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Gung Ho es una técnica que enseña en tres pasos sencillos cómo liberar la energía y
el entusiasmo para encaminarlo hacia el éxito: el espíritu de la ardilla, el estilo del
castor y el don del ganso.
Ella es ayudada por uno de los gerentes, llamado Andy Longclaw, un nativo
americano, quien le relata el secreto de Gung Ho, las "teorías administrativas" de su
abuelo indio, que sería lo que después haría que la organización alcanzara la mayor
productividad de la cadena Walton Works y por tanto múltiples premios y por
supuesto la salvación.
Se detalla cómo a través de la enseñanza del Gung Ho, las personas logran generar
cambios en la productividad, la confianza, y la motivación de los miembros de su
equipo.
Gung Ho! Es una palabra china que significa Trabajar Juntos, el cual había
sido el lema de los aviadores de asalto de Carlson durante la Segunda Guerra
Mundial. El abuelo de Andy había participado en la guerra y su forma de hablar
estaba salpicada de frases y términos militares.
El Sr. Morris, jefe de Peggy, la había nombrado gerente general de Walton Works #2,
Ella siempre había ocupado cargos ejecutivos y jamás había trabajado en
operaciones. La emoción que sintió por el nombramiento no le permitió percatarse
de que había caído en una trampa, la planta que estaba al borde de un abismo cosa
que por supuesto Peggy no sabía. La planta era la peor de las 32 de la compañía
Walton, y solo tenía seis meses para salvarse ella misma y a los 1.500 trabajadores
del desempleo. La planta solo tenía una luz de esperanza: el departamento de
acabado, conformado por 150 y estaba liderado por Andy.
Peggy le pregunto a Andy como era que su departamento era el más productivo de
todos. La respuesta era: Gung Ho, (entusiasmo, ¡trabajo en Equipo y
emoción) Andy accedido a enseñarle a Peggy el estilo de vida Gung Ho! para sacar
adelante la planta. Así nació una amistad exitosa, sellada con el saludo Gung Ho,
Amiga, ¡Gung Ho! Amigo. Simple... todo comienza con el espíritu de la Ardilla,
después vienen el Estilo del Castor y, finalmente, el Don del Ganso.
EL ESPÍRITU DE LA ARDILLA
Andy tomo una siesta mientras Peggy observaba las ardillas. Después de una hora
viéndolas ir y venir incansablemente, se dio cuenta de que estaban motivadas en
hacer su despensa para sobrevivir. Andy despertó de su siesta y acertó con el análisis
de Peggy, están motivas porque su trabajo es importante, tienen una meta. Trabajan
con la meta de guardar alimento, es mucho más que importante: Vale la pena. Hay
tres lecciones del espíritu de la ardilla por aprender: primero, el trabajo debe ser
visto como algo importante; segundo: debe llevar a una meta comprendida y
compartida por todos; y la tercera, que los valores deben orientar todos los planes,
las decisiones y las situaciones.
Peggy observo que no había un castor jefe. No había nadie en frente de la operación.
"imagino que se dan indicaciones entre sí" dijo Peggy. Andy dijo "El abuelo decía que
el gran Espíritu dibujó en la mente de los castores una presa perfecta, les dio un río
y unos árboles y luego les entregó el mando dejándolos solos".
Al establecer las metas y los valores fundamentales, defines el campo de juego y las
reglas. Después decides quién juega en cada posición. Después debes abandonar el
campo y permitir que los jugadores se encarguen del balón. Este es el espíritu del
castor.
Ellos se fueron a un lugar a una hora de distancia que tenía un aviso: Zona Protegida
De la Cienaga Hutchison. Prohibido Cazar. Más adelante vieron una bandada de
gansos. Andy dejo que Peggy observara la bandada de gansos. "Los gansos son
mucho más numerosos que las ardillas y los castores", dijo Peggy, "acertaste" dijo
Andy, pero tu trabajo es fácil. Observó que los gansos hacían graznidos
ensordecedores era como una manera de comunicarse, pero no era un llamado de
alerta ni de líderes no es una advertencia. Andy le dijo son "son voces de aliento".
Son gritos de aliento.
El espíritu de la Ardilla y el estilo del castor son la chispa. El don del ganso es como
botar gasolina sobre la chispa. Peggy se acordó que cuando visito el departamento
de acabado escuchaba unos gritos como celebrando algo y todo el mundo lo hacía,
ese era el don del ganso, darse alientos unos a otros, motivarse ellos mismos. No es
solo que los gerentes de una empresa estimulen sus empleados sino todos entre sí.
Incentivar al empleado de esto se trata el don del ganso felicitarlo por su trabajo pero
que sea una "congratulación" veraz, autentica, debe ser: oportuna, en respuesta a
algo concreto, incondicional, entusiasta.
CONCLUSIÓNES:
RECOMENDACIONES:
En la vida diaria deberíamos aplicar al Gung Ho! Ya que nos ayudaría mucho
hacer unos mejores lideres para asi trabajar en conjunto del beneficio de
todos.