoluto. Jajaja, y si
me lastimo me curo de inmediato, así que tengo un buen trato, ¿sabes?”

“No quiero escucharte mientras te haces el duro. Lo que me dijo Oshino-san es que te
resignaste a ser un vampiro para salvar a esa chica, a Shinobu.”

Así era como se llamaba al vampiro que me había atacado.

Esa vampira rubia.

Ahora vivía en las ruinas de esa escuela de preparación junto con Oshino.

“………”

Ese bastardo realmente tiene la boca floja.

Esperaba que no se lo hubiera contado a Senjougahara. Supuse que fue por el brazo
izquierdo que le dio a Kanbaru un ejemplo al que ella podía referirse, así que probablemente
no tenía que preocuparme...

“Eso no es cierto.” Sostuve. “Solo son efectos residuales. En lo que respecta a Shinobu,
bueno, ella es mi responsabilidad. No iría tan lejos como para llamarlo salvación. Tenemos
un entendimiento, y me aferro a eso. Está bien... No soy una estrella del baloncesto, así que
no puedo saberlo solo mirándote a los ojos, pero estás preocupada por mí, ¿verdad,
Kanbaru?”

“... Bueno.”

“Estoy bien. Tus preocupaciones están fuera de lugar, al igual que el hecho que
mencionaste.”

Corté el tema con una pequeña broma al final. Kanbaru parecía querer decir más, pero
probablemente se dio cuenta de que era mejor quedarse sin decir nada, y permaneció en
silencio. Si era necesario decir algo, lo dijo, pero si solo quisiera decirlo, podría contener la
lengua. Sinceramente, es una mujer demasiado buena para tenerla aferrada a mi brazo
izquierdo.
Justo cuando nuestra conversación terminó, alguien bajó las escaleras. Esa fue una
sincronización perfecta. La persona estaba corriendo un poco precariamente por las
traicioneras escaleras.

Una chica, probablemente de escuela media.

Estaba completamente protegida con mangas y pantalones largos.

Había una bolsa alrededor de su cintura.

Un sombrero, inclinado hacia abajo sobre su cabeza.

Estaba muy inseguro de si podía ver delante de ella, e incluso si pudiera, estaba corriendo
por las escaleras mirando solo a sus pies, por lo que un par de movimientos en falso y podría
haber chocado con nosotros de frente. Fue bueno que Kanbaru y yo acabáramos de hacer una
pausa en nuestra conversación; la notamos más rápido de lo que normalmente lo habríamos
hecho y nos movimos a un lado de las escaleras para esquivarla.

En el momento en que pasó…

Nos miró a los dos y, al parecer recién nos estaba notando, se sobresaltó y, comenzó a bajar
las escaleras a un ritmo aún más rápido. Antes de que lo supiéramos su figura estuvo fuera
de la vista. Ella había acelerado tanto que esperaba que tropezara y cayera al menos dos
veces antes de llegar a la calle.

“¿………?”

¿Hmm?

Había algo en la chica...

Era como si la hubiera visto antes en algún lugar, o tal vez no.

“¿Qué pasa?” Preguntó Kanbaru.

“Oh, nada...”

“Bueno, no esperaba encontrarme con alguien en este sendero de montaña. No quería decirlo
delante de ti, pero estaba convencida de que estábamos en un camino muerto. Ella también
era muy linda. Dijiste que el santuario ya no se usa, pero después de todo tal vez algunas
personas aún lo visitan.”

“¿Pero una chica así?”


“La fe no tiene edad.”

“Claro, pero aun así.”

“Así como el amor no tiene edad.”

“No necesitabas agregar eso, ¿verdad?”

Incluso mientras hablaba, traté de recordar dónde antes había visto a la chica, pero al final no
pude. Entonces, una vez más, pensé, que tal vez no la conocía. Llegué a la conclusión de que
podría haber sido un simple caso de déjà vu.

“Bueno, sigamos subiendo.” Le dije a Kanbaru. “Si alguien vino de allá arriba, eso significa
que tiene que haber algo por encima de nosotros. Todo este tiempo me estuve preguntando si
Oshino podría estar haciéndome una broma, esto lo descarta.”

“Sí. Como casi lo hace con la posibilidad de que me estés engañando.”

“¿No solo en realidad existió sino que aún no se ha descartado?”

“Te perdonaré con una sonrisa en mi cara.”

“Ni una palabra más sobre lo frustrada que estás sexualmente, ¿de acuerdo?”

“Puedes llamarlo un error, no me importará. No pretendo seguir molestándote.”

“Ya me estás molestando.”

“Oh. En ese caso, ¿qué te parece esto? Solo continua, alivia mi frustración, y probablemente
dejaré de acosarte. Es la forma más fácil y rápida de calmar a una perra en celo.”

“Bueno, esta es la primera vez, que veo a una mujer referirse a sí misma de esa manera...”

“Solo es embarazoso al principio. Apresurémonos y terminemos esto para que haya menos
problemas entre nosotros.”

“Voy por delante.”

“El juego del abandono, ya veo.”

“¡Y puedes irte a casa!”

“Eres tan frío con mis avances... ¿No te gustan las mujeres que toman la iniciativa? Supongo
que tendré que actuar como si no quisiera esto.”
“Lo que sea, no me importa.”

“Solo imagínalo. Ahora estamos tomados de la mano contra mi voluntad... No me dejaste


otra opción, me amenazaste con violencia y me ordenaste que lo hiciera. Y te pregunto
vacilante: ¿‘Así está bien’?”

“Uh... si pensabas que eso me emocionaría, en realidad, ¡no es así, maldita sea!”

No.

Absolutamente no.

“Hmph. Que mojigato. Eres más indiferente que frío. Ser tratada como el aire me está
haciendo perder confianza en mis encantos femeninos. ¿No te preocupas por mí?”

“No, eso no es cierto. Pero tengo una novia, y su nombre es Senjougahara. Si no me


comportara con indiferencia, eso sería un problema, ¿no?”

“Pero ustedes dos parecen tener una relación platónica. Estoy segura de que necesitas un
espacio donde puedas desatar tus deseos sexuales reprimidos.”

“¡No, no lo necesito! ¡Y no seas voluntaria para ser parte de ese espacio!”

“Ella puede atender tus necesidades emocionales mientras yo las físicas. He aquí, un
triángulo dorado.”

“No, mira, ¡eso es una farsa de un triángulo amoroso! ¿¡Por qué querría ser arrastrado a ese
tipo de situación de la Miseria de los Tres!?”

“Mientras lo decía, Araragi parecía incapaz de apartar los ojos de mis pechos. Al final del
día, no pudo resistir sus instintos masculinos.”

“¿¡Por qué estás expresando un monólogo!?”

“Esta es una historia paralela, así que puedo ser el narrador.”

“¿¡De qué estás hablando!?”

Y de todas formas.

Paralela o no, ella nunca podría convertirse en la narradora.

Tendríamos que envolverlo con film retráctil antes de ponerlo en los estantes.
“Hmph. Como pensaba, esto no va tan bien.” Se lamentó Kanbaru. “Con un cuerpo como el
mío, esperaba que en poco tiempo alguien como tú se convirtiera en mi juguete.”

“¿¡Es eso lo que realmente pensaste de mí!?”

Una relación platónica...

Esa era una manera de describir a una novia genial con la que ni siquiera he tenido una cita.
De cualquier manera, parecía que otros podían decir eso. Siempre me burlé de los manga en
donde las parejas que se supone van a salir se separan y vuelven una y otra vez, y les
convencía en mi mente de que siguieran adelante, pero ahora que tenía una novia, sabía que
realmente era así.

Uh-uh.

“Si vas a llamarme idiota, entonces ¿qué pasa con ella?” Dije. “Ella es totalmente casta.”

“¿Y por qué no? Tiene sentido cuando consideras su pasado, y mientras la veas como una
novia tímida e inocente sólo la hace mucho más moe.”

“Tímida... No lo sé, siento que una vez que empiezas a identificar un rasgo como moe,
empieza a sentirse menos moe y más como un punto de venta.”

“Bueno, si ella está en venta, no veo cómo está mal el aceptar la oferta.”

“Tienes razón sobre eso.”

Subimos las escaleras.

La hierba pisoteada que noté más abajo debió ser cosa de esa chica, pensé, y unos cinco
minutos después llegamos al santuario... Al igual que las escaleras, estaba en tal mal estado
que no lo habría reconocido como tal si no me lo hubiesen dicho de antemano. Mis
preocupaciones sobre los bichos raros quedaron totalmente sin sentido. Campo o no, raro o
no, ninguna persona elegiría estar aquí por un solo segundo. Apenas podía decir que alguna
vez fue un santuario por el torii, pero no estaba claro cuál de las estructuras era la sala
principal. Tendría que averiguarlo en base al diseño.

¿Podría la chica de antes también haber estado aquí?

Sin embargo, ¿para qué?

Claramente no había dioses en este santuario.


Incluso un dios habría huido.

Para decirlo como lo haría Oshino, los dioses están en todas partes, pero aun así, no parecía
que estuvieran aquí. Lo que sea... Solo tengo que hacer mi trabajo. Todo lo que tengo que
hacer es colocar el talismán, que lo ubicaba entre uno de los trabajos más fáciles que Oshino
me había asignado hasta ahora. De mi bolsillo tomé el talismán que había recibido de él.

Pero entonces.

“Ungh.”

Kanbaru, saltó de mi brazo.

Esa agradable sensación que había estado conmigo durante tanto tiempo desapareció de mi
codo.

“¿Qué pasa, Kanbaru?”

“... Supongo, ¿qué me siento cansada?”

“¿Cansada?”

¿De qué?

¿Por subir las escaleras?

Sí, fue una caminata decente, pero no parecía lo suficiente como cansar a una atleta como
Kanbaru. Incluso yo estaba respirando un poco más pesado de lo habitual.

Pero Kanbaru realmente parecía cansada, y su rostro se veía pálido. Era la primera vez que la
veía en este estado.

“Huuh... ¿Quieres tomar un descanso?” Le ofrecí.

“Um... Supongo que el único lugar donde podría sentarme sería... en la cima de esa roca...
Pero siento que sentarme en la roca equivocada en un santuario podría terminar
maldiciéndome...”

Dejando a un lado si había algún dios en el santuario para maldecirnos, algo todavía se sentía
mal al respecto. Sabía por experiencia que cuando mis entrañas me advertían así, era mejor
detenerse.

Sin embargo, ¿qué debo hacer en ese caso?


Mientras me preocupaba la pregunta, Kanbaru propuso: “¿Qué tal si solo almorzamos?”

“¿Almorzar?”

“Sí. Podría ser una solicitud descortés y una infracción de la etiqueta para una kouhai sugerir
que comamos, pero cuando no me siento bien, generalmente me encuentro mejor si lleno mi
barriguita con comida.”

“……”

Ella era como un personaje de manga.

Qué jovial y divertida es, incluso cuando no se siente bien.

“Dijo que no comiéramos hasta que colocáramos el talismán... Algo sobre mantener nuestros
cuerpos puros. Ok, entonces, ¿por qué no vas a buscar un sitio donde puedas colocar todas
esas loncheras? No soy el mayor fanático de almorzar en un santuario desierto, pero supongo
que tiene su propio encanto. Iré y colocare este talismán mientras lo haces.”

“Mm. Sí, vamos a hacer eso. Lo siento, pero voy a dejar el trabajo en tus manos.”

“Nos vemos.”

Dándole la espalda a Kanbaru, pase a través de la hierba hacia las estructuras. Oshino había
dicho que colocara el talismán en la sala principal, pero no estaba seguro de a dónde
exactamente debía ir. Dentro, ¿o podría simplemente colocarlo en la puerta? Yo diría que la
falta de direcciones de Oshino tenía la culpa de mi ignorancia, pero entonces, sus
instrucciones siempre son así. Tal vez él estaba tratando de decirme que pensara por mí
mismo.

De todos modos, decidí echar un vistazo a las edificaciones, y mientras lo hacía, volví a
pensar en la chica que antes nos encontramos. No sabía por qué, pero ella me tiene un poco
incómodo... No, no era eso.

Era como si ya la hubiera visto.

Como si la hubiera conocido.

Pero más inmediatamente, sentí algo sobre ella.

No es que supiera lo que era ese algo.


“Siento que la he visto antes, sin embargo... ¿Dónde? No es como si viese muy seguido a
estudiantes de escuela media...”

Mis hermanitas eran una cosa, pero...

Mis hermanitas.

“Hm... Me pregunto.”

Terminé colocando el talismán en la puerta de un edificio que consideré el principal. En


realidad, sentí que podría colapsar sobre sí mismo si abriera la puerta, por lo que podría
decirse que no tenía otra opción.

Me alejé suavemente y volví a la entrada. Kanbaru aún no regresaba. Pensé en sacar mi


teléfono... pero me di cuenta de que nunca me había dicho su número. Y ahora que lo
pensaba, tampoco le había dado el mío.

Después de todo ese celular de ella resulto ser inútil.

“¡Heyyy, Kanbaru…!”

Y así terminé gritando en voz alta.

Pero no hubo respuesta.

“¡Kanbaru!”

Intenté gritar aún más fuerte, pero el resultado fue el mismo.

De repente me sentí ansioso.

Si estaba cerca era imposible que no hubiese escuchado mi voz. Mientras que Senjougahara
podría, de todas las personas, Kanbaru nunca me dejaría y regresaría a casa sin mediar
palabra. Perder de vista a alguien en un lugar como este solo podía significar...

Comencé a correr, confundido.

Ella dijo que no se sentía bien, tal vez se derrumbó mientras buscaba un lugar para comer...
¿Eso fue lo que paso? Los peores escenarios se cruzaron por mi mente. ¿Cómo lidiaría con la
situación, cuál sería el curso de acción correcto? Si algo le pasara, nunca podría volver a
mirar a Senjougahara a los ojos. Pero, afortunadamente, no se dio el peor de los casos.
Corriendo por los terrenos del santuario, finalmente pude encontrarla, frente a mí.
Las loncheras estaban en el suelo a su lado.

Parecía aturdida, y se quedó completamente inmóvil.

“¡Kanbaru!” Le dije, poniendo mi mano en su hombro.

“¡Hyeek!” Mi sacudida la sobresalto, y ella se dio la vuelta. “O-Oh... solo eres tú.”

“Qué saludo tan cálido.”

“Ah... lo siento. Qué cosa tan impensable para decirle a alguien con quien estoy
enormemente en deuda. Estaba tan sorprendida... Después de todo, de repente, me agarraste
la carne.”

“¿‘Carne’? Vamos.”

Su hombro.

“Permíteme compensar mi paso en falso con mi cuerpo.” Dijo. “Podría fingir que me resisto
un poco, pero todo es una actuación para hacer que la escena sea más emocionante, ¿de
acuerdo?”

“Bien, si eres capaz de decir esas cosas parece que estás en un estado mental normal. Me
siento aliviado. Sí, soy plenamente consciente de que intentaste sonar ridícula. En verdad
gritas de una manera linda, sabes.”

Su rostro aún estaba pálido.

De hecho, se veía aún peor.

No parecía el momento adecuado para que me burlara de su inesperado grito.

“¿Qué pasa, estás bien? Si te sientes tan mal, sí, si lo limpiara un poco, probablemente
podrías recostarte en el porche del santuario principal. Vamos a hacer eso, puedo llevarte allí
en mi espalda. Y si te preocupa mucho lo limpio que pueda estar, podría dejarte mi
chaqueta...”

“No, eso no es.” Kanbaru señaló, directamente delante. “Mira eso...”

“¿Eh?”

Hice lo que dijo y miré en la dirección que señalaba.

En el bosque un poco más allá de los terrenos del santuario.


Señaló un árbol grueso.

En la base de ese árbol, había una serpiente cortada en pedazos.

Una serpiente, asesinada, cortada en cinco partes… su cuerpo es largo, sinuoso, retorcido y
picado.

En cinco partes.

Asesinada.

Pero la cabeza parecía seguir viva.

Su lengua se movía y su boca estaba abierta de par en par.

Estaba gimiendo de dolor.

O eso me parecía al mirarla.

“¡.........!”

Me quede en silencio ante la vista…

Y de repente recordé el nombre de la chica.

La chica con la que nos cruzamos.

Cierto.

El nombre de la chica es… Sengoku Nadeko.


003
“Este, y supongo que luego este. Oh, ese libro podría no ser muy útil. Mis disculpas a
quienquiera que lo escribió, pero todo lo que realmente hace es decirte que memorices las
cosas. Este libro debería ser mejor si apuntas a la eficiencia.” Dijo Hanekawa Tsubasa,
sacando un libro tras otro de los estantes y entregándomelos.

Uno, dos, tres, cuatro y cinco.

La ubicación: una gran tienda de libros, no muy lejos de la Secundaria Naoetsu.

Lunes, 12 de junio.

Después de clases.

Hanekawa, representante de la clase, y yo, vicerepresentante de la clase, juntos nos dirigimos


a una librería en el camino a casa después de la reunión para la preparación del Festival
Cultural, que sería el fin semana desde el viernes hasta el sábado. Bueno, fue más como si le
hubiera preguntado a Hanekawa y ella accedió a venir conmigo.

Trenzas, anteojos.

Una representante de clases entre los representante de clase.

Hanekawa, la última y mejor estudiante modelo.

“Lo siento, Hanekawa... pero antes tengo que revisar mi presupuesto.”

“¿Eh? ¿Cuál es tu presupuesto?”

“Diez mil yenes. Tengo un poco más en casa, pero eso es todo lo que tengo en mi billetera.”

“Oh. Sí, los libros de ayuda para el estudio son bastante caros. Aunque por supuesto no
puedes quejarte cuando consideras lo que hay en ellos. Bien, entonces tomaré en cuenta la
rentabilidad en relación con los aspectos positivos y negativos. Así que regresemos este
libro... ahí es donde va.”

Hanekawa Tsubasa…

Otra persona que se había involucrado con una excentricidad. Pero tal vez necesitaba que la
ubicaran en una categoría diferente a la mía, a la de Kanbaru e incluso a la de Senjougahara,
la razón es que no tenía ningún recuerdo de lo que ocurrió. Ella había olvidado hasta el
último detalle de esa pesadilla que fue la Semana Dorada, una que rivalizaba incluso con mi
infierno personal de las vacaciones de primavera.

Pero yo me acuerdo.

Para mí, una vampira.

Para Kanbaru, un mono.

Para Senjougahara, un cangrejo.

Y para Hanekawa, un gato.

“Pero.” Dijo Hanekawa bruscamente. “Me hace feliz.”

“… ¿Qué cosa?”

“Cuando me pediste ayuda para elegir libros para estudiar. Me hace sentir como si todos mis
esfuerzos no se desperdiciaran si te tomas la escuela en serio.”

“…………”

No.

Sus esfuerzos no tuvieron mucho que ver con esto.

Ella me obligó a convertirme en vicerepresentante de la clase en un intento de rehabilitación,


por haberme confundido con un delincuente...

Ella podría estar equivocada, o más bien podríamos decir que es como un tren fuera de
control.

“Er, no estoy seguro de si me estoy tomando la escuela en serio.” La disuadí. “Es solo que
debo comenzar a pensar qué hacer después de la graduación.”

“¿Después de la graduación?”

“¿Tal vez debí decir que universidad escoger? Senjougahara y yo hablamos sobre eso el otro
día. Y escuché a qué universidad estaba tratando de ingresar...”

“Ah. Senjougahara-san quería ingresar a la universidad nacional local, ¿verdad? La


admitirán con una recomendación.”

“Lo sabes todo, ¿verdad?”


“No todo. Solo sé lo que sé.”

Como siempre fue el mismo ida y vuelta.

En realidad, Hanekawa se había interesado en Senjougahara antes que yo, así que tal vez,
como representante de la clase, era natural que ella supiera eso. Ahora que lo pienso,
Senjougahara no parecía odiar demasiado a Hanekawa por su excesiva inquietud. Invitar a
Hanekawa a la fiesta de cumpleaños que estaba planeando para Senjougahara probablemente
no invocaría toda su ira.

Pero, tener una novia que podría enojarse por haber planeado una fiesta de cumpleaños para
ella...

“Entonces, Araragi-kun. ¿Estás tratando de ingresar a la misma universidad que ella?”

“No se lo digas todavía, ¿de acuerdo? No quiero hacer que tenga esperanzas de alguna
manera extraña.” Oculté mi vergüenza, o no exactamente, pero aun así, hojeé uno de los
libros a mi alcance. “En realidad, siento que ella me diría algo distante.”

“Que brutal... ¿Ustedes dos no son novio y novia?”

“Bueno, sí, pero. Es como si creyera que las buenas cercas hacen buenos extraños...”

“¿Eh? Oh, ya entiendo. ¿Una broma basada en ‘buenas cercas hacen buenos vecinos’? Ajaja,
eres gracioso, Araragi-kun.”

“¡No vayas explicando las bromas de la gente!”

Y no lo llames broma.

Tampoco me llames gracioso.

“¡Ajaja, Araragi-kun! ¡Debes haberlo pensado desde el momento en que dijiste: ‘Siento que
ella me dirá algo distante’! Era fácil decir que respondería: ‘¿Ustedes dos no son novio y
novia?’ ¡Oh, puedes ser tan elaborado!”

“¡Por favor, deja de desnudar como hablo!”

Me sentí como si estuviera desnudo.

“No es como si tuviera un objetivo específico, pero el otro día me fue mejor de lo que
esperaba en los exámenes. Solo estaba tratando de evitar una calificación reprobatoria... Por
supuesto que palidece en comparación contigo o Senjougahara, pero lo hice todo bien
gracias a que estudié en serio por primera vez en mucho tiempo.”

“Lo olvide, ¿estudiaste con ella personalmente?”

“Sí.”

En caso de que te lo preguntes, Senjougahara obtuvo sin esfuerzo la séptima puntuación más
alta de la clasificación general mientras vigilaba a este fracaso estudiando. Fue
impresionante, o tal vez brillante. Estaba a un nivel en el que mi única reacción posible era la
admiración.

Un hecho más, en caso de que te lo preguntes. Hanekawa Tsubasa obtuvo el puntaje general
más alto.

No hace falta decirlo.

Ella tomó el primer lugar en todas las materias.

Y al parecer todas con una puntuación cercana a la perfecta.

Dejando eso a un lado, aunque mis calificaciones no eran dignas de ser publicadas y
clasificadas en ningún tema aparte de las matemáticas, todavía habían mejorado
dramáticamente en comparación con todos los exámenes que había realizado hasta ese
momento.

Habían mejorado hasta el punto de que estaba empezando a tener una pequeña esperanza.

Ahora era junio.

Así que si me acurruco y estudio durante el próximo medio año…

Fue suficiente para hacerme pensar de esa manera.

“Con Senjougahara dándome tutorías, sentí que entendía cómo estudiar por primera vez en
mucho tiempo... Me recordó cómo se sentía en la escuela media. En algún momento durante
mi primer año me había dado por vencido con ese tipo de cosas.”

“Eh... creo que eso es bueno. Creo que querer ir a la misma universidad que tu novia es un
poco impuro en cuanto a motivos, pero las puertas para la beca están siempre abiertas. Sí, en
ese caso, creo que también haré todo lo que pueda para ayudarte.

“…………”
Ser enseñado por Senjougahara daba miedo, pero que Hanekawa me enseñara también era un
pensamiento bastante aterrador...

No es que le haya dicho eso.

De hecho, no importa cómo lo miré, necesitaba la ayuda de Hanekawa Tsubasa si quería


ingresar a la universidad.

“Entonces.” Le pregunté a ella. “Si puedo tener una buena idea de mi posición, podría
comenzar a ir a una escuela de preparación para los exámenes de ingreso a la universidad
comenzando las vacaciones de verano. ¿Conoces algunas buenas?”

“Hmm. No puedo decir que sí. Aunque nunca he ido a una escuela de preparación o algo
parecido.”

“Ya veo…”

Maldita genio.

“Pero le preguntaré a mis amigos.”

“Realmente sabes cómo cuidar de las personas, ¿lo sabes? Lo aprecio. Por supuesto, aunque
no pueda entrar este año, si planifico mis estudios con el entendimiento de que me tomaré un
año libre. Después de la secundaria, creo que puedo hacerlo.”

“¿Por qué te colocas tan bajo la barra antes de empezar? Si vas a hacer esto, intenta hacerlo
en tu primer intento... ¿Y cuándo estás pensando en contárselo a Senjougahara-san?”

“Una vez más, lo hare en el momento que tenga una buena idea de dónde estoy... ¿Supongo?
Sé que también necesitaré tu ayuda. Parece que la universidad nacional a la que
Senjougahara está tratando de ingresar ofrece varios tipos de exámenes, por lo que podría
elegir un conjunto que se enfoque lo más posible en matemáticas...”

“Tiene sentido.” Hanekawa me entregó otro libro de estudio. “Ok. Estos hacen justo diez mil
yenes.”

“... ¿Qué? Imposible. ¿Encontraste una combinación que cuesta exactamente esa cantidad?
¿Realmente puedes lograr un truco como ese?”

“Es solo una adición, ya sabes.”

“……………”
Era solo una adición, seguro... Pero estos eran en su mayoría números de cuatro dígitos, los
fue calculando mentalmente, mientras mantenía una conversación... Pensé que las
matemáticas eran mi fuerte... Parece que no podía esperar compararme a Hanekawa incluso
cuando se trata de aritmética.

El pensamiento agotó un poco mi motivación, o hizo mella en mí...

Desde el principio me sentí desanimado.

En otras palabras, tendría que pasar medio año devanándome los sesos en medio de un
inmenso complejo de inferioridad hacia Senjougahara Hitagi y Hanekawa Tsubasa...

Bien.

Solo tenía que devanarme los sesos.

“Por cierto, Araragi-kun.”

“¿Por qué esa repentina formalidad?”

“Cuéntame más sobre lo que dijiste antes. Encontraste el cadáver de una serpiente cortada en
cinco en las ruinas de un santuario, ¿qué pasó entonces?”

“¿Eh? Oh, eso.”

Se lo conté después de la escuela cuando nos estábamos preparando para el Festival Cultural.
Solo quise actualizarla sobre Oshino, pero aquello había ocurrido ayer. No pude evitar hablar
de ello dado lo fresco que estaba en mi mente. No entré en detalles porque escuchar sobre las
crueles muertes de animales pequeños solo podía ser desagradable, pero parecía haber
llamado la atención de Hanekawa.

“Nada, en serio. Kanbaru y yo al menos cavamos un agujero para la serpiente y la


enterramos... pero después de vagar por el área, había serpientes muertas por todas partes.”

“Muertas, ¿por todas partes?”

“Sí. Serpientes cortadas por todo el lugar.”

Varias de ellas.

Y luego dejé de contar.

También me rendí de enterrarlas.


Kanbaru se había visto legítimamente enferma.

“Así que terminamos bajando la montaña... Y luego comimos el almuerzo que Kanbaru hizo
en un parque cercano. Me sorprendió lo bueno que era, pero cuando le pregunté, me dijo que
su abuela la ayudó a hacerlo. En realidad, fue al revés. Era más bien como si hubiera
ayudado a su abuela a hacerlo. Cuando le pregunté qué había hecho exactamente, dijo:
‘Tenia los cuchillos listos’, ‘Herví hervir un poco de agua’ y ‘Miré para asegurarme de que
la olla no se desbordara, pero lo hizo’. Querer ser una buena cocinera cuando ya es tan
atlética es un poco codicioso, ¿no?”

“Eso podría ser cierto. Pero es demasiado malo para Kanbaru-san. Ahora mismo ella estaría
justo en medio de un torneo si no fuera por su lesión en el brazo.”

“………”

Correcto.

Estaba manteniendo esa parte en secreto.

Casi sufro un desliz y termino diciéndolo todo.

Las únicas personas en la Secundaria Naoetsu que sabían la verdad detrás del retiro de
Kanbaru Suruga éramos Senjougahara y yo. Nadie se agregaría a esa lista, y eso parecía
perfectamente bien.

Lo gracioso fue que una vez que almorzamos, Kanbaru realmente se sintió mejor. En la
forma típica de un deportista nato, su cuerpo parecía ser excepcionalmente eficiente para
absorber energía.

“Bueno, Araragi-kun... Eso debió ser todo un shock.”

“Sí. Matar serpientes de esa manera parecía un ritual o algo así y me hizo pensar. Me dio
escalofríos, es algo muy desagradable de hacer. Además, el lugar es un santuario
abandonado, ¿sabes? Oh, por cierto, ¿sabías que había un santuario allí?”

“Sí.” Hanekawa asintió enérgicamente, como diciendo, por supuesto que sí. “Santuario Kita-
Shirahebi, ¿verdad?”

“¿Kita-Shirahebi?” Santuario Norte de la Serpiente Blanca…


“Sí, supongo que en ese lugar debieron adorar a un dios serpiente. Sin embargo, no estoy tan
familiarizada con eso. Lo sé porque soy una lugareña.”

“Siento que es precisamente el tipo de lugar que no conoces como lugareño... Además, ya
pareces muy familiarizada con él, pero eh... Matar serpientes en un lugar donde una vez
fueron adoradas... Eso realmente me parece una especie de ritual. ¿Tal vez debería...
informarlo a Oshino?”

Una excentricidad.

Esperaba estar haciendo demasiado de muy poco.

Pero, también había algo sobre Sengoku.

Sengoku Nadeko.

“…………”

... No quería que la conversación fuera en esta dirección.

Hanekawa había olvidado como se involucró con una excentricidad. Ella al menos recuerda
haber sido ayudada por Oshino, pero la parte donde fue encantada por un gato y todo lo
demás que siguió, no lo recuerda, no es la única razón, pero no quiero que Hanekawa tenga
mucho que ver con las excentricidades. No necesita saber lo que pasó con Senjougahara,
Kanbaru o Hachikuji, ni ahora, ni más tarde.

Así es como lo veo.

Porque es una persona genial.

Sin embargo, en este momento mis preocupaciones resultaron ser extrañas.

“Pero sabes, Araragi-kun, no es de eso de lo que quería hablar. Quise decir que tratar con
Kanbaru-san debió ser todo un shock.”

“…………”

Más que un shock.

Parecía que necesitaba estar preocupado por mí mismo.

“Tratar. Con. Kanbaru-san.” Puntualizó sus palabras. “Debió ser todo un shock, estoy
preguntándote si ese fue el caso.”
Ella estaba sonriendo.

Su rostro sonriente daba más miedo que nada...

“O-Oh... Sí, de repente comenzó a sentirse mal. Me pregunté qué podría ser, pero...
afortunadamente no fue nada.”

“No estoy hablando de eso.” Dijo Hanekawa en tono serio. Bueno, ella dijo casi todo en tono
serio, pero esta vez reafirmo sus palabras. “¿No crees que sea un problema ser demasiado
amigable con la kouhai de tu novia? Creo que está bien que seas un poco amigable con ella
ya que fuiste tú quien las ayudó a hacer las paces, pero no deberías dejarla tomar tu brazo, ¿o
si deberías?”

“¿Qué se supone que debo hacer? Ella es una chica amigable.”

“¿Crees que eso pasa como una excusa?”

“Bien...”

No lo hacía, no servía.

No importa cómo lo mires.

“Una parte de mí puede entender.” Dijo. “Supongo que esta debe ser la primera vez que
tienes una kouhai que te admira. Tampoco tenías actividades extraescolares en la escuela
media, solo te ibas directo a casa, ¿no? Es bueno tener una linda kouhai. ¿O podrías
simplemente haber disfrutado de cómo se sintió el pecho de Kanbaru-san? Pervertido.”

“Ngkk...”

Me resultó vagamente difícil discutir.

Estaba equivocada, pero incluso si le dijera eso, no había manera de evitar que sonara como
una mentira.

Hanekawa continuó: “Estoy segura de que Kanbaru-san se siente insegura hasta cierto punto
debido a su retiro, pero ¿no es ahí donde deberías entrar y aclarar las cosas?”

“Uhhm...”

“¿No sería una pena que el Combo Valhalla se separara de ti cuando ayudaste a reunirlas de
nuevo?”
“Si, eso es verdad.”

Mi voluntad sí que es débil.

“En ese sentido.” Observó Hanekawa. “Supongo que Kanbaru-san no tiene mucha
experiencia con los hombres, es una forma extraña de expresarlo, pero tal vez ser tratada
como una estrella durante tanto tiempo la haya privado de ese tipo de oportunidades.”

“Probablemente.”

Además, ella es lesbiana.

Además, ella estaba enamorada de Senjougahara.

Esos también eran secretos.

“Y tampoco pareces ser muy bueno comunicándote sobre esto.” Continuó la representante de
la clase. “Aunque a veces es una excusa válida, no siempre es así.”

“No lo sé. Senjougahara sigue diciéndome que cuide bien a Kanbaru. ‘No pasaré por alto
algún tipo de rudeza hacia mi kouhai’ y ese tipo de cosas. Realmente me pregunto quién
tiene el poder. Por ejemplo, si esto fuese un triángulo amoroso, es un infierno de isósceles.
Incluso suena como que Senjougahara le dijo a Kanbaru que la consintiera.”

Correcto.

Lo que no tenía sentido aquí era la psicología de Senjougahara.

¿En qué demonios estaba pensando ella?

“Bueno, está bien. ¿No podría ser así?” Hanekawa gentilmente alcanzó mi cabeza con ambas
manos. La emparedo y dejo allí sus manos. Mis manos estaban llenas llevando un montón de
libros para estudiar, así que no podía apartar las suyas.

“¿Eh? ¿Espera, qué?”

“Está bien, continuemos.”

Hanekawa usó sus manos para ajustar el ángulo de mi cabeza y la apuntó directamente hacia
su propia cara, la cual miraba hacia arriba, hacia mis ojos, haciendo que nuestros ojos se
encontraran. O eso creía yo, ya que los ojos de Hanekawa estaban cerrados. Detrás de sus
gafas había un par de ojos cerrados, y sus pestañas parecían estar temblando. Sus labios,
estaban juntos, naturalmente parecían transmitir un mensaje:
“¿Eh? ¿Eh? ¿Eh?”

¿Qué estaba pasando aquí?

O mejor dicho, ¿a dónde iba esto?

Hanekawa es la representante de la clase y alguien con quien yo estaba en deuda, tanto


como, no, incluso más que con Oshino...

P-Pero, ¿necesito hacer algo?

Ella me dijo que continuáramos...

Esas gafas se interpondrían un poco, pero... espera.

¿No era el movimiento correcto aquí el no hacer nada?

“... Algo como esto, ¿supongo?”

Sus ojos parpadearon para luego quedar abiertos.

Hanekawa me dejó ir.

Una sonrisa pícara se extendió por su rostro.

“Araragi-kun, ¿estabas a un segundo de distancia?”

“N-No... ¿Qué estás diciendo?”

Lo admito, mi voz estaba obviamente quebrada.

¿Qué estaba diciendo?

“Viste. Eres débil de voluntad, endeble.”

“……….”

Viniendo de otra persona, esas palabras realmente me impresionaron.

No solo eso, no pude negarlo.

No diría un segundo de distancia, pero la verdad era tan innegable que vacilé.

“Eres amable con todos, ¿verdad, Araragi-kun? Creo que cuando Senjougahara-san ve ese
lado tuyo, eso la hace sentirse bastante insegura. Tú eres el único para ella, pero llevándolo
al extremo, es como si tu estuvieras bien con cualquiera.”
“… ¿Insegura?”

¿Ella era una persona tan sentimental?

Entonces, otra vez, para ayudar a deshacerme de esa parte de ella, había actuado como
mediadora entre ella y Kanbaru. Entonces, ¿Senjougahara, a su vez, trató de ayudar a
deshacerse de esa parte de mí? No, no tenía sentido. No vi cómo eso pudiese funcionar.

“Te dejas llevar por la corriente y no quieres herir a la gente. Ser amable suele ser algo
bueno, por supuesto, pero no sirve para la gente que te rodea. Puede que Senjougahara-san
no quiera que te hagas demasiado amigo de Kanbaru-san, ¿sabes? Pero ella nunca podría
decirte que no te hagas amigo de ella y hasta podría terminar diciendo lo contrario, ¿estoy
equivocada? Como si estuviera bien si son amigos, ella quiere que sean amigos, pero de
hecho, quiere que pongas una línea clara... Quizás Senjougahara-san quiere que la elijas
después de haberla comparado con Kanbaru-san.”

“¿Qué demonios? Tus palabras no tienen ningún sentido.”

“¿No crees que Senjougahara-san está en un dilema propio? Eres muy importante para ella
como su novio, y Kanbaru-san es muy importante para ella como su kouhai.”

“Uhh.”

Además, Kanbaru es lesbiana.

Y Senjougahara lo sabe.

Cuando lo tenías en cuenta nuestras relaciones eran bastante complicadas.

“Y Senjougahara-san es tsundere.” Dijo Hanekawa como para terminar la conversación. “No


creo que debas tratar de entender sus acciones de una manera simplista. Necesitas estar
siempre buscando las razones detrás de ellas. Si Senjougahara-san es importante para ti, no
creo que debas dejar que tu corazón vacile por una pequeña tentación. Realmente es un poco
irresponsable ser amable con todos.”

“Sí... No te preocupes, esa parte ya la he internalizado.”

Su ejercicio con fuego real había funcionado.

Sentí que ahora sabía con certeza lo débil que era.

... Aunque me pregunto si concluiría nuestra conversación con: ‘Y ella es una tsundere...’
Espera, entonces Hanekawa sabía lo que esa palabra significaba... Ella realmente lo sabía
todo.

Tal vez incluso estaba empezando a ver a través del subterfugio felino de Senjougahara.

Después de todo, los gatos eran la especialidad de Hanekawa.

“Hablando de eso.” Le pregunté. “¿A qué universidad piensas ir? ¿A la de Tokio, supongo?
¿O los estudiantes que obtienen los mejores puntajes a nivel nacional en exámenes de
práctica como tu terminan yendo al extranjero?”

“¿Eh? No voy a ir a la universidad, ¿de acuerdo?”

“………… ¿Qué?”

¿De dónde vino esa bomba?

Ella honestamente me había tomado por sorpresa.

“¿No vas a... ir a la universidad?”

“No.”

“¿Es un problema de dinero? Pero si estamos hablando de esto, estoy seguro de que puedes
obtener una beca...”

Las universidades estarían luchando para tenerla como estudiante.

Incluso pude ver que le pagaban por asistir a la escuela.

“No es así. De todos modos, no hay nada que me gustaría estudiar en la universidad... Sí,
supongo que podría decirte, Araragi-kun. Voy a hacer un pequeño viaje después de
graduarme.”

“¿U-Un viaje?”

“Quiero pasar viajando más o menos dos años para ver el mundo. Hay muchos lugares del
Patrimonio Mundial que se deben visitar ahora o podrían desaparecer. Hay ocasiones en las
que confío en nada más que conocimiento, por lo que creo que debería salir y experimentar
más cosas. Y si quiero ir a la universidad, puedo hacerlo después, y no será demasiado
tarde.”

“………”
Fue el tipo de idea que flota en tu cabeza cuando estás soñando despierto.

Pero eso no era lo que parecía ser...

Hanekawa no tenía las calificaciones de un estudiante que necesitaba escapar de las duras
realidades de la lucha para entrar en una buena universidad. Se le podía decir que los
exámenes de ingreso eran mañana y no importaba, ella tenía las habilidades para manejarlo
sin pretensiones. Podrías hacerle los exámenes en ese mismo momento y ella probablemente
entraría en cualquier universidad importante de renombre. Así es la persona con la que
estaba tratando, lo que significa que estos planes de viaje de ella deben ser bastante
elaborados, hasta el punto de que no iban a cambiar...

“Por ahora mantenlo en secreto de nuestros maestros y compañeros de clase, ¿de acuerdo?
Creo que podrían sorprenderse si se enteran.”

“Sí... apostaría por ello.”

“Mi plan es mirar y esperar el momento adecuado para mencionarlo.”

“Ya veo... Bueno, tengo la sensación de que no importa cuando lo menciones, habrá un poco
más que una conmoción por la sorpresa.”

Sería un pandemónium total, estaba seguro.

Si el mejor alumno de una escuela preparatoria tomaba ese tipo de decisión, dejando atrás un
precedente, podría incluso afectar el legado de la institución. Hanekawa, alguien en quien
tenían las más grandes expectativas. Ella muy bien tenía que saber todo esto...

“Por favor, no lo digas.” Pidió ella. “A cambio, esta vez, todo lo referido a Kanbaru-san lo
mantendré en secreto de Senjougahara-san.”

“Hey, no siento que haya hecho nada particularmente cuestionable...”

“Y yo tampoco. Pero me entiendes, ¿no?”

“Sí, te entiendo.”

Hmph.

¿Podría Oshino, haberla influenciado?


Hanekawa trató esa piedra rodante con el mayor respeto. Al menos no podías descartar su
influencia. Si ese fuera el caso, se sentía como si Oshino tuviera mucha sangre en sus
manos... Qué bastardo tan entrometido.

Así que... así fue. Estaba convencido de que Hanekawa continuaría siendo una especie de
representante de clase incluso después de graduarse de la escuela secundaria, puede que los
dioses hayan decidido que su destino era ser representante de su clase, pero si ella se iba a ir
de viaje no sería una representante de clase ni nada por el estilo.

Me sentí como suspirando.

Las cosas nunca salieron bien.

Yo, un fracasado, estaba decidiendo tan tarde en el juego que trataría de ir a la universidad.

Hanekawa Tsubasa, una estudiante modelo, aspiraba a convertirse en una forastera.

Kanbaru Suruga se había retirado del equipo de baloncesto.

Hachikuji Mayoi tampoco podía volver a ser como antes.

La única que pudo volver fue...

Senjougahara Hitagi.

“... ¡Ow!”

De repente Hanekawa colocó su mano derecha contra su cabeza.

Como si quisiera apoyarla.

“¿Hrn? ¿Qué pasa?” Pregunté.

“No, es sólo que... tengo un dolor de cabeza.”

“¿Un dolor de cabeza?”

Recordé cómo Kanbaru había empezado a sentirse mal el día anterior en el santuario, y al
instante comencé a inquietarme. Pero Hanekawa pronto levantó la cabeza.

“Oh, estoy bien, estoy bien. Pasan de vez en cuando, comencé a sentirlos hace un tiempo. Mi
cabeza comienza a doler de la nada.”

“Whoa, espera... Eso no suena nada bien.”


“Hmm. Pero mejoro de inmediato. No sé cuál es la causa, aunque... Tal vez sea porque
últimamente he estado tan ocupada preparando el Festival Cultural que me relaje con mis
estudios.”

“¿Tienes dolores de cabeza cuando dejas de estudiar?”

¿Exactamente cómo funciona su cuerpo?

¿Llevaba un anillo en la cabeza como Mono en Viaje al Oeste?

Ella merecía estar en el salón de la fama de la diligencia.

Hasta su médula.

“¿Quieres que te acompañe a casa?” Le ofrecí.

“No, está bien. Mi casa…”

“Correcto.”

Que torpeza.

No debí de decir eso.

“Lo siento, voy a regresar.” Anunció. “Quédate aquí un poco más y escoge libros que te
ayuden en tus estudios. Los que te di son mis sugerencias, pero las preferencias personales
terminan jugando un gran papel en ese tipo de cosas.”

“Ok, nos vemos...”

“Sip.”

Con eso, Hanekawa salió de la librería como si estuviera huyendo.

Tal vez debería haberla acompañado hasta que estuviera en el área cercana a su casa, pero
era bastante obstinada, o más bien, no le gustaba la idea de mostrar debilidad a los demás.
Como ella dijo que estaba bien, no debería ser un entrometido.

Pero.

Un dolor de cabeza...

Me hizo preguntarme un poco.

Para Hanekawa, un dolor de cabeza significaba...


“…………….”

Hanekawa no sabe nada sobre el cangrejo de Senjougahara, el caracol de Hachikuji, el mono


de Kanbaru, ni nada sobre su propio gato, respecto a esto...

Pero sabía de mi vampiro.

No es que significara algo.

Pero nada podría cambiar el hecho de que tenía una deuda de gratitud con Hanekawa. No fue
simplemente por mi excentricidad, no podía comenzar a decirle con cuánta frecuencia sus
palabras me habían salvado.

Como hoy.

Por eso siempre quise ayudarla de alguna manera...

Suspire.

Me hubiera encantado ser un entrometido.

“... También podría revisar algunas de las otras secciones.”

Aunque atendí el consejo de Hanekawa y continué hojeando los libros de texto, simplemente
no estaba acostumbrado, y todos me parecían iguales. Decidí seguir adelante y comprar los
que ella había escogido (terminaron siendo seis libros en total. Me tomé el tiempo de sumar
los precios, que llegaron a diez mil yenes. Wow) y deje la sección de libros de textos para
estudiar. Estaba justo dentro de mi presupuesto, así que no podía comprar nada más, pero lo
bueno de los libros es que no cuesta nada leerlos. Me vería estúpido revisando el último
manga con mis manos llenas de libros para estudiar, pero por otro lado, me sentí más
inteligente simplemente llevándolos, así que tal vez pasar tiempo acá no fue una idea tan
mala... En realidad, ya estaba pensando que era estúpido...

Aunque todavía no tenía un destino, decidí comenzar a moverme, cuando me quedé inmóvil.
Habiendo visto algo imposible, no pude evitarlo, casi dejé caer todos los libros que llevaba.

No.

No era exactamente imposible.

Las posibilidades de que dos personas que viven en la misma ciudad se encuentren en la
librería más grande de la ciudad no pueden ser particularmente bajas; al menos, era mucho
más probable que pasar uno por al lado del otro en un camino que fácilmente se podía pasar
por alto, en las escaleras que conducían a un santuario abandonado.

E incluso si la probabilidad de eso no fuera cero.

Entonces, si ocurrió en días consecutivos.

No era un misterio.

“... Sengoku.”

Delante de los estantes de hechicería y ocultismo, situados justo al lado de la sección de


ayuda al estudio, y leyendo un libro grueso, estaba Sengoku Nadeko, la vieja amiga de mi
hermana pequeña, Sengoku Nadeko.

Estaba totalmente concentrada en leer el libro, por lo que no se había fijado en mí. No es
como si pudiera pasar directamente frente a ella, así que solo pude verla de perfil, pero...
Pude ver que era ella. Sengoku, que venía a mi casa a jugar cuando ella estaba en la escuela
primaria... o que había sido traída a mi casa para jugar. Era un nombre inusual, Sengoku
Nadeko, así que lo recordaba por completo. Especialmente el nombre “Nadeko”. Cualquier
otra persona cuyo nombre estuviera escrito con esos caracteres se llamaría “Nadeshiko”, e
incluso cuando era un niño de escuela primaria, me preguntaba dónde había ido esa sílaba...

Ella tenía la misma edad que mi hermana menor.

Eso significaba que ahora ella estaba en el segundo año de la escuela media.

No podía decir porque no llevaba puesto su uniforme, pero probablemente iba a la escuela
media pública de la que me había graduado. Pocos chicos en todo el lugar donde vivía
eligieron ir a una escuela privada como lo hicieron mis hermanas pequeñas.

“………”

Me acordé de Sengoku.

¿Pero ella se acuerda de mí?

Pareció sorprendida cuando nos cruzamos el día anterior, pero eso podría haber sido solo la
vista de otras personas además de ella escalando esa montaña. Normalmente el hermano
mayor de tu amiga no es el tipo de persona que recuerdas... lo que haría extraño decirle algo
a ella.
Pero.

Serpientes

Sí, serpientes...

Mientras pensaba, Sengoku devolvió el libro que estaba leyendo a su estante y comenzó a
caminar. Me escondí rápidamente para no ser visto.

No había ninguna razón en particular para que me escondiera y solo lo había hecho de
manera reflexiva, pero perdí cualquier posibilidad de poder haberla llamado. Tomé un
desvío, usando las estanterías de libros como paredes, me aseguré de que se hubiera ido, y
me dirigí a donde había estado parada hasta hace unos momentos.

Quería saber qué libro había estado leyendo.

Miré su título.

“Espera... Esto es…”

El libro era de tapa dura con un valor de doce mil yenes.

No es un libro que un estudiante de escuela media pueda comprar. Incluso un chico de


secundaria como yo no podía comprarlo con el dinero en efectivo que tenía disponible. No
podría comprar ninguna de los libros para estudiar.

Esa debió ser la razón por la que se contentó con leerlo en los pasillos.

Pero, más que eso.

El tema era el título del libro.

Salí de la sección en la parte trasera de la tienda para buscar a Sengoku, pero ella ya no
estaba en ninguna parte. Tal vez se estaba escondiendo en algún lugar de otra sección, pero
parecía más probable que hubiera salido de la tienda. Y esa ropa que llevaba puesta...

Mangas largas, pantalones largos.

Un sombrero tirado hacia abajo sobre su cabeza y una bolsa alrededor de su cintura. Si mi
intuición era correcta... entonces sí.

“Maldita sea... Dame un respiro.”


Por el momento decidí ir a la caja registradora y pagar. Había una larga fila de compradores
esperándome, pero me resistí. Nada bueno podría venir de ponerse nervioso y apresurarse.
Necesitaba empezar por calmarme. Aun sin saber qué hacer, coloqué un billete de diez mil
yenes en la bandeja del cajero. El empleado parecía sorprendido de que mi total diera justo
diez mil yenes, pero ¿qué me importaba? El honor no me pertenecía.

Hmm.

Era una vieja conocida... pero no podía hacer demasiado.

No hay mucho que puedas hacer por tu cuenta.

Tenía que buscar la ayuda de alguien... y las circunstancias me llevaron a una sola persona.
Alguien que podría ser particularmente adecuada para este caso. Hanekawa me acaba de
advertir, pero no pude evitarlo.

Con una bolsa llena de libros para estudiar en la mano izquierda, saqué mi teléfono celular
en cuanto salí de la tienda y llamé al número que había guardado después de que
termináramos nuestros asuntos el día anterior. Nuevamente recordé lo nervioso que me
sentía al llamar a un nuevo número por primera vez, como hace dos días cuando llamé a su
casa.

El teléfono sonó unas cinco veces.

“Esta es Kanbaru Suruga.”

Tan pronto como se conectó, ella respondió con su nombre completo. El acto extrañamente
raro me sorprendió un poco.

“Kanbaru Suruga. Mi movimiento especial es el doble salto.”

“Mentirosa. Ningún humano puede hacer eso.”

“¿Hm? A juzgar por esa voz y la broma, diría que es mi querido Araragi-senpai.”

“Tienes razón, pero...”

¿Esa voz y la broma? ¿Así es como ella supo quién era?

También le había dado mi número el día anterior. ¿No lo había puesto ella en su lista de
contactos? Ahora, eso fue triste... Bueno, no importa, ella no había dominado el uso de un
teléfono celular. Ella no parecía demasiado buena con la tecnología.
“Si tienes algo de tiempo, Kanbaru, hay algo en lo que quiero que me ayudes... ¿Qué estás
haciendo ahora?”

“Jeje.” Por alguna razón Kanbaru se rio audazmente. “Ya sea que tenga tiempo o no, iré a
cualquier lugar que me pidas, no importa qué tan lejos este. Ni siquiera necesito una razón,
solo dame tu ubicación y estaré allí de inmediato.”

“No, dejando todo eso a un lado... Si no tienes tiempo, no necesitas forzarte. Ayer te arrastré
a ir conmigo, así que ya me siento mal. ¿Dónde estás y qué haces?”

“Umm... si debes saber, bueno...”

“Esa es una respuesta bastante poco entusiasta. ¿Así que estás ocupada? En ese caso...”

“No, eh... sí.” Dijo Kanbaru como si se hubiera decidido. “No puedo tener secretos contigo.
Ahora mismo estoy en mi cuarto en mi casa leyendo libros sucios y teniendo fantasías
sucias.”

No debí de ser sido tan insistente.

Me sentí como un acosador sexual.

“Oh, pero no me malinterpretes.” Advirtió ella. “Podrían ser libros sucios, pero todo es BL.”

“¡Por favor, ¿por qué al menos no me dejas malentender esa parte?!”

“Hoy salieron nuevos lanzamientos, e incluyendo los que no pude leer porque estábamos en
medio de los exámenes, conseguí unos veinte.”

“Huh... ¿No deberías reducir un poco tus selecciones?”

“Tsk, tsk, tsk. Deberías saber que amo todas las parejas bajo el sol.”

“¡Cállate!”

Así que Kanbaru había estado en esta misma librería después de la escuela... Probablemente
era la única en el vecindario lo suficientemente grande como para tener un rincón dedicado
al BL. Pero eso significaba que nuestra ciudad era realmente pequeña... Si mi vida fuera un
simulador de citas, todo el tiempo aparecerían nuevas banderas.

“En otras palabras, no estás ocupada.”


“Supongo que no podría discutir si lo pones de esa manera. Pensar en cómo trabajarías junto
con Oshino-san no me genera nada.”

“¿¡Eso es lo que querías decir con ‘fantasías sucias’!?”

“Entonces, ¿a dónde necesitas que vaya?”

“No cambies el tema, no, espera, no nos pongas de nuevo en el tema. Será mejor que me
digas, Kanbaru, ¿¡quién está arriba y quién está abajo!? ¡Nunca te perdonaré si dices que
estoy abajo!”

Fue una conversación estúpida.

Hablar con ella siempre es así.

“Hay que ver, Kanbaru. Sería bueno tener una conversación inteligente contigo algún día. Se
supone que eres muy inteligente, ¿verdad?”

“Sí. Definitivamente mis calificaciones son buenas.”

“Por la forma en que dijiste eso...”

De todos modos, dije.

Incluso mientras nos entreteníamos con nuestra conversación idiota, Sengoku se estaba
alejando cada vez más de la tienda... Bueno, ella podría ir tan lejos como quisiera, sabía
dónde terminaría.

Ella estaba en ropa de calle.

Su sentido de la moda no era refinado, pero ese no era el punto.

El punto era sus mangas largas y pantalones largos.

Como si estuviera a punto de dirigirse a las montañas.

“El santuario al que fuimos ayer.” Le dije. “Nos encontraremos en la acera junto a las
escaleras que suben hasta allí. En cuanto a la ubicación, debes estar más cerca, pero yo
debería llegar primero, ya que estoy en bicicleta. Te esperaré allí.”

“¿En serio? ¿Crees que voy a hacer que me esperes dos días seguidos? Tu fe en mí debe
estar en el fondo. Tengo mi orgullo y no voy a dejar que un comentario como ese pase
desapercibido. Aprovecharé esta oportunidad para limpiar mi nombre y recuperar mi honor.
Absolutamente llegaré primero.”

“Ni siquiera sé cómo responder a tu extraño sentido del orgullo... pero de cualquier manera,
ve tan pronto como puedas. Ah, y no lo olvides. Mangas largas y pantalones largos.”

Estaba volviendo de la escuela, así que aún llevaba mi uniforme. Acabábamos de cambiar a
nuestro uniforme de verano, lo que significaba que llevaba puesta una camisa de manga
corta, pero no había nada que pudiera hacer al respecto. Los pantalones que llevo son
suficientes. De todos modos una mordedura de insecto o de serpiente no sería un gran
problema para mí, debido, una vez más, a los “efectos residuales” de mi tiempo como
vampiro.

“Está bien. Tu deseo es mi orden.”

“Está bien, nos vemos.” Dije y colgué, dando vueltas detrás de la librería hasta el
estacionamiento de bicicletas y liberando mi bicicleta. Más de diez minutos habían pasado
desde que Sengoku salió de la tienda... No sabía cómo iba a llegar, pero el día anterior no
llegue a ver ninguna bicicleta que pudiera ser suya cerca de donde empezaban las escaleras.
Lo más probable es que caminara... Bueno, de cualquier manera, si se dirigía a ese santuario,
yo no la alcanzaría.

Ahora que lo pienso, Kanbaru realmente no me preguntó por qué la estaba llamando...

Qué aterradoramente leal.

Senjougahara era obviamente mi superior en la cadena de mando de Kanbaru, pero alguien


tan superior como Kanbaru Suruga me sirvió con tanta asiduidad, para ser sincero, estoy más
asustado que feliz...

Sin embargo, no parecía haber ninguna manera de arruinar su imagen de mí, lo que en
realidad me hizo querer comenzar a actuar como su senpai ideal a su alrededor y no
traicionar sus expectativas exageradas.

Bueno, no parecía algo malo.

“Me pregunto cómo era Senjougahara.”

En la escuela media, durante la fase de luna de miel del Combo Valhalla, ¿cómo había sido
su relación?
Mientras pensaba eso, llegué a mi destino.

La entrada al santuario en la montaña sin nombre.

Llegué rápido. Eso es una bicicleta para ti.

O eso creía yo, pero Kanbaru ya estaba allí.

“…………”

¿Había ruedas en sus pies o algo así?

Había un límite para ser de pies ligeros... Puede que no tenga problemas para pasar al lado de
motocicleta normal y hacerla morder el polvo. Dudaba de que el automóvil se hubiera
inventado si toda la humanidad hubiera podido correr tan rápido como ella. Si se preparó
para irse justo después de que colgué... Bueno, no, se había puesto mangas largas y
pantalones largos como le había dicho (además, habiendo aprendido del día anterior, llevaba
pantalones sin rasgar y no se le veía el ombligo)....

“Uh-uh.” Dijo. “No me tomó mucho tiempo ponerme esta ropa. En verano, en mi casa
siempre estoy ropa interior.”

“Kanbaru... lo digo por pura preocupación, pero sabes que no puedo garantizarte tu castidad
si sigues avivando las llamas de mis deseos terrenales.”

“Estoy preparada para eso.”

“Bueno, yo no lo estoy, ¿de acuerdo?”

“Confío en tu sentido de la razón.”

“No confío en mí mismo.”

“¿En serio? Me sorprende escuchar eso, ¿Encuentras moe a chicas que solo usan ropa
interior cuando están en casa?”

“¡Ni aunque estuvieras vestida con orejas de gato y un traje de criada te encontraría moe!”

“Ya veo. Entonces, si lo cambiamos, siempre y cuando no sea yo, ¿las orejas de gato y el
traje de criada funcionan para ti?”

“¡Ack, fue una pregunta trampa!”

Decidí seguir adelante y al menos aparcar mi bicicleta.


Aunque me sentí algo culpable por estacionarla ilegalmente, no sería por mucho tiempo.
Rogaría el perdón de la ley. Si fuera confiscada, me resignaría a mi destino. Los mendigos
no podían elegir.

“Incluso teniendo eso en cuenta.” Comenté. “Realmente eres rápida... Probablemente podrías
llegar a los Juegos Olímpicos o algo así si realmente lo intentas.”

“No puedes ir a los Juegos Olímpicos solo porque eres rápido... Y de todos modos no estoy
preparada para competiciones de atletismo.”

“Oh, supongo que no.”

Senjougahara estuvo en el equipo de atletismo en la escuela media, y se conocieron cuando


Senjougahara se enteró de que el As de baloncesto era rápida y fue a ver a Kanbaru, o algo
parecido.

“Desde mi punto de vista.” Dije. “Tu velocidad ni siquiera parece humana.”

“Hm. Si no es humana, ¿eso me haría... un anfibio?”

“¡Intenta nombrar a un anfibio que corra rápido!”

“Me atrapaste.”

“Quiero decir, ¿qué puedes ganar si te comparas con un anfibio?”

“No se trata de ganar. Si me llamas así, me presentaré como tal con gran alegría.”

“Uh oh, ¿‘gran alegría’?”

“¡Date prisa y por favor llámame tu ‘humilde y sucia mascota’!”

“Hay dos cosas igualmente importantes que tengo que decir al respecto, y aunque
normalmente te ignoraría porque sería difícil no tropezar con mis palabras en el camino, ¡me
gustas tanto, Kanbaru, que voy a seguir adelante y señalártelo de todas formas! En primer
lugar, yo no mantendría a un anfibio como mascota, y en segundo lugar, tu gran alegría ya
no tiene nada que ver con los anfibios.”

Si tienes curiosidad, pensé en un guepardo.

Por supuesto, tampoco son animales que podrías tener como mascotas.

Agh, y hasta le admití que me gustaba mucho.


Yep, el sentimiento era mutuo.

“Por favor, no seas tan frío y solo dilo.” Suplicó Kanbaru. “¡Una mascota humilde y sucia!
Tienes que probarlo solo una vez. Estoy segura de que lo entenderás si lo haces.”

“¿¡Por qué estás actuando de una manera tan desesperada!?”

“Urk... ¿Por qué nadie lo entiende? Ella también me dijo que no...”

“¿Incluso Senjougahara no quiso?”

Bueno, es obvio.

Por supuesto que ella no querría.

Decirlo era una cosa, ¿pero en verdad Kanbaru sentiría una gran alegría?

“Entonces, ¿qué necesito hacer?” Ella me preguntó.

“Oh, cierto. Este no es el momento de divertirnos con una pequeña charla.”

“¿Necesitas que me desnude?”

“¿¡Por qué están tan ansiosa por quitarte la ropa!?”

“Si tienes que quitármelas, no tengo problemas con ello.”

“¡No estamos hablando de quién debería realizar la acción! ¿¡Qué eres, la personificación de
mis fantasías de la escuela media!?”

“Soy alguien que siempre trata de ser sexy y alegre.”

“No me importa tu credo...”

“Está bien, entonces déjame ponerlo de esta manera. Soy un hada que siempre intenta ser
erótica y alegre.”

“¡Oh, Dios mío! Todo lo que hiciste fue cambiar ‘sexy’ a ‘erotismo’ y ‘alguien’ a ‘hada’ y
has convertido lo que decías en algo sublime... ¡Imposible!”

¿Qué se necesitaría para enseñar a esta mujer que los hombres también podrían ser acosados
sexualmente? Parecía un problema que necesitaba abordar.
“Entonces, ¿qué quieres que haga?” Se quejó ella. “Solo dilo, no te detengas. No soy una
persona refinada, así que la sutileza no funciona conmigo. Cada vez que la gente intenta
hacer un rodeo, es exaspe... Exasp... Exasp...”

“¿¡Tienes alguna idea de lo exasperante que estás siendo!?”

“Lo siento, estoy empezando a quedarme atontada.”

“¡Sí, y tú también me estás atontando!”

“Entonces, ¿qué tengo que hacer?”

“Oh, bueno, estoy bastante seguro de que allá arriba.” Señalé las escaleras. “Hay alguien que
conozco.”

“¿Hmm?”

“¿Recuerdas a esa chica que pasó junto a nosotros cuando estábamos subiendo las escaleras
el día de ayer?”

“Sí. Era pequeña y linda.”

“No sé si recordarla de esa manera...”

“Para expresarlo como tú lo harías, ella era una chica con caderas ‘bonitas’.”

“¡Yo no diría eso!”

Bueno, lo que sea.

Después de todo ella es lesbiana.

Fue una conversación más suave que si no la recordara en absoluto.

“Pensé que la había visto en algún lugar... pero lo recordé más tarde. Aunque ayer no estaba
cien por ciento seguro, después de haberla visto hoy en la librería, lo supe con seguridad. Es
una vieja amiga de mi hermana menor.”

“¿En serio, ahora?” Kanbaru parecía sorprendida. “Qué coincidencia... estoy sorprendida.”

“Mm-hm. También me sorprendió.”

“Mm-hm. No me había sorprendido tanto desde que me levanté esta mañana y vi que mi
reloj despertador se había detenido.”
“¡Eso es muy reciente! ¡Y eso no es una gran sorpresa! ¡Es una ocurrencia demasiado
común!”

“Hmm. Bien, entonces permíteme corregirme. Uh, no me he sorprendido tanto desde la


explosión del Cámbrico.”

“¡Ahora exageraste demasiado, y esto no es tan increíble! ¡No compares el evento más
grande en la historia de la Tierra con una coincidencia como encontrarte con un viejo
conocido en un pueblo pequeño! ¡Después de todo, ahora que realmente lo pienso, incluso
estoy empezando a sentir como si no fuera una gran sorpresa!”

“Puedes ser tan exigente. Entonces, ¿estás diciendo que esa chica vuelve a estar aquí hoy?”

“Correcto. Probablemente.”

A juzgar por su reacción, ni siquiera los rápidos pies de Kanbaru habían conseguido llevarla
a las escaleras antes que Sengoku. Por supuesto, aunque podía estar seguro de que Sengoku
había llegado directamente a donde estábamos después de salir de la librería, en última
instancia sólo era una suposición mía. Si no estuviera en lo correcto, y no estuviese aquí, ese
sería el mejor resultado de todos.

Pero, el libro que Sengoku estaba leyendo en la librería.

Ese era el problema.

“¿El libro que estaba leyendo?” Preguntó Kanbaru.

“Sí. Bueno, puedo contarte más sobre eso más tarde. De todos modos, sobre lo que quería
preguntarte; es posible que haya conocido a esta chica en el pasado, pero aún me resulta
incómodo hablar con ella. En realidad, ni siquiera sé si me recuerda, y podría parecer que
estoy usando una excusa extraña para acercármele, los instintos defensivos de una chica
recién pubescente pueden ser algo aterradores.”

“Dices eso como si hablaras por experiencia.”

“Bueno, no voy a negar eso.”

Todo tipo de personas me han dicho que soy amable con todos, pero había un precio; a causa
de eso había pasado por algunas malas experiencias. No es que sintiera que mis esfuerzos
fueran en vano, pero no se sintió bien cuando terminé sin poder ayudar a alguien que de otra
manera podría haber funcionado.
“En ese sentido, Kanbaru. Debes ser buena con las chicas más jóvenes que tú. Después de
todo, eres la estrella más grande en nuestra escuela.”

“Eso ya no es cierto, y siento que nunca lo fui, pero veo a lo que te refieres. Eres un
excelente juez de personas. Realmente soy buena con chicas más jóvenes que yo.”

“Lo pensé mucho. Sabía que eras la persona adecuada a la que acudir.”

Aunque no estaba al nivel de Hanekawa, Kanbaru parecía saber cuidar de los demás. Ella
había sido la capitana de su equipo tanto en la escuela media como en la secundaria.

En ese sentido ella es completamente opuesta a como Senjougahara es ahora... o tal vez
debería decir que Kanbaru sucedió a Senjougahara en la secundaria.

“Para ser específica, cuenta conmigo.” Se jactó Kanbaru. “Puedo seducir a cualquier chica
más joven que yo en diez segundos, eso es lo máximo que me toma.”

“¡Traerte aquí fue el error más grande de mi vida!”

¡No necesitaba ese tipo de ayuda!

¡No estaba aquí para arruinar la vida de una chica!

“No me digas que viste al equipo de baloncesto como nada más que un harén personal...”

“Yo no iría tan lejos.”

“¿¡Qué tan lejos irías!?”

“Me gustaría quitar el ‘nada más que’.”

“¡Eso apenas cambia algo!”

“¿Hm? Entonces ella es la amiga de tu hermana más joven... Lo que significa que tienes una
hermana pequeña...”

“De hecho, tengo esa y otra, es decir dos...”

“¡……………!”

¡Oh, no!

¡Ahora la lesbiana sabe de mis hermanitas!

“Jejejeje... Ya veo, tus hermanitas... Je, je, je, je, je, je, je. ¿Me pregunto si son como tu...?”
“No tengas pensamientos raros... y cielos, ¿¡qué es esa horrible sonrisa que dudo que haya
visto antes!? ¿¡Esa es una sonrisa que deberías estar dirigiéndome, el objeto de esa devoción
desinteresada de la que tanto te enorgulleces!?”

Si tienes curiosidad.

Ellas se parecen a mí. Ambas.

“Oh, por favor.” Se burló Kanbaru. “Nunca pondría un dedo sobre tus hermanas pequeñas.
Sí, seducir a una chica más joven que yo puede ser más fácil que respirar para mí, pero no
hay razón para que yo haga algo así con tus hermanas, siempre y cuando seamos cercanos.”

“Maldita seas, eso es una amenaza, y una muy obvia...”

“¿Una amenaza? Dios mío, qué acusación más mordaz. Tales palabras chocantes de un
venerado senpai podrían hacer que una persona nerviosa como yo entrara en pánico y,
bueno, ¿quién sabe lo que podría hacer? ¿No crees que hay algo más que deberías decirme
ahora mismo?”

“G-Gah...”

Estaba sucediendo...

¡Ella estaba absolutamente influenciada por la Senjougahara actual!

La definición misma de una mala influencia.

“Ah, creo que mi pecho se siente un poco rígido por correr hasta acá. Me pregunto si podría
encontrar a alguien que me dé un masaje.”

“¿¡Porque siento que este trato no me dejara vivir por mucho tiempo!?”

“Bromas aparte.” Dijo Kanbaru, cambiando a un tono serio. “Por supuesto que no dudaría en
ayudar ya que me lo estás pidiendo, pero estás tomando en cuenta lo que sucedió ayer, ¿no
es así?”

“Bueno, sí.”

“Así que es eso.”

“… Sí.”
“Cielos.” Kanbaru se encogió de hombros, como si ella no tuviera otra opción. Ella levantó
su vendado brazo izquierdo para rascarse la cabeza, antes de detenerse y hacerlo con la mano
derecha. “Eres amable con todos, eso es lo que me dijo, y parece que es verdad. Claro, lo
aprendí bastante bien mientras te acosaba, pero ahora que lo veo en persona tengo una
impresión diferente.”

“Kanbaru...”

“Se siente tan inútil estar en deuda contigo, así es como ella lo expresó.”

“…………”

“Está bien. Estoy hablando sola. No, estoy hablando fuera de lugar. Está bien, vamos. Si no
nos damos prisa, esta chica podría terminar lo que vino a hacer.”

Lo que vino a hacer.

Lo que vino a hacer en un santuario abandonado.

“Si, tienes razón.”

Lado a lado, los dos subimos el primer escalón de las mismas escaleras que subimos el día
anterior.

Hoy, Kanbaru no estaba sosteniendo mi mano.

“Hey, Kanbaru.”

“¿Qué ocurre?”

“¿Tienes algún plan para después de graduarte?”

“Después de graduarme. Antes de que mi brazo terminase en este estado, pensé en asistir a la
universidad con una beca deportiva, pero eso no va a suceder. Mi plan es tomar los
exámenes de ingreso e inscribirme de forma justa y equitativa en una universidad.”

“Ya veo.”

Si bien su brazo izquierdo se curaría, no lo haría hasta que ella cumpliera veinte años. Ahora
tiene diecisiete, esos tres años tenían que parecer largos y sombríos para Kanbaru.

“No me decidí por un universidad en específico.” Dijo. “Pero me gustaría ir a una con un
fuerte programa de baloncesto, así que supongo que una especializada en educación física.”
“¿No estás pensando en ir a la misma universidad que Senjougahara?”

“¿Qué, eso es lo que estás planeando?”

“En realidad, sí.”

Pero mantenlo en secreto de Senjougahara, dije.

Sí, Kanbaru asintió.

Cuando se trataba de atender mis deseos, ella es mi linda kouhai. Odiaba admitirlo, pero
Hanekawa tenía razón sobre esto... Sólo por tener una linda kouhai me sentía feliz.

“Con tus calificaciones.” Pregunté. “¿No podrías intentar perseguir a Senjougahara?”

“No sé sobre eso. Soy una luchadora, lo que también significa que mis puntuaciones actuales
ya son lo mejor que puedo hacer.”

“Ah, cierto. Pero…”

“También.” Agregó Kanbaru. “¿Qué pasaría si me dedicara todo el tiempo a seguir sus
pasos?”

“……….”

Eso parecía, como un cambio real en su mentalidad.

El decir esas cosas no era como Kanbaru... o tal vez la había juzgado mal y la había
subestimado en este punto. Sin embargo, ¿no estaba la mujer que conocí hace un mes
dedicada a seguir los pasos de Senjougahara?

¿Cambió algo?

¿Gracias a la excentricidad?

Excentricidades, no fueron todas malas.

Buenas o malas, para empezar, esa no era la pregunta.

“Bueno, digo eso.” Continuó Kanbaru. “Pero no importa qué camino escoja, me gustaría
seguir involucrándome contigo y con ella incluso después de que nos graduemos. Sería
bueno si los tres pudiéramos reunirnos y tomarnos una foto conmemorativa para el episodio
final.”
“El episodio final…”

“O tal vez mirar hacia el cielo crepuscular para verlos a ustedes dos reflejados allí en el
episodio final...”

“¿Acabas de matarnos a Senjougahara y a mí?”

Qué final tan horrible.

Sonaba como una historia de mierda.

“Así que, hay una chica llamada Hanekawa en mi clase.

“Hm.”

“¿La conoces?”

“No, no soy consciente de ella.”

“Supongo que porque están en años diferentes... Pero ella es famosa entre nosotros. Después
de todo ella tiene las mejores calificaciones de todo nuestro año. Ella no ha dejado su asiento
en la parte superior ni una sola vez desde que comenzó en nuestra escuela y es la imagen de
una estudiante modelo. Suena como un personaje de broma o algo así, ¿no? El otro día
escuché que en un examen de práctica ella no solo fue la mejor de la escuela, sino también la
mejor de todo el país. Estoy bastante seguro de que ella fue a la misma escuela media que tú
y Senjougahara.”

“Es así. Hay algunas personas increíbles por ahí...”

“Pero esa persona increíble dice que no irá a la universidad.”

“... Eso es así.”

“Quiere ir en un viaje porque hay muchas cosas que quiere ver. Ni siquiera sé qué hacer con
eso, pero me hizo pensar, ¿sabes? Oh, y supongo que esto también necesita permanecer en
secreto. Sería un gran problema si la escuela se enterara.”

“Entiendo... Pero sí, te hace pensar. Podrías decir que la Secundaria Naoetsu, por ser lo que
es, ni siquiera ofrece caminos aparte de la universidad, por lo que dirigirte a un camino
desconocido y sin reparos es algo que podría ocurrir.”

“Si ese es el caso, o no, no lo sé. Pero sonaba como si ella hubiera tomado una decisión.”
Probablemente fue porque ya conocíamos el camino, habiéndolo tomado una vez; pero
Kanbaru y yo subimos las escaleras y llegamos al santuario antes de lo que nos tomó el día
anterior.

No hace falta decirlo, pero el santuario estaba tan desolado como ayer.

En la distancia, pude ver el talismán que había colocado en la sala principal del santuario. Mi
vista mejoró después de que el sábado dejara a Shinobu beber mi sangre, y pude ver todo,
hasta los caracteres individuales escritos con un pincel en tinta roja.

Fue la única diferencia de ayer.

“………”

Eché un vistazo y Kanbaru estaba pálida. Hace unos momentos no lo estaba, habíamos
mantenido una conversación regular, pero ahora estaba visiblemente cansada.

Eso también fue igual que ayer.

No, ella se veía peor.

No fue por subir las escaleras.

Ella no se sentía enferma. Ocurrió en el momento en que entramos en el terreno, en el


momento en que pasamos por el torii.

“... Hey, Kanbaru.”

“Estoy bien. Vamos, apresúrate.”

A pesar de su estado, Kanbaru respondió con firmeza, animándome a seguir adelante y no


quedarme sin hacer nada. Ella obviamente se estaba obligando a seguir avanzar. Comencé a
decir algo pero terminé haciendo lo que ella decía. En este momento, nuestra principal
prioridad era atender el asunto que nos trajo hasta acá.

Este santuario.

Tenía algo.

Un algo que ensuciaba el cuerpo de Kanbaru.

Originalmente, era un trabajo de Oshino.

Y Oshino, nunca nos daría un trabajo simple.


“... ¡Sengoku!”

Tan pronto como vi a una chica (mangas largas, pantalones largos, gorra tirada hacia abajo,
con una bolsa alrededor de su cintura) agachada frente a una gran roca en el campo, mi
reacción fue gritar su nombre. Hice tanto para traer a Kanbaru hasta aquí.

Pero no pude evitar gritar.

En la mano izquierda de Sengoku, con los dedos apretados alrededor del cuello, era una
serpiente.

En la mano derecha de Sengoku, un cincel.

Presionado contra la roca...

La serpiente seguía viva.

Sin embargo…

Estaba a punto de morir en cualquier momento.

“¡Basta, Sengoku!”

“Ah...”

Sengoku, me miró.

Usando el cincel para empujar el borde de su gorra, usada para esconder sus ojos, miro hacia
atrás.

Sengoku Nadeko, lentamente me miró.

“Koyomi-onii-chan...”

Tú.

Aún me llamas así...

El pensamiento me pasaba por la cabeza como si fuera un héroe oscuro que una vez caminó
por la línea hasta que un lapsus de juicio lo descarriló, quien, después de haber luchado a
través de pruebas y dificultades que no se relatan ni se sostienen sin lágrimas, se sentó entre
los más altos escalones de una oscura organización y cometió una interminable cadena de
atrocidades indecibles e inobservables, en medio de las cuales aparece un camarada de
antaño, mientras aún estaba del lado de la justicia, y lo llama, por su antiguo nombre.
004
“Una Jagirinawa.”

Después de reflexionar un momento, comenzó a decir Oshino con voz terriblemente pesada,
casi como si detestara el nombre. Tiende a hablar de una manera frívola, o incluso burlona, y
este no era un tono que a menudo le escucharas usar.

“Lo único que podría ser es una Jagirinawa. Eso es todo lo que podría ser, y puedo afirmarlo
a ciencia cierta. Aunque a veces se le llama jakiri, janawa, corte hebikiri, cuerda de
serpiente, cuerda de corte de serpiente, o simplemente kuchi-nawa.”

“¿Una ‘cuerda con boca’? Entonces, ¿solo una forma de decir ‘serpiente’?”

“Correcto. Serpiente.” Repitió Oshino.

Serpiente.

El término general para reptiles de la Clase Reptilia, Orden Squamata, suborden Serpentes.

Destacan por sus cuerpos largos, delgados, cilíndricos cubiertos de escamas.

Tienen cientos de vértebras y pueden retorcerse libremente.

Así que fue un vampiro, un gato, un cangrejo, un caracol, un mono... y ahora una serpiente.

Dejando a un lado al vampiro como un caso especial, las serpientes se sentían como si
tuvieran la peor reputación del grupo. Se sentían como un símbolo tan siniestro. Gatos,
cangrejos, caracoles y monos no tenían nada que hacer contra ellas cuando se trataba de ser
espeluznante.

Jajaja, Oshino rio como siempre, de forma falsamente despreocupada, obligándose a


abandonar el tono sombrío.

“Bueno, no te equivocas al tener esa impresión, Araragi-kun. Desde hace mucho tiempo, las
serpientes han sido vistas como ese tipo de cosas. Después de todo, hay un montón de
excentricidades relacionadas con las serpientes. Supongo que porque son carnívoras y se
tienen dichos como ‘una serpiente en la hierba’. Además, algunas de ellas tienen venenos
letales... así que supongo que no se puede culpar a la gente por sentirse así. En el camino de
las serpientes venenosas, aquí en Japón tenemos las víboras de pozo, las yamakagashi, o las
habu. Pero luego, en el otro lado, algunos ven a las serpientes como algo sagrado, o al menos
hay una tradición de adorar a dioses serpientes; es común a casi todas las regiones del
mundo. Un símbolo a la vez santo y malvado, esa es la serpiente.”

“Y ese santuario, también fue para adorar a un dios serpiente, ¿no es así?”

“¿Eh? Espera, ¿por qué lo sabes? Te lo estaba ocultando. Oh, ya veo. Representante-chan te
lo dijo.”

“¿Cómo te diste cuenta de eso?”

“Bueno, ella es la única a tu alrededor que lo sabría, ja, ja, ¿quizás debería haberle dado a
ella el trabajo de colocar el talismán? Te las arreglas para meterte en problemas sin importar
a dónde vayas. Parece que Representante-chan tiene una mejor cabeza sobre sus hombros.”

“Ella... ya terminó de pagarte, ¿recuerdas?”

“¿Ella sabe eso?” Oshino se hizo el tonto. Era el tipo de reacción que esperaba de él.

“Aun así.” Dije. “Las serpientes se sienten malvadas para mí. No entiendo porque la gente
adoraría a un dios serpiente. La única serpiente que se me ocurre que no parece mala es el
tsuchinoko.”

“Ah, sí. Eso sí que me trae recuerdos. Una vez hice todo lo que pude para encontrar una de
esas malditas cosas con la esperanza de cobrar una recompensa. Sin embargo, nunca atrapé
ninguna.”

“No sé si un especialista debería ir tras eso. Además, ni siquiera pudiste encontrar una... Oh,
¿qué te parece esa cosa, no es una excentricidad? ¿Los ouroboros o lo que sea? Haciendo un
circulo mientras come su propia cola...”

“Oh, eso. Si vas a hablar de eso, no es una serpiente que se come su propia cola, pero
algunas serpientes se comen otras serpientes. ¿La cobra real, creo? Es un espectáculo ver
fotos de una serpiente tragándose a una de su propia especie.”

“Bueno, personalmente, encuentro que las serpientes dan miedo, no en un nivel instintivo
racional. Sólo con mirar una me paralizaría.”

“Supongo que las criaturas terrestres con ese tipo de forma son raras. Es como ver a un pez
nadar en la tierra. Eso ciertamente califica como único, así que creo que es natural que la
gente las vea como extrañas. Algo así como, ¿no respetas a la primera persona que comió
pepino de mar? Ja, ja, ja. Y además, las serpientes tienen una vitalidad extraordinaria.
Puedes intentarlo, pero se necesita mucho para matar una, ¿sabes? Se oye hablar de
serpientes ‘medio muertas’, pero lo que eso realmente te dice es cuántos puntos de
resistencia tienen esas cosas. Para algo de ese tamaño, es algo fuera de lo común, ¿no? Sin
embargo, es importante saber que las serpientes no son consideradas plagas para los
humanos. Debes haber oído hablar del vino de serpiente, ¿verdad?”

“Si y, por supuesto, nunca he tenido alguno a la mano.”

“Entonces, ¿qué hay de comer una? He tenido una serpiente de mar combinada con vino de
serpiente en Okinawa. Dicen que comer serpiente es bueno para la longevidad.”

“En verdad no me veo comiendo serpientes... Pero supongo que parece tan malo como un
pepino de mar.”

“Eres tan estrecho de miras. O, mejor dicho, no tienes agallas, te estás frustrando con una
simple serpiente. En el continente, hay regiones donde comen ‘gua-guaus’, ¿ok?”

“No tengo ninguna intención de repudiar la cultura alimentaria de nadie, pero ¿podrías al
menos no decir ‘gua-guaus’ cuando hablas de comerlos?”

Otra de estas conversaciones con Oshino.

Era eso, sí.

Sin embargo, su expresión todavía era vagamente oscura, o eso parecía.

Tal vez fue solo mi imaginación.

En las ruinas de una escuela de preparación abandonada.

Cuarto piso.

Allí me encontré frente a un hombre excéntrico con un cigarrillo sin encender en la boca, un
bastardo frívolo con ropa de Hawaiana a quien le debía mi gratitud: Oshino Meme.

Estaba solo.

Le pedí a Kanbaru Suruga y a Sengoku Nadeko que se quedaran a un lado y si se preguntan


dónde están pues en la casa de la familia Araragi, sentadas en mi habitación. Dejando a un
lado a mis padres, mis dos hermanitas estaban definitivamente inclinadas a entrar en mi
habitación sin preguntar, pero con la puerta cerrada, lo más probable es que estuvieran bien
por algunas horas... Tenía que admitir que una parte de mí sentía que era peligroso dejar a
Kanbaru Suruga, con su personalidad, sin mencionar su inclinación sexual, bajo el mismo
techo que Sengoku y mis hermanas menores sin supervisión, pero bueno, solo tenía que
confiar en mi kouhai.

Y.

Sobre todo, tenía una razón para evitar traer a Kanbaru y a Sengoku. Una razón por la que no
quería viesen a Oshino...

Después de aquello.

Kanbaru y yo nos llevamos a Sengoku, y nos dirigimos a mi casa. Hice que Sengoku se
sentara en el asiento trasero de mi bicicleta. Kanbaru corrió a nuestro lado sin siquiera llegar
a sudar. Como casi había esperado, la condición de Kanbaru volvió a la normalidad tan
pronto como bajamos la montaña. Lo del día anterior acerca de que se sentía mejor después
de almorzar me pareció un malentendido por mi parte.

Por suerte no había nadie en casa.

Mis dos hermanas pequeñas parecían estar fuera (y había señales de que antes habían vuelto
a casa). Dado que engañarlas hubiera sido la parte más difícil de entrar en mi hogar, no había
ideado ningún plan en concreto para regresar, mi reacción fue de alivio sincero. Mi hermana
menor, en particular... Si no recordara a su amiga de la escuela primaria, al verla en persona
lo haría. Mi hermana ciertamente se preguntaría qué estaba pasando si su hermano regresara
a casa con una vieja amiga suya.

Fuimos directamente a mi habitación.

“Koyomi-onii-chan...” Murmuró Sengoku con voz desvanecida. Su rostro estaba abatido, y


apenas la escuché. “Tú... has cambiado de habitación.”

“Sí. Ahora tengo habitación propia. Mis dos hermanas pequeñas todavía están en esa
habitación, aunque... Creo que volverán después de un tiempo. ¿Quieres verlas?”

No, Sengoku negó con la cabeza con indiferencia.

Su voz era casi inaudible, y sus reacciones casi imperceptibles.

Hizo que su cuerpo pareciera mucho más pequeño.


Debería haber tenido seis años de crecimiento y desarrollo; sin embargo, parecía mucho más
pequeña que cuando habíamos jugado en aquel entonces, por supuesto, estoy hablando de
forma relativa. Tal vez fue solo porque también había visto seis años de crecimiento…

Por alguna razón, me quedé en silencio.

Entonces…

“Huh. Así que esta es la habitación de mi senpai.” Dijo Kanbaru con su voz valiente,
rompiendo el estado de ánimo antes de que pudiera volverse incómodo. Ella echó un vistazo
alrededor. “Está mucho más ordenado de lo que esperaba.”

“Claro, en comparación con tu habitación...”

“Jejeje. Esta es mi primera vez en la habitación de un chico.”

Me di cuenta tan pronto como ella lo dijo.

Ahora que lo pienso, esta también fue la primera vez que tuve una chica que no era familia
en mi habitación.

Incluso Senjougahara aún tenía que visitar mi casa. Invitar descaradamente a una chica a tu
habitación era un rito estándar para un adolescente, pero yo dejaba entrar a la kouhai de mi
novia antes que a mi novia... ¿Estaba bien? Primero una cita, y ahora esto... Pero bueno, la
vieja amiga de mi hermana pequeña también estaba con nosotros, y era una emergencia.

Sengoku nos había dicho en el santuario.

Con su pequeña vocecita.

Te diré por qué, así que llévame a un sitio seguro donde la gente no nos vea.

Por qué.

¿Que por qué?

Por qué, ella mató a esas serpientes.

¿Por qué las cortó?

El primer lugar que me vino a la mente fue la casa de Kanbaru, pero deseché la idea
internamente antes de que ella pudiera sugerirla. Debido a que la habitación de Kanbaru
estaba tan desordenada, lo llamaría terreno sin ley, como se indicó anteriormente, no, iría tan
lejos como para llamarlo zona de guerra. No podía mostrarle ese tipo de habitación a una
inocente estudiante de escuela media. Eso dejaba mi hogar como única opción. Y de todos
modos, probablemente Sengoku se sentiría ansiosa si la lleváramos a un lugar
completamente nuevo. Mi casa era un lugar donde ella había jugado más de unas pocas
veces en el pasado.

“Está bien, entonces, ¿por qué no buscamos algunos libros sucios?”

“¡Eso es lo que hacen los chicos cuando van a las habitaciones de sus amigos! ¡Solo quédate
sentada!”

“Valdría la pena conocer tus gustos.”

“No solo no me parece que valga la pena, sino que lo encuentro activamente dañino.”

“Ah, entonces admites que tienes libros que son dañinos para menores...”

“¡Dice el libro dañino viviente! ¡Haz tu elección, Kanbaru, siéntate o salta por esa ventana!”

“Sólo bromeo, por supuesto. Hace tiempo, cuando todavía te estaba acosando, que le eche un
vistazo a tus gustos. Conozco todos los libros sucios que has comprado últimamente.”

“¿¡Qué!? ¡Imposible! ¡Estaba seguro de que no había nadie más en la tienda! ¡Me aseguré de
ello!”

“Tus gustos son bastante pervertidos, ¿no?”

“¡Tienes una sola opción, y es saltar por esa ventana!”

“Estoy segura de que la mayoría de las chicas preferirían hacer eso a satisfacer ese tipo de
fetiche. Je, pero eso es como un juego de niños para mí, podría soportarlo.”

“¡Y estas orgullosa de eso!”

Cuando miré.

Sengoku estaba riéndose, pero tratando de ocultarlo.

Parecía que nuestro intercambio le causo algo de gracia.

Guh. Estaba avergonzado.

Me he estado preguntando todo el tiempo en el camino de regreso, ¿qué tan amigable debería
ser al tratar con esta vieja conocida?
Sin mencionar, que por lo menos Sengoku se mantuvo callada.

Rara vez hablaba, y solo lo hacía tímidamente.

Ya que Shinobu, Oshino, Hanekawa, Senjougahara, Hachikuji y Kanbaru eran todos


volubles y despreocupados a pesar de sus diversas inclinaciones (Shinobu: arrogancia
rampante, Oshino: sarcasmo frívolo, Hanekawa: instrucción moralizadora, Senjougahara:
abuso amargo, Hachikuji: cortesía de dos caras, Kanbaru: ferviente aduladora), tratar con
este nuevo personalidad silenciosa fue refrescante. Por supuesto, Shinobu había sido
taciturna después de convertirse en una niña...

¿Estaba Sengoku tranquila ahora como lo había sido cuando era niña? Sí, parecía que
siempre tenía la cabeza gacha, pero, sinceramente, no podía recordar los detalles con
claridad.

No pude recordar.

Era introvertida, hablaba poco y siempre miraba hacia abajo... Pero...

Ella parecía acordarse de mí.

Koyomi-onii-chan.

Sí, Sengoku Nadeko, una vez se refirió a mí de esa manera. En cuanto a cómo la había
llamado, bueno, lo había olvidado. Tal vez Nadeko, tal vez Nadeshiko. De cualquier manera,
ya no podía llamarla así.

Sengoku, era Sengoku.

“Koyomi-onii-chan... y Kanbaru-san.” Dijo Sengoku por fin, en voz baja, por supuesto.
“¿Podrían... por favor darse la vuelta por un momento?”

“……”

En silencio hicimos lo que ella dijo.

Dimos la espalda a Sengoku y nos enfrentamos a la pared.

Si bien es posible que le haya dicho a Kanbaru que salte por la ventana, me sentí aliviado de
que ella estuviera conmigo. De hecho, después de que llamé a Sengoku en el santuario, me
encontraba perdido cuando ella se quedó paralizada, y fue Kanbaru quien logro la hazaña de
conseguir que se abriera. Seducir a cualquier chica más joven que ella en diez segundos no
había sido un alarde ocioso. Estaba dispuesto a admitir que Koyomi-onii-chan solo habría
sido inútil. Me habría inquietado miserablemente y eso habría sido todo. Mirando hacia
atrás, Sengoku no solo se había quedado paralizada, sus hombros cayeron como si el mundo
se estuviera acabando, se había quedado completamente en blanco. Hacerla reaccionar
podría haber sido casi imposible con mis escasas habilidades.

“Araragi-senpai.” Susurró Kanbaru mientras mirábamos la misma pared. Parecía estar


silenciando su voz para que Sengoku no escuchara, y yo respondí del mismo modo.

“Puede que no lo aceptes, pero mi plan es comenzar a animar las cosas.”

“¿Eh? ¿Que se supone que significa eso?”

“Creo que ya te habrás dado cuenta, pero esa chica, Sengoku-chan parece ser bastante
inestable emocionalmente. He visto a muchas chicas como ella, tanto mayores como
menores que yo. Es un caso grave. El menor impacto la puede llevarla autolesionarse.”

“Autolesionarse...”

Esos cinceles.

Me había olvidado de quitárselos.

Estaban dentro de la bolsa alrededor de su cintura.

Todo, desde una cuchilla triangular hasta una cuchilla de corte, un juego completo de cinco.

No sonaba exagerado.

De hecho.

Si Kanbaru no hubiera intervenido exactamente cuándo lo hizo después de que grité el


nombre de Sengoku, eso, con seguridad, podría haber sucedido.

Incluso yo podía decirlo.

“Eres una persona amable.” Murmuró Kanbaru. “Por lo que podría ser difícil para ti actuar
alegre cuando alguien se siente triste, pero sincronizarse con su estado depresivo solo
empeoraría las cosas. No diría que es como el demonio de Maxwell, pero en este momento
necesito levantar el espíritu de Sengoku-chan.”

“... Huh.”
Entonces, ¿fue esa la razón de la charla anterior sobre libros sucios?

Sabes, parecía que había subestimado a Kanbaru. Me preguntaba si ella era simplemente
obtusa cuando dijo eso, pero mi juicio había sido demasiado superficial. Kanbaru Suruga
pensó más en sus acciones de lo que pude esperar.

“Está bien, entonces.” Dije. “Si es así, vuélvete loca. Te seguiré la corriente.”

“Sí. Podría dejarme llevar y atacarte, así que me gustaría que tu generosidad también se
extienda a esa posibilidad.”

“¡No puedo ser ‘generoso’ al respecto! ¿Cómo exactamente, y dónde, planeas animar las
cosas?” Me las arreglé para lograr la impresionante hazaña de gritar en un susurro. “Ack,
ahora estoy empezando a sentirme deprimido… El más mínimo impacto podría llevarme a
autolesionarme.”

“No hay necesidad de desesperarse. Ya sabes lo que dicen. Aunque sea invierno, la edad de
hielo no está muy lejos, y la noche siempre va seguida de un siglo de oscuridad.”

“¡Nadie dice eso! Y en caso de hacerlo, ¿¡qué significarían esos dichos!?”

“No importa cuán mal puedan parecer las cosas ahora, es tan fácil como siempre lo será.”

“¡Qué mensaje tan aparentemente positivo pero horriblemente pesimista!”

“No hay lluvia que no se convierta en inundación.”

“¡Sí, la hay! ¡Puede llover sin que en cada ocasión se convierta en una inundación!”

“Jejeje. ¿Ves? Ahora vuelves a parecer positivo.”

“¡Agh! ¡Me has engañado!”

De repente escuché una risa ahogada detrás de mí.

Como si alguien estuviera luchando por guardar silencio.

Era Sengoku.

Parecía que apenas nos había escuchado.

Si todo el tiempo ese fue el plan de Kanbaru

Ella realmente es algo.


“Ahora está bien. Por favor, dense la vuelta.” Dijo Sengoku.

Cuando lo hice, vi a Sengoku Nadeko completamente desnuda, parada directamente en la


cama mientras ella miraba con vergüenza.

No, ella no estaba completamente desnuda.

Se había quitado el sombrero, naturalmente, e incluso sus calcetines, pero llevaba pantalones
cortos de voleibol. Aparte de eso, no había un hilo en su cuerpo. A pesar de que usó las
palmas de sus manos para ocultar sus modestos pechos.

“... Espera, ¿pantalones cortos de voleibol?”

¿Eh?

Tal como lo había adivinado, Sengoku asiste a la misma escuela media de la que me gradué,
pero ¿no se habían retirado los pantalones cortos de voleibol y se habían introducido
pantalones deportivos más holgados cuando yo ingrese?

“Ah, bueno.” Dijo Kanbaru. “Simplemente ‘sucedió’ que llevaba unos conmigo y se los
presté a ella.”

“Ya veo. Tú, por simple coincidencia, ‘sucedió’ que llevabas unos pantalones cortos de
voleibol.”

“Son una parte simple y de buen gusto de la vida de una joven.”

“No, eso sería un complot enfermo y retorcido en la vida de una joven.”

“Los tenía listos en caso de que algo como esto pasara.”

“¿Qué pensabas que iba a pasar? ¿Qué es exactamente lo que pensabas que quería cuando te
llamé hoy? Me estás haciendo dudar de mi propia credibilidad. ¿Y de dónde sacaste ese tipo
de prenda? Si esto fuera un manga antiguo, ese es el tipo de artículo que aparece como
‘Imposible’. ¡Se suponía que esa tribu había sido eliminada hace mucho tiempo!”

“Sí. Aunque no lo parezca, tengo una excelente previsión. Vi que algún día la cultura
terminaría extinta y de antemano decidí conservar ciento cincuenta prendas de ese tipo.”

“¿En lugar de conservar, no es eso caza excesiva?”

Para ser honesto, ¿no fue ella quien extinguió esa cultura?
“……”

Un chico y una chica de secundaria que tienen una discusión animada y jovial sobre
pantalones cortos de voleibol, mientras que una chica de escuela media casi desnuda estaba
de pie en una cama. Un espectador externo puede verlo como un caso bastante grave de
acoso escolar.

El flequillo de Sengoku, escondido antes por su sombrero, era más largo de lo que esperaba,
cubriendo sus ojos. O tal vez lo estaba haciendo a propósito por vergüenza. Las cutículas de
su brillante cabello negro brillaban. Parecía que había escondido su ropa debajo de mi
edredón después de quitársela. El hecho de que ella estuviera usando esos pantalones cortos
según los cuidados de Kanbaru y que se hubiera quitado incluso el sostén sugería que para
esta vieja conocida mía exhibir su ropa interior era más embarazoso que desnudar su piel.
Sin duda, se veía más provocativa de lo que pretendía, solo con pantalones cortos de
voleibol, pero no entendía las sensibilidades de las chicas de escuela media...

Pero.

¿Supongo que podrías decir desafortunadamente?

El atractivo sexual no tiene nada que ver con esta situación.

“¿Qué es eso?”

Me había tomado un tiempo, pero las palabras de sorpresa salieron de mi boca, cuando vi la
piel de Sengoku Nadeko.

Su piel estaba cubierta de rastros de escamas.

Desde los dedos de sus pies hasta sus clavículas, claros rastros de escamas en cada
centímetro de su cuerpo.

Por un momento me pregunté si las escamas habían crecido directamente sobre su cuerpo,
pero miré más de cerca para darme cuenta de que ese no era el caso. Las escamas estaban
impresas en su cuerpo, como con una impresión en madera, para decirlo de otro modo, como
si estuviesen presionadas sobre su piel.

“Me recuerda a las marcas de cuerdas para bondage.” Dijo Kanbaru.

De hecho, parecía haber signos de sangrado interno aquí y allá en su cuerpo, y las marcas de
aspecto doloroso hacían que pareciera que estaba atada, preguntarle a Kanbaru por qué tenía
un conocimiento tan íntimo de las marcas de cuerda para bondage solo complicaría las cosas,
así que por el momento decidí pasarlo por alto.

No, tal vez no tanto como cuerdas para bondage como...

Era como si algo la estuviera apretando.

Algo que no pudimos ver.

Rastros de escamas, en cada centímetro de su cuerpo.

Aferrándose a su alrededor.

Aferrándose, poseyéndola.

Las únicas partes de su cuerpo sin esas marcas eran sus brazos, así como su cabeza desde el
cuello hacia arriba. No había necesidad de dar el paso adicional de que ella nos mostrara sus
caderas y la parte inferior del abdomen, ahora oculta por esos pantalones cortos de voleibol.

Escamas.

Entonces, si eran escamas, ¿peces?

No, estas no eran escamas de pescado, sino de un reptil.

Una serpiente.

Serpiente... serpiente.

“¿Koyomi-onii-chan?” Dijo Sengoku. Su voz aún es muy baja, además de que temblaba.

“Ya eres un adulto... así que no tienes ningún pensamiento sucio al verme desnuda,
¿verdad?”

“¿Eh? O-Oh. De ninguna manera. ¿Cierto, Kanbaru?”

“¿Sí? Umm... yo... ¿supongo?”

“¡Hey, sígueme el juego! ¿¡A dónde se fue toda esa lealtad tuya!?”

“Sengoku-chan, podría ser bueno saber que algunas personas tienen pensamientos sucios
cuando ven a chicas desnudas precisamente porque son adultos.”

“¡Me has traicionado! ¡Y nos habíamos llevado muy bien hasta ahora!”
“Sin embargo, no estoy segura. Creo que en este caso, solo te hace más sospechoso como
hombre si no muestras ningún interés en verla desnuda o tal vez, ¿es simplemente grosero
con ella?”

Kanbaru parecía bastante solemne cuando me dijo esto.

Pensándolo bien, tuve que admitir que ella tenía razón.

Si bien la situación era cualquier cosa menos sexual, y mientras había escamas de serpiente
impresas a lo largo de todo su cuerpo, todavía se sentía descortés ver a una chica desnuda y
no sentir nada. Me pareció recordar que Senjougahara dijo que proporcionar algunos
comentarios era solo buenos modales.

Me giré para enfrentar a Sengoku.

Le hablé con la voz más seria que pude manejar.

“Déjame corregirme. Tengo algunos pensamientos sucios al verte desnuda, Sengoku.”

“...... Urr.” Los hombros de Sengoku comenzaron a temblar, como si estuviera tratando de
sofocar su angustia. “Uh, urrr... uurk.”

Las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos, y ella comenzó a llorar.

“¡Hey, Kanbaru! ¡He hecho llorar a una chica de escuela media porque seguí tu consejo!
¡Una chica de escuela media! ¿Entiendes? ¡Todo ha terminado para mí! ¿¡Cómo vas a
arreglar esto!?”

“Nadie podría haber adivinado que lo dirías tan directamente...” Kanbaru me estaba mirando,
horrorizada.

No parecía que ella hubiera estado tratando de engañarme.

“Yo.” Dijo Sengoku, agachándose en mi cama, con la cabeza gacha, murmurando en voz tan
baja que apenas era audible...

Y aun así. Las palabras eran ciertas.

“Yo... odio tener este cuerpo.”

“... Sengoku.”

“Lo odio... Por favor sálvame, Koyomi-onii-chan.” Dijo ella, con voz llorosa.
005
Y entonces…

Una hora más tarde.

Estaba visitando un edificio abandonado habitado por Oshino y Shinobu, que alguna vez fue
una escuela de preparación, con sólo un día de separación de mi última visita del sábado.

“Llegas tarde. He estado esperando.” Oshino me saludó en su tono arrogante y omnisciente.

Oshino Meme.

Un experto en el tema de las excentricidades.

Un especialista, una autoridad.

El hombre que me sacó del velo de oscuridad con el que me encontré durante las vacaciones
de primavera después de ser atacado por un vampiro y convertirme en uno en este día y
época, mi salvador.

Un tipo con camisa Hawaiana, edad desconocida.

Un horrible ejemplo a seguir que no posee una dirección fija que viaja de un lugar a otro.

Hanekawa Tsubasa, cuando estuvo encantada por un gato.

Senjougahara Hitagi, cuando se encontró con un cangrejo.

Hachikuji Mayoi, cuando se perdió con un caracol.

Kanbaru Suruga, cuando ella le pidió un deseo a un mono.

Todas ellas recibieron ayuda de Oshino.

No sé si alguna vez le devolveré el favor por completo, pero, para ser sincero, si él no fuera
mi salvador, no querría conocer a alguien como él.

Tiene una personalidad horrible. No es fuente de buena voluntad. De ninguna manera lo era.

Era como un avatar de capricho. Si bien lo conozco desde las vacaciones de primavera, aún
no podía entender grandes franjas de su personalidad.

Se sentó con las piernas cruzadas sobre una cama improvisada que había formado atando,
con una cuerda de plástico, varios escritorios que los estudiantes debieron usar para estudiar.
Después de haber explicado todo lo anterior, Oshino dijo con voz atormentada casi como si
detestara el nombre...

“Una Jagirinawa.”

“Una Jagirinawa, eh... Nunca he oído hablar de eso.”

“Es bastante famosa. Creo que es una forma de chamanismo de serpientes.”

“¿Chamanismo de serpientes? ¿No portador de serpientes?”

“Los portadores de serpientes son de la mitología griega. El chamanismo de serpientes es


doméstico. Ya sabes, como los médiums de dioses serpientes... Supongo que no tiene mucho
sentido hablar contigo sobre eso. Sin embargo, una Jagirinawa... Hmm. Así que, ¿eso haría a
esta chica... tu kouhai?”

“Realmente no se siente así por lo joven que es. Como tal, ella es la amiga de mi hermana
pequeña.”

“A-ja. Así que ella es como una hermana pequeña para ti.”

“No andes asignando a mis conocidos a cualquier posición.”

“Ella te llama Onii-chan.”

“……….”

Le había dicho demasiado.

Qué tonto más honesto.

Era como si no pudiera decir una mentira.

Simplemente era malo ocultando cosas.

“Y ese ‘Onii-chan’ de los días pasados.” Agregó Oshino. “Es ahora ‘Ragiko-chan’... El
tiempo en verdad vuela como una flecha.”

“¡No me llaman así! ¡Eso fue solo una broma que Kanbaru hizo!”

“Aunque creo que te queda bien.”

“¡Olvídalo!”
“Sabes, todo este tiempo he estado llamando a aquella Ojou-chan como Tsundere-chan y a tu
representante de clase como Representante-chan, mientras que tú simplemente eres Araragi-
kun, y empiezo a sentirme perjudicado. A partir de ahora, seré más imparcial y te llamare
Ragiko-chan.”

“¡Por favor, no! ¡Te lo ruego!”

“Se siente como si pudiera terminar encajando.”

Después de ir y venir así por un momento, Oshino volvió al tema.

“De todos modos. Sin embargo, lograste terminar tu trabajo a tiempo. Bien hecho, Araragi-
kun.”

“Oh... sí, supongo.” Nunca espere que Oshino me agradeciera por algo.

Me sorprendió tanto que mi reacción debió parecer un poco extraña.

“Tengo que decir que no podría haberlo hecho yo mismo. También agradezco a esa Ojou-
san. Er, uh…”

Oshino comenzó a pensar.

Debe haberse referido a Kanbaru, pero... Ah, no estaba seguro de cómo llamarla. Eso me
hizo darme cuenta de que aún no había decidido una etiqueta para ella. Hanekawa era
Representante-chan, Senjougahara era Tsundere-chan, y Hachikuji era la niña perdida...
¿Entonces Kanbaru sería, digamos, la chica deportiva?

“Ella es Pervertida-chan.”

“…….”

Parecía que Oshino veía a Kanbaru más como un personaje pervertido que como uno
atlético.

No es que no sabía porque lo decía.

Yo mismo pensé que había dado en el blanco.

“¿No podrías al menos trazar la línea en algo así como ‘Lesbi-chan’? Ella es, a pesar de
todo, una chica...”
“¿Eh? ¿Eso crees? Está bien, puedo estar de acuerdo con eso. De todos modos, tú y ella están
a mano conmigo. Hazle saber eso.”

“¿A mano? Entonces, ¿no te debemos nada?”

“Correcto.”

“Hay algo que quiero preguntarte para estar seguro, Oshino, ¿puedo?”

“¿Qué sería?”

“Parecía que en el momento en que entramos en los terrenos del santuario, de repente
Kanbaru comenzó a sentirse enferma... ¿Es relevante?”

Tenía a Kanbaru esperando en casa porque quería hacerle a Oshino la pregunta cuando ella
no estuviese cerca.

Hmm, dijo Oshino con una mirada de soslayo.

“Araragi-kun, ¿y tú?”

“¿Eh?”

“¿Cómo te sentiste? ¿Te enfermaste o algo?”

“No, yo estaba bien.”

“Ya veo. Bueno, el día anterior le diste de tu sangre a Shinobu-chan, así que supongo que
tiene sentido. Significa que tuviste suerte.”

“¿Suerte?”

“¿Recuerdas lo que te acabo de decir? No es algo que podría haber hecho. Ese santuario
solía ser el centro de esta ciudad.”

“¿El centro? ¿En serio? En todo caso, yo diría que está colocado...”

“No en términos de ubicación. Bueno, dejó de usarse hace mucho tiempo. Hoy en día no
debería haber nada en el lugar, viendo cómo todo el mundo lo ha olvidado, pero... Shinobu.”

“¿Shinobu? ¿Qué pasa con ella?”


“Sabes cómo se adentró en esta ciudad; es una vampira legendaria de una noble línea de
sangre. Un vampiro, el rey de las excentricidades. Supongo que podrías decir que su
influencia activó el lugar. Cosas malas... empezaban a acumularse en ese lugar.”

“¿Ese lugar? ¿Quieres decir, en ese santuario?”

Ese santuario, incluso los dioses parecían no querer visitarlo.

Cosas malas.

“Sip. Se podría decir que se ha convertido en una bolsa de aire, o tal vez en una especie de
lugar de reunión, lugares como ese existen, centros. Parte de la razón por la que me quedé
aquí, incluso después de que el caso de Shinobu terminó, fue para encontrar ese lugar de
reunión, aunque mi principal objetivo, por supuesto, era mediar con las excentricidades. Ja,
ja, ja. Conocí a Representante-chan y a Tsundere-chan gracias a eso, así que diré que me
divertí.”

“Cuando dices cosas malas, ¿exactamente qué quieres decir?”

“Varias cosas. No es algo que pueda poner de manera concisa... o mejor dicho, estas cosas
aún no tienen nombres. En este momento ni siquiera se podrían llamar excentricidades.”

Un lugar frecuentado por lo extraño.

En eso es en lo que se había convertido.

Lo que se reunió allí, no era humano.

Literalmente lo extraño hizo acto de presencia.

“Y Kanbaru comenzó a sentirse enferma, ¿por eso?” Pregunté

“Bien. El brazo izquierdo de Lesbi-chan todavía es el de un mono, por lo que es más fácil
para ella verse afectada por las cosas malas. Es lo mismo para ti, pero como excentricidad,
hay una abrumadora diferencia de rango entre el mono y Shinobu. Significa que, si bien ella
ha perdido su resistencia contra ese tipo de fenómenos, en realidad has construido una
resistencia decente a las cosas malas.”

“... ¿Oshino, todo este tiempo supiste eso? ¿Que Kanbaru se sentiría de esa manera?”

“No me mires con furia. Siempre estás tan animado, Araragi-kun, ¿te ha pasado algo bueno?
No es como si Lesbi-chan sufriera algo en particular. Y... ella me lo debía. Ella no quedaría a
mano conmigo a menos que pasara por algunas luchas. Ella en especial. ¿No estás de
acuerdo?”

“……”

Puede que haya tenido razón.

Era solo que no podía verlo bajo una luz tan estricta. Tal vez ese sufrimiento era algo que
Kanbaru necesitaba experimentar. Al menos, no podía verla quejarse con Oshino incluso si
ella lo descubriera. Ese era el tipo de persona que era.

“Bueno, ahora el resto depende de ella.” Dijo Oshino. “El destino de ese brazo izquierdo es
su problema. Si puede llegar a los veinte sin incidentes, será liberada de su excentricidad.”

“Eso estaría bien.”

“Hm. Eres una buena persona, Araragi-kun. Como de costumbre...”

“¿Que se supone que significa eso? Parece que estás tratando de insinuar algo.”

“Realmente no. Me preguntaba si no estabas un poco celoso de que ella volviera de ser un
humano normal.”

“… Realmente no. Cuando se trata de mi cuerpo ya he hecho las paces conmigo. Todo está
arreglado y resuelto, así que, deja de intentar crear problemas diciendo ese tipo de cosas.
Tampoco le digas nada innecesario a Kanbaru. No quiero que ella sienta que me debe algo.”

“Tienes razón, lo siento. Pusiste el talismán en la puerta del salón principal, ¿verdad? Es un
trabajo un poco perezoso, pero está bien. Hasta cierto grado debería dispersar esas cosas
malas.

“¿Hasta cierto grado?”

“Un talismán colocado por un aficionado no va a cambiar las cosas tan dramáticamente. De
hecho, sería un problema si lo hicieran. Sólo tenemos que empujar el flujo natural de las
cosas, o si no, quién sabe lo que podría pasar en otro lugar. En ese sentido, la elección de
hacer un trabajo a medias colocándolo en la puerta podría no haber sido una mala elección
en absoluto.”
“¿Por qué no pudiste hacerlo? Ya sean las excentricidades o las cosas malas que las
preceden, ese es tu campo de experiencia, ¿no es así? ¿O es este un caso donde te obligaste a
delegar un trabajo para que Kanbaru pudiese pagar su deuda contigo?”

“No diré que eso no fue un factor, pero realmente habría sido difícil para mí. Solo mírame,
soy tan delgado y débil como parezco. No tengo la energía para subir una montaña.”

“Esa no es la línea de un vagabundo que va de viaje en viaje.”

“Ja, ja, ja. ¿Fui muy transparente? Bueno, sí, era una broma. La resistencia física no es el
problema, es más bien una cuestión mental. Así como a ti y a Lesbi-chan les afecto en cierta
medida por sus excentricidades, yo estimulo esas cosas malas de un modo innecesario
porque soy un especialista. No tendría más remedio que hacer algo si decidieran atacarme, y
en ese caso, terminaría convirtiendo ese lugar de reunión en un vacío perfecto. No hay forma
de saber qué es lo que podría entrar después, en el peor de los casos, tendríamos otra
Shinobu.”

“Realmente no lo entiendo... ¿Pero es como que los humanos no deberían afectar el


equilibrio del mundo natural solo para hacer que las cosas sean más convenientes para ellos?
Enviar a alguien como Kanbaru o a mí en lugar del Oshino demasiado poderoso, ¿ayudó a
mantener la situación tranquila?”

“Sí, algo así.” Corto la conversación.

La verdad debe haber sido un poco más complicada, o tal vez era algo completamente
distinto, pero no parecía tener sentido profundizar en el asunto.

Kanbaru y Oshino estaban en paz.

Siempre y cuando todo eso quedara claro.

“No solo ella, ya sabes.” Dijo Oshino alegremente. “Las deudas que tenías conmigo también
han quedado saldadas.”

“... ¿Eh?” Ni siquiera podía ocultar mi sorpresa. Esas no parecían palabras que él jamás diría.
“Te debía... cinco millones de yenes.”

“En términos de efectivo, sí. Ese fue el valor del trabajo que realice esa vez. Básicamente,
lograron evitar que se produjera la Gran Guerra Yokai.”

“¿F-Fue un trabajo tan importante?”


Deseé que me lo hubiera dicho antes.

Pero cuando lo pensé, el trabajo era lo suficientemente grande como para cancelar
instantáneamente la deuda de Kanbaru a pesar del dolor de cabeza de caso que fue, así que
debí de esperar que él también dedujera una parte considerable de mis deudas.

No tomarte a ti mismo en cuenta sonaba hermoso, pero en realidad solo te hacía sentir como
un idiota...

“Todos estamos en paz.” Aseguró Oshino. “Pero casi siento que te debo un poco de cambio.
Lo que sea. Hablemos de esa chica, la Ojou-chan que es como tu hermana pequeña. Después
de todo estás haciendo que esto suene como un asunto bastante urgente.”

“¿Estoy haciendo eso?”

“Solo los brazos, el cuello y la cabeza no se ven afectados, ¿verdad? Ouch. Una vez que la
Jagirinawa se le acerque a la cara, eso será todo. Araragi-kun. La Jagirinawa es una
excentricidad que mata personas. Necesito que entiendas eso. Este caso es uno bastante
serio.”

“……….”

Pensé que podría ser así. Esas marcas de escamas tenían un aire siniestro. Pero se sentía
mucho más grave al escucharlo de la boca de un especialista.

No era una excentricidad mortal.

Era una excentricidad que mataba.

“El veneno de las serpientes puede matar a los humanos. Neurotoxinas, hemotoxinas,
cardiotoxinas, toda la gama. Si no recibes un suero, puedes darte por muerto. Las serpientes
son difíciles de tratar, ¿entiendes?”

Aunque, sorprendentemente, las serpientes venenosas tienden a saber mejor, agregó Oshino.

“Oshino... ¿Exactamente qué tipo de excentricidad es la Jagirinawa?”

“Antes de avisarte, dime el título del libro que Ojou-chan estaba leyendo en el pasillo de la
librería. A Lesbi-chan le dijiste que luego se lo dirías, pero nunca lo hiciste, ¿verdad? ¿Qué
libro era? Mirarlo te hizo estar seguro de que pasaba algo con esa chica.”
“Oh... Bueno, es exactamente lo que esperas. Un libro de tapa dura de doce mil yenes
llamado: ‘Colección Completa de Maldiciones de Serpientes’.”

“El título hace que parezca un libro reciente. No desde antes de la guerra o el periodo Edo.”

“Sí. La portada también parecía nueva.”

Pero ese título fue más que suficiente para hacerme pensar en las serpientes muertas,
cortadas en cinco, que había visto el día anterior. Por supuesto, tan pronto como fui testigo
de los cadáveres, sospeché vagamente de Sengoku, a quien acabábamos de ver por las
escaleras... pero fue cuando vi el título del libro que mi sospecha se convirtió en certeza.

Mangas largas, pantalones largos.

Pero sus pantalones largos pueden no haber sido para entrar a las montañas, sino más bien
una forma de ocultar las marcas de escamas impresas en sus piernas.

De hecho, tenía que ser eso.

Este cuerpo.

Odio tener este cuerpo, había dicho ella.

Kanbaru debió de entender cómo se sintió Sengoku. El vendaje envuelto alrededor de su


brazo izquierdo estaba allí para esconder el brazo de mono. Cuando lo pensé, eso estaba en
un nivel diferente al mío, dejando crecer mi cabello para ocultar mis marcas de mordeduras.
Y ahora que lo pienso, cuando Kanbaru quiso mostrarme lo que había debajo de las vendas,
me invitó a su casa, no queriendo que nadie más la viera.

En ese sentido, esas dos enfrentaron circunstancias similares.

Esas dos.

¿De qué podrían estar hablando ahora mismo?

……

Lesbi-chan, será mejor que no la estés seduciendo.

Estoy confiando en ti. En verdad estoy confiando en ti, ¿de acuerdo?


“Mi limitado conocimiento no cubre ese tipo de libros.” Admitió Oshino. “Pero debe incluir
información sobre la Jagirinawa. Después de todo el chamanismo de serpientes es
básicamente sinónimo de maldiciones de serpientes…”

“Entonces, ¿a los chamanes de serpientes les gustan los embrujos o algo así?”

“Bueno, sí. Estas no son excentricidades que actúan de forma natural, se caracterizan por una
malicia clara o explícita... bueno, no necesariamente tiene que ser malicia, pero colocarle una
Jagirinawa a alguien no suena como otra cosa.”

“Oh... También escuché eso.”

“¿Hm? ¿Lo hiciste?”

“Bueno sí.”

Sengoku no me dio un nombre.

En parte fue culpa mía porque no tenía ganas de interrogar a alguien con una personalidad
introvertida, pero Sengoku se negó obstinadamente a decir un nombre.

El nombre del culpable.

Pero... ella me dijo que era alguien de su clase.

Una amiga de su clase.

Con una maldición puesta en ella, pensé que “ex amiga” era más preciso.

Le dije a Oshino: “Es una idea de encanto entre estudiantes de escuela media, al parecer algo
así como una moda pasajera. Estos encantos se adentran un poco en lo oculto. La mayoría
son completas farsas, por supuesto, pero supongo que puedes decir que Sengoku es la
desafortunada excepción.”

“Desafortunada, ¿eh?” Oshino hizo eco sugestivamente. “Encantos y maldiciones. Supongo


que los dos son similares. Pero Araragi-kun, por lo que dices, el perpetrador es un
aficionado, un estudiante de escuela media... La Jagirinawa no es el tipo de excentricidad
que un principiante puede manejar.”

“Como un reloj roto que da bien la hora dos veces al día, ¿no podría haber sido una
casualidad?”

“¿Podría serlo? Hmm. ¿Por qué esa compañera de clase quiso maldecir a Ojou-chan?”
“Según los trozos que recogí de ella, en realidad fue por un asunto de amor. Alguien que
estaba perdiendo la cabeza. Esa amiga tenía un chico que le gustaba y ese chico le dijo a
Sengoku que la amaba, pero al no saber nada de eso, Sengoku le rechazó, ganándose su
resentimiento.”

“Hm. Que típico.”

“Bueno, estamos hablando de un romance de escuela media.” No es que las opiniones de


alguien que nunca había salido con una chica hasta su último año de secundaria cuenten
mucho.

“Si ella empezara a salir con él sin saberlo, eso sería una cosa.” Comentó Oshino. “Pero
pensarías que rechazarlo no habría importado.”

“Supongo que se trata de sentimientos. ¿Quizás cuando Sengoku lo rechazó, la otra chica se
molestó porque alguien importante para ella fue despreciado?”

Lo hice sonar como mi interpretación, pero fue la de Kanbaru. ¿Cómo podría esperar
entender la mentalidad de una chica de escuela media? Si Kanbaru lo pensó de ese modo,
solo podía suponer que tenía razón.

“Eh. Bueno, a quién le importa la razón. La gente no necesita razones para odiarse. Así que
las cosas se agriaron y terminaron con una maldición. Ah, qué fugaz es la amistad. Es por
eso que no hago amigos.”

“... Ya veo.” Quería responder a eso, pero si intentaba responderle a Oshino, nuestra
conversación duraría toda la noche, y otra cosa... necesitaba controlarme. No podía dejar a
esas dos esperando por siempre. “Sengoku dijo que estaba leyendo Colección Completa de
Maldiciones de Serpientes porque quería descubrir cómo deshacerse de la de ella. Hoy
tampoco era la primera vez que leía ese libro. Desde hace un tiempo había estado volviendo
a leerlo una y otra vez, casi todos los días, leyendo, luego leyendo un poco más y
consultándolo para probar por sí misma cada eliminación de maldición, ritual de
purificación, exorcismo y cosas similares.”

Eso es lo que eran.

Las serpientes cortadas.

No era como un ritual, era un ritual. Al principio usar un cincel me pareció grotesco, pero
parecía que esos eran los únicos objetos con filo que poseía Sengoku. Tal vez las
herramientas afiladas más fácilmente accesibles para una chica de escuela media eran, de
hecho, su conjunto de cinceles.

“Eliminar una maldición de serpientes matando serpientes, la idea me huele mal.” Continué.
“Y en realidad, ella dijo que su condición comenzó a empeorar cuando comenzó a matar
serpientes de ese modo.”

“No, Araragi-kun. Repeler una Jagirinawa cortando serpientes no está mal. En realidad, es lo
correcto y apropiado. El método probablemente se incluyó en la sección de Jagirinawas del
libro que leyó... Pero esa Ojou-chan es bastante valiente, ¿no? Agarrando a las serpientes por
su cuenta y matándolas. Es maravilloso. Sigues describiéndola como dócil y tranquila, pero
me resulta difícil de creer.”

“Bueno, al final del día este es el campo. No puedes dejarte sorprender por una chica que
recoge serpientes con sus propias manos.”

“Para mí, como un chico de ciudad, es difícil de aceptar.”

“¿Exactamente qué hay de ti que te hace un chico de ciudad?”

Bien.

Se podría decir que Sengoku había sido empujada hasta ese punto por la maldición, por la
Jagirinawa.

Ella había llorado.

No había nada valiente en ella.

En todo caso, ella era delicada. Demasiado delicada.

“No es que matar serpientes elimine una maldición de serpientes, Araragi-kun, lo importante
aquí es cortar las serpientes. Aquí, las serpientes son una metáfora de una cuerda.
Jagirinawa-nawa, cuerda. No importa qué tan apretado estés, corta la cuerda y serás libre.”

“Apretado...”

Marcas de cuerdas de bondage.

Estaba siendo apretada, por una serpiente.

Una cuerda, ¿eh?


Oshino continuó. “Hay un dicho que dice que una vez que te muerde una serpiente, saltarás
al ver una cuerda, y en este caso, serpiente es igual a cuerda. Lo que hace a una cuerda una
cuerda es que puede ser cortada.”

“... Eso no parece tener sentido. Sengoku dijo que ya ha matado a más de diez serpientes en
ese santuario. Pero lejos de irse...”

La maldición, sólo fue empeorando.

Cuantas más serpientes mataba, más rápido subían las escamas desde la punta de los dedos
de sus pies, eso es lo que me dijo, era una prueba de que la maldición estaba progresando.

“Bueno, como siempre digo.” Recordó a Oshino. “Cuando se trata de estas cosas, el proceso
importa. Esta Ojou-chan que es como tu hermana pequeña es una completa amateur,
¿verdad? En general, es más difícil eliminar una maldición que colocar una, de modo que,
por supuesto, su condición empeorará si no lo sabe bien. Si mata serpientes mientras una
serpiente te posee, por supuesto que la enfurecerás. Tiene razón al respecto. Araragi-kun.”

“……….”

“Pero esta conversación me está ayudando a ver por qué una maldición hecha por una chica
completamente aficionada de escuela media ha tenido tanto éxito. Mi suposición inicial era
que el infierno no se equipara a la furia de una mujer despreciada, pero supongo que me
equivoqué. Es mala suerte.”

“¿Qué quieres decir?”

“Probablemente Ojou-chan se enteró de que se le había puesto una maldición antes de que
empezara a funcionar. A juzgar por el hecho de que sabe exactamente quién era, debe
haberlo oído directamente de la chica: ‘¡Maldita seas, he puesto una maldición sobre ti!’ o
algo así. Ojou-chan entró en pánico, fue a la librería para averiguar cómo deshacerse de ella
y subió a una montaña que es conocida por tener muchas serpientes, para poder cortarlas.
Supongo que encontró el santuario por accidente. Bueno, tal vez ella lo sabía de antemano.
Luego, se ocupó de matar a esas serpientes.”

“¿Qué parte de eso es ‘mala suerte’?”

“El lugar. ¿Recuerdas lo que dije? Una bolsa de aire, un lugar de reunión...”

“Oh.”
Un lugar donde se acumulan cosas malas.

Esas cosas malas que la presencia de Shinobu había activado.

“¿Y eso… fortaleció la maldición?” Pregunté.

“No fortaleció, lo más probable es que no se hubiera activado en absoluto si no fuera por ese
lugar. A diferencia de Lesbi-chan y de ti, su cuerpo debe ser el de un humano normal, así
que si bien no se sintió mal, las cosas malas la afectaron en la forma de la Jagirinawa.”

Ella no tenía forma de defenderse, no tenía resistencia.

Una completa novata.

“Entonces es como si ella hubiera profundizado sus propias heridas.” Dije.

“Es como si se hubiera herido a sí misma. Aunque es una forma cruel de decirlo, nada habría
pasado si ella no hubiera hecho nada. En realidad, la descripción en esta Colección Completa
de Maldiciones de Serpientes podría ser a medias. Trato de no hablar mal de los libros que
no he leído, pero es una gran posibilidad. Encima de todo, tienes un ritual de eliminación de
maldiciones de una edición amateur en un lugar como ese. Esas cosas malas deben haber
actuado en una mala dirección.”

“Qué atolladero.”

“Un atolladero, vaya que sí.”

Su mala suerte, ¿podría ser tan mala?

“Supongo que el lado positivo para ella es que termino por reunirse contigo cuando las cosas
estaban llegando a su punto culminante, tu planeas hacer algo por la chica, ¿verdad?”

“¿Me equivoco al hacerlo?”

“No, no necesariamente. No busques ni huyas de la pelea. Pero es un poco difícil de


entender. Me siento apenado por ella, pero ¿por qué ir tan lejos? ¿Porque es la vieja amiga
de tu hermana pequeña? O porque, ¿su apellido te recuerda a tu novia?”

“¿Eh? Oh, ¿porque Sengoku es ‘mil koku’ como en la forma en que solían valorar los
territorios, y Senjougahara significa ‘campo de batalla’? En realidad, nunca lo consideré. Es
más, justo me acabo de dar cuenta de ello. Bien, no, quiero decir, ella está tan angustiada.
¿No es normal que quiera hacer algo?”
“Qué buena persona eres.” Dijo Oshino.

Lo dijo en un tono tan desagradable.

“Hay un libro llamado Compilación de Maldiciones de Serpientes que se realizó a mediados


de la era Edo; es un tomo extraño que no contiene más que excentricidades relacionadas con
las serpientes. Allí es donde aparece por primera vez información sobre la Jagirinawa, con
todo y una ilustración.”

“¿Una ilustración? ¿Qué aspecto tiene?”

“Representa a un hombre que está siendo constreñido por una serpiente gigante. El diseño
de la cola se parece a una cuerda de paja, mientras que la cabeza de la serpiente está en la
boca del hombre. La mandíbula del hombre está abierta hasta donde puede, casi como si
fuera una serpiente, esa es la imagen. Después de todo las serpientes pueden tragar animales
tan grandes como gallinas enteras.”

“Constreñido…”

“Apretado. Poseído.”

“……….”

“En otras palabras, Araragi-kun. Mientras hablamos el cuerpo de Ojou-chan está siendo
constreñido por una serpiente. Una serpiente que la aprieta, que la posee y la constriñe. Con
firmeza... y sin piedad.”

“Pero... ella dijo que no le dolía.”

“Eso es una mentira, por supuesto que lo es. Ella está tratando de soportar el dolor. ¿No te
sigo diciendo que la confianza es clave? Estás tratando con una chica tranquila, necesitas
tratar de leer lo que hay en su corazón, mirándola a los ojos.”

“Mirándola a los ojos.”

Eso me recordó, cuando Sengoku dijo que no le dolía, Kanbaru parecía querer decir algo...
¿Así que era eso? Dijo que las cosas necesitaban ser dichas, pero mantuvo la boca cerrada
acerca de lo más importante. Eso sin duda es muy propio de Kanbaru.
“Envolverse alrededor del cuerpo de una presa y pulverizar sus huesos para que sea más fácil
de comer antes de tragarlo es el comportamiento típico de una serpiente. No es fácil
conseguir que una serpiente te libere una vez que te tiene agarrado.”

“Ya veo... Claro, es una excentricidad, por lo que puede ignorar su ropa.”

Esas marcas solo estaban en su piel, y dejando a un lado los pantalones cortos de voleibol
ella parecía poder quitarse y ponerse la ropa libremente. Eso me había impedido pensar que
una excentricidad poseía el cuerpo de Sengoku, pero ¿qué iba a poder saber yo?
Simplemente no podía verlo.

“Una cuerda, ¿verdad?” Le pregunté a Oshino. ¿Y atada? Entonces, esas marcas de escamas
en su cuerpo no son rastros; en este mismo momento, una serpiente invisible se está
aferrando a ella.”

Esta serpiente gigante, la Jagirinawa, era invisible para mis ojos, para Kanbaru, y por
supuesto para también para Sengoku, por lo que solo vimos a través del efecto que la
excentricidad estaba teniendo en la piel de Sengoku.

“Incluso entonces.” Explicó Oshino. “Creo que solo porque tú y Lesbi-chan son
esencialmente mitad humanos, mitad criaturas, pueden ver esas marcas. Lo mismo ocurre
con Ojou-chan, que está en su agarre. Me imagino que nadie más que ustedes tres pueden ver
eso, por ejemplo, Tsundere-chan o Representante-chan, ni siquiera vería las marcas. Sin
embargo, podrían ver la hemorragia interna.”

No había necesidad de esconder las marcas con pantalones largos.

No hay razón para avergonzarse de su cuerpo.

Eso es lo que dijo Oshino.

Pero ese no me pareció el problema. Si, ese fuese ser el caso, lógicamente hablando, quizás
fue otro ejemplo de la mala suerte de Sengoku que Kanbaru y yo fuésemos los que vimos su
cuerpo, ¿pero no calificó más que como un problema si ella se veía de esa manera?

“Tal vez.” Admitió Oshino. “Sí, puede que tengas razón.”

“Esa fue una admisión muy rápida.”

“Incluso hay veces donde yo puedo ser honesto y directo. No tengo nada mejor que hacer en
este momento.”
“¿No puedes ser honesto y directo si no estás simplemente relajándote?”

“Ahora que lo pienso, entiendo que ella se vista con mangas largas y pantalones largos
cuando sale, pero, hasta ahora, ¿qué ha estado haciendo en la escuela? ¿Las chicas de tu
antigua escuela media no usan faldas como parte de sus uniformes?”

“En realidad no, son más como vestidos. ¿Una especie de todo en uno? ¿No los has visto en
tus incursiones de investigación?”

“Ah, sí. Así que esa es tu alma mater. Esos son lindos uniformes, pero ¿no podrían dejar sus
piernas expuestas?”

“Es por eso que Sengoku no ha ido a la escuela desde que esas marcas se hicieron visibles,
aunque logró hacerlo mientras aún podía ocultarlas con calcetines. Bueno, está bien, Oshino,
¿qué hay de esto? ¿Hay alguna manera de hacer visible el cuerpo de esta Jagirinawa?
¿Podrás verlo?”

“De ninguna manera, solo soy un humano.”

Al señor especialista no parecía importarle en absoluto no poder ver nada.

Con esa línea prácticamente estaba eludiendo sus deberes.

“Y no sólo yo.” Dijo. “En este tipo de casos, es básicamente difícil para otros ver lo que los
poseídos no pueden ver en sí mismos. No importa lo ex vampiro que seas. Como nota al
margen, no es la persona constreñida por la Jagirinawa sino quien lanzo la serpiente quien
puede verla, y este es un caso accidental, así que dudo que incluso esa persona pueda.
Probablemente esta amiga ni siquiera se ha dado cuenta de que la maldición se llevó a cabo.
De lo contrario, sería un gran problema en su clase. Bueno, no, tal vez esa amiga está
guardando silencio al respecto. Eso sería realmente malicia... pero no creo que sea eso. Hace
tiempo que Ojou-chan estaría muerta si ese fuera el caso. Pero no tiene sentido repasar todas
estas posibilidades. Hablando de conjeturas. Oh, pero una cosa, aunque no puedas verla,
Araragi-kun, podrás tocarla.”

“Hm... ¿Tal como lo hiciste aquella vez?”

“Uhhh, ¿de qué estás hablando?” Con bastante inutilidad, en mi opinión, Oshino se estaba
haciendo el tonto. “Si puedes tocarlo, deberías poder quitársela... pero es posible que no
quieras. Las serpientes son animales salvajes. Haz eso y estoy seguro de que la Jagirinawa te
atacará. E incluso si de alguna manera te escapas, buscará a la compañera de clase que le
lanzo la maldición.”

“La maldición regresara a quien la lanzo.”

“Sabes lo que dicen, cuando estas maldiciendo, cavas dos agujeros. Esta chica no debe haber
querido matar a Ojou-chan y, para empezar, probablemente no cree en maldiciones. Creo
que, honestamente, su intención era simplemente decir: ‘¡Maldita seas, te he maldecido!’ Por
despecho. Hmm. No me gusta que ella decidiera involucrar al ocultismo en algo tan
insignificante... ¿Cómo se supone que un extraño como yo se gane la vida? Este negocio es
malo para mí.”

“No puedo decir si te expresaste mal o no.”

“Ja, ja. Bueno, supongo que está bien.”

Con esas palabras, Oshino se levantó de su cama improvisada. Luego se alejó y trató de salir
de la habitación, así que rápidamente lo llamé desde atrás.

“¿¡Hey, a dónde vas!?”

“Eh. Espera aquí un segundo."

Eso fue todo lo que dijo antes de salir del aula.

Él era una persona voluble. En realidad, él solo estaba siendo egoísta.

¿Ahora qué...? Si tuviera tiempo, quería ver cómo estaba Shinobu, pero si en el proceso no
me volvía a encontrar con Oshino, sería una estupidez... ¿En qué aula estaba Shinobu? Era
raro que ella y Oshino estuvieran en aulas diferentes. ¿Se había peleado de nuevo con
Oshino por unas donas de Mister Donut?

Bien, debo presentar un informe de estado.

Saqué mi teléfono celular y traté de llamar a Kanbaru. Por cierto, Sengoku todavía no tenía
uno, algo típico para una estudiante de una escuela media rural. Por otra parte, incluso si mis
padres las encontraran, una de ellas es Kanbaru, así que estarán bien... Mientras no
descubran que es una pervertida bastante seria y una completa lesbiana, Kanbaru les parecerá
una joven ejemplar. Una joven que sobresalió tanto en el mundo académico como en el
atlético.
Pero en el momento en que intenté abrir mi lista de contactos...

“Gracias por esperar.”

Oshino volvió.

Eso fue rápido.

Tan rápido que me pregunté si sabía lo que iba a hacer.

Realmente actuó como si viese a través de todo.

“¿Hm? ¿Qué es esa comodidad moderna que sostienes en tu mano? ¿Estabas a punto de
llamar a alguien?”

“Bueno… solo estoy pensando en contactar con Kanbaru y Sengoku por adelantado. Parece
que esto tomará más tiempo del que pensaba.”

“En este caso no hay necesidad de llamar a llamar a nadie. Ya he terminado lo que fui a
hacer. Toma esto.”

Desde su posición en la entrada, Oshino lanzó directamente hacia mí todo lo que tenía en la
mano derecha. El repentino proyectil me hizo perder el equilibrio, pero de alguna manera
pude atrapar el objeto sin soltarlo.

Era un amuleto tradicional.

Tenía la forma de un amuleto estándar, pero la bolsa no decía nada.

No había palabras que indicaran si era para, por ejemplo, seguridad vial o fertilidad.

Un diseño en blanco.

“¿Qué es esto?”

“Puedes purificarla con eso. La Jagirinawa.”

“……”

“Hay un talismán dentro de él. Lo que podrías llamar un hechizo protector. Es diferente del
que te envié a colocar... y la bolsa en la que está no es nada, solo una funda. El talismán es
un poco poderoso así que se requieren medidas de seguridad. Medidas de seguridad, o tal
vez un limitador. No te equivoques, no es que lo único que tendrás que hacer será colocar
ese talismán en la frente como si fuera un jiangshi o algo así. De hecho, nunca saques ese
talismán de la bolsa. Como dije, es una medida de seguridad, un limitador. No se sabe qué
podría pasar. Te voy a decir el método correcto para usar esto, así que haz tu mejor esfuerzo
para recordarlo. Yo podría salir y ayudar, pero probablemente sea mejor si no lo hago, ya
que en lo que respecta a la construcción de la relación de confianza entre Ojou-chan, Lesbi-
chan y tú, está ya está establecida. Ser capaz de seducir a las chicas más jóvenes que ella en
diez segundos tampoco suena como publicidad falsa. Estoy muy impresionado. Estoy tan
impresionado. Estoy tan celoso. Ja, ja, y aunque pareces haberlo olvidado, parece que los
recuerdos de Ojou-chan sobre ti son bastante agradables, ¿no? De lo contrario ella no sería
capaz de desnudarse en el cuarto de un hombre al azar, Koyomi-onii-chan.”

“……”

Para ser honesto, no lo sabía.

Cuando se trataba de personas que nunca dejaban de hablar como Senjougahara, Kanbaru,
Hanekawa o Hachikuji, podía adivinar cómo se sentían, fueran esas palabras francas o no,
pero era difícil tratar con alguien que hablaba tan poco. Alguien con una personalidad
tímida. Quien se doblaba bajo presión y miraba hacia abajo ante la provocación más
pequeña…

Cuando pensé en la situación, fue sorprendente que esta misma chica rechazara
rotundamente a un chico. Alguien con su personalidad parecía ser del tipo que no podía decir
que no y que se arrastraría a ser la novia de alguien... Pero, una vez más, no tenía ningún
derecho a hablar sobre estos asuntos del corazón.

“Creo que es como si no te avergonzara desnudarte frente a un médico.” Dijo Oshino. “Eso
es lo que es una relación de confianza. Oh, ¿no fue Asclepio de la constelación de Ofiuco un
santo patrono de la medicina? Tal vez sea otro indicio.”

“Pero, Oshino... ¿Está realmente bien?”

“¿Qué está bien?”

“Que purificarla sea tan... rápido y tan simple. Normalmente actúas más pomposo, ¿sabes?
Señalas los pequeños detalles, o realmente nunca cooperas. También siento como si hubieras
tenido cuidado con tu habitual montaña de datos extras. No me digas que no hablabas en
serio cuando me dijiste que ya no te debo nada.”
“Oh, Araragi-kun. Te encanta regañarme, ¿verdad? Tú y yo sabemos muy bien que te
quejarás si me dejo llevar con los pequeños detalles. Empiezo a pensar que quien en verdad
es tsundere eres tú, y no Tsundere-chan. Estás animado, ¿te ha pasado algo bueno? No dije
todo eso para ser malo o algo así. Fue lo mismo para Representante-chan, Tsundere-chan,
Lesbi-chan, y especialmente para ti, Araragi-kun. Cada uno de ustedes se involucró por su
cuenta con una excentricidad, ¿no?”

“Bueno, respecto a eso...”

Tiene razón.

“Si me lo permites.” Continuó Oshino. “Todos ustedes fueron perpetradores. Fuese o no su


intención, fueron cómplices de sus excentricidades. Para las personas que se han ensuciado
las manos, al lavarse los pies, es necesario un cierto proceso. Pero en este caso es diferente,
¿no? Sengoku Nadeko no es más que una pobre víctima. Ella no ha hecho nada malo. Incluso
la razón por la que la Jagirinawa fue puesta sobre ella es débil. Por cada excentricidad, hay
una razón, pero ninguna de ellas fue por culpa de Ojou-chan. Diez serpientes, ¿verdad? Ella
pudo haberlas matado, pero incluso con eso estaba tratando de defenderse. Ella tuvo mala
suerte, no era su día, eso es todo. No soy tan irrazonable como para responsabilizar a la
víctima de la malicia de alguien. Lo que la gente así necesita es ser salvada.”

“……”

Así que eso es lo que era.

Lo siento, Oshino, pensé que estabas actuando de esa manera para ser malo...

Ahora tenía sentido... Por eso su tono sonaba tan grave desde el momento en que nombro por
primera vez la Jagirinawa. No tenía nada que ver con la Jagirinawa en sí. Eso fue puramente
Oshino pensando en la víctima, Sengoku Nadeko.

“Los crímenes necesitan ser expiados, pero no se puede permitir que alguien sea juzgado por
un crimen que nunca cometió. La gente en problemas necesita ser salvada, ¿verdad? Sí,
puede que no sea el tipo más amable, pero incluso a mí, en mi corazón, me queda mucha
bondad para los demás. Aunque eso no quiere decir que lo haga como voluntario, es mi
trabajo.”

“Sí, me lo imaginé.”
“Pero está bien. Esto puede cobrarse del cambio que te queda del trabajo que hicieron tú y
Lesbi-chan por mí. La Ojou-chan que es como tu hermana pequeña no necesita hacer nada a
cambio.”

“... Ya veo.”

Sí, pudo haber un problema de perpetrador contra víctima.

Pero incluso entonces, se sentía como si tuviese favoritismo.

Tal vez le gustaban las estudiantes de escuela media.

“Pero, Araragi-kun. Permíteme hacerte una advertencia: cuando uno está maldice, se cavan
dos agujeros. Sé que lo estoy diciendo otra vez, pero quiero que tengas las palabras en
mente, y quiero que pienses detenidamente en ellas.”

“Oh... Bueno, eso no será difícil, no es un consejo inaudito. No necesitas hacer nada especial
para aprender eso. He tenido muchas oportunidades de descubrir lo que significa esas
palabras sin tener que estar involucrado con excentricidades.”

“Estoy seguro de que eso es cierto, pero, Araragi-kun. No sé cómo ves esto, pero no es como
si fuese a vivir aquí para siempre.” Dijo Oshino, con un tono frívolo. “Eventualmente,
terminaré de recopilar e investigar. Después de todo, tú y Lesbi-chan han resuelto una de mis
principales preocupaciones, o más bien, han logrado uno de mis principales objetivos. Algún
día me iré de esta ciudad. Y cuando lo haga, no podrás venir a pedirme consejo, ¿sabes?”

Nuestras deudas también se habían saldado.

Oshino continuó.

“Ha pasado un tiempo desde que comencé a vagar de un lugar a otro, pero esta es la primera
vez que he hablado tanto con una sola persona. Existe el hecho de que te has involucrado con
una excentricidad tras otra, pero lo que es un poco extraño de ti es que intentas lidiar con
cada una de ellas. Una vez que te has involucrado con una excentricidad, es más probable
que las atraiga en el futuro, eso es cierto, pero la mayoría de las personas que se encontraron
con una excentricidad trataran en la media de lo posible no volvérselas a encontrar.”

“……”

“Así es como las cosas se equilibran. Esto se relaciona con lo que dije, de que eras tsundere,
pero dices todo tipo de cosas sobre las chicas, ¿no? Que son entrometidas, o que son buenas
cuidando a otros. Pero todos esos rasgos se aplican a ti, Araragi-kun, no es que sea algo
malo. Tengo tanta envidia de tu personalidad que sigo diciéndote cosas desagradables, pero
creo que eres bueno tal y como eres. Pero, ¿qué planeas hacer una vez que me haya ido?”

“Eh…, bueno.”

Bueno, nunca había pensado en eso.

No fue necesario decir que Oshino no residiría en mi ciudad por el resto de su vida, era un
hecho, pero la pregunta de qué haría una vez que se fuera no podría responderla en el acto.

¿Teníamos que hablar de esto ahora?

Oshino continuó. “Las excentricidades existen como si fuera natural que estuvieran allí, no
son algo que deberías buscar. Haz eso y podrías terminar siendo el perpetrador. Creo que te
preocupas demasiado, Araragi-kun. Eres sobreprotector. Tienes una tendencia a tratar de
hacer algo, incluso cuando puedes dejarlo estar.”

“Pero...” Pero aun así. “Una vez que me dé cuenta, ¿qué se supone que debo hacer? Sé sobre
estas cosas, ya sea que quiera o no, por lo que no puedo mirar hacia otro lado o pretender no
saber.”

“Jajaja, ¿hubiera sido mejor si lo hubieras olvidado todo, como Representante-chan? Ese
podría ser el mejor resultado para gente como tú, Araragi-kun. Olvidándolo todo, también a
Shinobu-chan.”

“¿Cómo podría olvidarla...?”

Después de que ocurrió tanto…

Por supuesto que no era posible.

Nunca me ocurriría lo mismo que a Hanekawa.

“Así es.” Dijo Oshino. “Respecto a Shinobu-chan, por supuesto. Una vez que me vaya
tendrás que cuidar de ella tu solo. Esa fue la elección que hiciste, aunque por supuesto
también eres libre de abandonarla.”

“Vamos, Oshino.”
“Tienes que ser siempre consciente del hecho. Porque Shinobu no es humana. No deberías
permitirte ser extrañamente empático. Ella es un vampiro. Ella podrá verse como es ahora,
pero eso no cambia los hechos, ¿de acuerdo?”

“……”

“Lo siento, ¿no debí decir eso? No hay de qué preocuparse, sin embargo, nos hemos llegado
a conocer tan bien. No voy a desaparecer de repente un día sin siquiera decir adiós. Soy un
adulto, conozco los modales correspondientes. Pero si estás pensando qué hacer después de
graduarte de la escuela secundaria, creo que no estaría mal pensar en esto mientras estás en
ello.”

“Entonces, ¿lo que estás tratando de decir es que es irresponsable para mí intentar salvar a
todos los que me encuentro? Que es irresponsable ser amable con todos, Hanekawa también
me dijo eso. Pero, Oshino, no puedo convertirme en alguien como tú. Como dices, estoy
cercano a que una décima parte de mi sea vampiro, una verdadera excentricidad. No puedo
entrar en el lado humano y evitar las excentricidades.”

Si lo hiciese, al primero que necesitaría desterrar seria a mí mismo.

Y luego a Shinobu.

Y eso, no estaría sucediendo.

No era algo que pudiera hacer.

“Yo no diría que eso es verdad.” Me dijo Oshino. “De todos modos este trabajo es todo
conocimiento y pericia. ¿Un mitad humano, mitad criatura que caza espíritus? Suena bien,
como un personaje de manga.”

“Bueno... tal vez sea posible, ya que incluso hay un especialista con camisa Hawaiana en el
campo...”

“Y.” Me recordó Oshino. “Si alguna vez en tu vida te apetece, Araragi-kun... puedes
abandonar a Shinobu y volver a ser un ser completamente humano, espero que tampoco lo
olvides.”
006
Estábamos en los restos del santuario.

Ese santuario abandonado en lo alto de la montaña.

Era el final de la noche, después de haber estado ocupados preparándonos durante tanto
tiempo.

Consideré esperar hasta el día siguiente, pero si esperáramos un día más, esas marcas de
escamas, el cuerpo de la Jagirinawa, podrían llegar hasta su cuello (no podría ocultarlo si eso
sucediera, ya que no podría andar por ahí con una bufanda en esta temporada, incluso si la
gente normal no pudiera ver esas marcas). Media noche o no, decidimos luchar por cada
minuto y segundo y hacerlo tan pronto como fuese posible. Mi familia tomó un enfoque de
no intervención conmigo, y lo mismo pasó con Kanbaru. Surgió un pequeño problema con
respecto al toque de queda de Sengoku como estudiante de escuela media, pero ella le pidió
a una de sus amigas de la escuela que presentara una coartada para ella (una pijamada o algo
así). Parece obvio, pero aparentemente Sengoku tenía otras amigas además de la que la había
maldecido.

Tener muchos amigos.

Es algo bueno, pensé.

Aunque al principio estaba más que un poco preocupado por hacer esto en las ruinas del
santuario donde todo comenzó, Oshino nos dio su sello de aprobación, diciéndonos que
estaba bien. Pensé que lo dijo porque ya habíamos colocado el talismán en la sala principal,
pero en realidad era una cuestión de proceso. Incluso si tratáramos con cosas malas, todo lo
que teníamos que hacer era ponerlas de nuestro lado, según él. La existencia de la Jagirinawa
sería más visible precisamente debido a la ubicación (sería más fácil entrar en contacto) o
algo por el estilo.

Para ser honesto no lo entendí.

Pero, supongo, era un consejo de un especialista. Yo confiaba en eso.

Shinobu estaba en una habitación en el tercer piso, así que le hice un saludo casual
(realmente se había peleado con Oshino por donas de Mister Donut. Una vez más se había
comido todos sus sabores favoritos. Oshino Meme, ni siquiera eres inmaduro, solo eres un
niño) antes de dejar la escuela abandonada y regresar directamente a casa. Efectivamente,
Kanbaru no había puesto un dedo en Sengoku a pesar de compartir una habitación con ella
todo el tiempo, ni había ido en pos de mis hermanas pequeñas, que ahora estaban en casa.

“¡Excelente trabajo reteniéndote, Kanbaru!”

“Sí... y escuchando la seriedad en tus palabras de elogio, por primera vez me pregunto si he
bromeado demasiado en tu presencia, y lo lamento...”

Kanbaru parecía deprimida.

Ella no solo no había tratado de seducir a Sengoku, sino que habían estado charlando.

“Kanbaru-san fue amable conmigo, Koyomi-onii-chan.” La introvertida Sengoku saltó para


defenderla. “Ella también me prestó sus pantalones cortos de voleibol.”

“Eso no cuenta como amabilidad.” Por primera vez interpreté el papel del hombre que
replica para Sengoku,

Un día para los libros de historia.

En cualquier caso, hablar con ella fue difícil porque nuestros intercambios no estaban
salpicados de chistes, a diferencia del resto del grupo. Gracias a esos bastardos, ya no podía
tener conversaciones normales. Lamentablemente para Sengoku, tendría que seguir nuestro
estilo.

Hice que ella y Kanbaru se escabulleran de mi casa mientras mantenía ocupadas a mis dos
hermanitas, y luego también salí, sin ninguna excusa.

Mis hermanas parecían sospechar (especialmente mi hermana menor, ella es una chica
perceptiva), pero al final las logre calmar y me dirigí al punto de encuentro para reunirme
con las chicas. Fuimos a una tienda (y no a una de conveniencia) que está abierta hasta tarde
para comprar las herramientas necesarias (ni Kanbaru ni Sengoku tenían mucho dinero dado
lo repentino del momento, así que pagué todo) antes de dirigirme a las montañas. Todos
caminamos.

“Sengoku.”

“Uh, sí... ¿Koyomi-onii-chan?”

Ella se había sobre-exaltado un poco.


Tal vez ella pensó que iba a gritarle.

Tan delicada, como si estuviera hecha de cristal.

“Esas marcas en ti, oí que realmente dolían. ¿Estás bien?”

“Ah…” Todo el color desapareció de su cara. “U-Um... Por favor, no te enfades.”

“No, no estoy tratando de culparte por nada.”

Probablemente pensó que estaba a punto de regañarla por mentir. No sabía si era tímida, o
demasiado rápida para verse a sí misma como una víctima... Cada vez que un personaje
como ella aparecía en un manga, me preguntaba qué tan irritante sería eso en la vida real,
pero en realidad no era tan malo... Antes de ser o no una buena persona simplemente tenía
ganas de protegerla. Por supuesto, el hecho de que ella fuera un poco más joven que yo
ayudó.

“Me preguntaba si estabas bien.”

“B-Bueno.” Sengoku bajo un poco su sombrero para cubrirse la cara. Como si quisiera
ocultarse. Como si ella no quisiera que la vieran. “Duele, como si algo me estuviera
apretando, pero... todavía puedo soportarlo.”

Pulverizando los huesos, para que sea más fácil de comer.

Ese es el comportamiento de una serpiente.

“... Para empezar tener que soportarlo es un error. Si algo duele, está bien decirlo.”

“Tiene razón.” Kanbaru interrumpió. “Atarse es una cosa, pero permanecer atado tiene un
costo sorprendente en tu cuerpo. Ya sea una serpiente o cuerdas.”

“Kanbaru, ¿por qué querrías atarte? Y, más sutilmente, el impacto emocional de eso, me
desconcierta.”

Esta mujer no se arrepintió de nada.

Sengoku sofocó una risita por nuestro ida y vuelta.

A pesar de su timidez, tal vez ella era rápida para reír. En ese caso, hablar sobre el zodíaco
de trece signos, que incluso provocó carcajadas de Kanbaru, estaba absolutamente fuera de
los límites alrededor de Sengoku. Ella podría reírse hasta morir.
Nos rociamos con un repelente de insectos que compre en la tienda antes de subir a la
montaña. Era la mitad de la noche, lo que significaba que teníamos que preocuparnos por los
insectos antes de cualquier excentricidad. Si bien todos estábamos totalmente protegidos con
mangas largas y pantalones largos, era una medida de seguridad adicional para Kanbaru y
para mí y bien podía ayudar a Sengoku.

Una vez que terminamos, nos pusimos en marcha.

Por supuesto estaba completamente obscuro.

Mientras subíamos las escaleras, los tres iluminamos el camino con las linternas que
habíamos comprado en la misma tienda. Los animales salvajes y los insectos eran
horriblemente ruidosos. No fue así en la tarde, y me sentí como si fuéramos exploradores en
alguna expedición. Estaba casi engañado al pensar que estaba perdido en una jungla.

“Sabes, Sengoku.” Dije.

“¿Sí?”

“Me preguntaba acerca de algo. ¿Por qué rechazaste a ese chico? No tenías ninguna idea de
que tu amiga tuviera sentimientos por él, ¿verdad? Así que no había ninguna razón para que
dijeras que no.”

“Bueno...”

Ella se calló.

El hecho de alguien con tan poca fortaleza mental, que se calló sobre esto, rechazara una
confesión de amor fue aún más desconcertante...

“Lo-lo siento.” Se disculpó. Sin razón.

“Um, no es algo por lo que necesites disculparte.”

“Ah, sí, tienes razón. Lo... Lo siento. Estoy... bien. Lo siento.”

Ella se había disculpado dos veces entre un solo par de comillas.

Tres veces en total.

Ella se disculpaba demasiado.

“No, Sengoku…”
Kanbaru habló. “Esa fue una pregunta bastante insensible. No se parece a algo que dirías. Sé
más considerado.”

“¿Oh, enserio?”

“Sí, realmente hay muchas razones para decir que no. De hecho, ¿por qué salir con alguien
que particularmente no amas?”

“Hmm...”

Era un punto legítimo.

También me di cuenta de que Kanbaru intentaba sorprenderme. “Tómame como ejemplo.”


Dijo ella. “Es porque te amo que…”

“¡No vamos a salir!”

“Eh... ¿En serio?” Preguntó Sengoku, desconcertada. “¿No estás saliendo con Kanbaru-san?”

“¡No!”

“O-Oh... Parecían llevarse tan bien que... estaba segura de que ustedes dos lo estaban.”

“Admito que nos llevamos bien.”

Tan bien como yo me llevaba con Hachikuji.

Por otra parte, a diferencia de Hachikuji, al menos Kanbaru nunca me difamó... En ese
sentido, tal vez me llevé un poco mejor con ella.

... En cuanto a la chica con la que estaba saliendo, solo parecía difamarme...

“Kanbaru. Apóyame y dile que no.”

“Mm. Tiene razón, no vamos a salir.” Le dijo a Sengoku en un tono explicativo. “Él y yo nos
estamos divirtiendo, estamos jugando.”

“Eso está muy abierto a la mala interpretación, ¿no es así?”

“Somos tan buenos amigos que podríamos descartar cualquier cosa como una especie de
accidente.”

“¿¡Estás siendo simplemente perjudicial!? ¡Te odio!”

“Hey. Escuchar ese tipo de cosas duele.”


“Ack. Er, lo siento. Te quiero.”

¿No que se alegraría de cualquier cosa que le dijera? Qué chica tan complicada.

En realidad, el débil era yo por estarme disculpando.

Incluso cuando Kanbaru y yo discutimos, Sengoku murmuró: “Oh... así que no van a salir.”
Por alguna razón sonando aliviada.

“Lo rechacé porque hay alguien más que me gusta.” Nos dijo. Su aparente vergüenza era
dulce. “Pero... mi amiga me parece haber entendido mal... y ahora esto sucedió... Me
pregunto si fue mi culpa...”

“No te culpes a ti misma. Por otra parte, no se suponía que terminara tan mal, se debe a ese
santuario.”

Por culpa de ese santuario.

“Oh, sí, Kanbaru. Probablemente vas a empezar a sentirte mal... El efecto del talismán no es
inmediato, o eso me han dicho.”

“Bien por mí. Además, puedo estar lista para ello si sé que va a venir.”

“Ya veo.”

Qué atleta.

Todo lo que necesito fue agallas, ¿eh?

Normalmente lo refutaría como algo no científico, pero me encontré creyendo dado que es
Kanbaru. Después de todo, era una mujer formidable que había pasado de ser una niña torpe
a una jugadora de baloncesto de nivel nacional gracias a nada más que agallas y el esfuerzo
por seguir adelante.

“Koyomi-onii-chan, ¿cuánto recuerdas del pasado?”

“Uh... bueno, para ser honesto, no mucho. No tengo muy buena memoria.”

“Oh...”

Sengoku estaba visiblemente decepcionada.


“Tú, por otro lado.” Rápidamente le di la vuelta al tema. “Me recuerdas. Estoy impresionado
ya solo llegamos a jugar juntos unas cuantas veces cuando eras pequeña. Y solo era el
hermano mayor de tu amiga. Uno normalmente olvida esas cosas.”

“No pude jugar mucho con la gente.” Dijo Sengoku con tono entrecortado. “En ese entonces,
la única amiga que tenía que jugaba conmigo después de la escuela era Rara-chan...”

Con Rara-chan debe haberse referido a mi hermana menor. Bien, las amigas que ella trajo
solían llamarla así. Su apodo de escuela primaria, Rara, extraído de nuestro apellido,
Araragi. Ahora, sin embargo, ella y mi otra hermana pequeña, juntas son las “Fire Sisters” de
la Segunda Escuela Media Tsuganoki...

Cómo cambian las cosas.

Por supuesto que la gente cambia.

Pero si vamos a hablar sobre esos días, en aquel entonces me molesté cuando mis hermanitas
trajeron a sus amigas y me hicieron jugar con ellas...

Me daba vergüenza jugar con chicas.

Así fue a esa edad.

“Aunque Rara-chan y yo no vamos a la misma escuela... todas las veces que jugué con ella,
y contigo, son mis preciados recuerdos.”

“Ya veo.”

Eso me hizo sentir mejor.

Por cierto, no le había contado a Sengoku de las excentricidades que Kanbaru y yo


llevábamos, solo le di una sensación de que teníamos algo que ver con ellas. Ciertamente
podría compartir eso con ella, y tal vez lo necesitaba en términos de crear una relación de
confianza, pero después de hablar con Kanbaru, presté atención a la posibilidad de que solo
pudiera acelerar una crisis mental. Así que probablemente Sengoku no entendía por qué
alguien se sentiría enfermo por ir a un santuario, y quizás pensó que Kanbaru era
espiritualmente sensible, o algo así. Por otra parte, eso no estaba del todo mal.

“Soy hija única.” Dijo Sengoku. “Estaba celosa de que ella tuviera un hermano mayor.”
Sonaba como un caso de querer lo que no puedes tener. Como alguien sin una hermana
pequeña queriendo tener una.
A veces me hubiera gustado tener un hermano o hermana mayor, o un hermano menor, y
envidiaba a las personas que los tenían. Pero tal vez fue diferente para alguien como yo, que
tenía pequeñas hermanas, y para Sengoku, que era hija única.

Entonces, ella era hija única.

“Hey, ¿qué hay de ti, Kanbaru? No tienes hermanos, ¿verdad?”

“No. También soy hija única.”

“Ya veo.”

Y lo mismo fue para Senjougahara, Hachikuji, y también Hanekawa. Huh, todas eran hijas
únicas. Y... ¿Shinobu?

¿Los vampiros tienen hermanos?

“Bien, ya llegamos.”

Estaba liderando el camino, así que, por supuesto, fui el primero en llegar.

Las ruinas de un santuario.

Una vista desolada, estéril.

El talismán estaba inmóvil, pegado a la puerta.

“¿Te sientes bien, Kanbaru?”

“Sí. Mejor de lo que pensé.”

“Intenta decir algo estúpido.”

“Me gusta leer libros en la carretera y hacerme marear.”

“Intenta decir algo gracioso.”

“¡No pude evitarlo! ¡Él amenazó con no pagarme si no lo hacía!”

“Intenta decir algo pervertido.”

“Justo cuando pensé que la chica que me gustaba era virgen, resultó que era una alimaña.”

“Ok.”

La última fue un poco rara, pero ella parecía estar bien.


A mi lado, Sengoku se estaba abrazando y temblando. Habíamos sido afines a su sentido del
humor.

Ella realmente era rápida para reír.

Parecía estar más divertida con mi interacción con Kanbaru que con el contenido real, pero
en realidad fue una buena reacción de la audiencia, así que no podía quejarme.

“Está bien.” Dije. “Comencemos a preparémonos... Preparémonos ya.”

Kanbaru me preguntó: “¿Por qué te molestaste en corregirte?”

Encontramos un lugar apropiado... es decir, un lugar que no estaba demasiado cubierto de


hierba, luego colocamos cuatro linternas, las tres que sosteníamos más una que estaba en mi
bolso, en cada esquina, formaron un cuadrado que iluminaba el centro.

El suelo estaba sucio.

A continuación, dibujamos líneas utilizando una rama de árbol cercana y unimos las
linternas en un cuadrado casi perfecto, el llamado límite espiritual. Fue bastante
improvisado, pero según Oshino serviría, porque el simple hecho de que estaba demarcado
era lo que más importaba de estos límites. Extendimos una lámina de plástico en el suelo
para cubrir el terreno. Naturalmente también fue comprada en la tienda.

Y entonces, Sengoku entró en el cuadrado.

Sola.

En un traje de baño escolar.

“……”

El traje de baño no fue adquirido en la tienda (no los venden en ese tipo de tiendas). Al igual
que esos pantalones cortos de voleibol, Kanbaru “casualmente” tenía uno a mano.

Le dije: “No tenías dinero para comprar una linterna, así que, ¿qué haces llevando pantalones
cortos de voleibol y trajes de baño de escuela?”

“Hay algunas cosas en este mundo que el dinero no puede comprar.”

“Estoy completamente de acuerdo, pero los pantalones cortos de voleibol y los trajes de baño
de escuela no están entre esas cosas.”
“Intentaba ir de acuerdo a tus gustos.”

“Bueno, no lo hagas.”

“¿No estás negando que sean de tu gusto?”

Verifiqué que Sengoku realmente se estaba riendo entre dientes, casi ya no pudiendo
contenerse... La broma fue en torno a que llevaba un traje de baño de escuela en medio de un
santuario decrépito, ¿pero a ella también le pareció gracioso?

De todos modos.

Para ver cómo avanzaba la purificación, necesitábamos hacer un seguimiento de las marcas
de escamas en su piel, y las instrucciones de Oshino eran que no debía quedarse en mangas
largas y pantalones largos, pero no podíamos tenerla en nada más que un par de pantalones
cortos de voleibol al aire libre. Mientras nos mostraba las marcas de Jagirinawa en mi
habitación, en un momento dado Sengoku se había quitado las manos del pecho, haciendo
que empezase a llorar de nuevo, un contratiempo que incluso un chico honesto como yo no
compartía con Oshino, así que esto era especialmente necesario.

Y así, un traje de baño escolar.

En lugar de cambiarse en el santuario, se lo había puesto bajo las mangas largas y los
pantalones largos como una colegiala de escuela elemental. Aunque pudimos ver las marcas
de escamas en sus piernas, el traje de baño escondió su torso, lo que dificultó medir la
magnitud de su aflicción, y tal vez solo me lo estaba imaginando, pero parecían haber subido
alrededor de su cuello. ¿Su agarre en ella se había fortalecido?

Si es así, teníamos que darnos prisa.

Simplemente no lo vimos.

Pero el cuerpo de Sengoku, todavía estaba constreñido en una serpiente gigante.

Le entregué el amuleto que Oshino me había dado.

“Ahora, siéntate en el centro... en la lámina de plástico. Sostén el amuleto tan fuerte como
puedas, cierra tus ojos, calma tu respiración, y todo lo que necesitas hacer es orar.”

“Orar... ¿A qué?” Preguntó Sengoku.

“A algo. En este caso, probablemente a…”


La serpiente.

El dios de las serpientes.

La Jagirinawa.

“Está bien... haré mi mejor esfuerzo.”

“Perfecto.”

“Koyomi-onii-chan... ¿Me cuidarás?”

“Lo hare.”

“Tienes que cuidarme.”

“... Sí, definitivamente lo haré.”

En cualquier caso, era lo único que podía hacer.

Honestamente, desde aquí todo dependía de Sengoku.

No importa lo que pase.

La gente se salva por sí misma.

Salí del límite y, junto con Kanbaru, que acababa de terminar de encender un serpentín de
mosquitos, rodee una parte del terreno para pararme frente a Sengoku.

“Bueno...”

Los ojos de Sengoku ya estaban cerrados.

Sus dos manos estaban apretadas contra su pecho.

El ritual ya había comenzado.

Ni siquiera Oshino sabía cuánto tiempo tomaría, había dicho que en el peor de los casos
debía estar preparado para quedarme aquí toda la noche. Kanbaru y yo éramos una cosa,
pero no sabía si la psique de Sengoku podría resistir tanto tiempo. Tendríamos que
intentarlo. Para esto no había ensayos.

El resplandor de las linternas.

La iluminaron gentilmente, desde cuatro esquinas.


“Hey.” Me habló Kanbaru.

Su voz era tan baja que podría haberla pasado por alto, a pesar de que ella me hablaba
directamente. Debe de ser su forma de ser considerada con Sengoku, que se estaba
concentrando dentro del cuadrado, pero en ese caso, ¿no era mejor no hablar en absoluto?

“¿Qué pasa?” Dije. “De aquí en adelante no más bromas.” No podíamos permitirnos hacer
reír a Sengoku durante el ritual. De ser así todo sería en vano.

“Pero, ahora que estamos aquí, hay algo sobre lo que me estaba preguntando.”

“¿Sobre qué?”

“El asesinato de la serpiente que ella llevó a cabo con firmeza por su cuenta. ¿Qué hay de
todo eso?”

“Es una manera increíble de decirlo... pero sí. Te refieres a cortar esas serpientes.”

“Sí. ¿No se debía hacer esto, sólo en la forma correcta, la medida correcta, en lugar de esta
onerosa ceremonia?”

“Bueno, sí... y dije lo mismo, pero parece que así llevaría incluso más tiempo. Eso según
Oshino. Aparentemente, cuando se trata de cortar serpientes, lo importante es en realidad el
lugar.”

“El lugar... Y como las cosas malas se reúnen aquí...”

“Bueno, este lugar es el peor de todos, pero eso no significa que cualquier otro lugar serviría.
No tuve tiempo suficiente para pedir detalles, pero habló de que no es muy efectivo a menos
que uses serpientes de Tohoku, o alguna cosa.”

“¿Diferencias regionales?”

“Diferencias regionales. Eso es algo importante cuando se trata de excentricidades.”

Había que hablar de ello, y todo eso.

Sengoku había elegido esta montaña porque había escuchado que podía encontrar serpientes,
pero supuestamente necesito hacer un mejor trabajo al escoger su montaña y sus serpientes
para el ritual. Por supuesto y para empezar, en lo que a eso se refiere, habría sido mejor que
Sengoku Nadeko no hubiera hecho nada.

Ella, de todos los lugares, eligió este lugar de reunión.


Este lugar donde las cosas malas se reunieron.

Pero ahora, irónicamente, necesitábamos poner esas cosas malas de nuestro lado para ayudar
a liberar a Sengoku de su excentricidad.

“Lo tengo, tiene sentido.” Dijo Kanbaru. “Oshino-san mantiene algunas cosas bastante
útiles, ¿no es así? ¿Un amuleto que puede usar para exorcizar excentricidades?”

“Cuando le pregunte por eso, él dijo que no era tan útil como objeto. Es inútil, excepto en
casos como este.”

Sólo funcionó porque la excentricidad había sido enviada por un humano.

Y solo porque era una serpiente.

“Así que estamos combatiendo juego sucio con juego sucio.” Comentó Kanbaru.

“Lo describió como una heterodoxia para otra.”

“Supongo que está bien si salva a Sengoku-chan... Aun así, realmente intentas ayudar a cada
persona que te encuentras, ¿no?”

Amable con todos

Irresponsablemente amable con todos.

“No diría cada persona, pero lo hago siempre que puedo.” Le respondí. “Especialmente si es
alguien que conozco.”

“Creo que eso es parte de lo que mi querida senpai ama de ti, y yo también, creo que es parte
de tu encanto. En este punto, me alegro de que esté saliendo con alguien como tú. Pero
espero que...”

Kanbaru se detuvo antes de continuar.

“Si llega el día cuando tengas que elegir a una sola persona, espero que la elijas sin pensarlo
dos veces.”

“……”

“Eres libre de sacrificarte tanto como quieras, pero por favor cuídala bien... No es que
realmente tenga derecho a decir esto.”

El brazo izquierdo de Kanbaru.


Una vez trató de matarme.

No porque alguien la obligara.

Sino porque tenía una firme voluntad propia, como una excentricidad.

“Kanbaru... creo que tienes derecho a decir eso. De hecho, creo que estás especialmente
calificada.”

“... Es bueno saberlo.”

“Me alegro tanto de que seas la kouhai de Senjougahara como tú de que yo sea su novio.”

“Escuchar eso de ti… realmente ayuda. Oh…”

Allí, Kanbaru señaló al frente.

A Sengoku, quien estaba allí orando con todo su corazón y alma.

Y cuando la miré.

Las marcas de escamas en las partes de su cuerpo que no estaban cubiertas por el traje de
baño de escuela, esas huellas claras grabadas en cada centímetro de ella, se fueron
desvaneciendo gradualmente. Oshino había dicho que estuviera preparado para pasar toda la
noche, pero no habían pasado ni diez minutos.

Entonces, ese talismán sí que era poderoso.

El proceso iba bien.

Las marcas de escamas en la base de su cuello desaparecieron. Las marcas de escamas


alrededor de sus clavículas, desaparecieron. La Jagirinawa estaba saliendo de Sengoku.

“Parece que está avanzando, sin ningún problema.”

“Sí.” Kanbaru estuvo de acuerdo.

“Estupendo.”

Dada mi propia presencia, que tendía a echar a perder todo, este estado de la situación,
honestamente, podría calificarse de inesperado. Bueno, gracias a Dios. Ahora Sengoku
necesitaba mantenerse enfocada por otro minuto…
“Aun así.” Dije. “No es como si todo hubiera terminado una vez que la liberemos de la
serpiente.” Para evitar agotar la motivación de Sengoku, por supuesto, no le había dicho esto
antes de tiempo. “Como mínimo, su relación con esa vieja amiga se romperá
irreparablemente.”

“Bueno... podrías tener razón.” Kanbaru asintió. “No hay mucha gente que pueda perdonar
algo así. No... No es que Sengoku-chan quisiera arreglar la amistad, y tampoco la otra parte.”

“Entonces, eso se traduce en una ruptura en su relación.”

Los humanos asustaban más que las excentricidades.

Sin embargo, no hay necesidad de dar voz a tal cliché.

“Los enredos románticos dan tanto miedo.” Dije. “Pero me pregunto de quién está
enamorada Sengoku. Estoy un poco celoso de saber que alguien por ahí es el objeto de los
afectos de esa linda chica.”

Cuando se tratara de un manga de comedia romántica, el interés amoroso no resultaría ser


nadie más que yo, pero dudaba mucho de que ese fuera el caso. Yo era su “Onii-chan” y
nada más.

Hermano y hermana.

Aunque dije que estaba celoso, tenía una novia, así que claro, si Sengoku realmente tenía
sentimientos por mí, solo sería un dolor de cabeza. Pero aprovechar esta oportunidad para
revivir nuestros lazos, hará que quizás todo esto no fuese algo tan malo. Sería un buen
desenlace, y ella era lo suficientemente precaria como para que alguien tuviera que cuidarla,
aunque no tenía idea de lo que dirían mis hermanitas...

“Después de todo ella es una niña. ¿Y, tiene catorce años? Jejeje.” Kanbaru se rio entre
dientes. “Yo incluida, no todas las chicas de su edad anhelan que un príncipe de blanco
venga y las salve.”

“Bueno, sí, estoy seguro...”

Porque, por un lado, sería un príncipe sobre azul. Hay que ver, de blanco... ¿Cómo un
doctor?

Ofiuco.
“Vamos, Kanbaru, ¿no te dije que nada de bromas? Todavía no hemos terminado, así que no
podemos arriesgarnos a romper su concentración.”

“¡Mira!” De repente Kanbaru gritó.

Fui yo el que termino con su concentración rota. Sin cuidado, había quitado mis ojos de
Sengoku. Cuando volví mi mirada hacia ella, Sengoku Nadeko se había derrumbado boca
arriba sobre la lámina de plástico que habíamos tendido en el suelo, y estaba temblando de
forma violenta y monstruosa.

Su boca.

Estaba abierta de par en par.

Su mandíbula estaba lo más abierta posible.

Como una serpiente, tragando un huevo.

Como si pudiera haber, una cabeza de serpiente dentro.

“¿Q-Qué pasó?”

“No lo sé, de repente...”

Las marcas de escamas en el cuerpo de Sengoku estaban desapareciendo.

Estaban a mitad de camino.

Pero, la otra mitad se quedó.

No habían desaparecido.

Y.

Incluso estaban en el cuello de Sengoku, donde hace un momento no parecían estar. La


serpiente, la Jagirinawa la tenía agarrada.

¿Qué pasó... qué salió mal?

¿Dónde nos habíamos equivocado?

La ilustración de la Jagirinawa que Oshino había mencionado que estaba en la Compilación


de Maldiciones de Serpiente, de un hombre constreñido por una serpiente que entró en su
cuerpo a través de su boca, no era una excentricidad mortal sino una excentricidad mortífera
y asesina.

Un dios serpiente.

Posesión de un dios serpiente.

“¿¡Falló!?” Gritó Kanbaru. “¿¡Paso eso!? Falló, y el ritual de purificación se salió de control,
enloqueció...”

“No, se supone que este ritual no es un truco arriesgado... No es una hazaña poderosa. Por
eso es heterodoxo. No se supone que surgiesen contratiempos, no hay razón para eso. Porque
se supone que esto es como una negociación con la excentricidad...

Preguntarle.

Tienes que preguntarle, había dicho Oshino.

Humillarte ante él.

Y sin embargo... ¿Sengoku se dejó distraer, como en el caso de Senjougahara? Incluso


entonces... de repente la excentricidad llega a su etapa final...

¡Estaba yendo tan bien hasta que estaba a mitad de camino!

“… ¿A medio camino?”

Mierda, me tarde en darme cuenta.

Sengoku se retorcía en la lámina de plástico.

En sus piernas, aún sin cubrir, que se extendían desde el traje de baño de escuela, se podía
ver que las marcas de escamas habían desaparecido a medias.

A medias, de la forma más grosera.

Las marcas de escamas habían desaparecido completamente de su pierna derecha, pero


permanecían en cada centímetro de su pierna izquierda, desde los dedos de los pies hasta su
entrepierna.

Ni una sola había desaparecido.

No sabía sobre su torso, pero era lo mismo para su cuello y clavículas, tan claro como el día,
una vez que lo note...
“Kanbaru... lo entendimos mal. Si solo pudiéramos ver, nos habríamos dado cuenta de
inmediato...”

“¿¡Qué quieres decir!?”

“La Jagirinawa, no era solo una. Había dos.”

“……… ¡Kk!”

Aun así…

Hubo pistas que deberíamos haber captado.

Los rastros cubrían cada centímetro de su piel, aparte de sus brazos y su cuello hacia arriba.
Sus dedos de los pies, sus espinillas, sus pantorrillas, ella, claro está, tiene dos piernas. Que
una serpiente se enrollara alrededor de cada centímetro de sus dos piernas era
estructuralmente imposible. Si solo hubiera sido una serpiente, no podría haber marcas en
sus muslos.

Desde las puntas de los dedos de cada pierna.

Una Jagirinawa tenía su agarre sobre ella, una para cada pierna.

Como si estuvieran constriñendo el cuerpo de Sengoku.

Dos serpientes.

“¡Maldita sea!”

Una de ellas, había sido eliminada con el poder del amuleto de Oshino.

Una Jagirinawa se había ido.

Había desaparecido.

Pero entonces se gastó el poder del amuleto.

No había dicho lo suficiente, si me hubiera dado cuenta de que había dos Jagirinawa, Oshino
habría ideado un plan apropiado. A diferencia de cualquier otro momento, no había límite a
cuánto ayudaría. Sengoku Nadeko era una víctima, y estaba haciendo todo lo posible. Pero
como habíamos basado nuestra discusión en una Jagirinawa, él había preparado una
estrategia para una sola…
Es por eso que la otra se estaba volviendo loca. Por supuesto que era la otra serpiente gigante
con la que había compartido su control sobre Sengoku la que había sido exorcizada.

“¡Kanbaru! ¡Ve con…, no, quédate aquí!”

“¿No deberíamos contactar a Oshino-san?”

“¡Él no tiene un teléfono celular!”

No por principio, sino porque era un fracasó manejando artilugios modernos.

Así que, nuestra única opción era un enfoque crudo o frontal.

Corrí hacia el límite improvisado, hacia la plaza iluminada por las linternas. Agarré el cuerpo
de Sengoku y la senté erguida, estaba caliente al tacto. Se podría decir que está ardiendo. Era
tan malo que pensé que mi mano podría quemarse...

Las marcas de escamas en la base de su cuello.

Ahora estaban cavando tan lejos en su piel que llamarlas rastros sería ridículo. Estaban
devorándola hasta el punto de alterar su silueta, apretando como para pulverizar sus huesos y
desgarrar su carne.

Como si quisiera cortarla.

Para luego comérsela.

Casi podía escuchar a su cuerpo gemir y crujir.

“Sengoku...”

Sus ojos se habían vuelto hacia atrás, había perdido el conocimiento.

Para ser tragada entera…

“¡Nkk...!”

Puse su cuerpo, que estaba sosteniendo, otra vez sobre la lámina de plástico.

Entonces, lentamente dirigí mis manos hacia ella.

No, no hacia ella.

Hacia la Jagirinawa.

“Incluso si no puedo verla, deberías poder tocarla.”


Él lo había dicho así.

Desde las vacaciones de primavera, por mis venas corría sangre de vampiro. Sangre. Se
podría decir que yo mismo fui una excentricidad, y una excentricidad debería poder tocar
otra excentricidad.

Si podía tocarla, podría quitársela.

Correcto.

La clave era imaginarlo. Visualizar la Jagirinawa a través de los rastros que sus escamas
dejaban grabado en el cuerpo de Sengoku, y descifrar la forma en que ejerció su agarre. No
podía permitirme el lujo de equivocarme. Maldita sea... Como la menor de mis dos hermanas
pequeñas, y a diferencia de la mayor, siempre he sido de permanecer en interiores... así que
esta fue mi primera vez tocando una serpiente. La primera vez iba a ser una excentricidad...

Yo, ten coraje.

Incluso Sengoku, que solía jugar con mi hermana más pequeña, atrapó a más de diez
serpientes por su cuenta. ¿Qué clase de Onii-chan temía hacer tanto?

“Agh... ¡Hkk!”

Deslizarse…

Una sensación desagradable, en mis dos manos.

Una sensación parecida a meter las manos en moco.

Una sensación parecida a meter las manos en escamas punzantes y que estas se te claven.

Era simplemente asqueroso.

Lo que lo hizo asqueroso fue que estaba tocando algo que no podía ver, nunca había pensado
que hacerlo fuera tan visceralmente repulsivo. Había reunido una voluntad tan fuerte para
tocarla, pero ahora quería quitar mis manos de la excentricidad tan pronto como fuera
posible.

Traté de usar su delgadez a mi favor deslizando mis manos a su alrededor para colocarlas en
la posición correcta. Agarrando su cuerpo cilíndrico, del tamaño de lo que debe ser el muslo
de un físico-culturista, tiré con todas mis fuerzas.

No era como si tuviera la destreza física de un vampiro.


Además, estaba resbaladiza.

Debido a que estaba tirando en la misma dirección que sus escamas, no estaba poniendo en
uso mi fuerza. Cambié mi enfoque y clavé mis uñas en el cuerpo de la serpiente gigante (era
tan suave que sentí como si mis dedos se hundieran en él) antes de tirar de nuevo.

¡Para quitársela de encima!

“¡Gaaa...! ¡Aaaaaaagh!”

Un dolor inimaginable, corrió por mi brazo derecho.

Miré de dónde venía el dolor al ver sangre brotando por todas partes. Mi brazo se aplastó
como si una prensa mecánica lo hubiera agarrado, desde la muñeca hasta el codo, dos
agujeros profundos habían perforado en esa área aplanada.

“¿¡E-En serio!?”

La cabeza de la serpiente ya se había retirado de la boca de Sengoku; mis dedos que se


hundían en su torso habían sido entendidos como un ataque, y había dejado de su cuerpo
para contraatacar. Porque no podía verla no me di cuenta hasta que me mordió.

“Oww... ¡¡Owwwww!!”

El dolor abrumador me hizo saltar y rodar confundido, mientras que el cuerpo de Sengoku
parecía agitarse y caer al azar alrededor de la lámina de plástico cuadrada, probablemente
como resultado de que la Jagirinawa perdiese su agarre sobre su cuerpo. Sólo podía adivinar,
ya que no podía verla, pero dada la situación debe haber sido así.

Lo que significaba, ¡que venía a agarrarme y poseerme!

Antes de que pudiera intentarlo, golpeé mi brazo derecho aplastado contra el suelo. Un dolor
aún mayor me invadió, pero un momento antes de que mi brazo golpeara el suelo pude sentir
los colmillos enterrados, los de la Jagirinawa, sin duda, deslizándose. Al darme cuenta de
que mi plan era clavar su cabeza entre mi brazo y el suelo, actuó en consecuencia. Como
resultado, todo lo que pude hacer fue golpear mi brazo herido contra la tierra.

Casi sentí que mi brazo se había desprendido.

Un momento después, fue mi pierna.

Mi tobillo izquierdo.
Scrush, se oyó un sonido aplastante.

Como con mi brazo, parecía que esta serpiente podía aplastar un cuerpo humano sólo con su
mordida... Qué monstruosa fuerza de mandíbula. Bueno, era la fuerza de la mandíbula de,
literalmente, un monstruo, pero aun así, estimando dónde estaría la cabeza de la Jagirinawa
por las marcas de los colmillos perforados en mi tobillo, puse mis dedos entre su boca y mi
pie y los separé, aunque me estaba mordiendo con una fuerza absurda, utilicé el pequeño
hueco que creé para girar mi pierna hacia afuera. Sus colmillos habían estado clavados en mi
pierna, hasta los huesos, pero los nervios aún parecían intactos. Estaba bien, todavía se
movía.

Hubiera sido bueno si pudiera sostener la boca de la serpiente, pero la solté por reflejo
cuando sentí una bofetada húmeda en la mano (la lengua bífida de la serpiente debió de
lamerme).

“¡Nkk!”

Aun así, la patada ciega y fuera de forma que le di a la Jagirinawa la hizo alejarse de mí, o al
menos así lo sentí. Fue lo mismo que patear una pelota de goma, así que dudé de que hubiera
causado algún daño. Luego rodé hacia atrás, dos veces, tres veces, para poner algo de
distancia entre la Jagirinawa y yo.

Apenas anteayer le había dado a Shinobu mi sangre.

Eso significaba que mi cuerpo debería poder curarse a sí mismo incluso más de lo normal,
pero mi brazo derecho aplastado y mi tobillo izquierdo no se estaban recuperando como
deberían. Ni siquiera mostraron signos de hacerlo. El dolor tampoco desaparecía... Espera...
¿La Jagirinawa era una serpiente venenosa?

Incluso los vampiros son susceptibles al veneno. Más aun considerando lo poco vampírico
que era. Shinobu en la flor de su vida se habría librado de una herida así con bastante
facilidad…

Salté de espaldas sobre una pierna. Mi brazo derecho colgaba inútilmente a mi lado. Incluso
estar de pie me dolía demasiado.

No era como si no tuviera experiencia luchando contra excentricidades, parientes y afines,


durante estos últimos meses. De hecho, se podría decir que tuve bastante experiencia durante
un corto período de tiempo. Pero, nunca había luchado contra una excentricidad que no
podía ver. Siempre había pensado que en estos tiempos el concepto del hombre invisible era
ridículo, que ni siquiera era bueno para una broma. ¡Nunca imaginé que un enemigo
invisible pudiera ser tan terrible!

Luchaba contra una serpiente.

Recordé que las serpientes tenían algo llamado órganos de fosa que les permitía detectar la
radiación infrarroja y encontrar presas a través del calor, lo que significaba que la diferencia
de altura de nuestros niveles oculares probablemente no funcionaba a mi favor. Contra este
enemigo no servía de nada ocultarme.

Ssszzzsss...

Podía escuchar un sonido.

De algo arrastrándose, arrastrándome hacia mí.

“... ¡Kk! ¡A-Ahh!”

Mientras pude pararme sobre mi pierna izquierda, no podía usarla para mucho más. Mis
movimientos ahora eran tan ineficientes como podrían serlo, pero... probablemente la
Jagirinawa había intentado atacar mi parte superior del cuerpo, y me atrevo a decir que lo
esquivé.

Dándome la vuelta, traté de adivinar dónde aterrizó.

El punto de aterrizaje de la Jagirinawa

Me quedó claro.

“Yo... podría ser capaz de hacer esto.”

Simplemente podría... ser capaz de hacerlo.

Me puse en guardia para poder confirmar mi suposición.

Esperé el segundo golpe, con los ojos fijos, mantuve los ojos pegados a la posición actual de
la Jagirinawa. Para saber lo que hará tu oponente, míralo a los ojos. No es que supiera si
debía mirar a los ojos de la serpiente o a los órganos de fosa, para empezar, no es que la
Jagirinawa fuera visible...

¡Se movió!
Salté a un lado y la esquivé.

¡Clamp! Vino un ruido desde justo a mi lado, como si se hubiera puesto en marcha una
trampa para osos, sin duda el sonido de la boca de la Jagirinawa cerrando al fallar. Me dio
escalofríos, si esa cosa mordía mi cabeza, sería el fin del juego. La aplastaría de inmediato.

Pero...

Vi una manera de ganar.

El terreno era mi aliado.

Un suelo de tierra.

Cubierto de hierba.

Las serpientes, son criaturas que se arrastran por el suelo.

Eso era cierto incluso si la criatura era una excentricidad.

Puede que no vea a la Jagirinawa en sí, pero dejaba un rastro claro, al igual que las marcas
de escamas grabadas en el cuerpo de Sengoku. El suelo por el que se arrastraba levantó
polvo.

La hierba se separó como si estuviera en el camino.

Sobre asfalto u hormigón, no tendría tanta suerte. Si el exorcismo de la serpiente se hubiese


llevado a cabo en la escuela abandonada donde vivía Oshino, como en el caso de
Senjougahara o Kanbaru, ya estaría acabado. Pero espera.

Tal vez esta elección de escenario fue cortesía de Oshino.

Bien, ahora que lo pienso, esta excentricidad podía ignorar la ropa. Tenía sentido que
pudiera hacer lo mismo con la tierra o el césped. Incluso su deslizamiento sszss y el sonido
de su boca al cerrarse no deberían haber sido audibles. Si la Jagirinawa podía hacerse notar
en el campo, era cosa de la arena. Por estos motivos, podía ver, aunque por muy poco, a la
serpiente invisible.

Porque era una excentricidad.

Como Kanbaru, como yo.

Como una maldición de broma.


Una bolsa de aire, un lugar frecuentado.

Donde las cosas malas se juntan.

Oshino había dicho que nos hiciéramos aliados de las cosas malas, lo que significaba que
esto debía ser parte del método. La estratagema básica se basaba en la creación de un límite,
pero la escuela abandonada no había sido designada como escenario, por si acaso pasaba
algo inesperado como esto, y quizás todo fue gracias a la disposición de este lugar que pude
escuchar y tocar la excentricidad.

Oshino Meme.

Era doloroso sentirse tan impotente.

El resultado fue que con los casos de Senjougahara y también con el de Kanbaru, había
tenido que dejárselo todo a Oshino, confié en él de principio a fin. No iba a estar en nuestra
ciudad para siempre, y sin embargo, en todos y cada uno de los casos, ¡y también esta vez!

Tal vez fui yo quien no se arrepintió de nada.

No había aprendido nada de todo mi tiempo con Oshino.

No vi, ni una sola cosa.

“Nkk...”

De alguna manera también esquivé el siguiente ataque de la Jagirinawa.

Aun así... sentí que no estaba llegando a ninguna parte. Si me concentrara solo en esquivar
sus ataques, entonces, gracias al poder de las cosas malas que se reunieron en los
alrededores, podría evaluar la posición y los movimientos de la Jagirinawa con cierto grado
de precisión por cómo perturbaba la tierra y el césped, pero devolver el golpe era una tarea
bastante difícil. El ataque requeriría conjeturas alocadas, y mi brazo derecho y mi pierna
izquierda estaban fuera de servicio. ¿Cómo se suponía que iba a asestar un ataque adecuado?

Era como si... mi cuerpo no estuviese sanando en absoluto.

El dolor solo empeoraba.

Podría haber sido mi imaginación, pero parecía estar extendiéndose.

¿Podría realmente haber sido, veneno?


Neurotoxinas, hemotoxinas, cardiotoxinas.

Un suero era... indispensable.

¿Para comenzar, mis ataques funcionan en una excentricidad? Incluso las serpientes
normales tenían tal vitalidad que parecían negarse a morir. ¿Podría una cosa a medias como
yo, un humano con un poco de vampirismo residual, esperar oponerse? No parecía del todo
inútil, dado que la Jagirinawa comenzó a atacarme en el momento en que metí mis dedos en
su cuerpo, pero a este ritmo, ¿no era esto todo lo que podía hacer?

¿Qué contaría como derrotar esta excentricidad?

No.

Había una pregunta más fundamental... ¿Estaba bien derrotar a esta excentricidad? Si la
derrotara, ¿sería ese el final? ¿Sería la solución más práctica, como diría Oshino?

Vampiro, gato, cangrejo, caracol, mono…

Serpiente.

Algunos vieron a las serpientes como objeto de adoración.

“¡Araragi-senpai!”

Fue Kanbaru.

Kanbaru Suruga, corría hacia mí.

A toda velocidad.

Como si estuviera usando sus piernas de capacidad superior a las de un mero estudiante para
estrellarse conmigo cual kamikaze.

Idiota, le dije que se mantuviera alejada, ¡no, espera!

“¡……!”

Correcto... ¡Tal vez Kanbaru pueda!

El brazo izquierdo de Kanbaru, la pata de mono, el brazo de mono... ¡Tenían el aterrador


poder de ataque que necesitábamos para contrarrestar la Jagirinawa! Dentro de su brazo
izquierdo, residía una fuerza que podía atravesar bloques de hormigón sin ayuda. La
Jagirinawa podría tener un cuerpo de acero y aun así estaría indefensa contra la fuerza
desenfrenada de Kanbaru.

Pero, si había un problema, era que a diferencia de mí, Kanbaru no tenía ninguna habilidad
de curación. Si la Jagirinawa esquivase su ataque y tomase represalias con un mordisco, no
habría manera de deshacer el daño. Sería irreparable e irreversible, y si yo tuviera razón y la
Jagirinawa fuera una serpiente venenosa, su vida estaría en peligro inmediato incluso en los
escenarios más optimistas. Que irónico. Tenía la capacidad de recuperarme de sus ataques,
pero no podía hacer ningún daño, mientras que para ella fue todo lo contrario. Otro factor
que necesitaba tener en cuenta era la afinidad. Este lugar era una pesadilla para Kanbaru.
Incluso ahora, ella debe sentirse bastante enferma…

Eso es un hecho.

Sin embargo…

“… ¡Perdóname!”

El ataque de Kanbaru estaba dirigido, hacia mí.

No a la Jagirinawa. Sino a mí.

Con ese brazo izquierdo, me agarró con fuerza por la base de mi cuello y, aprovechando su
impulso, usó sus poderosas piernas para saltar, y llevarme con ella. Yo, con mi única pierna
buena, no podía esperar mantenerme firme. Como una mota de polvo en una furiosa
tormenta de arena, me quedé pasmado. Su mano izquierda, todavía plantada en mi cuello, no
me soltaba. En ningún momento lo hizo. La mantuvo en su sitio. De ese modo volamos cerca
de metro y medio... Antes de estrellarnos contra el suelo.

Puede haber sido una superficie suave y sucia, a la vez que cubierta con follaje.

Pero el impacto de todo en mi cuerpo fue tan impresionante que no pude respirar por un
momento.

Kanbaru cumplió su palabra y me empujó con su brazo izquierdo, aunque no estaba en una
cama.

Grité. “¡Kanbaru! ¿¡Porque tú…!?”


Ella se tendió silenciosamente encima de mí, en una llave completa en términos de lucha,
usando no solo su brazo izquierdo sino todo su cuerpo para detenerme. No podía comenzar a
resistirme dado el estado de mi brazo derecho y mi pierna izquierda. No.

Ni aunque mi cuerpo estuviese en perfectas condiciones.

Ni aunque el brazo de Kanbaru no fuera el de un mono.

Si ella realmente intentaba sujetarme, no habría nada que pudiera hacer al respecto. Una
deportista de nivel nacional contra un fracasado cuya única actividad extracurricular era ir en
bicicleta a casa. Ser un año mayor o un chico no importaba ni un poco. Luchando como
pude, ni siquiera la hice ceder un poco. Mi cuerpo estaba pegado al suelo, y aunque Kanbaru
no podía ser tan pesada, sentí que me estaba aplastando.

“Kanbaru... Tú…”

“¡Quédate quieto! ¡Cálmate!”

“¿Calmarme?”

“¡Si no lo haces el veneno se propagará a través de tu sangre!”

Kanbaru estaba cerca de mí, nuestras caras prácticamente se tocaban, pero ella gritó tan
fuerte que pensé que perforaría mis tímpanos.

“Las serpientes son salvajes, pero son criaturas tímidas. ¡No harán nada si no te acercas y
las atacas! ¡No la provoques! ¡Quédate quieto y la serpiente se ira!”

“…………. Kk.”

El comportamiento de… las serpientes.

Era el mismo, incluso para una excentricidad.

Ya sea por el agarre o por el uso de los órganos de fosa.

Lo que significa…

Que Kanbaru estaba exactamente en lo cierto.

Incluso yo, sabía eso.

Si me quedara quieto, la Jagirinawa se iría.


Ya la había despegado de Sengoku.

La serpiente, se iría.

“¡P-Pero, Kanbaru! Eso…”

Sólo se iría.

No sería eliminada.

Volvería.

Volvería con quien lanzo la maldición...

Cuando uno maldice, se cavan dos agujeros.

Cuando uno maldice…, se cavan dos agujeros.

Cuando una serpiente que perfora la piel, se cavan dos agujeros.

“Te lo ruego.” Dijo Kanbaru con voz dolida. Como si ella estuviera suplicándome. “No
confundas la persona que estás tratando de salvar.”

Ssszzzsss.

Ssszzzsss.

Ssszzzsss.

Lo escuché.

El sonido de la Jagirinawa arrastrándose por el suelo; desde mi ángulo no podía ver cómo se
levantaba el polvo o cómo se separaba la hierba. Pero, podría decir que el sonido estaba
retrocediendo a un ritmo constante. La Jagirinawa estaba tratando de alejarse. Tal vez me
había perdido de vista después de que el brazo izquierdo de Kanbaru me transportara a metro
y medio de distancia en una sola tacleada. O tal vez, desde el principio no le importe en
absoluto a la Jagirinawa.

La serpiente estaba... volviendo.

Volviendo con quien la había lanzado.

Llevándose su maldición consigo.

“…….”
Slump, podía sentir que mi fuerza me abandonaba. No llegaría a tiempo. No lo lograría.
Podía perseguirla, pero ¿qué esperanza tenía de seguir a una serpiente que no podía ver? Su
sonido y su presencia desaparecerían una vez que abandonara el recinto. Y, para empezar, no
había forma de salir de debajo de Kanbaru.

Incluso si pudiera, no podría verme haciéndolo.

“Araragi-senpai...”

Kanbaru debió sentir que caía impotente, había preocupación en su voz.

“Lo siento.” Me disculpé con ella. No se me ocurrió nada más que decir. “Lo siento, te forcé
a hacer todo esto.”

“Por favor, no te disculpes... no sabré cómo responder.”

“Sí... lo siento.”

“Araragi-senpai.”

“Lo siento, Kanbaru... Lo siento mucho...”

Lo siento, era todo lo que podía decirle.

Sentí que cuando más importaba siempre estaba disculpándome con Kanbaru. Realmente me
sentí mal. Sobrecargándola... por ser tan patético, realmente lo hice, me sentí mal.

La decisión de Kanbaru fue la correcta. No había cómo negarlo.

Podría haber continuado, pero casi no tenía oportunidad de vencer a la Jagirinawa. ¿Cómo
podría yo, un intento de excentricidad, alguna vez manejar una excentricidad real y viva?
Tener como recompensa mi cuerpo colapsado por eludir frenéticamente los ataques de
mordedura de la serpiente y su veneno corriendo por mi cuerpo fue el mejor resultado que
podría haber esperado.

Pero, simplemente no había podido rendirme.

Era como si hubiera estado haciendo una rabieta.

Por eso duele tanto.

El dolor en mi brazo derecho, el dolor en mi pierna izquierda...

No eran nada en comparación con este otro dolor.


Era endeble.

Yo era débil.

Estaba completamente impotente.

“Koyomi-onii-chan...”

La serpiente se fue.

Habiendo recuperado la conciencia, Sengoku se acercó a Kanbaru y a mí con pasos


vacilantes. Ahora que la serpiente se había ido el límite no tenía sentido, y las marcas de
escamas que antes se observaban en su carne habían desaparecido de cada centímetro de su
piel visible en su cuerpo vestido de traje de baño.

No se han ido a medias.

Habían desaparecido por completo.

Su piel era clara, suave, hermosa.

Ella ya no estaba sufriendo.

Ella ya no estaba siendo lastimada.

Ya no iba a tener que llorar...

“Koyomi-onii-chan. Gracias por salvarme.”

Detente.

Sengoku.

Por favor... no digas palabras como “gracias”, eso es algo que en este momento no soporto
escuchar. No tengo derecho a que me des las gracias. De entre todas las cosas, estaba
tratando de salvar incluso a la persona que te maldijo.
007
El epílogo, o tal vez, el remate de esta historia.

Como de costumbre mis pequeñas hermanas Karen y Tsukihi me despertaron al día


siguiente, y comencé a prepararme para ir a la escuela. Martes, trece de junio, un día
laborable. Mi brazo derecho y mi pierna izquierda parecían haberse curado hasta el punto en
que las tareas cotidianas no representaban un problema. Con Kanbaru y Sengoku
apoyándome por ambos lados, luciendo suficientemente patético, fui a la escuela
abandonada para que Shinobu bebiera un poco de mi sangre para reforzar las capacidades
curativas de mi cuerpo. Sin embargo, sin tener en cuenta a mis padres, no podía volver a casa
con un brazo y un pie aplastados. Como siempre, Shinobu no me habló. Tal vez estaba
horrorizada, tal vez no estaba pensando en nada. De cualquier manera, no pareció impórtale
que le diese una sorpresiva oportunidad para beber aún más de mi sangre y debió de estar en
uno de sus mejores estados de ánimo. Como cuestión de procedimiento apropiado, le di un
informe simple de los eventos a Oshino, pero él tampoco dijo mucho. Quizás estaba
horrorizado, tal vez no estaba pensando en nada.

Después de eso, pasé la noche con todos en una de las aulas abandonadas de la escuela.
Sengoku había mentido a sus padres y dijo que estaba en una pijamada, así que esa noche
tenía que estar en algún lugar. Sin ningún otro lugar adecuado disponible para nosotros,
dormimos allí mismo, en las ruinas de la escuela. Al principio estábamos entusiasmados
como niños en un viaje escolar, pero los tres debíamos estar bastante cansados y no tardamos
mucho en quedamos dormidos.

Si es invierno, la primavera no está muy lejos.

La noche siempre es seguida por el día.

Kanbaru y yo llevamos a Sengoku a casa, prometimos volver a vernos, y luego nos


separamos. Después de hacer algunos planes para la fiesta de cumpleaños de Senjougahara,
también me separé de Kanbaru en un paso de peatones. Entonces, una vez que finalmente
llegué a casa y me puse a trabajar para volver a dormirme en mi propia cama, mis hermanas
pequeñas me despertaron. Sin ninguna razón real, le pregunté a Tsukihi: “¿Recuerdas a
Sengoku?”

Ella respondió diciendo que sí.


Oh, ¿te refieres a Sen?

Cuando escuché eso, lo recordé, así como ella me llamaba Koyomi-onii-chan, yo la llamaba
Sen. Aun así...

Ahora no podía llamarla así.

Cambiándome a mi uniforme escolar, comencé a pensar.

Sobre por qué hubo dos Jagirinawa.

Por qué dos serpientes habían poseído a Sengoku.

Ahí estaba esa chica, su amiga, con su maleducado rencor, le molesto que el chico que ella
quería se le confesara a Sengoku solo para que terminara rechazado. La chica dirigió su
atención a encantamientos de ocultismos, una moda en su escuela y una maldición de
primera categoría. Era su forma de descargar su rabia, y ella no debe haber pensado que
realmente funcionaría...

Ese incidente ofrecía una persona más, una sola persona que podría guardarle rencor a
Sengoku. Sí, el chico al que Sengoku había rechazado. Como con la amiga de Sengoku, no
sabía su nombre, pero no sería increíble si él también le guardara rencor. Podrías,
psicológicamente hablando, incluso llamarlo razonable. Un caso simple de enredos
románticos. Si de algún modo intento atar cabos. Las chicas no tenían una patente exclusiva
sobre esos amuletos que eran una moda en su escuela. Era totalmente posible que alguien
intentara maldecir a otra persona como algún tipo de broma inocente o que lo hiciera sin un
objetivo claro. Pero poner una maldición en serio, también es una posibilidad.

Cuando uno maldice, se cavan dos agujeros.

Bueno, todo eso es sólo una conjetura. No tengo ninguna prueba firme e incluso si estoy en
lo cierto, a quién regresó la Jagirinawa, la chica o el chico, y cómo funciona una maldición
que vuelve con quien la lanzo es algo que no puedo esperar averiguar.

Sengoku no necesita saberlo.

Se mire por donde se mire, eso sería tener una serpiente en tu zapato.
001
Hanekawa Tsubasa es una persona muy importante para mí. Nada ni nadie podría esperar
reemplazarla. Le debo mucho... no, le debo casi todo. Dudo que pueda pagar esta deuda de
gratitud, no importa lo que haga por ella. Cuando ella me extendió la mano mientras cada
parte de mi cuerpo y mi alma experimentaba lo que se sentía como el más profundo y oscuro
de los abismos durante las vacaciones de primavera, fue como si viera, y no estoy
exagerando en lo más mínimo, la mano de una diosa ofreciéndome la salvación. Incluso
ahora, cuando recuerdo lo que pasó hace unos dos meses, siento que algo caliente brota de
mi pecho. Hablar de una persona salvando a otra podría sonar artificioso, pero sigo creyendo
que Hanekawa Tsubasa me salvó en esas vacaciones de primavera. Si hay alguna creencia o
sentimiento que yo tenga que llamar firme, seria ese. Es por eso que... una vez que mi
infierno personal en las vacaciones de primavera llegó a su fin y comencé mi tercer año de
escuela secundaria y fui colocado en la misma clase que ella, no voy a mentir, estaba tan
feliz que casi estaba sonriendo. No es por mencionar la línea que una vez Senjougahara usó
conmigo, pero me preguntaba si era así como se sentía el ser colocado en la misma clase que
tu amor no correspondido. Incluso cuando me obligó a asumir el cargo de vicerepresentante
de la clase debido a un pequeño malentendido después de haber sido elegida la representante
de la clase, lo acepté sin muchas protestas, sólo porque Hanekawa es una persona muy
importante para mí.

Hanekawa Tsubasa.

La chica cuyo primer nombre significa “Ala” y cuyo apellido comienza con otro carácter
para lo mismo, un par de apéndices que no coinciden.

Por otra parte, no fue como si nunca hubiera escuchado el nombre Hanekawa Tsubasa hasta
mis vacaciones de primavera de segundo año; confieso que me escabullí para echar un
vistazo a su clase cuando estaba en primer año, con la esperanza de vislumbrar a la joven
más talentosa en la historia de la Escuela Secundaria Privada Naoetsu. Incluso en ese
momento, su apariencia, sus lentes con su cabello bien trenzado, el flequillo al frente, la fijó
como una estudiante modelo. De inmediato me di cuenta de que ella tomaba la escuela en
serio. Las personas que parecen inteligentes no son del todo raras, pero esa fue la primera
vez que vi a alguien que tenía que ser inteligente. Dudarías en decirle una palabra casual a
ella, así de solemne y digna era, una estudiante excepcional. No era difícil acercársele, no es
como si fuese una cosa aparte a la que no se te permitía mirar siquiera desde la distancia. Me
esforcé demasiado para entrar en la Secundaria Naoetsu, así que ya estaba empezando a
entender mi posición en la escuela, pero sabes, tal vez fue el momento en que vi a Hanekawa
Tsubasa que realmente comprendí todo. No sólo nunca había cedido el título de la mejor de
su clase, sino que aparentemente no se había quedado de brazos cruzados cuando se trataba
de cualquier cosa relacionada con las calificaciones desde su época en la escuela primaria.
Era difícil de creer que ella y yo perteneciéramos a la misma especie.

Eso no quiere decir Hanekawa Tsubasa sea engreída, ella no es nada de eso. No quisiera que
tuvieras esa impresión porque, de hecho, nunca he conocido a un ser humano más decente.
Me temo que la malinterpreté hasta las últimas durante las vacaciones de primavera, pero
cuando hablé con ella de cerca y en persona, parecía dirigirse a todos en un terreno casi
excesivamente uniforme, hasta el punto de que sentía que tenía que ser más consciente de
sus habilidades y talento. Los llamados estudiantes modelo en la Secundaria Privada Naoetsu
tienden a considerar la inteligencia como algo que usas para diferenciarte de los demás, pero
no es el caso de Hanekawa Tsubasa. La sensación de ser una cosa aparte que obtuve cuando
la vi por primera vez no era totalmente su propia opinión. Resulta que ella es justa, y abierta.
La representante de clase entre los representantes de clase, una representante elegida por los
mismos dioses… Parece gustarle la escuela, además de que ella es popular en clase. Ella
tiene una personalidad seria pero más que eso, ella se preocupa por los demás. Puede salirse
de control y dar lugar a suposiciones erróneas como la que hizo al nombrarme
vicerepresentante, pero esa es la única falla que puedo encontrar con ella. Admito que
trabajar con ella siendo representante y yo vicerepresentante de la clase tiene una buena
cantidad de molestias, pero más a menudo termino impresionado por su carácter.

Me doy cuenta de que puede que no sea la mejor manera de expresarlo, pero es increíble
teniendo en cuenta su situación familiar, de la que aprendí durante la Semana Dorada, los
nueve días del 29 de abril al domingo 7 de mayo, que es donde este año cayeron las
vacaciones. Si mis vacaciones de primavera fueron como el infierno, esos nueve días fueron
como una pesadilla, donde los recuerdos de Hanekawa Tsubasa no tenían constancia de estos
hechos. En la medida en que los sueños son algo que normalmente no recuerdas, llamarlo
“pesadilla” parece bastante apropiado.

Durante nueve días.

Ella fue poseída por un gato.


Al igual que fui atacado por un vampiro, ella fue poseída por un gato. Hay una razón
adecuada para cada excentricidad, y en este caso, la tensa y deforma vida familiar que
llevaba fue la causa. Sí, hablando de malentendidos, fue un gran malentendido. Hasta
entonces, tal vez vi el mundo en blanco y negro y creía que las personas buenas son personas
felices y que las personas malas son personas infelices. Que podría haber personas cuya
infelicidad no les da más remedio que ser decentes… No había sido capaz de entender una
idea tan simple…

Y aun así.

Hanekawa Tsubasa extendió su mano hacia mí.

En aquellas vacaciones de primavera, tampoco pudo haber estado en posición para


ayudarme... pero me sacó de las profundidades de mi abismo.

No voy a olvidar eso.

No importa lo que pueda pasar.


002
“Oh... Koyomi-onii-chan. Te estaba esperando.”

“……….”

Me habían esperado.

Después de que las clases del martes 13 de junio terminaron, que prometió convertirse en un
día memorable para mí, usé cada minuto disponible después de la escuela para prepararme
para el último Festival Cultural como estudiante de secundaria, el cual sería este fin de
semana, y la hora era un poco más allá de las seis y media de la tarde, el lugar era las puertas
delanteras de la Escuela Secundaria Privada Naoetsu. Allí, mientras me esperaba, y parecía
estar aburrida, estaba Sengoku Nadeko, una de las viejas amigas de mi hermana menor, con
quien había pasado varias horas relacionadas con excentricidades hasta la mañana de ese día,
junto con mi kouhai Kanbaru Suruga.

La chica llevaba puesto un uniforme escolar.

Un uniforme de escuela media que me produjo recuerdos.

Su uniforme era un vestido, algo raro para estas partes.

Tenía un cinturón amarrado alrededor de su cintura, al que había colocado una pequeña
bolsa. Y sí, dadas las circunstancias, tenía sentido, pero me di cuenta de que era la primera
vez que la veía en uniforme. El vestido se veía bien en Sengoku, con su apariencia
generalmente infantil.

Ella no llevaba un sombrero.

Sus ojos, sin embargo, todavía estaban ocultos por su largo flequillo. Parecía ser su peinado
por defecto... Ya sea tirar de su sombrero o dejar que su flequillo sobresalga en su rostro,
parecía tímida al hacer contacto visual o incluso dejar que otros vean el suyo. Su timidez se
acercaba a niveles históricos.

“H-Hey, hola.”

Mi saludo sonó un tanto vacío, la repentina aparición de Sengoku me sorprendió más de lo


que esperarías. Estaba de pie en las sombras de la puerta, y su colocación era la de alguien
buscando hacer un: “¡Boo!” mientras acechaba en un rincón, aunque estaba seguro de que no
era su intención.

“¿Qué estás haciendo aquí?” Pregunté.

“Oh, uh... Koyomi-onii-chan.”

Sengoku parecía apartar la vista de mí mientras hablaba.

Con el cabello cubriéndole los ojos, ni siquiera podía decir si me había estado viendo.

¿Ella, al menos, era capaz de verme desde allí?

Hmm... Debo admitir que ser llamado “Koyomi-onii-chan” justo afuera de mi propia escuela
fue algo embarazoso... Pero si le dijera que dejara de llamarme así, corría el riesgo de
lastimar a Sengoku, quien era como tan delicada como un cervatillo recién nacido...

Si bien mi reacción al verla fue una sorpresa, verme claramente la tranquilizó. Naturalmente,
se necesitó una resolución decente para que una estudiante en su segundo año de escuela
media fuera a una escuela secundaria, pero se había sentido mucho más asustada de lo
necesario. No pude expresarme como quería... Afortunadamente, la hora del día estaba de
nuestro lado. Me había quedado hasta tarde en la escuela, incluso entre los estudiantes que se
preparaban para el Festival Cultural, por lo que la posibilidad de que alguien supiera que ella
estaba aquí era casi nula. Si alguien presenciara esto, definitivamente mi apodo seria
“Koyomi-onii-chan”, pero el riesgo tenía que ser bajo.

“U-Um.” Dijo Sengoku antes de quedarse en silencio.

Sabía que ella no era habladora y que tenía que soportar el silencio. Si no podía soportarlo y
trataba de llenar el vacío, ella simplemente seria menos comunicativa. Aun así, y esto es solo
una forma de hablar, era como si estuviera tratando con una criatura tímida como un conejo
o un hámster...

Hmm…

Me hizo querer mimarla.

“Quería... volverte a dar las gracias.” Dijo al fin. “Tú... realmente me ayudaste.”

“Ah, ya veo... ¿Estuviste esperando todo este tiempo sin saber cuándo ibas verme, solo para
decirme eso? ¿Cuánto tiempo llevas aquí? Si llegaste justo después de salir de tus clases…”
“Oh, no. Me tomé el día libre. De la escuela.”

“¿Eh?”

Correcto, por supuesto.

Estar en uniforme no significaba que ella había estado en la escuela.

“Está bien, entonces no fuiste.”

“No... yo tenía sueño.”

Esa línea en sí misma, bueno, la hizo sonar como la princesa despreocupada de alguna isla
tropical... Mientras que técnicamente la noche anterior había cerrado los ojos en la escuela
abandonada, en ese ambiente horrible, con solo una botella de plástico como almohada y
otras personas justo a su lado, no es de extrañar que la extremadamente delicada Sengoku no
pudiera dormir bien. Incluso yo no pude y volví a la cama después de llegar a casa...
Kanbaru era la extraña por ser capaz de dormir profundamente en ese ambiente. Entonces,
después, Sengoku se había ido a casa y se había quedado dormida como yo, pero no pudo
levantarse, a diferencia de mí; por lo que había llegado a las puertas de la escuela cuando me
iba. Era un día de semana, y el uniforme debió ser su intento de alejar a los oficiales por
cualquier acusación de absentismo escolar.

“Vaya, hoy fue el peor momento.” Le dije a ella. “¿No te lo dije? Mi escuela está
organizando su Festival Cultural, el cual se llevara a cabo durante el fin de semana, y
estamos preparándonos para ello. Por eso terminé saliendo tan tarde, mi error. Um, ¿en
realidad te hice esperar más de dos horas?”

“N-No.” Sengoku negó con la cabeza.

¿Eh? Normalmente las clases terminaban a las tres y media, así que se me ocurrió esa cifra
suponiendo que ella llego a las cuatro... ¿Podría haberse ido en algún punto intermedio
porque me estaba demorando tanto?

“Empecé a esperar alrededor de las dos, así que han pasado más de cuatro horas...”

“¿¡Qué tan estúpida puedes ser!?”

Terminé gritándole con todo lo que tenía.


Esperando frente a las puertas durante más de cuatro horas. En todo caso, el uniforme la
hacía parecer más sospechosa. No es como si las clases de secundaria terminaran a las dos.
¿Dónde estaban los guardias de seguridad en los que esta escuela gastó una fortuna? ¿Se
sintieron aliviados porque es una linda estudiante de escuela media?

“L-Lo siento, por ser tan estúpida.”

Se había disculpado conmigo.

Nunca antes se habían disculpado conmigo por tal razón...

“Aun así... quería agradecerte... tanto así que no podía quedarme quieta...”

“Qué chica tan correcta eres...”

La palabra que realmente quería usar era tensa.

Solo para agradecerme, ¿eh?

“En ese caso.” Dije. “Deberías estar agradeciéndole a Kanbaru. Ella ya debe haber pasado
por aquí, ¿no? ¿No la viste? Tú y yo somos viejos conocidos, mientras ella hizo todo lo que
pudo por ti cuando ustedes dos apenas tenían nada que ver la una con la otra. No hay mucha
gente como ella.”

En más de un sentido.

No entraré en detalles, pero fue la absoluta verdad que Kanbaru había trabajado
desinteresadamente para resolver el caso de Sengoku.

“Sí... yo también lo pensé.” Dijo tímidamente Sengoku. “Tú y Kanbaru-san me salvaron a


costa de sus vidas...”

“¡Espera, espera! ¡Exactamente no sacrificamos nuestras vidas para salvarte! ¡Mira, estoy
vivo, estoy aquí!”

“Oh... eso es cierto.”

“No digas esas cosas… tan de la nada… guiadas por tus sentimientos.”

“Sí... Así que también quería volverle a agradecer a Kanbaru-san, pero...”

“¿Eh? Oh, ¿Kanbaru aún no ha pasado? Pensé que mi clase era la última en irse... aunque
creo que los de segundo año también se pueden entusiasmar al momento de organizar el
Festival Cultural. No sé cómo funcionan las cosas para los de primer año, pero los de tercer
año estamos ocupados preparándonos para los exámenes de ingreso, y ella parece ser el tipo
de persona que se encuentra en el centro de su clase, le guste o no...”

“N-No. Hace media hora más o menos Kanbaru-san paso por aquí.”

“¿Oh, ella lo hizo? ¿No la llamaste porque estaba con sus amigos o algo así? Ella debe tener
muchos.”

“No... estaba sola, pero...” Sengoku hizo una mueca difícil. “Antes de que pudiera decir algo,
corrió a mi lado tan rápido que casi no pude verla...”

“……”

Kanbaru debió tener prisa...

Supuse que era para hacer algo inconmensurablemente sublime, como terminar de leer la
montaña de novelas BL que había comprado el día anterior, pero Sengoku, que dudaba
incluso en llamar la atención de la gente que conocía bien, no iba a interponerse en el camino
de Kanbaru Suruga mientras corría.

“Pensé que ella podría atropellarme...”

“Sí, entiendo... realmente lo veo posible. Tampoco me atrevería a llamar a Kanbaru mientras
está acelerando.”

“Sí. Era como si ella estuviera usando takkyudo.”

“¿Por qué comparas algo que ella hizo con un ataque especial usado por el Príncipe Yamato,
uno de los personajes principales de Bikkuriman? ¡No sólo estás haciendo la situación más
difícil de entender, sino que estás forzando mi respuesta a ser esencialmente un comentario
directo!”

“Sí. No pensé que lo entenderías.”

Ella parecía honestamente sorprendida.

Hombre, parecía como si hubiera subestimado la cantidad de conocimiento que poseo... Ok,
es un mal momento para presumir.
“¿Aun así, las chicas de escuela media de estos días saben sobre Bikkuriman? Tal vez los
nombres de los personajes gracias al nuevo juego de chocolates que han estado vendiendo,
¿pero los nombres de los ataques especiales?”

“Lo vi en DVD.”

“Ah, ya veo... Vivimos en un mundo tan cómodo. Pero de cualquier manera, es una
referencia difícil de captar. Al menos podrías haberlo comparado con pasos relámpagos.”

“Pasos relámpagos... Um, ¿eso es cuando... parece que las imágenes destellantes se
mueven?”

“¡Eso se llama persistencia de la visión!”

“Oh, ¿en serio? Pero son similares.”

“¡Ni un poquito! ¡No agrupes uno de los secretos mejor guardados de todas las artes
marciales con una ilusión óptica básica!”

Cuando le grité a Sengoku, ella me dio la espalda y sus hombros comenzaron a temblar. Me
preocupé de que mi dura reacción la hubiera hecho llorar, hasta que me di cuenta de que
desesperadamente estaba sofocando una risa.

Ella estaba jadeando por respirar.

Correcto, era fácil hacerla reír.

Al parecer, incluso cuando ella era parte del intercambio.

“Koyomi-onii-chan... eres tan divertido como siempre...”

Así lo dijo ella.

... No podía recordar bien, pero ¿ese había sido mi papel desde la escuela primaria? El
pensamiento era algo deprimente...

De cualquier forma, Sengoku tenía la capacidad de ser una divertida compañera de


conversación. Tal vez no estaba haciendo todo lo que tenía que hacer, pero estaba
bromeando muy bien. De hecho, el día anterior había estado en la cima de sus problemas con
excentricidades... tal vez, simplemente, no había tenido la tranquilidad necesaria. Estaba
empezando a querer probar la habilidad de esta chica introvertida para sacar a relucir mis
destrezas.
Me dijo: “Me preocupa que sus zapatos no duren si corre a esa velocidad... pero Kanbaru-san
se veía muy bien cuando corría.”

“Será mejor que no te encariñes demasiado. No quiero retractarme de lo que dije, pero a su
manera ella es una molestia. Aunque admito que es una gran persona... Bien, te daré la
oportunidad para que le agradezcas de forma apropiada, entonces...”

“S-Sí. Pero... también tenía otra razón para ver a Kanbaru-san.”

“¿La tenías?”

“Sí.”

“Hmm...”

No podía pensar en ningún asunto que Sengoku pudiera tener con Kanbaru aparte de
agradecerle, pero, de nuevo, habían pasado una pequeña cantidad de tiempo juntas. Tal vez
habían hecho algún tipo de promesa.

“Si quieres.” Le ofrecí. “Podría encargarme de ello por ti. Necesito ir a agradecerle a
Kanbaru.”

El caso de Sengoku... el caso de la serpiente de Sengoku.

Si Kanbaru no se hubiera involucrado... era dudoso que yo estuviera aquí hablando con
Sengoku. Tuvo que ser irritante recibir una y otra vez las mismas disculpas y
agradecimientos, pero una última muestra de gratitud una vez que ambos nos hayamos
calmado no parecía imposible.

“Pero...” Dijo Sengoku. “Te estaría molestando.”

“No seas tan ceremonial. Ni siquiera lo consideraría una tarea, así que déjamelo a mí.”

“Oh... entonces tal vez te lo pida, Koyomi-onii-chan.”

Sengoku sacó dos prendas pequeñas y dobladas de la bolsa que llevaba.

Unos pantalones cortos de voleibol y un traje de baño escolar.

Olvídate de no haber pensado en esas prendas, había borrado de mi memoria todos los
rastros de ese asunto...
“Las lavé y quería devolvérselas a Kanbaru-san cuando la vi... pero si puedes devolvérselas
por mí, por favor, hazlo. Después de todo, cuanto antes, mejor.”

“Sí...”

¡Qué barra tan alta!

Esto sí que es una prueba.

Un chico que recibe pantalones cortos de voleibol y un traje de baño de escuela de una chica
de escuela media justo afuera de su escuela secundaria...

Si alguien que conociera me viera, mi apodo daría un salto mortal al pasar de “Koyomi-onii-
chan” a, sin lugar a dudas, “Pervertido”. ¡Pero dada nuestra conversación, no pude decir que
no! Si esto era una trampa que alguien me había tendido, ¡qué inteligente era! ¡Oh, señor
celestial, las tribulaciones que me impones!

“D-De acuerdo... Me quedaré con esto.”

Claro que nunca vería otra ocasión para recibir algo parecido, tomé los dos artículos de
Sengoku. Cuando me los entregó, por un breve momento pareció reticente (tal vez sintió que
debía devolverlos ella misma), pero al final los soltó.

Hmmm.

Sin embargo, este fue un giro un tanto extraño de los acontecimientos.

Hoy, se suponía que iba a ser memorable para mí.

Cuando nuestra conversación terminó, Sengoku comenzó a sonrojarse, sus ojos en el suelo.
Liberada de la excentricidad que fue la serpiente, la oscuridad que la envolvía se había
adelgazado, pero su naturaleza evidentemente tranquila parecía inalterada.

En un vago impulso.

Extendí la mano hacia el flequillo de Sengoku.

“... ¿Qué?”

Falle.
Mi mano termino tocando el aire. Sengoku había tirado su cabeza hacia abajo y a un lado
para eludirme. En otro vago impulso, de nuevo fui tras ella, pero esta vez ella dio un paso
atrás para evitarme.

“¿Q-Qué está mal?” Pregunté.

“No lo sé, solo...”

¿Tenía que actuar tan molesta?

Estos fueron movimientos rápidos que nunca esperarías de Sengoku, alguien que
generalmente es de modales modestos. Dicen que los flequillos pueden disminuir tu visión,
pero para ella no parecía ser un problema en absoluto.

“... Hmm.”

Pensé en intentar algo.

Deslice mi otra mano hacia abajo para agarrar el dobladillo de su uniforme de una pieza. La
forma en que se había movido para evitar que tocara su flequillo me recordó a cómo una
chica de primaria podría evadir los intentos de que le voltearan la falda, así que estaba
realizando un pequeño experimento.

Sin embargo, Sengoku no reaccionó a esa mano. Todo lo que hizo fue inclinar la cabeza
hacia un lado, como si lo encontrara extraño. Se me ocurrió una idea que el día anterior
también tuve.

Esta chica era demasiado pura para ser una estudiante de escuela media.

Ella se estaba defendiendo en todos los lugares equivocados.

De inmediato solté su uniforme.

“Al estar frente a ti.” Dije. “Siento como si estuviese en una prueba donde se evalúa mi valor
como hombre...”

“... ¿Porque no hablo mucho?”

“No, no es eso…”

Porque ella no habla mucho, eh...

“Así es, Sengoku, hay algo que quería preguntarte. ¿Puedo?”


“¿Hm? ¿Qué es?”

“Nada grave... se trata de Shinobu.”

“¿Shinobu?”

“Ya sabes, esa linda chica rubia en las ruinas de esa escuela de preparación. Tal vez nunca te
haya dicho su nombre. Lo que sea. De todos modos, ¿te dijo algo cuando yo no estaba?”

“¿………?”

Sengoku hizo una mueca de desconcierto, como si no entendiera el punto de mi pregunta


antes de seguir adelante y responder negativamente.

“Uh-uh.”

Ok.

Bueno, había esperado tanto... Pensé que podría haber algún tipo de terreno compartido entre
dos chicas silenciosas, pero ante una mayor consideración, no había ninguna entre Shinobu,
que solía ser locuaz, y Sengoku, que siempre ha sido taciturna...

Oshino Shinobu.

Cabello rubio y casco con unos protectores de ojos en la parte superior.

La hermosa chica que, junto con Oshino, mi salvador, actualmente llamaba a esa escuela de
preparación abandonada su hogar, aunque su vida allí era demasiado hueca como para
describir tal lugar como un hogar.

“Esa chica... es un vampiro, ¿verdad?” Preguntó Sengoku.

No era algo que pudiera ocultar si quería curar las heridas que había sufrido al exorcizar su
serpiente, así que ya se lo había dicho anoche antes de acostarnos con botellas de plástico
como nuestras almohadas. Como también le habían hablado del brazo izquierdo de Kanbaru,
no tuve que andar a la ligera con el tema de las excentricidades en torno a Sengoku.

Excepto cuando se trataba de Hachikuji.

Y Hanekawa, pero aparte de eso no me reserve nada.

“Ah... Bueno, ahora.” Le respondí. “Es más como una burla de un vampiro que un vampiro
real.”
Así como yo era más una burla de un humano que un humano real.

Ahora mismo eso era ella.

“Así que es por ella, que tú...”

“No fue nada que ella hizo.” Negué. “Lo que me paso me lo hice yo. Y, sería un error
responsabilizar a las excentricidades de cualquier cosa. Todo lo que hacen es existir tal y
como son.”

Hay una razón para cada excentricidad.

Es tan simple como eso.

“Sí, tienes... razón.” Asintió Sengoku, el gesto fue solemne.

Parecía estar pensando en mis palabras en relación con su propio caso. Según Oshino, el
suyo tenía un significado bastante diferente de los otros casos que había experimentado hasta
entonces, por lo que no servía generalizar...

“Pero a diferencia de Kanbaru y de mí.” Dije. “Te has liberado por completo de tu
excentricidad. No debes preocuparte demasiado por eso. Todo lo que necesitas hacer es
volver a llevar una vida normal.”

Porque tú... puedes volver.

Tenía que volver.

“Sí... eso es cierto, pero ahora, sé que estas cosas pasan... que estas cosas existen... y dudo
que pueda fingir que no.”

“…….”

Bueno, sí, dudaba que alguien pudiera.

No era como si Sengoku fuera excepcionalmente tímida. En general, no hay mucha gente
que pueda luchar en un campo en el que no se aplican las reglas del sentido común. Tal vez
en ese sentido, dar un paso hacia ese mundo y permanecer allí, como Kanbaru y yo, era más
fácil para ti.

“Por el momento.” Aconsejé. “Mantente alejada de las maldiciones ridículas, eso es todo lo
que puedo decir.”
“Si…”

“Siento que Oshino dijo que las personas que se ven involucradas con excentricidades son
más propensas a volver a llamar su atención, pero aun así, que tenía más que ver con la
forma de pensar de las personas. Parece que las cosas se pueden equilibrar si eliges evitarlas.
Bueno, sólo háblame si pasa algo, ¿te he dado mi número de celular?”

“Oh... No, aún no.”

De todos modos, no tengo teléfono celular, dijo.

Cierto, tal vez ella me lo había dicho antes.

“Pero.” Insistí. “Todavía me puedes llamar. Vamos, es mejor que lo tengas.”

“Bueno.”

Sengoku se mostró tímida.

También parecía algo feliz. ¿Podría ser que conseguir el número de teléfono celular de
alguien le pareciera bastante adulto? Ella estaba en su segundo año de escuela media, cuando
empiezas a querer actuar más maduro. Por supuesto, como no tengo muchos amigos y me
siento un poco nervioso, incluso ahora mientras le doy mi número, no es como si tuviera
derecho a burlarme de Sengoku.

Escribió mi número en un cuaderno de notas que colocó cuidadosamente en el bolso de su


cintura. Llevar ese bolso definitivamente desentonaba con su uniforme, pero ella lo llevaba
puesto incluso cuando me la encontré en las montañas, así que tenía que ser uno de sus
artículos favoritos.

“Entonces, a cambio déjame darte el número de mi casa.” Dijo.

“Te lo agradezco mucho.”

“Si necesitas ayuda, por favor llámame, ¿de acuerdo?”

“Uhh.... ¿Crees que eso llegue a pasar?”

“Koyomi-onii-chan.”

“Sí, sí, lo que sea. Lo haré.”

“Solo necesitas decir ‘sí’ una vez.”


“¿Lo hago ahora? Pero en realidad, si alguna vez estás en serios problemas, sería más rápido
si fueras directamente con Oshino... Aunque supongo que decirle a una chica de escuela
media que visite a un viejo desaliñado sin acompañante es demasiado.”

Que ese hombre horrible hiciese una excepción por Sengoku y actuase extrañamente
generoso seguía molestándome. Probablemente no fue nada, pero por si acaso no quiero que
vaya sola a ese edificio abandonado.

No es que sospeche que Oshino Meme sea lolicon...

“No creo...” Tartamudeó Sengoku. “Sería un problema”

“Sí, mejor no. Pero él me recordó algo. No podemos ir con él por todo lo que sucede, como
en ese anime, contar siempre con Doraemon y sus dispositivos secretos te hará tan indefenso
como Nobita.”

“Si...” Sengoku asintió. “Ese amuleto que Oshino-san nos dio realmente era como un
dispositivo de Doraemon... Sí, como el Casco Genio y los Guantes de Trabajo.”

“¿Por qué hacer un esfuerzo en elegir los objetos poco importantes que solo aparecieron en
las películas para hacer una comparación? ¿Por qué no el Gorrocóptero o la Puerta a
Cualquier Lugar?”

“Wow, tus comentarios son siempre tan oportunos y precisos...” Sengoku parecía
impresionada.

La luz del respeto brillaba en sus ojos.

Vaya cosa en la que ser respetado.

“Por cierto.” Continuó ella.

“¿Si?”

“La gente dice que en las películas de Doraemon, de repente Gigante se convierte en un
personaje extrañamente adulto y de buen carácter, pero ¿antes que cualquier otro personaje
no deberían estar diciendo eso sobre Nobita?”

“¿¡De dónde vino eso!?”

“¿Eh? No siento que haya hablado fuera de contexto.”


“¡Puede que esté conectado, pero por muy poco! ¡Es una tangente total! ¿¡Por qué
profundizarías más en las películas de Doraemon!?”

Sin embargo tenía razón, en comparación con el progreso que hace Nobita, Gigante apenas
crece en las películas.

“Creo que.” Dijo ella. “Suneo es el único personaje que nunca experimenta ningún
crecimiento, no importa qué.”

“Es cierto, dada su posición como el compañero del agresor local, sería difícil para él
cambiar, incluso en una dirección negativa... Espera, ¿¡por qué estamos hablando de esto!?”

Al preguntarlo, Sengoku se quedó en silencio.

Esta vez ella no estaba tratando de sofocar una risa. Ella realmente parecía abatida. Oh no,
tal vez había ido demasiado lejos... Tal vez ella había estado haciendo su mejor esfuerzo, y
pese a su personalidad tranquila intentaba mantener una conversación, y sin embargo, de
manera infantil, le había gritado, incluso si fue por hacer el papel del hombre que replica.

“Lo siento.” Finalmente dijo Sengoku.

Agh, me sentí muy mal.

“No, no es nada de lo que necesites disculparte...”

“Quería ver qué tan lejos ibas a llevar las réplicas, y me dejé llevar...”

“Bueno, si ese es el caso, ¡deberías estar disculpándote con más empeño!”

¿¡Ella era quien me estaba probando!?

Mis bromas eran ilimitadas, pero no era el caso de mi paciencia.

Mira a esta chica introvertida, está divirtiéndose.

“Cuando dije ‘por cierto’, en realidad no estaba planeando hablar de Doraemon.”

“Oh... ¿No serás tú una pequeña improvisadora? Bien, vuelve a empieza desde allí.”

“Está bien. Por cierto.”

“¿Si?”

“Bueno, se trata de Shinobu.”


Parecía que Sengoku no sabía que la repetición era la clave para interpretar al tonto en un
dúo de comedia, por lo que volvió a la conversación en lugar de seguir hablando de
Doraemon.

Hmm. De alguna manera me sentí insatisfecho.

Si fuera Hachikuji, ella podría haber ido más allá de la repetición e incluso haber encontrado
algo rápido para cambiar las cosas a su favor.

Tal vez habíamos tocado los límites de las habilidades de Sengoku.

“¿Qué paso con ella? Ustedes dos no hablaron.”

“No, pero...” Dijo Sengoku. “Esa chica me estuvo mirando todo el tiempo.”

“¿...? Oh, no te preocupes por eso. Ella siempre está mirando a la gente de esa manera. Ella
se te queda viendo como si estuviese molesta. A Oshino, a Kanbaru y por supuesto a mí
también. No solo a ti, Sengoku.”

Ser observado por un vampiro, incluso un vampiro que se veía como una chica pequeña,
podría haber sido duro para la tímida Sengoku. Por otra parte, incluso a mi esa mirada me
parece espantosa, ya que está llena con el tipo de rencor que esperarías del clásico fantasma
de Oiwa... Así que debió ser peor para Sengoku Nadeko.

Pero ella dijo: “No. Sé que mira a todos... Pero pensé que a Kanbaru-san y a mí no nos mira
de la misma manera que a Oshino-san y a ti.”

“... ¿Hm?” ¿Qué diablos? No le entendí. “¿Estás diciendo que mira a hombres y mujeres de
diferentes maneras?”

“Si, eso es.”

“Eh.”

“Soy... sensible a la forma en que la gente me mira, por lo que puedo decir que, por alguna
razón, ella nos odia Kanbaru-san y a mí.”

“¿Ella te odia? Eso es gracioso.”

Quizás no sea gracioso, pero si extraño.

‘Imposible’ sería otra forma de decirlo.


A pesar de su apariencia actual de niña linda, en el interior ella era una excentricidad, no
había más misterio, y en el exterior una vampiresa, lo que era notable… básicamente no
estaba interesada en los humanos. Ya fuera Sengoku o Kanbaru u Oshino o yo, ella vería a
todos de la misma manera. No estaba seguro de si ella realmente diferenciaba entre hombres
y mujeres.

¿O siquiera tenía gustos o disgustos?

“... Bien.”

Yo, quizás, era una excepción.

“Pero Sengoku, si tú lo dices, te creo... ¿Pero por qué sería eso? Tal vez intentaré preguntarle
a Oshino la próxima vez que lo vea.”

“¿A Oshino-san? ¿No vas a preguntarle directamente a Shinobu-chan?”

“Ella solía hablar mucho, ¿sabes?” Dije con una sonrisa amarga. Era la única expresión que
tenía para la situación, de verdad. “Pero ahora ha cerrado su corazón y lo ha hecho con
fuerza. No he escuchado su voz en más de dos meses. Todo ese tiempo se ha mantenido en
silencio.”

Durante más de dos meses, desde las vacaciones de primavera.

Ni una palabra había salido de su boca.

No lo había comprobado, ¿cuál sería el punto? Pero asumí que era lo mismo para Oshino.

No se pudo evitar.

No había forma de evitarlo.

“Ya veo...”

“Me parece impresionante.” Le dije. “Ella tiene que tener mucho que decir, pero lo está
conteniendo todo. Especialmente en lo que a mí respecta, probablemente no tenga fin a lo
que a ella le gustaría decirme y, sin embargo…”

Como su resentimiento.

Como su odio.

Tenía que estar por estallar al contener todo eso, pero nunca lo llego a expresar con palabras.
O tal vez no había palabras sobre cómo se sentía, pero tampoco me confrontó con esos
sentimientos inefables.

“¿No es al revés?” Preguntó Sengoku, desconcertada. “¿No eres la verdadera víctima...?”

“Soy el culpable.” Interrumpí. “Realmente lo soy cuando se trata de Shinobu, soy un


perpetrador más grande de lo que tú fuiste víctima, Sengoku, si fuera posible preferiría no
entrar en detalles, pero por favor, al menos, no culpes a Shinobu por ello.”

“Ah, vale...”

Sengoku asintió, pero parecía un poco insatisfecha. Sin embargo, no podía culparla por no
entender cómo estaban las cosas entre Shinobu y yo. Incluso yo no lo entiendo bien.

Aunque hay una cosa que sí entiendo.

Tengo que dedicar toda mi vida a Shinobu, porque esa es la única manera en que yo, el
culpable, puede expiar lo que hice.

Aun así, a pesar de que no podía evitarse.

Aun así, pienso en ello.

No puedo dejar de pensar.

¿Nunca más volveré a oír la hermosa voz de ese vampiro?

“Bien.” Para romper el estado de ánimo opresivo que comenzaba a invadirnos, hablé en tono
optimista. “Podría ser mejor si nunca te volvieses a encontrar con Oshino o con Shinobu.
Podría ser difícil volver a tu vida cotidiana cuando aprendes de las existencias de las
excentricidades, pero saber también significa que puedes trabajar para evitarlas.”

“Uh, sí... Pero también necesito agradecerle a Oshino-san...”

“Hmm. Tengo la sensación de que realmente no le gusta ese tipo de cosas... Pero tienes
razón. No volverlo a ver nunca más podría ser lo mejor, pero parece ser una elección triste.
Algún azar del destino debió de propiciar su encuentro.”

No es que supiera cómo sentir los lazos forjados por una excentricidad.

... Entonces, una vez más.

Tal vez no debería decir eso.


Hanekawa y yo, Senjougahara y yo, Hachikuji y yo, Kanbaru y yo, todos esos vínculos
fueron provocados por excentricidades. Se lo que siento por ellos.

Lo mismo sucedió con mi reunión con Sengoku.

“Dime.” Agregué. “Ayer estábamos apurados, y la situación era lo que era, te viste obligada
a esconderte, pero deberías volver a ver a mi hermanita. Le pregunté y todavía te recuerda.”

“¿Oh, enserio? ¿Rara-chan me recuerda?”

“Sí. Así que ven a nuestra casa a jugar cuando tengas una oportunidad.”

“¿Está bien? ¿Puedo ir a tu habitación y jugar, Koyomi-onii-chan?”

“Sí.”

Espera, sería un problema si ella viniera a mi habitación...

A nuestra casa, por favor, no a mi habitación.

“¿C-Cuándo…? ¿Cuándo puedo?”

“Hmm. Bueno, supongo que después de que termine el Festival Cultural…”

En ese momento.

Mientras estaba revisando mentalmente lo próximo que haría...

“Oh, Araragi-kun, eres tú.” Dijo una voz detrás de mí. “¿Qué estás haciendo aquí?”

Me volví para encontrar a Hanekawa.

Hanekawa Tsubasa.

La representante de clase de mi clase, la estudiante modelo que hasta hace poco había estado
trabajando duro preparándose conmigo para el Festival Cultural. Hoy me tocaba a mí
devolver la llave de la clase a la sala de profesores, y ella debería haberse ido a casa antes
que yo, así que, ¿por qué llego caminando hacia mí desde atrás?

Corriendo hacia mí y llegando a mi lado, Hanekawa descubrió a Sengoku. Antes de salir por
las puertas de la escuela, Hanekawa no había visto a la chica escondida detrás de mi cuerpo.

“Oh... ¿Um?”

“Ah. Hanekawa, esta es la chica de la que te hablé ayer...” Comencé.


“¡P-P-P-P-P-P-Perdón!”

Pidiendo perdón con una voz absolutamente quebrada, Sengoku se giró y, aunque nunca
diría que podría avergonzar a Kanbaru, su estallido de velocidad me recordó a ella, se escapó
por las puertas delanteras de la Escuela Secundaria Privada Naoetsu.

Pasaron solo unos segundos hasta que desapareció de la vista, si alguna vez alguien salió
disparado como una liebre, esa fue Sengoku.

......

Ella llevó su miedo a la gente un poco demasiado lejos...

¿Los estudiantes de secundaria realmente son tan aterradores, Sengoku?

Si así es como iba a actuar con Hanekawa, ¿cómo iba a presentarle a Senjougahara?
Consideré la posibilidad de invitar a Sengoku al Festival Cultural en función de cómo se
desarrollaran las cosas, pero no parecía que ella pudiera poner un pie en las instalaciones de
una escuela secundaria...

“Araragi-kun.” Dijo Hanekawa después de un momento. “Sabes, eso golpeo en un lugar algo
sensible...”

“Si...”

No importaba lo amable y tolerante que sea Hanekawa, tendría que objetar ante alguien que
se escapa después de nada más que verle la cara. Tenía poca o ninguna responsabilidad por
la situación, pero todavía me sentía mal por eso.

“¿No te fuiste a casa antes que yo?” Pregunté.

“Me tarde porque termine hablando con Hoshina-sensei en el pasillo.”

“Ya veo.”

Hoshina-sensei, nuestra profesora de aula.

Después de todo Hanekawa es ampliamente amada.

“Er.” Comencé. “Perdón por no presentarte antes. Ya era demasiado tarde. Y la persona ya
se ha ido. Esa chica de ahora es amiga de mi hermana pequeña, es de quien te hablé ayer. Su
nombre es Sengoku Nadeko, y está en su segundo año de la escuela media.”
“Huh... Oh, cierto. Quería preguntarte, Araragi-kun, acerca de, um, esa serpiente. ¿Qué pasó
con la excentricidad?”

Así que después de todo estaba pesando sobre ella.

Ayer dejé muchas cosas en el aire cuando hablé con ella sobre eso.

“Bueno.” Respondí. “Se resolvió, aunque una vez más terminamos confiando en Oshino.”

“Hm. Realmente no lo entiendo, pero está bien, esa fue una resolución rápida. Así que para
cerrar el caso todo lo que se necesitó fue el día de ayer.”

“Yo no diría que es algo de abierto y cerrado... pero seguro, algo así. Ella estuvo esperando
aquí todo este tiempo porque quería darnos las gracias a mí y a Kanbaru. Qué chica tan
triste.”

“Eso no es algo que debas decir sobre una persona que hizo todo lo posible para agradecerte,
Araragi-kun.”

“Hey, eso fue solo una manera de hablar…” Comencé a excusarme.

Pero luego me detuve.

“Bueno, tienes razón. No debí de ser sarcástico.”

“Muy bien.” Dijo Hanekawa, pareciendo satisfecha.

Era casi como si hubiera sido domesticado por ella.

“Sin embargo, era una chica muy linda. Sengoku-san, ¿dijiste? Sengoku Nadeko. Quiero
decir que el uniforme es de la escuela media de la que te graduaste.”

“Lo sabes todo, ¿verdad?”

“No lo sé todo. Solo sé lo que sé.”

“Uh huh.”

Por supuesto.

Supuse que podía verla sabiendo eso.

“No sé, sin embargo, Sengoku-san parecía increíblemente tímida...”


“Sí... Ella es tan tímida que llevaría su propia bolsa a la tienda de comestibles solo porque
está demasiado asustada para responder a un empleado cuando le pregunten si quiere una
bolsa de papel o plástico.”

Si tienes curiosidad, esa fue completamente mi propia idea preconcebida de ella.

No lo decía para desacreditarla sin motivo. Necesitaba que pudiéramos reírnos de su


repentina huida, o me sentiría mal por Hanekawa.

“Ajaja. Araragi-kun, ya sea Senjougahara-san, Kanbaru-san o Mayoi-san, últimamente te has


estado llevando bien con un montón de chicas lindas.”

“No lo pongas de esa manera, estás haciendo que parezca que hay más que solo esas tres.”

“¿No las hay?”

“No.” Afirmé, pero era una mentira.

Había al menos una más.

Hanekawa Tsubasa.

Es decir: tú.

“¿Hm? ¿Qué?” Preguntó ella.

“No, nada…”

Quiero decir, si llamara a Hanekawa una linda chica en su cara, probablemente lo trataría
como un simple acto de acoso sexual... No había necesidad de incriminarme.

“Por cierto, Araragi-kun.”

“¿Si?”

“¿No dijiste que tenías algo que hacer hoy? Pensé que era por eso que tenías tanta prisa por
devolver la llave del aula... No me digas que aquello tan importante era charlar con una linda
chica de escuela media.”

“No.”

“Mi impresión de ti como un mujeriego se hace más fuerte cada día, Araragi-kun.”
“No, no es eso.” Esto fue algo que me causó angustia. Al menos, Hanekawa podría
entenderlo. “Antes estuve siendo impreciso al respecto, pero lo explicaré porque no quiero
que me malinterpretes. El ‘aquello tan importante’ que necesito hacer involucra a
Senjougahara. No quería decírtelo porque era vergonzoso, eso es todo.”

“Senjougahara-san, ¿eh?”

Hmm, dijo Hanekawa con expresión dudosa.

Como representante de clase, Hanekawa tuvo que fruncir el ceño ante la mención de una
compañera de clase que, incluso con el Festival Cultural a la vuelta de la esquina, se saltó
cualquier preparación con nada más que un: “Voy al hospital”. Eso fue, por supuesto, una
gran mentira de Senjougahara que, independientemente de cómo haya estado antes, no tenía
nada malo. Por otra parte, esta era Hanekawa, quien tal vez se dio cuenta de ello.

En realidad, sentí que Senjougahara estaba exagerando ese rasgo percibido de ella y que lo
estaba desgastando...

“¿Quieres escuchar un rumor interesante?” Hanekawa preguntó.

“¿Qué es? No suena interesante, pero lo escucharé.”

“Senjougahara-san ha estado actuando rara desde que te hiciste amigo de ella.”

“Urk.”

“Que eres una mala influencia para Senjougahara-san.”

“Urrk.”

“Ese tipo de cosas.”

“Urrrk.”

¿Qué demonios?

Rumores.

“Hoshina-sensei solo me preguntó: ¿Sabes algo, Hanekawa-san?”

“Ungh...”

Era un rumor irresponsable, claro que lo era.


Pero si bien fue desagradable, no pude encontrar una razón por la cual enojarme... Sentí que
era parcialmente cierto, o al menos podía entender por qué la gente podría decir eso.

“Puede que también me hayan dicho que alguien te vio o no te vio caminar el domingo
agarrado del brazo con la estudiante de segundo año, Kanbaru-san.”

“Nkk.”

Ese era cierto.

Aun así, en este pequeño pueblo viven...

Un montón de chismosos.

Hanekawa continuó: “No sé exactamente por qué te volviste tan amigable con Senjougahara-
san, pero creo que de ahora en adelante cada vez más personas dirán ese tipo de cosas sobre
ti.”

“Sí, probablemente lo harán.”

“Así que será difícil. Tendrás que probar que nada de eso es verdad.”

“………”

“No puedes tener gente diciendo cosas poco halagadoras sobre Senjougahara-san, como que
su actitud desmejoro después de que empezara a ver a un chico. No creo que esté bien que
estés hablando con una linda chica de escuela media frente a las puertas de la escuela.”

“... Tienes razón.”

No tenía nada que decir.

El hecho de que Senjougahara fuera vista bajo una mala luz por mi culpa era inaceptable.
Puede sonar engreído, pero al menos tenía que sentirme así de responsable por ella.

“Hey, Hanekawa. ¿No hay alguno sobre ti?”

“¿Hmm?”

“Ese tipo de rumores. Como que te gusta actuar raro desde que te hiciste mi amiga.”

“Quién sabe. Incluso si lo hubiera, nadie me lo dirá a la cara. Aunque lo dudo. Después de
todo, nunca cambio.”
“………”

Ella tenía razón.

Si existiera algún rumor, sería sobre lo contrario: el comportamiento de Araragi mejoró


desde que se hizo amigo de Hanekawa, o algo así.

Y esa suposición, también era cierta.

Era difícil expresar en qué medida me había salvado.

“De todos modos, lo negué.” Me informó. “Dije que no creía que nada de eso fuera cierto.”

“Oh, gracias.”

“No hay necesidad de agradecerme. Dije mi opinión, eso es todo.”

“Ah. ¿Pero realmente piensas eso?”

“¿Eh?”

“Lo que dijiste, que nada de eso es cierto.”

“Oh. Sí, por supuesto. Nunca antes he mentido en mi vida.”

“Podrías ser la única persona que conozco que se atreve a decir que nunca ha mentido.”

“¿En serio? Debe haber un montón. Sí, es correcto; en todo caso, creo que Senjougahara-san
va en una buena dirección.”

Aunque no creo que sea bueno para ella faltar a sus deberes, dijo Hanekawa. Así que era
obvio para ella que Senjougahara estaba mintiendo. De hecho, ¿cómo esperaría alguna vez
ocultar algo a una representante de clase que lo sabe todo?

“No estoy segura de sí está recuperándose de su enfermedad gracias a ti, pero necesitas estar
junto a ella para apoyarla mientras cambia.”

“... Eso no suena como algo que diría una estudiante de secundaria, ¿lo sabías?”

“¿En serio? Es simplemente lo normal.”

“Ok.”

Uno de los rasgos únicos de Hanekawa Tsubasa era su convicción de lo que era “normal”...
pero si era normal, ¿qué parte del mundo ocupaba?
Un pensamiento vino a mí.

Desde hace un tiempo, y eso incluía el momento presente, esta representante de clase tenía
muchas opiniones con respecto a las sutilezas del romance y las relaciones entre los sexos,
pero ¿tenía ella alguien que le gustara?

Ella era amable con todos, pero...

¿Tuvo ella alguien especial?

Nunca tuve ni idea de que ese fuera el caso, pero tal vez las chicas serias como ella tenían
una pareja adecuada. O tal vez no. Hmm, no lo había pensado...

“Hey, Hanekawa…”

“¿Sí?” Ella preguntó en respuesta, desconcertada.

Agh...

No pude hacerlo. No pude preguntar...

Si pudiese tomar prestadas las palabras de Sengoku y hacer una referencia a Bikkuriman,
pero simplemente insinuarle una pregunta como esa se sintió impuro cuando Hanekawa
Tsubasa me estaba bañando en la poderosa luz blanca de la seriedad que emanaba
naturalmente como si fuese un Ángel.

“¿Qué pasa, Araragi-kun?” Preguntó de nuevo con una mirada inocua.

Gah... no sabía por qué, pero era como si me hubieran acorralado. ¿Fue así como el culpable
se sintió justo antes de que un famoso detective lo empujara a confesar? Maldita sea, un “en
realidad, no era nada” no iba a funcionar en ella ahora que empecé a preguntar, no con su
actual actitud. Necesitaba hacer una pregunta. Ack, me arrepentí de esto no menos que la vez
que intenté usar dos bombas de baño de diferentes colores.

“Uh, bueno, esos artilugios secretos que Doraemon usa…”

Como me quedé sin opciones, fui con Doraemon como último recurso, pero estaba a medio
camino cuando Hanekawa me interrumpió con un murmullo.

“Ay.”
Ay... ¿Estaba ella hablando de mí? ¿Estaba encogida porque yo, un estudiante de secundaria,
estaba hablando de Doraemon (y por eso reacciono así como medida desesperada)? ¿A pesar
de que estaba bien para los estudiantes de escuela media?

Los pensamientos paranoicos me consumieron por un momento, pero no, Hanekawa tenía las
yemas de los dedos en la cabeza. En otras palabras, ella probablemente tenía un dolor de
cabeza. Y aunque gran parte del día anterior se había difuminado, con lo desordenado que
había sido, ella también dijo algo así en ese momento...

“Hey, ¿estás bien?”

La sonrisa que ella señaló en mi dirección no estaba nublada... pero eso significaría que lo
que acababa de decir era falso.

¿Nunca antes ha mentido en su vida?

Pero mira, eso era mentira.

“Podríamos ir a la enfermería, no, a esta hora Harukami-sensei también debe haberse ido. En
ese caso, podríamos ir a un hospital.”

“Dije que estoy bien. Estás exagerando, Araragi-kun. Todo lo que tengo que hacer es ir a
casa y estudiar un poco para que desaparezca.”

“En serio crees que el estudio cura los dolores de cabeza...” Era, sencillamente, extraña en
estas cosas. Pensó de manera diferente a los demás.

“Dijiste que últimamente ha estado pasando mucho, ¿verdad? ¿Y si es algo terrible?”

“Te estás preocupando demasiado. A veces puedes ser bastante libertino, ¿sabes? Olvídate
de eso, Araragi-kun. ¿Entiendes lo que te dije? Y entenderme no es suficiente. También
necesitas ponerlo en práctica.

“Sí, entiendo.”

Olvida eso.

Poner a los demás por delante de ti mismo.

En este punto, pensé que ella también era un bicho raro.

Pero.
“Lo siento por hacer que te preocupes tanto por mí.” Le dije.

“No me importa. Pero de todos modos, si entiendes lo que trato de decirte, Araragi-kun...”
Hanekawa soltó lo que sonaba como una tos forzada antes de continuar. “¿Por qué no
empezar por guardar esos pantalones cortos de voleibol y traje de baño escolar que estás
acunando como algún tipo de tesoro?”
003
Trece de junio, un día memorable para mí.

Se suponía que se convertiría en uno.

Y no tenía absolutamente nada que ver con pantalones cortos de voleibol, trajes de baño
escolares o similares. Todo comenzó con un comentario de Senjougahara Hitagi, mi novia
desde el Día de las Madres, que fue el mes pasado, el día catorce de mayo.

“Iré a una cita.”

Ocurrió esa tarde durante nuestro almuerzo.

Las palabras vinieron de la nada cuando nos sentamos en un banco del patio, uno al lado del
otro, y comimos nuestros almuerzos en lo que debió parecer una escena de pareja. Me
sorprendió tanto que dejé caer la tortilla enrollada que estaba recogiendo con mis palillos.

¿Perdóname?

¿Qué acaba de decir esta mujer?

Miré a Senjougahara.

Ella llevaba su uniforme de verano.

Una moda que tranquilamente empezaba a tomar popularidad entre las chicas de mi escuela,
donde se quitaron las mangas ya cortas de sus uniformes, las doblaron aún más y las fijaron
para que pareciera que llevaban blusas sin mangas, asumí que Senjougahara era el tipo de
chica que desaprobaba seguir esas tendencias, pero ese no parecía ser el caso, en ese aspecto
era apolítica, lo que fue un nuevo descubrimiento para mí. Por cierto, aunque Hanekawa no
se quejó de ese tipo de locuras, tampoco participó en ellas. Tal vez los estudiantes modelo
diferían entre sí dependiendo de si se dejaban influenciar o no. Sin embargo, en cuanto a su
falda, la de Senjougahara seguía teniendo la misma longitud de siempre.

Estaba comiendo, lo que significaba que su cabello en la espalda y el flequillo que


últimamente parecía estar creciendo estaban atados con bandas elásticas rojas. A algunos
podría haberles parecido un peinado estúpido, pero realmente disfruté la forma en que
mostró su bonita y ordenada frente, además de que me sentí bien al poder verla con “la
guardia baja”. Era como si se abriera a mí de alguna manera.
“Umm... ¿Eh?” Dije, sin saber cómo reaccionar.

“Hmm.” Senjougahara usó sus palillos para sacar un poco de arroz blanco de su lonchera y
me lo tendió. “Di: ahh.”

“…………”

¡Ack!

¿¡Qué estaba pasando aquí!?

Esta era una escena muy usada en el manga y cosas por el estilo, algo que yo sabía que
hacían los tortolitos, ¡pero no me alegró en absoluto! Quería que parara, no, ¡tenía miedo!

Mientras tanto, Senjougahara tenía el mismo rostro plano e inexpresivo...

Me hubiera gustado complacerla si lo hubiera hecho con una mirada tímida e incómoda, pero
esto era una situación en la que ambas partes realmente necesitaban saber cómo se sentía la
otra...

No pude evitar preguntarme qué estaría planeando.

Tenía que tener un motivo ulterior.

Tal vez eso ulterior era su verdadera intensión.

Un casete con dos Caras-B.

Podría ser una finta. ¿Planeaba reírse de mí si abría la boca como una idiota?

“¿Qué pasa, Araragi-kun? Vamos, di: ahh.”

“……”

No...

¿Por qué desconfías tanto de tu novia?

Senjougahara podría ser mala, pero nunca haría algo tan horrible. Habíamos estado saliendo
durante un mes, no es lo que podría llamar un largo período de tiempo, pero si el tiempo
suficiente para ser más cercanos. Habíamos formado una relación de confianza. ¿En qué
estaba pensando, al casi destruir eso?

Soy el novio de Senjougahara.


“Ah, aahh.” Abrí la boca.

“Toma esto.”

Senjougahara golpeó el arroz contra mi mejilla, justo a la derecha de mi boca abierta.

“………”

Aguanta, aguanta.

Cierto, era un chiste obvio.

“Je, jejeje.” Se rio Senjougahara.

Fue una risa tranquila, irritante.

“Jejeje... Ajaja. Jaja.”

“... Estoy encantado de ver tu sonrisa.”

Ella casi nunca solía reír.

Ella solo se reía en momentos como estos.

En general, ella era simplemente inexpresiva.

“Araragi-kun, tienes arroz en la mejilla.”

“Tú lo colocaste ahí.”

“Te ayudare con eso.” Dijo, bajando los palillos y acercándose a mí con su mano. Uno por
uno, ella recogió cuidadosamente los granos de arroz de mi mejilla después de haberlos
embadurnado allí.

Hmm.

Esto no era malo...

“Está bien, ya no hay más.” Dijo ella antes de tirar el grupo de arroz en un bote de basura
cercano.

¿Simplemente lo tiraría? Y mientras miraba...

Bueno, no es como si pensara que ella lo comería.

“Muy bien.” Senjougahara retomo enérgicamente.


Como si estuviera fingiendo que no había pasado nada.

“Iré a una cita.” Repitió.

Pero entonces, por alguna razón, comenzó a parecer preocupada. Ehh, ella inclinó su cabeza
mientras consideraba algo.

“No, no eso. Una cita...”

“¿...?”

“¿Podría... pedirte una cita?”

“………”

“¿Qué pensarías... sobre... una cita?”

“……………”

¡Espera un segundo!

¿¡En verdad ella no sabía cómo pedir algo!?

Me quedé impactado.

Bueno, fue algo más un shock; Senjougahara había sido quien propuso una cita, y estaba
siendo tan decidida y repentina al respecto.

Hablando de haber salido con ella durante un mes.

Durante ese tiempo, le pregunté abiertamente, y a veces incluso audazmente, sobre tener una
cita, y ella nunca reacciono. Y aun así. Senjougahara Hitagi, quien permanecía constante
como el amanecer, como el medio día, como la tarde, como la noche... ¿Estaba pidiendo una
cita?

Habíamos sido firmes, como si hubiésemos firmado un pacto de silencio, para mantener
nuestra relación “platónica”, como diría mi kouhai Kanbaru. ¿Ahora por fin íbamos a tener
una cita?

¿Qué cambio de mentalidad fue este?

Al igual que con el “Di: ahh” de ahora, ¿podría ser una especie de trampa? Era bastante
cuestionable que me sintiera tan paranoico por una oferta para tener una cita, cuando, según
nosotros dos, ella era mi novia, pero así de chocante era.
“¿Qué?” Dijo Senjougahara rotundamente. “¿No quieres?”

“No, si quiero, pero...”

“Por cierto, escuché.” Senjougahara se volvió hacia mí con una mirada intrépida que
generalmente no está destinada a tu novio. “Que parece que te divertiste un poco en tu cita
con Kanbaru. Oí que ustedes dos tuvieron una relación íntima y terminaron pasando la noche
juntos.”

“Oh... ¿Entonces quieres decir que lo escuchaste todo de Kanbaru?"

“Sí... aunque tenía los labios muy apretados.”

“……….”

¿Por qué actuar como si escondiera algo?

¡Afloja los labios, porque no hicimos nada en absoluto! ¡Mantenerlo en secreto hizo que
pareciera que si paso algo! ¡Hombre, las personas con los labios apretados eran los peores
alborotadores!

“Ella me rogó que no te culpara por ello.”

“¿¡Por qué ella me está cubriendo!? ¡No hicimos nada!”

¡Soy inocente!

¡No culpable!

¡Falsamente acusado!

“En cualquier caso.” Dijo Senjougahara. “Me alegro de que ustedes dos parezcan llevarse
bien.”

“……”

¿Que se supone que significa eso?

Por supuesto.

Probablemente Senjougahara se sintió endeudada o mal con Kanbaru, y también sabía que
Kanbaru y yo éramos rivales en el amor por nada menos que ella. Así que no fue
exactamente incomprensible que ella pudiera sentirse así por el hecho de que Kanbaru y yo
nos lleváramos bien, pero parecía haber algún otro matiz en sus palabras.
Me recordó lo que Hanekawa me había dicho el día anterior.

Creo que cuando Senjougahara ve ese lado tuyo, la hace sentir bastante insegura...

El otro matiz de sus palabras…

Esta mujer.

¿En qué podría estar pensando?

“Así que ahora.” Dijo ella. “Kanbaru vale algo para ti si fuese tomada como rehén.”

“¡Estás pensando en algo atroz!”

¿¡Rehén!?

¿Ella acaba de usar la palabra “rehén” en una conversación regular?

“Kanbaru es tan linda, ¿no te lo parece?” Continuó. “Y, ya sabes, esa linda chica está más
que feliz de obedecer cada una de mis palabras. ¿Cómo te hace sentir eso? Completamente
como una nota al margen, ¿no te gustaría ver a una linda chica caminando por la escuela a
cuatro patas, desnuda solo de la cintura para abajo?”

Senjougahara dejó escapar la línea hostil con un suspiro y un aire de tristeza forzada.
Habiendo sido nacido y criado en un país pacífico, nunca me había imaginado que una
amenaza pudiera envolverse en tales maneras quietas y no violentas...

Senjougahara Hitagi.

Acabas de demostrar que no eres tsundere, eres una persona horrible, eso es todo...

“Que grosero, Araragi-kun. Es la primera vez que alguien dice eso de mí.”

“¿En serio?”

“En todo caso, la gente a menudo me dice lo contrario. ‘Qué personalidad más
encantadora’...”

“¡Estaban siendo sarcásticos!”

Demonios, si ella estaba de acuerdo con eso, ¡con gusto lo diría!

¡Qué hermosa personalidad tienes!


“¿Disculpa? ¿Estás diciendo que esas personas estaban siendo deshonestas conmigo? ¡No
toleraré que nadie, ni siquiera tú, Araragi-kun, ponga en duda sus palabras!”

“¡Estás defendiendo a las personas que te están insultando, maldita sea!”

Y así.

Estábamos bromeando mientras conversábamos.

Estábamos probando el ingenio de cada uno.

“Está bien.” Otra vez Senjougahara volvió a comenzar, aunque la introducción no estaba
remotamente bien. “Irás a una cita. Conmigo.”

“Así que eso es lo que vas a decidir...”

No era una forma demasiado inapropiada de expresarlo.

De hecho, no hay una forma más clara de expresarlo.

“¿Alguna queja...? Quiero decir, ¿alguna pregunta?” Ella siguió.

“No, ninguna…”

Luego daré cualquier excusa y me iré a casa temprano después de la escuela, así que ven a
recogerme una vez que hayas terminado de prepararte para el Festival Cultural, por favor...
Senjougahara resumió antes de regresar a su comida como si nada hubiera pasado.

Era muy parecido a ella saltarse la preparación del Festival Cultural como una cuestión de
rutina, pero ciertamente no estaba descontento de tener una cita con ella. Además, sería una
cita de pesadilla, un detalle con profundas implicaciones. En cuanto a dónde íbamos y qué
haríamos, Senjougahara dijo que le dejara toda la planificación.

No vi ninguna razón en particular para objetar, así que simplemente decidí esperar lo que
fuese a venir y me prepare mentalmente para el impacto.

Qué viaje tan largo había sido...

Lograr que mi novia fuera a una cita requirió un esfuerzo inesperado... Me había excedido al
tener antes una cita con mi kouhai, Kanbaru, pero todo está bien si termina bien.

En todo caso.

El trece de junio iba a ser un día memorable para mí, el de mi primera cita con mi novia.
Sin embargo.

Unas pocas horas después.

Mientras me dirigía a casa después de la escuela, una vez terminada la preparación del
Festival Cultural, encontré a Sengoku Nadeko, la vieja amiga de mi hermanita, esperándome
afuera y me entregaron pantalones cortos de voleibol y un traje de baño escolar; lo que fue
visto por Hanekawa, le dije con toda la sinceridad que pude reunir: “¡Por favor! Te pagaré
50.000 yenes, así que no se lo digas a nadie”. (Por supuesto, ella me dio una seria charla en
respuesta: “La gente está dotada de dignidad, y deberías avergonzarte de tratar de
comprarla.” Allí estaba yo de pie, con pantalones cortos de voleibol y un traje de baño de
escuela en las manos, siendo regañado por una compañera de clase en las puertas delanteras
de la escuela) antes de pedalear un poco más rápido de lo habitual en mi bicicleta para llegar
a casa, donde me cambié de mi uniforme a algo más apropiado y volví a la casa de
Senjougahara con nada más que mi billetera y mi teléfono celular.

Eran más de las 7:30pm cuando llegué.

Me pregunté si llegaba un poco tarde, pero Senjougahara me saludó con un: “Llegaste antes
de lo que esperaba.” Seguido de un: “Eso está bien.”

Parecía que llegar demasiado pronto podría haber sido un problema.

Senjougahara también se había cambiado y no usaba su uniforme escolar.

Ella tenía su cabello recogido en un par de coletas tras su espalda. Era una regla personal que
ella usara su cabello hacia abajo cuando estaba en la escuela, aparte de cuando comía y
durante la clase de educación física (que recientemente había empezado a no saltarse) y
atarse el cabello cuando no lo estaba, teniéndolo en un par de coletas, le hizo adoptar una
vaga similitud con la representante de nuestra clase, Hanekawa, pero parecía una opción
elegante y una con la que sería fácil moverse.

Pensé que su ropa hacía que pareciera que íbamos a ir a alguna parte, y tal como esperaba,
ella dijo: “Está bien, vamos. Solo sígueme.”

Pero eso fue lo más lejos que me llevaron mis expectativas.

Aun nos esperaban algunos giros y vueltas inesperadas.

Senjougahara Hitagi me llevó a un jeep estacionado fuera de Tamikura-sou, donde ella vivía.
Viajaríamos en automóvil.

Eso estaba bien.

Vivía en una sociedad motorizada. No tenía preguntas ni quejas sobre eso.

El problema era que tanto Senjougahara como yo teníamos estrictamente prohibido por las
reglas de nuestra escuela adquirir una licencia de conducir. No se nos permitía ni un scooter,
por no hablar de los automóviles. Así que tanto Senjougahara como yo nos subimos a los
asientos traseros del jeep.

Entonces, ¿quién conducía?

El papá de Senjougahara Hitagi.

“………”

¿El papá de mi novia nos estaba acompañando en nuestra primera cita?

Una cita que se parecía más a una tortura...

Memorable, pero como esperaba...

El estado de ánimo en el automóvil, no importa cómo lo vieses, era incómodo.


Intercambiamos saludos apresurados antes de que el jeep partiera. Incluso no me atreví a
preguntar a dónde nos dirigíamos. En realidad, nuestro destino ya no podía importarme
menos.

Esta fue, por supuesto, la primera vez que me encontré al papá de Senjougahara.

Sería una cosa si fuera abierto y sociable, pero me costaba mucho tratar con los de su tipo,
tal como podrías suponer, incluso si no mencionaba a Sengoku, es que es del tipo silencioso.
Una cosa era enfrentar a una chica taciturna que era más joven que yo, ¿pero un hombre que
es mayor que yo? El papá de Senjougahara estaba bien vestido, como si acabara de regresar
del trabajo... no, como si todavía estuviera trabajando, mientras silenciosamente manejaba el
volante. Trabajaba en una empresa extranjera o algo así....

Parecía un hombre severo. De por si mi paranoia ya me había dado problemas, pero sentía
que podría enojarse conmigo por cualquier razón.

Aun así.... si dejas todo eso a un lado, mientras que él parecía estar en el lado más viejo para
ser padre de alguien de mi edad, tenía un porte bastante genial con su cabeza salteada de
cabello blanco. Como si fuera un actor. Estaba “envejeciendo con gracia”. A riesgo de sonar
como un novio cariñoso, Senjougahara Hitagi era lo suficientemente bella para que algunos
la llamaran princesa de claustro. Pero ahora tenía sentido; chicas como ella tenían padres
como él.

Hmm.

Tu papá de porte genial obtuvo más puntos que tú...

“¿Qué pasa, Araragi-kun?” Senjougahara, que estaba sentada a mi lado, preguntó después de
haber avanzado por un tiempo. “Estás muy callado.”

“Hey... ¿No entiendes la situación en la que estoy ahora?”

“Claro que no. ¿Cuándo es ‘ahora’? ¿Cómo se deletrea ‘situación’?”

“¿¡Ni siquiera entiendes eso!?”

Mírala, jugando a hacerse la tonta.

¿No tenía compasión?

“Araragi-kun.” Dijo. “No te culpo por estar nervioso en nuestra primera cita, pero necesitas
relajarte. La noche es larga.”

“Si...”

No fue porque esta era nuestra primera cita...

Realmente me perdí esa época de mi vida cuando creía que una cita nocturna tenía profundas
implicaciones. En ese entonces yo era feliz. El hecho de que la noche fuese larga era
simplemente aterrador.

¿Por qué la noche tenía que ser larga? Todo lo que quería era que terminara lo antes
posible...

“Hey, Araragi-kun.” Dijo Senjougahara en su tono plano.

Ella no sonaba nada nerviosa...

“¿Me amas?”

“¡……!”
¡Qué manera de acosar a alguien! ¿Así que ella no solo tenía una lengua afilada, también era
capaz de esto?

“Respóndeme. ¿Me amas?”

“……”

“Que pasa. ¿No me vas a contestar? Espera, Araragi-kun, ¿podría ser que no me amas?”

Esto fue acoso. Lo último en acoso...

“Te amo...” Dije.

“Oh.” Senjougahara ni siquiera sonrió. La máxima inexpresividad.

“Yo también te amo, Araragi-kun.”

“Bueno, muchas gracias.”

“No hay de qué.”

… Espera un segundo.

¿Así que ella no se inmutó por esto?

¿Estaba totalmente tranquila a pesar de estar teniendo esta conversación frente a su papá?
No, no importa. Si eso significaba poder acosarme, no le importaba aceptar daños
colaterales.

En cuyo caso, pensé, lanzando una mirada furtiva de soslayo al asiento del conductor
(demasiado furtiva para que la opción de mirar de frente sea siquiera una opción). El papá de
Senjougahara, sin embargo, apenas había reaccionado. Conducir ocupó toda su atención.
Qué buen hombre... Nuestro jeep parecía estar conduciendo hacia la autopista. La autopista...
¿Nos dirigimos a algún lugar lejano? Bueno, si no fuera el caso, Senjougahara no habría
traído a su papá a nuestra cita, quería pensar eso...

Diez minutos más tarde, el jeep llegó a la autopista. Ahora no había escapatoria. Para
empezar, no es que tuviera alguna intensión de escapar, lo digo enserio.

“Estás muy callado, Araragi-kun. Apenas has abierto la boca cuando siempre eres tan
voluble. ¿Hoy estás de mal humor?”

“Olvida mi estado de ánimo...”


“Oh. Tu IQ es lo que es horrible.”

“No pudiste resistirte a aprovechar mi confusión, ¿verdad?”

“Al menos, estás tan animado como siempre con las respuestas. Perfecto. Como un acto de
bondad, presentaré un tema de conversación. Lo único que debes hacer es responder.” Dijo
Senjougahara. “¿Qué amas de mí?”

“¡Definitivamente sé qué no amo de ti!”

¿Qué estaba tramando?

De hecho, sentí como si toda esta cita fuera una gran trama de acoso diseñada para ponerme
a prueba.

Estaba empezando a querer escapar.

“Maldición...” Murmuré. “Y en realidad estaba esperando esto... ¡Casi sentí que era un sueño
hecho realidad!”

“¿Sueño? Oh, no exageres.” Dijo Senjougahara sin comprender. “¿No lo sabias, Araragi-
kun? Si escribes el carácter de ‘persona’ junto al de ‘inconstante’, ¿hmm, me pregunto que
resulta de ello?”

Probablemente una nueva forma de escribir mi nombre.

Así nació un nuevo kanji.

“Araragi-kun, puedo decir que estás sufriendo... Es tan irritante que todo lo que puedo hacer
es animarte desde las gradas.”

“No, sabes qué, creo que también puedes disculparte...”

Pero.

Una disculpa no iba a hacer nada por mí.

Si lo único que necesitaban eran disculpas, ¿quién necesitaba la policía?

“Y no estoy sufriendo.” Dije. “Sino sintiéndome muy, muy agotado.”

“Lailarala-lairala, lalalalalala.”

“¿Qué? Oh, ya veo...”


Aunque no estaba de humor para reírme de sus bromas.

No había espacio en mi corazón para eso.

De todos modos.

“Hey, Senjougahara... En serio, ¿qué crees que estás haciendo?”

“¿Senjougahara? ¿Te refieres a mí cuando dices eso, o a mi papá?”

“……….”

Esta mujer. Si me mentalizo a que será lo último que haga...

No, necesitaba calmarme. Dar voz a mis pensamientos significaba una ruptura segura...

“Papá, Araragi-kun tiene algo que decirte.”

“¡Hitagi-san! ¡Tengo algo que decirte, Hitagi-san!”

No me atreví a dirigirme a ella más casualmente.

Hitagi-san.

Justo el otro día, Kanbaru y yo tuvimos este mismo momento en el que decidimos llamarnos
por nuestros nombres. ¿Quién podría haber adivinado que la misma escena se desarrollaría
de este modo con mi actual novia?

“¿Qué podría ser, Araragi-kun?”

“……”

¿No vas a decir el mío?

No es que me importara.

“Entonces, Hitagi-san. Te lo preguntaré una vez más... Dime. ¿Qué crees que estás
haciendo? ¿Qué estás planeando?”

“No estoy planeando nada. De todos modos, Araragi-kun. Conoces a la famosa escritora de
misterios Agatha Christie, ¿no? Si reorganizas las letras de su nombre, obtienes ‘a hag is
theatric’ lo que se traduce a ‘una bruja teatral’. ¿Crees que fue a propósito?”

“¿¡A quién le importa eso!? ¡Si alguien es una bruja teatral, eres tú!”

“No puedo creer que dijeras eso de mí frente a mi papá.”


“Urk...”

¡Era una trampa!

¡Y caí directo en ella!

“Papá, parece que tu hija es una bruja teatral.”

Y ahora ella se lo estaba reportando...

Pero el papá de Senjougahara seguía sin reaccionar.

Quizás estaba acostumbrado a este tipo de actos de su bruja teatral. Sí, ahora que lo pensé,
ella era su hija...

Entonces no tenía sentido que se llegase a enojar.

Ella me estaba haciendo bailar como su pequeño mono, pero no estaba tocando ninguna
canción.

“Oh. Te has vuelto a callar. ¿Te acosé demasiado?” Dijo ella, mirándome. “Reaccionas de
manera tan buena que me dan ganas de seguir metiéndome contigo.”

“Esa línea me hace sentir más deprimido que cualquier otra cosa que hayas dicho...”

Honestamente.

Está bien, intentare un contraataque.

Quería ver a Senjougahara sentirse deprimida por una vez.

“Entonces, ¿qué amas tú de mí?” Le pregunté.

“Qué amable eres. Qué eres lindo. Qué eres cómo eres como mi príncipe que viene corriendo
para salvarme cuando estoy en problemas.”

“¡Bien, me disculpo!”

¿Por qué llegue a pensar que podría defenderme?

Esta mujer malvada no sólo tenía una pierna encima de mí cuando se trataba de esto, ella
tenía sobre mí el valor de las piernas producidas por una fábrica de maniquíes. ¿Por qué trate
de luchar contra su mala voluntad con mala voluntad?

Senjougahara era la calma personificada.


¿No tenía emociones?

Mientras tanto, aunque sabía que su respuesta era solo una reacción a mi acoso, mi corazón
estaba martillando...

“No entiendo... ¿Por qué? ¿Dónde me equivoqué al caminar por este camino de espinas...?”

“¿Qué tiene de malo un camino de espinas? Caminar con elegancia por un camino lleno de
rosas en flor es una imagen tan hermosa y elegante.”

“¡No le des un buen giro!”

“En el lenguaje de las flores, las rosas significan: un hombre necio.”

“¡Mentirosa! ¡Deja de inventar cosas solo porque te apetece!”

“Por cierto.” Dijo Senjougahara. Ella saltó entre los temas de conversación a su gusto. “Por
cierto, basu... lo siento, Araragi-kun.”

“¿Casi llamaste ‘basura’ a tu propio novio?”

“¿De qué estás hablando? Desearía que no hicieras acusaciones tan infundadas. De todos
modos, ¿cómo te fue en los exámenes del otro día?”

“¿Hunh?”

“¿Recuerdas cómo me preocupaba por ti, en mi casa, los dos solos, día y noche?”

“………”

¿Por qué decirlo de esa manera...?

¿Entonces por qué planeaste las sesiones de estudio cuando sabias que tu papá no estaría
para luego decirlo en su cara?

“El fin de semana pasado llegaron los resultados.” Dijo. “Pero has evitado hablar de eso,
asumí que eso significaba que tus resultados eran absolutamente miserables, así que fingí
que no le daba importancia, pero hoy le pregunté a Hanekawa-san y parece que no lo hiciste
tan mal.”

“¿Hanekawa?”

“Ella tiene los labios apretados, así que, por supuesto, no pude hacerle revelar los detalles,
pero me hubiese dicho si fallaste.”
“………”

Senjougahara debió preguntar de una manera horrible.

Cuando Hanekawa cambió la charla al mencionar a Senjougahara frente a las puertas de la


escuela, lo pensé. Era un poco antinatural, pero ahora tenía sentido. Ese era el trasfondo.

Le había dicho a Hanekawa sobre los resultados de mi exámenes... Pero a juzgar por las
frases de Senjougahara, probablemente estaba siendo un poco ingrato por no decirle una
palabra después de todo lo que había hecho, de alguna manera me había demorado. Gracias a
la cuestión de la universidad, cosa que también había discutido con Hanekawa.

“¿Por qué estás siendo tan reacio?” Ella presiono. “Apúrate y dame los puntajes exactos. Si
te das aires, entonces doblaré cada articulación de tu cuerpo hacia atrás hasta que,
paradójicamente, parezcas un poco genial.”

“¡No se verá genial, de ninguna manera se vería de ese modo!”

“¿Se vería no-genial?”

“¡‘No-genial’ no comienza a describirlo!”

“¿Se vería ‘lol’?”

“¡No sería cosa de risa!”

“Así que date prisa y dime si no quieres caminar en la posición de puente trasero por el resto
de tu vida.”

“¡Si tuviera cada articulación de mi cuerpo doblada hacia atrás, estaría aún peor!”

Moriría.

Moriría unas cinco veces antes de que ella terminara.

“Pero sí, debí decírtelo antes. Lo siento, ¿ok? Lo hice mejor de lo que pensaba. Incluso en
matemáticas, la materia en la que siempre fui mejor, gracias a ti. Gracias, Senjougahara.”

“Papá, Araragi-kun te está dando las gracias por algo, ¿no lo escuchas?”

“¡Gracias, Hitagi-san!”

Por Dios.
En cualquier caso, le di mis notas detalladas de nuestros seis cursos en cinco materias.
Asintiendo con la cabeza uh huh, me hizo decirle en qué preguntas me equivoqué, qué es lo
que no entendía, y así sucesivamente... Me sorprendió un poco darme cuenta de que ella
parecía recordar cada pregunta de las pruebas que hicimos. Por otra parte, ella fue lo
suficientemente dotada como para obtener la séptima mejor puntuación en nuestro año
escolar, incluso mientras se preocupaba por mí... así que tal vez mi sorpresa estaba fuera de
lugar.

Finalmente estábamos teniendo algo parecido a una conversación regular entre estudiantes.

Podría relajarme un poco, incluso frente al papá de Senjougahara.

Esta era mi oportunidad de parecer un tipo serio.

“Es mejor, sin embargo.” Comentó Senjougahara. “Si comparamos las respuestas
inmediatamente después de una prueba. Pero tal vez sea injusto exigirte tanto y tan pronto...
De todos modos, tienes notas decentes. Eso es un poco inesperado, incluso si fui yo quien te
enseño.”

“Inesperado, ¿eh?”

“Sí. Es un chiste tan poco gracioso para ti.”

“¡No tenías que enseñarme para luego burlarte de mí!”

“Estaba esperando un desarrollo del tipo: ‘¡Él estudió tan duro pero terminó haciéndolo peor
que de costumbre!’ De alguna forma me encuentro decepcionada.”

“¿¡Y no crees que esperar tal desarrollo es injusto para mí!?”

“De hecho sí.”

Con esas palabras.

Senjougahara dejó caer su mano sobre mi pierna.

Alrededor de mi muslo.

......

¿Qué estaba tratando de hacer?


Por cierto, el automóvil en el que estábamos puede haber sido un jeep, pero no era tan
grande. Los dos estábamos realmente muy cerca el uno del otro cuando nos sentamos en la
parte de atrás... lo suficiente como para que nuestros cuerpos se tocaran cuando el auto
doblase una esquina.

Sea como fuere, no sabía cómo responder a ella haciendo todo lo posible por tocar mi
muslo...

“Bueno, eso fue impresionante.” Dijo ella. “Hiciste un buen trabajo.”

Como si el movimiento de su mano derecha estuviera completamente fuera de su


jurisdicción, Senjougahara avanzó la conversación sin pestañear, ¿por qué su expresión
nunca cambió? Tuve que preguntarme si ella estaba usando una máscara bien hecha.

“Rara vez les digo a las personas que hicieron un buen trabajo. ¿Me pregunto cuántas veces
le he dicho eso a otras personas en el pasado? Es posible que no lo haya hecho desde el sexto
grado, cuando esa compañera de clase que se sentó a mi lado me ganó volteando tres filas al
mismo tiempo en un juego de Otelo.”

“Eso fue hace años, ¡y no es tan impresionante!”

“Mentí.”

“Bueno, yo creí que...”

“Pero es cierto que rara vez alabo a la gente.”

“Sí... te creo.”

“Por supuesto, en este caso, solo me digo a mí misma que hice un buen trabajo de manera
indirecta. Estoy terriblemente orgullosa de que mi sabio consejo haya mejorado a un tonto
como tú, Araragi-kun.”

“……….”

Bien.

Eso también era técnicamente cierto.

“Si lo digo yo misma.” Agregó. “¿Cómo me las arreglé para mejorar a un tonto como tú que
solía traducir ‘mandril’ como ‘taladro-hombre’?”

“¡Nunca he cometido ese error en mi vida!”


“Y parece que muchas de tus respuestas incorrectas se debieron a errores por descuido...
Mmm. A este ritmo, Araragi-kun, puedes apuntar aún más alto.”

“Aún más alto, dices.”

Exámenes de ingreso a la universidad.

Opciones de carreras.

“Araragi-kun, no me importa continuar ayudándote a estudiar mientras eso sea lo que


quieres.”

“Yo no podría…”

Hablando de manera realista.

Todavía no estaba cerca de la etapa en la que pudiera decirle a Senjougahara que estaba
considerando la universidad nacional en la que ella esperaba obtener una recomendación,
pero eso no significaba que tuviera alguna razón para rechazar su oferta.

“… Esperar algo más.”

“Es así.” Dijo Senjougahara con su expresión compuesta, y nada más.

Un pensamiento corrió por mi cabeza.

Hanekawa tenía los labios apretados, y además le había hecho prometer por arriba, por abajo
y por los lados que no lo contaría. No había manera de que ella le dijera a Senjougahara
acerca de mis intenciones, pero tal vez esta mujer las había descubierto.

Eso sería todo. Incluso si ella lo sabía, parecía estar lista para esperar hasta que yo mismo le
dijera…

Era como si pudiéramos comunicarnos sin palabras, lo que nos hacía sentir bien.

“……”

Más importante aún, no satisfecha con tocar mi muslo, Senjougahara comenzó a acariciarlo,
cubriendo todo el camino hacia mi muslo interno. ¿Qué podría significar?

¿No me estaba manoseando?

¿Es algo que haces frente a tu papá?


Bueno, para ser precisos, detrás de tu papá.

“En ese caso.” Dijo. “Estudiarás en mi casa todos los días.”

“¿¡T-Todos los días?”

¡Nunca se lo comuniqué sin decir nada!

Espera…

¿Podría ser eso lo mucho que necesitaba estudiar? Pero todos los días... ¿Cada uno de ellos?
Estudié durante las clases, ¿no? ¿Tendré que ir después de la escuela y también los
domingos?

“¿Qué? ¿Ocurre algo, Araragi-kun?”

“B-Bueno... estaba pensando que creo que las personas inteligentes estudian mucho.”

“No. No lo sé, sería un fastidio hacerlo. Es un programa diseñado para ti, ¿si no para quién?”

“…………”

Como si fuera natural.

Ella, con la séptima mejor calificación de mi año, me acaba de decir que estudiar era un
fastidio...

“Las personas inteligentes son inteligentes desde antes de estudiar.” Dijo. “Las notas sólo
miden tu capacidad de digerir y memorizar.”

“Huh. Oh, pero ¿qué hay de Hanekawa? Dijo que le dolía la cabeza si no estudia, o algo así.”

“Lo que ella quiere decir con ‘estudio’, Araragi-kun, está tristemente en un nivel diferente al
que nosotros interpretamos.” Senjougahara hizo una pausa antes de continuar. “Hanekawa-
san es lo real. Ella existe en un mundo diferente en el que tú y yo vivimos.”

“... Huh.”

Entonces, incluso Senjougahara la veía de esa manera.

Así que había una división.

La séptima en nuestro año, y la primera en nuestro año.

Ambas en los dígitos únicos, pero existía una diferencia tan vasta.
“Lo real, ¿eh?”

“Tal vez más. Irreal, o ‘monstruo’, podría ser una mejor manera de decirlo. Quiero decir, ¿no
te asusta? Cuando alguien es tan listo, ya no estamos hablando de ingenio.”

La habitual lengua afilada de Senjougahara...

Esto no suena a eso.

De alguna manera siempre fue así cuando se trataba de Hanekawa.

No fue antipatía, pero...

Ella mantuvo una distancia extraña.

“¿Acabas de decir ‘tú y yo’?”

“Sí.” Respondió Senjougahara. “Tú y yo, ambos. Así como Hanekawa-san y yo podemos
parecer similares a tus ojos, creo que nos mira a ti y a mí como si estuviéramos en el mismo
nivel.”

“¿En serio?”

“En serio. Es muy humillante.”

“Oh, eso es humillante...”

Y bastante.

A ella realmente le gustaba rebajarme, ¿verdad?

“Aun así.” Dije. “No es como si Hanekawa siempre obtuviera puntuaciones perfectas, ¿no?
Bueno, supongo que casi siempre obtiene puntuaciones perfectas...”

“Cuando Hanekawa-san no obtiene una puntuación perfecta, es porque una pregunta de la


prueba estaba mal... No sé, sin embargo, cuando pienso en la presión que eso debe ejercer
sobre ella.... No puedo decir con honestidad que estoy celosa.”

“Presión, ¿eh?”

“O tal vez el estrés.”

“Estrés.”

Hanekawa Tsubasa.
Una chica con un par de alas que no coinciden.

“Al mismo tiempo, estaríamos equivocados al compadecernos con ella en ese aspecto.” En
cualquier caso, Senjougahara volvió a enfocar nuestra conversación. “Araragi-kun, tú que
estás arrastrándote y retorciéndote en la parte inferior, lejos de lo real, solo necesitas pulirte.
Entonces, vas a estudiar en mi casa todos los días.”

“Sí, sí... lo haré.”

“Tienes que decir que ‘sí’ tres veces, Araragi-kun.”

“¡Sí, sí, sí...! Espera, ¿¡por qué quieres que suene tan emocionado!?”

“Esa es la cantidad de motivación que quiero ver de ti. Porque te ofrezco mi hogar como
lugar de estudio.”

“¿En serio?”

“Si lo prefieres, podría ir al tuyo.”

“Mi casa no es un buen ambiente de estudio... Mis hermanitas son ruidosas.”

“La casa de Kanbaru también podría funcionar, anqué solo de vez en cuando.”

“¿Por qué la estas mencionando?”

“Así como tengo que ayudarte a estudiar, necesito ir a jugar con esa chica de vez en cuando.
Se lo prometí.” Dijo Senjougahara, su tono marcadamente plano.

Me di cuenta que su tono plano estaba acentuado.

Conmigo, ella era una persona horrible, pero al menos, honestamente, podrías llamarla
tsundere cuando se trataba de Kanbaru...

Bueno, cuando se trataba de la rehén.

Kanbaru Suruga.

“La chica parece estar bien en el departamento académico.” Dijo Senjougahara. “Pero ¿soy
la única que quiere estar con Kanbaru?”

“Bueno, claro. Ella es divertida.”

Un poco demasiado divertida.


No hacía falta mencionarlo.

“Ella me admira de esta manera excesiva, y ni siquiera sé por qué... creo que ella me ve con
una luz demasiado buena.”

“Puede que yo sea parcialmente responsable de eso.” Explicó Senjougahara. “Le dije que
salvaste a un niño que se estaba ahogando y que todos los domingos trabajas como
voluntario en una casa de retiro.”

“¡Así que no le has dicho nada más que mentiras!”

“Solo bromeaba. Le dije la verdad.”

“¿Eh...? ¿En serio?”

“Cuando me refiero a la verdad, me refiero a hablar mal de ti, por lo que la admiración de
Kanbaru es totalmente su propia decisión.”

“……………”

Hablaste mal de mí, ¿eh?

Preferiría que no lo hicieras, Senjougahara.

“Incluso si estoy hablando con una kouhai y una amiga.” Dijo. “Es vergonzoso para mí
elogiar a mi propio novio. Es mi forma de ocultar mis sentimientos.”

“Bueno, también puedes decirle que te sientes avergonzada... Oh, eso es correcto,
Senjougahara.” Bajando la voz para que su papá en el asiento del conductor no escuchara,
mencioné un nuevo tema. “Hay una cosa más sobre Kanbaru...”

“¿Papá? Araragi-kun quiere contarte un secreto…”

“¡Hitagi-san!”

¡Dios, ella nunca dejo pasar una!

¡Nunca dejó que la oportunidad de atormentarme se le pasara por alto!

“¿Qué pasa con Kanbaru?” Preguntó.

“¿Por qué ella es tan pervertida?”

Hablé ocultando mi boca con mi mano.


Era como si fuera un pitcher que intentaba comunicarse con el cátcher, pero no tenía otra
opción porque el papá de Senjougahara podría leer mis labios en el espejo retrovisor.

“¿Pervertida? ¿Kanbaru?”

“Sí. ¿También era así en la escuela media?”

“Hmm. Estás preguntando por el pasado... pero, para empezar ¿ella lo es?”

“¿Dirías lo contrario? Incluso Oshino la ve más como un personaje pervertido que uno
deportivo.”

“No sé sobre eso. ¿Tal vez es porque tú y Oshino-san la ven desde una perspectiva
masculina que busca la castidad en las mujeres que la perciben de ese modo? El típico
pensamiento de un hombre. Ella es simplemente fiel a sí misma, eso es todo. No creo ella
vaya demasiado lejos.”

“Ya veo...”

¿Así es como era?

No estaba seguro.

“Si tienes una oportunidad, Araragi-kun, trata de leer novelas de amor y mangas BL para
chicas de secundaria y superiores. Nunca más llamarías ‘pervertida’ a alguien como
Kanbaru.”

“Está bien. Uh, sin embargo, no creo que realmente lea alguno.”

Especialmente no la ficción BL.

Estaría condenado, para siempre.

“Bien.” Dijo Senjougahara. “Pero no puedo permitirme quedarme sentada y dejar que mi
adorable kouhai sea difamada como una pervertida.”

“Entonces, ¿exactamente qué es lo que vas a hacer?”

¿Y difamada?

De hecho, me vi como una especie de víctima... Esto no estaba funcionando. De forma


incondicional e ilimitada, sin importar cuánto tiempo discutiéramos, Senjougahara iba a
ponerse del lado de Kanbaru.
Aunque era una rehén...

Espera, ¿no era yo el rehén?

“¿Quieres saber qué voy a hacer? Voy a socavar tus estándares y valores. De esa manera,
comenzarás a ver a Kanbaru como una chica inocente.” Dijo Senjougahara, inclinándose
hacia mí. En lugar de simplemente bajar la voz, puso sus labios justo al lado de mi oído,
como para conspirar abiertamente.

Colocando su mano sobre su boca.

“-#@&$.”

“¡………!”

¡Gah!

¿¡Qué me acaba de decir!?”

“Voy a @ &~* que $&#~ en #&@~ así que #&- y *@ con #&^&- ~&@ en @&-.”

“U... ¡Urk!”

Senjougahara Hitagi...

¡Qué cosa más vergonzosa e indecente!

¿¡~&@ en @&-!?

De todas las combinaciones, ¿¡que!?

¡Y ella lo decía todo con una voz tan plana y profesional!

No podía creerlo... ¿¡cómo podría un chico encontrar sus pasiones tan encendidas con nada
más que palabras!?

“D-Deten…”

Ack... ¡No, no pude gritar!

¡El papá Senjougahara estaba justo delante de mí!

¡Tenía que parecer natural!

“^#~- y $&# mientras que @%%-”


“Nkk…”

P-Pero el leve cosquilleo que sentí en mi oreja encima de ella por su respiración... Espera,
¿qué clase de situación era esta? Mi novia me acariciaba el muslo y me susurraba cosas
sucias al oído, ¡delante de su propio papá! No era prácticamente tortura, ¡era literalmente
tortura! ¿¡Qué tenía que confesar para que parara!?

¡Yo no sé nada!

¡En serio, no lo sé!

Ya veo... ya lo veo, misterio resuelto... ¡Todo este tiempo fuiste la maestra de Kanbaru en los
caminos de la perversión! Todo lo que tenía que hacer era pensarlo, dada la influencia que su
senpai, Senjougahara, ella dos... Maldición, mis estándares y valores estaban siendo
socavados y colapsados... Ah, Kanbaru no es pervertida, no es una pervertida en absoluto...

“Haumph.”

¡Me mordió la oreja!

¡La tenía entre sus labios!

¡No, no, no! ¡Ahora ella estaba haciendo algo inequívocamente erótico!

“Así.” Dijo Senjougahara, retrocediendo como si nada hubiera pasado, calmada y estoica.
“¿Qué piensas, Araragi-kun?”

“Haz lo que quieras conmigo... Hitagi-san.”

Ya no era bueno.

Esta no era, de ninguna manera, una cita que quería continuar... Mis esperanzas, sueños y
fantasías, realmente las estaba atravesando y destrozándolas una por una...

Durante todo este rato el tiempo había volado.

Me di cuenta que habíamos salido de la autopista. Por lo que se veía a través la ventana,
estábamos en una zona aún más rural que la remota ciudad en la que vivíamos.

¿Dónde estaba?

¿A dónde me habían llevado?

Mientras estaba teniendo una conversación estúpida...


“Ya casi llegamos.” Dijo Senjougahara, también mirando por la ventana. “¿Unos treinta
minutos más, creo? La sincronización parece... perfecta. Tengo ganas de felicitarme.”

Sincronización perfecta… ¿Todo lo relacionado con el tiempo no debería ser mérito del papá
de Senjougahara, y no iba a agradecérselo?

Hmm.

Tal vez no se llevaban muy bien.

Hablando de eso, Senjougahara y el papá de Senjougahara realmente no habían


intercambiado palabras aparte de una simple ida y vuelta antes de nuestra partida.

Pero, no era probable que estuviesen en malos términos. Ella había cubierto la tarifa de cien
mil yenes por la ayuda de Oshino con su excentricidad ayudando en el trabajo de su papá.

Bien.

Las relaciones entre padres e hijos iban a ser complicadas a nuestra edad; era lo mismo para
mí, y Senjougahara tenía circunstancias familiares inusuales con las que lidiar.

Incluso Hanekawa.

.......

Oh, ahora lo recuerdo.

El dolor de cabeza de Hanekawa... Se había perdido en el alboroto de los pantalones cortos


de voleibol y el traje de baño escolar, pero.... (y no sabía que se perdería por eso, pero...) Su
dolor de cabeza.

Le dolía la cabeza.

Me pregunté si debería hablar con Oshino.

Cierto, no era bueno para mí consultar tan rápido a Oshino, tal como me había dicho, no era
como si fuese a vivir en ese edificio abandonado para siempre...

Un día se iría.

No sabía cuándo, pero en un futuro próximo.

“Hey, Senjou… Hitagi-san.”


“Silencio.” En lugar de aplaudirme por darme cuenta a mitad de camino y corregirme,
Senjougahara me abofeteó. “Tú solo sigues hablando de esto, eso y lo fofo.

“¿L-Lo fofo?”

“Ya casi llegamos, ¿podrías, por lo menos, tratar de quedarte callado un poco en este viaje?”

“…….”

¿De dónde vino eso?

“Araragi-kun, no soy el tipo de persona ociosa o mañosa que se molestaría en soportar tu


charla idiota.”

“¿Entonces estás diciendo que una persona mañosa lo haría?”

¿Y dónde casi estábamos?

No parecía que fuera a doler si ella me lo dijera sin tantos rodeos.

Si no me lo decía para que yo me emocionara, esperaba que ella supiera que ya había tenido
mi dosis de emoción. Pero mientras digo eso, yo también estaba empezando a llegar a mi
límite cuando se trataba de esta charla tortuosa frente al papá de Senjougahara. En cierto
modo, sus palabras eran exactamente lo que quería oír. Lo tengo, me caí en mi asiento.

“Ugh, eres tan ruidoso.”

“¿Qué? ¿Si no dije nada?”

“Estoy hablando de tu respiración y de los latidos de tu corazón.”

“Espera, lo que estás haciendo es decirme que muera.”

Y con ese intercambio.

Senjougahara dejó de hablar.

Me preguntaba por qué.

Estaba nerviosa por alguna razón, o al menos eso parecía.

¿Me estaba llevando a un lugar por el que merecía estar nerviosa?

Nuestro automóvil parecía estar subiendo un camino de montaña.


Una montaña, y no una pequeña, la había subido con Kanbaru ayer y anteayer, pero era una
montaña en toda regla. El jeep utilizó sus caballos de fuerza mientras subía por el gran
camino en espiral. El camino se mantuvo correctamente, otra diferencia de la montaña que
subí con Kanbaru.

¿Nos dirigimos a la cumbre?

¿Otro santuario?

Una visita a un santuario como nuestra primera cita...

Ella tenía que estar bromeando.

“Siento que estoy preguntando demasiado tarde.” Dije. “Pero... ¿Exactamente a dónde
vamos?”

“A un lugar muy bonito.”

“…….”

“A. Un. Lugar. Muy. Bonito.”

“………….”

Podía decirlo seductoramente todo lo que quisiera...

Ella tenía que estar mintiendo.

“Y de todos modos, Araragi-kun, olvídate de a dónde vamos. Ya llegamos. Mira, allí mismo.
Ese es el estacionamiento.”

Hice lo que ella dijo y miré hacia adelante. Ella tenía razón.

Llegamos.

Ahora eran cerca de las diez... lo que significaba que habíamos estado en la carretera más de
dos horas. Fue un viaje asombrosamente aterrador, y por fin pude respirar regularmente. El
papá de Senjougahara mostró una impresionante técnica de estacionamiento para detener el
jeep en la esquina del estacionamiento desierto. Como sea, pensé mientras intentaba salir del
automóvil, pero Senjougahara me detuvo. Ella no me detuvo agarrando mi mano, sino,
sorprendentemente, clavando sus uñas en el muslo que había estado frotando.

¿Qué era ella, un animal salvaje?


¿O algún gato?

“¿S-Si?”

“Espera aquí un segundo, Araragi-kun.” Dijo Senjougahara. “Voy a ir sola y a preparar


todo.”

“Preparar todo.”

¿Qué necesitaba preparación?

Espera, Senjougahara, si en esta situación te adelantas sola y me haces esperar...

“Ten una charla amistosa con mi papá, ¿de acuerdo?” Pronunció las palabras impensables en
un tono desechable.

Entonces ella realmente salió sola del jeep.

Ella se fue...

Nunca pensé que llegaría el día en que me describiera de esta manera, pero no había una
mejor manera de decirlo... Me sentí como un perro que había sido abandonado por su dueño.

No podía creerlo.

Dejándome solo en esta situación...

Me sentí contrariado y ultrajado.

¡Incluso embalsamado!

... Estaba tan presa del pánico que ya no sabía que me decía a mí mismo.

Pero esto no fue una traición porque desde el principio Senjougahara Hitagi me había
arrastrado a esta situación.

Aun así, no lo podía creer...

Estaba atrapado en un estrecho automóvil con el papá de mi novia...

Ya ni siquiera era tortura.

Hace tiempo que se cruzó esa línea.


Si buscases, muy probablemente no encontrarías en todo Japón a otro estudiante de último
año de secundaria que pasara por una experiencia tan cruel y dura como la mía, ¡qué
desgracia tan real y que mala suerte la mía!

¿Una c-charla amistosa?

Mantener mi boca cerrada se sentía incómodo a su manera... pero no quería que el papá de
Senjougahara se llevara una mala impresión de mí. Aun así... fuera de los parientes y
maestros, apenas había tenido la oportunidad de hablar con alguien que fácilmente tenía el
doble de mi edad...

Entonces…

Mientras estaba allí, vacilando, resulto que fue el papá de Senjougahara quien hizo rodar la
pelota.

“Araragi-kun, ¿cierto?”

“…….”

En efecto, ese era mi apellido...

Se sentía como si estuviera comenzando con la barra muy en alto...

Sin embargo, realmente tenía una buena voz, como un actor... Es sorprendentemente raro
encontrar a alguien cuya voz te parezca genial.

“S-Sí... mi nombre es Araragi Koyomi.” Contesté.

“Ya veo.” El papá de Senjougahara asintió. “De ahora en adelante cuida bien de mi hija.”

¿¡Perdóneme!?

¿¡Qué estaba diciendo este tipo de forma tan repentina!?

“Es una broma.”

Así fue como continuó.

Es una broma.

¿Una broma de papá?

¿¡Fue una auténtica broma de papá!?


Había hablado sin sonreír y no parecía estar disfrutando de mi desconcierto... ¿Qué se
suponía que tenía que hacer? No había nada que pudiera hacer, ¿verdad?

No había nada que pudiera hacer, ¿verdad?

“Creo que ya lo has oído, Araragi-kun, pero soy como la definición de un adicto al trabajo.
Apenas puedo pasar tiempo con Hitagi.”

“Correcto...”

La llamo Hitagi.

Naturalmente, llamó a su hija por su nombre.

Él lo hizo sonar tan natural.

Supongo que eso es lo que significaba ser el papá de alguien.

“Entonces, esto podría no sonar muy convincente viniendo de mí, pero ha pasado mucho
tiempo desde la última vez que vi a Hitagi divertirse tanto.”

“……”

¿Entendía lo que estaba diciendo? ¿Estaba describiendo a su hija atormentando a un


compañero de clase como “divertirse”?

Ah, er, papá de Senjougahara eso es agitar las aguas. Parecía que no era tan elocuente como
su hija... en todo caso, era un orador bastante pobre.

“Ya has oído hablar de la madre de Hitagi, ¿sí?”

“... Sí.”

“Lo que significa que también has oído hablar de su enfermedad.”

La enfermedad de Senjougahara Hitagi… La llamó enfermedad, pero se refería a esa


excentricidad.

El cangrejo.

El cangrejo, la excentricidad.

La enfermedad ya había sido curada, gracias a la ayuda de Oshino... pero no era un asunto
menor donde el hecho de curarse significaba que todo había terminado.
Especialmente desde el punto de vista de su familia, o eso asumí.

“No es la única razón, no soy el único culpable por centrarme en nada más que en mi
trabajo... pero Hitagi realmente cerró su corazón.”

“Si, lo sé.”

Eso lo sabía bien.

A lo largo de la escuela secundaria habíamos estado en la misma clase.

Durante mi primer y segundo año.

Y el primer mes de mi tercer año.

Lo sabía muy bien, lo cerrado que había estado su corazón.

“No tengo ninguna excusa para eso, los padres pueden ser responsables de lo que hacen sus
hijos, pero los hijos no tienen ninguna responsabilidad por lo que hacen sus padres.”

“Responsabilidad…”

“Cuando cierras tu corazón, solo hay dos categorías de personas con las que expresas tu
opinión: personas a las que no te importa que te odien, y personas que no te odiarán.”

“…….”

La primera vez que hable con Senjougahara y ella blandió esa grapadora en dirección a mi
boca, tenía que haberme visto como perteneciente a la primera de las dos. Se quitó la
máscara de princesa enclaustrada y me reveló su verdadera y aterradora naturaleza solo
porque era un enemigo que había aprendido su secreto.

¿Pero ahora?

¿Ella realmente puso tanta confianza en mí? Incluso si lo hizo, ¿estaba calificado para
recibirla?

“Está todo lo que pasó con su madre. Y, también, su enfermedad.” Dijo el papá de
Senjougahara para sí mismo. “Ella es alguien cuya naturaleza es amar; simplemente no sabe
cómo hacerlo.”

Cuando lo pensé, él no estaba diciendo nada extravagante, pero sentí que me habían hecho
un comentario increíblemente poético gracias a su genial voz.
“Araragi-kun, creo que estás manejando muy bien a alguien como Hitagi.”

“¿Eso cree?”

Todas y cada una de las veces me sentí herido, ¿de acuerdo?

Como si me estuvieran cortando, ¿de acuerdo?

Si mi corazón figurativo pudiera sangrar, hace mucho tiempo habría muerto por la
hemorragia.

“Siempre es así.” Le dije. “Incluso me pregunto si fue para encontrar la forma de humillarme
que ella te hizo acompañarnos, papá.”

Ups.

Accidentalmente lo llamé papá...

¿L-La iba a escuchar? ¿¡Esa frase legendaria: “Nunca me llamarás papá”!?

“Lo dudo.”

Él no lo dijo.

¿Una cosa generacional?

“Bueno, podría ser su manera de escupirme.” Sugirió en su lugar.

“¿Escupirle?”

... ¿Eh?

Correcto.

Obviamente que tener a su hija coqueteando con un chico que nunca antes había conocido en
el asiento trasero de su propio automóvil no pudo ser agradable. Esa era la razón exacta por
la que no podía seguir soportándolo, ¿pero, más que a mí, había estado tratando de acosar a
su papá de esa manera?

“No.” No estoy de acuerdo. “No creo que eso sea cierto... Incluso, eh, Hitagi-san, no le haría
eso...”

“Alguien a quien ella no le importa que la odie, yo soy uno de ellos.” Dijo el papá de
Senjougahara. “Tuviese éxito o no, sigo siendo su padre. Me vio en muchas y feas
discusiones con su madre... A estas alturas, es probable que Hitagi no pueda recordar que sus
padres se hayan llevado bien.”

“Ah…”

Un divorcio indiscutible.

Un padre soltero.

Por supuesto.

Durante todo este tiempo, nunca dijo “esposa”, y siempre fue “la madre de Hitagi”.

“Así que sí... ella puede guardarnos rencor. Prácticamente podía oír a Hitagi decir que nunca
sería como nosotros. De hecho... Creo que tiene razón. Honestamente, parecía que se estaban
divirtiendo.”

“Bueno... Mentiría si dijera que no me estoy divirtiendo, pero... no sé, estoy acostumbrado a
que actúe como una loca.”

Espera.

¿Acabo de decir algo descortés?

¿Qué pasaría si lo tomara en serio y lo escuchara como un insulto? Pensé que casi la estaba
elogiando, pero, dependiendo de la ocasión, la conversación amistosa con Basura-kun podría
interpretarse negativamente en el extremo receptor... Hmm, no sabía dónde dibujar la línea.

Espera, ¿por qué toda esta lucha en solitario?

¿Estaba siendo, como, increíblemente patético?

“Ella es alguien cuya naturaleza es amar.” Dijo el papá de Senjougahara. “Por lo que se
inclina y se entrega cuando encuentra a la persona adecuada. Amar es exigir. Sé que de la
persona de quien estoy hablando es mi propia hija, pero creo que ella es una carga
demasiado pesada para ser llamada novia.”

“Una carga, una demasiado pesada.”

Eso, fue...

Bastante irónico.
“Aunque no podía avergonzarme más del hecho, no podía apoyar a Hitagi. Es por eso que
dejó de depender de mí hace mucho tiempo.”

“……”

“Olvidé cuándo, pero ella enloqueció blandiendo una grapadora... creo que fue la última
vez.”

Incluso le había hecho eso a su padre.

¿Eso fue violencia doméstica o...?

“Pero el otro día, por primera vez en mucho tiempo, mucho, mucho tiempo, Hitagi me pidió
algo. Ella dijo que quería ayudar en mi trabajo.” Dijo el papá de Senjougahara en una
tranquila reflexión. “Y ahora, esto. En ambas ocasiones, has estado involucrado. Creo que
eres especial si eres capaz de causar un cambio en esa chica.”

“... Me siento halagado de que piense tan bien de mí, pero... creo que es solo una
coincidencia.” Dije al fin, incapaz de soportarlo por más tiempo. Sentí que me estaban
elogiando debido a un malentendido. No lo merecía, y para ser honesto, no fue una buena
sensación.

“¿En serio? Escuché que también jugaste un papel en la curación de la enfermedad de


Hitagi.”

“Sí, y otra vez, podría haber sido cualquier persona, pero por casualidad fui yo... Cualquiera
pudo haber tomado mi lugar, y para empezar Hitagi-san se salvó sola. Terminé por estar
presente, eso es todo.”

“Eso ya es suficiente. El simple hecho de que estuvieras allí cuando ella lo necesitaba fue
suficiente. No hay nada más que tengas que hacer para ganarte su gratitud.”

Y luego, por primera vez.

Pensé que vi sonreír al papá de Senjougahara.

“No pude cumplir con mis deberes como padre, todavía no me considero una persona que
cuida de su hija. Esa chica vive casi por sí sola. No pude estar allí cuando ella lo necesitaba.
Mis manos están llenas tratando de pagar las deudas que la madre de Hitagi creó para
nosotros, para ser honestos, incluso este jeep es algo que le pedí prestado a un amigo. Pero a
pesar de todos mis defectos como padre, todavía estoy orgulloso de mi hija. Confío en su ojo
para la gente. Y si eres el que ella trajo, debes ser el correcto.”

“......”

“De ahora en adelante cuida bien de mi hija, Araragi-kun.”

“... Papá.”

Ahora esto, se había convertido en una conversación extraña.

Aun así, pensé…

Que probablemente ella no estaba tratando de molestarlo.

En todo caso, Senjougahara podría haberle pedido a su papá que la acompañara en su


primera cita porque quería demostrarle que ahora estaba bien.

No era para decirle que nunca se volvería como sus padres...

Más bien, ya no tenían que preocuparse por ella.

Sentí que podía oírla decirlo.

... Pero no me correspondía a mí decirle. ‘No meter las narices en el ambiente familiar de
otras personas’... es algo de sentido común, pero más aún, sentía que no había espacio para
mí entre Senjougahara y el papá Senjougahara.

Así que no me correspondía a mí decirle.

Que no era alguien a quien no le importaba que la odiara, no importaba cómo lo pensara,
sino alguien que no la odiaría.

No podía decirle.

Solo había una persona en el mundo que debía decir esas palabras.

“Por cierto.” Pregunté. “¿Dónde estamos?”

“Si Hitagi lo ha mantenido en secreto, entonces no puedo decírtelo. Pero, estamos en un


lugar... que los tres visitamos algunas veces.”

“¿Ustedes tres?”

Lo que significa... Senjougahara, el papá de Senjougahara, y…


¿La mamá de Senjougahara?

“Sabes, elegir este lugar para su primera cita me hace pensar que es bastante... ¡Vaya! Parece
que la princesa ha regresado.”

Qué manera tan de papá de decirlo.

Esa habría sido mi réplica si estuviera hablando con alguien de mi edad, pero ejercí
moderación.

De todos modos, dijo que Senjougahara había regresado... y de hecho, a través de la ventana
pude verla tomándose su tiempo mientras caminaba hacia nosotros. Ah, hasta hace un
momento, tenía ganas de quejarme de ella cuando la vi a abandonarme a mi suerte, pero
ahora era como si un ángel descendiera del cielo para rescatarme.

Qué estafa.

“Gracias por esperar, Araragi-kun.” Dijo con voz despreocupada y plana después de abrir la
puerta trasera. Luego se dirigió directamente al asiento del conductor. “Papá, ¿podrías darles
a estos dos jóvenes un tiempo a solas? Gracias por traernos aquí. Volveremos en unas dos
horas, así que por favor, vuelve a tu trabajo.”

“Claro.” El papá de Senjougahara consintió y encendió su teléfono celular. Me había


imaginado que ese sería el caso, pero accedió a interrumpir su ocupado horario de trabajo
para traernos a este lugar... y ahora estaba volviendo a trabajar desde su teléfono.

Hm.

Lo que significa que... ¿Su acompañamiento terminaba aquí?

“Está bien, Araragi-kun.”

Senjougahara extendió su mano hacia mí. La tomé, con miedo en mi corazón tembloroso.
Salí del automóvil como si Senjougahara me sacara de él.

Un segundo después ella soltó mi mano.

Ella realmente era casta.

“Te lo agradezco, papá.”

Finalmente, dándole las gracias, cerró la puerta del jeep.


Bueno... no es que significara algo, pero... por fin estábamos en una cita normal. Me sentí un
poco incómodo al dejar al papá de Senjougahara en el estacionamiento cuando nos trajo a las
montañas en una noche entre semana, pero parecía que él tenía trabajo que podía hacer, así
que lo dejé pasar.

“... Entonces, ¿exactamente dónde estamos, Hitagi-san…?”

Ups.

Podría dejar eso ahora.

Me sentí un poco reacio a dejarlo ir.

“Senjougahara. ¿Dónde estamos?”

“Hmph.” Senjougahara sacudió la cabeza. “¿Alguna vez he respondido alguna de tus


preguntas?”

“……”

Um.

Sí, ¿creo que sí?

La actitud de Senjougahara hacia mí en este momento fue tan cruel que comencé a pensar
que tal vez era una de esas personas que no le importaba que la odiara.

“Haciéndome una pregunta.” Escupió. “Creo que te estás volviendo loco.”

“Ni siquiera tengo permiso para hacerte preguntas...”

“No recuerdo haberte permitido arrodillarte.”

“¡No quiero arrodillarme!”

“¿Quieres decir que preferirías postrarte ante mí?”

“¿¡Tienes algún tipo de problema conmigo estando de pie!?”

Ahora que su papá estaba fuera de la escena podía contestarle hasta quedar satisfecho.

Araragi Koyomi estaba disparando toda su munición.

Seguí a Senjougahara mientras ella avanzaba enérgicamente. Puede que hayamos estado en
las montañas, pero las farolas dispersas en el estacionamiento significaban que el entorno no
era lo que llamarías oscuro... Espera, ¿todavía las llaman farolas incluso en las montañas? El
pensamiento inconsecuente se me pasó por la cabeza.

“Sin embargo, me alegro de que el clima haya sido agradable.”

“¿El clima?” Le pregunté. “¿Eso es importante?”

“Sí.”

“Huh... Bueno, me llaman Señor Sol.”

“¿Perdón? ¿Señor Sol-itario?”

“¡No hay manera de que me hayas escuchado tan mal!”

“Mira.” Dijo Senjougahara cuando salimos del estacionamiento. “¿Ves el cartel allí? Intenta
leerlo.”

Ordenándome de una manera tan brusca, casi de mal humor... Pero hice lo que me dijo
Senjougahara y miré hacia donde estaba apuntando. De hecho, había un letrero, y en él
estaban escritas las palabras “Observatorio: El Hogar de las Estrellas”.

¿Un observatorio?

En otras palabras...

“¡Hiya!”

Senjougahara usó su mano derecha para detener mi cabeza cuando traté reflexivamente de
mirar hacia el cielo. Agarrándome la cabeza desde arriba, ella la mantuvo en su lugar.

“¿Qué estás haciendo?” Me quejé.

Fue muy humillante haberme hecho eso a mi edad...

“Todavía no puedes mirar hacia arriba, Araragi-kun. Tampoco puedes mirar hacia adelante.
Solo mira hacia abajo, a tus pies, mientras caminas. Esta es una orden.”

“¡No puedo seguir una orden tan irrazonable!”

“Bueno, si no lo haces, empezaré a gritar y llorar y volveré corriendo a ese jeep donde mi
papá está esperando.”

“……”
“O tal vez mañana Kanbaru se encontrará con un poco de mala suerte, ¿cuál prefieres? ¿Una
chica de secundaria haciendo cosplay con un uniforme de escuela primaria mientras esta en
clases... o una chica de secundaria con un letrero que dice: ‘Estoy siendo castigada porque
soy una chica muy pervertida’ colgado del cuello, y parada en el pasillo?”

“… Lo haré.”

Habrás escuchado acerca del uso de la zanahoria y el palo en las negociaciones, pero ella fue
espantosamente firme con la parte del palo... mientras bajaba mi cabeza, miré mis pies. Sin
embargo, Senjougahara Hitagi no soltó mi cabeza. Con la mano aún en su lugar, dijo:
“¿Vamos?” Y comenzó a caminar de nuevo.

Oh, Dios.

Yo era como un perro tras ella.

“... En verdad me estás asustando, ¿lo sabías?”

“¿Asustando? Mejor sigue andando. Es mejor ser poético, todo es mejor siendo fonético.
Solo imagínalo como parte de mi estampa de asilo. A la final solo quiero que no sientas ni
un poco de alivio.”

“¡No lo hagas rimar! ¡Escucha, dices las cosas más malas! ¡Trátame con un poco de
corazón!”

“Claro que podría, pero al hacerlo no lograría tal efecto.”

“¡En serio, para, que esto no es canción!”

“Oh, deja de quejarte. Es educado agregar un poco de café puro a cualquier conversación
aunque solo sea para ir sobre-seguro.”

“Demasiado amargo para el paladar de un estudiante de secundaria...”

Por supuesto, la palabra correcta era espíritu.

Oscureció tan pronto como salimos del estacionamiento.

Aun así, estábamos en un observatorio en la cima de una montaña, y podía decirlo, incluso
sin mirar hacia arriba, que no era de un tono negro, gracias a la luz de las estrellas. Vivíamos
en una ciudad bastante remota, lo que significaba que al menos por la noche podíamos ver
las constelaciones en el cielo, pero probablemente no era rival para este lugar.
Oh.

Fue entonces cuando finalmente me acordé.

“Ya sabes, sobre Kanbaru.”

“¿Sí? ¿Se trata de su desafortunado destino?”

“¿¡Por qué seguiría discutiendo eso!?”

“Bien dicho. Si ella va a enfrentar un desafortunado destino, debes decidir todos los detalles
por tu cuenta de la A hasta la Z.”

“¡No voy a dejar que Kanbaru tenga un desafortunado destino en manos de nadie! ¡Incluso si
esas manos son tuyas! ¡No es de eso de lo que estoy hablando!”

“¿Entonces sobre que estás hablando?”

“El otro día Kanbaru y yo estábamos hablando de constelaciones. Hace dos días, ¿creo?”

Ofiuco.

Si decía más podría terminan mencionado el cumpleaños de Senjougahara, así que tuve que
mantenerlo simple.

“En ese momento Kanbaru me dijo algo.” Continué. “Asiste a estos eventos en un
observatorio de otra prefectura dos veces al año. ¿Podría ser este ese lugar?”

Senjougahara había influido hasta en la perversión de Kanbaru Suruga, así que era
totalmente posible.

“Debe ser.” Contestó Senjougahara con seguridad. “Pero ha pasado un tiempo desde mi
última visita... recuerdo habérselo dicho a ese chica. Hm... Así que Kanbaru hace eso.”

“Ahora que lo pienso me preguntó si me parecía algo que ella no haría. Eso es lo que quiso
decir. Hombre, qué kouhai tan adorable.”

“Sí. Tanto que quiero hacerlo con ella.”

“¿¡Qué cosa y en qué sentido!?”

Oh... Ahora recordé una cosa más. Ese día visité por primera vez la casa de Senjougahara y
le conté lo que realmente sabía acerca de astronomía... algo acerca de cómo se ve la luna.
Recordé haber compartido mis conocimientos a medias y a Senjougahara molestándome por
ello.

Agh, qué vergüenza.

Deseé que el recuerdo se hubiera quedado olvidado.

Por supuesto que ella se las arregló para trastocar todo lo que decía.

Esta era la primera vez que estaba en un observatorio.

“Parece que no hay nadie alrededor.” Dije.

“Este no es un momento particularmente bueno para observar estrellas. Además, es un día


entre semana. Cualquiera que haya venido probablemente esté dentro de ese observatorio de
allí.”

“¿En dónde?”

Traté de levantar mi cabeza, en vano.

“Hey, Senjougahara... ¿Sabes, ahora mismo definitivamente estás haciendo algo mucho más
malo de lo que crees?”

“¿En serio?” Mi amable advertencia fue recibida con total indiferencia por Senjougahara
Hitagi. “En todo caso, deberías sentirte afortunado de tener una de mis delicadas manos
sobre tu cabeza.”

“Te concederé eso, si te refieres a delicado como el vidrio... a fragmentos enteros de vidrio.”

“Qué cosa tan maravillosa de escuchar. ¿Soy tan clara y aguda? Realmente sabes cómo
felicitar a una chica. Tengo ganas de recompensarte.”

Sus uñas se clavaron más en mi cuero cabelludo.

Era una forma simple pero efectiva de repartir dolor.

¿Puede ser que en verdad está hecha de tal material? De hecho, los ojos huecos y sin
emoción de Senjougahara no eran más que vidriosos. Ya veo, así que eso era mi novia...

Vidrios Hitagi.

“De todos modos.” Le pregunté. “¿Hay un observatorio por aquí?”


“Sí. Con un gran telescopio reflectante.”

“Huh. No entiendo qué tiene de asombroso, pero... ¿Vamos a entrar a ese lugar?”

“No.” De inmediato Senjougahara negó con la cabeza. “Cuesta dinero entrar.”

“……”

“Por si no lo recuerdas soy pobre.”

No entendí el punto de decirlo con tanto orgullo, pero...

Supongo que era la verdad.

“No me importa pagar.” Dije. “Ya que es un observatorio probablemente no cobran


demasiado. Estoy seguro de que tengo al menos esa cantidad de dinero en mí.”

“Aplaudo tu disposición de aceptar pagar, pero por hoy tendré que rechazar tu oferta. Tengo
un lugar que recomiendo por sobre mirar a través de un telescopio en un edificio... ah. Por
aquí.”

Senjougahara dejó el camino para comenzar a subir una colina. Ella caminó a través de la
hierba cortada, y yo seguí sus pasos.

Se detuvo a medio camino de la colina.

Una sábana de plástico había sido colocada en el suelo.

Ah, sus preparativos.

“Cierra los ojos y acuéstate.”

No tenía ganas de oponerme o desafiarla cuando había llegado tan lejos.

Las intenciones de Senjougahara ahora eran claras para mí. Hice lo que ella dijo, cerrando
los ojos y acostándome sobre la sábana. Su mano dejó mi cabeza, y pude sentir a alguien
acostándose a mi lado. Pude haber dicho ‘alguien’, pero sería un increíble truco de magia si
no fuera Senjougahara.

“Ya puedes abrir los ojos.”

Hice lo que ella dijo.

Y entonces, los cielos estaban llenos de estrellas.


“……………………………………………………………………………… Whoa.”

Siendo honesto...

Más que el hermoso cielo estrellado me sorprendió más el que con mi edad pudiese
considerar tan hermosa la vista de un cielo estrellado.

¿Los humanos pueden sentirse conmovidos por estas cosas?

Las estrellas parecían llover sobre nosotros.

Si puedo ser tan poco refinado, puede deberse en parte a porque estaba acostado... Pero fue
simplemente fantástico tener estrellas cubriendo cada centímetro de mi visión. Tratar de
mimar mi autoconciencia buscando la razón por la que estaba conmovido ya era bastante
poco sincero, pero entendí por qué Senjougahara había llegado tan lejos como para clavarme
las uñas en la cabeza para evitar que echara un vistazo. Quería que viera el cielo desde esta
perspectiva. Un lugar muy bonito.

Ella tenía razón. No había ningún lugar mejor.

Ah... De alguna manera me sentí como si hubiera sido completamente recompensado.

Y como si todo el dolor y los problemas hasta ahora estuviesen siendo lavados.

“Entonces, Araragi-kun, ¿qué piensas?” Senjougahara preguntó a mi lado.

Ella... debe estar mirando el mismo cielo.

“Wow, en serio, no tengo palabras para decir lo que pienso.”

“Entonces tu vocabulario es muy pobre.” Dijo, frenando mis emociones con su lengua
afilada.

Pero... ese era el alcance de la vista.

“Ahí están Deneb, Altaír y Vega. El famoso Triángulo de Verano. Si sigues por ese camino,
llegamos al Ofiuco. Lo que significa que Serpens son esas estrellas en esa área.”

Senjougahara me dio una explicación elocuente mientras señalaba el cielo nocturno.

Tal comentario fluido, aunque no usábamos ni una linterna ni un planisferio.

De alguna manera, era fácil de entender.


“Esa estrella notoriamente brillante es Spica... lo que significa que virgo está por ahí. Cáncer
está por allí, oh, quizás sea un poco difícil de entender.”

“Al menos conozco a la Osa Mayor.”

“Sí, y la Osa Mayor es parte del Carro Mayor… justo al lado está Lynx.”

“¿Como el gato?”

“Sí.”

Senjougahara continuó nombrando cada constelación que pudimos ver y hablándome de


cada una de ellas. Era como si estuviera escuchando un cuento de hadas, y sus palabras se
filtraban en mí como un bálsamo.

Si ella me lo permitiera.

Quería quedarme dormido.

“No puedes quedarte dormido.” Dijo ella.

¿Qué? Claro que no, jamás lo haría.

Que chica tan filosa.

Continuó: “O como te diría si fuéramos alpinistas varados en una tormenta de nieve: ¡No
puedes quedarte dormido! ¡Te mataré si lo haces!”

“¿¡Me matarías por eso!?”

“Bueno, en cualquier caso.” Senjougahara habló en voz baja, después de haber terminado su
comentario sobre las constelaciones. “Eso es todo.”

“¿Eh? ¿Qué es ‘todo’?”

“Todo lo que tengo.” Dijo ella, todavía mirando las estrellas. “Ser capaz de ayudarte a
estudiar. Mi linda y pequeña kouhai, mi brusco padre, y... este cielo estrellado. Eso es
realmente todo lo que tengo. Eso es todo lo que puedo darte. Eso es todo.”

“Todo…”

Oh... ¿Ese era el trato?


Aquello con Kanbaru anteayer, no, desde que empezamos a salir hace un mes en el Día de
las Madres, ¿era eso lo que Senjougahara estaba pensando todo el tiempo? Nunca
rechazando formalmente cada vez que le pedí una cita. Hacer las paces con Kanbaru podría
no haber sido planeado, pero ¿había estado esperando a que terminaran nuestros exámenes y
a que se abriera el horario de su padre?

Recordé algo que había dicho Hanekawa…

Senjougahara es difícil.

“Bueno, técnicamente hablando.” Se corrigió ella misma. “También tengo mi lengua filosa y
mi abuso verbal.”

“¡No necesito eso!”

“Y supongo que tengo este cuerpo mío.”

“……”

Este cuerpo mío...

Sus eufemismos eran tan abiertos.

“¿Tampoco necesitas eso?”

“Er, bueno... Um.”

Yo... no puedo decir que no, ¿verdad?

Pero algo en la escena hizo que decir que sí también se sintiera mal...

“Pero ya sabes, ¿no?” Dijo ella. “No hace mucho tiempo, un hombre sucio trató de
atacarme.”

“Oh, sí.”

El cangrejo.

Esa fue... la causa fue esa excentricidad.

Al menos una de las causas.

Había causas y razones tras las excentricidades.


“Y, francamente, tengo miedo de hacer contigo lo que esa basura trató de hacerme. No, no
pretendo usar palabras extravagantes como ‘trauma’. No creo que sea tan raro o extremo.
Simplemente estoy... asustada. No pensaba en estas cosas antes de que empezáramos a salir,
pero ahora, tengo miedo de odiarte, Araragi-kun.”

Ella estaba asustada.

No del acto, sino del resultado.

“Ahora tengo miedo de perderte.” Dijo Senjougahara con naturalidad.

No podía leer ninguna emoción en su voz.

“Es gracioso, ¿no? Tener miedo de odiar a la persona con la que estás saliendo, tener miedo
de perder a la persona con la que estás saliendo... Es como preguntarse qué viene primero, el
huevo o el huevo frito.”

“El huevo, creo.”

“A decir la verdad, me temo que me he convertido en una mujer estúpida. Se suponía que yo
era una hermosa doncella trágica que sufría una misteriosa enfermedad desconocida, pero
ahora soy una hermosa doncella enamorada que siempre está pensando en un hombre.”

“Entonces, en cualquier caso, eres una hermosa doncella...”

“De todos modos, incluso me molesta que me hayas convertido en una mujer tan poco
interesante.

“Uh huh...”

No... de por sí ya eres bastante interesante.

Lo siento, no quise interrumpir.

“Como sabes, Araragi-kun… hasta ahora no he llevado la vida más feliz... Pero creo todo
por lo que pase podría haber valido la pena si fue lo que me permitió conocerte.”

“……”

“Si fue mi infelicidad lo que llamó tu atención, entonces me alegro de que haya sucedido de
esa manera. Así es como me siento contigo. Por lo que no importa cuán pequeña sea la
oportunidad, no quiero verte de la misma manera que veo a esa escoria. Por supuesto, no
planeo ser tan egoísta para siempre... Siento que estoy siendo infantil. Como si fuera un
bebé. Un bebé ingenuo.”

¿Por qué repetirlo de una manera más lamentable, Senjougahara?

“Si me permites una línea superficial, perderte sería como perder la mitad de mi propio
cuerpo. Así que quiero que esperes, sólo un poco.”

“Solo un poco…”

“Sí. Hasta la próxima semana.”

“¿¡Tan pronto!?”

“Hasta entonces por favor satisfácete con el cuerpo de Kanbaru.”

“¿Realmente me acabas de decir eso?”

“Y mientras haces eso, usaré Kanbaru para rehabilitarme.”

“¡Kanbaru está obteniendo lo mejor de la situación! ¿Solo ella logra que todos sus sueños se
hagan realidad?”

“Bueno, la próxima semana no es realista, pero juro que haré que funcione algún día. Así
que por favor, quiero que esperes, sólo un poco. En cuanto a lo que esta mujer enamorada
puede darte, por ahora, solo tiene este cielo estrellado... Cuando era más joven, solíamos
venir aquí a menudo. Mi papá, mi mamá y yo.”

Con su mamá y su papá, los tres juntos.

Pensé en lo que sabía de su situación familiar, y me di cuenta de que eso debió ser hace
bastante tiempo. Aun así, Senjougahara lo recordó.

No.

Lo recupero.

Ella había recuperado algo que había olvidado.

“Esto es. Mi tesoro.”

Fue un bonito cliché para Senjougahara, pero eso se sumó a la sensación de que estaba
compartiendo conmigo sus verdaderos sentimientos sin adornos.
Este cielo estrellado de verano.

Este cielo que una vez vio con su familia.

Esto era todo, todo lo que tenía.

“………”

Por lo menos.

Podría decir que ahora estaba seguro de una cosa.

Senjougahara Hitagi... era bastante inteligente y extraordinariamente calculadora, pero no


tenía capacidad de combate cuando se trataba de romance. Fue bastante obvio al rememorar
los eventos que nos llevaron a salir el Día de las Madres, pero esta mujer era, como decirlo,
temeraria, como un héroe de RPG que se lanza a una cueva sin una antorcha. Pensó que
mostrarme todas sus cartas y dejar la decisión en mis manos, su chantaje diplomático de una
metodología, ¿era un buen enfoque para adoptar algo tan sutil como enamorarse? ¿Dónde
estaba el sentimiento en eso? Su idea estaba destinada a dar pausa a noventa y nueve de cada
cien personas. Hablando de miedo. Incluso alguien tan desprovisto de experiencia romántica
como yo lo sabía.

Bien.

Si ella estaba adoptando la estrategia, era consciente de que yo era la única persona entre
esas cien, entonces, maldita sea, tuve que quitarme el sombrero ante ella.

Uh oh.

Que adorable.

Era tan moe que no fue gracioso.

De hecho, tenía ganas de aprovechar el impulso y abrazar a Senjougahara, pero tampoco


quería perderla por tal cosa. No es que tuviera ninguna carta para mostrarle... Pero estaba de
acuerdo con que nuestra relación fuera así por ahora.

Aunque no es como si no lo necesitara.

Podríamos tumbarnos de espaldas y mirar las estrellas.

Estábamos bien siendo ese tipo de pareja.


Una relación platónica.

“Hey, Araragi-kun.” Dijo Senjougahara sin voz. “¿Me amas?”

“Te amo.”

“Yo también te amo, Araragi-kun.”

“Gracias.”

“¿Qué amas de mí?”

“Todo. No hay nada en ti que no ame.”

“Oh. Me alegra oír eso.”

“¿Y qué amas de mí?”

“Eres amable. Eres lindo. Eres como mi príncipe que viene corriendo para salvarme cuando
estoy en problemas.”

“Estoy feliz de escucharlo.”

“Por cierto.” Dijo Senjougahara como si acabara de darse cuenta. “Esa escoria fue solo tras
mi cuerpo, ni siquiera intentó hacerle algo a mis labios.”

“¿Eh? ¿Qué quieres decir?”

“Estoy diciendo que esa inmundicia no mostró ningún interés en ellos... ¿Y entonces,
Araragi-kun?”

Entonces, completamente libre de abusos o afecciones, Senjougahara pronunció las palabras.

“Te besare.”

“………”

Que aterradora.

Estás siendo aterradora, Hitagi-san.

“No, no es eso.” Se dijo a sí misma. “¿Podría... pedirte... un beso? ¿Qué... pensarías... de...
un beso...?”

“………”
“Besemos, Araragi-kun.”

“Así que eso es lo que vas a decidir.”

No era una forma demasiado inapropiada de expresarlo.

De hecho, ella no podría haberlo expresado de una manera más clara.

Y así… hoy se convirtió en un día memorable.

Para nosotros.
004
Hoy es miércoles, 14 de junio, o el día después de que desperté de mis sueños... y por
supuesto, quiero decir que nuestra observación astronómica/romántica terminó sin
incidentes, el papá Senjougahara nos llevó otras dos horas de regreso a la ciudad donde
vivíamos, me acosté alrededor de la una de la madrugada, tuve un sueño trivial del tipo
donde olvidas la mayoría de lo que sucedió, me desperté de ese sueño y me levanté de la
cama... pensando que tal vez mi primera cita con Senjougahara fue todo un sueño. Estaba
pedaleando hacia la escuela, soñoliento, cuando encontré a Hachikuji.

Hachikuji Mayoi.

Un par de coletas, flequillo tan corto que mostraba sus cejas.

Una niña de quinto grado que llevaba una enorme mochila.

“Whoa, allí.”

Dejé de pedalear.

Ella seguía sin notarme. Mirando de lado a lado, parecía estar disfrutando de un paseo
matutino.

Hmm. Se sentía como si hubiera pasado un tiempo desde la última vez que coincidimos.

Bueno, habían pasado unas dos semanas desde que la vi. Al pensarlo no era lo que podías
llamar objetivamente “un tiempo”, pero por alguna razón me sentí muy contento de haberme
encontrado con Hachikuji. Después de todo, es aún más difícil ponerse en contacto con una
estudiante de quinto grado que con una chica de secundaria.

A diferencia de antes tenía un poco de tiempo libre. No podía hacer daño tener una pequeña
charla con ella (me tomé la libertad de asumir que Hachikuji tenía tiempo). La pregunta
entonces era cómo llamar su atención... Comencé por bajarme de la bicicleta, con cuidado de
no hacer ruido. Coloque el pie de apoyo de mi bicicleta mientras la estacionaba a un lado de
la carretera.

Ahora todo estaba bien.

Por otra parte, era Hachikuji con quien iba a hablar.


Bajo ninguna circunstancia quería que se diera cuenta de que yo era feliz. Existía la
posibilidad de que empezara a dejarse llevar si le mostraba alguna de esas pistas. No podía
agravar su descaro. ¿Qué necesitaba? ¿Un despreocupado, no, un indiferente: “Oh, huh.
¿Estás aquí? Por casualidad te saludé porque no tenía nada mejor que hacer”, con un
golpecito en el hombro? Cierto, no era tan frívolo como para animarme por volver a ver a
una amiga. A mi edad, quería venderme como alguien calmado y genial.

Ok.

Entonces, acercándome a ella por detrás...

“¡HACHIKUJIII! ¡Han pasado años, pequeña bribona!”

Me acerqué a ella por detrás, luego la agarré con un abrazo.

“¿¡Eeeek!?” La niña chilló.

Sin desanimarme, la abracé con todas mis fuerzas como para aplastar su pequeño cuerpo,
luego froté mis mejillas contra las de ella una y otra vez.

“Jajajaja. ¡Oh, eres tan linda! ¡Déjame tocarte más, déjame abrazarte más! ¡Voy a echar un
vistazo a esas bragas, pequeña y adorable dama!”

“¡Eeek! ¡Eeek! ¡Eeep!” Hachikuji continuó gritando con fuerza, hasta que se convirtió en un:
“¡Grrah!”

Ahora ella me estaba mordiendo.

“¡Grrah, grrah, grrah!”

“¡Eso duele! ¿¡Qué estás haciendo!?”

En verdad, esas palabras deberían haber sido dirigidas a mí mismo. Tanto el “eso duele”
como el “¿¡qué estás haciendo!?”

“¡Ssshh! ¡Fssshh!”

Fui devuelto a mis cinco sentidos después de ser mordido en al menos tres puntos discretos,
pero ahora el cabello de Hachikuji se erizaba como un Súper Saiyayin cuando emitía los
tipos de ruidos amenazadores que esperarías de un gato salvaje.

Bueno, por supuesto que lo haría.


“E-Está bien, está bien. No soy un enemigo.”

“¡Ssshh! ¡Ssshh!”

“Vamos, cálmate. Respira profundamente.”

“Fssshh... Kuhhh-huhhh. Kuhhh-huhhh...”

“…….”

Ahora su respiración sonaba como la de un robot asesino.

En realidad, Hachikuji no había pronunciado una sola palabra que se pareciera al lenguaje
humano desde que apareció por primera vez en esta escena.

“Hey, mira, soy yo. El chico amable que todos en el vecindario conocen... El chico que una
vez te mostró el camino cuando eras un corderito perdido...”

“Mm... Ah...”

Parecían que los ojos de Hachikuji por fin me reconocían. Su cabello erizado lentamente
volvió a la normalidad.

“Oh, si no es Muraragi-san.”

“No llames a la gente como te dé la gana.”

“Lo siento, me mordí la lengua.”

“No, eso fue a propósito.”

“Me moddi la dengua.”

“¿¡No fue a propósito!?”

“Dios está con nosotros2.”

¿¡Qué clase de milagro había ocurrido!?

Ambos justamos nuestras palmas en oración.

2
La pronunciación de esta frase en japonés suena similar a me mordí la lengua, obviamente también en
japonés.
Por una vez podría haber tenido razón, al haberme mordido... Al menos esta vez, tal vez yo
tenía la culpa del apodo y de que me mordieran.

No había podido controlar mis emociones.

Me había salido de control.

También es posible que todavía me sienta extasiado por mis vivencias del día de ayer.

“¿Oh? Veo que estás usando tu uniforme de verano, Araragi-san.” Dijo Hachikuji. Ahora
parecía estar bien. Tal vez sólo fue estúpida. “Eres delgado a pesar de tu complexión
muscular, lo que significa que las mangas cortas no te quedan bien.”

“¿En ese caso qué se supone que debo hacer en el verano?”

Camisas sin mangas y similares no estaban de moda para los chicos. Tampoco es que sean
remotamente lindas o algo así cuando los chicos las usan.

“Podría ser que el problema no sean las camisas de manga corta.” Respondió ella. “Pero esas
camisas de vestir no te quedan bien. Ah, y te veías tan bien con esa chaqueta de cuello alto.
¿Qué tal? ¿Por qué no la llevas todo el año?”

“No estoy en la escuadra de porristas masculinos...”

Por cierto, la Secundaria Naoetsu no tenía algo así.

A la secundaria no le agradaban mucho los clubes y los deportes.

“Y mientras tus mangas se han acortado.” Observó Hachikuji. “Tu cabello se ha vuelto más
largo. Tu rostro es tan dócil como tu personalidad salvaje, por lo que terminarás viéndote
como una chica si lo dejas seguir creciendo.”

“Tengo que dejarlo crecer de este modo. Sin embargo, debo admitir que se notara demasiado
durante el verano. Además, no quiero escucharte llamándome salvaje.”

“¿No es suficiente para ti con tener un nombre femenino?”

“Estas haciendo leña del árbol caído. ¿Qué hay de tu cabello? Esas colas gemelas parecen un
monstruo sacado de Ultraman.”

“Sólo en nombre, no en apariencia.”

“Está bien, tienes razón.”


“Tu cabello parece pertenecer a un extraterrestre del Planeta Afro.”

“¡Espera un momento! ¡Estoy bastante seguro de que el Planeta Afro es algo que acabas de
inventar, pero sean cuales sean los extraterrestres que vengan de allí, obviamente van a tener
afros! ¡Y yo me estoy dejando crecer el cabello largo y liso!”

“Dices eso, pero tu presencia es tan delgada que serías un personaje sin arte conceptual o
sprites en un simulador de citas. Quienquiera que lo reclame primero gana. Si digo que
tienes afro, tienes afro. Si digo que tienes rastas, tienes rastas.”

“¿¡En serio!? ¡O-Okay, Hachikuji, rápido! ¡Di que soy un tipo alto, de hombros anchos y
muy macho!”

“El hecho de que hayas enumerado esas cualidades demuestra que no posees ninguna de
ellas... ¿Pero es esa tu imagen ideal de ti mismo? ¿Un tipo alto, de hombros anchos y muy
macho?”

“Hey, ¿por qué te ves tan divertida?”

“Oh. Parece estar sangrando por la cabeza, Araragi-san.”

“Cierta persona salvaje me mordió.”

“Rápido, debes atarte el cuello y detener el sangrado.”

“¡Eso me mataría!”

¿Cómo podría explicarlo?

Amo bastante a Senjougahara y con Kanbaru me llevo mejor que nadie, pero por la razón
que fuera, me divertí mucho hablando con Hachikuji.

¿Era que mi corazón estaba siendo calmado por una estudiante de primaria?

“Está bien.” Le dije. “Algo como esto sanará en poco tiempo.”

“Oh, eso es correcto. Eres un vampiro, ¿verdad, Araragi-san?”

“Bueno, la burla de uno.”

Durante las vacaciones de primavera, fui atacado por una vampiresa.


Justo como un gato poseyó a Hanekawa, un cangrejo se encontró con Senjougahara, un
caracol condujo a Hachikuji por el mal camino, un mono escuchó el deseo de Kanbaru y una
serpiente atrapó a Sengoku… un vampiro me atacó.

Me deje crecer el cabello para ocultar las heridas de ese día.

No fue un cazador de vampiros, fuerzas especiales cristianas o un vampiro asesino de


vampiros, sino un tipo frívolo con una camisa hawaiana que pasaba por allí, Oshino Meme,
quien en el momento me sacó de mi apuro, pero no sin las debidas consecuencias.

Mi cuerpo era extraordinariamente bueno curándose a sí mismo.

“Bueno curándose a sí mismo...” Dijo Hachikuji. “En ese caso, hay algo que me gustaría
probar.”

“¿Algo que te gustaría probar?”

“De hecho. Si te dividimos horizontalmente con una motosierra o algo así, ¿tendríamos dos
Araragi-san?”

“¡Eso es un asunto delicado, estudiante de primaria!”

¡No soy una lombriz de tierra!

¿Por qué pensaría ella que eso funcionaría?

“Estoy bromeando.” Aseguró. “Nunca te haría algo así, no después de todo lo que has hecho
por mí.”

“Oh... Sí, supongo que no. Después de todo, somos amigos.”

“Sí. Seccionarte extremidad por extremidad no sería suficiente, así que, ¿cómo podría
conformarme con cortarte por la mitad?”

“………”

Después de todo, tal vez ella no estaba bien.

“Espera, Araragi-san. Voy a abrir una escalera cuando menos te lo esperes y ver cómo
caminas bajo ella.”

“¿¡Q-Qué!? ¿¡Cuántos años de esperanza de vida me quitaría eso!?”


“Y eso no es todo. La próxima vez seré yo quien se escabulla detrás de ti. Y poco a poco
pasaré mi dedo por tu columna vertebral.”

“¡T-Tú, monstruo! ¿¡Vas a hacer que te suplique que lo muevas despacio hacia arriba!?”

“Oh, solo estoy empezando. Esto es lo que sucede cuando me haces molestar, pobre criatura.
Tengo la sensación de que aprenderás lo que es el verdadero terror.”

“Heh.” Resoplé en ese punto. “Será mejor que cuides lo que dices, Hachikuji.”

“¿Perdón?”

“Tú serás la que aprenderá sobre el verdadero terror. ¡Solo intenta hacerme caminar debajo
de una escalera... porque responderé con violencia!”

Ahí estaba, un estudiante de secundaria que amenazaba a un niña con violencia por temores
de que pudiera perder algunos años por caminar debajo de una escalera.

Si, ese soy yo.

“No es demasiado tarde para que te disculpes.” Le dije. “Aun te perdonaré.”

“Ja...”

Pero esta era la razón por la que ella es mi eterna rival.

Ahora era Hachikuji quien se reía sin miedo.

“Araragi-san, será mejor que te disculpes con Holanda.”

“¿¡Holanda!? ¿¡Voy a tener que disculparme con los Países Bajos!? ¿¡En que momento les
hice algo!?”

“Si no te apuras y pides disculpas, te encontrarás en el extremo receptor de la Danza


Giratoria de los Molinos de Viento.”

“¿¡Qué es eso, algún tipo de movimiento final!?”

“Discúlpate ahora, a menos que quieras conocer el destino de Don Quijote.”

“¡Eso fue en España!”

“¿Y ahora qué? ¿Estás tan ansioso por ganarte el nombre de Don?”

¿Cómo habíamos llegado hasta aquí?


Pero ciertamente no quería que me llamaran Don.

“Araragi-san, no puedo creer que todavía no te hayas disculpado... O bien, eres tonto, eres
tonto, eres tonto, o debería reformularme.”

“Así que estamos hablando de una probabilidad de tres cuartos de que soy tonto... Dios
mío... Sí, sí, lo entiendo. Necesito disculparme con Holanda.”

“Ya que aceptaste disculparte, conque lo hagas cien veces debería ser suficiente.”

“¡Ni siquiera quiero intentarlo!”

“Es tu única oportunidad de escapar.”

“¿¡No serás una pequeña comediante!?”

Espera.

¿No quería que me disculpara con ella?

“No soy tan generosa como los holandeses.” Dijo. “Estás muy equivocado si crees que una
disculpa es todo lo que necesitas para ganar mi perdón.”

“Piensas muy bien de los holandeses, ¿no crees...?”

“Si realmente buscas mi perdón... aceptaré que durante todo un año me des pasteles.”

“Bueno, si eso es todo lo que vas a exigir...”

“Sin embargo, me tendrás que dar tres al día.”

“¡Eso es mucho dinero!”

Fácilmente excedía los cien mil yenes.

Ella se estaba burlando de mí.

“Bueno.” Dije de todos modos. “Estoy agradecido por tu perdón.”

“Oh, no. No, descuida.”

“……”

¿Podría haber pensado que “No, descuida” significa “No hay necesidad de agradecérmelo”?

Whoa.
“Araragi-san, debes estar camino a la escuela. Que estudiante tan aplicado eres. Casi lo
olvido, ¿no habías dicho que te preocupaba tu índice de asistencia?”

“Sí. Puede que incluso tenga que repetir un año gracias al agujero en el que me metí durante
mis primeros dos años. Pero no es momento para que me preocupe por algo tan básico como
eso. Ahora tengo mi punto de vista observando a un lugar más elevado.”

“Un lugar más elevado, ¿dices? Qué extraña elección de palabras. ¿Qué quieres decir con
eso?”

“Hasta ahora, mi objetivo era graduarme, pero…”

Er, espera. ¿Estaba bien decirle?

Entonces, una vez más, no tendría que preocuparme si ella le dijera a alguien más. De hecho,
tal vez debería decirle a la mayor cantidad de personas que pudiese para así colocarme más
presión.

“Ahora me centraré en los exámenes.”

“¿Exámenes? Oh, ¿exámenes de escuela elemental?”

“Ya casi estoy fuera de la escuela secundaria, ¿por qué razón los haría ahora?”

Expliqué mis circunstancias tal como lo había hecho con Hanekawa y Kanbaru. Hachikuji,
una excelente oyente a pesar de lo que te puedan hacer creer, me mantuvo hablando mientras
ella asintió y dijo: “Es así”, “Ya veo”, “Con que eso significa”, “Debería haberlo esperado”,
“Nunca lo supe”, y así sucesivamente en los momentos correctos. Por supuesto, que pudiese
expresarme tan fácilmente también tenía algo que ver con el hecho de que esta era la tercera
vez que lo decía.

......

Pero convertirse en un adepto a la descripción de tus objetivos significaba que no los habías
logrado...

¿De qué me serviría si fuera mucho ruido y pocas nueces?

Las metas deben convertirse en resultados.


“Araragi-san, parece que han pasado muchas cosas desde la última vez que hablamos. Fue
una persona sabia quien dijo que prestara mucha atención a cualquier joven que no haya
visto durante tres días.”

“Heh... ¿Qué puedo decir?”

“Se siente como si hubiera pasado en un instante.” Dijo Hachikuji, con voz sombría.

Sombría, pero de alguna manera nostálgica.

“Así que han pasado tres años desde ese día...”

“¡No! ¡No ha pasado tanto tiempo!”

¡Dos semanas!

¡No lo hagas sonar como el final de la serie!

“¿Eh, en serio? Bueno, supongo que si solo tardaste dos semanas en llegar a esa decisión, es
muy probable que en las próximas semanas te arrepientas. No debería tomarte la palabra tan
rápido. Un cambio que se lleva a cabo en tres días, solo necesita tres días deshacerse. Si no
ves a un joven en seis días, es porque está de vuelta a donde comenzó.”

“Dices algunas cosas bastante malas, ¿sabes?”

Pero ella tenía razón.

De hecho, no había leído una página de los libros de estudio que Hanekawa me había
escogido anteayer.

“Bah.” Dijo Hachikuji. “Entonces eres una de esas personas que se siente satisfecha con solo
comprar libros de estudio. Sí, conozco a los de ese tipo. Yo misma a menudo compro
videojuegos pero nunca los juego, solo con la compra me siento bien conmigo misma.”

“Me preocupa que ya estés haciendo eso como estudiante de primaria...”

Y no era como si mi determinación hubiera vacilado y no hubiera revisado esos libros de


estudio porque era demasiado esfuerzo... Dio la casualidad de que vi a Sengoku en la misma
librería donde los compré, lo que me llevó a lidiar con una excentricidad, durmiendo en una
escuela abandonada como una sardina en lata, volviendo a casa a dormir un poco más,
dirigiéndome a la escuela solo para trabajar en el Festival Cultural y saliendo a una cita con
Senjougahara.
¿Cuándo podría haber hojeado mis libros de ayuda?

“¿Una cita? ¿Eso no cuenta cómo jugar?”

“Urk...”

Ella tenía razón.

Hay que ver, dijo Hachikuji, horrorizada. “Ocupado es solo una excusa que las personas que
no saben organizarse les gusta usar. Si quisieras, por ejemplo, podrías haber revisado esos
libros de estudio durante tus recesos en la escuela. Estas atando a una noción preconcebida,
un prejuicio, que estudiar es algo que solo se hace durante las clases o en casa.”

“Whoa... Ese en serio es un consejo bastante sólido.”

Sí.

De nuevo ella tenía razón.

“Hachikuji, todo este tiempo he pensado erróneamente en ti como una niña tonta sin
remedio. ¿Realmente eres un estudiante bastante aceptable? Antes dijiste que tus notas no
eran muy buenas, ¿pero sólo estabas siendo modesta para no herir mis sentimientos?”

“¿Quién sabe? Nunca antes he estudiado en mi vida.”

“……….”

Ella era una tonta.

Espera, ¿tal vez es alguien increíble natural?

¿Que era ella...? Necesitaba probarla.

“Hachikuji, vamos a jugar un pequeño juego de palabras. Voy a decir una palabra, y luego tú
dirás una palabra que comienza con la última letra de mi palabra y luego hare lo mismo con
tu palabra. La primera persona que termine su palabra con la letra D pierde. ¿Ok? Vamos a
empezar con... ¡Zinc!”

“¡Caracol!”

“¡Leopardo!”

“¡Oscuridad!”
“¿Qué? ¡Nunca antes había visto a alguien perder tan rápido!”

Qué imbécil.

En realidad, ella lo hizo apropósito.

En lugar de perder inmediatamente con algo como “Caballerosidad”, esperó un tiempo,


mostrando sutilmente sus colores. No sólo era divertido hablar con ella, sino que tenía tanto
talento que necesitaba llevarla a mi casa y hacer de charlar con ella durante treinta minutos
cada noche antes de irme a dormir un hábito.

Aun así, sonaba como una imbécil, aunque yo no podía descartar la posibilidad de que no
hubiese hecho eso apropósito. De todas formas, no había estado cerca de lograr mi objetivo
inicial.

Necesitaba intentarlo de nuevo.

Era el momento de otra prueba.

“Ahora te voy a preguntar un acertijo, Hachikuji.”

“Y yo por supuesto aceptaré el desafío. Nunca le he dado la espalda a un enemigo. No eres


uno, pero si piensas enfrentarme, no me detendré. Aprenderás a temerme.”

“Tengo dos cabezas y tres ojos. Tengo cuatro bocas y cien dientes. Tengo siete brazos y
cinco patas, soy pequeño pero puedo tragar un elefante entero. ¿Qué animal soy?”

“... ¿Uno de tus amigos?”

“¡Estas demente! ¡Ya que esa es la única forma en que uno podría pensar que alguien así
podría existir! Así que no, no tengo ningún amigo que se ajuste a la descripción. ¿¡Quieres
eso como amigo de un amigo!?”

¡Soy selectivo con mis amigos!

Urk... Si consideraba su respuesta como una forma inteligente de tomar ventaja, seguía sin
poder medir su intelecto... Mientras pensaba esto, Hachikuji abrió la boca.

“A cambio déjame preguntarte uno. Tengo la cabeza de un mono, el cuerpo de un tanuki, las
extremidades de un tigre, la cola de una serpiente, y el grito de un zorzal. ¿Qué animal soy?”

“¿Un demente? Porque tendrías que ser uno para pensar que algo así existe.”
“Un Nue.”

“………”

Ella tenía razón.

Sentí que había afrontado una derrota total.

¿Podría ser que esta estudiante de escuela elemental, después de todo, es así por naturaleza?

Maldita sea. Había demasiado para ella para verlo todo de una vez.

“Sin embargo, me sorprende que un niña de escuela primaria como tú sepa lo que es un
Nue.”

“Estudio muchos temas.”

“Eso es así.”

“De todos modos, Weraragi-san.”

“No me llames de ese modo, lo haces sonar como si me hubiera transformado. Es Araragi.”

“Lo siento, me mordí la lengua.”

“No, eso fue a propósito.”

“Me moddi la dengua.”

“¿¡No fue a propósito!?”

“Casi me corto la lengua.”

“¡Ten cuidado con eso!”

Ahora que era la séptima vez que pasábamos por esta rutina establecida, estaba empezando a
entenderla.

Había salido impecable.

“De todos modos, Araragi-san. Debes saber que estudiar para los exámenes no es una tarea
fácil.”

“Sí, ya lo sé.”
“Oh, qué bueno que lo sepas. Yo no tengo ni idea.”

“¡Tenía mis dudas!”

Ella nunca se había preparado para tales exámenes.

“Aun así.” Ella dijo. “Estoy realmente preocupada por ti. No quiero sonar como una vieja
esposa, pero ¿serás capaz de llenar la solicitud para la universidad?”

“¿¡Eso es lo que te preocupa!? ¡Cuidado con la pequeña y vieja esposa!”

“Si llenas la solicitud como se debe, lo único que tendrás que hacer es seguir gozando de
buena salud hasta el gran día. Así podrás rendir tus exámenes.”

“¡No! Estoy tratando de hacer más que simplemente tomarlos, ¡también necesito pasarlos!”

“Así que estás estudiando para ello... Bueno, puede que haya sido inusualmente negativa,
pero estoy segura de que estarás bien. Eres el tipo de persona que puede hacerlo si lo
intenta.”

“Oh. ¿Realmente lo crees?”

“Por supuesto. Ahora que has decidido tomar esos exámenes, ya estas aceptado.”

“Wow, ¿puedes ver tanto en el fututo?”

“No, no tanto. Pero aunque quizás no te percibas siendo aceptado, puede que no sea una
exageración decir que ya te has graduado.”

“Espera, Hachikuji, eso definitivamente es exagerar las cosas. Todo lo que he hecho es
decidir tomar algunos exámenes.”

“No, ya puedo verte con tu doctorado en la mano. Así es, desde este día en adelante, te
llamaré doctor.”

“Está bien, llámame como quieras. ¿Así es como me ves? No puedo criticarte por eso.”

“Entonces permíteme que te llame por el latín, para hacerte sonar más académico.”

“¿Cómo se le dice a un doctorado en latín?”

“Loliphiae Doltoris.”

“¡Cállate! ¡Y ese arreglo tardó una eternidad!”


¡Incluso me estaba cansando esperando el remate de la broma!

¡Estaba empezando a pensar que podría no haber uno!

“Lolicon e idiota, Loliphiae Doltoris... Es como si el término fuera hecho para ti.”

“¡No se ha hecho ningún término para mí, ¿de acuerdo?! ¡Admito que soy un idiota, pero no
soy un lolicon! ¡Llevo una vida honesta!”

“Y si entrecierras los ojos, también puedes comenzar a ver ‘lol’ en la primera palabra.”

“¡Detente! ¡Detente ahora mismo antes de que me arruines la palabra ‘doctorado’ para
siempre!”

“No te llenes la boca con tópicos dulces como: ‘Puedes hacerlo si lo intentas’. Los únicos
que dicen eso son los que no lo intentan.”

Ahora Hachikuji sonaba muy seria.

Grandes palabras que vienen de alguien que nunca antes ha estudiado...

“Dios mío.” Objeté. “No creas que puedes escapar diciendo esas cosas. Casi eres como un
treno, estoy empezando a querer castigarte.”

“¿Casi eres como un seno, estoy empezando a querer castigarte? A veces dices cosas
bastante lascivas.”

“¡Eso no es lo que yo dije!”

“Me sorprende que hayas encontrado una línea que suena tan desagradable si simplemente
reemplazamos ‘treno’ por ‘seno’.”

“¿Qué frase no sonaría lasciva si sustituyeras una palabra clave por ‘seno’?”

Qué conversación. Decíamos cosas basadas solo en el impulso.

“Pero sí, tienes razón.” Admití. “Voy a tener que aguantar.”

“Sí. Eso, ve a aguantar tu cuello con una soga en tu habitación.”

“¡No lo voy a hacer! Pero ya sabes, gracias a mis excelentes tutores, creo que estoy bien.
Nunca me permitirían aflojar. Estaré estudiando día tras día, ya sea que quiera o no. Heh, en
realidad, soy imparable teniendo de mi lado a la primera y la séptima mejores estudiantes de
mi año.”
“Bien, qué atrevido de tu parte.”

“………”

Ella pensó que eso significaba ‘positivo’ u ‘optimista’, ¿no…?

“Pero Araragi-san, ¿las cosas irán tan bien? Esas dos damas, por muy conocidas que sean,
están enfrentando al peor estudiante absoluto de su año...”

“¡Nunca he sido el último, gracias! ¡De hecho, esta vez lo hice bastante bien! ¡Necesitas
escuchar lo que digo!”

“¿A tus alardes? No lo creo. Solo eres interesante cuando aireas tus desgracias. Explora ese
tema un poco más, ¿quieres?”

“¿¡Por qué debería intimidarme de ese modo!?”

“Entonces permite que Hachikuji Mayoi, tan poco cualificada como lo está ella, hable en tu
nombre. Es hora de Las Orgullosas Historias de las Desgracias de Araragi-san. Todo surgió
oliendo a rosas, pero Araragi-san era alérgico a ellas.”

“¡Deja de inventar historias tristes sobre mí! ¡Me gustan las rosas! ¡Huelen muy bien! ¡Y por
lo que sé estoy bien con polen!”

“Su rasgo destacable es que cuando las cosas parecen ir bien para él, en realidad no lo hacen
cuando te detienes a pensar en ello.”

“¡Ese no soy yo! ¡Deja de darme extraños rasgos de carácter que me harán pensar dos veces
lo que hago!”

“Las Orgullosas Historias de las Desgracias de Araragi-san, segunda parte.”

“¿¡Incluso tienes una segunda parte!? ¿¡La primera se convirtió en un gran éxito de
Hollywood o algo así!?”

“Araragi-san sintió que su estómago se quejaba en medio de la noche, por lo que decidió
hacer unos fideos instantáneos. Pero a pesar de que se los calificó de instantáneos, ¡fueron
sorprendentemente difíciles de hacer!”

“¡M-Maldición! ¡Quiero hacerte callar, pero en realidad me ha pasado más de una vez! ¡Un
raro ejemplo donde la secuela es la verdadera obra maestra!”

“Es Viernes 13 para Araragi Koyomi, ahora y para siempre.”


“¡Eso realmente me da ganas de rendirme!”

“Aun así, la mejor y la séptima mejor de tu año, eh.” Hachikuji nos trajo de vuelta al tema en
cuestión. “Hanekawa-san... la conocí el otro día. La chica con trenzas, ¿no?”

“Sí... Ahora que lo mencionas, supongo que las conoces a las dos.”

“Y Senjougahara-san, es tu novia.”

“Sí.”

“Hmm.” Hachikuji se cruzó de brazos con expresión preocupada. Parecía estar pensando en
algo, una mirada que no le convenía.

“¿Qué, tienes algo que decir al respecto?”

“No, simplemente que la elección normal entre las dos sería Hanekawa-san. Me pareció
extraño que en cambio eligieras a Senjougahara-san.”

“Extraño...”

¿Cómo se suponía que iba a responder a eso?

¿Por qué se preguntaba esas cosas?

“Creo que las dos son bonitas.” Continuó. “Pero sus personalidades son como el día y la
noche. Hanekawa-san es como una especie de hermana mayor, mientras que Senjougahara-
san es, bueno... malicia personificada.”

“Bueno, no creo que Senjougahara quiera escuchar eso de ti.”

Por otra parte, Senjougahara le había dicho algunas cosas horribles a Hachikuji, así que tenía
sentido. En comparación, Hanekawa había sido amable con Hachikuji.

Ella era amable y severa.

Al igual que una hermana mayor debería ser.

La elección podría haberle parecido extraña a un niño.

“Ya ves.” Le expliqué. “No veo a Hanekawa de esa manera, es una persona con la que estoy
en deuda. Sin embargo, no puedo entrar en detalles. De todos modos, lo más seguro es que
Hanekawa me rechazaría. Y la personalidad de Senjougahara es parte de la razón por la que
yo...”
Uhm.

Sí, esa frase fue difícil terminar.

Me detuve y lo dejé así.

“Ya veo.” En lugar de ser malvada y acosarme, Hachikuji asintió con una expresión irónica.
“Que irónico.”

“¿Qué quieres decir?”

“¿No lo entiendes? Déjame decirlo de otra manera. Qué iónico.”

“¡¡Eso tiene aún menos sentido para mí!!”

“Bueno, eres el tipo de persona que persigue a Lindt en Quiz Nanairo Dreams. Tus gustos
con el sexo opuesto deben ser algo extraños.”

“¿¡No crees que esa referencia necesita ser explicada!?”

Esta era complicada de captar.

Bueno, hace un tiempo hubo un juego árcade de preguntas y simulador de citas que
CAPCOM desarrolló llamado Quiz Nanairo Dreams: The Miracle of Rainbow Village,
donde respondías trivias y te hacías amigo de siete personajes femeninos destacados. Subes
su impresión de ti más de medio año antes de finalmente derrotar al Rey Demonio que
resucita al final del juego para vivir feliz para siempre con tu chica favorita; la cosa es que en
el camino, hay un personaje llamado Lindt, uno de los lacayos de Rey Demonio que se
interpone en tu camino, y aunque resulta que es una chica, lamentablemente no puedes
terminar con ella, sin importar los trucos y técnicas que puedas tratar de usar. No se sabe
cuántas monedas de cien yenes desaparecieron en esas máquinas en busca de un final feliz
con ella. Como nota al margen, hubo una ruta apropiada para Lindt en la versión para
consolas del juego. ¡Bien, comentario terminado!

“Es muy impresionante que supieses de que hablaba, Araragi-san.”

“Oh, no es nada... ¡Hey, antes que nada no menciones referencias que requieran tanta
explicación! ¡Incluso Bikkuriman fue mejor! ¡Creo que soy la primera persona en hablar
sobre Quiz Nanairo Dreams desde que ingresamos al siglo veintiuno!”
“Pero si continuamos librando una campaña popular de bajo perfil, algún día podrían crear
una nueva versión.”

“¡Eso es ser demasiado discreto!”

“Pero si dices que prefieres a Senjougahara-san, debe ser así. Es cuestión de disgustos.”

“Es cuestión de gustos, ¿¡ok!?”

“Por cierto.” Dijo Hachikuji, cambiando repentinamente de tema. ¿Por qué estaba vertiendo
agua fría sobre el tema, y justo cuando estábamos calentando motores? No era como ella. “El
otro día me contaste acerca de un vampiro, una vampiresa que fue y te convirtió en una burla
de un humano o una burla de un vampiro. Oh, ¿cómo se llamaba? ¿Oshino Shinobu-san?”

“¿Eh? Oh.”

Yo le había contado

¿Supongo que en el Día de las Madres, cuando nos conocimos?

Hachikuji continuó: “Una niña de unos ocho años, con cabello rubio y casco con gafas en la
parte superior... ¿Así fue como la describiste?”

“Sí. ¿Qué paso con ella?”

“Nunca me la presentaron, así que no tengo forma de decirlo con seguridad, pero ayer vi a tu
Shinobu-san.”

¿Shinobu?

Hachikuji, ¿la había visto?

“¿Ella estaba cerca de un tipo viejo y desaliñado?” Le pregunté. “¿Visiblemente frívolo y


con una camisa hawaiana pegajosa y psicodélica que ninguna persona que se precie usaría
hoy en día?”

“¿Hmm? Me está costando entenderte, pero ¿estás tratando de preguntarme si estabas al lado
de la chica?”

“¡No! ¿¡Me ves como un viejo y desaliñado!? ¡Y nunca en mi vida he usado una camisa
hawaiana, ni siquiera con el diseño más aburrido que se pueda imaginar!”

“No deberías decir cosas sobre otros que no quisieras que se digan sobre ti.”
“¡Estás absolutamente en lo correcto!”

La verdad duele.

Siempre lo hace.

“En cualquier caso, Araragi-san, esa niña rubia estaba sola. Nadie estaba cerca de ella.”

“Hmm... ¿A qué hora fue?”

“Creo que eran las cinco de la tarde.”

“Las cinco...”

En ese momento tendría las manos ocupadas preparando el Festival Cultural.

Antes de hablar con Sengoku en las puertas de la escuela.

“¿En dónde la viste?”

“Cerca de la tienda de donuts a lo largo de la carretera.”

“Oh, por ahí... das largas caminatas, ¿no? Es una zona bastante amplia para un niño... Pero
bueno, una tienda de donuts.”

Era un Mister Donut.

El detalle hizo que la historia pareciera un poco más creíble.

¿Pero Shinobu, ella sola?

¿En verdad pudo haber sucedido?

Por supuesto, estábamos en una aburrida ciudad de Japón en medio de la nada... Rara vez
veías a alguien con el cabello teñido de marrón, así que, ¿una rubia? ¿Quién más podría ser
sino Shinobu? Si a esto le sumas el casco y las gafas... ¿Pero podría Shinobu viajar tan lejos
desde la escuela abandonada? Me había convencido a mí mismo sin ninguna razón real de
que Shinobu no podía irse, pero... ahora que lo he pensado, Oshino nunca había dicho nada
así. ¿Realmente le permitiría actuar por su cuenta?

“Sí. Pensé lo mismo.” Dijo Hachikuji. “Si ella realmente es un vampiro, entonces no soy
rival para ella, así que no me atreví a acercarme más. Pero pensé que sería mejor informarte,
por eso estaba esperándote aquí para emboscarte.”
“¿Oh, en serio?”

Así que esta no fue una reunión casual. Ahora que lo mencionó, cuando la vi parecía estar
mirando los alrededores.

Otro día donde alguien me estaba esperando.

“Entonces, deberías haberme dicho eso primero.” La regañé.

“Lo siento. Lo había olvidado por la conmoción de haber sido agarrada por detrás por un
lolicon que luego frotó su mejilla contra la mía.”

“¿Un lolicon? ¿Realmente tenemos algunos de esos en esta ciudad? Esto llega al nivel de un
suceso local destacado, no puedo soportar eso.”

“Está bien. Tengamos un gran corazón para ese reducido grupo de personas. El lema del mes
en mi clase es: ‘Sé amable con los lolicones’.”

“¿¡A qué tipo de escuela asistes!? ¿¡Estás segura de que estás bien allí!?”

En resumen, fue culpa mía.

Estaba cosechando lo que había sembrado.

“Eh, entonces está bien.” Dije. “Siento haberte alterado tanto por esto. Gracias, creo que iré
directamente con Oshino y veré qué está pasando, tal vez incluso hoy.”

“Oh no, me alegro de poder serte de ayuda, Araragi-san.”

En todo caso, ¿no deberías preocuparte por el tiempo?, preguntó Hachikuji. Miré el reloj
alrededor de mi muñeca derecha. Hmm, habíamos estado hablando por un tiempo. El tiempo
realmente vuela cuando te estás divirtiendo...

¿Cuándo me volvería a encontrar con Hachikuji?

Oh, bien.

“¿Tienes un teléfono?” Intenté absurdamente preguntarle a un estudiante de primaria. Este


era el tipo de ciudad donde incluso los estudiantes de secundaria no los tenían.

“Hmm. Me entristece decir que soy extremadamente mala con los dispositivos electrónicos.”

“Eso es así.”
“Sí. Puede que no pueda ver la televisión después del 2010.”

“Incluso la transmisión digital es demasiado para ti.”

Fue más allá de ser bueno o malo con la tecnología.

Incluso Kanbaru y Oshino no eran tan incapaces.

“¿Qué podrán querer decir con ‘1seg’?” Se preguntó en voz alta.

“Suenas tan estúpida...”

Hmm.

Bueno, no había nada que pudiera hacer.

Tendría que dejarlo a la suerte.

Quizás encontrarme con ella de vez en cuando mientras vagaba por la ciudad era la relación
correcta a tener con Hachikuji. No debería ser demasiado codicioso, y las coincidencias eran
preciosas a su manera. Si necesitaba verme, como hoy, parecía que no tenía problemas para
hacerlo.

Volví a mi bicicleta.

“Está bien, Hachikuji. Hasta luego.”

“Está bien. Sé que nos encontraremos de nuevo.”

Mi amiga de quinto grado se despidió de mí mientras me dirigía a la escuela. Con casi


ningún tiempo de sobra, estaba pedaleando con todo lo que tenía.

Hachikuji Mayoi. En cualquier caso, me alegré de que estuviera bien, pero su situación era
demasiado precaria para que yo lo expresara de esa manera. Se podría decir que ella estaba
en la peor posición de todas las personas que sabía que se habían encontrado una
excentricidad.

Dicho esto, no era como si pudiera hacer algo.

No debería estar pensando que podría.

Las personas… simplemente se salvan por su cuenta.

No debería confundirme.
Sabía que no podía, y todavía…

“…….”

Habían pasado tres meses desde que me encontré con una excentricidad, desde que me
enteré de las excentricidades.

Tres meses, no tres años. Pero…

Todavía había pasado por muchos cambios en ese tiempo.

Entonces yo...

¿Simplemente cambie por mi cuenta?

Me las arreglé para caminar por las puertas de la escuela antes de que sonara la campana que
anuncia el inicio de las clases. En realidad, los pantalones cortos de voleibol y el traje de
baño escolar que recibí de Sengoku para devolverle a Kanbaru estaban en mi bolsa. Mi plan
había sido llegar temprano a la escuela y visitarla en su aula, pero ahora...

Hmm, no tuve suficiente tiempo. Aunque estaba bien. De todos modos no podía dárselo
donde otros pudieran ver, y teniendo en cuenta la molestia de llamarla desde su salón de
clases, hacerlo durante el almuerzo o después de la escuela tenía más sentido. Cuando me di
cuenta de esto ya estaba estacionando mi bicicleta.

Entré en el edificio y comencé a subir las escaleras.

Entonces mi celular comenzó a vibrar.

Vaya, necesitaba apagarlo antes de ir a clase... Eso fue descuidado. La vibración terminó de
inmediato, ¿podría ser un mensaje de texto en lugar de una llamada telefónica? ¿Pero tan
temprano? Tal vez fueron mis hermanas pequeñas... Senjougahara y Kanbaru no eran
personas que se esforzaban por usar mensajes de texto. Saqué el teléfono de mi bolsillo y
revisé la pantalla. Dudé de mis propios ojos cuando vi el remitente, pero esas dudas se
borraron cuando leí el mensaje. En todo Japón y en su larga historia, solo una persona
comenzaría un mero mensaje de texto con “Salutaciones” y terminaría con “Sinceramente
dependiendo de ti en un apuro”.

Leyendo lo que había entre “Salutaciones” y “Sinceramente dependiendo de ti en un apuro”,


y al releerlo, me detuve en la escalera rumbo a mi clase para darme la vuelta y volver por
donde había venido.
Iba contra el flujo de estudiantes.

Directamente de vuelta al estacionamiento de bicicletas.

“Oh.”

Allí me encontré con Senjougahara Hitagi. La campana de inicio de clases estaba a unos
minutos de sonar, pero a diferencia de mí, no había estado a punto de llegar tarde. Como si
ella hubiera calculado todo para no perder un solo momento, Senjougahara siempre llegaba a
la escuela justo a tiempo.

Al verla tan repentinamente después de lo que había pasado ayer, me sentí un poco
avergonzado y durante un breve periodo de tiempo me quedé sin palabras. Pero
Senjougahara Hitagi tenía la misma actitud y expresión tan plana de siempre.

“¿Qué ocurre, Araragi-kun?” Dijo. “¿Vas a alguna parte?”

“A la vuelta de la esquina.”

“¿Para qué?”

“Llámalo ayuda humanitaria.”

“Eso es así.”

Ella era indiferente.

Sí, esta es Senjougahara Hitagi.

Ella me había descubierto.

Otro caso de comunicación sin palabras, o eso esperaba.

“Bien. Puedes seguir tu camino, Araragi-kun. Normalmente, nunca lo consideraría, pero esta
vez te compadezco, responderé por ti durante cuando pasen la lista.”

“Sólo hay 40 personas en nuestra clase, no creo que eso funcione... De hecho, me temo que
sólo harás que la profesora se enoje contigo.”

“No te preocupes, puedo hacer esto. Me aseguraré de imitar tu voz. Tengo una excelente
actriz de voz respaldándome.”

“¿¡Actriz de voz!? ¿¡Este mundo es un anime!?”


“¡No voy a dejar que Kanbaru encuentre un destino desafortunado en manos de nadie!
¡Incluso si esas manos son tuyas! ¿Qué crees, que eso sonó como tú?”

“¡Ni siquiera cerca! Tenía mis expectativas, pero sonaste menos como yo de lo que creía
posible. ¡Y no elijas una línea tan vergonzosa de repetir! ¡Percibo la maldad en tu elección
de palabras!”

“Kanbaru lloró de alegría cuando se lo conté.”

“¡No hagas llorar a nuestra kouhai por algo tan inane! ¡Date cuenta que ya no eres su única
senpai de confianza!”

“Hitagi-san... eres tan hermosa. No podría pedir a nadie mejor que tú. Te amo. ¿Qué
piensas, que suena como tú?”

“¡Ni siquiera cerca, y aun no he dicho esa línea!”

“¿Aun? ¿Quieres decir que planeas hacerlo?”

“..., ...... ¡Kk, sí!”

Eso fue lo que pasó.

No tenía el tiempo ni era el momento de tener una conversación tan estúpida, pero aun así
agradecí a Senjougahara por calmar mis nervios antes de correr hacia el estacionamiento de
bicicletas aún más rápido que antes.
005
Ese parque, todavía no sabía si su nombre se leía como “Rohaku” o “Namishiro” o algo
completamente distinto. Y si aún no lo sabía, dudaba que lo llegase a saber, pero hablando
de memorable, tal vez el parque era un lugar para recordar.

Por ese Día de las Madres... cuando llegué a este parque que carecía de cualquier otro equipo
de juego que no fuera un columpio, después de vagar en mi querida bicicleta de montaña
(cuando aún tenía esa forma), para encontrarme con Senjougahara que estaba dando un
paseo y después conocer a una Hachikuji Mayoi perdida.

Y aún lo recordaba.

Ese día, no solo me encontré con ellas dos, sino que también vi a Hanekawa Tsubasa.

Sí, ella me había dicho algo entonces: que vivía en la zona.

El hecho de que su mensaje de texto me pidiera que me reuniera en el mismo parque no fue
una coincidencia ni, al menos, alguna alusión. En su sabiduría, Hanekawa simplemente
eligió el único punto de referencia cerca de su casa que yo conocía, este parque con un
nombre indescifrable. Su hábil mano en estos asuntos siempre tuvo mi voto.

Sí…

Hanekawa Tsubasa me había enviado ese mensaje.

Olvídate de la campana de inicio de clases, hace mucho tiempo que había sonado. No solo
eso, me tomó un poco de tiempo llegar al parque. Estaba en una zona desconocida, y sólo
había estado en ella una vez después de haber ido a dondequiera que me llevaran las calles.
A pesar de todo, al final del primer periodo conseguí aparecer ante Hanekawa, que estaba
sentada en un banco con la espalda redondeada y encogida.

Su apariencia desprendía una impresión muy diferente a la habitual.

Era extremo incluso para un cambio de imagen.

Su blusa de manga larga casi parecía ocultar la parte superior de su cuerpo y el largo de
brazo era notablemente largo. Los pantalones que sobresalían por debajo también eran
holgados. Eran de color rosa, un color llamativo para elegir salir al exterior, y en lugar de los
calcetines y zapatos blancos y lisos que ella acostumbraba a usar, había optado por mostrar
los pies y usar sandalias en un acto de despreocupación.

Sus gafas eran las mismas que siempre, pero sus trenzas se habían deshecho. No, eso no fue
del todo correcto. Ni siquiera una representante de clase entre los representantes de clase,
elegida no por sus compañeros sino por los propios dioses, nació con su cabello trenzado.
Especialmente esta madrugada, la manera correcta de decirlo era que todavía tenía que
trenzarse el cabello. Era la primera vez que veía a Hanekawa con el cabello suelto...
Naturalmente, parecía bastante más largo, y por lo que parece es incluso más largo que el de
Senjougahara.

Hanekawa llevaba una gorra de caza encima de ese cabello.

Un sombrero fue otro primero.

“... Oh, Araragi-kun.”

Finalmente Hanekawa se dio cuenta de que había llegado. Acunándose a sí misma y mirando
al suelo, algo que no hacía falta que hiciera, cabe destacar que estaba justo delante de ella.

Su expresión era un poco incómoda.

O eso me pareció.

“No-no.” Ella me advirtió. “No debes andar en bicicleta dentro del parque. Tienen
estacionamiento para bicicletas, así que necesitas usarlo.”

Esa es Hanekawa para ti.

“Ahora no es el momento.” Le recordé. “¿Me vas a regañar por mi bicicleta después de


hacerme faltar a la escuela?”

“Eso y esto son temas separados. Vamos, apúrate y estaciona.”

“……”

Hmph. Ella no ganaba nada si hacia eso.

¿No iba a comenzar a darme algunas palabras de gratitud? Había corrido hacia ella como un
perrito fiel.

Pero no lograría nada al quejarme.


Hanekawa también tenía razón.

Diciendo “Bien.” Me bajé de la bicicleta y la empujé hacia la distante área de


estacionamiento. Las mismas bicicletas oxidadas y descompuestas del catorce de mayo
seguían estacionadas donde mismo, sin cambios. Puse mi bicicleta junto a ellas y la
estacione. Como todavía no había señales de ningún hombre, mujer o niño en el parque (esto
parecía ser una constante, ya fuera un día de la semana o un día festivo), no vi mucho sentido
en bloquear mi bicicleta...

Regresé al parque.

Hanekawa estaba sentada en el banco.

La blusa de manga larga ocultaba parte de sus pantalones holgados, pero estaba seguro de
que eran pijamas, dado su color y material... ¿Eso significaba que en la parte de arriba
también llevaba pijamas? Y sus sandalias parecían complementos. ¿Se había despertado,
levantado de la cama, no se había puesto nada más que una blusa y había salido de su casa?

“Lo siento, Araragi-kun.” Se disculpó cuando volví.

Aunque no eran palabras de gratitud.

“Te hice faltar a la escuela.”

“Oh, no importa.” Le dije. “¿Te lo tomaste de esa manera? No estaba tratando de ser
sarcástico.”

“No te preocupes, sin embargo, lo calculé todo. Por las clases de este día no tendrás ningún
problema en absoluto, incluso si no vuelves.”

Esos eran cálculos desagradables.

Para hacer eso incluso cuando ella pidió ayuda...

Ella realmente pensó demasiado en todo. ¿No significaba eso que no me habría enviado el
mensaje de texto si la programación del día fuera un problema para mi asistencia o pudiera
causar algún otro problema?

Ella pensó demasiado en las consecuencias.


Intenté preguntar: “Con la representante de la clase y el vicerepresentante desaparecidos,
¿qué pasará con la preparación del Festival Cultural? ¿También tienes algún tipo de plan
para eso?”

“Llamé a la sala de maestros después de enviarte ese mensaje... Le dije a Hoshina-sensei


sobre el trabajo que hay que hacer hoy y cómo hacerlo.”

“......”

Dios, ella lo planeo todo.

¿Qué tal la forma en que llamó a nuestra maestra después de enviarme ese mensaje de texto
para así aprovechar su tiempo de espera en el parque?

“Senjougahara-san estará a cargo después de la escuela.” Me informó Hanekawa.

“¿Qué? ¿Estás segura de que no estás cometiendo un error?”

Una de las cosas que mi novia odia más es trabajar con y para otros. No podía imaginar un
mejor híbrido de dichas cosas que preparar un Festival Cultural. Ninguna advertencia de:
‘Precaución: No Mezclar’ podría ser lo suficientemente grande.

“Senjougahara-san se saltó las preparaciones del día de ayer. Esto es para compensar eso.”

“Hunh...”

Contra Hanekawa, toda la audacia y el desafío de Senjougahara no eran nada... Bueno,


nuestra clase la seguía viendo como la princesa enclaustrada, así que si le preguntaran, al
menos cumpliría con sus deberes...

“Me alegro de que seas una buena persona.” Le dije. “No hay nadie más calculador que tú,
así que imagina lo que pasaría si usas ese cerebro tuyo para el mal.”

“Eso no es cierto, en cuanto a mis cálculos... era muy arriesgado para mí apostar a que tu
teléfono estuviera encendido. Tampoco podría intentar llamarte antes de enviarte un
mensaje, porque era posible que a esa hora ya hubieses entrado al aula...”

“¿Eh? ¿No podrías llamarme y colgar después de un timbre? Si lo hicieras, intentaría


devolverte la llamada. Siendo la persona de principios que eres creí que se te ocurriría ese
método para ver si mi teléfono estaba encendido.”

“Oh, así que incluso viste a través de mi personalidad.”


Así que recibir un mensaje de texto estuvo bien, pero devolver la llamada no... Eso fue
bastante sutil. También parecía una elección difícil para Hanekawa. Pensé que no tenía
tiempo, pero ahora estaba contento de haberle enviado un mensaje de texto en un semáforo
en el camino hacia el parque.

Entonces mi conversación con Hachikuji fue significativa, si hubiera llegado a la escuela


antes, habría apagado mi teléfono en el aula.

Bueno, dejando eso a un lado.

………

Saber que alguien estaba en su pijama me puso nervioso, incluso si esa persona era
Hanekawa... Fue la primera vez que vi algo tan extraordinario como una chica en ropa de
dormir (los casos que involucran a mis dos hermanitas no cuentan).

Su blusa era la única parte lamentable. Solo pude distinguir los pantalones, y solo por el final
de las piernas, que carecían de ese toque final... o debería decir, ¿tenía el toque final y nada
más? La gente habla de vistas que atormentan, pero esto se sentía como morir de hambre
teniendo la comida en frente de ti.

¿No había alguna manera de quitarle esa cosa insulsa?

Ya sabes, como en “El Viento del Norte y el Sol”.

“Hey, Hanekawa.”

“¿Qué?”

“Eh, Hanekawa-sama.”

“¿Sama?”

“Permíteme sostener tu blusa por ti.”

“……”

Ack.

Ella no podría haber parecido más desconcertada.

Hice todo lo posible por imitar a un camarero en un elegante restaurante saludando a un


valioso cliente, pero esa farsa no iba a ser persuasiva en un parque al aire libre.
“Araragi-kun.”

“¿Sí?”

“Me vas a hacer enojar.”

“... Lo siento.”

Era un rayo de sobriedad cegadora.

Tenía ganas de ponerme a cuatro patas y rogar por su perdón.

“Está bien.” Dije. “Ya he bromeado lo suficiente, ¿qué pasó, Hanekawa? No me dijiste cuál
era el problema real en tu mensaje, pero... ¿son esos dolores de cabeza?”

“Sí, los dolores de cabeza...” Hanekawa dijo lentamente. “Por ahora se han ido.”

“¿Oh? ¿Se fueron?”

“Supongo que se podría decir que han terminado...”

Hanekawa estaba eligiendo sus palabras con cuidado.

Al elegir, o mejor dicho, no podía expresarse sin acuñar otras, esa parecía ser su situación.

Para ser honesto tenía una idea de lo que era.

Vaya que sí.

“Um... ¿Araragi-kun? Acerca de la Semana Dorada. Lo recordé.”

“Oh, lo hiciste.”

Su dolor de cabeza.

Ese era el significado de sus dolores de cabeza.

“Bueno, tal vez no.” Continuó. “Es más como si recordara que estoy olvidando algo... pero
no importa cuánto lo intente, solo puedo recordar una imagen borrosa.”

“Oh, sí, me lo imagino. No debería ser posible que lo recuerdes hasta el final.”

En realidad y en primer lugar, recordar que ella había olvidado algo debería ser imposible
para ella. Se suponía que Hanekawa nunca recordaría esos nueve días de pesadilla... Y aun
así.
“Hasta ahora... sabía vagamente que Oshino-san y tú me habían salvado, pero... es muy
extraño. No solo no puedo recordar cómo, tampoco el por qué, es como si estuviera bajo una
hipnosis rara…”

“Hipnosis, eh...”

Bueno, era algo completamente distinto.

Ella dijo: “Todavía no estoy completamente al tanto de la situación de ese tiempo, pero me
alegro de haberlo recordado. Por fin, puedo darles las gracias a Oshino-san y a ti.”

“Oh, pero no te salvamos, como Oshino dice…”

“Simplemente me salvé a mí misma, ¿verdad?”

“Correcto.”

Absolutamente correcto.

Especialmente cuando se trataba de mí. Yo no había hecho nada.

En lo que respecta al caso del gato de Hanekawa, Shinobu fue quien más hizo. Si había
alguien a quien Hanekawa necesitaba agradecerle, no era a Oshino Meme, sino a Oshino
Shinobu, la pequeña rubia.

“Un gato.” Dijo Hanekawa. “Un gato, ¿verdad?”

“...”

“Recordé esa parte, el gato de entonces, ¿verdad? El que tú y yo enterramos juntos... ese
gato. Sí... recordé esa parte.”

“Bueno, entonces todavía eras tú.”

“¿Eh?”

“Er, nada, pero Hanekawa. No me llamaste aquí solo porque lo recordaste, ¿verdad?”

No importaba como mi registro de asistencia no iba a ser un problema, ella no iba a hacerme
venir por algo así.

No solo había recordado, tenía que haber más, el recuerdo tenía que ser secundario.

“Eso es correcto.” Afirmó Hanekawa.


A pesar de su situación todavía estaba decidida… las personas con su tipo de fortaleza
mental realmente eran diferentes. Esto estaba en una liga diferente de la conversación que
tuve anteayer con Sengoku.

“Una excentricidad...”

Una excentricidad.

Siempre hay una razón por la que te encuentras con una excentricidad.

“Sí... por eso.” Dijo Hanekawa, mirándome. “Esperaba que pudieras llevarme con Oshino-
san... Él todavía vive en esa escuela abandonada, ¿verdad? Lo sé, pero simplemente no pude
averiguar cómo llegar allí...”

“………”

No era que ella no lo supiera.

Ella lo había olvidado.

Era un lugar bastante alejado, así que un mapa podía ayudar sólo hasta cierto punto... Quizás
no era imposible si ella hallase un mapa viejo, pero llevaría demasiado tiempo, y en este
momento el tiempo era esencial. Debió decidir que enviarme un SOS era más rápido.

“¿Podrías enseñarme el camino?” Ella pidió.

“Sí, por supuesto…”

No tenía ninguna razón para decir que no.

Aunque probablemente Oshino estaba dormido a esta hora de la mañana y termináramos


interrumpiendo su sueño, eso no era algo que debiera mencionar. Tiende a levantarse del
lado equivocado debido a presión arterial baja o algo así... pero de todos modos teníamos
que hacer esto.

“… Por supuesto.” Dije. “Pero, ¿antes podría hacerte algunas preguntas?”

“Um... claro, pero ¿por qué?”

“Confío constantemente en Oshino cuando se trata de todo lo relacionado con las


excentricidades. Tenemos que seguir tratando de hacer todo lo que podamos por nosotros
mismos. Incluso si terminamos dependiendo de él, al menos deberíamos tener claros los
puntos importantes de la historia.”
“Oh... Sí, tienes razón.” Hanekawa sonaba convencida. “Está bien, pregúntame lo que
quieras.”

“Tuviste dolores de cabeza, ¿verdad? Dijiste que últimamente has tenido muchos de ellos,
pero ¿exactamente cuándo empezaron?”

“Exactamente cuándo...”

“Deberías ser capaz de recordarlo.”

“... Hace aproximadamente un mes, ¿supongo? Hm, pero si bien no fueron tan malos al
principio... ayer y anteayer, estuve contigo las dos veces, en la librería y frente a la escuela,
en realidad fueron bastante malos.”

“Debiste haberme dicho.”

“Lo siento. No quería que te preocuparas.”

“Lo que sea, está bien. No hay problema, entonces... ¿Ocurrió algo que involucrase gatos
después de la Semana Dorada?”

“¿Algo que involucrase gatos?”

“Incluso algo como un gato negro cruzando en tu camino.”

“…….”

Hanekawa cerró los ojos e hizo una demostración de revisar sus recuerdos.

Francamente, no estaba seguro de sí era el tipo de cosa que podrías recordar si lo intentaras...
pero, de nuevo, ella era “lo real”, alguien que vive en un mundo diferente, incluso según
Senjougahara...

Intenta aplicarle el sentido común y terminaras lastimándote, que es precisamente el motivo


por el que acabo relacionándose con una excentricidad.

“En la noche del veintisiete de mayo, estaba escuchando un programa de radio cuando se
leyó una carta de un ‘Amante del Gato Osuno Negro’. ¿Podría tener algo que ver con eso?”

“... No, no lo creo.”

Oh Dios mío.

Lo sabía, pero oh Dios mío.


“Por cierto, la carta decía: ‘Mientras se muestra a las criadas llevando vidas divertidas y
despreocupadas en el manga y el anime, ser una criada es un trabajo sorprendentemente
difícil. No se trata de ser linda y decir: ¡moe, moe! Por lo que entiendo, apenas tienen tiempo
para ellas mismas. Estoy seguro de que eso es lo que me dijo una el otro día en una cita
grupal’.”

“En serio, ¡no tienes que explicar todo eso!”

“¿Qué crees que es tan interesante acerca de esa carta, Araragi-kun? Me costó entender.”

“Um, se supone que debe ser divertido porque dice que las criadas casi no tienen tiempo para
sí mismas cuando se dice que hablo con una en una cita grupal, así que se divertía y se reunía
con gente, y ¿¡por qué tengo que llenar por ti los vacíos que dejó este ‘Amante del Gato
Osuno Negro’ en su historia!?”

“Oh, así que cuando se dice ‘me dijo una el otro día en una cita grupal’, significa que lo dijo
una criada. Ya veo, podría ser divertido si lo interpretas de esa manera. Pero creo que es un
poco difícil de entender si solo lo oyes una vez.”

“Y ahora que lo pienso, un Gato Osuno Negro no es un gato, se parecen más a las civetas.”

“Sí, supongo que tienes razón.”

“¿Algo más?”

“¿Hm? ¿Algo más? Bueno, había un ‘Oráculo de Aurícula’ en el mismo programa. ‘Hace
poco, estaba jugando a las cartas con dos amigos y decidimos jugar al Presidente. Después
de repartir las cartas, uno de mis amigos dijo algo. En mi escuela media, jugamos con una
regla en la que los 4 eran la carta más alta.’ Esa también fue una carta, así que me imagino
que fue una historia real, pero ¿qué tiene de graciosa?”

“¡No, cuando te pregunté si tenías algo más que decir, no me refería a las cartas de otros
oyentes en las cuales podías encontrar un chiste! Pero bueno, tienes que escuchar esa historia
sabiendo que Presidente tiene muchas variantes locales, como que el 8 es la carta más alta o
jugarla te hace perder un turno, también se dice si el Presidente mantiene su posición, se
convertirá automáticamente en el Imbécil. Se supone que debes reírte porque el amigo usó la
existencia de todas estas variantes como una excusa para inventar una regla que mejoraría su
mano.”

“Oh, ya veo. Siempre puedo contar contigo, Araragi-kun.”


“Puedes estar tan impresionada como quieras, pero no lo voy a tomar como un cumplido...
Ah, y supongo que el apodo de ‘Oráculo de Aurícula’ también es una pequeña broma en el
sentido de que oráculo y aurícula suenan parecido y podrías confundirte en su
pronunciación.”

“Oh, pero no es como si cada carta leída en ese programa fuera difícil de entender. Algunas
de ellas son regulares, cartas donde el chiste es evidente. Hubo otra historia real en ese
mismo segmento de programa de ‘No Hay Nada Como Un Perro Encontrado’. ‘El otro día
fui a una tienda de alquiler de videos con mi amigo. Quería tomar prestados los DVD de un
drama que se emitió hace unos tres años, pero alguien más había alquilado el volumen ocho
de un conjunto de trece, por lo que solo pude alquilar hasta el volumen siete. Me sentí
decepcionado porque escuché que el final de la serie es su mejor parte. Este octavo volumen
era el único que no tenían, mientras que del nueve al trece estaban en el estante. Cuando le
dije a mi amigo: Es como si estuviera jugando a Sietes y me hubiese tocado el ocho, mi
amigo respondió: Apuesto que quien tenga el volumen ocho ahora mismo se está riendo.’
Jaja, ¿entiendes? ¡Porque el que tiene el volumen ocho no lo ve como un juego de Sietes!”

“Admito que eso puede ser divertido, ¡pero suficiente sobre el programa de radio!”

Nos hemos desviado del asunto.

Como sea.

Si eso era todo lo que ella podía decir respecto a recuerdos relacionados con los gatos,
¿quizás deberíamos considerar el caso actual como los remanentes de la última vez?

Probablemente deberíamos.

“Está bien, Hanekawa. Siguiente pregunta.”

“Ok.”

“Ese sombrero.” Dije. “¿Te lo quitarías por mí?”

“... Eso...” La expresión de Hanekawa cambió. “Eso no califica como pregunta, Araragi-
kun.”

“No, no lo es.”

“Sé que no lo es.”


“Hanekawa-sama. Permítame sostener su sombrero por usted.”

“Araragi-kun.”

“¿Sí?”

“Me vas a hacer enojar.”

“Entonces, enójate.” Dije, sin vacilar a pesar de la mirada amenazadora de Hanekawa. “Si
quieres enojarte, hazlo. Incluso puedes odiarme si quieres, no me importa. Pagar lo que te
debo es mucho más importante para mí que nuestra amistad.”

“¿Pagarme lo que me debes? ¿Qué...?” La voz de Hanekawa se volvió un poco más suave,
como si mis palabras la hubieran hecho sentir incómoda. “¿De qué estás hablando?”

“Estoy hablando de las vacaciones de primavera.”

“Eso... pero eso fue... Eso, en todo caso, fue un caso donde simplemente te salvaste a ti
mismo, ¿no?”

“No. Oshino podrá decir eso, pero creo que me salvaste. Me salvaste la vida.”

Sentí que finalmente había sido capaz de decirlo.

Correcto.

Si alguno de nosotros necesitaba agradecer adecuadamente al otro, entonces ese era yo.

“No creo que pueda devolverte el favor en su totalidad.” Le dije. “Pero quiero que me dejes
hacer algo por ti. Haré cualquier cosa, todo por ti. Y si te enojas o me odias en el proceso,
que así sea.”

“Que así sea, ¿eh?” Hanekawa se rio, solo un poco.

No, tal vez ella lloró.

No pude precisarlo.

“Oh, supéralo.” Dijo ella.

“¿En serio?”

“Estamos hablando de ti, Araragi-kun. ¿Realmente crees que eres tan genial?”

“... Esa línea pertenece a algún matón de vecindario.”


Y no a una estudiante modelo.

Sí, tienes razón, dijo Hanekawa, y luego... “No te rías.”

Ella se quitó el sombrero.

“………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………...”

Ella tenía orejas de gato.

Un par de lindas orejas de gato sobresalían de la pequeña cabeza de Hanekawa.

Me mordí el labio en silencio.

Tan fuerte que la sangre comenzó a rezumarse.

... No te rías...

Acabo de actuar con seriedad para que ella hiciese eso. No debo reírme... finalmente logré
que ella aceptara después de haber creado la excusa más seria y solemne que se me ocurrió.
Sería una broma de manga o de libro de texto si me echara a reír y la ridiculizara, pero juré
que no lo haría...

Aun así, las orejas de gato iban bien en ella. Era como si estuvieran hechas a medida para
acompañar su excelente y recto flequillo. Un pensamiento que tuve por primera vez durante
la Semana Dorada me vino a la cabeza: había nacido para llevar un par de orejas de gato en
la cabeza...

Dicho esto.

Durante la pesadilla que fue la Semana Dorada, nunca vi a Hanekawa como ella misma con
orejas de gato, así que ahora me estaba volviendo loco de emoción. Ya veo, pensé, entonces
el color del pelaje de sus orejas en este caso era negro, igual que su cabello...

Aun con eso no era excusa para reír.

Entonces ella realmente me odiaría.

Le dije que no me importaría que lo hiciera, pero al final del día prefería evitar ese resultado.
Es deprimente ser odiado por una persona decente que incluso salvó tu vida.

“¿H-Hemos terminado?”
Hanekawa sonaba avergonzada.

Era raro ver sus mejillas tan teñidas de color.

¡Y ella tenía orejas de gato!

“Oh, sí... claro. Gracias.”

“¿Por qué me estas agradeciendo?” Dijo ella, viendo a un lado para ponerse el sombrero.
Ella se lo coloco con sumo cuidado y evitó mis ojos. Fue similar a cuando Kanbaru me
mostró su brazo izquierdo o cuando Sengoku nos mostró su cuerpo... pero las orejas de gato
de Hanekawa estaban en un plano diferente.

Hasta el punto en que quería agradecerle.

Muchas gracias.

“Bueno... está bien, creo que lo entiendo.” Dije. “Realmente es como si estuviéramos
retomándolo de donde se quedó en la Semana Dorada. Así que supongo que no ha
terminado...”

Los dolores de cabeza debían ser de las orejas que crecían en su cabeza.

Fue lo suficientemente fácil de entender si lo pensabas de esa manera.

Como las muelas del juicio creciendo.

“¿Retomándolo de donde se quedó en la Semana Dorada?” Preguntó Hanekawa. “Así que te


refieres a las cosas que olvidé.”

“Y es mejor que permanezca de ese modo.”

“Sí, estoy segura... pero no lo sé, se siente tan desagradable tener un agujero en mi memoria.
Como si me faltara algo que debería estar allí.”

Lo que ella estaba sintiendo no era una falta.

Probablemente era... una pérdida.

“No lo tomes a mal, pero estoy un poco aliviado.” Le dije. “Si ese es el problema, hay una
manera de lidiar con él. Puede que no lo recuerdes, pero ya pasé por esto una vez. Todo lo
que tenemos que hacer es repetir lo que hicimos, y esto se solucionará. Solo que esta vez,
nosotros seremos más cuidadosos en cada uno de los pasos.”
“Ah, entonces es así.”

Ahora que escuchó eso Hanekawa estaba visiblemente menos tensa.

Bueno, por supuesto que se asustaría. ¿Quién no lo haría si se despertaran con orejas de gato
brotando de su cabeza, incluso si ella recuperó algunos de sus recuerdos en el proceso? No
podías culparla por salir de su casa aún en pijama.

En tales situaciones…

Hanekawa no podía quedarse encerrada en casa.

“Está bien.” Le dije. “Ahora que hemos aclarado las cosas, ¿por qué no nos dirigimos con
Oshino...? No me vas a decir que el que los dos vayamos en bicicleta va contra las leyes de
tránsito, ¿o sí?”

“Por mucho que me gustaría.” Respondió Hanekawa levantándose del banco. “Lo pasaré por
alto. Pero con eso ahora estamos a mano, después de todo hice que faltaras a la escuela.”

Espera, ¿siquiera cómo hizo eso?

Ambas cosas sucedieron por su decisión. A veces ella podría ser sorprendentemente astuta.
En realidad, esta debe ser su idea de una broma.

O tal vez podría llamarlo su forma de ocultar su vergüenza.

“¿Te presto mi hombro? Pareces cansada.”

“Estoy bien. Recuerda, dije que mi dolor de cabeza se había ido. En este momento estoy
emocionalmente agotada, pero eso es todo. En todo caso mi cuerpo se siente mejor de lo
normal.”

“Ya veo.”

Bueno, ella es una gata.

Fue lo mismo con el mono de Kanbaru.

Caminamos hasta el estacionamiento de bicicletas, tome mi bicicleta y subimos, yo primero


en la silla de montar, luego ella en el asiento trasero.

Los brazos de Hanekawa se envolvieron alrededor de mi torso, luego se apretaron.

Ahora su cuerpo estaba pegado al mío.


Ack...

¡Son tan suaves!

¡Y tan grandes!

Los dos bultos que sentí en mi espalda asaltaron sin piedad mi corazón, azotándolo en un
frenesí... Lo confieso, fue un shock que estoy seguro que me habría hecho perder el control
si hubiera sido alguien más que Hanekawa Tsubasa, la chica a la que le debía mi vida, y si
no tuviese novia, y también si mi novia no fuese Senjougahara Hitagi.

Hanekawa Tsubasa era una chica con activos ocultos.

Sí, era difícil verlo gracias a la apariencia completamente simple que suele mostrar,
siguiendo el código de vestimenta de la escuela hasta el pie de página, pero tenía un cuerpo
increíble... Llegue a aprender eso lo suficientemente bien durante la Semana Dorada.
Senjougahara se había sentado en el mismo asiento trasero, pero fui consciente de que ella
estaba usando su sentido de equilibrio innato para apenas tocarme...

Y en ese entonces no estábamos saliendo.

Mientras tanto, la moral y la ética de Hanekawa Tsubasa no tenían ninguna posibilidad


frente a su devota adhesión a la seguridad vial. Ella me confió todo su cuerpo, haciendo que
la situación, francamente, no fuese cosa de risa.

Además, había estado usando mi chaqueta escolar de cuello alto con Senjougahara. Ahora
que estaba usando mi uniforme de verano, una camisa de manga corta. Esta diferencia era,
prácticamente hablando, bastante grande. ¿Pero eso fue todo lo que hizo que se sintiesen tan
suaves? En cuanto al uniforme de verano, ya lo estaba usando desde anteayer cuando
Sengoku también se sentó detrás de mí... Bueno, estaba el problema más básico de que el
cuerpo de Sengoku no sobresalía mucho en ninguna dirección, pero aun así.

Y entonces me di cuenta. Oh. Correcto, así como yo no llevaba nada debajo de mi camisa de
manga corta, ella solo llevaba puesta su pijama debajo de esa blusa... Hanekawa-sama, ¿no
está usando un sostén?

Oh, wow...

Entonces, este tipo de cosas realmente suceden a lo largo de tu vida...

“Araragi-kun.”
“¿Hm?”

“Una vez que bajemos de la bicicleta necesito hablar contigo.”

“…………”

Las palabras enviaron un escalofrío por mi espina dorsal.

Ella vio directamente a través de mí...

Soy tan superficial.

“Bueno, uh.” Tartamudeé. “Dejando eso a un lado, vamos. Agárrate fuerte para que no te
caigas...”

¡Hey!

Estaba tratando de salir del momento incomodo, ¿por qué me estaba hundiendo más?

¡No pude encontrar mi ritmo!

Mientras estaba ocupado lanzándome a los tiburones, Hanekawa se quedó en silencio.

Estaba en silencioso.

Ella no estaba diciendo una palabra.

“E-Está bien, aquí vamos.”

Al final, todo lo que pude hacer fue anunciar en voz alta nuestra partida antes de comenzar a
pedalear. Con el peso de dos personas en mi bicicleta, esta se sentía mucho más pesada. La
rutina estándar aquí habría sido el clásico “Eres más pesada de lo que pensabas” y Hanekawa
se enojaría, pero decidí pasar.

Además, ella no era lo que yo llamaría pesada.

No tardaría mucho en llegar a la escuela de preparación abandonada donde vivían Oshino y


Shinobu, una hora o menos si iba tan rápido como pudiera, incluso con dos personas. Algo
increíble sucedió en mi espalda cada vez que nos topamos con un bache en la carretera, pero
decidí prestar la menor atención posible al hecho. No iba a conducirnos intencionalmente
sobre cualquier bache en el asfalto, era un caballero. Bueno, de nuevo, no estaba seguro,
incluso si no pasaba intencionadamente por algún bache, ¿no podría simplemente fallar en
evitar cualquier bache que se presentara en nuestro camino y seguir llamándome a mí mismo
un caballero?

“Debe ser difícil para ti.” Me dijo Hanekawa después de un rato, después de comenzar a
acostumbrarse a lo que debió de ser su primera vez montando una bicicleta con otra persona,
o al menos su primera vez desde que tenía seis años. “Cuidar a tantas personas de tantas
maneras diferentes.”

“¿Tantas personas? ¿Qué quieres decir?”

“Están Senjougahara, Mayoi, Kanbaru, también esta esa chica de escuela media de ayer,
Sengoku... Jaja, todas son chicas.”

“Oh, cállate.”

“Y cada vez, tenía que ver con excentricidades. Ahora lo recuerdo.”

Por “recordar”, asumí que ella quería decir algo como “conectar los puntos”.

“Todavía es un poco confuso, pero... sí. No hay manera de que Senjougahara haya superado
su enfermedad tan repentinamente...”

“……”

“Así que comenzó cuando fuiste atacado por un vampiro durante las vacaciones de
primavera... Todo comenzó desde allí.”

“Las excentricidades en sí mismas siempre están ahí, como parte de la naturaleza, no es


como si un día aparecieran de la nada. Aparentemente.”

Al menos según Oshino Meme, el especialista.

“¿Lo sabías, Araragi-kun?”

“¿Saber qué?”

“Hay un rasgo especial que tienen los vampiros: la fascinación, pueden usarlo para encantar
a los humanos.”

“¿Encantar?”

No sabía exactamente a qué se refería. Um... ¿era su capacidad de chupar la sangre para
aumentar su número? ¿Cómo Shinobu hizo conmigo?
Cuando le pregunté, ella negó con la cabeza.

“Uh-uh.”

Me di cuenta de que ella estaba negando con la cabeza por la forma en que se movía a lo
largo de mi espalda.

“Ese es su rasgo más famoso. Esto es similar, pero un poco diferente... No implica chupar
sangre. Si acaso es como la hipnosis, tal vez sea eso... mirar en los ojos de otra persona les
permite cautivar al sexo opuesto. Aunque no estoy segura de sí ‘el sexo opuesto’ es el
término correcto aquí, ya que los vampiros y los humanos pertenecen a diferentes especies.”

“Huh. Está bien, ¿y qué hay de eso?”

“Nada. Solo estaba pensando.” Ahora la voz de Hanekawa estaba más tranquila. “Tal vez
por eso últimamente has sido tan popular con las chicas.”

“………”

Fascinación.

Un rasgo especial de los vampiros.

Ah. Puede que ya no sea un vampiro, pero aún era completamente posible. No era como si
fuese un protagonista de simulador de citas como dijo Hachikuji, ya habíamos discutido ese
punto... pero esa era una justificación realista de lo que estaba sucediendo.

Esa es Hanekawa para ti.

Ella veía las cosas de una manera diferente.

Pero, sería horrible si ese fuera el caso.

Quiero decir, si eso fuera cierto, ¿no cambiaría absolutamente toda mi relación con
Senjougahara Hitagi?

Y toda la diversión que tuve conversando con Hachikuji...

Y lo apegada que esta Kanbaru por mí...

E incluso Sengoku, también...

“... Lo siento.” Dijo Hanekawa. “Eso fue malo de mi parte, ¿verdad?”


“No realmente, no lo tome a mal. En realidad, ahora todo tiene más sentido para mí. Por
supuesto. Si lo piensas, hasta el año pasado, casi no tenía un solo amigo, sí, puedo recordar
aquellos días en los que la lista de contactos de mi teléfono no tenía una entrada.”

Podía memorizar todos los números que necesitaba.

Hacerlo ahora sería un poco difícil.

“Huh, fascinación.” Gruñí. “Está bien. Realmente lo sabes todo, ¿no?”

“No lo sé todo.” Respondió Hanekawa. “No es que lo sepa todo. No sé nada.”

“………”

¿Eh?

¿No sonaba un poco distinto de su línea normal?

Pero antes de que pudiera expresar mis dudas, ella continuó: “Tú ya eras un vampiro cuando
me conociste durante las vacaciones de primavera, ¿no?”

“Sí. Fue justo en medio de todo. En aquel momento no era una burla, sino un auténtico y
genuino vampiro. Heh, así que después de todo supongo que también podría haberte
fascinado, ¡ay!”

Hanekawa había apretado sus brazos con más fuerza alrededor de mi torso.

¿No fue eso un movimiento de sumo? ¿¡Un sabaori!?

“No, Araragi-kun. Un sabaori, o una fuerza hacia abajo, se hace desde el frente. Además, se
usa para poner a un oponente de rodillas, no para aplastar sus órganos internos.”

“Oh, está bien. Estás realmente bien informada, espera, ¿¡aplastar mis órganos internos!?”

¡Hanekawa acababa de decir algo que esperaba escuchar de Senjougahara!

¡Las mujeres son aterradoras!

¿¡Qué pasaría si Hanekawa se diera cuenta de que su movimiento no fue tan efectivo gracias
a los dos grandes cojines en mi espalda!?

Bueno, fue mi culpa.

No estaba prestando atención y había dicho algo inapropiado.


Hanekawa debe estar en un estado mental bastante incómodo, ella casi había recuperado sus
recuerdos, y ahora estaba pensando en todo tipo de cosas que normalmente no contemplaría.
Por todo lo que le faltaba y que había perdido.

No podría culparla si su cabeza no estaba en el lugar correcto.

Antes me había impresionado un poco por cómo Hanekawa calculó todo, desde mi asistencia
hasta la preparación del Festival Cultural. Pero cuando lo pensé un poco más, si lo único que
quería era llegar a la escuela de preparación abandonada donde vivía Oshino, el asunto
podría haberse manejado a través de mensajes de texto. Ella solo tenía que pedirme
direcciones, no había necesidad de obligarme a faltar a la escuela y llamarme a un parque
distante.

Sin embargo, ella lo hizo.

Y no porque su cabeza no estuviera en el lugar correcto.

Debió ser porque se sentía incómoda.

Si lo hubiera descubierto con suficiente tiempo, Hanekawa lo habría notado de inmediato,


así que no era como si no lo hubiera hecho. Estaba demasiado asustada para enfrentar una
excentricidad sola.

Eso me hizo feliz.

Probablemente yo no sería de ayuda, la única opción viable parecía ser preguntarles a


Oshino Meme y a Oshino Shinobu para hacer frente a esta excentricidad gato. No había nada
que pudiera hacer por ella. Podría decir que haría todo por ella, pero desde el principio eso
no fue mucho que digamos.

Incluso entonces, podría estar a su lado.

El simple hecho de estar ahí cuando te necesitan es suficiente. No hay nada más que hacer
para ganarse la gratitud de alguien, tal como dijo el papá de Senjougahara.

Si ese era el caso, la única persona que estuvo allí para mí cuando más lo necesite fue
Hanekawa Tsubasa.

Por eso lo había decidido.


Incluso si no hubiera una cosa que pudiera hacer, estaría allí para Hanekawa cuando ella lo
necesitara, sin importar lo que pase…

Después de todo, nunca cambio.

Hanekawa me había dicho eso ayer.

Pero realmente, pensé, no hay nada que nunca cambie, y desde mi punto de vista, Hanekawa
realmente ha cambiado, y bastante.

Ella había cambiado, desde que se involucró con una excentricidad.

El ejemplo más grande son sus planes luego de graduarse que había compartido conmigo en
la librería.

Tomaría unos dos años, más o menos, y vagaría por el mundo.

Ella haría un viaje.

Hanekawa nunca habría elegido un camino tan fantástico para ella misma, al menos no la
Hanekawa que conocí al final del anterior año escolar, aquella que había estado recorriendo
el camino convencional de la chica modelo que es, y no es que este emitiendo juicios sobre
caminos correctos o incorrectos, pero existía el simple hecho de que Hanekawa Tsubasa
había cambiado. Si fue después del final de la Semana Dorada o después de las vacaciones
de primavera, eso era algo que no sabía.

Pero.

Desde allí, Hanekawa y yo continuamos sin hablar mucho más hasta que llegamos a la
escuela de preparación que había quedado abandonada hace unos años y ahora servía como
la guarida de Oshino y de Shinobu .Una cerca hecha jirones serpenteaba alrededor de este
edificio que solo podía describirse como en ruinas. Los carteles de “Prohibido el Paso” se
dispersaron por toda la estructura, volviéndolos a ellos dos ocupantes ilegales. Me pregunto
cuántas veces he venido a este lugar en los últimos tres meses. Me di cuenta de que me había
acostumbrado completamente a visitarlo. Para mí las excentricidades ya no eran algo fuera
de lo común...

“¿Oh? Si no otro que Araragi-kun.”

De forma repentina.
Oí esas palabras delante de mí.

“Y Representante-chan... ¿verdad? Tiendo a tener problemas para hacer un seguimiento de


quiénes son las mujeres cuando cambian su peinado, pero por las gafas estoy seguro de que
es Representante-chan. Ja, ja, ha pasado un tiempo, Representante-chan. Y Araragi-kun, ha
pasado un día.”

Fue Oshino Meme.

Allí, al otro lado de la cerca rota, había un hombre de mediana edad con una camisa
hawaiana bastante psicodélica, que parecía distante. Se veía tan mal como siempre, pero
también me di cuenta de que había sido la primera vez en mucho tiempo que lo había visto
hacer algo fuera del edificio. ¿Qué estaba haciendo él? Pensé que se suponía que era un
sujeto extraño que vivía encerrado en las ruinas y se negaba a dejarlas.

“Hmm...” Musité. “Espera, siempre dices algo como: ‘Te he estado esperando’ o ‘Me has
tenido esperando bastante tiempo’ cuando te veo, como si vieses a través de todo. ¿Esta vez
no vas a hacer eso?”

“Oh... ¿Eh? ¿Yo hago eso?”

De alguna manera Oshino estaba actuando antinatural.

“Representante-chan.” Continuó como si quisiera esquivar la pregunta, cambiando su


atención a Hanekawa que estaba detrás de mí bicicleta. “Realmente ha pasado un tiempo, no
es así, Representante-chan, ¿paso algo importante? ¿No es hoy un día entre semana? Una
cosa es Araragi-kun, pero no podía imaginar que alguna vez te saltases la escuela. Ja, ja, ya
sé, es uno de esos días de los que tanto he oído hablar donde se celebra la fundación de tu
escuela, ¿no es así?”

“Oh, um... No, no lo es.”

“¿Hm? Te ves bien con un sombrero, como ese que tienes puesto.” Oshino se concentró de
inmediato en la cabeza de Hanekawa.

En lo que respecta a este tipo de cosas, se podría decir que era un especialista.

“…Gracias.”

Oshino volvió su atención hacia mí. “Eh, ¿es eso, Araragi-kun?”


Su expresión era relajada, la misma que Oshino siempre tiene.

“Realmente no puedes dar tres pasos sin atraer problemas, ¿verdad? Eso, en cierto sentido,
es todo un talento. Tal vez deberías apreciarlo. Ja, ja, bueno, por ahora entren. Así que,
Araragi-kun, en realidad, por una vez estoy en medio de algo. Estoy ocupado y no tengo
mucho tiempo.”

“¿Oh, enserio?”

¿En medio de algo?

¿Estaba ocupado?

¿No tenía tiempo?

Ninguna de esas cosas sonaba natural viniendo de la boca de Oshino.

“¿Estabas en medio de un trabajo?”

“Bueno, si quisieras podrías llamarlo trabajo. Pero está bien. Eres caso aparte, Araragi-kun,
pero puedo ser flexible si le ocurre algo serio a Representante-chan.”

“Hoy estás siendo muy desdeñoso conmigo...”

“¿Qué, quieres que diga que me gustas? Me estás asustando, qué desagradable.”

Oshino me espantó con un gesto frío.

Al menos mi fascinación vampírica no parecía funcionar con él... Oh, pero si era el poder de
cautivar al sexo opuesto, supongo que solo funcionaba en el sexo opuesto.

“Ahora, Araragi-kun deja de quejarte por nada y entren, les hablo a ambos. Entren por ese
agujero en la cerca. Hablaremos en el cuarto piso, como siempre.”

“Sí... bien.” Dije.

Hice lo que me dijeron.

En cualquier caso, gracias a que Oshino estaba afuera, me escapé del regaño que Hanekawa
me iba a hacer al bajarnos de la bicicleta. Puede que haya sido una bendición, pero estaba
tratando con Hanekawa y sus milagrosos poderes de memorización. No podía alegrarme de
que me perdonaran; sólo hubo retrasado mi inevitable regaño. De hecho, casi empecé a
sentirme deprimido cuando me di cuenta de que mientras tanto podría terminar acumulando
intereses en ese regaño.

Entramos por la cerca y nos abrimos paso entre las ruinas a través de la vegetación que ahora
crecía en todas partes a medida que se acercaba el verano. El desorden dentro del edificio
todavía era parte de los recuerdos de Hanekawa, así que ella no dijo nada al respecto. Puede
sonar como una broma desagradable, pero Hanekawa realmente miraba a Oshino con
respeto, haciéndola excesivamente indulgente cuando se trataba de todo lo que hacía que no
era apto para vivir en sociedad.

Está bien.

El camino de Hanekawa Tsubasa después de su graduación, al que apenas se le puede llamar


camino, la idea de vagar por el mundo, se debe más que un poco a Oshino Meme, que
recorre un sendero sin recorrer. No es que al final significara algo ya que Hanekawa había
tomado esa decisión por sí misma, pero…

Todavía tenía mis pensamientos.

“Un Sawarineko. Un Gato Entrometido.”

Oshino dijo las palabras, mientras subíamos las escaleras.

Un gato.

Un mamífero perteneciente a la familia de los Carnivora Felidae.

Destacan por sus cuerpos flexibles, dientes afilados, lenguas ásperas y garras; dicen que los
gatos esconden sus garras, y hay una razón para eso, ellos son las fundas en las que las
guardan. Las almohadillas suaves en sus patas que a los humanos les encanta tocar juegan un
papel práctico, también, amortiguando el sonido de sus pasos al cazar presas.

“También conocidos como Gatos de Plata, también se les llama Gatos Danzantes, pero no a
menudo, debido a otra criatura con el mismo nombre. Sí, Sawarineko sería el nombre
habitual. Una aflicción que es un gato o un Gato Afligido. Sawarineko. Un gato sin cola, una
conversación de gatos que no deja rastro. Una excentricidad. Se dice que los gatos entraron a
Japón en el período Nara, durante el siglo VIII. Es bien sabido que alguna vez se usaron para
hacer guitarras shamisen, pero... sí, los gatos ahora son mascotas, más aún, ya casi no
atrapan ratones. Nunca escuchas hablar de gatos policía o gatos lazarillo. Si discutiéramos
leyendas japonesas sobre gatos, tendríamos que mencionar los tres cuentos famosos del
Bakeneko, el Gato Cambiante... Ja, ja, bueno, una cosa eres tú, Araragi-kun, pero estoy
seguro de que todo esto es evidente para ti, ¿Representante-chan?”

“Hey, Oshino. Deja de decir ‘una cosa eres tú, Araragi-kun’ como si fuera una especie de
refrán cada vez que le hablas a Hanekawa. En realidad está empezando a molestarme.”

“Bueno, no es como si lo estuviera haciendo intencionalmente, pero la verdad tiende a


escaparse de la boca de la gente.”

“Será mejor que te cuides la próxima vez que salgas a caminar por la noche.”

“No hay que preocuparse, soy nocturno. Jajaja, y supongo que los gatos también lo son.”
Notó cuando llegamos al cuarto piso.

Hanekawa habló cada vez menos mientras subíamos las escaleras. Y como Oshino dijo,
Hanekawa no debería necesitar ninguna explicación sobre esta excentricidad, exactamente
las mismas palabras salieron de su boca durante la Semana Dorada.

Pero, ¿esos recuerdos seguían allí?

Podría haber sido la forma de comprobar de Oshino Meme. Oshino era un hombre que nunca
parecía pensar en nada, pero en general lo hacía.

Entramos en el aula.

Primero Oshino, luego yo, después Hanekawa...

Oshino se dio la vuelta para cerrar la puerta.

El aula era razonablemente brillante. Era de tarde, y la luz del sol entraba por las ventanas
(aunque vacilo en llamar de ese modo a marcos con fragmentos de vidrio con formas
extrañas que sobresalen de los mismos).

Hmm... Shinobu no estaba cerca.

Parecía que en estos días no estaba mucho en el cuarto piso...

Oh y me estaba olvidando de algo por culpa de Hanekawa, pero necesitaba mencionar lo que
Hachikuji me había contado sobre Shinobu... si ayer Hachikuji realmente vio lo que ella
creyó ver...

Y entonces.
Me di vuelta casi en el preciso momento en que Oshino tomó a Hanekawa por sorpresa y le
dio un golpe encima del sombrero.

Solo fue golpe leve.

Y sin embargo... Hanekawa se desmayó.

Cayó de rodillas y se desplomó, con la cara apoyada en el suelo.

Como si sus cuerdas hubiesen sido cortadas.

“¿¡H-Hanekawa!?”

“No te preocupes tanto, Araragi-kun. Hoy estás animado. ¿Te ha pasado algo bueno? ¿Cómo
acabar de ver las orejas de gato de Represéntate-chan, o tal vez porque la viste en pijama?”

“¡No hay que añadirle preguntas a tu eslogan! ¡Ella se hará una idea equivocada!”

“No hay nada malo en ello. De hecho, deberías estar agradeciéndome por ignorar todo este
tiempo cómo Representante-chan estuvo en el asiento trasero de tu bicicleta mientras te
abrazaba.” Estaba mirando a Hanekawa mientras ella estaba tumbaba en el suelo. “Y me
parece que ya sabes su historia, mírate, estás aprendiendo. Casi como si esas experiencias
con Tsundere-chan, Niña Perdida-chan, Lesbi-chan, y Dere-chan no se hubiesen
desperdiciado en ti. Y el caso de Dere-chan de anteayer parece haber tenido un impacto
especialmente grande en ti.”

Así que Sengoku se había vuelto Dere-chan.

El apodo no parecía suficiente para describirla, pero...

Lo que sea, no había necesidad de corregirlo.

Había algo más apremiante.

Le pregunté a Oshino: “De todos modos... ¿qué le hiciste a Hanekawa?”

“Como dije, gracias a la información que recolectaste, casi no tuve nada que hacer. Me salté
unos pasos.”

“¿Hiciste qué?”

¿Qué significaba eso?

¿Él podía hacer eso?


“Aunque lo llamaría heterodoxo. No hay tiempo, eso es lo que dijiste, ¿verdad? Y en este
caso... como creo que bien sabes, sería mucho más rápido tener una discusión directa que
tratar con Representante-chan.”

“... Así que quieres ir directo.”

“Podemos interrogarla todo lo que queramos, pero no importa cuánto haya recordado, sigue
sin acordarse de todo lo ocurrido, no llegaremos a ninguna parte. Entiendo que te sientas
molesto porque golpee a una chica en la cabeza cuando no se lo esperaba, pero esto no
habría funcionado sin la debida sorpresa. ¿De acuerdo? Pido tu perdón, por favor.”

Pero fue difícil encontrar una apertura, esta chica nunca baja su guardia, dijo Oshino.

Bueno, esa es Hanekawa para ti.

¿Entonces todo este tiempo Oshino había estado observando a Hanekawa y buscando una
“apertura”?

“Dijiste una discusión directa...”

“No creo que haya ninguna necesidad de explicarlo. Hagamos de este un buen trabajo,
Araragi-kun. Vamos a enfrentarnos a alguien tan inteligente como Representante-chan. Si no
estamos preparados, bueno, incluso yo fui tomado por sorpresa durante la Semana Dorada.
Pero no vamos a cometer el mismo error. Y hablando del diablo, parece que ya está aquí,
Araragi-kun. El Gato Lujurioso ha hecho su aparición.”

Entonces, cuando la miré.

Incluso cuando Hanekawa yacía boca abajo en el suelo, su largo cabello, el cual
normalmente es atado con trenzas, comenzó a cambiar de color.

Cambió de color.

No, perdió color.

Pasó de un negro sólido a un plateado casi blanco.

Como si toda la vida estuviera siendo drenada de ella.

“………”

Estaba sin palabras.


Tenía la sensación de que esto sucedería desde el momento en que visitáramos a Oshino, y
pensé que me había preparado hasta cierto punto, aun así, no podía ocultar lo agitado que me
sentía ahora que me había reunido con ella de una forma tan repentina.

Realmente estaba endeble.

Endeble y débil.

Iba a estar allí para Hanekawa cuando ella me necesitara, sin importar qué, ¿no era esa la
promesa que había hecho?

Entonces, arremetiendo…

Ella se levantó de un salto.

El sombrero salió volando de su cabeza por el impulso.

Se fue volando, exponiendo así lo que había debajo.

Su blanco cabello, su pulcro y recto flequillo.

El par de orejas de gato blancas que sobresalían de su pequeña cabeza.

“¡Nyaa-jajaja!”

Y entonces…

Ella entrecerró los ojos como un gato y me lanzó una sonrisa felina.

“Que sorrrrpresa-nya. Nunca pensé que nos volveríamos a encontrar, humano… y veo que
no has aprendido nada, gatito malo. Excitarse por los pechos de mi maestra-nya, eres tan
perrrsistente. Goro-goro. ¿Estás buscando que te coman vivo-nya?”

“…….”

Un único estallido que transmitía sucintamente sus rasgos de carácter y posición…

Marcó la segunda llegada de Black Hanekawa.


006
Parece que no hay necesidad de entrar en un flashback después de que Black Hanekawa
diera una explicación de sí misma tan amigable con los principiantes, pero de todos modos
permíteme invitarte al primer día de la Semana Dorada, el veintinueve de abril, la mañana de
hace de un mes y medio, en parte para ayudar a preparar el escenario. En los días en que mi
cabello todavía tenía un largo vago e incómodo mientras lo dejaba crecer para ocultar las
marcas de mordeduras en mi cuello.

Veintinueve de abril.

Es de mañana.

Como alguien que odia cualquier día que no sea un día laborable regular, salí de casa y como
de costumbre estuve dando vueltas, montando mi bicicleta de montaña en la ciudad,
pedaleando a gusto antes de que Kanbaru la destruyera. A diferencia del Día de las Madres,
se sentía como si paseara por gusto, como si me dirigiese a un lugar agradable, pero no lo
recuerdo muy bien. E incluso si lo recordara, el hecho de que lo haya olvidado significa que
al final del día no fue nada tan importante.

No.

Significaba que lo que sucedió mientras pedaleaba fue bastante importante.

Personalmente hablando.

Fue tan importante que todo lo demás dejó de importar.

Dio la casualidad que me encontré con Hanekawa.

La primera vez que me encontré con Hanekawa fue durante las vacaciones de primavera,
como he dicho muchas veces hasta ahora, fue cuando ella me salvó.

Tanto física como mentalmente.

En ese momento yo estaba más agradecido por lo último, ya que era inmortal pero, en
cualquier caso, ella era mi salvadora.

Ella me había salvado la vida, y había salvado mi mente.

Ella había estado allí cuando la necesitaba.


Eso es lo que pienso.

Realmente lo hago.

Casi tanto como me alegro de haber estado parado en el rellano ese día cuando Senjougahara
resbaló en las escaleras. Estoy realmente contento de que haya sido ella, Hanekawa Tsubasa
y nadie más, quien estuviese allí en ese momento.

Cualquier otra persona y nunca me habría salvado.

Nunca me habrían liberado del infierno.

Hanekawa y yo terminamos en la misma clase después de las vacaciones de primavera. Ella


me obligó a ocupar el puesto de vicerepresentante de clase. Ella me puso bajo su dirección
debido a su errónea suposición de que yo era un delincuente, y esa era su forma de
rehabilitarme. En ese momento no había ninguna razón por la que ella planeara ayudarme
con mis estudios, y normalmente la habría apartado y le habría dicho que sacara su nariz de
mis asuntos.

No hay nada que deteste más que la gente que parece imponerse a causa de un gran
malentendido.

Pero lo acepté.

Porque ella es Hanekawa.

Así que después de eso, durante el mes de abril, Hanekawa y yo, como representante de
clase y vicerepresentante de clase, y como tales, comenzamos a llevarnos bien en cierta
medida al hacer arreglos para eventos escolares y asuntos de la clase. Hacía tiempo que no
realizaba nada que se sintiera así, y me encontré metiéndome en ello de forma poco
característica.

Así que, por supuesto…

Si viese a Hanekawa caminando con su uniforme de vacaciones, al menos la saludaría.

Era lo normal.

Pero me estremecí por un momento.

Una gran pieza de gasa blanca ocultaba lo que parecía la mitad de la cara de Hanekawa
Tsubasa mientras caminaba por la calle.
Una herida.

Todos se lesionan.

Pero una lesión en la cara, así como una lesión de esa escala, fue algo raro. También estaba
el hecho de que la gasa estaba sobre el lado izquierdo de su cara, parecía haber una historia
detrás de ella.

Tal vez estaba pensando demasiado en las cosas.

Podría haber sido que mis violentas vacaciones de primavera me llevaran a pensamientos
brutales. La mayoría de las personas son diestras, y si golpearan a otra persona en la cara, su
puño aterrizaría en el lado izquierdo de esa cara, ese tipo de pensamientos. Pero incluso si no
lo pensara así, ¿cómo podías lastimarte sólo esa parte de tu cuerpo y más ningún otro lugar?
Hanekawa, de tercer año, no pudo haber decidido realizar algún deporte extraescolar el día
anterior…

Pero mientras estaba pensando.

Hanekawa se fijó en mí.

“Oh.” Dijo ella, acercándose a mí. Su actitud fue tan amigable como siempre. “Hola,
Araragi-kun.”

“... ¿Qué tal?”

“¿Hm? Oh.”

Y entonces.

Hanekawa parecía como si hubiese fracasado en algo.

Ahora que lo recuerdo, me parece increíble. Si hubiese sido cualquier persona normal, tal
vez no se pudiese evitar, pero podría llamarlo un gran error de parte de Hanekawa, la
maestra táctica.

O no, tal vez puedas llamarlo un éxito.

Y si me lo permites, un gran éxito.

Después de todo, Hanekawa habría estado intentando, intentando tanto, tan


desesperadamente de no pensar en la gasa en su cara, que resulto en eso.
Llamarme como si nada estuviera mal, sin preocuparme por la gasa, como si fuera otro día,
fue un gran éxito digno de la “verdadera” Hanekawa.

Pero por supuesto.

Cuando se miraba el esquema completo fue un fracaso.

Traté de pasar por alto esto, fingí no notar el fracaso de Hanekawa y quiero decir que le
pregunté por algo estúpido. La misma clase de estupidez con la que hable cada vez que nos
habíamos encontrado durante el último mes. Hanekawa siempre estuvo de acuerdo.

Pero.

Ese día ella no pudo.

“Eres tan amable, Araragi-kun.” Dijo ella. “Eres una persona tan buena y amable.”

Está bien.

Ese día también me dijeron eso.

Y fue Hanekawa.

“Vamos a caminar. Sólo un poco.” Me invitó.

No tenía ninguna razón para decir que no.

Bueno, nunca hubiera dicho que no. Hanekawa nunca me había invitado a hacer algo así
antes, yo diría que debió querer compañía.

Ella no podía soportar estar sola.

Ella no me invitó porque era yo, pudo haber sido cualquiera.

Sucedió que yo estaba allí en ese momento.

Probablemente desde el punto de vista de Hanekawa no era la mejor persona para la


situación; si hubiera estado un poco más tranquila dudo que me hubiera elegido. A diferencia
de Hachikuji Mayoi, a quien conocería más tarde, no era lo que alguien describiría como un
buen oyente. Soy demasiado rápido para involucrarme emocionalmente, no puedo mantener
la boca cerrada cuando me hablan, y todo el tiempo interrumpo las historias de otras
personas.
Pero Hanekawa era lo suficientemente buena como para compensar todo eso y más, y fue
capaz de tomarlo sin mayor problema. Empujando mi bicicleta, caminé a su lado y la
escuché hablar.

Antes que nada.

Hanekawa Tsubasa no tiene un padre.

Sí, biológicamente hablando, ella tendría que tener un padre, pero socialmente hablando, ella
nació de una madre que estaba completamente sola, Hanekawa aún no sabía el paradero de
su padre. No tenía interés en tratar de averiguar más, pero incluso si lo hiciera, lo más
probable es que en el mejor de los casos hubiera llegado a una conjetura, nada con certeza.

Tsubasa.

El nombre que le habían dado: “ala”.

El carácter “Tsubasa-翼” tiene connotaciones de cubrir y ayudar, como un pájaro que usa su
ala para proteger sus huevos o polluelos... Tomar bajo el ala de uno.

Sin embargo, en ese momento ese pensamiento no vino a mí.

Pero, ¿no debería la persona que la nombro haber sido la que la ayudó en ese momento?
¿Qué podría haber estado pensando su madre cuando le dio ese nombre?

¿Qué tipo de tarea le había dado a su hija?

Al parecer, en ese momento ella tenía un apellido diferente.

No pregunté cuál era.

Bueno, era más como si no hubiese podido preguntar.

Hanekawa trató de decirme, pero la detuve. Sí, ella entendió enseguida y continuó su
historia.

La madre de Hanekawa la tuvo, y luego se casó justo después.

Ella se iba a casar por primera vez.

En cualquier caso, parece que necesitaba el dinero. Criar a Hanekawa por su cuenta debió ser
duro. Todo esto sucedió hace casi veinte años, por lo que en aquel entonces el sistema de
bienestar social tampoco debía ser tan sólido. Incluso me podía imaginar lo difícil que
hubiera sido para una madre soltera y su hija vivir por su cuenta sin la ayuda de nadie.

Una madre.

Un padre.

Pero, justo después del matrimonio, su madre se suicidó.

Se había casado por dinero, y el matrimonio había fracasado en poco tiempo. Parece que
desde el principio estaba en un estado emocional delicado. Como si fuera el tipo de persona
que encontraba vivir con otros como algo agonizante, convirtiendo a Hanekawa de una niña
con una madre soltera a una niña con un padre soltero.

Un padre con el que no estaba relacionada por sangre.

Pero aun así, su padre.

El apellido del padre, tampoco era Hanekawa.

Y tampoco pude pedir su nombre.

Poco tiempo después del suicidio de su madre, este padre, sin relación sanguínea, decidió
volver a casarse. Hanekawa aún no estaba en la edad en que sintiese algo en particular
respecto a esto, pero como resultado, una vez más estaba en una familia de tres personas.
Ella ahora se encontró con el hecho de tener padres con los que no tenía una relación
sanguínea.

No sabía cómo se suponía que debía sentirme al respecto.

¿Fue una situación tan desafortunada?

¿Se suponía que debía compadecer a Hanekawa?

No servía declararla desafortunada simplemente porque su vida no había seguido un camino


más convencional; es cierto, su madre biológica había terminado su vida de una manera
desafortunada, pero esa infelicidad no necesariamente se aferraba a Hanekawa. De hecho, se
podría decir que tuvo la suerte de tener un padre que la acogió y que consiguió una nueva
madre.

Le habían pasado muchas cosas...

Eso no significaba en sí mismo que su vida fuera desafortunada.


Entonces, incluso si su padre murió por exceso de trabajo después de eso, y ella volvió a ser
una niña con una madre soltera, solo para encontrarse con otro padre nuevo un año después,
por fin obteniendo el apellido de “Hanekawa”, mi opinión sobre el asunto debería
permanecer igual.

No tenía sentido compadecerse de ella.

Podríamos sentirnos mal por su primer padre y madre que murieron, pero solo esos dos.

Nadie más.

Aun así, qué vida más tumultuosa.

En ese momento, Hanekawa aún tenía que cumplir tres años; estaba en una edad en la que
todavía no entendía nada. Sí, todo lo que podía hacer era ir con la corriente, sin importar lo
ridícula que haya sido esa corriente.

Yo había entendido mal.

La gente buena como Hanekawa debió ser bendecida, pensé.

Deben ser amados por los dioses, pensé.

Hasta entonces tenía la impresión de que las personas buenas eran afortunadas y las malas
eran desafortunadas, pero no es así.

Pasar tiempo con mi familia en vacaciones se sentía sofocante, así que salí de mi casa. Viví
el tipo de vida donde preocupaciones tan tontas como esa contaban como preocupaciones.
Pero cuando se trataba de situaciones familiares complicadas…

La suya era un mundo totalmente aparte.

Sonaba tan falso que era casi cómico. No lo hubiera creído si quien lo dijo no fuera
Hanekawa, me hubiera echado a reír. Pero me faltaron las palabras porque era Hanekawa,
alguien que sabía que nunca contaría una broma tan burda. Y así, después de todo el proceso,
llegó a tener dos padres sin ninguna relación con ella.

Comenzó con una madre soltera y una niña.

Y después de varios sucesos casi podrías decir que quedo ella sola.

“Lo siento.” Terminó Hanekawa. Ella se disculpaba conmigo. “Eso fue malo de mi parte,
¿no?”
¿Cómo debía responder a eso?

¿Podía decir “no realmente”?

No.

Le pregunté, ¿por qué? ¿Por qué estás hablando de eso?

Era como si la estuviera forzando a confesar. ¿Qué tan denso podría ser? Para alguien tan
seria como Hanekawa, debió sonar como una acusación.

“Bueno, solo me estoy desahogando.” Dijo ella. “¿Qué se supone que debes decir en esta
situación, verdad? Te preguntarías: ‘Está bien, ¿entonces qué?’, no es como si tuviera algo
que ver contigo, pero luego empiezas a sentir un poco de pena y hasta te sientes culpable por
compadecerme cuando no tiene sentido, ¿verdad? Tú... te sentiste mal en este momento,
como si hubieras hecho algo malo, ¿no?”

Ella había dado en el blanco.

Fue muy malo de mi parte, dijo ella.

“Te utilicé para animarme.”

“……”

“Traté de sentirme mejor conmigo misma haciéndote sentir mal, ni siquiera puedo llamarlo
una queja.”

Era la primera vez que veía a Hanekawa tan abatida. La gasa en su cara podría haber estado
influyendo en eso.

Mi imagen de Hanekawa Tsubasa era la de alguien que se mantuvo firme y recta, que era
fuerte, que era seria, que era confiable, sabia, justa, y que era perfecta.

Pero.

No hay tal cosa como una persona perfecta.

“Aun así, me sorprende que sepas todo eso.” Le dije. “¿No suelen evitar decirles a los niños
ese tipo de cosas? Como mantenerlo en secreto hasta que cumplan veinte años o algo así.”
“Bueno, tuve algunos padres muy abiertos. Lo supe desde antes de empezar la escuela
primaria.” Dijo Hanekawa, todavía caminando al mismo ritmo. “Realmente siento que estoy
en el camino de mis padres.”

“….…”

“Pero al mismo tiempo, tienen que considerar cómo los ve la sociedad. No pueden tirar a su
hijo porque su pareja muere, y tampoco porque se están volviendo a casar. Escuché que se
trató de ponerme en un hogar de adopción, pero al final sintió que no podía aceptar que la
gente hiciera críticas como el que es imperdonable abandonar a una niña pequeña por sus
propias razones egoístas.

“………”

¿Qué se supone que debo decir a eso? Pero.

Esas cosas sucedían, incluso en familias relacionadas por sangre. De hecho, se podría decir
que es raro encontrar una familia donde todo sea fácil de superar, todas las familias esconden
algún tipo de discordia y tensión.

“Es por eso que traté de convertirme en una buena chica.” Dijo Hanekawa. “Traté de
convertirme en una representante de clase seria desde que estaba en la escuela primaria, y
creo que lo logre. Qué niña tan educada soy, ja, ja.”

Esas palabras.... me recuerdan a lo que más tarde oiría sobre la vida de Senjougahara Hitagi.
Senjougahara Hitagi en la escuela media, y Senjougahara Hitagi en la escuela secundaria...

¿Eso es lo que significaba? ¿Compartían más que un peinado?

Pero las diferencias entre ellas eran igual de claras.

Porque los padres pueden ser responsables de lo que hacen sus hijos, pero los hijos no tienen
ninguna responsabilidad por lo que hacen sus padres.

“Tal vez no sea una buena chica. Una chica normal.” Hanekawa continuó mientras yo
guardaba silencio. “Cuando tienes una situación familiar complicada la gente lo ve como una
especie de trauma y asumes todas esas cosas sobre ti por eso, ¿sabes? No quería que la gente
pensara de mí de esa manera. Es por eso que... Decidí que no iba a dejar que algo así me
cambiara.”

Nunca cambio.
No importa qué.

“Estaba siendo una estudiante normal de secundaria, ¿sí?”

“No... no estoy tan seguro de eso.”

Los estudiantes normales de secundaria no obtienen los puntajes más altos en los exámenes
de simulación a nivel nacional.

No pueden vivir vidas tan impecables, tan irreprochables.

Lo quise decir en broma, como una manera de despejar el aire, pero...

“Quizás tengas razón.” Dijo Hanekawa con decepción en su voz. “Tal vez siempre termina
filtrándose, tal vez se pueda saber cuándo las personas que no son normales se obligan a
actuar como si lo fuesen. Tal vez terminan por excederse.”

“Eso no es algo malo, ¿verdad? Sólo significa que estás viviendo una vida mejor.”

“No, no es así. Quiero decir, qué típico. Debido a su nacimiento, debido a su educación,
ahora ella es una niña tan buena y de buen comportamiento.”

Recuperándose de su desgracia para trabajar duro.

Recuperándose de la adversidad para trabajar duro.

Sí, ese tipo de estereotipo existía, pero...

“Mm, bueno.” Dijo ella. “Tal vez en verdad ese sea mi caso.”

“Pero entonces...”

Tal vez realmente fue eso.

Bastante irónico.

No había otra forma de decirlo.

Pero entonces, eso no era algo malo.

“¿Qué estás haciendo, Araragi-kun?”

Repentinamente.

Hanekawa cambió el tema.


Su expresión también había cambiado completamente, de nuevo a su sonrisa normal y
sociable.

Su expresión habitual, que era lo que la hacía tan espeluznante.

Piensa en la conversación en la que estábamos.

“Ahora mismo estamos en la Semana Dorada, ¿no la estás utilizando para estudiar?”

“Sí, es la Semana Dorada... ¿Por qué debería pasarla estudiando?”

“¡Jaja!” Hanekawa dejó escapar una risa alegre. “Uso mis vacaciones, para ir de paseo.”

“……”

“No quiero estar en casa. Solo la idea de pasar todo el día junto con esos dos padres míos,
me estremece.”

“¿Tienes... una mala relación con ellos?”

“Es un problema más grande que eso.” Dijo Hanekawa. “No tenemos una relación. Mis
padres y yo… y también mi papá y mi mamá. Somos una familia, pero no hablamos.”

“¿También papá y tu mamá?”

“Sí. Tal vez sea por mi culpa, pero a partir de cierto momento fue como si ninguno de los
dos tuviera afecto por el otro. Creo que sería mejor si se separaran, pero una vez más, la
sociedad, tienes que preocuparte por cómo te ve la sociedad. Están esperando hasta que sea
adulta, es lo que dicen. Aunque no tienen ninguna relación conmigo en absoluto, ja, ja.”

No te rías.

No deberías estar hablando de ese tipo de cosas… mientras te ríes.

No era como ella.

Pero, ¿qué sería cómo ella?

Si la Hanekawa normal era la respetable y honorable Hanekawa Tsubasa... ¿Esta Hanekawa


no era esas cosas?

De cualquier manera, entonces me di cuenta de algo.

Me lo imaginaba.
Por qué había conocido a Hanekawa durante las vacaciones de primavera.

Si usaba sus vacaciones para salir a caminar, eso no significaba solo la Semana Dorada.
Paseaba durante las vacaciones de primavera, las vacaciones de verano y mucho más; que
me encontrara con ella allí ese día era, por supuesto, una coincidencia, pero también había
una razón detrás de la coincidencia.

“Por eso uso mis vacaciones para salir a caminar.”

“... Creo que estás siendo demasiado considerada.” Dije, ofreciendo una opinión inofensiva.

Era lo único que me atrevía a decir.

Odiaba lo superficial que era.

Una familia que no se relacionaba entre sí tampoco era algo raro.

Lo que era raro era que una chica como Hanekawa hubiera crecido en ese tipo de familia,
aunque también estaba seguro de que odiaría ese tipo de visión tendenciosa.

Sentí que ahora tenía una comprensión decente de por qué Hanekawa odiaba ser tratada
como una celebridad. Y por qué insistió en pensar en sí misma como una chica promedio
cuya única cualidad notable es ser un poco seria. Esa, de nuevo, pudo ser mi imaginación
hablando, un sentimiento erróneo de comprensión, o algo así como simpatía...

“……”

Pero.

Fue entonces cuando de repente me di cuenta.

La inimaginable y complicada situación familiar con la que Hanekawa Tsubasa, estudiante


modelo y representante de clase entre los representantes de clase, tuvo que lidiar... La he
entendido. Había sido un poco complicado para mí entenderlo al principio, pero ahora tenía
una idea clara gracias a su convincente explicación. La idea de que sus antecedentes podrían
haber actuado como la columna vertebral de su personalidad, su naturaleza excesivamente
seria (y cómo no quería que la gente pensara eso)... Yo también había sido persuadido de
eso. Pero.

Pero.

Eso no explicaba por qué la mitad de su cara estaba cubierta por una gasa.
No comenzó a explicar eso.

¿No era eso de lo que se suponía que estábamos hablando?

“... Claro.” Dijo ella.

Y otra vez... Hanekawa parecía haber fallado.

Esta vez parecía que había fallado simple y llanamente.

“¿Qué estoy diciendo...?” Murmuró ella. “De hecho, solo me estoy desahogando.”

“Quiero decir, estoy bien con eso.”

“¿Prometes que no le dirás a nadie?”

Ella no tenía que decirme eso.

Ella sólo había pasado por encima de mí y no necesitaba ir tan lejos... estaba bien si todo lo
que había hecho era desahogarse.

Pero no importaba con quién estuviera, trataba de ser irreprochable, de ser correcta, de ser
sincera, así que ahora tenía que decirme por qué estaba puesta la gasa.

Aunque no era necesario.

Aunque no tenía derecho a escucharlo.

“… Lo prometo.”

“Mi papá me golpeó esta mañana.” Soltó las palabras con una sonrisa.

Una sonrisa tímida, casi avergonzada.

Eso también fue lo mismo de siempre.

Parece que solo puedo notar estas cosas en retrospectiva, pero creo que eso pudo haber sido
la última gota que provocó a Hanekawa Tsubasa. No es que su padre la golpeara, sino
cuando ella me lo contó.

Eso lo aprendí de todo esto.

Si eso no fue estresante, ¿entonces qué lo es?

“¿Te golpeó? Eso es…”


Pero en ese momento no me di cuenta.

Me sorprendió.

No, podrías ir tan lejos como para decir que estaba asustado.

¿Un padre golpeando a su propia hija? Parecía... imposible para mí.

No, nunca había considerado la posibilidad. Pensé que era algo que inventaban en dramas y
películas. Independientemente de las relaciones sanguíneas o situaciones familiares, era algo
que nunca debería suceder.

Miré la cara de Hanekawa.

El lado izquierdo oculto.

No fue una herida por demasiado contacto amoroso y juguetón…

“¡Eso no está bien!”

Tuvo que lidiar con la discordia y la tensión en casa.

Eso en sí mismo no fue trágico.

Todos llevan algún tipo de carga… así como no debes discriminar a alguien por su
nacimiento o educación, tampoco debes compadecerlo o envidiarlo. Incluso si son problemas
obvios y notables, no es necesariamente trágico ni nada, eso es cierto.

Pero no puedes golpear a nadie. Eso no estaba bien.

Hanekawa explicó por qué.

Por qué la golpearon.

No empezó a apaciguarme a mí, un tercero, pero sabía muy bien que no debías interponerte
en la vida familiar de otra persona. Ya sea que estuviera apaciguándome o no, mis
sentimientos no tenían nada que ver con ello.

Básicamente, a veces lo mismo también sucedía en la escuela.

Hanekawa siempre quiso estar en lo correcto, por lo que no era raro que se enfrentara con los
demás, por casualidad, esta vez término enfrentando a su padre.

Y él casualmente le respondió con violencia.


“Pensé que habías dicho que casi no te relacionas con tu familia.”

“Casi no, prácticamente nada y tal vez pensé que podría comenzar a hacerlo. A pesar de todo
se ha equilibrado. Supongo que eso me pone en el mal camino. Quiero decir, sólo piénsalo,
Araragi-kun. Si tuvieras unos cuarenta años, y una completa extraña de diecisiete años
empezara a hablarte como si lo supiera todo. No te culparías si te enfadaras un poco, si
perdieras los estribos, ¿no crees?”

“¡Aun así!”

¿Una completa extraña de diecisiete años? ¿Qué se supone que significa eso? ¿Por qué ella
lo diría de esa manera?

Puede que no estuvieran relacionados por sangre, pero ella vivía en la misma casa que él
desde que tenía tres años, ¿no eran familia?

“¿Estás diciendo que no puedes culpar a alguien por volverse violento? ¿Estás segura de que
deberías estar diciendo eso? ¿No es lo más imperdonable que...?”

“¿P-Por qué no? Sólo fue una vez.”

Había perdido mis estribos.

No sabía por qué, probablemente estaba enojado por la forma en que alguien había tratado a
Hanekawa, mi salvadora. Pero todo lo que hizo mi enojo fue arrinconarla. Ella estaba
tratando de llegar a algún tipo de compromiso, mientras que yo solo estaba blandiendo la
verdad pura y sin refinar hacia ella.

La verdad duele.

Siempre lo hace…

Sólo fue una vez, dijo ella.

En todo caso, no debería haberle hecho decir eso.

Lo que es malo es malo, lo que es imperdonable es imperdonable, era el estilo de Hanekawa


Tsubasa ser franca sobre esas cosas, ya fuera un amigo o un profesor. Así que si le hubiera
dicho sin rodeos a uno de sus padres que lo que es malo es malo, lo que es inexcusable es
inexcusable, entonces, incluso si la hubieran golpeado por ello, si eso fuera todo, habría
podido mantenerse erguida y seguir siendo Hanekawa Tsubasa.
Y todavía.

La hice decir eso.

¿P-Por qué no? Sólo fue una vez…

Las palabras.... eran un rechazo a toda su vida.

Eran un rechazo de sí misma.

“Lo prometiste, Araragi-kun. No le dirás a nadie, lo prometiste, ¿de acuerdo?”

Nunca vuelvas a mencionarlo.

No a la escuela.

No a la policía.

No, más que nadie, no a Hanekawa.

“P-Pero, ¿cómo se supone que debo prometer algo así...?”

“... Por favor, Araragi-kun.” Dijo. Entonces, tal vez porque pensó que una promesa no era
suficiente, inclinó la cabeza. “No le digas a nadie sobre esto, por favor. Haré cualquier cosa
si te quedas en silencio.”

“……”

“Por favor.”

“Sí. Está bien...”

Por el modo en que se abalanzó sobre mí, era la única forma en que podía responder.

No pude seguir presionándola más. No después de haber pedido algo tan absurdo como eso,
no después de haberla hecho pedir algo tan absurdo como eso.

Ella me había rechazado.

Y si fui rechazado, no podría ayudarla.

La gente se salvaba sola, eso es todo.

“Pero al menos ve al hospital. Tú misma te pusiste esa gasa, ¿no? Admito que eres buena
con tus manos, pero aun así, eso parece un poco anormal.”
“Sí... está bien. Supongo que de todos modos no haré nada durante la Semana Dorada, así
que tal vez haga que un médico lo examine. De vez en cuando debería usar mi seguro.”

“Y también, si pasa algo, llámame. Iré y te ayudaré, sin importar dónde esté o lo que esté
haciendo.”

“Jaja.” Se rio Hanekawa. “¿De dónde vino eso? Mírate, sonando genial.” La misma sonrisa
que siempre. “¿Qué quieres decir con ‘cualquier cosa’?”

“Bueno, ya sabes…”

“Sí, lo entiendo, Araragi-kun.”

Entonces ella añadió:

“Te llamaré de inmediato si alguna vez sucede algo. ¿También estaría bien un mensaje de
texto?”

Eso fue lo que dijo, pero...

Al final, no recibí una sola llamada o mensaje de texto de Hanekawa durante toda la Semana
Dorada.

Dije que estaría allí cuando ella me necesitara.

Y sin embargo…

Hanekawa, la mujer a la que debía mi vida, nunca me necesitó en ese momento, quería
compañía, pero sólo desahogarse, para ayudarla a sentirse mejor. No me necesitaba, pero de
todos modos yo estaba allí siendo inútil.

Lo que necesitaba era un gato.

Ese gato.

Hay una razón tras la aparición de una excentricidad.

Después de eso, nos alejamos de nuestra conversación anterior y discutimos nuestros futuros
planes para la clase. Hablamos sobre todo del Festival Cultural. Cuando lo hicimos, nos
encontramos con un gato que había sido atropellado por un automóvil. Parecía estar perdido
ya que no tenía collar. Un gato blanco sin cola. No sabíamos si era una raza nacida sin cola,
o si su cola había sido arrancada durante su vida en la calle. Un gato blanco, incluso podría
parecer plateado dependiendo de cómo mirases, pero el color de su pelaje se había arruinado
en muchos sentidos, a causa de estar de manchado con su propia sangre. Estaba en una forma
terrible, probablemente corrió una y otra vez después de la primera vez de ser golpeado por
algún automóvil, y Hanekawa salió a la calle desde la acera y recogió al gato como si fuera
algo completamente natural.

“¿Me puedes ayudar?”

Nadie rechazaría semejante petición de Hanekawa.

Enterramos al gato en una montaña cercana, y eso pone fin al prólogo, el primero de nuestros
nueve días de pesadilla, el veintinueve de abril, no sé cuánto de este primer día o de la
conversación recuerda Hanekawa, ella era ella misma, así que tal vez recuerde haber
enterrado al gato, pero es probable que haya olvidado todos los detalles cuando perdió sus
recuerdos. Lamentablemente, no hay forma de que esté seguro, su mente es tan aguda como
una trampa de acero, por lo que lo resolvería tan pronto como intentase comprobarlo.

Ahora que la introducción está fuera del camino, el resto de la historia es simple.

Al día siguiente, aunque sin nada en particular que hacer allí, estaba tan aburrido que me
dirigí a la escuela abandonada donde vive Oshino, revisé a Shinobu (aunque todavía no se
llamaba Oshino Shinobu) y conversé sobre cualquier cosa con Oshino.

En algún momento, en la conversación mencione al gato que enterramos el día anterior.

No porque fuera algo de lo que hablar.

Sino porque tenía un mal presentimiento al respecto.

Un sentido de similitud, al infierno que experimenté durante las vacaciones de primavera.

“Araragi-kun. Por casualidad...” Los ojos de Oshino se entrecerraron cuando preguntó para
asegurarse de algo. “¿Este era un gato plateado?”

Al final la conversación fue productiva.

Nos permitió capturar la excentricidad, un Gato Entrometido que se transformó en Black


Hanekawa de cabello y orejas blancas, llamada así por Oshino Meme, el 7 de mayo, el
último día de la Semana Dorada, después de haber pasado noche tras noche causando
estragos en la ciudad a su antojo.

Nueve días.
Habría sido peligroso si hubiera llegado a un décimo día.

Aparentemente.

Una resolución rápida, dependiendo de cómo lo vieses, pero lo hicimos a tiempo. Con la
ayuda de Shinobu (su ayuda fue lo que le valió el nombre de Oshino Shinobu), pudimos
aislar al Gato Entrometido que había poseído a Hanekawa… y resolver el problema.

Incluso se podría decir que con una facilidad inesperada.

Cuanto más complejo sea el problema, más probable será que se resuelva con una facilidad
inesperada, ya que resolver el problema no significa que desaparezca.

Un trance.

Hanekawa no tenía recuerdos de la época en que ella fue Black Hanekawa.

Eso significaba que no sabía que las primeras personas que fueron atacadas por Black
Hanekawa fueron sus propios padres...

¿Esos recuerdos también habían vuelto a ella?

Eso es lo que me preocupaba.

“Oh, ¿el tema de su memoria?”

Cuando Black Hanekawa se mostró una semana y un mes después de la Semana Dorada,
logramos atarla inmediatamente (aprovechando las lecciones aprendidas de la última vez),
escuchar lo que tenía que decir (apenas significaba algo para nosotros con las incesantes
variaciones de maullidos y ronroneos que usaba cuando hablaba) y dejar su cuerpo atado en
el aula (ignorando todas las maldiciones que “ella” nos lanzaba). Luego Oshino y yo nos
trasladamos a una de las otras dos aulas en el cuarto piso... donde el hombre rápidamente se
metió un cigarrillo sin encender en la boca y comenzó a hablar.

Ahora estábamos cara a cara. Ahora éramos Oshino y yo los que hablábamos.

“No creo que sean fatales, sus recuerdos mientras ella es Black Hanekawa no son
compatibles con ella como Representante-chan. Sin embargo, sus recuerdos perdidos como
Representante-chan pueden ser un problema. Dudo que esta vez desaparezcan, porque a
diferencia de la última vez, ella está completamente consciente de su condición.”

“¿Es malo si ella es consciente de ello?”


“En sí mismo eso no es tan malo. El problema es que estamos hablando de nuestra
Representante-chan, Araragi-kun. Como sabes, ella es demasiado sabia. Su cerebro funciona
unas cien veces más rápido que el de una persona promedio. Dale los materiales y será fácil
para ella conectar todos los puntos y construir los recuerdos por su cuenta.”

“¿Construir los recuerdos?”

“Pudimos borrar todos los recuerdos de la última vez, tanto los de Black Hanekawa como la
de nuestra Representante-chan; la dejamos sin una pista. Nos las arreglamos para sellar toda
la excentricidad, lo que naturalmente significa que los recuerdos relacionados con ella
desaparecieron, en otras palabras, cuando nos deshicimos del efecto, también nos las
arreglamos para deshacernos de la causa. Así que está bien si sus recuerdos son incoherentes
porque ni siquiera se da cuenta de que hay algo que necesita ser coherente. Esta vez, sin
embargo, podría decir que se convertirá en un problema que rellenase los espacios en blanco.
Así como cuando en una pregunta faltan algunas palabras importantes aquí y allá, te sería
imposible dar una respuesta perfecta, ¿no? Pero si eres lo suficientemente perceptivo podrías
averiguar el tipo general de palabras que deberían aparecer, ¿verdad?”

“Oh, es como una prueba de lengua y literatura.”

No me fue bien en esa materia.

Pero... Hanekawa lo hizo bien en todas las materias.

“No hay nada que podamos hacer al respecto, pero deberíamos pensar en ello como un lado
positivo que sus recuerdos de la última vez no volverán. Aunque a ella le parecerá más como
una nube oscura.”

Podríamos llamarlo la última vez que tuvimos un golpe de suerte.

Pero esta vez fue un resquicio de esperanza.

“Desde mi punto de vista, sin embargo, podría ser algo bueno para ella... al haber tratado con
una excentricidad hace más fácil que en el futuro las excentricidades se sientan atraídas hacia
ti. Es lo que estás experimentando ahora mismo, Araragi-kun... así que si también le va a
pasar a ella, entonces es importante que sepa sobre las excentricidades.”

Tienes que ser consciente, dijo Oshino.

Y... tal vez tenía razón al respecto.


Hay algunas cosas que no puedes manejar sin antes conocerlas. Mientras que otras cosas son
inmanejables incluso si las conoces, conocerlo significa que al menos puedes huir de ellas.

En otras palabras, así es como se mantiene un equilibrio.

“Pero... Oshino.” Dije mientras pensaba, sobre Black Hanekawa, todavía ataba dos salones
de clases. “¿Por qué, esa cosa, apareció de nuevo? Pensé que lo habíamos sellado durante la
Semana Dorada. ¿No se suponía que nunca volvería a aparecer?”

“No dije eso.” Oshino inclinó la cabeza. “Un Gato Entrometido, verás, es un poco diferente
de las otras excentricidades que conoces. Si tuviera que compararlo con cualquiera, podría
ser muy parecida al mono de Lesbi-chan.”

“Oh... supongo que ambos son bestias.”

“Sí. Es solo que, ¿no te lo dije la última vez? Para describirlo de una manera que esté en
línea con la realidad, el Sawarineko es un trastorno de personalidad múltiple. Por así decirlo
Black Hanekawa es la otra cara de Representante-chan. Las excentricidades están aquí, allá y
en todas partes, pero en última instancia, en el caso del Gato Entrometido sólo existe dentro
de nuestra Representante-chan. Es sólo un detonante, un médium, el problema es el estrés
que soporta.”

Estrés.

Según los estudiosos, aparentemente es la respuesta del cuerpo cuando trata de responder a
cada demanda.

“Para cuando Black Hanekawa se enfrentó a mí la última vez, ya se había vuelto loca
durante tanto tiempo que se podría decir que se había librado de la mayor parte de su estrés,
así que sellarla fue fácil. Pero sellarla es todo lo que hicimos. No es como si hubiera
desaparecido. Puede que hayamos hecho desaparecer la excentricidad, pero no es como si
hubiéramos hecho desaparecer la fuente de su estrés. Así que esa cosa vuelva a subir a la
superficie una vez que se acumule suficiente estrés, como una burbuja.”

“Estrés...”

“En esta ocasión pregunta es: ¿cuál es la fuente del estrés?”

La fuente del estrés.

En el caso de Hanekawa, era por supuesto su familia.


Al menos, eso es lo que pensaba.

“Yo también pensé lo mismo al principio, pero ¿qué opinas tú, Araragi-kun? Hace no mucho
se deshizo del estrés al finalmente desencadenarlo luego de mantener la compostura durante
diecisiete años, ¿realmente volvería a acumular tanto en tan solo un mes?”

“Bueno, supongo que no.”

“Y afortunadamente, no ha sido víctima de la violencia de ninguno de sus padres, ¿verdad?”

“No, no lo creo.”

Las primeras personas a las que atacó.

Su padre y su madre, sus padres.

Las cosas habían vuelto a la normalidad, a una familia sin relaciones que no se comunicaba,
un grupo de humanos que simplemente vivían juntos. Eso tuvo que ser estresante para
Hanekawa.

Pero Oshino tenía razón, un mes era demasiado pronto.

Tal vez si la hubieran golpeado de nuevo.

“Le colocamos un cascabel alrededor del cuello, y creo que eso valió la pena.” Dijo Oshino.
“Nos permitió detectar al Gato Entrometido en su fase inicial. ¿Ves? Nunca se puede ser
demasiado cuidadoso. Para ser honesto, nunca pensé que necesitaríamos usarlo. Fui
descuidado. Pensé que incluso en el peor de los casos, esperaría hasta que cumpliera veinte
años. La historia que escuché hizo que pareciera que sus padres se iban a divorciar una vez
que se convirtiera en adulta, y estoy seguro de que su plan es dejar la casa para entonces, y
es por eso que no me molesté en decirles nada a ninguno de los dos.”

“Veinte, eh... Entonces, lo opuesto a Kanbaru.”

“La mayoría de edad es una medida fácil de entender.” Comentó Oshino con una sonrisa
amarga. “Sí, y ella se habría vuelto lo suficientemente fuerte como para evitar que la
aberración la poseyera.”

“Oh... De todos modos, Oshino. ¿De qué cascabel estás hablando?”

“Los dolores de cabeza. También se estaba quejando de un dolor de cabeza durante la


Semana Dorada, ¿recuerdas? Así que puse una pequeña trampa, aunque al menos debí de
compartir eso contigo. Así que, dímelo otra vez, ¿cuándo empezaron los dolores de cabeza
de Representante-chan?”

“Mmm, bueno… ¿hace como un mes?”

“Huh... Y no eran tan malos al principio, pero luego... Me pregunto qué podría haber sido,
pero no parece que tengamos tiempo para determinar la fuente del estrés. Podría ser una
mezcla de múltiples causas, y sigo sin entender muchas de las palabras que ronronea esa
Gata Lujuriosa.”

“¿Incluso tu no la entiendes?”

¿No fue él quien dijo que sería más rápido preguntarle directamente?

“No, no lo hago. Teníamos muchas pistas, pero cuando se trata de los detalles exactos... Es
un asunto delicado, no es algo de lo que puedas hacer conjeturas al azar. Supongo que al
final del día estamos tratando con el cerebro de un gato. Pero también creo que podría estar
haciéndose la tonta, no podemos bajar la guardia, porque por debajo de todo eso, es
Representante-chan.”

“No quieres meterte con el lado malo de esa mujer.”

“No nos hemos metido con su lado malo.”

Black Hanekawa.

Otra Hanekawa Tsubasa, creada por su propio corazón y mente.

Una personalidad contrastante, o mejor dicho, una que sirvió como contraparte.

Además de ayudar, el carácter “Tsubasa-翼” también connotaba el emparejamiento de alas


dispares.

“Pero incluso si identificáramos la causa, ¿valdría para algo, Oshino? Ya sea su familia o
algo más, tratar con ello es la mejor manera de resolver esto, seguro, pero no es como si
alguno de nosotros pudiera hacer eso.”

La última vez fue igual.

¿Los problemas familiares de Hanekawa? ¿Cómo podríamos resolver algo así? Ni siquiera
podía imaginar lo que tendría que pasarle a su familia para resolver el problema. Alguien
ajeno no tenía lugar en sus problemas personales.
Eso sería una verdadera arrogancia.

“Y a diferencia de los casos de Senjougahara y Sengoku.” Señalé. “Esta excentricidad


perjudica a los demás... Aunque podría ser similar a la de Kanbaru, también es diferente de
eso. Como antes, creo que nuestra única opción es tratar los síntomas como una medida
paliativa.”

“Sí. Tienes toda la razón, pero. Sí.”

Oshino estaba siendo obviamente evasivo.

No era como él.

¿Todavía tenía algo que decir sobre el Gato Entrometido? No, sentí que había estado
actuando mal todo el día, incluso antes de que se lo comentara. Algo era extraño desde el
momento en que lo vimos al aire libre en una mañana soleada...

“¿Qué pasa, Oshino? Estás siendo vago. ¿Estás a punto señalar una nueva falla que me
encontraste? Quiero decir, entiendo que dadas las circunstancias no puedes ayudarme con
esto tanto como lo hiciste con Sengoku…

Había tenido que tratar con ella por un tiempo, y sabía que Hanekawa no era una simple
víctima como Sengoku, sabía que Hanekawa confiaba en esta excentricidad. Oshino era
alguien que odiaba eso.

Confiando en los demás siempre que los necesites.

Luego tratarlos como una carga una vez que no lo haces.

Necesitas tener más respeto que eso, diría Oshino.

“¿Pero no estás obligado a ayudar esta vez?” No obstante, presioné. “Aceptaste sus cien mil
yenes, y sin embargo nos enfrentamos a lo que parece ser la misma condición, ella
prácticamente podría demandarte por incumplimiento de contrato ya que se supone que eres
un especialista en esto. Necesitabas darle más cuidados. Si me hubieras hablado del cascabel
que le pusiste, entonces...”

“Bueno, supongo que puedes decir eso.”

Sorprendentemente, Oshino no discutió conmigo.

Fue una reacción impensable.


“Aunque tengo que decir algo, Araragi-kun, las orejas de gato se ven bien en ella. Jaja,
¿sabes a qué manga me recuerda? Neko Neko Fantasia. Ya sabes, el que tenía aquella chica
con orejas de gato. Fue escrito y dibujado por, um, Neko Nekobe…”

“¡Neko Nekobe dibujo y escribió Goldfish Warning! No confundas ambas cosas solo porque
incluyen la palabra para ‘gato’... Espera, Oshino, ¿estás tratando de ocultar algo?”

“¿Qué quieres decir con ocultar? Nunca haría algo tan engañoso. Ah, sí, hablando de orejas
de gato. Arale, del Dr. Slump, solía usarlas todo el tiempo, ¿no es así? Ahora que lo pienso
ese manga en verdad está fuera de tu época. Una niña pequeña con cabello morado y un
extraño modo de hablar que también es un robot y una hermana pequeña, con orejas de gato
y gafas, ¡todo en uno!”

“Nunca pensé en eso, pero sí, tienes razón... quisiera decirte que ese es un buen análisis, pero
¿tiene algo que ver con Hanekawa?”

“Ah, uh, mmm...”

Estaba tratando de pasar por algo alto...

Definitivamente lo estaba...

“Hey, Oshino. Detén esto y...”

“¡Kupipo!”

“¿¡Es esa una manera para que un adulto maduro y experimentado pase por alto cualquier
asunto!?”

“Ehh, eso es lo más adulto para ti.”

“¡Entonces no quiero crecer nunca!”

Pero cambiar de tema recurriendo a otra referencia del Dr. Slump, ¿exactamente de qué
estaba tratando de distraerme?

No pude entenderlo. Y si no podía, no tenía sentido seguir pensando en ello. No tenía más
remedio que mantener la conversación, incluso si estaba arrastrándola a lo largo.

“De todos modos, Oshino, date prisa y trae a Shinobu. Si nos enfrentamos a ese Monstruo
Felino, nuestra única opción es que ella se ocupe de eso, ¿no? Estoy seguro de que Shinobu
se va a mostrar reacia, pero si le ofrezco mi sangre por su ayuda…”
“Hmmm. Sí, tal vez. Pero quien sabe, los desastres siempre ocurren en los peores momentos,
la miseria siempre viaja acompañada.”

“……”

Se estaba volviendo demasiado evasivo para mí. Deseaba que tomara esto en serio. Estaba
entrando en pánico.

Esto era sobre Hanekawa.

La última vez no me necesitaron, pero esta vez específicamente ella me pidió ayuda, así que
tenía que estar ahí para ella.

Estaría allí cuando ella me necesitara.

“... ¿Eh?”

Y entonces.

Ahí fue cuando lo volví a recordar, cierto, tenía la intención de preguntarle algo a Oshino.
Con respecto a lo que más temprano Hachikuji me había contado sobre Shinobu, aunque
ahora tenía una sensación de hundimiento al respecto.

¡No es que alguna vez haya tenido una gran sensación sobre esto!

“Hey, Oshino... Hay algo que quería preguntarte.”

“Que coincidencia. Hay algo que quiero que me preguntes.”

“¿Le paso algo a Shinobu?”

“Sí, justo era eso.” Respondió Oshino, con una sonrisa renovada en su rostro, como si al fin
hubiera sacado algo de su pecho, como si fuera un criminal al que finalmente le permitieran
confesar sus crímenes.

“Nuestra Shinobu se ha ido en un viaje de autodescubrimiento.”


007
Antes de que lo supiera era de noche.

Corría por la ciudad en mi bicicleta, yendo a todos los lugares en los que podía pensar, pero
eso no era suficiente. Hice una segunda vuelta de la misma ruta, recorriendo literalmente la
ciudad, pero aun así termine con las manos vacías, antes de darme cuenta de lo cansado que
estaba.

No había comido nada, ni tampoco bebido.

No había descansado, solo había pedaleado en mi bicicleta, durante nueve horas.

Honestamente, me sorprendió. Esto era lo que tenía que hacer antes de que mi cuerpo se
cansara, y aunque el otro día había alimentado con mi sangre a Shinobu, la mayoría de los
efectos de eso deberían haberse gastado en la curación de mis brazos y piernas…

Una burla humana de un vampiro.

Una burla vampírica de un humano.

Ya no sabía cuál era yo.

Oshino Shinobu.

Un vampiro que se había escapado de casa, ¿podría ser más ridículo? Lo que es más, ella
había desaparecido con solo la ropa que tenía puesta y sin un centavo a su nombre,
prácticamente se había fugado. ¿Qué tipo de vampiro era ella?

Los desastres siempre golpean en los peores momentos.

La miseria siempre viaja acompañada.

Eso fue exactamente lo que había sucedido aquí.

Oshino no se había dado cuenta de que Shinobu no estaba cerca hasta esa mañana, pero
cuando lo recordó, se dio cuenta de que no la había visto desde la tarde del día anterior.

Según el testimonio de Hachikuji, ella vio a una niña rubia por la carretera cerca del Mister
Donut a las cinco de la tarde del día anterior, lo que significaría que Oshino Shinobu ya
estaba ocupada huyendo.

Ella era una niña. Ella no podía ir tan lejos.


Solo había pasado un día, y ahora Shinobu ni siquiera era un vampiro legendario, ni nada por
el estilo. Ella era, en su mayor parte, una niña ordinaria, una con un cuerpo mucho más débil
que el mío. Una niña ordinaria, no, sin mí ella sería incluso más débil que eso. Las pocas
facultades que le quedaban estarían selladas.

Con el agotamiento llegó el hambre.

... Espera.

Le pudo ocurrir eso, ella podría haber estado caminando junto a un Mister Donut, pero no
tenía un centavo a su nombre.

¿Eso significaba que estaba sintiendo hambre?

¿Sola, en algún lugar de esta ciudad?

“……………………”

Mientras aceleraba mi bicicleta, casi me estrelle contra Hachikuji Mayoi mientras caminaba
por la calle, era, tal vez, un poco después del mediodía. Fue nuestro segundo encuentro ese
día. Por mucho que quisiera alabar mi buena fortuna por encontrarme con Hachikuji dos
veces en un día por casualidad, la única manera en que podía verla, no había tiempo. Aunque
a diferencia de la primera vez, esta segunda reunión no fue pura casualidad, estrictamente
hablando, estaba corriendo por la ciudad con un abandono imprudente, así que, por supuesto,
tarde o temprano me la encontraría.

“Araagi-san.”

“Ahora cambiaste una silaba por una vocal...”

“Lo siento, me mordí la lengua.”

Después de intercambiar nuestros saludos, le pedí a Hachikuji que me explicara con más
detalle lo que había visto el día anterior.

“Ahora que lo mencionas.” Dijo. “Ella, de alguna manera, se veía solitaria.”

“¿Solitaria?”

“Sí.” Afirmó con una expresión seria. “Casi como si fuera una niña perdida.”

Una niña perdida.


Las palabras fueron particularmente convincentes al provenir de Hachikuji, una chica que
había estado perdida en la calle por mucho tiempo.

“De acuerdo.” Asintió. “Haré lo que pueda para ayudarte a buscar esa niña.”

“¿Lo harías? Te lo agradecería.”

“Sí. Verás, Araragi-san, buscar a un niño perdido requiere atención cuidadosa y mano de
obra. Trata de hacerlo todo solo y será como buscar una momia en una pirámide.”

“¿¡Una pirámide!? ¿¡Así de grande!?”

“Entiendo que a menudo te sientes desconcertado, Araragi-san, pero mantente firme. No


puedes permitirte estar demasiado confundido.”

“Sé que te equivocas mucho con las palabras, ¡pero ahora mismo estás cruzando la línea!”

“Debes mantener la calma. Cuando buscas a un niño perdido, el tiempo es funcional.”

“¡Estuve de acuerdo contigo hasta el final! ¡Pero vamos, el tiempo es esencial!”

“No podré acercarme a ella si la encuentro, pero si lo hago me pondré en contacto con tu
teléfono celular, desde un teléfono público o similar.”

“... ¿Sabes cómo usar un teléfono público?”

“Por supuesto que sí. Soy muy buena con los dispositivos electrónicos.”

“Eso no es lo que dijiste esta mañana…”

“¿De qué estás hablando? Tengo todas las herramientas necesarias para ver la televisión
incluso después del 2011.”

“Oh, así que al decir que eres ‘buena’ te refieres a que conoces la radiodifusión digital...”

“Un ‘1seg’ es algo que comes al desayuno, ¿cierto?”

“¡Ella es una idiota!”

Bromas a un lado.

Por buena o mala que fuera con la tecnología, debe poder usar un teléfono público, ¿verdad?
Estaba en la única situación en la que me sentía feliz de vivir en el campo, donde los
teléfonos públicos todavía estaban vivitos y coleando. Sí, esta era la ciudad en la que vivía,
un lugar donde todas las tiendas de conveniencia que aparecían en el mapa tenían un
estacionamiento e incluso los salones de pachinko no prosperaban.

De todos modos, Hachikuji y yo nos separamos.

Justo cuando comencé a sentirme más positivo, ya que si me había encontrado a Hachikuji,
seguramente también me encontraría con Shinobu, pensé en algo.

Aunque apreciaba su oferta de ayuda, Hachikuji tenía casi la misma edad que Shinobu (tal y
como se veía ahora). No podía permitirme esperar demasiado de ella. Sí, hay algunos lugares
en los que sólo los niños piensan buscar, esconderse o entrar, y ella puede ayudar en ese
sentido. Pero aunque su campo de actividad podría haber sido mucho más amplio que el de
la niña promedio, todavía era limitado. No podía hacer mucho y llegaría tan lejos como una
niña puede.

Mientras tanto, necesitaba mano de obra.

Al menos en eso Hachikuji tenía razón.

Y entonces…

Llamé a la casa de Sengoku cuando eran cerca de las cuatro. Iba a mi antigua escuela media,
así que sabía que ya habría regresado a menos que hubiera tomado un desvío en su camino
de regreso. Sí, y creo que ella me dijo que estaba en el club de volver a casa.

Mis posibilidades no eran tan buenas, pero afortunadamente ella estaba en casa.

“Oh, Koyomi-onii-chan.”

La voz de Sengoku me sonaba animada. Parecía más enérgica cuando hablaba por teléfono,
donde no tenía que estar cara a cara con otra persona. Pensé que pronto debería tener un
teléfono celular.

“¿Ya me estás llamando?” Ella dijo. “Estoy tan feliz.”

“Sí... perdón por llamarte tan pronto. Umm...”

Uhh, ¿por dónde debería empezar?

A diferencia de cuando hablé con Hachikuji, necesitaba explicarle a Sengoku todo lo


ocurrido desde el principio...

“¿…? ¿Qué pasa, Koyomi-onii-chan?”


“Oh, er... bueno.”

“Cálmate. ¿Qué pasó?” Preguntó Sengoku, sonando preocupada por lo poco claro que estaba
siendo.

“Bueno, ya ves, supongo que lo que pasó es…”

“S-Solo cálmate. Cálmate. ¡Oh! Ya sé. Te contaré una historia divertida.”

“…………………”

No podía creer que ella dijera eso.

¿Cuánta confianza se necesita para decirle a alguien que la historia que estás a punto de
contar es divertida?

“Si bien las criadas pueden mostrarse con vidas divertidas y despreocupadas en el manga y
el anime, ser una es un trabajo sorprendentemente difícil.”

“¡Así que tú eres ‘Amante del Gato Osuno Negro’!”

¡No es de extrañar que la historia fuera tan difícil de entender!

¡Aunque tampoco hay manera de que ella haya estado en una cita grupal!

¡Ella había usado la historia de esa carta leía en un programa de radio!

“¿E-Eso te calmó?”

“Sí... en realidad vuelvo a estar tranquilo.”

No es que no estuviera tranquilo desde el principio.

Sin embargo, no podrías culparme por tener cuidado con lo que dije.

“Entonces.” Ella volvió al comienzo. “¿Querías decirme algo?”

“Sí... Sengoku, quería pedirte un favor.”

“Un favor... ¿Qué es?”

“Quiero que encuentres a Shinobu.” Dije directamente. “Eres una de las pocas personas que
la han visto con sus propios ojos, así que para ser sincero, podrías ayudar mucho si
colaboras.”

“¿Encontrarla? ¿Eso significa que... ella, er... Shinobu-chan desapareció?”


“Sí.”

“¿Estás seguro... de que ella no está haciendo recados?”

“Ella nunca llegó a casa anoche.”

“O-Oh, eso es así...”

Desde el otro lado de la llamada.

Pensé que podía sentir sus dudas.

Así es, lo había olvidado por descuido. Según Sengoku, Shinobu la había fulminado con
mirada, le tenía miedo a Shinobu a un nivel instintivo.

Me decidí.

Sengoku no debería volver a relacionarse de nuevo con las excentricidades, no importa cuán
indirectamente fuese... ¿no había sido esa mi decisión? Independientemente de las
circunstancias, ¿qué hacía yo metiéndola en esto?

“Lo siento, Sengoku. Debería encargarme de esto por mi cuenta…”

“N-No. No es así.”

“¿Qué no es así?”

“Si te respondía de inmediato pensé que podría sonar como una mentira... Déjame ayudarte.
Por favor.”

“Oh... ¿Estás segura de eso?”

“Sí.” Dijo Sengoku con convicción, para variar.

¿Podría ser así porque estábamos hablando por teléfono?

¿Porque no estábamos cara a cara?

“Si puedo pagarte de esa manera, entonces lo haré. Estás buscando a Shinobu-chan, tal como
me ayudaste a mí, ¿verdad?”

“… Bueno, sí.”

“Entonces, ¿cómo podría no ayudarte?”

Así que ella lo iba a poner de esa manera para mí.


¿Cómo podría ella no ayudarme?

“No creo que vaya a pasar nada salvaje.” Aseguré. “Pero no puedo garantizar tu seguridad
sin importar qué. Puede que haya perdido la mayor parte de su poder, pero es una vampira...”

“Está bien.” Sengoku, esa chica reservada, lo dijo con verdadera convicción. “Está bien.
Déjame hacerlo.”

Ahora casi estaba empezando a sentirme incómodo a pesar de ser quien la llamo, pero
momentos después Sengoku se salió para buscar a Shinobu.

Sentí ganas de respirar un suspiro de alivio. Me encontré muy contento de tener la ayuda de
alguien que había conocido a Shinobu, pero aún no estaba listo para respirar ese suspiro.

Sengoku no sabe andar en bicicleta.

Bueno, ni siquiera tenía una.

Esa fue la razón por la que Sengoku nunca tocó una bicicleta para viajar a ese santuario
abandonado. Ella estaría buscando a pie, haciéndola tan móvil y confiable como Hachikuji.

Movilidad, eh...

Sí. Movilidad.

Me sentí mal por preguntar una y otra vez, persona tras personas, pero si quería salvar a
Hanekawa tenía que hacerlo. Para empezar, sólo había seis personas que habían visto a
Shinobu en su estado actual, y eso me incluía a mí, respecto a la situación de dos de los seis,
Hanekawa Tsubasa estaba atada como Black Hanekawa, mientras que Oshino Meme estaba
ocupado protegiéndola.

Eso dejó a cuatro. Restándome a mí y a Sengoku, quedaban dos.

Decidí comenzar con la más fácil de tratar, Kanbaru Suruga.

Seleccioné su nombre en la lista de contactos de mi teléfono. Su celular ya debería estar


encendido, puesto que la escuela término, o tal vez no. Ella solo lo había recibido uno unos
días antes, así que era difícil decir cuán familiarizada estaba con la redacción precisa de las
reglas de la escuela, sin embargo...

“Kanbaru Suruga al habla.”

Como siempre, ella contestó el teléfono con su nombre completo.


Me había puesto nervioso por nada.

“Kanbaru Suruga. Mi movimiento especial es mantener presionado B para correr.”

“………”

Así es como ella lo veía.

No takkyudo o pasos relámpago.

Bueno, no podría llamarla mentirosa por eso.

“Kanbaru Suruga. Cuyo actual empleo es servir como la esclava sexual de Araragi-senpai.”

“¡Sin lugar a dudas voy a llamarte mentirosa por eso!”

“¿Hm? A juzgar por esa voz y esa réplica, diría que te estoy hablando con el mismísimo
Araragi-senpai.”

“¿¡Realmente dijiste eso sin siquiera saber que estabas hablando conmigo!?”

“Oh, ¿te disgustó la parte de ser tu esclava sexual? Bueno, lo entiendo. Estaba pensando en
un título diferente y más apropiado para mí, pero decidí autocensurarme porque era un poco
demasiado extremo.”

“¡Si tú lo encontraste demasiado extremo, me estremezco de solo imaginarlo!”

Y.

Date prisa y aprende de una buena vez a usar la lista de contactos.

“¿Por casualidad sigues en la escuela, Kanbaru?”

“No, ya me fui.”

“¿Qué? ¿En serio? ¿Qué hay de las preparaciones para el Festival Cultural?

“Hoy no era mi turno.”

“Oh. Así que tu clase toma turnos. Estoy celoso, ustedes suenan bastante bien organizados.”

Cierto.

Su teléfono no hubiera estado encendido si estuviera en la escuela.

“Uh, ¿eso significa que ahora mismo estás en casa, Kanbaru?”


“No, tampoco estoy allí. No es como si adivinaras mal dos veces seguidas, ¿es algo
importante? Entonces, es cierto, incluso los más poderosos pueden caer. Ahora mismo me
estoy divirtiendo al jugar Fashionable Witches: Love and Berry en la sala de juegos del
supermercado del barrio.”

“¿¡Cómo se suponía que iba a predecir eso!?”

¡Maldita sea, ella siempre estaba minando mis expectativas!

¿No podría, aunque fuese una vez, actuar como pensé que lo haría?

“Um, no estoy muy familiarizado con ese juego, pero ¿es lo suficientemente divertido como
para que los estudiantes de secundaria lo jueguen?”

“¿De qué estás hablando? Los grandes juegos pueden ser disfrutados por personas de
cualquier edad. Solo hoy ya casi me he gastado casi tres mil yenes. Hay una pequeña fila de
niños detrás de mí, pero no tengo ninguna intención de renunciar a mi asiento.”

“¡Estás actuando como una persona terrible solo porque tienes algo de dinero! ¿¡Qué estás
haciendo!? ¡Detente ahora mismo y deja que esos niños jueguen!”

“Hmph. Mi senpai, de todas las personas, está diciendo lo mismo que ese empleado que me
acaba de echar de la tienda.”

“¿¡Te echaron!?”

“Si alguien se enoja contigo de verdad, lo único que puedes hacer es enfadarte aún más con
ellos.”

“¡No! ¡Necesitas disculparte de todo corazón!”

“Incluso si me dicen lo mismo, una orden tuya es diferente. Bien, iré a la siguiente máquina
y comenzaré a jugar Mushiking...”

“¡Deja de jugar!”

“Es importante estar siempre jugando. Es a través del juego, no del estudio, que hemos
crecido y grabado nuestra historia como humanos. Oh, eso es correcto. Hablando de eso,
hace poco, estaba jugando a las cartas con dos amigos y decidí jugar al Presidente...”

“¿¡Así que eres el ‘Oráculo de Aurícula’!?”

No podía creer lo de esta chica.


Ella es tan linda.

Tan linda que nunca se volvió demasiado linda para mí.

“Está bien, Araragi-senpai. ¿Por qué no me dices por qué llamaste?”

“Correcto…”

No podía hablar con ella sobre nada serio sin antes usar una broma estúpida, así que
describiría nuestra conversación inicial como una introducción necesaria.

“Kanbaru. Quiero que me prestes tu fuerza.”

“¿Qué te la presté? No seas tonto. Desde el principio mi fuerza te ha pertenecido. Todo lo


que tienes que hacer es decirme cómo usarla.”

“……….”

Eso fue realmente genial...

Fue una frase genial y madura de decir.

A pesar de que se divertía jugando videojuegos para niños...

Comencé a preguntarme. ¿Por qué tenía una personalidad tan sobria? Eso, al menos, no pudo
haber sido por la influencia de Senjougahara...

“Quiero que encuentres a Shinobu. Ese bobalicona se escapó de casa.”

“¿Ella se escapó de casa?”

“En otras palabras ella se fugó.”

“Oh. Ya veo. Eso es todo lo que necesito escuchar. ¿Entonces estás diciendo que debo
desnudarme?”

“¡Si estás tan desesperada, entonces la próxima vez que estemos solos eres bienvenida de
quitarte toda la ropa que quieras! ¡Podemos hacer un concurso de quitárnoslo todo y
mostrárnoslo todo! ¡Je, si me ves desnudarme te vas a quedar boquiabierta! ¡Así que, por
favor, Kanbaru, por ahora deja eso y encuentra a Shinobu como una persona normal
encontraría a alguien! ¡Odio decirlo, pero estoy poniendo más esperanza en ti que en nadie!
¡Necesito que me prestes esas piernas que pueden correr más rápido que una bicicleta!”
“¿Prestártelas? No seas tonto, Mis pantorrillas, muslos, rodillas, espinillas, tobillos e ingle te
han pertenecido desde el principio.”

“¡Eso no suena muy sobrio para mí!”

“¿Qué dijiste? ¿El interior de mis pantis? Ahí está el hombre que he llegado a conocer. Tan
pervertido que no teme a los dioses...”

“¡Yo nunca dije eso!”

¡Es una pervertida total!

¡Acaba de arruinar todo el cuidadoso giro de Senjougahara!

“Me estás sobreestimando. No soy una pervertida.” Negó Kanbaru. “Las palabras ‘vagón de
tren solo para mujeres’ me ponen terriblemente emocionada, pero ahí es donde se detiene.”

“¡Eso ya te hace única!”

“Ah, así que al final del día me reconoces como tu esclava sexual.”

“¡No, nunca he afirmado tal cosa!”

“Por estar hablando de actos sexuales, acabo de recordar algo.”

“¿Así es como mantienes esta conversación? Te das cuenta de que todavía estamos en la
escuela secundaria...”

“Bien, entonces en su lugar podemos decir actos indecentes. Entiendo que anoche te
involucraste en un acto indecente con ella.”

“………”

¿Por qué Kanbaru lo sabía?

Bueno, en realidad, si ella lo sabe, eso significaba que...

“Así es, lo escuché directamente de ella. Ella dijo que participó en un acto indecente contigo
bajo las estrellas.”

“No hay nada indecente en un beso, ¿verdad?”

Tal vez podría extrapolar desde allí, pero ¿no quería verlo de esa manera porque estaba
siendo infantil?
“Y espera, ¿Senjougahara anda hablando de cosas así?”

Qué persona tan abierta...

No había nada al respecto por lo que se sintiera culpable, somos una pareja, novio y novia...
pero parecía que podía permitirse tener más tacto.

“¿Te lo dijo ella hoy en la escuela?”

“No, escuché sobre eso anoche. Bueno, digo que escuché sobre eso, pero... es más bien que
ella me obligó a escucharla, llamándome en la oscuridad de la noche y alardeando de eso
durante aproximadamente cinco horas.”

“¡Qué senpai tan molesta!”

Eso significaba que Senjougahara había estado despierta casi toda la noche, incluso si había
llamado justo después de regresar del observatorio. No mostró ningún signo de tener sueño
cuando me la encontré por la mañana, aunque... ¿Llevaba una máscara de hierro o algo así?
No se puede ser tan inexpresivo.

Aun así, ¿Senjougahara estaba alardeando? Así que era algo de lo que presumir.
Senjougahara Hitagi nunca me pareció el tipo de persona que hablaba bien de sí misma, pero
de nuevo, no sólo ella y Kanbaru eran senpai y kouhai, sino que ambas eran chicas.

Así que ella hablaría, ¿eh?

Eso fue un poco sorprendente de aprender.

“Permítame felicitarte.” Dijo Kanbaru.

“Oh, gracias.”

“Pero no quiero que pienses que ya has ganado.”

“¿¡Eso fue una declaración de guerra!?”

“Amor significa… no tener que pedirte perdón.”

“Espera, ¿¡a mí!?”

Nos estábamos alejando demasiado del camino.

Aun así, era lo suficientemente móvil para compensar todo mi tiempo perdido y más...
Los fuertes siempre tienen una ventaja fundamental.

Ellos consiguen hacer lo que quieren.

“En cualquier caso, sí.” Reiteró Kanbaru. “Estás diciendo que solo quieres que encuentre a
esa linda chica rubia. Te escucho fuerte y claro. Si se trata de una petición tuya, entonces
realmente correré con todo lo que tengo. Jejeje, por muy grande que sea el mundo, solo son
tres las cosas allá afuera pueden hacerme correr de verdad: mis dos queridos senpais y las
fechas de lanzamiento de novelas BL.”

“¡A riesgo de ser mal entendido, voy a decir que no me hace particularmente feliz estar en
esa lista!”

En realidad no. No quería estar en eso en absoluto.

Necesitaba hacer de esta última una categoría separada.

“Sabes.” Comentó ella. “Aunque me gusta cualquier género de BL, hay algunos en los que
todavía no puedo meterme... Algunas de esas novelas no me harán correr en serio.”

“¡Suficiente!”

Y.

Puede que no la tomen en serio, pero parecía que de todos modos ella las había comprado.

“¿Pero no tomaste tus partidos de baloncesto en serio antes de retirarte?” Le pregunte.

“Si tengo que dar una respuesta, contrariamente a lo que se espera tengo que responder que
no. Si me ponía seria habría rasgado el piso del gimnasio.”

“Lo siento, ¿¡tu cuerpo es un tanque o algo así!?”

“Y, bueno, si te mueves demasiado rápido en un área pequeña como esa dejas tras de ti
imágenes residuales. El baloncesto se juega con cinco personas en un equipo, por lo que las
técnicas de clonación están en contra de las regla.”

“¡No te metas con el nivel de realismo de nuestro mundo sin una buena razón! ¡Las
excentricidades son suficientes, la gente no puede dejar tras de sí imágenes residuales!”

“Que pueda recibir una falta sería un problema más apremiante que el número de jugadores.”
“Los árbitros no deberían simplemente dejarte ir con una falta si un jugador se clona a sí
mismo, ¡si es que lo hacen!”

“Si me clono puedo obtener hasta nueve personas. Si pudiese hacer una más, podría realizar
todo un partido por mi cuenta.”

“¡No, no lo harías! ¡Eso no es posible, por supuesto que no! ¡No me engañarás sin importar
cuán detallada sea tu explicación!”

“Sin embargo, una petición tuya es una historia diferente. Creo que intentaré quitarme los
limitadores por una vez y correr como si fuera en serio.”

“No lo sé, ¿¡una parte de mí siente que quiere detenerte!?”

No estaba seguro de si ella estaba bromeando.

Ella era una kouhai tan peligrosa. Todo un misil balístico.

“No tiene sentido intentar detenerme. Recibí una orden de mi senpai y nada podría hacerme
más feliz. Te lo estoy prometiendo, voy a correr hasta que no pueda dar otro paso.”

“Escucha, no necesitas esforzarte. Sé que eres rápida, pero ¿no me habías dicho que no eras
buena para correr largas distancias o algo así?”

“¿Eh? Oh, no te preocupes, eso fue parte de mi personaje y mi historia de fondo cuando
aparecí por primera vez, antes de que empezara a tomar forma.”

“¡No digas ese tipo de cosas en voz alta!”

“Si realmente te molesta tanto, entonces no me importaría volver a los valores


predeterminados.”

“¡Deja de hablar como si fueras un menú de opciones de videojuegos!”

Bueno.

Cuando Kanbaru dijo que no era buena corriendo, fue diferente a cuando yo lo dije. No tenía
mucho de qué preocuparme.

“Jejeje. Ahora que recibí una orden de tu parte, mi antiguo nombre no servirá. Habiendo
evolucionado, debería asumir un nombre nuevo. Así es, ya no soy Kanbaru Suruga, soy
Kanbaru Omega.”
“¡Quédate quieto, corazón mío!”

“Por cierto, si una marina evoluciona, se convierte en un marinero.”

“¡Eso suena tanto duro como asqueroso!"

“Y si un signo de: ‘Precaución: Rocas Que Caen’ evoluciona, se convierte en un signo de:
‘Precaución: Meteoros Que Caen’.”

“¡Espera, no necesito tanta evolución!”

¿Qué pasaría si evolucionara?

En realidad quería pensar un poco en eso.

“De todos modos, Kanbaru. Si encuentras a Shinobu… um, en realidad, no sé. Está la cosa
con tu brazo izquierdo, así que me pregunto si estarías bien... No, aún estarías en peligro si
eso fuera todo lo que tuvieras. Bien, si encuentras a Shinobu, no te acerques a ella, sólo
contáctame inmediatamente.”

“¿Qué? ¿¡Estás diciendo que no puedo abalanzarme sobre ella y abrazarla!?”

“¡¡No!!”

En más de un sentido, porque ninguna de ellas terminara bien parada.

“Espera un momento.” Se quejó Kanbaru. “No puedo dejar que me desprecies así. Mi vida
no es tan querida para mí como para no cambiarla por acurrucarme con una niña pequeña.”

“Bueno, a partir de ahora va a tener que ser querida para ti... ¿Y qué tiene de bueno poder
acurrucarse con una niña?”

“¿¡Cómo podrías necesitar algo más para ser feliz en la vida!?”

“¡Estás enfadada conmigo!”

¡Mi kouhai está enfadada conmigo! ¡Por no saber que solo necesitaba acurrucar a una niña
linda para ser feliz en la vida!

“Dejando a un lado tus principios y creencias, Kanbaru... Hablando de manera realista, en


este momento creo que soy la única persona en el mundo que podría enfrentar a Shinobu.
Debido a ciertas s razones Oshino no puede. ¿De acuerdo?”

“Está bien.”
“Sengoku también está ayudando, así que si se encuentran pónganse al corriente... Oh, claro.
Sengoku me dio tus pantalones cortos de voleibol y tu traje de baño escolar para luego poder
dártelos.”

“Oh, gracias. No están lavados, ¿verdad?”

“Uh, creo que lo están.”

“¿¡Perdón!?”

Ella había gritado. Ella en verdad necesitaba hacer algo con respecto a sus acciones...

“Estúpido...” Murmuró ella. “No tenía sentido si se lavaban... No es propio de ti permitir tal
fechoría.”

“Um, ¿exactamente cómo me ves? ¿Esperabas que impidiese que una estudiante de escuela
media lave un par de pantalones cortos de voleibol y un traje de baño escolar que ella uso?”

“No te puedo creer... ¿Cómo puedes ser tan cruel? Me diste esperanza, sólo para
arrebatármela segundos después... Seguramente ya me habría suicidado si tuviera conmigo
cianuro de potasio...”

“En primer lugar la premisa de que alguna vez tendrías algo así contigo es inverosímil...”

Entonces, ¿era algo con lo que ella se suicidaría?

¿Así es como se veía a si misma?

“Araragi-senpai, realmente lamento tener que decirte esto a ti de entre todas las personas,
pero no tengo otra opción. Parece que tendrás que pagar por este error.”

“……”

¿Exactamente, por qué?

Al mismo tiempo, no podía dejar que esto afectara la motivación de Kanbaru...

Los fuertes realmente disfrutan de ciertas ventajas...

“¿Entiendes?” Ella preguntó.

“Sí, sí... solo dime lo que tengo que hacer.”

“Solo necesitas ‘aah’ una vez.”


“¿¡Se supone que eso es romántico!?”

¿Ahora qué estaba pasando?

“Acabo de decir que te lo compensaré. Estaré encantado de darte una recompensa. ¿Qué
necesitas que haga?”

“Está bien. Necesitas dormir en esos pantalones cortos de voleibol y traje de baño escolar
por una noche, sudar como loco con ellos puestos y devolvérmelos sin lavar. Si haces eso, te
perdonaré.”

“¿¡Te das cuenta de que, en realidad, hacer eso nos convertiría en dos pervertidos del orden
más alto...!? En realidad, ¡podría dejarte aún peor que yo!”

“Suena como un camino divertido de recorrer, siempre y cuando estés a mi lado.”

“Lo siento Kanbaru, ¡pero no estoy listo para morir contigo!”

“Entonces siempre podría convertirlo en un suicidio forzado de amantes.”

“¡Eso se llama un asesinato-suicidio!”

“Será mejor que pensemos en cómo hacerlo en otro momento.”

“¡No, mejor piénsalo aquí y ahora!”

“De todos modos, ¿dijiste que Sengoku también estaba ayudando? En ese caso, parece que
hay un puñado de personas en esto.”

“Sí. Sé que esto puede sonar no muy convincente después de todo el tiempo que hemos
perdido hablando tonterías, pero cada segundo cuenta. Por favor, Kanbaru. Ayúdanos.”

“Por supuesto. Estoy tan a bordo que tengo lágrimas en mis ojos. No está en mi decirte que
no. Actúo solo de acuerdo a tus órdenes.” Dijo Kanbaru, luego colgó.

Ella supuestamente estaba en el supermercado del barrio, pero estuviese en el barrio o no,
solo había un supermercado en el área... Podrías llamarlo el único salvavidas de nuestra
ciudad rural, así que comencé a sentirme honestamente preocupado de que ahora Kanbaru
estuviera manteniendo B presionado y destrozando el suelo mientras corría, pero era
alentador tenerla a bordo, dejando de lado esa preocupación absurda y poco realista.

Así que. La última persona.


La última persona con conocimiento de primera mano de Shinobu: llamé al número de
Senjougahara Hitagi.

El teléfono sonó durante un tiempo tremendamente largo, me sentí como si hubiera esperado
casi veinte segundos. Justo cuando me preguntaba si me iban a enviar a un buzón de voz, por
fin la llamada fue contestada.

“No voy a ir.”

“……………”

Ella comenzó con una negativa.

¿Qué era ella, una psíquica?

E incluso ella había dicho que no...

“Se sintió como que te tomó una eternidad contestar el teléfono, ¿sucedió algo?”

“¿No? ¿No particularmente? Fue una molestia contestar el teléfono, lo había dejado en mi
bolsillo sin verificar quién era la persona que llamaba, pero sonó tanto tiempo que me di por
vencida y comprobé solo para ver si eras tú, lo que me hizo pensar que después de todo no
tenía que contestar, así que iba a colgarte pero accidentalmente presioné el botón de al lado
por lo que no tuve más remedio que contestar. ¿Qué es lo que quieres?”

“¿¡Por qué querría algo de ti en este momento!?”

Qué persona tan horrible.

Nunca mostró signos de ceder, ni siquiera por teléfono.

“De todos modos, Senjougahara, ¿podrías escucharme?”

“No. De hecho, tú eres el que necesita escucharme. El otro día fui a una tienda de alquiler de
videos con un amigo.”

“¿¡Así que eres ‘No Hay Nada Como Un Perro Encontrado’!? ¡No has tenido un solo amigo
durante años! ¡Ahora que sé que fingiste tener uno para escribirle a una estación de radio, lo
que estaba destinado a ser una carta graciosa ahora me suena triste!”

¿Y qué tipo de audiencia estaba recibiendo este programa de radio?

¿¡Todos lo escuchaban!?
¿¡Todos excepto yo!?

¡La cultura popular me había dejado atrás!

“Por favor, Senjougahara. Olvídate de eso y escúchame.”

“Supongo que no tengo elección si te pones en cuatro patas.”

“¡No lo estoy!”

“Entonces, ¿qué ocurrió?”

“... Shinobu desapareció.”

“Shinobu, ¿esa niña rubia?”

“Sí.”

“Hmph.”

Sin pensamientos.

Indiferente e insensible.

Por supuesto, aunque puede que conociera a Shinobu, no era como si alguna vez hubiera
hablado o socializado de alguna manera con ella, y no sólo Senjougahara. Kanbaru y
Sengoku no sabían cómo era Shinobu por dentro. Solo lo sabíamos Oshino, Hanekawa y yo.

“¿Fuiste tan lejos como para saltarte las clases para encontrar a esa chica?”

“Sí. Por eso quiero que ayudes. Las únicas personas que han conocido a Shinobu en
persona...”

“Pero.” Me interrumpió Senjougahara. “Eso no podría haber sido lo que quisiste decir esta
mañana con ‘ayuda humanitaria’, nunca te referirías a esa chica como algo humano.”

“………”

“Hoy Hanekawa-san falto a la escuela.” Agregó Senjougahara impasible.

Ella no dejo notar alguna emoción. Prácticamente podía ver su rostro siempre inexpresivo.
¿Esta chica realmente había llamado a Kanbaru para presumir toda la noche sobre lo que
había hecho?
“¿Podría estar relacionado de alguna manera? Oh, no tienes que responder eso. Tu silencio
es elocuente.” Dijo.

“Incluso si lo es, voy a responderte. Sí, tienes toda la razón. Hanekawa...”

“Ahora que lo mencionas, Oshino-san dijo algo al respecto, que esa chica hizo un buen
trabajo durante el caso de Hanekawa-san, o algo así. ¿Eso es todo? Necesitas las habilidades
de esa chica por el bien de Hanekawa-san, ¿pero está perdida por otras razones?”

“Tienes una muy buena intuición, ¿lo sabes? Y también una buena memoria.”

“Confío en mi memoria. Incluso recuerdo cuando se fundó el Shogunato de Kamogura.”

“Esa es la pregunta más genérica de historia japonesa...”

“En mil novecientos noventa y dos, formaron ese inútil bakufu.”

“¡Qué medida mnemotécnica más malvada!”

“Sabes, Araragi-kun, pareces igual de preocupado por las dos, Hanekawa-san y la chica, eres
imparcial hasta cuando te preocupas, aunque es obvio a quién debes priorizar. Es tan propio
de ti.”

“¿……?”

¿Qué acababa de decir?

¿Se suponía que debía estar priorizando?

¿Qué tenía eso que ver con la situación en la que estábamos?

No fue como lo que pasó con Sengoku. No estábamos en una posición en la que tuviéramos
que elegir a quién salvar, ¿verdad?

“No voy a ir.” Repitió Senjougahara. “No iré a ninguna parte.”

“Hey, Senjougahara…”

“Después de todo estoy ocupada con las preparaciones para el Festival Cultural.”

“Bueno, está bien... entiendo eso, pero ahora mismo estamos…”

“Hanekawa-san me confió esto.”

Esas fueron palabras poderosas.


Poderosas y firmes, como una espada desenvainada.

“¿Cómo es posible que me escabulla? Y cuanto más peligro corre Hanekawa-san, más me
necesitan aquí para cumplir con mi papel.”

Ella tenía razón…

No era un caso común en el que se le podía pedir ayuda.

Hanekawa había confiado esos deberes a Senjougahara bajo la presión de una excentricidad.
¿Cómo pudo Senjougahara saltarse eso para buscar a Shinobu?

“Lo diré sin rodeos, sin Hanekawa-san presente la cadena de mando está en caos, nada
funciona bien. ¿Ella estaba lidiando con todo esto? Tiene que estar loca para armar este
horario. Y tú tampoco estás aquí, la única persona que la apoyaba, honestamente, ni siquiera
puedo permitirme el lujo de perder tiempo al teléfono.”

“Bueno, Hanekawa estaba haciendo la mayor parte por sí misma…”

¿Cuánto de ella había dedicado a nuestra clase? Y, ¿cuánto se había esforzado para que no se
dieran cuenta? ¿Nunca les enseñó nada del trabajo por el que estaba pasando? Fácilmente
podría haber estado inundada con todo el trabajo que tenía, pero nunca dio señales de estar
ocupada, ni una sola queja se le escapó de los labios. Fue así con todo lo que hizo, lo que fue
impresionante no fue lo duro que trabajó, sino que nunca permitió que nadie se diera cuenta.
Estuve a su lado, apoyándola todo este tiempo, e incluso a mí me costó decir que comprendía
perfectamente todo por lo que estaba pasando.

Honestamente.

Ella, y nadie más, en serio era lo real...

……

Aunque me hubiera gustado que Hitagi-san no categorizase hablar con su novio por teléfono
como una pérdida de tiempo...

“Dudo que pueda irme a casa hasta bastante tarde.” Dijo. “Y parece que no hay manera de
que pueda terminar cuando la escuela cierre. Probablemente tendré que llevarme esto a casa
y trabajar en eso allí. Casi me sorprende que ella estuviera haciendo esto durante las horas
escolares. Escucha, Araragi-kun. Solo necesitas hacer lo que siempre haces, y yo haré lo que
siempre hago.”
“Sí... Está bien.” Cedí, habiendo entendido muy bien la situación. “Tú te ocupas de la
escuela. Hagamos de este un buen Festival Cultural.”

“Sí. Eso me gustaría.”

El mismo tono plano de siempre.

Ella en serio no mostro una sola emoción.

Sin embargo, eso fue lo que dijo Senjougahara.

“Está bien, te llamaré más tarde.” Le dije.

“Oh, Araragi-kun. Solo una cosa más.”

“¿Qué seria eso?”

“Servicio tsundere.” Concluyó ella. En su tono plano. “No lo malentiendas, no estoy


preocupada por ti ni nada de eso, pero nunca te perdonaré si no regresas, ¿de acuerdo?”

Después de decir eso ella cortó la llamada.

Casi se lleva mi conciencia con ella, pero de alguna manera me las arreglé para aguantar.

Oh, Dios... realmente no sabía qué decir. Cada vez que hablaba con ella, ella... No, no me
importa que me digan que mi vocabulario es deficiente... Simplemente no tengo otras
palabras para ello.

La amaba tanto.

Tanto que no sabía qué hacer.

Por supuesto que volvería, si ella me iba esperar, por supuesto que sí.

“... No te preocupes, puedes contar conmigo.”

En todo caso…

Ahora les había pedido ayuda a todos los que podía acudir.

Fue el alcance de mi red en mi tercer año de escuela secundaria.

Puede que en perspectiva solo haya sido un consuelo, la situación puede no haber cambiado
mucho, pero aun así... Mi confianza estaba en otro nivel.
Pedaleé, pedaleé, pedaleé, pedaleé, pedaleé y pedaleé, y luego continué haciéndolo durante
otras tres horas.

Llevaba nueve horas buscando.

Eran las 7 pm.

Antes de darme cuenta, era de noche.

No había comido ni bebido nada.

No había descansado

Y finalmente me sentía cansado.

“Pero... ¿qué está pensando Shinobu?"

Huir de casa, ¿en serio?

Fugarse, ¿en serio?

Un viaje de autodescubrimiento, ¿en serio?

Cuando no deberías poder ir a ninguna parte…

Tal como yo.

“………………….”

Todo comenzó, durante las vacaciones de primavera.

Todo comenzó con el fin de mi segundo año.

Ha pasado algún tiempo de eso.

Me enteré de la existencia de las excentricidades.

Yo mismo me convertí en una excentricidad.

Y ha sido así desde entonces.

Un vampiro.

Un gato.

Un cangrejo.
Un caracol.

Un mono.

Una serpiente.

Y luego, una vez más... un gato.

Un Gato Cambiante, un Gato Entrometido.

Black Hanekawa, otra Hanekawa Tsubasa.

En la mayoría de los casos, los Monstruos Felinos se convirtieron en humanos, hay


innumerables leyendas donde ocurre eso. Primero se come a una anciana, se convierte en esa
anciana, entra en su casa, luego se come a todos los demás.

Un gato que se transforma en humano.

Y entonces, se los come.

Pero un Gato Entrometido hace lo contrario, no, tal vez podrías llamarlo una interpretación
de las mismas leyendas desde un ángulo diferente. Casos en los que un gato no se convierte
en humano, sino donde un humano se transforma en un gato. Los Monstruos Felinos que se
convierten en humanos son descubiertos debido a su comportamiento extraño, pero con los
Gatos Entrometidos, ese comportamiento antinatural se entiende como un caso de múltiples
personalidades. Si te centras solo en ese elemento, era similar a los casos de zorros que
poseen seres humanos. Hay una manera en que la mayoría de los cuentos populares sobre los
Gatos Entrometidos se desarrollan: noche tras noche, una esposa virtuosa se convierte en una
ramera y camina por las calles, luego un monje viajero (o tal vez un guerrero, o tal vez un
cazador) declara que es el trabajo de un Monstruo Felino y toma acción, sólo para descubrir
que todo el tiempo fue la esposa.

Si tuviera en cuenta solo el final de las historias, entonces sí, en ningún momento aparece un
gato en el cuento. Al lector se le da una pequeña ojeada de un gato blanco sin cola, pero no
es más que una presunción de trama, o algo que se utiliza para hacer que la historia sea más
atractiva, pero el tema, el ancla, es la humanidad misma.

El anverso y el reverso de los humanos.

El reverso de Hanekawa: la oscura y horrible Hanekawa Tsubasa.


No, ¿debería ser blanca?

De cualquier manera, no hubo discusión de que la hubieran consumido, pero... quería


escuchar lo que Kanbaru tenía que decir.

El Gato Entrometido y el mono de Kanbaru parecían similares, aunque probablemente solo


fueran similares y no iguales. La mayor diferencia es que el mono concedía los deseos de
Kanbaru Suruga mediante un contrato justo y razonable, mientras que el Gato Entrometido
de Hanekawa Tsubasa lo hace a fondo y de pies a cabeza, incondicionalmente y sin reservas.
Durante la Semana Dorada, me atacó a mí, a Oshino y al final incluso a la propia Hanekawa,
con malicia y hostilidad, pero incluso eso fue por el bien de Hanekawa. Puede que no haya
sido lo que ella quería o deseaba, pero el gato estaba de su lado.

No solo estaba de su lado, después de todo, era ella.

Esa era la diferencia con el mono de Kanbaru.

Kanbaru. Ella todavía estaría corriendo.

Pero... ella no había llamado.

Nadie había llamado.

No habíamos fallado en encontrar nuestra primera pista, no teníamos ni idea.

¿Qué significaba eso?

Una chica rubia sería la persona más conspicua en toda la ciudad, pero ¿ni siquiera tuvimos
un testigo ocular?

¿Podría, de alguna manera, ya haberse ido de la ciudad?

No, sus piernas son las de un niño... al menos, deberían serlo.

Ella no debería poder hacer nada, no sin que yo esté a su lado.

Miré hacia el cielo.

Noche.

No queda rastro de anochecer.


Había estrellas en el cielo, no se parecía en nada a la que había visto la noche anterior en el
observatorio... Aun así, las estrellas eran bonitas. Tenía la sensación de que estaría haciendo
un hábito el mirar hacia el cielo, ya que es un recuerdo que comparto con Senjougahara.

Todo.

Así lo dijo ella.

Eso es todo lo que puedo darte...

Pero no, ella estaba equivocada.

Solo mira. Ella me había dado estos recuerdos.

No sólo de ese cielo estrellado, que también, sino desde nuestro primer contacto en las
escaleras hasta el momento presente.

Recuerdos... y memorias.

La memoria de Hanekawa, nunca volvería a ser borrada. Personalmente, pensé que perder
todo los recuerdos de haberme involucrado con una excentricidad sería lo mejor, pero
quizás, al final del día, Oshino tenía razón.

No solo de la manera que lo quiso decir.

Yo tampoco quise olvidar.

Las vacaciones de primavera.

Ese infierno.

Después de todo, ese fue el comienzo…

“... Shinobu, Oshino Shinobu.”

Sin importar qué, la encontraría.

La encontraría y se lo enseñaría.

Decidí ser responsable de ti por el resto de mi vida.

“Está bien... Ya descanse suficiente.”

Comencé a pedalear de nuevo. Había recuperado la mayor parte de mi resistencia con un


pequeño respiro, realmente tenía un cuerpo absurdo.
Dejando a un lado las estrellas en el cielo, se estaba haciendo tarde.

Un poco más y necesitaría que Sengoku, un estudiante de escuela media, volviese a casa. Ya
estábamos cortos de personal, y eso reduciría nuestras fuerzas. Dadas las circunstancias la
presencia de un informe policial tras un niño desaparecido estaba fuera de discusión...

La parte de la noche también era un poco preocupante.

No hace falta decir que los vampiros son nocturnos. No podías llamar a Shinobu un vampiro
hecho y derecho, pero era cierto que sus actividades eran menos limitadas por la noche. A
medida que se profundizaba, también lo hacían sus poderes.

Y también lo hace el peligro.

Eran más de las siete... Las siguientes dos horas serian cruciales.

Necesito apurarme, pensé, levantándome de la silla de mi bicicleta y pedaleando tan fuerte


como podía, hasta que, con un golpe, mis dos pedales se pusieron pesados y mi velocidad
disminuyó como un automóvil cuyo freno de emergencia había sido accionado.

Al principio pensé que había roto la bicicleta después de haberla expuesto a demasiado
esfuerzo.

O mi cadena se había roto o mis neumáticos habían explotado... pero ese no era el caso.

Alguien había saltado a mi asiento trasero.

No, “alguien” podría no ser la palabra correcta.

Si tuviera que decirlo, era un gato.

“…….”

“Nya.”

“………”

Correcto…

Al igual que los vampiros... los gatos también eran nocturnos.

Cabello blanco, orejas de gato, todavía en pijama…

Una mujer que conocía bien.


Se había quitado las gafas, veía bien en la oscuridad.

La mirada que me estaba dando, sin embargo, era horrible..., y no eran solo sus ojos. Toda su
expresión era tan amarga que no podía creer que pudiera hacerla con su cara.

Se había quitado la blusa de manga larga, debe haberse sentido caliente.

Entonces, después de todo “El Viento del Norte y el Sol” tenía razón. Finalmente, pude
echarle un vistazo a Hanekawa con su pijama de pies a cabeza, pero habría estado el doble
de feliz si ella no estuviese en su estado actual.

Y entonces.

Balck Hanekawa estaba aquí.

“¿Por qué estás aquí?”

“Goro-nya.”

“Respóndeme.”

No quería escuchar de respuesta un sonido falso de gato.

Habíamos colocado a Black Hanekawa bajo fuertes ataduras en esa escuela abandonada,
bajo la estricta guardia de Oshino. Entonces, ¿por qué…?

“Nyo me hables así-nya, humano. Goro-goro.”

“Yo no voy a dejar que evadas mi pregunta.”

“Hmph. Nyo hay razón en parrrrrticular. Goro-goro. Así que deja de darme esa mirada
dudosa-nya, humano. Nyo estoy segura de por qué, pero hace un minuto, cuando estuve
pateando, me saqué de esas cuerdas como si nyo fuera nada-nya.”

“Hace un minuto...”

Correcto.

Ella es nocturna.

Incluso durante la Semana Dorada, siempre era alrededor del mediodía cuando un poco de
Hanekawa, mientras era Black Hanekawa, conseguía resurgir, el poder y el control de esta
excentricidad era abrumadoramente más fuerte por la noche. Hmm, eso era otra cosa que
tenía en común con el mono de Kanbaru.
“¡Nya-jajaja!” Black Hanekawa rio encantada.

Probablemente no significó nada.

Ella se estaba riendo sin ninguna razón.

Ella también tenía la inteligencia de un gato. Oshino había dicho algo acerca de que al fondo
ella era la Representante-chan de siempre, pero no pensé de esa manera... En su estado
actual, Hanekawa Tsubasa no parecía tener reverso.

En realidad no.

Esto ya era el reverso de Hanekawa.

Si ella tuviera alguno, era este.

“Pero ¿qué pasa con la guardia de Oshino?”

“Soy un gato-nya. Moverme sin hacer ni un ruido es un juego de gatitos para mí-nyah.”

“Ahora que lo mencionas... supongo que tienes razón.”

Esta vez Oshino estaba demostrando ser increíblemente inútil.

No era como él.

Su extraña actitud cuando llegamos a la escuela de preparación abandonada y la actitud


evasiva que había mostrado más adelante podría atribuirse a la desaparición de Shinobu
(debió estarla buscando afuera), pero ¿dejar que Black Hanekawa escape tan fácilmente? Me
pareció inconcebible. Fue justo después de que Shinobu se había escapado.

No era el tipo de hombre que cometía el mismo error estúpido dos veces seguidas.

Espera, no me digas que lo hizo a propósito... ¿Había liberado a Black Hanekawa? ¿La ató
con nudos que solo eran lo suficientemente fuertes para mantenerla allí durante el día (las
palabras del Gato Entrometido: ‘me saqué de esas cuerdas como si nyo fuera nada-nyah’,
apoyó la idea) y fingió no notarlo cuando se escapó?

Ella debió fijar mi ubicación simplemente a través de su sentido del olfato y oído.

Así es como cazaban los gatos.

La pregunta, sin embargo, era por qué había acudido a mí después de liberarse, la razón, no
el método. Si Oshino la había dejado escapar intencionadamente, eso por supuesto hacía que
este fuera otro ejemplo de que las cosas iban exactamente como él quería y su actitud de
saberlo todo dictaba...

Pero si es así, ¿por qué?

Otra razón que me eludió.

Una cosa que sí sabía era que había usado un método “heterodoxo”, o como quisiera
llamarlo, para convocar al Gato Entrometido por la fuerza “porque no tenía tiempo”, porque
quería hablar directamente con la excentricidad. Para terminar afirmando que le entendía tan
poco como yo, pero él es un maestro del desapego. ¿Podría haber encontrado un indicio en
su incoherente balbuceo, o al menos el rastro de uno?

“Hey, gato...”

“¿Nya?”

“……”

Me bajé de la bicicleta, sostuve el manubrio con una mano y me volví para mirar a Black
Hanekawa que estaba sentada en mi asiento trasero, solo para tragarme involuntariamente las
palabras que estaba a punto de decirle.

Me quedé sin palabras.

Wow… Ahora que se había quitado esa blusa podía ver cada curva de su cuerpo. Estoy
hablando del hecho de que ella estaba en pijama, pero ahora que lo pienso, solo eran
pijamas. Aun así, ella es increíblemente sexy. Olvida lo que dije antes de ser potencialmente
el doble de feliz. Quiero decir, al menor movimiento sus pechos rebotaban por todas partes.
Boing. Boing. Esa onomatopeya no es un sonido que un cuerpo humano debería emitir.
Olvídate de hacer avanzar la historia, olvídate de la coherencia narrativa, quise tirarlo todo y
pasar toda la noche saltando a la cuerda con ella.

Kanbaru podría hablar sucio, pero el cuerpo de Hanekawa...

Además, ella tiene orejas de gato.

Me asustaba imaginármela con el cabello negro.

Entendí que el atractivo sexual físico era una necesidad absoluta para continuar con la
especie, pero ¿había alguna necesidad de llegar tan lejos?
“¿Qué pasa-nya?”

“A, er... um…”

Por otra parte, durante su arrebato en la Semana Dorada estuvo en ropa interior... En
comparación esto es mucho más fácil de ver. No importaba cuanto de la memoria de
Hanekawa volviese, dichos recuerdos necesitaban permanecer borrados de su cerebro por
toda la eternidad.

“... Um, está bien, gato. Repite después de mí: No, ni nunca, ni ninguna vez, nadie
nacionalizo algo novedoso como una nomenclatura.”

“Nyo, nya nyunca, nyah nyanguna nyes, nyadie nyacionyalizo nyalgo nyovedoso nyomo una
nyomennyatura-nya.”

“¡Lo dijo así! ¡Maldita sea! ¡Que linda!”

Me las arreglé para usar mi amor por los gatos para encontrar una forma de hablar con ella.

Si me permites decirlo, me parece un movimiento inteligente de mi parte.

Espera, no.

“Iba a preguntarte para qué estás aquí.”

“Esa debe ser tu forma de maullar hola-nya.” Dijo ella burlonamente. “Para ayudarrrrte,
humano-nya. ¿Para qué otra cosa habría venido-nya?”

“¿Para ayudarme?”

“No te equivoques, humano, ya nyo tengo ningún interés en pelear contigo-nya. ¿No te lo
dije hace un minuto-nya?”

“Hace un minuto…”

Oh... ella quiso decir esta mañana.

¿Quién le dice a lo que ocurrió hace medio día como “hace un minuto”? Eso es una
excentricidad para ti, su comprensión del tiempo es... No, tal vez lo mejor es pensar que el
intelecto de un gato es incapaz de comprender el concepto de tiempo.

Además.

“¿Alguna vez... me dijiste eso?”


“Oh, quizás nyo. Si nyo lo dije nyo importa-nyah, porque acabo de hacerlo. Esta vez nyo
tengo la intención de hacer algún alboroto-nya, hoy nyo estoy en ese tipo de humor-nya.”

“……………”

¿Podría... creerle?

Si tomaba en consideración la última vez que apareció no había manera de que pudiera...

Pero por otro lado, esa era la forma normal de verlo. Tratar de comprender sus acciones
pensando demasiado en lo que decía este gato te dejaba idiota.

Si dijo que no era su intención, entonces tal vez no lo era.

Y…

Si dijo que estaba aquí para ayudar, entonces realmente estaba aquí para ayudar.

“Pero, ¿por qué? Eres como... el estrés de Hanekawa, ¿verdad? Una segunda personalidad
que ella manifiesta para reducir su estrés...”

Así fue como comenzó la pesadilla.

Atacó a sus padres, atacó a transeúntes inocentes y se desenfrenó sin trabas. También fue
muy audaz. No fue tan malo en daños como el infierno que fueron mis vacaciones de
primavera, pero en ciertos términos el Gato Entrometido puede haber superado incluso el
miedo de ese entonces. Incapaz de aguantar más, atacó indiscriminadamente a la gente con
todo el empuje de un adolescente que se escondió en la escuela hasta la noche para romper
todas sus ventanas, era un método absurdo de alivio del estrés.

“Incluso con eso nyo te hagas una idea equivocada-nya. Todavía tengo ganas de darte las
gracias-nya. Normalmente habría tardado un año en aliviar el estrés de mi maestra-nya, pero
solo tomó nueve días gracias a ti-nya...”

Oh...

Así que también podrías verlo de esa manera.

Por supuesto, desde el punto de vista del Gato Entrometido, todo lo que le importaba era
descargar el estrés de Hanekawa. Así que no importa cuán simple, rápido o eficiente sea el
método, no importó.

Hasta el final, las excentricidades eran lógicas.


“Ah... así que también quieres encontrar a Shinobu lo antes posible. Estás diciendo que
nuestros intereses se alinean.”

“Prrrrecisamente-nya.”

“Está bien.” Asentí.

Todavía tenía mis dudas, pero no había tiempo para dudar.

“En ese caso, tu ayuda es exactamente lo que necesito.”

“Nyajaja-jaja. ¡Así que puedes decir que mi oferta para ti es como una manita de gato-nya!”

“¡……….!”

La Hanekawa que conozco nunca se vería tan triunfante ante una broma tan obvia y
estúpida...

Pero esto es un reverso de la personalidad de Hanekawa.

Fue un poco deprimente.

“Bueno, estoy más interesado en tus sentidos felinos del olfato y el oído. Ya has luchado
contra ella, así que debes conocer su olor y su voz. Todo lo que necesitas hacer es
rastrearla.”

“Hmm. Perrrrfecto-nya.”

“Voy a dar una vuelta al azar, así que avísame si notas algo, ¿de acuerdo?”

Regresé a mi bicicleta.

Con Black Hanekawa en el asiento trasero.

Podría ser una mentira decir que en este momento no tenía un solo pensamiento perverso en
mi mente, así es, sería una mentira. Esa sensación regordeta de cuando monté con Hanekawa
esta mañana todavía estaba fresca en mi mente. Pero mis motivos vulgares se encontraron
con un karma instantáneo del más alto orden.

“¡Gah!”

Me caí reflexivamente de mi bicicleta, y el impulso hizo que esta también se estrellara contra
el suelo. Solo una persona, no, el gato sobrevivió, Black Hanekawa, quien saltó diestramente
en el aire, giró e hizo un limpio aterrizaje.
Eso es un gato para ti. Sin embargo, este no es momento de estar impresionado.

“¿Hm? ¿Qué paso-nya, humano?”

“... Ah, gaah... ah…”

Es un Gato Entrometido, en más de un sentido.

Para dar un nombre moderno a una característica particularmente notable de este tipo de
Monstruo Felino, es que era capaz de drenar energía. De esta manera, ella era menos como
un Monstruo Felino y más como una súcubo, un íncubo o un ju-rei. Era una Gata Lujuriosa.
Una excentricidad que consume humanos, aquellos a los que tocó vieron su fuerza y
vitalidad drenadas. No hubo un caso donde fue lo suficientemente malo como para matar a
alguien, pero al menos envió a algunas personas al hospital durante la Semana Dorada.

Ella envió a dos personas al hospital.

Los padres de Hanekawa.

Por supuesto, fueron dados de alta en aproximadamente tres días.

Esta es la excentricidad que me abrazó completamente cuando ella se sentó en mi asiento


trasero... Fue sólo por un momento, y mientras se podía descartar cualquier pequeña
resistencia que hubiera, Black Hanekawa, a diferencia de la Semana Dorada, ahora llevaba
ropa adecuada, aunque fuera una pijama, así que no me dreno en un instante, pero yo
también llevaba ropa ligera... lo que significaba que sufrí un daño increíble. Justo cuando
pensaba que había recuperado mi resistencia, había desaparecido de nuevo en un abrir y
cerrar de ojos.

Drenaje de energía.

Aun así, permíteme decir esto.

¡Puede que me haya caído, pero no me arrepiento!

“……………………”

Empecé a pensar que si seguía diciendo ese tipo de cosas podía ser malentendido... No era
que estuviera tratando de ser considerado con alguien en particular, pero Senjougahara tenía
un sentido muy bueno para ello...

Nunca puedes ser demasiado cuidadoso.


“Oh, lo entiendo-nya, humano. ¡Los pechos de mi maestra se sentían tan maravillosos que te
retorcías de placer-nya!”

“Admito que soy estúpido, pero sabes, también rebosas de estupidez...”

¿No entendía sus propias habilidades?

La capacidad del Gato Entrometido para drenar energía estaba siempre activa, entrando en
acción cada vez que hacía contacto directo. No tenía nada que ver con las intenciones del
gato...

“Bueno, humano, si están tan desesperado por eso-nya, te dejaré masajear estos pechos si
podemos estar de acuerdo con algunas condiciones-nya.”

“Deja de tratar de vender la castidad de tu maestra, Gata Lujuriosa.”

“¡Un paquete de Katsuobushi-nya!”

“¡Qué gran oferta!”

¡Era un precio tan barato por la castidad de Hanekawa Tsubasa! Si ese fuera realmente el
precio de la oferta, ¡pagaría sesenta años por adelantado por un contrato de exclusividad!

“¿Qué pasa-nya? Un catnip... ¡No, una comida para gatos-nya!”

“Cambia tu opinión todo lo que quieras, no importará. ¡Necesitas decir un número mayor
que uno! ¿¡O solo puedes contar hasta ahí!?”

Hmm.

Qué sensación tan extraña.

Estaba conversando con toda la normalidad del mundo con alguien con quien pude haber
muerto luchando durante la Semana Dorada... Por otra parte, el truco con las excentricidades
es cómo te acercabas a ellas. Cómo te relacionabas con ellas... eso supuse.

“Eres un tipo de persona desagradable, tratándome como idiota-nya... ¡Entonces, humano!


¡Es hora de decidir quién es el idiota más grande-nya!”

“¿¡Por qué querría hacer algo tan inútil!?”

“¡El evento será un partido de shogi-nya!”


“¡Si dos idiotas se enfrentaran en serio con un partido de shogi, el resultado sería tan malo
que me dolería verlo!”

Shogi, el ajedrez japonés.

En cuanto a los concursos de habilidad con juegos que todos saben jugar, pero que pocos lo
dominan, el shogi estaba ahí arriba junto al béisbol en Japón.

“Hmm. ¿Entonces qué tal esto-nya? ¡Un juego en el que quien detenga un crrrrronómetro
justo en un segundo gana-nya!”

“¿¡Sabes siquiera lo aburrido que suena eso!?”

Espera un poco.

No puedes medir la inteligencia de esa manera.

Levanté mi bicicleta del suelo... Era una vieja y confiable bicicleta de modelo tradicional, era
extrañamente robusta, el resultado de la caída fue solo una cesta doblada. Nada estaba roto.

“Está bien.” Dije. “Creo que deberíamos buscarla mientras caminamos, antes déjame
estacionar mi bicicleta en algún lugar cercano... Va a ser más lento, pero de esa manera
seríamos más cuidadosos. ¿De acuerdo?”

“Nya.”

“Ahora que está tan oscuro su cabello rubio no la hará más fácil de encontrar con ojos
humanos... así que cuento contigo, ¿de acuerdo?”

“¡Cuenta conmigo-nya!”

Comencé a caminar mientras empujaba mi bicicleta. Black Hanekawa me siguió... no, ella
me adelantó y caminó por el frente, como para liderar. Ella realmente es una gata estúpida...
Tal vez algún instinto la hizo querer correr más allá de cualquier cosa que se moviera.

Aparentemente el gato y la excentricidad eran inseparables.

En ese sentido, podría decir que el Monstruo Felino es la excentricidad más fácil de
entender, definitivamente fue la más reconocible que había encontrado hasta este momento,
aparte de los vampiros. Bueno, se de varios Monstruos Felinos, pero yo, con mi información
limitada, no había oído hablar de lo que identificada al “Gato Entrometido” hasta la Semana
Dorada.
Hmm, pero me preguntaba... ¿Qué reacción tendría un tercero si me viera caminando junto a
Black Hanekawa? Un chico de secundaria caminando junto a una joven con orejas de gato...
¿Cómo me verían? Nadie podría pensar que las orejas de gato son reales, y caminar en
pijama era mucho mejor que andar en ropa interior, pero... Tal vez hubiera sido una buena
idea regresar a la escuela de preparación abandonada por buscar su sombrero y blusa.

Por otra parte, poner ropa en cualquier bestia, no solo en un gato, era una empresa hercúlea...
Era un milagro en sí mismo que ella no se hubiera quitado la pijama...

Oh, lo que sea.

No había sentido alguno en preocuparse por eso en este momento.

Ya había rumores de que caminaba de la mano con Kanbaru Suruga, nuestra estrella de
segundo año. Agregar un rumor sobre mí caminando con una belleza con orejas de gato
realmente no cambiaba nada. Podría tratar con Kanbaru y Hachikuji, y aunque sería difícil
encontrar una excusa para decirle a Sengoku, ya sabes, lo que paso, paso. Ahora mismo
nuestra mayor prioridad era encontrar a Shinobu.

Lo que me preocupaba era el honor de Hanekawa. Entonces, una vez más, la pijama puede
pasar desapercibida como ropa de calle, estaba sin gafas, tenía un peinado diferente, y la
mayoría su cabello había cambiado de negro a blanco. Nadie creería que estaba con
Hanekawa a menos que supieran lo que estaba pasando. No hay cantidad de tinte o
blanqueador que podría hacer este buen trabajo con el cabello de alguien. Sus expresiones
faciales también eran totalmente diferentes... Incluso yo no supe quién era Black Hanekawa
cuando la vi por primera vez durante la Semana Dorada. Si no fuera por la forma de sus
caderas… no, fue sólo porque ella me salvó la vida que de alguna manera pude determinar
su identidad.

Además.

Esto también es... Hanekawa Tsubasa.

Otra Hanekawa.

Ella tenía dos lados, y este era el reverso.

“Hey, humano-nya.” Dijo Black Hanekawa desde el frente. “Refresca mi memoria-nya.


¿Qué es lo que querías que hiciera-nya?”
“……………………”

La inteligencia de un gato...

¿Debería confiar en ella?

Después de caminar un poco llegamos a una librería, la librería que contaba con la selección
más grande de la ciudad, la misma en la que el otro día Hanekawa y yo habíamos elegido los
libros para estudiar. Entonces la tienda todavía estaba abierta... así que aunque me dolía
estacionar mi bicicleta allí cuando no iba a hacer ninguna compra, no tenía otra opción.
Decidí estacionarla allí.

Continuamos caminando.

Todavía no hay rastros de la esencia de Shinobu.

Hablando de olores, podría imaginar que el sentido del olfato de un gato es mejor que el de
un humano, pero ¿si tuvieras que cuantificarlo cuán mejor es? Asumí que no tan bueno como
el de un perro.

“Hey, humano-nya.”

“¿Qué ocurre, Monstruo Felino?”

“Parece que sucedieron muchas cosas después de que luchaste conmigo, entre tú y nosotros-
nya.”

“¿Qué, te lo dijo Oshino?”

¿Habló con ella mientras vigilaba?

Sería como él. Le gustaba hablar.

“Sí.” Dije. “Un cangrejo, un caracol, un mono, y una serpiente.”

“¡Con eso haces un Nue-nya!”

“Solo con las partes del mono y la serpiente. ¿Qué hay del cangrejo y el caracol, a dónde
fueron? Y espera, deja de decir lo primero que se te ocurre.”

Mi impresión de Hanekawa fue empeorando cada vez más.

Deseaba que ella me mostrara al menos un atisbo de su inteligencia.


“Y yo soy… un vampiro.”

“Hm. Nya.” Dijo Black Hanekawa. “Humano, nos llamas excentricidades, pero... ¿Qué
piensas de ellas-nya?”

¿Qué pienso de ellas?

Así que su naturaleza nocturna la hizo un poco más coherente al estar en su entorno...
También lo fue la última vez, pero los cambios no fueron tan drásticos.

¿Qué podría significar la pregunta?

Era una oración vagamente redactada.

“Bueno, humano, si crees que te puedes llevar bien con nosotras-nya, tengo que arrastrarte
de nuevo a la realidad-nya. Las excentricidades son excentricidades-nya, los humanos son
humanos-nya, nunca están juntos. Sin importa qué, no pueden llevarse bien-nya.”

“Yo... realmente no entiendo. ¿Qué es lo que estás tratando de decirme?”

“Bueno, eso es porque eres estúpido-nya.”

“¡Nadie podría lastimarme más con esas palabras que tú!”

“Hmph. Tú sabes lo que dicen acerca de los sentimientos heridos... ¿Nya? Err, ¿qué dicen-
nya?”

“¡Si no se te ocurre nada no digas tonterías! Es doloroso ver a alguien incapaz de hacer una
línea rápida tratando de decir algo inteligente.”

Nuestra conversación no iba a ninguna parte.

A todas estas, ¿de qué estábamos hablando?

“Entonces, ¿estás tratando de decir que es imposible llevarse bien con las excentricidades?
Supongo que me siento así. Me quedo sin palabras y me veo como un perdedor cada vez que
trato con una. Es tan patético como parece. Las cosas nunca van tan bien para mí como lo
hacen con Oshino.”

Oshino Meme.

Un especialista, una autoridad sobre esta clase criaturas, las excentricidades.


Cuando lo pensé me resulto extraño. ¿Cómo comenzó él por ese camino? No sabía casi nada
acerca de sus antecedentes. Oh, tal vez él dijo algo acerca de haber ido a una universidad
Shinto... Pero no sabía cuánto de su currículum podía creer. Es de los que se inventaban las
cosas en el momento.

“Nyo, eso no es lo que quiero decir, por ejemplo, humano-nya. ¿Puedes imaginarte por qué
ese vampiro podría haberse largado-nya?”

“... No se me ocurre nada.”

“Ah. Así que eso es lo poco que entiendes de nosotras-nya... Y eso es puramente la razón por
la cual la camisa hawaiana tiende a estar en lo correcto-nya. Él... conoce la diferencia-nya.”

“Conoce la diferencia…”

“Él sabe lo que nyo es-nya.”

“………”

Ofrece una mano sin saber lo que estás haciendo, y te quemarás.

¿Era eso lo que quería decir?

No solo había ofrecido una mano, había ofrecido mi cuello. En ese caso, realmente no había
nada que pudiera hacer. Estaba a merced de las olas, no podía decir que me llevaba bien con
nada.

Especialmente cuando se trataba de Shinobu.

Un vampiro legendario, descendiente de una noble línea de sangre.

“¿Has oído hablar de Shinobu y de mí a través de Oshino? Dices todo eso, pero ¿realmente
entiendes nuestra relación?”

“Nyo tan bien, puede que lo haya oído-nya, pero ya lo he olvidado. Goro-goro. Por no decir
más, nyo lo entiendo-nya.”

“Bueno, eso es muy casual de tu parte.”

“Tal vez-nya, pero lo entiendo en gran parte, pero cuando digo ‘gran parte’-nyah, nyo estoy
maullando sobre los pechos de mi maestra, ¿¡nyokay!?”

“……”
No pude detectar el más mínimo indicio de inteligencia de esa broma...

No estaba siendo sucia, sólo estaba siendo vulgar.

“Las excentricidades son las que mejor entienden las excentricidades, después de todo,
somos iguales-nya.”

“Iguales...” Parecían tipos muy diferentes de excentricidades. ¿Eran lo mismo en que ambas
eran inhumanas? No, no era eso. “Iguales, por ser excentricidades, ¿eh?”

“Nyo estoy diciendo nada difícil, y de todos modos nyo puedo decir nada difícil-nya.
Escucha, humano, esa palabra ‘excentricidad’ lo dice todo-nya.” Afirmó Black Hanekawa.
“Excentricidades, criaturas excéntricas-nya. Diferente de los humanos, es por eso que nyo
puedes llevarte bien con nosotras. Si lo hicieras, ya nyo habría nada excéntrico en nosotras.
Goro-goro. La gente necesita creer en nosotras, temernos, recelarnos, odiarnos, venerarnos,
respetarnos, detestarnos, rechazarnos y rezarnos, por eso existimos-nya.”

“……”

“Pero, ¿llevarse bien con nosotras-nya? Nyo va a suceder-nya.”

¿Y quieres tratarnos como amigos? Nyo, gracias...

Así es como lo resumió Black Hanekawa.

Por alguna razón, sentí que me habían hecho una advertencia. Pero cuando lo pensé, ella
tenía razón... Los límites entre nosotros podrían haberse vuelto difusos para mí porque yo
mismo, en su momento, fui una excentricidad y ahora mismo soy la burla de un humano. Ser
demasiado consciente de ello era un problema, pero no ser consciente de ello en absoluto
también era un problema.

Shinobu.

Desde hace un tiempo, ¿no había empezado a tratarla como a una simple niña?

Nunca me referiría a ella como humana.

Pero, ¿no había estado pensando en ella de esa manera?

“Hey... espera, espera… No me digas, ¿es por eso?”

“¿Nya?”
“¿Es porque vi a Shinobu de esa forma, que Shinobu, como excentricidad, decidió
desaparecer?”

Un vampiro.

Pero, una burla de vampiro.

Habría sido un reto para su identidad.

Y, curiosamente, Oshino había dicho algo similar. Un viaje de autodescubrimiento.

¿Shinobu, ya no sabía quién era ella?

Ella... no podía comprenderse a sí misma.

“Quizás, o quizás nyo. Nyo se de ese tipo de detalles, podría sucederme lo mismo, pero
también soy diferente-nya. Pero, humano, hay una cosa que deberías recordar-nya... ¿De qué
es lo que estaba hablando-nya?”

“Lo olvidaste por tu cuenta.”

“Bien, eso es todo-nya. Podríamos estar aquí como un hecho de facto-nya, por supuesto,
pero tan pronto como la gente piense eso, nyos convertimos en mera realidad-nya.”

Vampiros, serían meros trastornos sanguíneos.

Gatos, serían meras personalidades múltiples.

Cangrejos, serían meras enfermedades.

Caracoles, serían meros niños perdidos.

Monos, serían meros slashers.

Serpientes, serían mero dolor.

Excentricidades, sería mera realidad.

“¿Y terminaríamos diciendo algo aburrido como: ‘No hay espacio en nuestra sociedad
científica para las excentricidades’?”

“Nyope. Simplemente nyo podríamos mantener la misma forma, estaremos aquí, por siempre
y para siempre-nya. Mientras ustedes los humanos estén cerca-nya.”

“Y así es como, has recorrido todo este camino junto a los humanos.”
“Prrrrecisamente. Goro-goro.”

Precisamente, dijo, el Gato Entrometido.

“Aun así, no la he olido-nya.”

“¿Hm? Oh, estás hablando del olor de Shinobu... ¿Ninguna clase de pista?”

“Debería captarla en cualquier momento, ella tiene un aroma único-nya...”

“¿Hm? Oh, estás hablando del olor de Shinobu... ¿Tampoco hay rastros?”

“Debería darme cuenta a tiempo, ella tiene un olor único-nya... Hey, humano. ¿Estás seguro
de que esa vampira en verdad se fue-nya?”

“Sí... estoy seguro de eso. La han visto al menos una vez.”

“Oh. Así que nyo hay posibilidad de que ella solo haya aparentado irse para esconderse
dentro de esas ruinas-nya...”

“Nunca lo consideré… Eso es muy inteligente de tu parte.”

“¿Qué pasaría si salió y luego regreso-nya? Ese lugar está tan lleno de su aroma que se
podría camuflar en ese lugar-nya.”

“Estoy bastante seguro de que si ese fuera el caso Oshino se daría cuenta...”

Camuflaje, eh.

¿Hm? Espera, pensé en algo, estoy a punto de encontrar algo... ¿Qué era? He perdido el
hilo... A este ritmo no tendré la moral para quejarme de este Monstruo Felino. En verdad se
iba a convertir en un concurso para ver quién era el más grande idiota.

¿Tenía la inteligencia de un gato?

Umm.

“Oh, cierto, ¿por qué no intentamos ir a donde Shinobu fue vista? Nos sacará de esta ruta,
pero podemos dirigirnos al Mister Donut... y luego seguiríamos el rastro de Shinobu desde
allí.”

“Hrmm. Técnicamente hablando nyo estoy siguiendo su olor, hablando con franqueza, nyo
confío en la intensidad de un olor-nya.”
“¿No lo haces?”

“Para hablar con honestidad-nya, comencé a buscar a esa vampira después de escabullirme
fuera del edificio, así que probablemente también pasase por ese Mister Donut.”

“¿En serio? Esas cosas se dicen desde el principio.”

Así que necesitábamos cambiar de rumbo. Si estábamos buscando su olor, no tenía sentido
buscar en un lugar que ya había revisado.

“Lo siento, lo olvide. Goro-goro.”

“…………”

Ahora sentí la urgente necesidad de obstinadamente volver sobre nuestros pasos, revisándolo
todo una y otra vez.

“El olor... se desvaneció en el camino-nya.” Dijo Black Hanekawa. “Nyo era posible seguirla
más... así que, humano-nya. Una pregunta. ¿Cuántos de sus poderes de vampiro puede usar
en este momento-nya? Si ella puede desaparecer, reaparecer y convertirse en sombras y
oscuridad, entonces hablare con la verdad: nyo podré encontrarla-nya.”

“Es seguro asumir que en este momento apenas puede usar cualquiera de sus poderes como
vampiro. Están casi totalmente limitados, e incluso si de alguna manera se las arregla para
usarlos, solo puede hacerlo cuando estoy cerca. Ella será capaz de hacer un poco de algo, ya
que le di mi sangre a principios de esta semana, pero si no estoy cerca, ella es solo...”

Es solo una niña.

No es una excentricidad.

Realidad.

Pero esa comprensión, ¿estaba equivocada?

“Hmm. En ese caso-nya...” Murmuró Black Hanekawa para sí misma. Parecía estar
pensando, no es que eso le fuese a servir. “Pero si lo vemos de esa manera, nyo es muy...

“¿Qué es? Deja de dejarme fuera de esto. Tenemos un dicho en nuestro mundo, sabes. Reúne
a tres hombres y tendrás la sabiduría de prajñā...”

“Ya veo. Goro-goro. ¿Qué es prajñyā-nya?”


“……”

¿Qué podría ser?

Había estado usando la palabra sin saberlo.

“De todos modos, no somos tres.” Dijo ella.

“Si, tienes razón.”

“Un hombre y un gato-nyah.”

No dos personas, un hombre y un gato.

Ella no estaba diciendo eso porque solo podía contar hasta uno, ¿verdad?

“De todos modos, humano-nya. Ahora nyo creo que se pueda encontrar a esa vampira solo
con métodos ordinarios-nya.”

“¿Entonces podría haberse ido de la ciudad? Sé que esto es solo la otra cara de lo que acabo
de decir, pero bueno, si está tan lejos de mí, no creo que ella...”

Iría demasiado lejos si dijera que no podía hacer nada.

Pero si lo intentara, existía la posibilidad de que ya no pudiera mantener su existencia.

“La razón por la que los vampiros chupan sangre-nya.”

“¿Qué?”

“Los vampiros chupan sangre humana-nya, pero significa cosas diferentes cuando la chupan
como alimento y cuando la chupan para hacer más de ellos-nya.”

“……”

Lo sabía.

Escuché eso durante las vacaciones de primavera, pero ¿por qué este gato lo sabía? Se
supone solo tenía el intelecto de un gato... Oh, por supuesto. La inteligencia es diferente del
conocimiento. A pesar de la diferencia entre los intelectos de Hanekawa y Black Hanekawa,
probablemente compartían algunos conocimientos.

“Quizás se escapó por eso-nya...”

“¿Eh? ¿Cómo es eso?”


“... Nya, eres tan denso.” Dijo Black Hanekawa, sus palabras estaban llenas de
estupefacción.

“¿Denso? ¿Qué quieres decir?”

“Estoy diciendo que eres obtuso-nya.”

“Bueno, estoy de acuerdo en que no soy el mejor para leer la mente de la gente...”

“Estoy diciendo que estás en ángulo obtuso-nya.”

“No me digas que vas a necesitar un transportador.”

“Estoy diciendo que desde que te conocí durante las vacaciones de primavera o cuando sea
que haya sido-nya, ese vampiro te ha visto relacionarte con una excentricidad tras otra. Es
posible que nyo se sintiera muy bien-nya.”

“¿Quieres decir que ver todas esas diferentes excentricidades, incluyéndote a ti, la hizo
sentirse menos especial? Por eso no soportaba más estar aquí...”

“Tan denso-nya.” Repitió Black Hanekawa.

Denso.

Por alguna razón no me gustó la palabra.

Añadió: “Dicen que las bestias se separan de los humanos cuando se dan cuenta de que ha
llegado el momento morir-nya; ¿los vampiros pueden tener ese comportamiento-nya?”

“No digas cosas siniestras como esa.”

“¿Realmente me estás regañando por hablar así de una excentricidad-nya? Pero, ¿qué vas a
hacer si nyo encuentras esa vampira-nya?”

“¿Qué voy a hacer? Bueno, yo estaría en problemas. Hanekawa no podría volver a la


normalidad, además…”

“¿Pero ese es el único problema-nya? Si ignoras a mi maestra, ¿nyo estarías mejor si esa
vampira nyo estuviera cerca-nya?”

“……” ¿Qué estaba tratando de decir? No tenía ningún sentido para mí.
“Solo porque ella existe aún tienes el vago aroma de un vampiro-nya. Ya que la dejaste
beber tu sangre o algo así, eso es lo que dijiste, ¿cierto-nya? Así que puedes volver a ser un
simple humano si esa vampira desaparece-nya.”

El que una vez fue vampiro volvería a ser un simple humano.

Yo podría volver.

Todo lo que tenía que hacer era abandonar a Shinobu.

“No puedes... esperar que yo haga eso. Nunca podría abandonarla. Yo…”

Si Hanekawa era mi salvadora.

Entonces Shinobu fue mi víctima.

“Ella podría matarme.” Continué. “Y aún no tendría ningún derecho a quejarme. Lo que le
hice a ella fue así de malo.”

“Dices eso-nya, pero ¿estás seguro de que simplemente nyo quieres renunciar a tu cuerpo
inmortal-nya?”

“No es eso. Si ella muere mañana, estoy listo para que mi vida dure lo mismo.”

“... Hm. Nya veo.”

Te estás viendo en ella-nya, dijo Black Hanekawa.

Si lo vas a poner así, claro, solo era un sentimiento unilateral. No podía quejarme si Shinobu
lo veía como molesto o irritante.

O tal vez por eso...

Pudo haber sido por eso que Shinobu se fue.

“Además, gato. Para empezar, la premisa de tu hipótesis es errónea. ¿Cómo podría ‘ignorar’
a tu maestra? Es imposible. Lo siento, pero necesitamos que regreses a sus alcances más
profundos; no voy a tener otra Semana Dorada.”

“Oh. Pero, humano, yo nyo diría que es imposible en absoluto-nya. Hay una manera de
hacerme volver a su interior sin depender de esa vampira-nya.

“… ¿La hay?”
¿Había una manera?

Si era rápida, eso es exactamente lo que quería.

Diez días fue nuestro límite, ese era en el peor de los casos; en otras palabras, estaría bien
siempre y cuando pudiéramos llevar todo a una resolución dentro de nueve días, tal como
sucedió la última vez.

“Si quieres hablar de la Semana Dorada, también fue lo mismo-nya. Un avatar del estrés de
mi maestra, deshazte de la raíz del estrés, y volveré a desaparecer-nya.”

“Hmm...”

Cuando este Gato Entrometido envió a los padres de Hanekawa al hospital usando su drenaje
de energía, durante un breve momento Hanekawa se dio cuenta de lo que estaba pasando,
probablemente porque lo que había hecho alivió considerablemente el estrés que sentía. Al
final no fue suficiente, dado todo el estrés que se había acumulado dentro de ella, por lo que
Black Hanekawa reapareció justo después...

Así que… La raíz de su estrés.

“Oshino también lo mencionó, pero no tenemos tiempo para determinar la raíz.” Dije. “Esta
vez no parece ser un problema familiar, y…

“¿Por qué necesitas precisar algo-nya? Nya sé lo que es.”

“... Correcto.”

Por descuido olvidé ese hecho.

Si ella era el avatar del estrés de Hanekawa, entonces sabría mejor que nadie la naturaleza de
ese estrés y qué tipo de estrés era, incluso mejor que la propia Hanekawa. Eso era
exactamente por qué sus primeras víctimas fueron los padres de Hanekawa...

“Espera, pero eso nos sigue dejando con un problema, gato. Incluso si sabemos cuál es la
raíz del estrés, no tenemos ninguna manera de deshacernos de él. Ya que luego de saberlo se
convertirá en el problema de Hanekawa, así que...”

No puedes resolver las preocupaciones de otra persona.

Al igual que con los padres de Hanekawa, no había nada que pudiera hacer.

Era igual para otras preocupaciones.


“Así que no importa cuál sea la raíz del estrés... aunque admito que tengo curiosidad por
saberlo. ¿Se trata de lo que hará después de la graduación? Pensándolo bien, parece que en la
librería a ella le comenzó a doler la cabeza cuando hablábamos de lo que haríamos luego de
graduarnos de secundaria, parecía que sabía lo que quería hacer, pero tal vez en su corazón
ella...”

“Nyo se trata de la graduación-nya.

“¿No, en serio?”

“De todos modos, creo que tú en parrrrticular podrías resolver fácilmente todo este estrés y
angustia-nya.”

“¿Fácilmente?”

“Tan fácil como cazar ratones-nya.”

“¿Se preocuparía Hanekawa por algo que es tan fácil de resolver? Oh, supongo que es la
simplicidad lo que la está haciendo tener un mal rato... ¿Hm? Espera, gato. ¿Qué quieres
decir con: ‘yo en particular’?”

Si yo podía hacerlo, ¿no podría hacerlo cualquiera?

Pero en ese caso, una vez más, ¿realmente se angustiaría por algo que cualquier otro podría
arreglar? Si era algo que yo podía hacer, la misma Hanekawa también podría...

De repente miré el reloj en mi muñeca derecha.

Más tiempo había pasado.

Senjougahara ya tendría que estar de regreso a su casa, pero dijo que planeaba llevar el
trabajo a casa, así que la verdadera lucha solo estaba empezando. Ahora que lo pensaba,
Senjougahara era probablemente la única de nuestra clase que podía manejar todas las
funciones de Hanekawa... Parecía que el ojo de Hanekawa para las personas era exacto
incluso cuando tenía orejas de gato saliendo de su cabeza.

Un ojo para la gente, eh.

Pero si eso era cierto, sus ojos debieron estar cerrados cuando me eligió como
vicerepresentante de la clase... Hacer eso esencialmente había duplicado su carga de trabajo.
Por otra parte, ella bien podría aumentar su carga de trabajo diez veces más, y
probablemente lo manejaría con facilidad...

“Bueno, nya ves, humano. Mi maestra.” Dijo Black Hanekawa, sonando un poco cautelosa.
“Ella está enamorada de ti-nya.”

“... ¿Eh?”

“Así que si correspondes los sentimientos de mi maestra-nya, debería ser capaz de salir del
camino, pero, nya... ¿Cuál es el problema-nya?”

“…… Um.”

Mis pies se detuvieron,

En realidad, mi cerebro también lo hizo.

¿Qué se supone que significa eso?

“¿Estás tratando de hacer un chiste o algo así? No puedo idear una broma para cada frase
estúpida, ¿sabes...? Y si eso es una broma, es realmente demasiado desagradable. Necesitas
saber que hay algunas cosas en las que se puede mentir y otras en las que no deberías…”

“Eres un tonto-nya, humano. ¿Es esta la cara de alguien que puede decir una mentira-nya?”

“……”

No la era.

Para ser honesto, odiaba la vieja frase: ‘Si fuera a mentirte, te diría una mentira más creíble’
(se anticipa que asumirán que mentirás), pero en este caso, para empezar, el Gato
Entrometido no tenía la habilidad de mentir. Nunca antes he mentido en mi vida, me dijo
Hanekawa una vez, pero esto era lo opuesto.

El Gato Entrometido no podía mentir.

Lo que significa…

“P-Pero.” Tartamudeé. “Si no estás mintiendo, gato, entonces debe haber una equivocación.
No hay forma de que sea verdad.”

“¿Qué te hace pensar eso-nya? ¿Cómo podría alguna vez malinterpretar a mi maestra-nya?
Ella es mi única e inigualable maestra-nya.”
“Pero Hanekawa...”

Ella fue amable con todos.

Cuanto peor era alguien como persona, más simpatía mostraba.

Es por eso que… de todas las personas, ella me escogió.

Y también es por eso que… ella me salvo durante las vacaciones de primavera.

“Solo entiendes cosas que tienen que ver con su estrés.” Argumenté. “Sé que puedes
compartir su conocimiento, pero debe haber algunas cosas a las que no puedes acceder. Es
imposible. ¿Por qué Hanekawa…?”

No.

Por otra parte, una vez Senjougahara intentó engañarme para que le dijera lo que sentía por
Hanekawa, cuando Senjougahara era como una masa de autodefensa y precaución. Si esa
Senjougahara probó una corazonada, ¿no había alguna base para ello?

“Sí, y eso es lo que estoy diciendo-nya.” Dijo Black Hanekawa como si estuviera enseñando
a usar una calculadora a un estudiante lento. “Por eso estaba estresada, mi maestra está
enamorada de ti, pero estás saliendo con otra persona-nya. Y tú has estado alardeando de
ello-nya.”

“……………”

Dolores de cabeza, estos comenzaron hace aproximadamente un mes.

Así lo dijo ella.

Hace un mes a partir de ahora sería, claro, el Día de las Madres. El día en que Senjougahara
y yo comenzamos a salir, y Hanekawa supo lo de nosotros desde ese mismo día…

Para la representante de nuestra clase... no había nada que ella no supiera.

Ella lo sabía todo.

“Pero Hanekawa nunca actuó de esa manera, en todo caso, fue como si nos estuviera
alentando, dándome consejos y esas cosas...”

“Exactamente por eso es que el estrés se acumulaba-nya. ¿Realmente crees que mi maestra
sería capaz de ir por un hombre con pareja-nya? Es imparcial y justa, limpia y pura, valora la
armonía por encima de todo, cree que es natural sacrificarse por el bien de los demás-nya.
Ella nunca diría una palabra al respecto-nya.”

Amor significa nunca tener que decir lo siento.

Pero.

No todos podrían hacer eso.

Así que le pedí consejo a alguien así y además le pedí que me animara. Fue lo mismo cuando
tuve que tratar con Kanbaru, e incluso cuando estábamos en la librería, no sólo hablábamos
de la graduación, sino de Senjougahara, yo estaba eligiendo qué hacer con ella en mente...

Los dolores de cabeza de Hanekawa no disminuyeron…

Cada vez se empeoraban más…

“………”

Me sentí… enfermo.

¿Qué es lo que he hecho?

Pero, ¿cómo podría haberme dado cuenta...? Quiero decir, ¿Hanekawa? Si esa mujer hiciera
un intento serio de ocultar sus propios sentimientos, ni siquiera Senjougahara sería capaz
saber de su existencia.

Pero.

Denso, eh.

Así que incluso sus planes después de la graduación... Oshino debió tener algo de influencia
en ella, pero también podrías verlo como el viaje de angustia de Hanekawa Tsubasa, y ella
comenzó a mostrar signos de dolor de cabeza justo después de que habláramos sobre
nuestros planes luego de graduarnos.

Además.

Hubo un momento en que ella cerró los ojos, sus labios se acercaron a mí…

“¿Cuándo comenzó?”

“Alrededor de las vacaciones de primavera-nya. Nyo sé exactamente por lo que estaba


pasando su corazón-nya, ya que fue antes de que apareciera, pero mi maestra vivía en un
ambiente que la sometía a un estrés constante-nya, tu historia de humanos y vampiros fue tan
rimbombante que debió tener el poder de sacarla de su apuro-nya.”

“¿Sacarla de su apuro?”

¿Cómo podría?

Tenía las manos tan ocupadas que...

“Aunque nyo creo que se pueda decir que nyo había señales en absoluto-nya. Mi maestra era
casi perfecta cuando se trataba de eso, pero debió bajar la guardia aquí y allá ya que era una
cuestión de amor-nya. ¿Nunca te pareció extraño que una representante de clase tan seria
eligiera a un vicerepresentante como tú-nya? Cualquier persona normal se daría cuenta de
que fue una elección equivocada-nya.”

“Oh… bueno.”

Sí, ella había elegido a la persona equivocada para el trabajo.

Hubo una razón para ello.

“Asumir que eres un delincuente y tratar de rehabilitarte suena como una razón que para
nada es una razón-nya.”

“Eso…”

En ese entonces, a principios de abril, cuando Hanekawa me nombró vicerepresentante


después de promulgar su recomendación a través de una cantidad decente de oposición, su
elección generó una buena cantidad de reacción. Estaba tan íntimamente involucrado en el
asunto que no lo veía así, y acepte sin reservas el argumento de Hanekawa donde dijo que las
personas maduran cuando se les asigna puestos de responsabilidad. Pero en realidad, ¿no
detestaba ella ese tipo presión a través de la autoridad?

“¿Entonces por qué?”

“¿Preguntas eso-nya? Porque ella quería estar contigo el mayor tiempo posible-nya. Después
de todo, el representante y vicerepresentante de clase de tercer año en secundaria trabajan
juntos para prepararse para el último Festival Cultural de sus vidas-nya... Pero hace un mes
ella dejó de intentarlo contigo-nya. El romance que mi maestra construyó lentamente, una
pieza a la vez, terminó de una forma brusca-nya. Nya-jajajaja, no, ¿debería decir que fue
cuando realmente comenzó-nya?”
“……”

Cuando sucedió, Hanekawa se alegró por mí.

O eso pensé.

Pero, ¿esa era otra mentira?

¿Nunca antes había mentido en su vida? Uh-uh.

Si eso fuera cierto, Hanekawa Tsubasa, ¡has estado mintiendo entre dientes!

“Para ser honesta, creo que mi maestra fue descuidada-nya. Ella casi nunca pensó que una
rival aparecería-nya. Si mi maestra hubiera sabido que eres amable con todos de la misma
manera que lo fuiste con ella durante la Semana Dorada-nya, si hubiera considerado que
alguien más podría ser salvado por ti como lo fue ella, sé que mi maestra es lo
suficientemente inteligente como para haber actuado antes-nya. En comparación, la mujer
con la que estás saliendo no perdió un momento, ¿verdad-nya?”

“Si, eso es verdad...”

Senjougahara, no dudó.

Tan pronto como se decidió ella entró a matar.

Hasta el punto de que la reacción normal era sentirse asustado.

“Una niña criada en un hogar frío y sin amor-nya.” Narraba Black Hanekawa. “Durante las
vacaciones de primavera, se encontró con algo chocante e inusual-nya, y también con que
algo le pasaba a un compañero de clase-nya. Se sentía casi como el destino. Los sentimientos
de amor comenzaron a brotar-nya. Y entonces su propia vida fue salvada por ese compañero
de clase, convirtiendo ese amor en algo seguro-nya. O algo así. Nya-jajajajajaja, ya sabes, si
esto fuera un manga para chicas mi maestra obviamente sería la protagonista-nya, pero por la
forma en que todo se le escapó, no sé si debería llamarlo perrrrfecto o patético-nya.”

“Nadie ataca más rápido que Senjougahara, ella podría comenzar más tarde que todos los
demás y ni siquiera pensar en ello como una desventaja.”

O…

Se movió a una velocidad casi apresurada en el Día de las Madres porque era lo
suficientemente sensible a las intenciones de Hanekawa, incluso para probar una corazonada.
Eso también podría explicar la extraña distancia que mantenía con respecto a Hanekawa...
pero…

Eso no fue culpa de Senjougahara.

Para empezar, ese tipo de cosas no son una competencia.

“En cualquier caso, es demasiado tarde-nya. Mi maestra no es el tipo de persona que pueda
robar a nadie, ella es muy pura-nya. Se suponía que era el tipo de amor sobre el que lees en
mangas para chicas, pero se convirtió en el anhelo de un hombre tomado en un abrir y cerrar
de ojos-nya, terminando como un amor ilícito y no correspondido.... y se sintió culpable por
ello-nya.”

“Bueno, ella es una persona seria.”

No podía ser abierta sobre lo loca que estaba por alguien, a diferencia de quien termino
atormentando a Sengoku. Pero eso tampoco significó llegar a un compromiso limpio con sus
sentimientos. No era el tipo de persona que podía negociar y llegar a un acuerdo consigo
misma.

“Ella también debió tener sus lamentos, si tan solo hubiera confesado sus sentimientos antes-
nya...” Observó Black Hanekawa. “Pero no es como si el gato madrugador atrapase al pájaro
o ese tipo de cosas, y los humanos que piensan así son mezquinos, ridículos y aburridos-
nya...”

Pero.

Ella nunca dijo una palabra al respecto.

Ella me animó y me prestó un oído cuando necesitaba un consejo.

¿Eso es lo que había estado pasando?

Siempre me animaba y me daba consejos, hablaba de sus propios sentimientos…

Por supuesto, tenía opiniones sobre las sutilezas del romance y las relaciones entre los sexos.

Una chica enamorada habría entendido mejor que nadie cómo se sentía Senjougahara.

“Por eso también provocaste el estrés de mi maestra durante la Semana Dorada-nya. Podrías
haber sido la única persona que nyo quería ver-nya.”

“Entonces…”
¿Estar ahí cuando ella me necesite? Para nada.

En ese momento, yo era la última persona que ella necesitaba, el mayor obstáculo.

“Eres tan denso que no mostraste ningún signo de notar el afecto de mi maestra o su
confusión-nya, y su estrés siguió aumentando, si me preguntas, estoy impresionada de que
pudiese aguantar un mes-nya.”

“Espera, gato... Espera. ¿Puedes asegurarlo? ¿Qué todo eso es correcto? Incluso si tienes
razón y yo fui la causa de su estrés…”

Si no fuera simplemente el detonante durante la Semana Dorada, sino también la misma bala
que le atravesó las entrañas...

“Eso no sería suficiente para que aparecieras, ¿verdad? Yo como mucho fui sólo una parte en
eso, y debió existir algún otro factor estresante poderoso que...”

“Nyope. Toda la culpa es tuya-nya.” Declaró Black Hanekawa. “En lo que respecta a sus
padres, mi maestra considera que eso se resolvió un poco después de la Semana Dorada-nya.
Aunque puede que no lo entiendas-nya.”

“Pero eso no tiene sentido. Eres la encarnación del estrés que se acumulaba dentro de ella
por culpa de su familia. Si sólo fueron un par de meses de romance, ¿por qué...?”

“¿¡Sólo!?” Los ojos del gato, brillaron de forma premonitoria. No hizo ningún esfuerzo por
ocultar su irritación. “¿¡Y que te hace pensar que nyo hay alguna razón para que unos meses
de angustia exacerbada superen los diez años de lucha familiar-nya!?”

Hasta ahora no he llevado la vida más feliz... Pero creo todo por lo que pase podría haber
valido la pena si fue lo que me permitió conocerte.

Si fue mi infelicidad lo que llamó tu atención, entonces me alegro de que haya sucedido de
esa manera.

Esas fueron las palabras de Senjougahara.

Pero entonces, una vez más….

¿Esas cosas realmente suceden?

“Pareces que nyo lo entiendes, humano-nya. ¿Podría ser que nunca te hayas enamorado
realmente de alguien-nya?”
“¿Qué...?”

“¿Estás seguro de que nyo estás saliendo con esa chica debido a su insistencia-nya? Si es así,
deberías romper de inmediato con ella y salir con mi maestra-nya. Eso también me haría
desaparecer-nya. Serías igual de feliz saliendo con cualquiera, ¿nyo?”

“……”

Tal vez debería haberme enfadado al escuchar eso, tal vez no debería haberme quedado en
silencio después de haber sido provocado tan descaradamente. Y siendo serio, si no hubiera
estado hablando con alguien que se parecía a Hanekawa Tsubasa, creo que lo habría hecho.

Pero... era Hanekawa diciendo esto.

Sentí que no tenía derecho a enojarme.

“... No puedo hacer eso, gato.”

“¿Hrrm? ¿Por qué nyo? ¿Piensas que mi maestra es tu salvadora, por lo que no deberías estar
devolviéndote el favor-nya? Al final del día, ¿son tus sentimientos de amor más importantes
que tus sentimientos de gratitud-nya?”

“Si permito que eso suceda, Hanekawa se aprovecharía de mi gratitud. No voy a ponerla en
esa posición... No, no es eso. Es solo una excusa conveniente. Es más simple que eso, no
puedo mentir acerca de mis sentimientos por Senjougahara. E incluso si lo hiciera, ¿no vería
Hanekawa a través de eso?”

Soy malo en decir mentiras, y soy malo en esconder cosas.

Soy frágil y débil.

No podía engañar a Hanekawa aunque quisiera, por supuesto, no quería hacerlo, y aunque
una parte de mí hubiera querido hacerlo si pudiera, pero solo al pensar en hacerlo, me daba
cuenta de que no era capaz.

“No se trata de que yo lo acepte y lo saque a relucir.” Dije. “No hay nada que pueda hacer al
respecto, ¿verdad? No es que Hanekawa quisiera salir conmigo si fuese a hacer eso,
además...”

“¿Estás seguro-nya? En realidad, me sentí desfallecer un poquitín cuando te dije cómo se


siente mi maestra, lo que claramente está aliviando su estrés-nya. Nadie es bello de pies a
cabeza, ni siquiera mi maestra. Mira cómo acecho debajo de ella-nya. Puede que te
sorprenda, tal vez a ella le encantaría y nyo le importaría en absoluto-nya. Podría ser
doloroso al principio, pero estará completamente bien una vez que se acostumbre-nya.”

“Una vez que se acostumbre, ¿realmente estás diciendo eso? Si fuera tan simple, Hanekawa
no te habría preocupado hasta el final de tu existencia. Ella no es el tipo de persona que
podría apartar a otro por su propio bien. No podría ponerse por delante de otra persona. Es
ese hecho sobre ella, lo que me hace sentir tan en deuda. Probablemente habría dicho que sí
antes del Día de las Madres. Sí, entonces me preocupaba por ella, como amigo. Pero no
puedo hacerlo ahora. Mis sentimientos están fijos en una sola persona, y es Senjougahara.
Me preguntaste si el amor es más importante para mí que la gratitud, pero no puedo poner a
ninguno de los dos por delante del otro. Es un doble vínculo. Por eso no puedo elegir a
Hanekawa.”

¿No sería Hanekawa-san la elección normal entre las dos? Eso es lo que dijo Hachikuji. Se
preguntó por qué elegí a Senjougahara, le pareció extraño.

Por qué.

¿Cómo se suponía que iba a responder a eso?

“Todo acerca de Senjougahara, incluida su personalidad, es lo que amo de ella.”

Dije la frase en su totalidad.

Sí.

Amo todo sobre ella.

No hay una parte de ella que no ame.

“Es la primera vez en mi vida que realmente me he enamorado de alguien.”

“Hmm. Nya veo.”

Black Hanekawa retrocedió, casualmente.

Como si desde el principio supiera lo que iba a decir.

Tal vez lo sabía, era Hanekawa.

Tal vez lo vio venir todo.


Lo sabe todo.

No, no todo.

Solo sabe lo que sabe.

“Y también, gato, incluso si unos meses de angustia exacerbada superaron los diez años de
lucha familiar... eso no es motivo para que ella te manifieste. Te guste o no debió soportar
esos dolores de cabeza. Y no sólo esta vez, sino también durante la Semana Dorada, ella
confió en ti por debilidad.”

Puede que no fuera endeble, pero la debilidad era debilidad.

Incluso si no era el resultado que quería.

Su debilidad la hizo recurrir a la agresión.

“No eres tú quien debería estar diciéndome esas palabras, es Hanekawa, todo lo que hizo fue
forzarte a hacer el trabajo desagradable.”

Como la vez con la serpiente de Sengoku.

Eso es lo que le hice a Kanbaru.

Postergar una decisión dolorosa y confiarla a otra persona.

Eso simplemente fue saber cómo actuar pero no hacerlo por egoísmo.

“Eres un Gato Entrometido, una excentricidad. Pero una excentricidad que surgió de la
debilidad de Hanekawa. Puede que no haya deseado lo que le diste, pero lo que le diste fue
lo que ella quería. Todo lo que hiciste, Hanekawa lo hizo. Lo sé, por supuesto... Hanekawa
tiene sus razones. Y sé que esto no es algo que deba decir, dado que en ambas ocasiones
comparto algo de responsabilidad, pero estoy bastante seguro de que hay personas en
entornos similares que lograron superar sus problemas por su cuenta, sin confiar en ninguna
excentricidad. El hecho de que Hanekawa haya confiado en algo como tu es un insulto para
todos ellos.”

“Bien, bien. Escucha-nya.” Black Hanekawa se burló de mí. “Supongo que tienes derecho a
decir eso, está bien para ti-nya. Eres un alma amable que incluso se sacrificaría para salvar
a un vampiro en al borde de la muerte-nya.”

“………”
“Ser amable con todos significa que nyo tienes a nadie especial, lo sé-nya, porque mi
maestra también es amable con todos. Hmph. Bueno, está bien, nyo puedo hacer nada-nya.
No puedes cambiar los sentimientos de alguien, la última vez lo descubrí. Me enteré, y
aprendí-nya.”

“Me alegra oír eso.” Así que después de todo íbamos a tener que encontrar a Shinobu. No es
de extrañar que no hubiera una solución conveniente. “Pero... me pregunto si también es el
caso de Hanekawa. Si lo es, entonces atacarla como acabo de hacerlo podría ser un poco
duro...”

“¿Hrm? ¿De qué estás hablando-nya?”

“Oh, ya sabes, podría ser la burla de uno, pero sigo siendo una especie vampiro, y los
vampiros tienen esta capacidad, el poder de la fascinación... por eso he sido tan popular entre
las chicas desde las vacaciones de primavera. Debes saber sobre esto, Hanekawa fue quien
me lo dijo.”

“Podríamos compartir conocimientos, pero nyo recuerdos-nya. Como dijiste, sólo sé de


cosas relacionadas con su estrés-nya.”

“Oh, cierto.”

Aun así, ya era un vampiro cuando conocí a Hanekawa. Y no una burla, fue antes de que
volviera a ser humano, durante mis auténticos días de vampiro, no podrías comenzar a
comparar mis poderes de fascinación y cualquier otra cosa ahora con los que tenía entonces.
Hanekawa cayó de bruces en medio de eso.

“Ella es una chica seria.” Le dije. “Si es por eso que ella comenzó a pensar en mí, creo que
eso la convertiría en una completa víctima...”

“……….”

“¿Qué pasa? ¿Por qué te callas?”

“Nyo, eso nyo es cierto.” Respondió Black Hanekawa. “Sí, es cierto que los vampiros
pueden encantar a las personas, pero incluso entre los vampiros verdaderos, solo algunos
tienen esa capacidad-nya. Así que no hay forma en que una imitación vampiro de como tú,
que pasó de ser humano a vampiro, pueda usarla-nya.”

“¿Qué? Pero…”
“Y la fascinación nyo es como una práctica poción de amor que podrías ver en una manga-
nya. Los objetivos pierden el control de su voluntad-nya. Es el poder de hacer que las
personas sean tus títeres-nya.”

“¿Hacerlos tus títeres? ¿No fascinarlos?”

“Dime, humano-nya. ¿Hay una chica a tu alrededor que sea totalmente obediente a tus
órdenes-nya? Alguien que hace exactamente lo que les dices, ¿sin nunca te desafiarte-nya?”

No había una sola persona así.

Absolutamente ninguna.

Incluso Sengoku, la más dócil del grupo, hizo actos impensables como darme pantalones
cortos de voleibol y un traje de baño escolar frente a las puertas de mi propia escuela
secundaria.

¿Pero la excentricidad que decía esto se basaba en el conocimiento de Hanekawa?

Después de todo, fue la misma Hanekawa quien me lo dijo…

Eso fue malo de mi parte, ¿verdad?

Oh... eso es lo que quiso decir.

Fue una mentira.

Una mentira, algo que ella nunca debió decir.

En ese caso, sabía lo que eso significaba para mí y para Senjougahara, pero también para
Hanekawa.

Pero dado lo que ahora sabía, parecía menos un caso de maldad que una especie de lamento,
el triste deseo de Hanekawa Tsubasa de que esa fuera nuestra realidad. Habría podido aliviar
algo de su estrés si hubiera sido el caso, porque podría culpar a una fuerza externa.

Pero no había nadie más a quien culpar.

“Nyo puedes cambiar los sentimientos de alguien-nya. Nya veo. Eso nyo era propio de mi
maestra-nya. Hmph, parece que nyo poder mentir hizo que dejaran al gato fuera de la bolsa-
nya.”

“Supongo que es otra instancia de forzarte todo el trabajo duro.”


No era algo bueno. El alivio que sentí, sin embargo, eclipsó eso. No fue gracias a ningún
vampiro, ningún poder de alguna excentricidad, fui yo, yo...

Fue porque soy Araragi Koyomi.

“Entonces, puedo sentirme orgulloso.”

“¿Hrm?”

“De que Hanekawa se enamorara de mí…”

¿Qué fue eso si no un honor?

Sentí que ese solo hecho era suficiente para seguir adelante.

Pero pensar que las cosas serían así... ¿Qué tendría que hacer, en este momento, para pagarle
a Hanekawa?

“Bueno, por ahora, debemos concentrarnos en alejarte, maldita sea, ¿a dónde se escapó
Shinobu? Tampoco he escuchado una palabra de ninguno de los que me están ayudando...
Oh, y necesito hablar con Sengoku para que vuelva a su casa...”

Espera, ¿cómo haría eso?

Ella no tenía un teléfono celular.

Oh, no. Ella podía usar un teléfono público para contactarme, pero no tenía forma de
contactarla... ¿Qué iba a hacer? Ella podría ser terca a su extraña manera, por lo que no iba a
ir a casa por su propia voluntad sin encontrar a Shinobu, sin importar cuán tarde llegara.

Tal vez... ¿Kanbaru?

Podría hacer que ella deje de buscar a Shinobu temporalmente y en su lugar trate de
encontrar a Sengoku. ¿Eso iba a ser todo? Agh, ¿por qué siempre tuve que confiar en ella
cuando más importaba...? A este ritmo jamás podría pagarle a Kanbaru. Me sentía preparado
para hacer cualquier cosa que ella me dijera.

“Hey, humano-nya.” Tenía mi teléfono celular en la mano mientras Black Hanekawa me


hablaba. Su tono parecía de alguna manera diferente de cada declaración que había hecho
hasta ahora. “Hay, otra manera-nya.”

“¿Otra?”
“Una forma rápida y efectiva de que me vaya sin depender de ningún vampiro-nya, la forma
más fácil para ti es salir con mi maestra, pero esta podría ser la segunda más fácil-nya.”

“Tengo mis dudas sobre cualquier plan que se te ocurra a ti y a tu cerebro... pero escucharé.
¿Qué es?”

“Camina un poco por mí-nya. Por allí, hasta debajo de esa farola-nya.”

“¿Aquí está bien?”

Hice lo que ella dijo.

No me estaba haciendo ilusiones, pero tenía que intentar cualquier plan que pudiera tener en
mis manos. Sin embargo, no veía la utilidad de caminar un poco.

“Ah, un poco al frente-nya. De lo contrario, estarías justo debajo-nya.”

“¿Justo debajo?”

Incliné la cabeza mientras ella seguía hablando sin sentido, pero aun así di un paso adelante,
y luego…

Ella me abrazó por detrás.

No se oyeron sus pasos, no hubo ningún sonido.

Ella se había movido como un gato mientras cazaba.

Pasó los dos brazos por debajo de mis axilas, los envolvió alrededor de mi torso, y me
abrazó. Un sabaori, no, un sabaori se hace desde el frente, y se usa para poner a un oponente
de rodillas, no para aplastar sus órganos internos, y...

No se usa para drenar la energía de un oponente.

E instantáneamente, toda mi energía estaba siendo absorbida.

Cualquier ropa que pudiéramos estar usando no importaba.

Esos dos grandes cojines no importaban.

Podía sentir lo rápido que mi cuerpo entero se debilitaba.

“G-Gato, tú...”
No tenía la energía para volver mi cabeza hacia atrás. Ni siquiera sentí que podía gritar de la
misma forma en que Hachikuji lo hizo cuando le había hecho lo mismo a ella esa mañana.

No pude levantar un meñique.

Pero no necesitaba mirar detrás de mí para saberlo, era Black Hanekawa quien me estaba
sosteniendo. Mi distanciamiento había sido un engaño, todo lo que quería era que le diera la
espalda...

Para bajar mi guardia.

Para poderme drenar hasta dejarme seco.

“¿Recuerdas lo que dije-nya? Nunca pienses que te has acostumbrado a nosotras-nya. Los
humanos nunca podrán llevarse bien con nosotras, no importa qué-nya.”

“Guh... Urgh, urrg…”

“Cuanto más nos portamos bien con los humanos, peor estamos-nya, parece que ahora
sabemos quién es el idiota más grande-nya.”

Era cierto, odiaba admitirlo, pero el Gato Entrometido tenía razón.

La situación ya era desesperada. Nunca podría pelearme contra el Gato Entrometido, incluso
si lo enfrentara de frente. Todo lo que tenía eran algunos efectos persistentes de ser una
excentricidad, no tenía medios para oponerme a una real. Pero para empeorar las cosas,
había venido de atrás... Parecía ridículo.

Parecía más que ridículo.

“P-Pero, ¿qué estás tratando de hacer? ¿Por qué me haces esto aquí y ahora? No es como si
absorber mi energía liberase a Hanekawa de su estrés.”

“Como dije, esta es la otra manera, la segunda más fácil. Por supuesto, desde mi perspectiva
es la más aguda-nya.” Dijo Black Hanekawa, antes de sorber, lamiéndome la nuca. Digo
lamer, pero la sensación no era lo que yo llamaría sensual, las lenguas de gato pinchan para
raspar la carne de los huesos. La piel de mi cuello fue arrancada de mi carne, y pude sentir
mi sangre brotar.

El Monstruo Felino bebió esa sangre, y se rio.


“Tú eres la causa del estrés, eres tú quien la estresa-nya. Al deshacerme de ti, ya nyo
necesitare estar aquí-nya. Nyo es ‘sólo a ti’ a quien estoy absorbiendo, eres el único al que le
he echado el ojo-nya. Nyo puedes cambiar los sentimientos de alguien, pero puedes borrar la
existencia de alguien-nya.”

“E-Eso…”

Su capacidad para drenar energía.

No hubo ningún caso donde fuese lo suficientemente malo como para matar a alguien, pero
eso de ninguna manera significaba que no podía serlo. Ningún ser humano podría tener su
energía y núcleo agotados, y seguir viviendo.

Pero... ¿Esto hará feliz a tu maestra, Black Hanekawa?

“Mi maestra nyo recuerda nada de lo que hago, ¿está bien-nya? Ella nyo lo considerará como
algo que hizo ella misma-nya. Estará triste si te has ido, por supuesto, pero incluso entonces,
sería mejor que ahora-nya. Puedo sentirlo, drenarte me está desvaneciendo-nya.”

“P-Pensé que habías dicho que habías aprendido, después de que atacaras a los padres de
Hanekawa en la Semana Dorada... ¿Qué todavía no era suficiente? El estrés de una persona
no es tan simple como...”

“Nyo, nyo es eso, mi error fue nyo haber matado a los padres de mi maestra-nya. Me
equivoqué cuando traté de ser considerada de una manera extraña hacia mi maestra, nyo
matar a nadie fue lo que hice mal-nya. Eso fue lo que aprendí-nya. Nyo volveré a cometer el
mismo error, nyo importa qué, te matare-nya.”

“Matarme...”

No podía creer las palabras.

No podía creer que las palabras salían de la boca de Hanekawa, pero quizás incluso estas
eran suyas, viniendo de algún lugar dentro de ella.

Dale la vuelta, y el reverso es el anverso.

En ese caso.

Hanekawa, de hecho, podría sentirse feliz por esto. Nunca querría que esto sucediera, ese
pensamiento podría haber sido nada más que una ilusión que proyecté en ella. Podría haber
sido, el resultado que ella quería. Ella podría estar recibiendo esto, porque es lo que ella
deseaba. La propuesta anterior del Gato Entrometido de salir con Hanekawa, incluso si eso
significaba mentir, tenía que haber venido de algún lugar dentro de ella.

En ese caso…

“... Hanekawa.”

En ese caso, esta sería una buena manera.

Ella me había salvado la vida.

Haría cualquier cosa por su bien.

Puede que no sea capaz de cambiar lo que siento...

Pero podría pensar que no me importaría morir.

“Deberías ser feliz, morirás en el abrazo del travieso cuerpo de mi maestra-nya. Vamos,
marchítate de felicidad-nya.”

Me iba a costar sentirme así mientras todos los sentimientos salían de mi cuerpo, y de todos
modos, mi sensación más inmediata fue el dolor en mi torso, por las afiladas garras al final
de los brazos que me rodeaban, apuñalándome los abdominales, pero incluso entonces…

Si pudiera morir por el bien de Hanekawa.

No, no pude.

No pude hacerlo

Estaba lo que dijo Senjougahara, así que no podía permitir que me mataran. Si Hanekawa me
mataba, o incluso si el cuerpo de Hanekawa me mataba, Senjougahara la mataría. No era una
ilusión proyectada, era una certeza. Senjougahara no dudaría, lo sabía. Y cuando se trataba
de eso no habría forma de prevenirlo. Ni siquiera Senjougahara le daría a Hanekawa el
tiempo para sentirse estresada.

Entonces, no pude hacerlo.

Esta, definitivamente sin lugar a dudas, era la peor manera posible.

“D-Déjame ir.”

“¿Hrrm?”
“S-Solo… déjame ir.”

No tenía espacio para explicar. El Gato Entrometido no conocía a Senjougahara... no, ella
habría tenido algún conocimiento de ella, pero el conocimiento de Hanekawa sobre
Senjougahara era limitado. A menos que la conocieras tan bien como yo, o al menos tan bien
como lo hizo Kanbaru, no reconocerías el peligro que representaba Senjougahara Hitagi...
pero sería como una hoja de papel flotando en el viento para el momento en que dijese todo
eso.

“¿Suplicas por tu vida-nya? Eso es bueno, nyo me importaría dejarte libre si dices que
saldrás con mi maestra-nya.”

“Gah… como dije, eso es imposible…”

“Eso pensaba-nya.” Dijo Black Hanekawa, una vez más con un tono de despreocupación. “Si
ese es el caso. Sólo muere-nya.”

“………”

“¿O quieres intentar pedirle ayuda a alguien-nya? Hasta ahora has salvado a tanta gente, tal
vez alguien venga a salvarte-nya.”

“¿Alguien?”

¿Cómo quién?

¿Hachikuji? ¿Sengoku? ¿Kanbaru? ¿Senjougahara?

“No hay forma de que alguien pueda salvarme.”

“¿Nyo? ¿Por qué nyo?”

“Porque las personas solo pueden salvarse a sí mismas…”

“Esa nyo es tu propia opinión, ¿verdad-nya?” Ella replicó, gentilmente. “Esas son solo
palabras, nyo cómo te sientes-nya. Si solo estás repitiendo las palabras de otros, eso nyo
significa nada, la pregunta es cómo te sientes-nya.”

“... Guh, gurrh…”

“Sí, las personas solo pueden salvarse a sí mismas-nya, pero ¿por qué debería importarte que
la gente ayuda a otros-nya? Pueden ir y salvar a tantas personas como quieran-nya.” La voz
del gato era gutural. “Dime, ¿cuánta gente crees que hay ahí fuera que quiere ayudarte-nya?
¿Y vas a rechazar a cada uno de ellos-nya...?”

La fuerza... abandonó mi cuerpo.

No podía seguir de pie.

Era como si los brazos de Black Hanekawa, envueltos alrededor de mi cuerpo, fueran lo
único que me apoyara, como si le hubiera confiado mi cuerpo por completo.

Mi mente se volvió turbia.

No pude hacer nada…

No podía hacer nada, no por mi cuenta.

Me hizo querer reír, pero tampoco tenía la fuerza para eso. No tenía la fuerza, pero aun así,
quería reírme.

Sí.

Supongo que... ella estaría triste. Hanekawa... y también Senjougahara. Y Kanbaru, y


Sengoku. Tal vez incluso Hachikuji.

Si yo muriera.

“Ayuda...”

Reuní las palabras.

Reuní las palabras y las pronuncié.

“Ayúdame... Shinobu.”

En ese momento.

Una chica saltó de mi propia sombra.

Una rubia.

Llevaba puesto un casco con gafas.

Tenía una constitución pequeña, pero separo el abrazo de Black Hanekawa de mi cuerpo en
un abrir y cerrar de ojos. Un suspiro más tarde y ella había enviado a volar el cuerpo de
Black Hanekawa. El gato ni siquiera pudo girar su cuerpo en el aire y se estrelló contra la
lámpara en el lado opuesto de la calle. La luz de la calle se inclinó, no, no fue tan fuerte, pero
el impacto fue suficiente para hacerla balancearse.

Entonces ella aterrizó.

Oshino Shinobu saltó de las sombras...

Y aterrizó mientras agitaba su cabello rubio a placer.

Shinobu.

¿Ella se estaba escondiendo... allí?

Pero cuando lo pensé, ese era el único lugar que quedaba. Era impensable no haber recibido
siquiera un informe de un avistamiento después de haber buscado en esta ciudad durante
tanto tiempo, y el sentido del olfato del Gato Entrometido no debería haber fallado como lo
hizo.

Así que.

Debí asumir lo que seguía, que estaba usando algún tipo de habilidad vampírica, pero me
había convencido de que no podía porque sus habilidades estaban limitadas.

No.

Había un agujero en mi lógica.

Todo este tiempo lo supe, ¿no? Podría usar un poco de sus poderes si estuviera cerca de mí,
lo que significaba que tenía que esconderse cerca de mí. Eso era todo lo que había al
respecto.

Un punto ciego psicológico, uno de los fundamentos de las novelas de misterio.

Si quieres ocultar algo, ocúltalo a la vista.

No solo eso, el escondite también era extremadamente efectivo contra el sentido del olfato
de un gato, porque su olor quedaría enmascarado por el mío.

Mi delgada sombra…

Shinobu se aprovechó de eso.

Fue probablemente en la tarde, o tal vez por la mañana. Mientras buscaba a Shinobu, ella me
encontró primero. Para hacer una suposición aleatoria, diría que fue alrededor del Mister
Donut. Y ahí es donde Shinobu, se escondió en mi sombra. Pertenecía al mundo de las
tinieblas, y esconderse en la sombra de alguien era una especialidad de los vampiros, pero
esa era la antigua ella. Ahora, la mía podría haber sido la única sombra en la que ella podía
esconderse...

Oh.

Justo debajo de eso, eso es lo que ella quiso decir.

Porque eso causaría que mi sombra estuviera directamente debajo de mí, por eso me dijo que
fuera bajo la farola... Era obvio quién ganaría en una pelea entre un Gato Entrometido y una
burla de un humano como yo, y no había necesidad de hacer eso para que ella se tomara la
molestia de atacarme por detrás. No tenía que jugar con planes complicados, solo necesitaba
atacarme de forma equitativa.

Lo que significa…

Miré a Black Hanekawa mientras yacía encogida bajo la luz de la calle.

Black Hanekawa, sonrió.

Pero eso también fue sólo por un momento.

Shinobu no tuvo piedad, el momento después de que el Gato Entrometido aterrizó, Shinobu
se lanzó hacia ella y la atacó. Extendiendo sus extremidades cortas tanto como pudo, las
entrelazó alrededor del cuerpo de Black Hanekawa y le hundió los dientes en el cuello.

Black Hanekawa nunca tuvo una oportunidad.

A partir de ahí, Shinobu chupó.

Si un Gato Entrometido tenía la capacidad de drenar energía, también la tendría un vampiro.


Ojo por ojo, diente por diente, excentricidad por excentricidad, drenaje de energía por
drenaje de energía. Incluso entonces, la vitalidad de Shinobu estaba siendo absorbida por el
Gato Entrometido simplemente porque se estaban tocando, pero Shinobu estaba chupando
aún más vitalidad del Gato Entrometido.

Como una comida completa.

Como excentricidades, un Gato Entrometido y un Vampiro están hechos de cosas diferentes.


Como excentricidades, un Gato Entrometido y un Vampiro están hechos a partir cosas
diferentes.

La escena fue una repetición de lo que presencié durante la Semana Dorada, una recreación
perfecta. Aunque en aquel momento costó bastante esfuerzo forzarla a esta posición... Esta
vez Black Hanekawa no estaba luchando.

Porque en este momento ella no tenía ni la oportunidad ni la voluntad.

Aunque no había forma de evitar que se le drenara energía, el Gato Entrometido se estaba
rindiendo a Shinobu. Si le apetecía, tenía la fuerza, la resistencia y la movilidad para
enfrentarse a Shinobu como era ahora (y sólo como era ahora), y sin embargo...

Por... su maestra.

Por supuesto, no debería fingir que entendí. Tal como dijo Black Hanekawa, no podía actuar
como si estuviera acostumbrado a las excentricidades, ser demasiado familiar o demasiado
amistoso, y me cuesta creer que eso fuera lo que Black Hanekawa quería desde el principio.

Si bien su inteligencia podría haber sido la de un gato, debió darse cuenta de que Shinobu
pudo estar escondida en mi sombra, y también que no había una manera fácil de atraerla.
Para ese fin, ella me había usado como cebo, como rehén, moviéndome debajo de una farola
donde mi sombra estaría aislada incluso de noche, antes de usar su drenaje de energía en mí.
Eso estaba claro, pero...

A Black Hanekawa probablemente no le habría importado matarme. Si Shinobu no se


hubiera escondido en mi sombra y hubiera abandonado la ciudad, probablemente Black
Hanekawa hubiera estado bien absorbiendo toda mi existencia.

Sólo sucedió que terminó así.

Ella no tenía el cerebro para decir una mentira.

Todo lo que decía el Gato Entrometido, era lo que quería decir.

Era como se sentía realmente.

Y también era cómo se sentía Hanekawa por dentro.

Ella forzó todo el trabajo duro al Gato Entrometido.

Ella tenía razón.


Parece que ahora sabíamos quién era el idiota más grande.

“… Ah.”

Gradualmente el cabello negro de Hanekawa recuperó su color.

Se volvió gris, luego marrón, luego negro.

Sus orejas de gato, también, lentamente fueron desapareciendo.

Esa existencia, la existencia, estaba siendo drenada por Shinobu.

La Asesina de Excentricidades.

Esa fue la maldición que desato Shinobu hasta las vacaciones de primavera.

Ya fuera un Gato Entrometido o cualquier otra cosa, ella hundió sus colmillos y succionó,
arrancando su propia existencia del mundo. Una auténtica criatura excéntrica de pleno
derecho…

Un vampiro, el rey de las excentricidades, el gobernante de la no vida.

“Es hora de parar, por favor, Shinobu. Detente.” Dije. “Si sigues chupando, Hanekawa
también se ira. Y yo... no quiero eso.”

Y cuando dije esas palabras.

Shinobu se alejó del cuello de Hanekawa con sorprendente despreocupación. El cuello de


Hanekawa… tenía dos claras marcas de colmillos, pero no tenía que preocuparme por eso.
Era diferente de la marca de mordida en mi propia nuca. A diferencia de mí, Shinobu solo
chupó la vitalidad del Gato Entrometido para alimentarse, simplemente estaba comiendo.

Los vampiros chupan la sangre humana, pero significa cosas diferentes cuando la chupan
como alimento y cuando la chupan para crear esclavos.

Tal vez por eso Shinobu se escapó.

Así lo dijo el Gato Entrometido.

La excentricidad que acababa de ser succionada.

Shinobu se dirigió hacia mí, luego de haber terminado con su comida, y se hundió de nuevo
en mi sombra.
¿Le había gustado?

¿Vivir en mi sombra?

Y entonces…

Solo éramos una Hanekawa de cabello negro y yo.

Ella no estaba consciente, sus ojos cerrados, ella estaba durmiendo.

Probablemente no se despertaría hasta la mañana siguiente.

“……”

Y con eso, el incidente quedó resuelto.

Pero, eso, por supuesto, no significaba que el problema se resolviera. La habíamos librado
del Gato Entrometido, pero nada más había cambiado, solo habíamos tratado con el Gato
Entrometido, y no con la causa del estrés en sí. No solo eso, este nuevo estrés había tomado
forma durante poco más de un mes, por lo que no había pocas posibilidades de que volviera
a aparecer. Incluso si no fuera así, Hanekawa tenía sus problemas familiares de larga data,
así que...

No.

Eso no era cierto.

Haciendo a un lado sus cosas familiares.

Lo que sucedió esta vez fue un problema sobre el que podía hacer algo.

Dependiendo de cómo me comportara podría hacer las cosas un poco más fáciles para
Hanekawa a partir del día siguiente. Por supuesto, no pensé que pudiera cambiar la forma en
que me sentía, pero esos sentimientos de querer recompensarla también eran los míos.

Quería salvar a Hanekawa.

Su nombre evocaba imágenes de tomar a otros bajo su ala, pero eso no significaba que no
podía tomarla bajo la mía.

Iría y la salvaría como quisiera.

No importa lo que digan los demás, eso es lo que deseo.


“Ufff...”

Un suspiro salió de mis labios.

Sin embargo tuve que admitir que estaba cansado... Después de todo, mi energía había sido
drenada casi hasta su límite. Incluso mi cuerpo, aquel que es la burla de un vampiro, parecía
que iba a necesitar tiempo para recuperarse. Yo también dudaba de poder moverme hasta la
mañana siguiente. Cierto, también necesitaba agradecer a todos los que me habían ayudado...

Bueno, estaría bien.

Pude ver a Hanekawa en su pijama.

Volviendo a “El Viento del Norte y el Sol”, esto me hizo más cercano al Viento del Norte,
pero... no había mejor vista de una Hanekawa en pijama bajo un una farola, con su cabello
negro y respiración lenta, era como si la hubieran puesto en el centro de atención. No sólo su
estado actual me hizo el doble de feliz, se sintió como si pudieras multiplicar mi alegría
actual por cuatro. Como compensación por el día trabajo duro, fue una bendición. Pasar la
noche con Hanekawa allí, mientras la veía desde el lado de la carretera, ahora no parecía tan
malo...

Las estrellas en el cielo.

Después de todo, eran tan hermosas.

“Mm, mmmh.” Hanekawa hizo un sonido.

Como si ella estuviera hablando en su sueño.

“Araragi-kun...”

O tal vez, no hablaba en sueños tanto como se le escapaban palabras en su nebuloso estado
mental. Shinobu solo le había succionado la existencia del Gato Entrometido, por lo que
quizás aún tenía problemas para separar a Black Hanekawa y Hanekawa en su cabeza,
poniéndola en un estado en el que ambas se mezclaban.

Así que no estaba hablando mientras dormía, estaba expresando sus sentimientos.

Hanekawa Tsubasa, sin adornos, los verdaderos sentimientos se derramaban de sus labios.

“¿Qué estás diciendo? Devolverme el favor es más importante para ti que nuestra amistad,
no digas eso. Son palabras muy tristes y solitarias.”
“……”

Hanekawa mantuvo los ojos cerrados, mientras murmuraba las palabras.

“Araragi-kun... Tienes que ponerte en forma.”

Y luego, ella de nuevo cayó en un profundo sueño.

Dios mío, incluso cuando ella duerme.

Seria hasta el final… una maestra en eso.

No era el momento de preocuparse por otra persona.

Aun así, mi respuesta fue inmediata y sincera, como un reflejo condicionado. No había sido
entrenado por Hanekawa estos dos meses desde que llegué a tercer año para nada. A pesar de
todo, sabía cómo debía responder.

“Ok.”
008
El epílogo, o tal vez, el remate de esta historia.

Al día siguiente, como siempre fui despertado por mis hermanas Karen y Tsukihi. Hm.
Pensé, inclinando mi cabeza, que es cuando todo volvió a mí. Correcto, a la final no pase la
noche allí al lado de la carretera. Mientras que eso estaba peligrosamente cerca de suceder
(“peligrosamente” se siente como una palabra equivocada cuando pienso en Hanekawa con
su pijama, en su lugar tal vez debería usar una palabra acentué mi suerte), después de poco
de tiempo Kanbaru Suruga llegó a una velocidad increíble usando takkyudo, pasos
relámpago, sostenía B presionado para correr, o lo que sea que haya hecho. Después de hacer
todo lo que estaba a mi alcance para detener el corazón palpitante de Kanbaru, así que esta
es Hanekawa-senpai, esa senpai de la que tanto he oído hablar, le pedí que llevara a
Hanekawa a casa. Con lo complicada que es su situación familiar, podría ser más fácil
encontrar una excusa si una chica de segundo año la llevara a su casa, en vez de que yo, un
chico, lo hiciera. Decir que tiene algo que ver con el Festival Cultural debería ser una razón
suficiente. No... Aunque no fuera así, no tenía fuerzas para llevarla a casa. Así que le
pregunté a Kanbaru, ¿podrías llamar a mis hermanas? Te daré sus números, también le pedí
que buscara a Sengoku, pero Kanbaru se la había encontrado un poco antes y la hizo ir a casa
porque se estaba haciendo tarde. Así que, ella también era muy lista. Cuando le pregunté
para asegurarme de que no había seducido a Sengoku, Kanbaru me lanzó una sonrisa
avergonzada, espera, ese tipo de sonrisa no era la respuesta correcta.

Y así como Kanbaru y Sengoku me habían ayudado el lunes, mis dos hermanas pequeñas me
apoyaron desde ambos lados mientras nos dirigíamos a casa, y luego dormí, últimamente te
has estado metiendo en demasiados problemas, Nii-chan, la mayor de las dos me regañó. No
había nada que pudiera decir en mi defensa. Aunque al mismo tiempo, esas dos son las
últimas personas de las que me gustaría escuchar eso...

De todos modos, a la mañana siguiente.

Me dirigí hacia la escuela de preparación abandonada antes de ir a la escuela, para entregar a


Shinobu, quien había estado escondida en mi sombra desde entonces, de vuelta a Oshino. No
llegue a saber por qué ella se fugó. Podría preguntarle, pero ella no respondería, y ella, por
supuesto, no estaba diciendo nada por su cuenta. Podría llegar a una lista completa de
conjeturas, pero también sentí que todas estaban equivocadas. Incluso podría haber sido que
ella quería hacerme sudar por molestarla con demasiada frecuencia, pero eso podría ser otra
suposición errónea.

Oshino no estaba en la escuela abandonada.

Parecía estar fuera.

Ahora que lo pienso, tampoco sabía cuáles eran las intenciones de Oshino, ¿por qué dejó que
el Gato Entrometido se escapara? Tal vez realmente se escapó cuando él no estaba mirando,
pero él también podría haber hecho la vista gorda. De cualquier manera, fue la única vez que
me pareció imposible creer que pudiera haber visto venir cada giro. Él podría haber predicho
que actuaría como una trampa para ratones al salir a buscar a Shinobu y que ella se
escondería en mi sombra, pero ¿por qué querría que el Gato Entrometido me mordiera?
Black Hanekawa tenía la inteligencia de un gato, entonces, ¿cuál era la probabilidad de que
descubriera la verdad de la situación?

Sin embargo.

Tenía que decir que había una cosa que debía saber: la raíz del estrés de Hanekawa. Él ya lo
sabía cuándo hizo su primera pregunta.

No era que Oshino fuera especial, es que soy así de denso.

Yo era obtuso.

Menos agudo que cualquier cosa que haya encontrado todo el día.

Pero si él no estaba cerca, no estaba cerca.

Si no puedes evitarlo, no hay nada que puedas hacer el respecto.

Y así me dirigí a la escuela, con Shinobu todavía escondida en mi sombra. Yo dudaba en


llevarla a la escuela, pero dudaba aún más en dejar sola a un vampiro que ahora tenía
antecedentes de fuga.

Me encontré a Hanekawa en la clase.

“Oh. Llegaste más tarde de lo habitual.” Dijo.

“Bueno, me desvié por el camino.”

“¿Te sientes bien?”


“Me siento genial.”

“Buenos días.”

“Buenos días.”

Eso fue todo.

Todavía no sé cuánto de su memoria perdió como Hanekawa, ni qué retiene. Tendría que
preguntarle alguna vez, pero ese momento no era ahora. Necesitaba algo de espacio para
poner su mente en orden.

Como siempre, Senjougahara llegó a la escuela momentos antes del inicio de las clases,
como si lo hubiera calculado para no perder un solo momento.

“Bienvenido de vuelta.”

“Gracias.”

“¿Cuándo es nuestra próxima cita?” Preguntó bruscamente.

Con la misma cara plana e inexpresiva de siempre.

“Lo planearas todo, Araragi-kun.”

“………”

“Te despellejaré si me llevas a algún lugar patético.”

“Entendido.”

De hecho, tenía un plan.

En esta ocasión le mostraría a Senjougahara mi tesoro.

Cierto, eventualmente también tendríamos que comer algo de cangrejo.

Después de las clases, nos preparamos para el Festival Cultural, el último de nuestra vida
como estudiantes de escuela secundaria, se acercaba tanto que podía saborearlo y hoy es el
último día de los preparativos. Incluso Senjougahara no se saltó los deberes del día y nos
ayudó a esforzarnos por alcanzar nuestra meta. Sonaba como si todos se hubieran quedado
hasta la hora más avanzada del día anterior, pero ahora que la representante de la clase había
regresado, el trabajo avanzaba a un nivel de eficiencia completamente diferente, y todos
nuestros compañeros de clase estaban libres antes de que la escuela cerrara oficialmente.
A partir de ahí, decidí darle otra visita a la escuela de preparación abandonada y me llevé a
Senjougahara, Hanekawa y también a Kanbaru, que nos estaban esperando. Yo era el único
con una bicicleta, así que la empujé y todos caminamos juntos.

De nuevo.

Oshino no estaba allí.

Esto es extraño, dijo Senjougahara. Ese hombre actúa como si lo viera venir todo, y no ha
estado aquí en dos de tus visitas seguidas. Me hizo darme cuenta de que si algo era extraño,
era que Senjougahara había venido conmigo para encontrarse con Oshino, incluso si yo la
había invitado. Tal vez ella ya sintió que esto pasaría. Tal vez ya se había dado cuenta
cuando se lo expliqué.

Los cuatro nos separamos y buscamos en todos los rincones y grietas de las ruinas, pero
Oshino no estaba en ninguna parte. Sin embargo, cuando miramos de cerca, muy de cerca,
parecía que faltaban algunas cosas dentro del edificio, y todas eran pertenencias de Oshino.

Ahora estaba claro.

Oshino Meme se había ido.

Sin dejar una sola nota, había dejado nuestra ciudad.

Ahora tenía sentido, cuando el día anterior había ido en bicicleta a la escuela de preparación
abandonada con Hanekawa, no estaba fuera para encontrar a Shinobu. Había estado en
medio de hacer las maletas. Debía estar deshaciendo ese límite espiritual que había
establecido alrededor del lugar.

En aquella ocasión.

No me habían esperado.

El santuario en ruinas en la cima de la montaña, el interés de Oshino en esta ciudad debió


llegar a su punto final cuando se resolvió el caso. Era uno de sus objetivos más grandes, así
lo describía él.

Su recopilación e investigación algún día llegaría a su fin:

Algún día saldría de esta ciudad.

Y eso resultó ser ahora.


No voy a desaparecer de repente un día sin siquiera despedirme, soy un adulto, conozco mis
modales...

¿Por qué no me di cuenta?

Ya se estaba despidiendo con esas palabras. ¿De qué otra forma podrían interpretarse? Era
un hombre que nunca se despidió, que no podía con las separaciones, un hombre torpe, sin
tacto, y era la muestra de afecto más sincera que podía manejar...

Honestamente.

Realmente soy denso.

Debí ser capaz de darme cuenta de eso.

No hay tiempo, me había dicho.

Así que eso era sobre Shinobu.

También miró hacia otro lado cuando Shinobu se fue, lo supo y la dejó escapar.
Probablemente no la había alentado activamente, pero debió verlo como una buena
oportunidad. El Gato Entrometido se unió a la refriega en un buen momento, es decir, uno
malo, por lo que solo lo agregó retroactivamente a la historia. En otras palabras, vio la
desaparición de Shinobu como una prueba para mí, o más bien, como una especie de regalo
de despedida.

Se aseguró de algo cuando corrí a buscar a Shinobu, y después de dejar escapar al Gato
Entrometido, debió de recoger sus cosas e irse. Estaba seguro de que me las arreglaría por mi
cuenta para hacer algo tanto con Shinobu como con Hanekawa.

Ese bastardo con camisa hawaiana.

Tratando de actuar tan suave.

No me estaba haciendo pensar que era genial.

Ya había pasado un día, así que Oshino ya debería estar en otra ciudad donde estaría
ocupado recogiendo e investigando, quién sabe, quizás estaba salvando a alguien de una
excentricidad violenta mientras pasaba por allí.

Sí.

Probablemente estaba salvando a alguien.


“Entonces...” Dije.

“Sí.” Dijo Senjougahara.

“Totalmente.” Agregó Hanekawa.

“No hay error.” Estuvo de acuerdo Kanbaru.

Y luego, los cuatro al unísono.

“Tonto.”

Oshino Meme…

Una persona frívola, cínica, vulgar, mezquina, arrogante, superficial, maliciosa, insincera,
dramática, burlona, egoísta, mentirosa, deshonesta e infinitamente buena y amable.

Y así, volvimos cada uno a nuestros hogares. Kanbaru se fue primero, luego Hanekawa se
separó, y después caminé a casa de Senjougahara. Allí, por primera vez, es decir, por fin,
Senjougahara me dio de comer de algo que ella cocino.

En lo que respecta a mis pensamientos sobre el sabor y sus habilidades, bueno, digamos que
fue un movimiento inteligente de su parte dejarlo en manos de mi imaginación durante tanto
tiempo.

Probablemente voy a encontrar más excentricidades en mi vida.

No puedo fingir que nunca me las encontré, y no puedo olvidarlas.

Pero, eso está bien.

Lo sé.

Que hay oscuridad en el mundo, y que las cosas viven en la oscuridad.

Por ejemplo, en mi propia sombra.

Una niña rubia, que parece estar muy cómoda allí dentro.

Ya era tarde cuando llegué a casa, así que cené, me bañé y me fui a dormir. Seguramente mis
dos hermanas me despertarían a la mañana siguiente, como siempre lo hacen.

Finalmente mañana seria el Festival Cultural.

Lo que nuestra clase estaba organizando era: una casa embrujada.


Palabras del Autor

Aunque no hay forma de saber cuánta gente se ha encontrado preocupada por cómo trazar la
línea entre sus pasatiempos y su trabajo, creo que el problema es tan difícil porque partimos
de la premisa de que los pasatiempos y el trabajo tienen el mismo valor absoluto.
Pasatiempos. Y trabajar. Lo admito, ambos son problemas importantes en la vida de uno. Sin
embargo, cuando lo pienso detenidamente, parece de alguna manera antinatural que tratemos
a los dos como mutuamente excluyentes. O mejor dicho, es una noción ética profundamente
arraigada la que dicta que los pasatiempos y el trabajo nunca deben ser uno y lo mismo, esa
premisa parece existir antes de siquiera darte cuenta. Se dice que no debes hacer de tu
pasatiempo tu trabajo, pero no podemos sobrevivir sin trabajar. Mientras tanto, la vida se
siente vacía sin pasatiempos. En ese caso, deberíamos animar a la gente a que haga de su
pasatiempo su trabajo, o de su trabajo su pasatiempo, desde el punto de vista de la eficiencia.
Entonces, ¿por qué se dice que no debes hacer de tu pasatiempo tu trabajo? Probablemente
gracias a una contradicción como la siguiente: ver el trabajo que realizamos para vivir, en
términos de disfrute es inapropiado, mientras que los pasatiempos, que tenemos para vivir
mejor, están destinados a ser disfrutados. Pero no es como si hacer de tu pasatiempo tu
trabajo significara que deja de ser un pasatiempo, y tampoco es como si algo dejara de contar
como trabajo porque lo estás haciendo como pasatiempo. Tu pasatiempo no es tu trabajo, y
tu trabajo no es tu pasatiempo. Es tu pasatiempo, y también es tu trabajo. Puede que no haya
nada más genial que alguien que pueda ser un ejemplo vivo de esta idea.

Así que, a riesgo de ser malinterpretado, me gustaría decir que BAKEMONOGATARI fue
escrito enteramente como un pasatiempo. No hay ni una pizca de nada relacionado con el
trabajo. Comenzó como una novela que escribí como una distracción para llenar un hueco en
mi agenda, y honestamente me pregunto si realmente debería publicarla de esta manera.
Como lo escribí como un pasatiempo, me avergüenza mucho que los personajes favoritos del
autor pudieran ser clasificados con demasiada facilidad, pero me divertí tanto escribiendo
escenas de cualquiera de los personajes hablando que, por primera vez en mucho tiempo, me
acordé de los días en los que apenas empezaba a escribir novelas. Como antes, VOFAN tuvo
la amabilidad de adornar estas páginas con su trabajo. Por supuesto, soy reacio a separarme
de él, dado que era un pasatiempo, pero esto pone fin a las cinco historias de estos
volúmenes. Esto ha sido BAKEMONOGATARI, que consistió en “Cangrejo Hitagi”,
“Caracola Mayoi”, “Mona Suruga”, “Serpiente Nadeko” y “Gata Tsubasa”.

Muchas gracias por seguir mi pasatiempo.

NISIOISIN.
Palabras del Traductor

El principio del fin o el fin del principio, dependiendo tu punto de vista ambas cosas pueden
llegar a ser los mismo, al igual que tu pasatiempo y tu trabajo, y sí, me estoy apoyando en las
palabras anteriores, siempre es más fácil recorrer camino ya andado. Para mi esta historia
simplemente marca un antes y un después.

No hace falta comentar en exceso lo que aconteció, todo quedo claro. Pero si quiero decir
que esos leves fragmentos de conversación omitidos en la animación, por más mínimos que
sean, se sienten tan sustanciales, no sobra ni falta nada, realmente admiro la adaptación por
lograr que cobrasen vida tal cantidad de palabras.

A diferencia de la vez pasada hubo muchísimas menos anotaciones, esto es a causa de la


versión traducida (la oficial en inglés, la cual en el volumen pasado se usó pero solo como
material correctivo y referencial), lo cual también condujo y exigió más atención puesto que
se obviaron los honoríficos, se cambiaron algunos diálogos, y ciertas bromas y juegos de
palabras fueron adaptados al inglés. Todo esto fue resuelto en la medida de lo posible gracias
al anime y al anterior volumen, sin embargo hubo casos donde tuve que hacer uso de ‘las
libertades creativas’, donde cierta parte de cierto diálogo se cambió de un juego de palabras
(que a mi parecer no fue gracioso) a una rima, y cierta otra broma en ese mismo diálogo se
mantuvo como lo hizo la adaptación al inglés, creo que acá todos saben de qué diálogo
hablo.

Una vez más no me considero digno de haber trabajado en esto pero no me repetiré, solo
diré: gracias por leer.

No pienso publicitarme, solo déjame decirte que si algún día esta maravillosa historia se
serializa en tu país destruye esta versión y adquiere la original, humildemente te lo pido.

Prometiendo hacer las correcciones necesarias para mantener la obra lo más fiel posible a
como se originó, sin más nos leemos (?) en otra ocasión.

He de decirlo, nunca deja de doler como Hanekawa es rechazada.


Para Serpiente Nadeko:

Embrutecidos los hombres por todas las ignorancias, se entregan


víctimas de la miseria y de la inmortalidad a toda clase de
crímenes, y ni siquiera piensan en defender derechos cuya
importancia no saben comprender.
JUSTO SIERRA MÉNDEZ.
Poeta y escritor mexicano.
(1848-1912)

Para Gata Tsubasa:

Si yo perdiera mi fe en ti, me moriría. Yo sé, amor mío, que las


nubes sólo duran un momento y que el sol es para todos los días.
RABINDRANATH TAGORE.
Filósofo y poeta hindú.
(1861-1941)

Para todos de Ferindrad.

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