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La importancia de la oración

Quiero iniciar este corto mensaje, primero que todo deseándoles lo mejor a cada
uno de ustedes, que la paz de Dios que supera todo entendimiento reine en
nuestras vidas, reine en nuestros corazones, y sobre todo que podamos entender
que DIOS es quien nos da la fortaleza para luchar y cumplir con nuestra labor de
líderes en esta preciosa iglesia llamada Iglesia Familiar Grey de Dios. Para que
podamos cumplir con una excelente labor como líderes, para que podamos ser
excelentes instrumentos de Dios, llevar el evangelio y hacer discípulos, debemos
tener una muy buena relación con Dios, esto es muy indispensable.
Como cristianos debe ser una prioridad cultivar nuestra relación con Dios, y una
de las mejores maneras para crecer en nuestro andar con Jesús es la oración.
Ahora bien, ¿qué es orar? ¿Cómo oramos?
A través de la Biblia vemos claramente que orar es hablar con Dios o como decía
nuestro hermano Miguel Burgos, hace unos días en un devocional, él decía: orar
es entrar en intimidad con DIOS. Cuando oramos abrimos nuestro corazón a Dios
para contarle cómo nos sentimos, en la oración podemos derramar nuestra alma
ante el padre.

En Mateo 6:5-8, Jesús habla sobre la oración y dice:

Cuando oren, no sean como los hipócritas, porque a ellos les encanta orar de pie
en las sinagogas y en las esquinas de las plazas para que la gente los vea. Les
aseguro que ya han obtenido toda su recompensa. Pero tú, cuando te pongas a
orar, entra en tu cuarto, cierra la puerta y ora a tu Padre, que está en lo secreto.
Así tu Padre, que ve lo que se hace en secreto, te recompensará. Y al orar, no
hablen solo por hablar como hacen los gentiles, porque ellos se imaginan que
serán escuchados por sus muchas palabras. No sean como ellos, porque su
Padre sabe lo que ustedes necesitan antes de que se lo pidan.

Aquí vemos que la oración es entre nosotros y Dios, no para impresionar a los
demás. Nuestro corazón no tiene la actitud correcta si lo que buscamos es que los
demás nos vean y admiren nuestras palabras. Al orar, nuestro deseo más grande
debe ser pasar tiempo con Dios y hablarle desde lo más profundo de nuestro
corazón, desde lo mas profundo de nuestro ser.
Es cierto que nuestro Padre sabe de antemano lo que necesitamos, pero como a
todo buen padre, a él le encanta escuchar la voz de sus hijos. (poner ejemplo
pastor Yimis e hijo o rafa). Vemos así que el énfasis de la oración debe ser
fortalecer nuestra relación con Dios, acercarnos a él, pasar tiempo en su presencia
y compartir con él. Oramos porque nuestra relación con Dios es importante y vital.
Jóvenes no es orar por orar, no se trata de buscar palabras bonitas, palabras
técnicas o palabras que vengan del diccionario de la real academia o de la alta
sociedad, tampoco se trata de que sea un discurso con Dios de 10 horas o 20
horas. De lo que se trata jóvenes es que busquemos la presencia de Dios con
todo nuestro corazón y con toda nuestra alma no importa que nuestras palabras
no sean las más técnicas o bonitas del mundo, porque a DIOS lo que le importa es
que le abramos nuestro corazón y el derramemos nuestra alma.

¿Por qué debemos orar?


La oración nos acerca al Padre. Nos da la maravillosa oportunidad de abrir
nuestros corazones a él, contarle nuestros pensamientos, pedirle su ayuda y su
sabiduría, sanación para mi y para el prójimo.
Santiago 4:8 dice: "Acérquense a Dios, y él se acercará a ustedes." ¡Y esto es lo
que hacemos cuando oramos! Nos acercamos al Padre; sacamos tiempo para
hablarle y escucharle, para disfrutar de su presencia y compañía. Esta es la razón
principal por la que oramos.

Otras razones por las cuales orar

1. Para que Dios sea glorificado


Juan 14:13
Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea
glorificado en el Hijo.
Dios espera que pidamos y que lo hagamos en el nombre de Jesús. No es pedir
todo lo que se nos antoje, sino pedir de acuerdo con su deseo para nosotros y
para que él sea glorificado en nuestras vidas.
2. Porque si pedimos, recibimos
Pidan, y se les dará; busquen, y encontrarán; llamen, y se les abrirá. Porque todo
el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abre. ¿Quién de
ustedes, si su hijo le pide pan, le da una piedra?
(Mateo 7:7-9)
Aquí vemos el corazón paternal de Dios. Él desea dar cosas buenas a sus hijos,
pero debemos pedir, buscar, llamar, cultivar nuestra relación con nuestro Padre y
expresarle nuestros anhelos.

3. Porque Jesús dio ejemplo


Hebreos 5:7
Y Cristo, en los días de su carne, ofreciendo ruegos y súplicas con gran clamor y
lágrimas al que le podía librar de la muerte, fue oído a causa de su temor
reverente.
Vemos que Jesús, aun siendo Dios hombre, cultivó una vida de oración y clamor,
pero también tuvo "reverente sumisión". ¡Cuánto más debemos nosotros mostrar
ese corazón reverente y sumiso a través de nuestras oraciones y de nuestras
conversaciones con el Padre!
Aprende a orar e interceder con el ejemplo de Jesús

4. Para recibir su paz


No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego,
presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa
todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús.
(Filipenses 4:6-7)

¡Son tantas nuestras preocupaciones diarias! Podemos llevarlas ante Dios,


entregárselas y darle gracias porque no tenemos que enfrentar solos los
problemas de la vida. Es en esa actitud de total confianza en él que recibimos su
paz, una paz incomprensible que muestra el cuidado de nuestro Dios.
5. Para recibir sanidad física y espiritual
Santiago 5:15-16
Podemos llevar ante Dios todo tipo de peticiones, incluidas las peticiones por
salud y por el perdón de pecados. Dios anhela tocarnos con sanidad física y
sanidad espiritual. Somos justos gracias a Jesús (2 Corintios 5:21) y por eso
nuestra oración es eficaz y tiene poder.

Lo que la Biblia dice sobre la sanidad y el orar por los enfermos


Mientras más cultivemos nuestra relación con Dios más fácil será acercarnos a él
con toda confianza para hablarle y presentarle nuestras necesidades. También
será cada vez más fácil escucharle y recibir su misericordia, su gracia, su paz.

Debemos perseverar en la oración


Efesios 6:18
orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello
con toda perseverancia y súplica por todos los santos;
Podemos orar en todo momento por todas las situaciones o personas que vengan
a nuestra mente. También debemos interceder por nuestros hermanos por
nuestros pastores. Es importante pedir al Espíritu Santo las palabras precisas para
orar con sabiduría.

No dudes en acercarte al Padre celestial con tus oraciones. Verás el gozo enorme
que sentirá tu corazón al fortalecer tu relación con él a través de la oración.

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