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MDC.

Itzel Guadalupe Carmona Piza


 La palabra adaptación es de origen latín “adaptare” que significa “ajustar una cosa
u otra”, compuesto del verbo “ad”que expresa “hacia”y el verbo “aptare” que
figura “ajustar o aplicar”.
 El ser humano es un ser adaptable a todas las situaciones. En virtud, de que en
la vida se genera cambios permanentes que el individuo se debe de ir ajustando a
ellos, la adaptación no es de un día para otro, primero se debe de superar
un periodo de transición con el fin de habituarse a la nueva vida o cambio.
 La adaptabilidad o
gestión del
cambio consiste en la
capacidad de responder
con flexibilidad a los
cambios que ocurren en el
entorno y adaptarse con
facilidad a nuevas
realidades.
NEGACIÓN.
 Es la etapa de las preguntas: “¿Es
cierto?”, “¿Es posible que haya podido
suceder?”, “¿Cómo ha podido pasar
esto?”, “¿Por qué?” Se define por la
sensación de incredulidad: no creemos
lo que está sucediendo o va a suceder.
Nos negamos a aceptar lo que ocurre
porque “es demasiado fuerte para ser
cierto”. Nuestra psique se revela ante
este proceso.
 Este proceso, genuinamente emocional,
se manifiesta de múltiples formas:
contra los causantes del cambio, contra
los seres cercanos, contra terceros no
claramente definidos, a veces surge de
forma espontánea, inmediatamente a la
notificación del cambio, pero otras
aparecen cuando ya llevamos un
tiempo funcionando con las nuevas
condiciones de trabajo.
 La ira es una reacción natural ante el
cambio. Hay que gestionarla, no pararla
ni olvidarnos de ella o asumir que
degenere en violencia.
 ¡Todo el proceso es negociación en un
sentido u otro!
 Antes de que suceda el cambio
negociamos cualquier cosa: “Lo haremos
mejor”, “Conseguiremos los resultados y
objetivos”, “Seremos más “, “eficientes” …
Y una vez que se convierte en irremediable
solemos negociar, sobre todo, el tiempo:
“No es buen momento ahora”, “Cuando
tengamos más consolidados otros
cambios”, … Nunca es buen momento para
iniciar el proceso del cambio no deseado.
 Es necesario que aprendamos a identificar este momento y los paracaídas del
cambio (las excusas que aparecen como razonamientos lógicos, ciertos pero que
en realidad no son nada más que eso, excusas) con el objetivo de superarlas y
empujar hacia el cambio lo antes posible.
 El peor enemigo de esta fase es posponer el cambio a la espera de una situación
mejor… que sabemos que nunca llegará. “Acción” es la palabra clave.
 La depresión hace referencia en una
forma drástica al presente.
 Es una sensación actual de vacío, de
tristeza cuando el cambio profundo se
hace evidente y ves que no puedes
negarte ni eludirlo. Te sientes mal y
trasladas ese sentimiento de tristeza a
tus relaciones, dentro y fuera del
trabajo.
 A veces la conversación se hace monotema, las relaciones personales pueden
verse muy perjudicadas, nuestra salud se deteriora; dolores debidos a
contracturas, gripes y resfriados por bajas defensas por el estrés.
 Así como las otras etapas pueden
ser sucesivas o no, es obvio que
esta sea la etapa final, la de
resolución. Aquí ya no existe otra
alternativa. O aceptamos el
cambio con todas sus
consecuencias o lo rechazamos
(abierta o indirectamente).
 No todo el mundo debe pasar por todas las fases, hay quienes han aceptado que la
vida es cambio y no les afecta demasiado. Pero eso va en contra de los
mecanismos desencadenantes de este proceso antes descrito.
 Sin duda, aceptar no significa sentirse bien o estar de acuerdo con lo que ha
pasado. Es asumir que hay una nueva realidad y que debemos aprender a vivir con
ella.
 De acuerdo con la última cifra del Instituto Nacional de Estadística y Geografía cerca de
29 millones de personas -6 de cada 10 trabajadores- se ocupan en el sector informal,
es decir, carecen de un puesto de trabajo estable, seguro médico y otras prestaciones
de ley.
 Tener un empleo actualmente se ha convertido en todo un reto. En 1960 había 3
vacantes disponibles por cada egresado de estudios superiores. Hoy cada vacante para
profesionistas tiene en promedio 4 candidatos que aspiran a ocuparla.
 Trabajar es positivo, tienes un medio para obtener recursos económicos, puedes
acceder a prestaciones y además construyes una historia laboral.

¿Qué es lo que más aprecias de tu


empleo?
 Eso favorece el plano emocional.
 Aprender algo nuevo
puede darle un giro a tu
vida laboral. No sólo es
satisfactorio, además
puede hacer que tu perfil
sea atractivo para
diferentes
responsabilidades en tu
centro de trabajo.
 Asumir retos cada vez más ambiciosos (pero siempre realistas), para tener siempre
un objetivo que nos impulse a esforzarnos.
 Cuando hemos pasado los últimos 5, 10 o 20 años haciendo exactamente lo mismo
se hace más difícil disfrutar el trabajo. Por ello es importante atreverse a hacer
cosas nuevas y diferentes.
 Ofrece tu ayuda a otros
departamentos, involúcrate
en actividades que estén
fuera de tus funciones e
incluso habla con tu jefe y
hazle saber que te gustaría
aprender algo nuevo.
 El cansancio favorece el error y saca lo peor de cada uno.
 La experiencia nos demuestra que los que se han vendido nunca han conseguido
ser felices”.
 “Somos nuestro valor principal”.
 Haz pequeñas pausas durante tu jornada y respira profundamente. Intenta no
pensar en nada. La meditación reduce la ansiedad y el estrés.
 Cuando algo malo nos sucede, tendemos a caer en la negatividad pensando que
nada bueno pasa con nosotros; sin embargo, teniendo anotadas las ocasiones en
que hemos sido alegres es más fácil hacer un balance positivo de nuestro día a día.
 Pero no te quedes sólo en eso,
realiza acciones que lo
refuercen.
 Sin duda hay trabajos que cuesta disfrutar.
 No es sencillo aceptar un trabajo temporal en espera de mejores oportunidades,
sin embargo, todo nuestro aprendizaje laboral nos aportan experiencia,
conocimientos y lecciones valiosas para el futuro.
 En lugar de sentirte mal por las cosas que no te agradan de tu trabajo actual,
enfócate en pensamientos positivos sobre las cosas que sí son importantes, por
ejemplo:
 *Gracias a este empleo puedo pagar mis estudios.
 *Con este empleo temporal puedo obtener referencias laborales que me hicieron
falta en procesos anteriores.
 *Este empleo me permitió obtener el crédito de mi casa.
 Este tipo de pensamientos te recuerda cuál es tu motor, cuál es tu meta a futuro y
qué estás logrando gracias a tu empleo.
¿Hay más cosas negativas que
positivas en tu trabajo?
 Todos los empleos tienen
aspectos positivos y
negativos. Uno de los
positivos es que nos dan la
oportunidad de
relacionarnos con más
gente.
 Las relaciones personales en
el trabajo pueden reducir el
estrés, animar el día e
incluso ayudarnos a
aprender cosas nuevas.
 Evita ser parte de chismes, rumores, etc. este tipo de conductas siempre
perjudican tu imagen y traen problemas, aléjate lo más posible de compañeros de
trabajo nocivos y evita compartir detalles de tu vida personal con ellos. En cambio,
aprovecha a los colegas valiosos, aprende de ellos o enséñales algo.
 Hay gente común que en verdad disfruta su trabajo y lo hace más que bien: lo hace
excelente. Esa gente está motivada, la motiva su actividad, el trato con la gente, un
proyecto a futuro, la fortuna de tener un ingreso, su familia.
¿Cuál es tu motivación?
Descúbrela y aprende a amar
lo que haces.
 El dinero es importante y mucho. Millones de trabajadores están insatisfechos con
su salario y desearían que mejorara.
 Sin embargo, pensar siempre en lo malo que es tu trabajo por el poco dinero que
recibes es una postura muy limitada que hace que todo lo demás sea negativo.
Puede ser una situación temporal. Reconoce qué es eso que sí te hace sentir
satisfecho en el trabajo.
¿Tu trabajo ayuda a otras personas?
¿Te permite conocer gente nueva?
¿Te aporta nuevos conocimientos?
¿Te ayuda a mejorar tu desempeño
profesional?
Cambiar de actitud en el trabajo no hace feliz
a tu jefe, tus compañeros o tu equipo; una
mejor actitud es benéfica para ti, porque te da
equilibrio mental para afrontar retos.
 Identifica en qué consisten dichos cambios y qué posibilidades tenemos de
adaptarnos a ellos.
 ¿Cómo está el contexto actual?
 La adaptación al cambio depende sobre todo de cuánto sepamos del nuevo
contexto, para adaptarnos, antes debemos saber a qué nos adaptamos.
 Es imposible concebir un proceso de adaptación al cambio si nos aferramos a
ideas o estrategias tradicionales.
 Eso es justamente la flexibilidad: saber aceptar nuevas formas de gestión y tener
la capacidad suficiente para crear valor institucional en las nuevas condiciones.
 Si queremos que el proceso de adaptación al cambio sea más efectivo, otra
clave está en la manera en que lo comuniquemos a las distintas
dependencias o áreas de nuestra institución. Cuanto más eficaces sean nuestros
mensajes, más compromiso crearemos ante el reto que supone adaptarse a un
nuevo escenario.
 El aprendizaje permite
que la institución sea
eficiente, obtenga los
resultados por los cuales
nació, según sus
objetivos, con altos
niveles de competitividad
de acuerdo con las
demandas del contexto a
las cuales se debe.
La adquisición del aprendizaje es la base para
alcanzar el éxito y generar procesos de
cambio acertados, se comparte esta posición
cognitiva.
Se comprende que toda acción repercute en
la institución como un todo y en cada una de
sus partes, estas consecuencias son tanto en
el presente como el futuro y son
acompañadas de una gestión que comparte y
ejecuta esta visión.
 Se trabaja en el presente en función del futuro, estos principios
son comprendidos por la gestión y trasmitidos e interiorizados
por todos los integrantes de la organización.
 Fundamental para alcanzar los
propósitos institucionales que
por sí mismos no es posible
alcanzar en forma individual.
No hay institución que con una
ejecución unilateral y un
trabajo individual de parte de
sus integrantes alcance el
cumplimiento de sus objetivos
en forma adecuada.
 El componente humano es una característica fundamental,
que coadyuva a establecer relaciones con ética,
creatividad, innovación, respeto. Todos estos elementos
desde un enfoque sistémico proporcionan estructuras
adecuadas para el desempeño de la institución y deben
ser generadas e impulsadas por la gestión.
 La capacidad organizacional de contar con altos
niveles de compromiso y responsabilidad de
parte de sus integrantes en función del
cumplimiento de la misión es la condición
deseada para cualquier institución, que a su vez
es un reto de la gestión.
 Estas condiciones se viven y se modelan desde
la gestión y se interiorizan como una cultura
laboral.
 El conocimiento individual y grupal de una institución es un capital
intelectual que lidera el posicionamiento de la organización y, así
como otros recursos, este requiere de una eficiente gestión.
 El conocimiento por sí mismo no se traduce en acciones, requiere
de una gestión competitiva que impulse las condiciones necesarias
para que el conocimiento que posee la institución se transforme en
servicios de alta calidad.
“Felicidad no es hacer lo que uno quiere, sino querer lo que uno hace.”
Jean Paul Sartre

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