Está en la página 1de 74

TOXICOLOGIA LABORAL Y

MEDIOAMBIENTAL
MSc. José Alberto Ramón Silva De Las Casas
PRESENTACIÓN
La toxicología laboral es una disciplina que ayuda, a los
profesionales encargados de mantener y salvarguardar la
salud de los trabajadores, a identificar los principales agentes
tóxicos que pudiesen presentarse al momento de realizar las
actividades laborales en las diferentes empresas, y prevenir
los principales efectos nocivos que provocan en la salud de
los trabajadores. En la presente sesión analizaremos la
toxicocinética, y el proceso de absorción de los xenobióticos
en el organismo humano, haciendo énfasis en el TGI y la
biotransformación a nivel del hígado.
Logro de aprendizaje para la presente sesión :

Al finalizar la presente sesión, el estudiante describe la toxicocinética e


identifica el proceso de la absorción de los xenobióticos en el TGI y el
hígado; analiza la distribución y almacenamiento de los tóxicos en el cuerpo
humano, y comprende la importancia de la biotransformación,
bioacumulación y biomagnificación, mediante la revisión de la literatura
especializada; además, podrá proponer planes para mitigar la presencia de
los xenobióticos en los ambientes laborales.

Datos/Observaciones
Conocimientos previos:

Datos/Observaciones
Utilidad del tema:

Datos/Observaciones
Toxicocinética
Toxicocinética
• La toxicocinética es, esencialmente, “cómo una
sustancia ingresa al organismo y que le ocurre
dentro del mismo”.
Etapas de la toxicocinética

Proceso Descripción
1. Absorción La sustancia ingresa al organismo.

2. Distribución La sustancia se desplaza desde el sitio de


ingreso a otras regiones del organismo.

3. Biotransformación El organismo transforma la sustancia absorbida


en nuevos compuestos (metabolitos).

4. Excreción La sustancia o sus metabolitos se eliminan del organismo.


Interacción
entra las
distintas
etapas de la
Toxicocinétic
a

Fuente: US Nacional Library of


medicine. Toxicology Tutorial
* Absorción:
La absorción de un tóxico se define como el proceso por medio del cual éste
atraviesa membranas y capas de células hasta llegar al torrente sanguíneo.

La absorción se ve afectada por los siguientes factores:

➢ Vía de exposición.

➢ Concentración de la sustancia en el sitio de contacto.

➢ Propiedades químicas y físicas de la sustancia.


Velocidades de absorción según la
vía de administración/ exposición

Se comprueba que resulta bajo el poder de penetración a través del tracto


gastrointestinal.
¿Cuál es el mecanismo por el cual ingresan al organismo los peligros químicos?
Dado que, normalmente, las células de los tejidos sólidos, como las de la mucosa intestinal, están muy
fuertemente compactadas (una junto a la otra), se constituyen en una barrera eficaz para el pasaje de
sustancias al interior del organismo: no pueden pasar “entre” ellas. Por lo tanto, deben atravesar
membranas celulares.
Puede observarse el movimiento de
un peligro químico X, que atraviesa
sucesivas membranas hasta llegar al
núcleo de una célula hepática, sitio
en el que, en este ejemplo particular,
produce un daño.

Fuente: US Nacional Library of medicine. Toxicology Tuto


** Características de la membrana: La membrana está constituida de lípidos y proteínas. La parte
lipídica de la membrana está formada por una película bimolecular que le da estructura y constituye una
barrera que impide el paso de substancias hidrosolubles. En la membrana se localizan unas
glicoproteínas que identifican a otras células como integrantes de un individuo o como extrañas
(inmunoreacción). Las interacciones entre las células que conforman un tejido están basadas en las
proteínas de las membranas. Resumiendo, la estructura de las membranas depende de los lípidos y las
funciones dependen de las proteínas.

Estructura de las
membranas
celulares
** Mecanismos de transporte a través de la membrana: En el transporte de sustancias,
incluidas las tóxicas, a través de la membrana intervienen procesos:

• Procesos pasivos

➢Difusión a través de la bicapa lipídica.

➢Difusión a través de los poros.

➢Transporte por un transportador (difusión facilitada).

• Procesos activos

➢Transporte activo por un transportador.

➢Endocitosis - Exocitosis.
*** Difusión simple: Es el movimiento de moléculas e iones a través de la bicapa lipídica o de poros desde una
zona de alta concentración, o de alto potencial eléctrico, a otra de escasa concentración o potencial (“a favor de
corriente”).

Fuente: US Nacional Library of medicine. Toxicology Tutorial


*** Difusión facilitada: Muchas veces, el movimiento de una sustancia a través de una membrana no puede
explicarse por simple difusión o filtración, porque el compuesto es muy poco liposoluble como para disolverse en
la bicapa lipídica o muy grande como para atravesar un poro. En estos casos se postula la existencia de
mecanismos especializado de transporte. Se supone que la sustancia a ser transportada forma un complejo con
una molécula transportadora de un lado de la membrana. Luego difunde por la misma manteniendo la estructura
compleja y debe ser capaz de liberarse una vez dentro de la célula. El transportador podría luego volver a su sitio
original y repetir el proceso.
En el caso de la difusión facilitada, el transporte se
produce sin gasto de energía y a favor del
gradiente de concentración. Así ocurre el
transporte de glucosa, desde el intestino a la
sangre, del plasma a los glóbulos rojos y desde la
sangre al SNC.

Fuente: US Nacional Library of medicine. Toxicology Tutorial


*** Transporte activo: El transporte activo
presenta las características siguientes: El
sistema tiene una capacidad máxima
(puede saturarse), es selectivo, o sea que
el compuesto transportado debe tener
algunas características estructurales
químicas para ese sistema de transporte,
y puede presentarse el caso de inhibición
competitiva entre sustratos de un mismo
sistema. Pero además requiere de un
gasto de energía ya que la sustancia se
mueve contra un gradiente de
concentración (o electroquímico).
• El transporte activo es de mucha relevancia en toxicología, en la eliminación
de sustancias extrañas al organismo.

• Por ejemplo, el SNC tiene dos sistemas de transporte, uno para compuestos
ácidos orgánicos y otro para bases, localizados en el plexo coroideo y sirven
para expulsar sustancias indeseables del fluido cerebroespinal.

• El riñón también tiene dos sistemas de transporte activo y el hígado tiene al


menos tres, según sea la característica ácido-base del compuesto a
trasportar.
*** Endocitosis- exocitosis: El organismo posee algunos
mecanismos especiales de transporte activo para la
remoción de materia particulada o moléculas muy
grandes. La fagocitosis y la pinocitosis son procesos
en los cuales la membrana celular fluye alrededor
de un blanco (una partícula o una macromolécula)
y lo engloba junto con algo del medio externo. Este
tipo de transferencia a través de las membranas es
importante en la remoción de partículas de los
alvéolos por los fagocitos y en el caso de algunos
tóxicos en sangre, por el sistema retículoendotelial
del hígado y el bazo.
ABSORCIÓN DE XENOBIÓTICOS A NIVEL
DEL TRACTO GASTROINTESTINAL
ABSORCIÓN DE XENOBIÓTICOS EN EL TGI

* Estructura y función del TGI:

a) Cavidad bucal :
El epitelio de la boca tiene una gran capacidad proliferativa. Esto hace que exista una tendencia a la
proliferación celular en inflamaciones o irritaciones crónicas y también a un muy rápido sanado, que
puede llevar unos pocos días en lesiones traumáticas. El epitelio de la boca tiene una capacidad notable
para absorber sustancias químicas, incluyendo aquellas que poseen un efecto sistémico.
Muchas sustancias penetran la mucosa por difusión simple, por sí mismas o en combinación con alguna
molécula transportadora ("carrier") secretada en la saliva. También pueden ingresar por difusión
facilitada a través de las células endoteliales, por pinocitosis o fagocitosis. Sustancias como el alcohol
pueden facilitar la absorción de sustancias, por ejemplo, carcinógenos, potenciando sus efectos. Existen
numerosos tipos bacterianos en la cavidad bucal que no son inertes frente a la exposición a tóxicos en
esta zona.
b) Esófago:
Su función es la conducción del alimento hacia el estómago. El epitelio esofágico también tiene
una capacidad alta de regeneración (por el desgaste mecánico que sufre). Además hay presentes
bacterias sobre su superficie.

c) Estómago:
Es un agrandamiento del tubo digestivo en forma de bolsa, con una musculatura especializada.
Los alimentos son retenidos en el estómago y mezclados con ácido, moco y pepsina; y desalojados
con una velocidad constante y controlada hacia el duodeno.

Existen en las paredes del estómago glándulas que poseen células que secretan el ácido
clorhídrico (células parietales), que le da la acidez al jugo gástrico y células que secretan
pepsinógeno (células principales) que es activado a pepsina, iniciando así la degradación de
proteínas.

También están presentes células productoras de mucus (células de Goblet). El mucus protege a las
células del estómago de la acción del clorhídrico y de la pepsina. Las células de la mucosa tienen
uniones estrechas entre ellas, lo que junto con el mucus bicarbonatado constituye la protección
contra el ácido clorhídrico.
Esófago
d) Intestino Delgado:
Su función primaria es la digestión y absorción de los
alimentos. Sin embargo, la absorción no es específica
para nutrientes, sino que cualquier otra sustancia,
con estructura o propiedades similares a los
nutrientes, que llegue, ya sea por si sola o presente
como contaminación de los alimentos, podrá también
ser absorbida. El intestino delgado es un tubo delgado
y alargado de aproximadamente 6 metros de largo
que se inicia en el orificio pilórico en la parte final del
estómago y termina en la unión ileocecal, donde se
inicia el intestino grueso. Consiste de tres secciones:
Fuente: http://arbl.cvmbs.colostate.edu/hbooks/help.html
el duodeno, el yeyuno y el íleon.
En las células epiteliales del intestino se localiza el vello intestinal que son extensiones de
aproximadamente 0.5-1.5 mm, cuya función es incrementar el área de la superficie de
contacto y por lo tanto, aumentar la superficie de absorción. Estas vellosidades son más
anchas en el duodeno que en el resto del intestino. La presencia del vello es primordial
para la función óptima del intestino delgado. La superficie de absorción se hace aún más
grande por medio de pequeños cepillos que cubren el vello intestinal y a los cuales se
denominan microvellos. Los microvellos están cubiertos por el mucus que los protegen
contra agentes proteolíticos y mucolíticos.
Cualquier tóxico que altere la estructura morfológica del vello y microvello afectará la
absorción, y por lo tanto ocasionará una posible desnutrición al disminuir la absorción de
proteínas, minerales esenciales y otros nutrientes.
Vellosidades y microvellosidades

Fuente: http://arbl.cvmbs.colostate.edu/hbooks/help.html
Corte del tubo digestivo
e) Intestino grueso:
Está formado por el ciego, apéndice, colon, recto y ano. No
tiene vellosidades. Las criptas intestinales son
considerablemente más largas. Las células son similares a
las del delgado, aunque las criptas contienen más células
de Globet. Como resultado, la absorción es menor.

f) Colon:
La función principal es la reabsorción de agua, sodio y otros
minerales. Extrae aproximadamente 90% del líquido del
quimo, formando 200-250 ml de heces semisólidas.
También se absorben vitaminas, algunas de ellas
sintetizadas en gran cantidad por las bacterias del colon. El
sodio es transportado activamente y el agua lo acompaña.

g) Ano:
Canal corto que forma la transición entre la mucosa
intestinal y la piel normal. Es un epitelio estratificado
escamoso moderadamente queratinizado.
* Mecanismos de absorción por el TGI:

El sistema digestivo puede visualizarse como un tubo que recorre todo el cuerpo. Su contenido debe ser
considerado como exterior al organismo: los tóxicos no producirían daño hasta que no sean absorbidos
por las paredes de algún tramo del tracto gastrointestinal (TGI). Salvo aquellos compuestos que resultan
muy corrosivos, como un álcali concentrado, que actúan localmente, la mayoría de los peligros químicos
necesitan pasar a la sangre para ejercer su efecto. La absorción puede producirse en cualquier sitio a lo
largo del TGI, desde la boca hasta el recto. La nitroglicerina administrada sublingual y un supositorio son
claros ejemplos. De todos modos, el intestino delgado y el estómago son los sitios más importantes para
este proceso. Una capa acuosa presente en la superficie de los enterocitos puede constituir una barrera
inicial para la absorción de xenobióticos: puede demorar la entrada de sustancias hidrofóbicas y para
aquellas que se unan a la mucina. La membrana apical, las estructuras dentro del citoplasma, la
membrana basal y los capilares de los vasos sanguíneos y linfáticos son más permeables a las sustancias
lipofílicas (difusión simple).
Los poros acuosos, localizados del lado apical de los enterocitos (entre ellos), permiten la penetración
pasiva (transporte paracelular). Es el principal mecanismo de entrada de electrolitos y agua. También
para xenobióticos de pequeño tamaño molecular (aspirina, por ejemplo) penetran de esta manera.

Algunos iones metálicos tóxicos utilizan sistemas de transporte especializados para elementos
esenciales: el talio, el cobalto y el manganeso utilizan el sistema del hierro, mientras que el plomo
parece que utiliza el sistema del calcio.

Los xenobióticos lipofílicos son absorbidos por el mismo mecanismo con que son absorbidos los lípidos
de la dieta (formación de micelas con sales biliares, su disociación y entrada de los lípidos al enterocito,
formación de quilomicrones). Muchas sustancias liposolubles son transportadas por los vasos linfáticos.
Ej: DDT, bifenilos policlorados. Algunas sustancias de mayor peso molecular, tales como la toxina
botulínica, pueden penetrar por endocitosis.
Si bien los distintos xenobióticos pueden utilizar en el TGI los diferentes mecanismos de
transporte mencionados, es importante tener en cuenta que la difusión simple es el
mecanismo frecuente para los peligros químicos. Hay unos pocos tóxicos que se absorben de
modo activo en el TGI.

Si el tóxico es un ácido o una base débil, se absorberá por difusión en aquella zona del tracto
donde el pH asegure la máxima concentración de la forma no ionizada, la más liposoluble.

Un ácido débil alcanza su máxima proporción de forma neutra en el estómago (menor pH) y
por lo tanto será principalmente absorbido allí. Contrariamente, una base débil se absorberá
preferentemente en el intestino (mayor pH).
Entre los factores que modifican la absorción gastrointestinal de tóxicos se
encuentran:

• Las propiedades fisicoquímicas de los tóxicos, especialmente el coeficiente de partición de Nernst y


la constante de disociación; en el caso de las partículas es importante su tamaño —a menor
tamaño, mayor solubilidad.

• La superficie de absorción y la capacidad de absorción del epitelio.

• Las secreciones gástricas e intestinales, que transforman los tóxicos; la bilis es un agente
emulsionante que produce complejos más solubles. Por ejemplo, un veneno de víbora no es
demasiado tóxico, si es administrado oralmente, por la degradación enzimática que sufre en el TGI.

• La motilidad intestinal, pues a mayor tiempo de residencia mayor será la proporción absorbida y
más interacciones adversas con la flora bacteriana pueden producirse.

• La cantidad de alimentos presente en el TGI (efecto de dilución).


Entre los factores que modifican la absorción gastrointestinal de tóxicos se encuentran:

• La dieta, pues algunos componentes de los alimentos pueden interaccionar o competir con el
xenobiótico por su absorción. Tal es el caso del plomo, que utiliza los mismos mecanismos de
transporte que el calcio. Por lo tanto, una dieta rica en calcio limita las posibilidades de absorción del
plomo.

• Tipo de flora intestinal.

• Utilización de medicamentos. Por ejemplo, el uso de antiácidos.


ABSORCIÓN DE XENOBIÓTICOS
* Hígado:
El hígado es el órgano interno más grande del cuerpo llegando a pesar en un adulto kilo y
medio. Está formado de dos lóbulos principales de los cuales el derecho es más grande que el
izquierdo. El color café rojizo de este órgano se debe a la cápsula de tejido conectivo que lo
cubre.

Al hígado llega la vena portal, la cual transporta los compuestos absorbidos en el intestino y en
el estómago, incluyendo las substancias que podrían causar toxicidad. Al hígado también llega
la arteria hepática, la cual transporta hasta un 25% del gasto cardiaco y se encarga de oxigenar
todos los tejidos del hígado.

Del hígado salen vasos linfáticos y dos ductos biliares (uno de cada lóbulo). Los dos ductos
biliares se unen entre sí para luego unirse al ducto cístico que sale de la vesícula biliar,
entonces forman un solo conducto que viaja hasta el duodeno del intestino delgado, donde
descarga la bilis producida.
La unidad funcional del hígado está formada por tres vasos (la vena portal, la arteria hepática y el
ducto biliar) y los hepatocitos que los rodean. Los vasos van del Espacio Periportal (EP) al Área
Centrolobular (AC).
El hígado ejecuta un gran número de funciones y entre las más importantes están el almacenamiento y
biotransformación de las sustancias que recibe por medio del torrente circulatorio y el sistema portal.
Normalmente biotransforma y acumula substancias útiles en el organismo tales como la glucosa, en forma de
glucógeno, aminoácidos, grasas y algunas vitaminas.

Funciones del hígado


DISTRIBUCIÓN DE LOS TÓXICOS

Tras ser absorbidos por alguna de esas vías de entrada, los tóxicos llegan a la sangre,
la linfa u otros fluidos corporales. La sangre es el principal vehículo de transporte de
los tóxicos y sus metabolitos.

* La sangre:
La sangre es un órgano líquido en circulación que lleva a las células el oxígeno y las
sustancias vitales que necesitan y extrae de ellas los productos de desecho del
metabolismo. Contiene asimismo componentes celulares, hormonas y otras moléculas
que intervienen en muchas funciones fisiológicas. Impulsada por la actividad del
corazón, la sangre corre por el interior de un sistema circulatorio de vasos que es
relativamente estanco y que está en condiciones de alta presión. Debido a la alta
presión hay una parte del líquido que se escapa del sistema por filtración. El sistema
linfático realiza la labor de drenaje gracias a su delicada malla de pequeños capilares
linfáticos, de finas paredes, que se ramifican por los tejidos y órganos blandos.
La sangre es una mezcla de una fase líquida (plasma, 55 %) y células sólidas (45 %). El plasma
contiene proteínas (albúminas, globulinas, fribrinógeno), ácidos orgánicos (láctico, glutámico,
cítrico) y muchas otras sustancias (lípidos, lipoproteínas, glicoproteínas, enzimas, sales,
xenobióticos, etc.). Los componentes celulares de la sangre son los eritrocitos o glóbulos rojos, los
glóbulos blancos (leucocitos, monocitos, etc.) y las plaquetas.
Las sustancias tóxicas (moléculas, iones o coloides) se pueden transportar por la
sangre de diversas maneras:

• Uniéndose física o químicamente a células de la sangre, como los eritrocitos.


• Disolviéndose físicamente en el plasma en estado libre.
• Uniéndose a uno o varios tipos de proteínas plasmáticas.

La distribución depende de la afinidad de las sustancias tóxicas por los diferentes


componentes. Todas las fracciones se encuentran en un equilibrio dinámico. Así,
por ejemplo, algunos tóxicos son transportados por los elementos celulares de la
sangre, sobre todo por los eritrocitos, por ejemplo, el plomo.

La mayor parte de los tóxicos la transportan el plasma o sus proteínas.


* Compartimentos del organismo:
El organismo humano puede dividirse en los compartimentos siguientes:

1) órganos internos,
2) piel y músculos,
3) tejidos adiposos,
4) tejidos conectivos y huesos.

Esta clasificación se basa principalmente en el grado de perfusión vascular


(sanguínea) en orden de mayor a menor. Por ejemplo, los órganos internos (incluido
el cerebro), que representan sólo el 15 % del peso corporal total, reciben alrededor
del 75 % del volumen total de sangre. En cambio, los tejidos conectivos y los huesos
(15 % del peso corporal total) reciben sólo un 1 % del volumen total de sangre.
Por lo general, los órganos internos, que están muy perfundidos, consiguen la
concentración más alta de tóxicos en el tiempo más corto, así como un equilibrio entre
la sangre y ese compartimento. La captación de tóxicos por tejidos menos perfundidos
es mucho más lenta, pero la retención es superior y el tiempo de permanencia mucho
más largo (acumulación) debido a la escasa perfusión.
Hay tres componentes que son de gran importancia para la distribución intracelular de
los tóxicos: el contenido de agua, los lípidos y las proteínas presentes en las células de
los diversos tejidos y órganos.
El orden de compartimentos antes señalado se corresponde también en gran medida
con el orden decreciente de contenido de agua en sus células.
Los tóxicos hidrófilos se distribuyen más rápidamente a los fluidos y células del cuerpo
que tienen un alto contenido de agua, y los tóxicos lipófilos a las células que tienen un
mayor contenido de lípidos (tejido graso).
La retención de un tóxico en un determinado compartimento es por lo general
temporal, y puede redistribuirse a otros tejidos. La retención y la acumulación se basan
en la diferencia entre las velocidades de absorción y eliminación.
ALMACENAMIENTO DE TÓXICOS EN LOS TEJIDOS

Los tóxicos a menudo se concentran en algún tejido determinado. Algunos lo hacen


en el lugar donde luego ejercen su acción, como es el caso del monóxido de carbono
en sangre. Otras veces no ocurre así, como en el caso del plomo, que se almacena en
los huesos por su semejanza con al calcio, pero que produce el mayor daño en tejidos
blandos.
Los lugares de depósito del tóxico pueden pensarse como órganos protectores, ya que
el tóxico almacenado no actúa. Sin embargo los compuestos siempre están en
equilibrio con el tóxico libre en plasma, reponiéndolo a medida que es
biotransformado y excretado. Como resultado, la vida media de estas sustancias es
muy larga.
▪ Acumulación de tóxicos en tejidos ricos en
lípidos:

En el “hombre estándar” de 70 kg , alrededor del 15 %


del peso corporal es tejido adiposo, proporción que
con la obesidad puede llegar hasta el 50 %. Pero esa
fracción lípidica no está distribuida de manera
uniforme. El cerebro (SNC) es un órgano rico en lípidos,
y los nervios periféricos están rodeados por las células
de Schwann, ricas en lípidos, que constituyen la
llamada vaina de mielina. Todos estos tejidos se
prestan a la acumulación de tóxicos lipófilos.
En este compartimento se pueden distribuir numerosos tóxicos no electrólitos y no polares, así como
numerosos disolventes orgánicos (alcoholes, aldehídos, cetonas, etc.), hidrocarburos clorados
(incluidos insecticidas organoclorados como el DDT), algunos gases inertes (radón), etc.

En el tejido adiposo se acumulan tóxicos debido a su escasa vascularización y a su menor velocidad de


biotransformación. En este caso la acumulación de tóxicos puede ser una especie de “neutralización”
temporal, pues no hay dianas para el efecto tóxico. No obstante, siempre hay un peligro potencial
para el organismo, pues los tóxicos presentes en este compartimento pueden volver a la circulación.
▪ Almacenamiento en las proteínas plasmáticas: La droga unida es incapaz de interactuar con tejidos,
como ya dijimos. Sin embargo, se presentan a menudo casos de competencia entre sustancias por
los sitios de unión, desplazando una a la primera que se había unido; generando un efecto tóxico
debido a esta. Los tóxicos pueden dañar también al desplazar componentes fisiológicos (vitaminas,
hormonas, productos de desecho metabólico, metales) que normalmente viajan unidos.
▪ Acumulación de tóxicos en el hígado y el riñón: Tanto el hígado como el riñón tienen una gran
capacidad para acumular sustancias extrañas. Esto estaría relacionado al hecho que son órganos con
un papel clave en la detoxificación: ambos cumplen funciones de excreción y el hígado además es el
principal sitio de biotransformación del organismo.
▪ Acumulación en los huesos: Se han identificado unos 60 elementos que son osteotrópicos, es decir,
“buscadores de hueso”. El esqueleto de un “hombre estándar” representa del 10 al 15 % del peso
corporal total, lo que ofrece grandes posibilidades para el depósito de tóxicos osteotrópicos como el
plomo, el aluminio y el mercurio.
Biotransformación
¿Qué es lo que pasa con los tóxicos cuando ingresan a un hombre o
un animal?

Una vez que el tóxico se absorbe a través de una de las vías de absorción, se distribuirá entre
los distintos órganos y compartimentos del organismo con una velocidad característica, que
dependerá de factores como ser: irrigación sanguínea de cada órgano, el pH tisular y el
contenido de lípidos y de agua del mismo; así como de factores propios del compuesto (su
carácter ácido o básico y su liposolubilidad, su capacidad de interaccionar reversiblemente o
no con compuestos tisulares, etc.). Simultáneamente, el compuesto sufrirá procesos de
biotransformación.
Se denomina biotransformación a toda modificación en su estructura química producida in vivo.

En sentido amplio la biotransformación es el proceso mediante el cual un organismo vivo modifica


una sustancia química transformándola en otra diferente.
La biotransformación dará lugar a la formación de productos, ya sea, biológicamente más o
menos activos o inactivos. Los activos darán lugar a interacciones con receptores (ej. ácidos
nucleicos, proteínas, lípidos, etc.), que serán los responsables de los efectos biológicos que
se corresponden con la sintomatología observada.

Ambos productos de biotransformación, activos e inactivos, así como el tóxico tal cual, están
sujetos a procesos de excreción por los cuales el organismo se desembaraza de ellos.

Es importante comprender que estos sistemas metabólicos convierten los agentes


xenobióticos liposolubles en metabolitos hidrosolubles capaces de ser excretados por las
vías de eliminación.
PROCESO DE BIOTRANSFORMACIÓN
¿Qué es la bioconcentración de tóxicos?

• Capacidad de algunos compuestos químicos de concentrarse (incrementar progresivamente su


cantidad acumulada) en tejidos de algún organismo vivo que en agua por tener más afinidad con
tejidos de organismos que con el agua, sin causarle un daño evidente. Esta característica es típica de
muchos organismos acuáticos; por ella, magnifican el problema y ponen al tóxico en situación de
disponibilidad para el resto de la cadena trófica, en el curso de la cual el proceso de concentración
continua. Esta capacidad depende, fundamentalmente, de algunas propiedades fisicoquímicas de la
sustancia como la solubilidad en agua. Esto se debe a que los seres vivos pueden concentrar en su
cuerpo los contaminantes.

• La bioconcentración corresponde a la tendencia según la cual una sustancia específica está más
concentrada en el seno de un organismo vivo que en su entorno.
▪ Capacidad de un organismo de concentrar elemento presente en su
medio. - Factor de concentración-

1g 10 Kg

1:10 Factor de concentración


¿Qué es la bioacumulación de tóxicos?
“La bioacumulación es un proceso de depósito gradual y durante un determinado
tiempo, de una sustancia química en el organismo de un ser vivo, ya sea porque el
producto es absorbido más rápidamente de lo que puede ser utilizado o porque no
puede ser metabolizado.”
▪ El término bioacumulación hace referencia a la acumulación neta, con el paso del
tiempo, del aumento de la concentración de una sustancia en el organismo
expuesto a partir de fuentes tanto bióticas (otros organismos) como abióticas
(suelo, aire y agua). Por ejemplo, cuando la concentración de una sustancia es
más alta en los peces adultos que en los jóvenes del mismo sitio, se dice que hay
bioacumulación. Esta capacidad también depende principalmente de las
características fisicoquímicas y bioquímicas del compuesto, como solubilidad en
agua y velocidad de eliminación. Ocurre cuando el contaminante se va
acumulando a medida que se va pasando de un ser vivo a otro en la cadena
alimenticia.
▪ Capacidad de un organismo de concentrar elemento a través de su vida,
de tal manera que el factor de concentración continua incrementándose.

10 g
1g
100 g

1:10 a cambiado a 1:100


Factor de concentración en función del tiempo
La Bioacumulación no tiene por qué ser una preocupación si el compuesto acumulado no es
nocivo, pero algunos como el mercurio se pueden acumular en los tejidos y éste sí que es un elemento
muy perjudicial para la salud. Los contaminantes químicos que son bioacumulables provienen de
muchas fuentes y un ejemplo de ello son los componentes de los pesticidas, muchos de los cuales son
retenidos por los organismos.
➢ La lluvia puede lavar las tierras recientemente tratadas con
pesticidas y hacer que por escorrentía estos productos acaben
en arroyos, ríos, estuarios y finalmente en el mar y entren en
contacto con la fauna y la flora de los distintos ecosistemas
que recorra.
➢ Otra de las principal fuentes de contaminantes tóxicos son los
compuestos que provienen de las chimeneas industriales y de
las emisiones de los automóviles y vehículos que queman
combustibles de origen fósil y que vuelven a la tierra en forma
de precipitaciones.
➢ La descarga deliberada de desechos en los ríos es otra fuente
de contaminantes químicos.
¿Qué es la biomagnificación?
Una vez que un contaminante se encuentra en el agua o en el
suelo puede entrar fácilmente en la cadena alimentaria, primero
a través del fitoplancton de allí al zooplancton (que se alimenta
del primero) y desde ese punto en más, va ascendiendo escalón a
escalón hasta llegar a la cima de la pirámide del consumo, que
muchas veces son los seres humanos. Si bien la cantidad de
contaminantes podría haber sido lo suficientemente pequeña
como para no causar ningún daño en los niveles más bajos de la
cadena trófica, estas acaban sumándose y podrían causar graves
daños a los organismos superiores de la pirámide alimenticia.
Este fenómeno se conoce como biomagnificación.
▪ Biomagnificación: Tendencia de algunos productos químicos a acumularse a lo largo de la
cadena trófica, exhibiendo concentraciones sucesivamente mayores al ascender el nivel
trófico. La concentración del producto en el organismo consumidor es mayor que la
concentración del mismo producto en el organismo consumido.

100 g
1g
100 g

Nivel
trófico
Concentración
PERSISTENT ORGANIC POLLUTANTS
Synthetic (man-made) chemicals called Persistent Organic Pollutants, or POPs, are of primary concern
when looking at bioaccumulation and biomagnification. These chemicals do not easily break down in the
environment and can build up in the fatty tissues of living organisms. Some examples of POPs you may
have heard of include DDT (an insecticide that was used extensively post-WWII) and PCBs (flame
retardants). Although the production of these chemicals was banned during the 1970s and 1980s, they
can still be found in the oceans as well as the tissues of many marine animals because of their ability to:
(1.) persist in the environment for long periods of time,
(2.) move within water, and
(3.) dissolve into the fatty tissues of living organisms.

For all of these reasons, POPs like DDT and PCBs are especially good at bioaccumulating and
biomagnifying.
* El ejemplo del DDT es uno de los ejemplos clásicos de bioacumulación que dieron lugar a
biomagnificación se produjo con el tristemente célebre insecticida denominado
diclorodifeniltricloroetano y más conocido como DDT. El DDT era un insecticida que se inventó en los
Estados Unidos en el año 1939 y que hasta mediados de la década de los 70 se usaba con asiduidad para
ayudar a controlar plagas de mosquitos y de otros insectos.
La lluvia llevaba el DDT hacia las corrientes de agua desde donde este producto altamente tóxico
encontraba facilidades para llegar a lagos y océanos. El contaminante bioacumulado dentro de cada
organismo y luego biomagnificado a través de la red de alimentos alcanzó niveles muy altos. Un ejemplo
de los depredadores que fueron víctimas de estos procesos, es el de las aves rapaces y marinas como las
águilas calvas y las pescadoras, los halcones peregrinos y los pelícanos marrones y las garzas que lo
ingirieron al comer peces.
Los niveles de DDT encontrados en las cáscaras de los
huevos de dichas aves eran altísimos, lo que explicaba
la fragilidad de los mismos; el resultado fue que
mientras intentaban empollarlos, sus padres rompían
los huevos y los polluelos morían, por lo que la
población de estas aves se desplomó.

El DDT fue finalmente prohibido en los Estados Unidos


en 1972 y en el resto del mundo en fechas sucesivas y
desde entonces se han producido aumentos bastante
importantes en las poblaciones de varias de estas aves
rapaces.
* La contaminación por Mercurio es otro de los ejemplos clásicos del proceso de bioacumulación.
Por lo general, el mercurio (o una versión química llamada metilmercurio) es absorbido por las
bacterias y el fitoplancton. Los peces pequeños se alimentan de las bacterias y del fitoplancton y
acumulan el mercurio. Estos son a su vez comidos por peces más grandes, que pueden convertirse
en alimento para humanos y animales. El resultado puede ser la acumulación (biomagnificación) de
grandes concentraciones de mercurio en los tejidos de humanos y animales.
¿Un peligro para las personas?
La bioacumulación y biomagnificación de los
contaminantes tóxicos también pueden poner en riesgo
la salud humana. Cuando los seres humanos comen
organismos que se encuentran en una posición
relativamente alta en la cadena trófica, están expuestos
a ingerir altas dosis de algunos productos químicos
nocivos. El pez espada, el tiburón y el atún a menudo han
bioacumulado grandes cantidades de mercurio y muchos
de los llamados pescados azules pueden tener altas
concentraciones de bifenilos policlorados (PCB) que
pueden acabar siendo también bioacumulados, pero
esta vez en el organismo de los seres humanos.
Repasemos los principales temas de la presente sesión:
• La toxicocinética,
• Absorción de los xenobióticos a nivel del TGI,
• Caracterización de la absorción de los xenobióticos en el
hígado,
• Análisis de la distribución y almacenamiento de los tóxicos en
el cuerpo humano,
• Importancia de la biotransformación, bioacumulación y
biomagnificación.
¿Tiene Usted alguna duda sobre los temas vistos en
la presente sesión de clase?
Gracias
Docente: MSc. Ing. José Alberto Ramón Silva De Las Casas

También podría gustarte