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Attention Disturbances in Patients with


Autistic Spectrum Disorders

Article · March 2009

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Nora Grañana
Hospital Durand
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Psicofarmacología 9:57, Agosto 2009

Dra. Nora E. Grañana


Neuróloga infantil. Especialista en Neuropsicología.
Servicio de Pediatría. Hospital “C. Durand”. Buenos Aires.
ngranana@hotmail.com
Fecha de recepción: 6 de marzo de 2009
Fecha de aceptación: 29 de mayo de 2009

Alteraciones de la atención en trastornos del espectro


autista
Attention Disturbances in Patients with Autistic Spectrum Disorders
Resumen
El objetivo del trabajo fue caracterizar las alteraciones atencionales en pacientes con trastorno generalizado del desarrollo
en el espectro autista (EA), con el fin de diferenciar el compromiso propio del autismo de la comorbilidad con
trastornos atencionales no relacionados con los síntomas nucleares.
Se realizó una investigación bibliográfica sobre estudios de atención en pacientes con EA. Las habilidades aten-
cionales fueron analizadas según modelos neuropsicológicos, neurofisiológicos y protocolos farmacológicos.
Los trastornos atencionales propios del EA se pueden explicar por alteración en el procesamiento de tres subsistemas,
según el modelo de Mirsky:
1. Alerta y atención sostenida: comandado por el sistema reticular activador ascendente. Estaría afectado, dependiendo
de la motivación y de la modalidad sensorial, y conduce a rendimientos inferiores en tareas auditivas que visuales.
2. Atención selectiva: una vía encargada de la focalización. La orientación a estímulos visuales es un mecanismo aten-
cional aparentemente afectado en el autismo, tanto por la mayor orientación a estímulos irrelevantes al contexto como
en la dificultad en variar el foco de orientación, especialmente en ítems múltiples.
3. Control atencional: el sistema prefrontal es el encargado de los aspectos ejecutivos de la atención. Hay dificultades
en el enganche o desenganche a estímulos según el cambio de plan (shift atencional) y en la inhibición a estímulos
prepotentes. La memoria de trabajo no parece estar comprometida.
Por otro lado, algunos autistas tendrían déficits comórbidos en la atención sostenida, semejantes a los de niños con
trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD). Se describe el tratamiento farmacológico según la natu-
raleza del trastorno.
Diagnosticar con precisión y tratar estas alteraciones permitiría optimizar la respuesta a la rehabilitación cognitiva y
la calidad de vida de los pacientes autistas.

Palabras clave
Atención, espectro autista, trastorno por déficit de atención con hiperactividad, metilfenidato, risperidona, atomoxetina.

Abstract
The purpose of this study was to characterize attention disturbances in patients with pervasive developmental disor-
ders in the autistic spectrum (AS), differentiating nuclear impairments from comorbid attention disorders unrelated
to the nuclear symptoms.
A retrospective bibliographic revision was accomplished on attention studies in patients with AS. Attention compo-
nents were analyzed according to neuropsychological, neurophysiological models and pharmacological protocols.
Attention disorders can be explained by an alteration in the processing of three sub-systems, according to the model
proposed by Mirsky:
1. Alert and sustained attention: commanded by the reticular ascendant activating system with impaired performance
in auditive tasks.
2 Selective attention: responsible for the focalization of stimuli. The direction towards visual stimuli is an attention
mechanism that is apparently affected in autism, either by a prevalent focalization to stimuli irrelevant to the context,
or by the difficulty in varying the direction, especially with multiple choices.
3. Attentional Control: the prefrontal system is related with executive aspects of attention. There are difficulties in
engaging and disengaging with stimuli depending on the variation of the objectives (attention shifting), and impaiered
inhibition to prepotent stimuli, depending on the patient’s intellectual quotient and age. Working memory does not
appear to be affected.
In addition, some autistic patients may present with comorbid symptoms in sustained attention that are similar to the
symptoms displayed by children with attention deficit hyperactivity disorder (ADHD). Comorbid symptoms in atten-
tion are very difficult to determine independently, as it is difficult to sustain attention in tasks that require being quiet
in situations that it is hoped to. The pharmacological treatment is described according to the nature of the disorder.
Accurately diagnosing and treating these alterations would enable to optimize the response to cognitive rehabilitation
and the quality of life of autistic patients.

Key words
Attention, autistic spectrum, attention deficit hyperactivity disorder, methylphenidate, risperidone, atomoxetine.
Grañana Nora E. “Alteraciones de la atención en trastornos del espectro autista”. Psicofarmacología 2009;57:27-32.

Puede consultar otros artículos publicados por los autores en la revista Psicofarmacología
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Dra. Nora E. Grañana

Introducción compromiso en la comunicación y presencia de conductas


Los estudios de atención en personas con autismo se hacen repetitivas y estereotipadas, de comienzo antes de los 36
difíciles, no sólo por las dificultades de validación psicológi- meses de edad, con déficits en estas habilidades claramente
ca, sino por las características conductuales particulares y, discrepante para la edad y el nivel intelectual (Frith, 1994).
también, por los distintos rendimientos según la etapa de El EA puede manifestarse desde el comienzo de la madu-
desarrollo (Burack y cols., 2005). Por tal motivo, no se ración, y en un tercio de los casos se observa un desarrollo
admite aún para el DSM IV TR la comorbilidad entre trastornos inicial normal, con regresión antes de los 36 meses.
generalizados del desarrollo y trastorno de atención con Frecuentemente se asocia con retraso mental en el 2/3 al 3/4
hiperactividad, porque se considera al último parte de la sin- de los casos (Rapin, 1997). A veces, los trastornos generaliza-
tomatología nuclear del autismo. En la práctica neurológica, dos del desarrollo se observan en otras enfermedades médi-
alrededor del 30% de los pacientes autistas reciben medica- cas (por ejemplo, anormalidades cromosómicas, infecciones
ciones para mejorar la atención y reducir la hiperactividad y congénitas, anormalidades estructurales del sistema nervioso
la impulsividad. En consecuencia, es importante plantear las central) (Rapin, 2007). Aunque en algún momento se uti-
diferencias entre ambos trastornos para obtener un diagnós- lizaron términos como “psicosis” y “esquizofrenia infantil”
tico precoz y un tratamiento temprano y efectivo (Aman y para hacer referencia a estos trastornos (Hochman, 1997),
Langworthy, 2000; DSM IV TR). son numerosos los datos que sostienen que los trastornos
Objetivo generalizados del desarrollo son distintos de la esquizofrenia
El objetivo de esta revisión es caracterizar las alteraciones (aunque un sujeto con un TGD puede desarrollar, ocasional-
atencionales en pacientes con trastorno generalizado del mente, una psicosis posterior) (Tantam, 1991).
desarrollo en el espectro autista (EA) tratando de determinar Hoy se encuentra una prevalencia del 1/1.000, por mayor
el compromiso propio del autismo de la comorbilidad con reconocimiento de la enfermedad (AAP, 2001).
trastornos atencionales no relacionados a los síntomas El curso es crónico, en niños de edad escolar y en adoles-
nucleares. centes son frecuentes los progresos evolutivos en algunas
Método áreas, por ello la evaluación de las funciones cognitivas
Se realizó una revisión bibliográfica retrospectiva de la aten- depende de la etapa evolutiva. Algunos sujetos presentan
ción estudiada bajo paradigmas neuropsicológicos, neurofi- deterioro conductual durante la adolescencia, mientras que
siológicos y, también, de trabajos de investigación que valo- otros mejoran. Las habilidades lingüísticas (por ejemplo,
ran modificaciones en la atención con modelos farmacológicos. presencia de lenguaje comunicativo) y el nivel intelectual
general son los factores relacionados más significativamente
Paradigmas neuropsicológicos con el pronóstico a largo plazo, aunque sólo un 3% alcanza
Estos paradigmas se apoyan en las teorías de procesamiento una vida independiente y un tercio independencia parcial
de la información a través de trabajos que controlan al máximo (DSM IV TR; Rapin, 1997).
las variables de estudio en la ejecución de una tarea. Esto no
puede trasladarse en forma equivalente a las condiciones de ¿Qué es la atención?
la vida cotidiana, pero de todos modos, aportan información W. James definió la atención, en 1890, como: “todos saben
valiosa (Plude y cols., 1994). Proveen información sobre el lo que es la atención. Es la aprehensión por parte de la mente
procesamiento y las bases fisiológicas de las tareas cogniti- de manera vívida y clara de uno de los varios objetos o cade-
vas, aunque los contenidos reales en esta área son escasos. nas de pensamiento simultáneamente factibles”. A pesar del
tiempo transcurrido, esta definición no ha podido ser cam-
Modelos farmacológicos biada por otra más precisa, ya que la atención no es una fun-
Una revisión sobre farmacoterapia para hiperactividad desarrolla- ción unívoca, sino un sistema complejo formado por compo-
da en un volumen especial de tratamientos en autismo nentes, ubicados en redes neuronales, no en un sitio único,
(Aman y Langworthy, 2000) considera el tratamiento de sín- sino distribuido en el espacio y dependiente del tiempo, y
tomas como la falta de atención, la distracción, la impulsivi- lábil a lesiones de distintos sistemas.
dad o la alta tasa de actividad.
Se exploran aspectos de alteraciones de atención en pacientes Sistemas atencionales
autistas, que permiten discutir la existencia de una comor- Según el modelo de Mirsky, que luego fue ampliado por de
bilidad entre EA y trastornos de atención. Posner y Mesulam, se pueden considerar tres subcompo-
nentes del sistema atencional (Mirsky, 1987; Posner y
Trastornos generalizados del desarrollo Digirolamo, 2000) (Cuadro 1).
Se define como trastorno generalizado del desarrollo en el 1. Alerta y atención sostenida
especto autista (EA), según el DSM IV TR, una tríada sin- Definido por el estado generalizado de receptividad a los estí-
tomática que involucra: trastorno en la interacción social, mulos y preparación para responder (Posner y Digirolamo,

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CUADRO 1
Sistemas atencionales: Modelo de Mirsky

3. Shift atencional: pref

2. At. selectiva: cortezas P.F.Occ.

1. Alerta y atención sostenida:


sistema reticular ascendente

4. Codificación: hipocampo

Tomado y modificado de Posner M, Digirolamo G. Attention in cognitive neuroscience: an overview. En: Gazzaniga Ed. The new cognitive neurosciences. 2 Ed. The MIT
Press- Cambridge Mass. EUA. 2000; 623-631.

2000), comandado por el sistema reticular activador ascen- gran coordinador de todo el circuito: regula el nivel de aler-
dente (SARA), que comienza en el tronco con proyección ta, la focalización de la atención, realiza representaciones
difusa desde el mesencéfalo al tálamo y la corteza. Se regu- con las que compara estímulos nuevos y preponderantes,
la por estímulos externos e internos mediante dos vías: una interrelaciona con la planificación, la selección, el shift y el
directa, de tálamo a corteza, y otra indirecta, desde el SARA monitoreo. Hay una asimetría hemisférica. Interviene en
a la corteza. Estas vías tienen cambios tónicos y fásicos, situaciones de planificación y toma de decisiones, corrección
unidos por vías fundamentalmente dopaminérgicas, con de errores y solución de problemas, secuencias de acciones
conexiones al hipotálamo (visceroautonómicos) y a la corteza. nuevas o por aprender, peligrosas o técnicamente difíciles, e
Están comprometidos especialmente en el ADHD. inhibición ante respuestas prepotentes, por ejemplo, para
2. Atención selectiva u orientación resistir tentaciones. También está comprometido en el ADHD.
Es una vía que involucra el alerta o habilidad de focalizar
estímulos nuevos o cambiantes, produce la preparación para A. Paradigmas conductuales
analizar el estímulo. No depende de una única modalidad 1. Alerta y atención sostenida
sensorial y desaparece por repetición del estímulo. Por ejem- La atención sostenida depende del nivel de desarrollo, de la
plo, una sombra en la oscuridad produce el desarrollo de las modalidad atencional y de la motivación. No se encontraron
siguientes etapas de Posner: liberación de la localización pre- diferencias significativas en el rendimiento al comparar
via de la atención desde el parietal; desplazamiento al nuevo autistas por igual nivel intelectual con escolares típicos en
foco (por parte del tálamo), ubicación en el nuevo foco (por tareas de atención sostenida con discriminación de estímu-
parte del mesencéfalo) e interrupción de la acción previa (por los visuales, como lo que se mide a través del CPT (Tareas de
parte del lóbulo frontal, ver cuadro 2). Incluye los ganglios rendimiento continuo) (Goldstein y cols., 2001).
basales como el cuerpo estriado (caudado + putamen), el Existe una modulación atípica del alerta en individuos autis-
pálido, la amígdala y conexiones al hipocampo donde se tas. Prevalece un estado de alerta máximo, interpretado
coteja si ese estímulo es conocido y, en caso de que no se como hiperrespuesta y habituación lenta, con una reducción
requiera mayor alerta, al SARA para cerrar el sistema. Incluye y falta de modulación del alerta (Barry y James, 1988). Se
la vía visual y sus alteraciones se ven en la hiperfocalización describió que, como consecuencia de esta hiperpercepción,
de los autistas y en la heminegligencia. había un rechazo a múltiples estímulos.
3. Atención ejecutiva: corteza También hay perseveración, que sugiere una capacidad intac-
El sistema supervisor atencional o control atencional es el ta de mantener la atención no sólo en tareas autogeneradas,

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Dra. Nora E. Grañana

CUADRO 2
Déficit atencionales en autismo según subcomponentes
Alerta y atención sostenida Alteración en la regulación de la atención
Atención sostenida auditiva
Atención sostenida relacionada con estímulos sociales
Atención selectiva Hiperselectividad ante selección entre estímulos múltiples, complejos, impredecibles o novedosos
Funciones ejecutivas Menor shift atencional: especialmente en cambios de modalidad sensorial, niveles conceptuales complejos con perse-
veraciones.
Mayor dificultad en inhibir estímulos prepotentes.
Codificación Visual conservada, auditiva reducida.

sino que también puede presentarse en tareas requeridas por no relacionados con la tarea.
otros. 3. Aspectos ejecutivos: control atencional.
Sí hay diferencia en el rendimiento cuando el refuerzo es Hay claras dificultades en el shift atencional en autistas
social, con menor respuesta, (Garretson y cols., 1990) y en (Goldstein y cols., 2001; Notterdaeme y cols., 2001), con
tareas que requieren atención auditiva, ya que al haber uso de estrategias perseverativas e inflexibles en el test de
menor comprensión, prestan menos atención a indicaciones Wisconsin, también en tareas de alternancia de canales audi-
que les son dadas verbalmente (Notterdaeme y cols., 2001). tivo y visual (Courchesne y cols., 1994), especialmente en
Siempre hay que tener en cuenta en el rendimiento que las niveles conceptuales de mayor complejidad y, en menor
tareas tengan la motivación suficiente para no influir en los medida, en la inhibición de estímulos prepotentes (Ozonoff,
resultados, especialmente en niños. 2000; Notterdaeme y cols., 2001). La memoria o atención
La preservación de la atención sostenida visual en autistas de trabajo no parece estar comprometida para igual nivel intelec-
puros permite diferenciar alteraciones de la atención sosteni- tual y edad (Ozonoff y Strayer, 2001).
da en autistas con trastorno por déficit de atención con 4. Atención conjunta
hiperactividad (ADHD). Un niño autista con alteraciones de Lo que se refiere a esta disfunción tiene mayor relación con
atención sostenida visual puede requerir intervenciones especí- la habilidad social de compartir, incluida en los factores
ficas. emocionales del modelo de Mesulam, que con un déficit
2. Atención selectiva/orientación atencional en sí (Mundy y cols., 1990; Rollins y cols., 1998).
Se pueden analizar, a su vez, en subcomponentes de: orientación Diferentes trabajos que evalúan la orientación de la atención
a estímulos, anticipación al sitio de aparición del estímulo, en el EA demostraron que el paciente sigue la dirección de
búsqueda, fijación al foco y filtro. La orientación a estímulos la mirada del interlocutor (Kylliainen y Hietanen, 2004).
visuales, tanto en relación a aspectos manifiestos (dirección
ocular) como mentales (ojo de la mente), es un mecanismo Modelos neurofisiológicos
atencional aparentemente afectado en el autismo, tanto por Los potenciales evocados indican evidencias de respuestas
la mayor orientación a estímulos irrelevantes al contexto, atípicas de atención selectiva (componentes N1 y P1), de orientación
como en la dificultad en variar el foco de orientación (shift (N2) y en mecanismos de atención tardía (P3) voluntaria
atencional) (Casey y cols., 1993). Burack encontró déficits (P300). Estas alteraciones se producirían a través de sub-
con estímulos complejos cuando fueron comparados por componentes que involucran el procesamiento visuoespacial
edad mental grupos de autistas de alto y bajo rendimiento, en su respuesta frontal de orientación visual y en la respues-
con escolares típicos (Burack y cols., 2005). También con ta parietal tardía relacionada con la actualización de la infor-
estímulos complejos se enlentece lenta la búsqueda visual mación visual con el contexto. Courchesne y colaboradores
(Notterdaeme y cols., 2001). (Towsend y cols., 2001) lo interpretan como una probable
La respuesta visual en tareas de ejecución continua (CPT) alteración de la regulación subcortical de la vía desde el cere-
demostró una latencia prolongada, con mayor proporción de belo, debido a hallazgos que correlacionan el déficit en la
respuestas erróneas por omisión cuando fueron comparadas orientación visual con un menor tamaño del cerebelo en
un grupo de autistas con niños no autistas con ADHD niños autistas (Harris y cols., 1999).
(Swaab-Barneveld y cols., 2000).
En los casos en que los estímulos fueron separados por Modelos farmacológicos
modalidad sensorial, pudo observarse que hay dificultades de Algunos autores sugieren que alrededor del 30% de los niños
anticipación cuando hay cambios rápidos de expectativa autistas reciben medicaciones que les permiten incrementar
(Courchesne y cols., 1994), por lo que pareciera que su independencia en la realización de tareas (Aman y
requieren más tiempo para anticiparse a un estímulo desde Langworthy, 2000). Las medicaciones con demostración de
la orientación endógena (Burack y cols., 2005). Finalmente, eficacia clínica son los psicoestimulantes, los inhibidores de
hay una deficiencia general para filtrar los estímulos visuales la recaptación de noradrenalina, los antipsicóticos y los ago-

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nistas alfa-adrenérgicos (Aman y cols., 2008). clomipramina y desipramina mejoran la escala CPRS (Gordon
Se utilizan en protocolos farmacológicos en escalas de hiper- y cols., 1992). Por otro lado, en pacientes que eran tratados
actividad, como los índices de hiperactividad de la escala de con fluoxetina se halló un empeoramiento en dicha escala
Conners (también utilizado para valorar evolución, Nicolson y (Fatemi y cols., 1998).
cols., 1998), en la subescala de hiperactividad del CPRS Para la hiperactividad y la impulsividad, los antipsicóticos,
(escala de puntuación psiquiátrica para niños, Perry y cols., tanto atípicos como típicos, son los más indicados. Se pro-
1997), en la subescala de hiperactividad del ABC (lista de duce una mejoría en el índice de hiperactividad de la escala
chequeo de conductas aberrantes, Realmuto y cols., 1989), de síntomas abreviada de Conners, en la tasa de actividad y
en el span atencional en Escala HBS (para tareas dadas por en la subescala de hiperactividad del CPRS, y se registra
el evaluador, en relación al requerimiento de supervisión, mejor respuesta con risperidona que con haloperidol (Perry y
Wing, 1996) o en la escala ADOS-G (en relación a la expec- cols., 1997). Los trabajos en los que fueron utilizados ansiolíti-
tativa para mantenerse sentado en relación con su nivel men- cos muestran una reducción de puntaje en la subescala de
tal, Lord y cols., 2000). Se trata de compatibilzar criterios hiperactividad de la escala ABC con buspirona, pero un
diagnósticos del DSM IV TR, a pesar de que este manual empeoramiento de la irritabilidad y la agresividad con benzo-
excluye explícitamente el trastorno generalizado del desarrollo diazepinas (Realmuto y cols., 1989). Con naltrexona se
como comorbilidad del déficit de atención con hiperactividad observa una reducción modesta de la hiperactividad, con
(Yoshida y Uchiyama, 2004; DSM IV TR). incremento en la atención en los pocos trabajos realizados.
De acuerdo con los modelos neuropsicológicos, el enfoque
farmacológico podría requerir tratamientos diferentes según Direcciones futuras
el tipo de déficit atencional. Luego de analizar estas hipótesis, queda por resolver:
Así, para aquellos niños con EA y déficits de atención • si la hiperactividad con déficit de atención es semejante en
sostenida típicos del ADHD pueden ser de utilidad psicoes- niños autistas que en hiperactivos puros;
timulantes tipo metilfenidato, antidepresivos tipo atomoxeti- • si el déficit atencional del EA es secundario exclusivamente
na (Jou y cols., 2005) y, en caso de no lograr una respuesta al déficit de funciones ejecutivas (Geurts y cols., 2004);
favorable, no se debe olvidar los agonistas alfa adrenérgicos • si la respuesta a los antipsicóticos está dada por sedación,
como la clonidina. Un relevamiento de la Sociedad Nacional con reducción de la tasa de actividad, pero con empeo-
de Autismo de EE.UU. encontró que alrededor del 12% de ramiento de la atención sostenida;
niños autistas recibían estimulantes. Se encontró que 4 entre • si es similar la respuesta con antipsicóticos típicos y atípicos;
12 niños tratados con metilfenidato se beneficiaron clara- • cuáles son los factores que pueden predecir la respuesta a
mente en escalas de hiperactividad de Conners y en el CGI distintas clases de medicaciones, por ejemplo, qué grupo de
(Escala de Impresiones Clínicas Globales, Di Martino y cols., pacientes puede responder a los estimulantes.
2004). Sin embargo, se deben tener en cuenta los efectos Sería muy interesante hallar las respuestas para estas pre-
colaterales, como las estereotipias, que se encuentran incre- guntas a través de investigaciones futuras, para llegar a la
mentadas en estos pacientes (Handen y cols., 2000). Se mejor toma de decisiones por parte de los profesionales que
observa una modesta respuesta con clonidina, especialmente traten a niños con esta patología (Aman y Langworthy,
en aquellos pacientes con conductas disruptivas y trastornos 2000).
del sueño (Frankhauser y cols., 1991; Moussavand y
Findling, 2007). Conclusiones
Si las dificultades están en la atención selectiva y el control En particular, en los trastornos del EA se produce un déficit
atencional, serían útiles las medicaciones que favorecen la en la atención selectiva por orientación a estímulos irrele-
organización del pensamiento y la conducta, como los neu- vantes al contexto, así como una dificultad en variar el foco
rolépticos atípicos, entre ellos la risperidona, la olanzapina y de orientación (shift atencional). A su vez, se produce un
el aripiprazole. Los psicoestimulantes podrían exacerbar la déficit en funciones ejecutivas como el shift atencional y en
focalización y, en este caso, empeorarían los síntomas, según la interpretación de información simbólica que podrían estar
el paradigma de Lovaas y colaboradores (1979). implicados en la selección y el procesamiento de la informa-
En el caso de producirse fallas por perseveraciones, compul- ción que se recibe del ambiente. Es probable que el análisis
siones y conductas obsesivas, que alteran el desenganche o de modelos propuestos desde la neuropsicología permita
shift atencional, los antiobsesivos del tipo inhibidores selec- encontrar subgrupos de trastornos de la atención que sean
tivos de la recaptación de serotonina (IRSS), como la fluoxeti- tratados de manera específica y adecuada, permitiendo así
na, las fluvoxamina y la sertralina son efectivos. Algunos optimizar la respuesta a la rehabilitación cognitiva y la cali-
estudios demuestran que los antidepresivos tricíclicos dad de vida de los pacientes autistas.

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Dra. Nora E. Grañana

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