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El documento discute la brecha de género en los datos sobre salud y seguridad en el trabajo. Explica que la investigación tradicionalmente se ha centrado en industrias dominadas por hombres, por lo que el conocimiento sobre cómo prevenir lesiones en mujeres es fragmentario. Relata el caso de una cuidadora que sufrió una lesión en el hombro al levantar a una persona mayor y explica que las mujeres en trabajos de cuidado a menudo levantan más peso que los obreros pero no reciben capacitación. Finalmente, señala que a pesar del aumento
El documento discute la brecha de género en los datos sobre salud y seguridad en el trabajo. Explica que la investigación tradicionalmente se ha centrado en industrias dominadas por hombres, por lo que el conocimiento sobre cómo prevenir lesiones en mujeres es fragmentario. Relata el caso de una cuidadora que sufrió una lesión en el hombro al levantar a una persona mayor y explica que las mujeres en trabajos de cuidado a menudo levantan más peso que los obreros pero no reciben capacitación. Finalmente, señala que a pesar del aumento
El documento discute la brecha de género en los datos sobre salud y seguridad en el trabajo. Explica que la investigación tradicionalmente se ha centrado en industrias dominadas por hombres, por lo que el conocimiento sobre cómo prevenir lesiones en mujeres es fragmentario. Relata el caso de una cuidadora que sufrió una lesión en el hombro al levantar a una persona mayor y explica que las mujeres en trabajos de cuidado a menudo levantan más peso que los obreros pero no reciben capacitación. Finalmente, señala que a pesar del aumento
Como tradicionalmente la investigación laboral se ha
centrado en las industrias en las que predominan los hombres, el conocimiento que se tiene sobre cómo prevenir las lesiones en las mujeres es, como mínimo, fragmentario. Sabemos todo sobre el levantamiento de cargas pesadas en la construcción: cuáles deben ser los límites de peso o cómo puede hacerse de manera segura. Pero cuando se trata de levantar objetos pesados en el trabajo de cuidados, eso es trabajo de mujeres, y ¿quién necesita formarse para eso?
Béatrice Boulanger no recibió ninguna
formación. Como cuidadora doméstica de personas mayores, «aprendió todo en el trabajo». Pero entre sus tareas había muchos levantamientos, a menudo de personas con sobrepeso. Un día, mientras ayudaba a una mujer a salir del baño, se le dislocó el hombro. «Todo lo que rodeaba la articulación se estaba desintegrando», contó a la revista sobre salud ocupacional Hazards. «Los médicos tuvieron que cortar la cabeza del húmero». Al final, Boulanger necesitó un reemplazo de hombro completo y ya no puede realizar su trabajo.
Boulanger no es un hecho aislado. Las mujeres que trabajan
como cuidadoras y asistentas pueden levantar más peso en un turno que un obrero de la construcción o un minero. «Hace tres años solo había un lavabo en el piso de arriba —dijo a Equal Times una encargada de la limpieza de un centro cultural de Francia—. Teníamos que llevar los cubos arriba y abajo cuando el agua se ensuciaba. Nadie cayó en cuenta». Y a diferencia de los obreros de la construcción y los mineros, cuando estas mujeres se van a casa no es para descansar, sino que hacen un segundo turno no remunerado en el que tienen que seguir levantando, arrastrando, agachándose y frotando. En su retrospectiva de una vida dedicada a la investigación sobre la salud ocupacional de las mujeres de 2018, Karen Messing, genetista y profesora de ciencias biológicas en la Universidad de Montreal, escribe que «todavía no se han realizado investigaciones biomecánicas sobre los efectos del tamaño de los senos en las técnicas de lifting asociadas con el dolor de espalda», a pesar de que la ingeniera Angela Tate de Memorial University alertó a los científicos del sesgo masculino en los estudios biomecánicos que se hicieron en la década de los noventa. Messing también señala que las partes de las mujeres sobre el dolor musculoesquelético asociado con el trabajo se siguen tratando con escepticismo, a pesar de la acumulación de informes que indican que los sistemas de dolor funcionan de manera diferente entre mujeres y hombres. Mientras tanto, hemos advertido hace muy poco que casi todos los estudios sobre el dolor se han realizado exclusivamente con ratones macho.
La brecha de datos de género en la salud ocupacional a veces
se atribuye a que los hombres tienen más probabilidades que las mujeres de morir en el trabajo. Pero si bien es cierto que los accidentes más dramáticos siguen dominados por los trabajadores varones, esta no es la historia completa, porque un accidente laboral no es de ningún modo la única forma en que el trabajo puede matar a un empleado. De hecho, ni siquiera es la más común. Cada año mueren ocho mil personas de algún cáncer relacionado con su trabajo. Y aunque la mayoría de las investigaciones en este campo se han realizado en hombres, dista mucho de ser evidente que ellos sean los más afectados. En los últimos cincuenta años, las tasas de cáncer de mama en el mundo industrializado han aumentado significativamente, pero al no investigarse los cuerpos, las ocupaciones y los entornos de las mujeres, faltan los datos de lo que hay exactamente detrás de este aumento. «Sabemos prácticamente todo acerca de las enfermedades relacionadas con la exposición al polvo del carbón de los mineros —me comenta Rory O’Neill, investigadora de políticas laborales y ambientales en la Universidad de Stirling—. Pero no puede decirse lo mismo de las exposiciones, físicas o químicas, en los trabajos “de las mujeres”». Reflexione con su grupo ¿Cómo pueden analizar la brecha de datos de género que se presenta en el ámbito de la salud y seguridad en el trabajo?
¿Habían pensado antes en que el trabajo no
remunerado que hacen las mujeres debería estudiarse, cuantificarse y medirse? ¿Por qué?
¿Después de leer el artículo, creen que los
datos y en general, la manera como está organizado el mundo puede responder a una lógica masculina que descuida el punto de vista de las mujeres o sus necesidades?
¿Cómo podrían las ingenierías o la
arquitectura crear soluciones frente a problemas que solo viven y enfrentan las mujeres en su cotidianidad?