LA LUCHA HASTA

AHORA DIVIDIDA: El
feminismo dividido por
preferencias y clases sociales.

Sofía Núñez Ruiz

Resumen
En el transcurso de este trabajo se desarrollarán conceptos el feminismo, la revolución, los
movimientos sociales y la diversidad que traen las diferencias de distintos actores participes de la
sociedad y de la construcción de ésta. Los movimientos feministas no pueden estar aislados el
uno del otro ya que la revolución no se puede hacer solo con un feminismo, cada uno de ellos
tienen un punto común y sobre este deben basar sus luchas en contra de la tradición y las
organizaciones que perpetúan costumbres que van en contra de la moral colectiva del
movimiento revolucionario feminista. Los dolores y las discriminaciones son características que
unen a todas las mujeres y son puntos de encuentro para poder comenzar el dialogo de lo que es
ser mujer.
Palabras claves: Feminismos, luchas, equidad, revolución y diversidad.
Autoras: Castillo, Ana., Cherríe, Moraga., Thomas, Florence., Fals Borda, Orlando., Moncayo,
Víctor y Zibechi, Raúl

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 Introducción

Es complejo, la mayoría de los trabajos que alguna vez leí han sido impersonales siempre
escritos en tercera persona la academia me ha enseñado eso, mis maestros actuales y pasados
repasan las características de un trabajo investigativo serio y entre ellos está no escribir en
primera persona, siempre me pareció extraño. La literatura con la que me críe también era
impersonal, nunca era el autor hablándome directamente sino era un personaje que prestaba su
voz a éste y aunque era bonito leerlo no sentía que mi voz alcanzaría para mostrar mis ideas,
siempre sentí que nadie debía saber quién era el autor de los escritos que hacía y hago, me da
terror que las personas que lean este texto sepan quien soy. Mientras escribo esta introducción
me doy cuenta de que es más difícil escribir así, escribir no es fácil y aún menos fácil cuando lo
haces desde tu propia voz o sin tomar prestada una inexistente, el sentirse vulnerable ante un
desconocido es el mayor acto de resistencia en contra de la sociedad que me ha visto crecer y les
ha dicho a todos que los sentimientos son debilidad.
Fals Borda en su texto Una sociología sentipensante para América Latina en su capítulo
dedicado a la subversión expresa que un acto de revolución es el acto que va en contra de la
tradición, que todo está sometido al análisis y critica de todos, así que para dar comienzo a la
presentación de este trabajo me vuelvo una actora subversiva y escribo de forma contraria a la
norma. Todo para mostrar que el acto revolucionario comienza con alguien y que aunque a
muchos no les guste puede suponer la apertura de la academia y las temáticas que ésta muestra a
las personas ajenas a ésta y que actos iguales o más pequeños llegan a tener más relevancia que
las mismas marchas que hasta cierto punto llegan a ser una representación del movimiento social
desde la perspectiva de Raúl Zibechi, como el ser lesbiana en una casa con tradiciones católicas
hasta el utilizar vestidos siendo un hombre cisgénero dentro de una sociedad heteropatriarcal.
Desarrollaré este trabajo al redor del feminismo y no como el movimiento, sino que intentaré
tratarlo como el concepto maleable que es.
Para plantear la pregunta problema de este trabajo tuve que ser bastante cuidadosa y
recordar muchas de mis experiencias como una mujer cisgénero, no heterosexual pero tampoco
homosexual así que dejémoslo en persona en el limbo, morena ni muy oscura como para que la
sociedad sea directamente racista conmigo ni muy clara como para serle indiferente a la misma,
pero al fin y al cabo mujer en un país cisheteropatriarcal regido por tradiciones más viejas que
caminar a pie y más establecidas que los dogmas de la iglesia. Así que después de un análisis
interno, lectura y análisis externo de mi país concluí ¿Por qué se debería considerar al feminismo
como una lucha conjunta entre las clases que permean a las mujeres y dentro de este grupo a la
diversidad de lo que es ser mujer? Ésta devino de lecturas sobre clases de feminismos, de
divisiones entre mujeres, visiones de lo que es ser mujer y lo que no, ¿Quién es alguien para
decirle al otro que no es algo? ¿Cómo el acto de unir los feminismos es un acto revolucionario?
La estructura del desarrollo del trabajo va a ser orgánica, empezará con mostrar que es lo
que consideramos revolución o en palabras de Fals Borda subversión, luego hablaremos un poco
de lo que es feminismo desde Florence Thomas, luego abarcaremos con detenimiento algunas de
las historias de mujeres contadas en el libro Esta puente, Mi espalda de Cherríe Moraga y Ana
Castillo mezclado con un poco de experiencia personal y como fin daremos una conclusión al
unir los temas antes explicados para dar respuestas a nuestra pregunta base.

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 Subversión o Revolución

Mi contexto es vario, vivo en Colombia exactamente en su capital siempre he vivido aquí

tengo el privilegio de contar con una educación básica, media y ahora superior, también he
podido viajar a diversas partes del territorio nacional y hasta viajado internacionalmente, mi
tradición o lo que considero parte de mi herencia, parte de lo que me hace colombiana o parte de
lo que es ser miembro activo de la sociedad en la que me desarrollo es bastante pequeña mi
familia no es lo más tradicional, no se tiene la configuración católica o cristiana en la que se rige
mi país, no nací en una familia tradicional, mi mamá estaba embarazada de mi cuando estaba en
la Universidad (curiosamente en la misma en la que estoy ahora) ella no estaba casada ni mucho
menos tenía una casa a su nombre y mi papá estaba trabajando y al igual que mi mamá vivía con
sus papás y no había en sus planes cercanos necesidad de casarse.
Mi familia no se conforma con el papá trabajador y la mamá ama de casa (con la
simplicidad que la sociedad suele explicar el trabajo de crianza) por mucho tiempo mi mamá
estudiaba, mi papá trabajaba y la labor de crianza recaía en mi abuela y tía por parte de mamá y
claramente en mi mamá ya que era necesaria la leche de sus senos para mi crecimiento. Quiero
hacer una aclaración, durante el texto todas las palabras utilizadas para describir a mujeres,
hombres y en general a las personas se utilizarán de forma directa mi educación me ha
demostrado que es mejor llamarles a las cosas como son el no llamarlas así genera ignorancia y
división entre bancos y negros como lo expresa Fals borda así que, aunque sé que aquí se
generarán esas divisiones prefiero que se generen con el termino correcto. Mi papá tenía la
libertad de pasar más tiempo afuera de la casa, más tiempo alejado de su hija y digamos que ese
si fue un rasgo tradicional de mi crianza, aparte de excesos por parte de él que eran muy
normales para muchas personas solo por el simple hecho de que él es un hombre trabajador que
le debe proveer a su familia y necesita tiempo de libertinaje.
En el pasado refiriéndonos a los 70´s o 80´s en Colombia ver una familia como la mía
habría sido visto como un pecado ante los ojos de Dios y hasta en los 2000 era visto así, era
difícil que me dejaran ingresar a un colegio porque mis padres no estaban casados, porque eran
muy jóvenes porque mi papá no trabajaba pero mi mamá sí, para esas personas lo que estaban
haciendo mis papás era una aberración y desde el pensamiento de Fals Borda mis papás eran
subversivos, ellos dentro de todas las dificultades que implicaba haber tenido a una hija tan
jóvenes, no tener una casa propia y estar siempre bajo el lente de personas que tenían sus
prejuicios estaban haciendo una revolución dentro de la comunidad en la que se desarrollaban.
Toda esta historia de mi infancia viene a tener una relación directa y compleja con el texto de
Fals Borda y no pude parar de recordar mi historia mientras leía esas páginas tan bien escritas.
La tradición en la que me críe venía distinta a la de la mayoría de mis compañeros ya que desde
mi abuela por parte de mamá todo había cambiado.

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 Vengo de una familia en la que mi abuela fue madre soltera de tres hijos, trabajadora, no
estudiada pero que sacó adelante a cada uno de ellos, mi historia es muy distinta a la de mi mamá
ella vivió la revolución de ser mujer desde el rol que tuvo que adoptar mi abuela. Mi familia está
llena de mujeres que no cumplen el rol que la sociedad les ha mostrado por décadas, algunas de
ellas se arrepienten, pero la mayoría se sienten mejor al saber que no necesitan de un hombre ni
necesitaron de uno para sobrevivir, son mujeres muy independientes pero que siguen replicando
micromachismos desde su lugar de privilegio. Yo creo vivir en un cisma de la transición
concepto en el cual Fals Borda explica como las tradiciones se van desligando del deber ser,
Muchas veces los términos señalan contrastes profundos —lo negro, lo blanco—, y como la tradición es
fuerte, esos contrastes primarios se trasladan al campo de lo moral. (Fals Borda,2015, p. 385)

Lo que para mí no es tradición para otros si lo es y todo se desprende de como ese

contraste que para algunos es profundo y guía su actuar al volverse su brújula moral, para mi es
un simple punto de vista, ya no veo en blanco y negro y en esta frase solo el simple hecho de
usar esos dos colores que implican bueno y malo logran molestarme, porque muchas veces me
han llamado negra y mi contexto afuera de mi hogar me envía constantemente mensajes de
“negro es malo”, “la oveja negra de la familia” y lastimosamente después de escuchar tanto eso
lo vuelves como un pensamiento propio y dejas de criticarlo y lo internalizas.

Lo que es monstruoso, inmoral, malo o negro para aquellos dejados atrás inmersos en la
tradición, podrá ser moral, conveniente o blanco para aquellos otros que añadieron nuevas
dimensiones a su vida y enriquecieron el vocabulario vital. (Fals Borda, 2015, p.387)

Si hablamos de feminismo en este entonces hay muchos feminismos todos devinieron de

diferentes malestares sociales, de diferentes blancos y negros y para algunes los blancos de otres
son negros de elles, muchas de estas concepciones se estructuran desde el primer aprendizaje en
la casa y se deconstruyen cuando se sale a la sociedad, se podría utilizar la frase Rousseau
cuando dice “El hombre nace bueno y la sociedad lo corrompe” pero en este contexto, la
sociedad lo que hace según Fals Borda es abrir y expandir las fronteras de lo moralmente
correcto e incorrecto de les personas, entre más aprendizaje se tiene, entre más vocabulario se
acumula se enriquece en el mismo sentido la vida de la persona.

Ahora en el texto Fals Borda siempre se refiere a los agentes del cambio a estos
revolucionarios como hombres, los personas a los que se debe admirar y los que han montado el
precedente de subversión son hombres desde su estudio, y como mujer al leer este texto no
puedo ignorar que el mensaje que recibo no se siente propio, se siente ajeno a las luchas de
millones de mujeres en todo el mundo por equidad y por el desmonte de la idea tradicional
impuesta a lo que es ser mujer. Puede que no haya sido conscientemente el solo hablar de
hombre en su escrito, pero este se siente como una carta dirigida a los hombres en la cual éste se
apropia de la misma idea de despropiar las ideas de los actores sobre los cuales se creó la misma,
hay muchas mujeres que representan la revolución, Policarpa, Curie, De Beauvoir, Kahlo, entre
otras, que tienen cada una de las características de subversión, todas dentro de su comunidad
pusieron aprueba la tradición e hicieron de sus vidas una muestra cambiante de revolución y un
anhelo de ver su utopía vuelta realidad (Fals Borda nos muestra que el revolucionario siempre
dirige su lucha a un futuro utópico)

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 Un feminismo

Cuando yo era pequeña y ahora de grande veo a mi mamá y veo en ella la imagen de la
mujer que quiero algún día llegar a ser, como ya lo he dicho antes ella no es una mujer a la que
se le llamaría tradicional pero aquí quiero ahondar en como veo a la mujer tradicional. Partamos
del hecho de que no hay nada malo en querer quedarse en a casa a cuidar a sus hijos, en
mantenerla ordenada y en ser una figura presente y constante en la vida de ellos, en problema
deviene cuando la mujer no elige ese camino cuando se le es impuesto y cuando hay travas y
discriminaciones para las mujeres que encajan en el rol de madre de casa. Lo tradicional viene a
apoderarse de la existencia de la mujer, de sus cuerpos de lo que estos pueden llegar a ser y lo
que pueden hacer.

El sujeto de deseo que tú eres hoy, Violeta, era una utopía para tu abuela. Y no sé si algunas
mujeres de su generación lograron encontrarle mieles a una existencia alienada, a una palabra sin
ecos, a unos cuerpos colonizados y a unos pobres deseos mimetizados en deseos oficiales, es
decir, masculinos. (Thomas, 2018, p.31)

Siempre es complejo hablar de los cuerpos de las mujeres, en nuestra cultura es un tabú
que las mujeres sientan deseo, que se masturben, que utilicen juguetes y esto se vuelve más tabú
cuando la mujer es adulta mayor, cuando su cuerpo es distinto a la forma de cuerpo que esté de
moda, el color de su piel y su nacionalidad. Las mujeres latinoamericanas son vistas por muchos
países occidentales como mujeres objeto de deseo, salvajes que no controlan sus impulsos y que
siempre están dispuestas a tener sexo, no es concebible que una mujer latina sea asexual o que no
tenga curvas porque si no las tiene no es considerada latina. Florence enmarca muy bien la
posesión del cuerpo que tienen la idea masculina de lo deseado. Pero lo que Thomas ve como
ventaja el ser un sujeto de deseo en la práctica puede traer consecuencias.

En mi corta vida he vivido situaciones te terror puro, de ansiedades que no me dejan

hacer muchas cosas y algunas de esas se han presentado por la atroz expresión de deseo que
algunos hombres parecen haber vuelto normal en su retorcido mundo de sexualidad y atracción,
las mujeres ahora somos capaces en teoría de ponernos la ropa que queramos, de utilizar una
falta, vestido, camisetas, jeans, sacos es decir cualquier prenda de vestir, pero con esto llego la
idea a los hombres y mujeres de que tienen derecho de hacer y decir lo que quieran respecto a la
ropa que la mujer se pone, ganamos y perdimos porque pareciera ser que no podemos ganar todo.
Mujeres de mi vida que hacen parte de mi contexto me dicen que no me ponga vestidos que

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según ellas son cortos porque le estaría dando el derecho a un hombre de violarme o decirme
piropos morbosos.

Y aquí entra la pregunta que más me hago en mi diario vivir, ¿cómo una persona puede
decirle a otra que elle es responsable por las acciones del otre? Las personas son responsables del
accionar de ellas mismas, más allá de eso está fuera del control de las personas y ahí entra el
asunto de los blancos y negros y sus matices, los feminismos se dividen por las preferencias de
cada une de les actores que conforman esa rama del feminismo y estos devienen de diferentes
luchas, Thomas nos muestra un feminismo que lo único que busca es ese utópico futuro
equitativo, en e que se muestran y aceptan las diferencias, uno en el que no se intenta
homogeneizar a la población sino que se resaltan y se aplauden las diferencias, en el que se
ordena el aparato para cubrir las necesidades de todas estas personas sin importar quienes son.

Un feminismo que habla por la equidad. Thomas nunca lo dice y no se refiere a las
personas que hacen parte de la comunidad LGBTIAQ+ o al menos no lo hace en el ensayo
Conversaciones con Violeta: Historia de una revolución inacabada, pero si se quiere equidad la
necesidad de unir el movimiento feminista con el LGBTIAQ+ es inminente y además de
necesario, todas las mujeres debemos luchar por la equidad y es un absurdo que por la diferencia
de nuestras luchas excluyamos y anulemos la lucha de las otras.

No es una, somos muchas

Estas lecturas me inspiraron a escribir de esta forma, inspiraron la pregunta de este

trabajo y llegaron hasta lo más profundo de mi alma. Las escritoras de Esta puente, mi espalda
escogidas para esta sección fueron Anita Valerio, Chrystos y Pat Parker. Sus historias tienen algo
en común hablan a las mujeres, a todas y cada una de nosotras se siente personal y propia la
experiencia, aunque no la hayamos vivido tienen el poder de utilizar las terribles experiencias
que ya hemos vivido y generan un vínculo que desde mi experiencia solo una mujer puede tener.
Todas tenemos algo que nos une y estas historias lo demuestran.

Anita nos abre las puertas a su pasado, presente y lo que ella quiere, pero no expresa de
su futuro, su tradición, su familia, su tierra, yo no tengo idea de lo que es crecer dentro de una
familia de tradición y costumbres indígenas, pero no por eso es inconcebible para mi ver las
dificultades de desarrollarse como persona en un ambiente con estructuras fijas y nada
moldeables. Cuando ella nos muestra lo difícil que fue llegar a la conclusión de que era lesbiana
y que no se identificaba como hombre, sino que en ese momento de desesperación por poder ser
ella, buscaba una salida que ni era viable ni era lo que quería, ella es chicana e indígena

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americana, vivió en su infancia, su adolescencia y parte de su adultes con su madre en territorio
indígena en Canadá. La idea de lo que era una mujer, la construcción de los idearios de ésta
alrededor de lo que hiciera con su cuerpo y quien estuviera en su cuerpo fue lo que más me llamó
la atención entre otras cosas.

Hay una frase muy interesante

¿Qué quiere decir que una mujer sagrada es la que monta la Okan*? ¿y por qué se hace
sagrada porque sólo un hombre la ha tocado? ¿será en realidad que ella ha sido un buen
pedacito de propiedad para ese hombre o será que ella es un recipiente puro de poder
femenino impenetrado por el hombre? *danza del sol (Valerio, 1988, p 55)

El valor de la mujer siempre había escuchado la primera perspectiva de la segunda

pregunta que ella se plantea, y la tercera, esa idea de que la virtud de una mujer se basa en el
hombre no en ella y cuando Valerio nos dicen que puede ser al contrario que es posible que esta
mujer es invaluable que su poder radica en que su núcleo no ha sido tocado profundamente por
un hombre, que no por estar con uno quiere decir que todo ese poder ancestral ha desaparecido.
El ver el ser mujer como un poder es un acto de rebeldía y más aún dentro de una comunidad que
ve a la mujer solo como un instrumento.

Chrystos en un poema corto pero emotivo, el ver a todas las mujeres retratadas en su
cuerpo, ver su cuerpo como lienzo de guerra plagado de horrores y dolores. Pero como éste es
capaz de utilizar cada una de sus heridas y volverlas combustible de la liberación y creación de
una paz blanca, que pueda aliviar las marcas en los lienzos de las demás mujeres que como
Chrystos tienen el peso de cargar con el pasado de sus ancestras. El deber de seguir caminando,
el deber de mostrarle a los que la s hirieron que heridas, rotas, maltratadas con los músculos
expuestos seguirán caminando y seguirán luchando para forjar un futuro mejor.

Pat Parker a diferencia de las anteriores autoras, muestra un discurso emotivo y lleno de
rabia y justa que rabia que sí es. Una de las ramas del feminismo con la que más conflictos tengo
que con la Afrodescendiente, los feminismos negros logran alterarme hasta el punto de pensar
que la única forma de solucionar esto en yéndome para otro planeta, siempre he creído que no se
puede ser radical en una lucha que lo que quiere es equidad, se debe ser radical en el discurso
pero el actuar debe ser acorde a los principios basados en nuestra brújula moral, principios que
no deberían pasar por encima de nadie y que nadie debería pasar por encima de ellos.

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 En su discurso habla del feminismo como una revolución y si unimos el movimiento
feminista con Fals Borda y su idea de
revolución éste cumple con todos los requisitos,
va en contra del valor tradicional que tenía la
mujer, va en contra de la norma que rige lo que
es ser mujer, en contra de las organizaciones
que imponen estas dos anteriores al luchar por
un ideal que llama la atención de todos los
Fuente: Una sociología sentipensante para américa latina
feminismos y crea nuevas técnicas de combatir la tradición y de transmitir el mensaje de este
nuevo orden social que va dirigido a una utopía que es la meta de toda revolución.

Pat Parker expresa que esta revolución no puede ser cómoda y afirma que ninguna
revolución lo es, no es callada, no es pasiva, no está libre de sangre y pone en el centro de los
problemas que debe combatir el feminismo al imperialismo, como ese agente asesino que
perpetua la división de clases y de género, que hace que deban haber minorías y mayorías y que
esto implique que unas sean mejores que otras, Parker nos muestra que la organización a la que
el feminismo debe derrotar es al sistema mismo de muerte, el capitalismo es el objetivo principal
que dar paso a la creación de un modelo equitativo, capaz de entender y apreciar las razas,
gustos, disgustos y que se formara alrededor de estos.

Conclusiones

Los feminismos son diversos y a la final cada persona es distinta, pero aquí viene lo que
vinimos viendo en el trabajo, Thomas nos señala avances importantes en materia de perspectivas
de genero y en tradiciones rotas con el pasar del tiempo para dar camino a nuevas formas de ver
la sociedad y una de sus actoras más importantes la mujer, en el trabajo de Fals Borda vemos
como el simple hecho de cambiar tu rol o de poder al fin elegirlo es un acto revolucionario, el
inicio de una lucha que no puede ser limpia que debe ser ruidosa y como Fals Borda dice debe
incomodar, debe ser contraria a todo lo que alguna vez las personas creyeron conocer y defender,
debe poner en duda a las personas, debe hacerlas querer conocer más.

Los feminismos unidos hacen que la lucha sea en contra de la tradición y no solo en
contra de las discriminaciones cada una de ellas aisladas por las mismas feministas que no ven en
la otra a si mismas, que ven solo sus luchas, una revolución es completa enfocada en una utopía
global que abarque a todos lo miembros de la sociedad y que los que no hacen parte de la
revolución vean la perspectiva y la lucha de los subversivos y que gracias a la expansión de su

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vocabulario y con este de su mente se den cuenta de lo que puede significar tener en cuenta la
idea que esta fuera de lo que desde pequeño le hicieron creer era normal.

En los cimientos de feminismo está la equidad, desde las sufragistas está la idea de vivir
en una sociedad en la que a la mujer se le trate como humana y ciudadana, aunque en esa época
no se hablaba de las mujeres negras y del tercer mundo, esa ,lucha de mujeres blancas para
mujeres blancas le dio el impulso que necesitaban a los movimientos negros y tercermundistas a
levantarse y hacerse escuchar y de está división nace la necesidad de unir los movimientos,
porque una revolución no la hacen solo los de izquierda o los de derecha, no la hace solo la
iglesia, las revolución son en conjunto, son la unión de las ilusiones y esperanzas que nutren el
movimiento, las experiencias de su integrantes las hacen más fuertes y a prueba de balas, una
revolución no se cae porque uno se cae sino que se hace más fuerte con cada perdida, como sale
en la película V for Vendetta “Ideas are bulettproof”.

Ser mujer va mucho más de como te vistas, de como hables, de que tengas entre las
piernas y entre los hombros, ser mujer es un conjunto de ideas y acciones que van más allá de lo
que las palabras pueden expresar, ser mujer es todo lo que te hace sentir, es todo lo que te hace
ser, ser mujer es extrañar, es doler, es amar, es luchar, es pensar, es cooperar, ser mujer es ser.
Más allá de cualquier etiqueta, el feminismo debe ser uno porque mujeres somos muchas, pero
lucha es una, no por ser singular quiere decir que solo se lucha por un ideal, la revolución es por
la utopía de vivir en paz, en equidad, de vivir como dueñas de nuestro ser, por vivir y dejar de
sobrevivir.

Referencias Bibliográficas

Castillo, A., Cherríe, M., et al. (1988) Esta puente, mi espalda: Voces de mujeres
tercermundistas en los Estados Unidos. Ism press. San francisco, Estados Unidos

Fals Borda, O., Moncayo, V (2015) Una sociología sentipensante para América Latina.
CLACSO. Buenos Aires, Argentina

Thomas, F (2018) Conversaciones con Violeta: Historia de una revolución inacabada.

Debolsillo. Bogotá D.C, Colombia
Zibechi, R (2006) Movimientos sociales: nuevos escenarios y desafíos inéditos. OSAL,
Observatorio social de América Latina Vol. II. Buenos Aires, Argentina