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MAESTRÍA EN SOLUCIÓN DE CONFLICTOS

PRESENTADO POR:

DANNY ADRIÁN DOMINGUEZ CHAVEZ

LIMA – PERU

2022
“LA VIABILIDAD DE CONSTRUIR UNA CULTURA DE PAZ EN EL PERÚ”

El Perú, a lo largo de su historia, se ha enfrentado a situaciones de violencia


extrema, provocadas por los conflictos tanto internos como externos; las
décadas de los 80s y 90s, fueron décadas donde nuestro país estuvo sumido
en la misera que trajo consigo el conflicto interno, donde se vivieron actos de
terrorismo, tanto por parte de los grupos terroristas paramilitares como lo son el
Movimiento Revolucionario Túpac Amaru y Sendero Luminoso, como el
terrorismo de estado implantado, sobre todo, por el gobierno del dictador
Alberto Fujimori.

Desde entonces, el Perú se ha enfrentado a un fuerte desafío por la promoción


de una cultura de paz, un desafío que constantemente se ha visto amenazado
por los rezagos del terrorismo, que en la actualidad, si bien es cierto ha
disminuido pero que no ha desaparecido, sino más bien está buscando adquirir
mayor fuerza, aliándose con el narcotráfico, a lo que se conoce como
narcoterrorismo; ello sumado a los graves problemas de corrupción, las
constantes crisis políticas y los conflictos sociales ocasionados por una gran
brecha existente entre las clases sociales hacen que construir una cultura de
paz sea un reto difícil de conseguir.

Para entender a qué me refiero con construir una cultura de paz, es necesario
entender el significado de la paz; puede entenderse como un estado de
tranquilidad o quietud; así como la ausencia de guerra o violencia. En las
relaciones internacionales, puede entenderse a la paz como a los hechos que
ponen fin a los conflictos bélicos o guerras, como lo son, los tratados de paz.

A decir del filósofo Ortega y Gasset, señala “la paz es una obra humana, algo
que hay que producir con un esfuerzo todavía mayor a esas otras obras que
son la guerra o la violencia sistemática”1; es decir, el filósofo manifiesta que la
paz tiene que ser construida por el ser humano (obra humana) y que para

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Introducción a la Cultura de Paz - Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social Dirección General de
Desplazados y Cultura de Paz – Editorial Trama de Rubelionil Ramirez Ramoz – pag. 09
conseguirla, es necesario poner un mayor esfuerzo; no solamente el relación a
las guerras existentes entre los países, sino también en relación con el
desarrollo de los estados a nivel interno, las sociedades, las comunidades y las
familias.

Sin embargo, el concepto de paz y cultura de paz, va más allá de la ausencia


de guerra; la UNESCO, ha postulado como Cultura de Paz como la necesidad
de respeto por todas las vidas; el rechazo de la violencia, el desarrollo de la
capacidad de generosidad y el compartir de los recursos materiales, la
preservación del planeta con un consumo responsable de sus recursos y con
criterios de justicia2; como podemos ver; la construcción de una cultura de paz
va más allá de la ausencia de violencia y de guerras.

La paz está ligada de forma directa, a las acciones de los seres humanos y sus
consecuencias; donde se involucra la dignidad humana y su respeto, el
desarrollo de la libertad individual y la convivencia armoniosa; por lo que, la
construcción de una sociedad desarrollada dentro de una cultura de paz, no es
solo una tarea del Estado, sino, tiene que ver con el compromiso individual y un
cambio en las conciencias de los ciudadanos.

Para conseguir una cultura de paz, es necesario tener en consideración otros


aspectos aparte de los ya mencionados en los párrafos precedentes; pues no
se puede lograr ello, si no se considera la lucha contra la violencia familiar,
social, la discriminación y la pobreza; pues estos aspectos están ligados de
manera directa a las situaciones que no permiten lograr una cultura de paz.

A fin de poder conseguir lo antes mencionado; es necesario crear las


condiciones de igualdad de económica y social. Desde que la idea de Paz ha
estado presente en los análisis de los teóricos hasta la fecha de hoy, el
concepto de paz ha ido evolucionando, dejando de ser considerada como
únicamente la ausencia de de violencia; convirtiéndose en un proceso

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Ética, creatividad e imaginación: elementos esenciales para la construcción de culturas de paz – Dora
Elvira García Gonzáles - Pag. 307
complejo, cuyo logro depende de un esfuerzo dinámico y activo; siendo un
medio de transformación personal y colectiva.
“«La Paz es un estado psicológico, social, político, ético y espiritual con su
expresión en las áreas de la vida humana intrapersonal, interpersonal,
intergrupal, internacional y global» (Danesh, 2006) y la principal expresión de
una visión mundial basada en la unidad.” 3

Sin embargo, a fin de analizar la viabilidad de construir una cultura de paz en el


Perú; debemos considerar que en América Latina, y en la cultura occidental en
general, mantiene el concepto de paz que se deriva de la idea de ausencia de
guerra y ausencia de violencia; manteniendo un sentido bélico de paz. La
cultura de paz, debe ir mas allá de los conceptos teóricos y ser llevados a la
práctica; desarrollando un sistema legal, económico, educativo y cultural.

Como mencioné en los primeros párrafos del presente análisis; la historia de


nuestro país ha estado llena de actos violentos y una fuerte ausencia de paz; el
conflicto interno de las décadas de los 80s y 90s y la corrupción, hicieron del
país una nación inestable y con graves problemas en el respeto de la dignidad
humana; si bien es cierto, el terrorismo ha sido debilitado, éste no ha
desaparecido; la brecha existente entre las clases sociales, el desempleo y la
crisis económica y política guardan una estrecha relación con la cultura de paz
que tanto se anhela para nuestro país; y estos problemas afianzan la
posibilidad de que se vuelva a vivir un fuerte conflicto interno que sumirá al país
en una crisis de mayores proporciones a las cobradas en décadas pasadas;
evitar que esto suceda no es una tarea exclusiva del Estado y sus instituciones;
es una tarea donde se debe involucrar la clase política y la sociedad como tal,
es decir, de los ciudadanos, para lo cual, se debe promover la unidad, la
justicia y la solidaridad.

Conseguir un cambio no depende únicamente del estado y de las políticas que


se puedan implantar; como ciudadanos y miembros de una comunidad,
debemos entender que el cambio social puede lograrse únicamente desde el
cambio personal e individual; no basta con exigir al estado la aplicación de
3
De Teorías, Metodologías y Prácticas para la Paz - Lozano Garza, Narcedalia - Pag. 4
políticas más idóneas pues éstas no servirán de nada si no generamos
cambios de conciencias; no podemos solo esperar que la violencia social,
familiar, la discriminación y la pobreza desaparezcan por sí solas; éstas tienen
que ser reemplazadas por actitudes personales que puedan reemplazar estos
puntos negativos, por otras obras humanas como familias que vivan en
armonía, comunidades constructivas y que velen por su propio desarrollo y una
verdadera democracia en busca de una sociedad más equitativa.

Por otro lado, es necesario considerar que, por la misma naturaleza humana y
dado que en toda sociedad van a existir diferencias e intereses contrapuestos
entre los grupos sociales; van a existir conflictos sociales; éstos conflictos no
necesariamente son negativos; el problema está en cómo abordar y resolver
dichos conflictos, a fin de que no desencadene enfrentamientos violentos o
actos de violencia.

A fin de profundizar en el análisis de la viabilidad de cultura de paz en el Perú,


es necesario también entender lo que es el conflicto, dado que, el modo de
entenderlo y abordarlo es influye mucho en la forma en la que podemos cultivar
una cultura de paz, ya que, el conflicto es uno de los factores muy importantes
que influye en la cultura de paz; según Lederach, es una lucha expresada
entre, al menos, dos personas o grupos interdependientes que perciben
objetivos incompatibles, recompensas escasas e interferencias del otro para
realizar sus metas.

Los conflictos, como ya se mencionó anteriormente, no necesariamente son


negativos; son constantes en el desarrollo de las sociedades, éstos se tornan
en negativos y perjudiciales cuando, al momento de abordarlos o resolverlos,
se acuden a métodos o actos violentos; puede existir conflictos sin violencia,
pero no puede existir violencia sin conflicto. “Los especialistas en conflictos nos
dicen que, siendo los conflictos normales en la vida humana, ellos no son,
necesariamente, positivos o negativos…”4

4
Introducción a la Cultura de Paz - Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social Dirección General de
Desplazados y Cultura de Paz – Editorial Trama de Rubelionil Ramirez Ramoz – Pag. 28
Respecto a la violencia; podemos entenderla como el uso de la fuerza, ya sea
como amenaza o como acción, de manera intencionada, en contra de una
persona o grupo social, que pueda causar daños físicos, psicológicos,
privaciones o incluso la muerte; a nivel global y a lo largo de la historia de la
humanidad; los conflictos solían ser resueltos de manera violenta; con la
evolución del pensamiento humano, se ha empezado a considerar como la
violencia como un hecho social o cultural; y mucho hechos que antes no eran
considerados como violencia, ahora si lo son; como las agresiones verbales,
los castigos físicos a los niños, la discriminación ya sea por raza, origen,
discapacidad, sexualidad, religión, etc. Ahora son consideradas como una
forma de violencia; sin embargo, el ser humano guarda una estrecha relación
con la violencia, pues, a pesar de que se van identificando nuevas formas de
violencia, éstas son cada vez más manifiestas, es decir, se manifiestan con
mayor fuerza y frecuencia; porque, aunque condenemos la violencia, muchas
veces las justificamos dependiendo de las circunstancias o motivaciones.

A fin de entender un poco más este fenómeno a nivel social, Galtung lo explicó
con lo que se conoce el triángulo de las violencias 5; con tres grandes tipos de
violencias que se retroalimentan entre sí; como lo son, Violencia Directa, que
no es mas aquella que se da de manera directa, cuyas consecuencias son
evidentes a los sentidos, es aquella violencia que provoca muertes, heridos,
desplazamientos y daños materiales; la violencia estructural, por su parte, es
de menor visibilidad, pues no se puede identificar al agente que lo comete, sin
embargo, sus consecuencias son visibles, como la pobreza, la injusticia y la
vulneración de derechos; a decir de GALTUNG “si la gente pasa hambre,
cuando el hambre es objetivamente evitable, se convierte en violencia…” 6;
respecto a la violencia cultural por su lado, es el conjunto de creencias que
justifican o pretenden justificar las violencias directas y estructurales, tratando
de hacerlas ver como razonables o disminuyendo la percepción de sus efectos
y tratando de hacerlas ver como aceptables (ejemplo, la represión violenta a
manifestantes en una huelga)

5
Introducción a la Cultura de Paz - Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social Dirección General de
Desplazados y Cultura de Paz – Editorial Trama de Rubelionil Ramirez Ramoz – Pag. 31

6
IDEM – Pag. 32
Ahora bien, cabe resaltar que, los conflictos pueden generarse por diversos
aspectos y pueden ser abordados y resueltos de diversas maneras;
tradicionalmente, los conflictos han sido relacionados con violencia, y han sido
confundidos con violencia, en el párrafo anterior hemos reflexionado un poco al
respecto, justamente por el hecho de que, tradicionalmente se ha vinculado de
manera directa a la violencia con el conflicto; sin embargo, como ya ha sido
mencionado, los conflictos no son violencia; la violencia es un elemento que se
presenta en algunos conflictos, mas no en todos; los conflictos pueden llegar a
ser positivos sin embargo, éstos se tornan en perjudiciales y son negativos
cuando, desencadenan actos de violencia.

Esa asociación que acostumbramos hacer del conflicto con la violencia; hace
que no podamos visibilizar aquellos conflictos que se resuelven de manera
pacífica y que suelen ser constructivas, aquellas que, cotidianamente y sin ser
muy percibidas, son procesadas por las personas y por los grupos sociales al
momento de resolver sus diferencias. Considero que, siempre va a ser
importante y determinante que los conflictos sean resueltos, porque un conflicto
no resuelto y no superado puede generar acos de violencia.

Debemos tener en claro que, la violencia no es la única respuesta al conflicto;


habiendo analizado lo mencionado en los párrafos precedentes, surge la
pregunta más importante para poder analizar si es viable o no, instaurar una
cultura de paz en el Perú; y la pregunta es la siguiente:

¿De qué manera podemos abordar los conflictos, a fin de incentivar una cultura
de paz?

Una alternativa que ha estado adquiriendo mayor relevancia y cuya aplicación


se puede considerar en un gran avance en la construcción de una sociedad
que se desarrolle con una cultura de paz saludable, es el diálogo; que es un
método fundamental para resolver los conflictos y alcanzar la paz; “El diálogo,
supone una tensión entre dos perspectivas: por un lado, una perspectiva de
fecundidad para las relaciones humanas y, por el otro, una situación
problemática y compleja cuando se intenta aplica a la realidad conflictual.” 7 Es
decir, el diálogo tiene la capacidad de mejorar las relaciones humanas y, a su
vez, resolver los conflictos que se desarrollan en un grupo determinado.

El diálogo nos permite arribar a acuerdos concretos, permite comprender al


otro, ponerse en sus zapatos y asimilar la posición y las necesidades del otro,
pero a la vez, entender e interiorizar las propias posiciones y necesidades y
nos da la capacidad de relacionarnos de una manera mucho más armoniosa
El diálogo, como método principal para resolver los conflictos de toda índole y
en todos los niveles, es fundamental para alcanzar una cultura de paz; el
diálogo implica la capacidad de transmitir las ideas, sentimientos, posiciones de
cada una de las partes que intervienen en el conflicto; pero también implica la
capacidad de escucha; una escucha dinámica y libre de prejuicios.

A lo largo del presente análisis, hemos visto que, para llegar a una cultura de
paz, es necesario primero, entender la paz más allá de la simple ausencia de
guerras o de violencia; asimismo, entender en qué consisten los conflictos y
que éstos, no son necesariamente negativos y que, siempre serán una
constante en el desarrollo de una sociedad; también hemos analizado lo que
vendría a ser la violencia y que, ésta puede ser la resultante de un conflicto
donde no se abordó o resolvió de manera adecuada.

Ahora bien, para conseguir una Cultura de Paz es necesario también


determinar quiénes son los actores y enfoques de la construcción de la paz 8;
teniendo lo siguiente:

El primer actor en la construcción de la paz son los líderes políticos, religiosos y


militares; pues son los que se encargan de intervenir en aquellos conflictos mas
importantes que pueda afectar a la colectividad o la población del país.

7
Ética, creatividad e imaginación: elementos esenciales para la construcción de culturas de paz – Dora
Elvira García Gonzáles - Pag. 310
8
Construyendo la paz, Reconciliación sostenible en sociedades divididas – John Paul Lederach –
Colección Red GernikaPag. 66
El segundo nivel, se encuentran los líderes respetados de la sociedad civil,
líderes de las comunidades y líderes religiosos de nivel medio, académicos e
intelectuales, así como intervención de ONG; quienes, intervienen en la
resolución de conflictos a un nivel menor al anterior.

El tercer nivel, tenemos a las comisiones locales de paz, ONG autónomas,


Promotores, funcionarios locales.

Sin embargo, dichos niveles están referidos a los conflictos sociales de mayor
importancia; cuya atención y preocupación son de gran importancia; pero no
debemos dejar de lado un último nivel, cuya participación pueda ser mínima en
relación a los conflictos donde intervienen los demás niveles, pero cuya
importancia es vital para conseguir una cultura de paz, es la familia y los
grupos base de cada sociedad; refiriéndome como grupos base de cada
sociedad a aquellos grupos pequeños, que muchas veces so invisibilizados
pero que participan también en los conflictos cuando se sienten amenazados; y
la única forma de llegar a ellos es por medio de la educación.

Es la educación en todos los niveles, una de las formas más importantes para
edificar una Cultura de Paz; y la educación va de la mano con las políticas de
gobierno y la forma en la que la política se desarrolla en la sociedad; asi como
a los problemas de corrupción que no permite ningún avance, desde el
momento en el que, la clase política, y no solo la clase política sino también el
ciudadano común, ha adoptado una cultura de corrupción; donde no importa el
respeto de los derechos de los demás, siempre que el individuo satisfaga sus
intereses personales y propios por encima de los intereses colectivos.

Hemos visto que nuestro país, vive una constante crisis política, fuertes
problemas de corrupción que trae consigo crisis económica y social; los
conflictos sociales van en incremento, como ya dijimos, esto no tendría que ser
negativo, sin embargo, la incapacidad por parte del estado de intervenir de
manera adecuada y dichos conflictos, hacen que se susciten actos de
violencia; la educación es un sector cuasi olvidado, las reformas educativas no
promueven la cultura de paz. Mientras no exista una reforma importante, que
de frente a la corrupción y que promueva una verdadera cultura dialogante, no
será posible implantar una cultura de paz; por lo que considero que, si bien es
cierto, se han dado grandes pasos en favor de la cultura de paz; aún no es
viable conseguirlo, si es que no existe un verdadero compromiso por parte de
la clase política, y no solo por parte de la clase política, sino de la sociedad en
general; distaremos mucho de llegar a una cultura de paz; mas por el contrario,
el acresentamiento de las brechas entre los grupos sociales, el descontento, la
crisis política y económica, pueden generar mas bien un posible conflicto
armado interno, como los vividos en los 80s y 90s. Situación que nadie espera,
pero que es posible.

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