Está en la página 1de 5

UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONOMA DE NICARAGUA

(UNAN-LEÓN)

FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS Y SOCIALES

CARRERA DE DERECHO

Trabajo: La ética en la Mediación


Asignación: Método de Resolución Alterna de Conflicto
Docente: Msc. Ángela Fabiola Rivera Delgado
Intrigantes:
 Aracelli de los Ángeles Esquivel Varela

Fecha: 30/11/2021

“A LA LIBERTAD POR LA UNIVERSIDAD”


La Ética en la Mediación

Introducción

El presente trabajo contempla a la ética en la mediación desde la definición de lo que


debería entenderse por tal, la mediación como profesión, la ética en la mediación desde la
perspectiva de los diferentes modelos procesales para la mediación, así como también los
principios éticos del mediador como persona facultada neutral que guía la mediación; ya
que a través de los comportamientos del mediador basados en la ética apertura el dialogo,
debido a la imagen que las partes pudieran hacerse del mediador, los cuales dependen una
gran parte de lograr su misión con éxito, siendo uno de los elementos que la condicionan la
posesión de los principios éticos.

La mediación como profesión

La mediación es una profesión con responsabilidades y deberes éticos. Los que se dedican a
su práctica deben asumir la idea de que todos las partes tienen derecho de negociar y tratar
de determinar los resultados de sus propios conflictos. Los mediadores deben saber que sus
deberes y obligaciones se relacionan con las partes que comprometen los servicios, con el
procedimiento de mediación, con los restantes mediadores, con los organismos que
encauzan la práctica de la mediación y con el público en general.

Cualquier ejercicio profesional relacionado con la solución de controversias entre


particulares debe ser realizado conforme a normas éticas y jurídicas basadas en principios
morales, pero fundamentalmente con base en el concepto del honor y de la dignidad
profesionales, así como en el sincero deseo de cooperar a la buena administración de la
justicia.

Los mediadores son profesionales del derecho, que tienen obligaciones regidas por otros
preceptos éticos. Para lo cual se hace imperativo el definir lo que debemos entender por
ética.

Definición de ética
La ética, de forma general, es la ciencia de la conducta. Existen dos concepciones
fundamentales de esta ciencia, a saber: 1) la que la considera como ciencia del fin al que
debe dirigirse la conducta de los hombres y de los medios para lograr tal fin y derivar, tanto
el fin como los medios, de la naturaleza del hombre; 2) la que la considera como la ciencia
del impulso de la conducta humana e intenta determinarlo con vistas a dirigir o disciplinar
la conducta misma. Estas dos concepciones, que se han entrelazado en forma diferente
tanto en la Antigüedad como en el mundo moderno, son fundamentalmente distintas y
hablan dos lenguajes diferentes. La primera, en efecto, habla el lenguaje del ideal al que el
hombre se dirige por su naturaleza y, en consecuencia, de la "naturaleza”, "esencia” o
"sustancia” del hombre. La segunda, en cambio, habla de los "motivos” o de las "causas” de
la conducta humana o también de las "fuerzas” que la determinan y pretende atenerse al
reconocimiento de los hechos.

Ética en la mediación y ética de la mediación

Una forma clásica de analizar principios morales en el proceso de mediación es contemplar


la mediación como un marco procesal para la gestión de disputas o resolución de conflictos.
En este sentido, la escala gradual típica de negociación, mediación, arbitraje, adjudicación,
se activa a través de funciones básicas que definen la imparcialidad, neutralidad,
confidencialidad e independencia del mediador. La forma habitual de contemplar este
proceso se sitúa en la forma en que se estructura este marco procesal: a) como un problema
para resolver (modelo de Harvard); b) como una oportunidad de cambiar la relación entre
las partes (modelo trasformativo), y; c) como una dinámica de cambio intra e interpersonal
(modelo narrativo o sistémico).

Desde esta perspectiva, la relación del proceso con los patrones profesionales de conducta
del "tercer lado" o "la tercera parte", y de ésta con los resultados que obtiene ha sido objeto
de debate. Éste es propiamente el ámbito de la ética en la mediación, puesto que los
principios éticos se articulan e incluyen dentro del marco procesal que contribuyen a crear.
Es decir, el proceso deviene o se constituye a través de la conducta prevista y activa de los
mediadores y de las partes. La ética de la mediación, por otro lado, consiste en la dinámica
establecida entre los principios y valores colectivos que ésta conlleva como proceso de
gestión y resolución de conflictos, y los principios éticos aplicables en la sociedad de la
información. Se trata, en el fondo, de la vuelta a la ética regulativa como fundamento de la
moral y al diálogo como fuente del derecho.

Principios éticos del mediador

La característica central del papel que desarrolla el mediador en el proceso de mediación es


la que define los elementos éticos fundamentales de su actuación. En efecto, la actuación
del Mediador debe ser fundamentalmente neutral. Así, la primera obligación ética del
Mediador es ser neutral respecto de las partes en conflicto y comportarse neutralmente en el
proceso de mediación. Para ello debe lograr que las partes tengan confianza en él, tanto por
lo que se refiere a su actuación neutral durante el proceso como en cuanto al manejo
confidencial de la información y documentación que le sea revelada por las partes. Para ser
neutral el Mediador requiere hacer caso omiso de la nacionalidad, raza, sexo, religión o
cualquier otro rasgo personal de las partes en conflicto. Asimismo, el Mediador debe
carecer de todo lazo de parentesco, amistad o de negocios con las partes en conflicto.

Por otra parte, analizando algunas de las responsabilidades éticas de la persona mediadora,
encontramos que debe:

 Proteger el derecho de las partes a quesean ellos los que realicen sus propios
acuerdos.
 No dejar que las partes ejerzan el poder.
 Reconocer el poder de la influencia de la persona mediadora en el proceso de
negociación.

Conclusión

En conclusión, se puede decir que la mediación resulta un instrumento atractivo en lo que


respecta a resolución pacifica de conflictos, lo cual requiere necesariamente que los
involucrados en la solución de los mismos, manejen con criterios éticos todos los
problemas que envuelven su tratamiento, ya que toda institución que lleve adelante un
programa de mediación debe adoptar un código de normas éticas para los facilitadores. Es
por ello que los mediadores deben promover la honestidad, integridad e imparcialidad en la
mediación, dando lugar a funcionamiento eficaz de un programa de mediación.
Fuentes del conocimiento

Corte Suprema de Justicia, División de Investigación, Legislación y Publicaciones del


Centro Internacional de Estudios Judiciales. “Manual de Mediación”. Segunda edición.
Asunción-Paraguay, 2007.

M., Antonio, PEON DEL VALLE, Prida, “La ética y la mediación”. En línea. (Consultado
el 28/11/20219. Disponible en: https://www.iccmex.mx/uploads/comitemediacion1/Art
%C3%ADculo%20La%20%C3%89tica%20y%20la%20Mediaci%C3%B3n.PDF

TABOADA GONZALEZ, Ma Luisa, “Reflexiones ético-morales en mediación”. En línea.


(Consultado el 28/11/2021). Disponible en:
https://dspace.unia.es/bitstream/handle/10334/1691/2Taboada.pdf?
sequence=5&isAllowed=y

“Manual Curso Básico de Mediación”. Poder Judicial, DIRAC. Managua 2019. En línea.
(Consultado el 28/11/2021). Disponible en:
https://www.poderjudicial.gob.ni/dirac22/image/MANUAL_DIRAC_PRODEP.pdf

También podría gustarte