DERECHOS Y GARANTÍAS DEL CIUDADANO EN EL PROCEDIMIENTO
REGISTRAL
Raizza Stephania Miranda Rezzio
200931540
Quetzaltenango, agosto de 2021
DERECHOS Y GARANTÍAS DEL CIUDADANO EN EL PROCEDIMIENTO REGISTRAL
El procedimiento Registral es considerado perteneciente a la administración
pública, en consecuencia, se debe mejorar la eficacia, eficiencia y la calidad en la misma función administrativa. En Guatemala los derechos reales fundamentales están contenidos en la Constitución Política de la Republica.
Son diversas las concepciones que se tienen respecto a la naturaleza del
procedimiento registral, algunos indican que es un procedimiento de tipo administrativo sujeto a algunas especialidades por razón de la materia que constituye su objeto, ligado a las mismas garantías y requisitos que el procedimiento administrativo común. Al volverse un proceso administrativo adopta todas las garantías sustantivas y adjetivas, comunes, a reguladas en la Constitución, por lo que se procura que dicho proceso registral se convierta en eficiente y justo para cada uno de los administrados. Algunos principios importantes a considerar dentro de los derechos de los ciudadanos en el proceso registral, son, en primer lugar, la calificación registral por escrito, previniendo que se diga o se haga lo contrario a lo que se dice, se debe sentar precedente del rechazo u aceptación de cada negocio jurídico que se pretende inscribir en los registros, la calificación registral debe de tener un carácter unitario evitando que se dé una violación al derecho de igualdad, esta debe darse en un solo acto, evitando que el ciudadano aplace su derecho de inscripción por diferentes razones que se pueden dar a conocer todas en un solo momento, cada una de las razones registrales deben de estar fundamentadas, en ley, sobre todo, pues en nuestro país la ley es la fuente principal del derecho, no en opiniones personales, ni en consideraciones individuales, porque de esta manera se pierda totalmente la objetividad de la calificación registral.
Los derechos y garantías del ciudadano que actualmente se le reconocen al
ciudadano dentro del proceso registral deben de estar alineados a los principios propios de un estado social, democrático y de derecho.
Como principal fin del Procedimiento Registral está la inscripción de un derecho
real reconocido, pues este pasa a ser un derecho del ciudadano, el tener acceso de su título de propiedad al Registro, esto se apega totalmente a la protección que busca o persigue el ciudadano de la propiedad privada, Derecho fundamental regulado en las principales garantías de la Constitución Política de la República de Guatemala en su artículo 39; La negativa o también llamada suspensión, genera un evidente perjuicio a los otorgantes del título y al mismo notario autorizante, como consecuencia de ello nacen o le dan origen las suspensiones registrales infundadas o equivocas, a los amparos, como medio de protección a los ciudadanos y su garantía de propiedad privada.
Respecto a la función Registral, es importante mencionar que esta doctrinaria y
legalmente radica en el Registrador, generando con esta calificación la publicidad de los Derechos Reales inscribibles, el Registrador y todas las demás personas en las que se delega la calificación registral, todas las personas involucradas deben orientar su actuar ligados siempre al principio de legalidad.
El ciudadano busca en el Registro que se inscriba su derecho de propiedad y con
ello obtener la garantía de oponibilidad y de certeza, de igual manera de seguridad jurídica, la calificación únicamente es el medio del Procedimiento Registral y el papel del notario es el de dar forma a la voluntad de las partes, por lo que la calificación no es el fin primordial, los medios están para atender a los fines, es decir que tanto el notario como el Registro a través de la Calificación Registral deben orientar sus actuaciones a la obtención de la inscripción que necesita o pretende el ciudadano.
Muchas veces la Calificación Registral, lejos de ser objetiva se torna engorrosa,
voluntariosa, y excesiva generando con esto patologías propias del Proceso Registral que lo único que hacen es perjudicar los derechos y garantías de los ciudadanos. En nuestro medio Registral, es de reconocer la patología de las calificaciones excesivas, pues muchas veces se extralimita el Registrador y sus delegados, en la calificación de los Instrumentos Públicos provocando suspensiones infundadas y sobre todo innecesarias. El exceso de calificación registral genera también la perdida de la autonomía de la voluntad, principio fundamental dentro del ejercicio de la practica notarial, pues esta llega a verse modificada perdiendo el verdadero sentido del negocio jurídico. Por precisar en otros aspectos de la calificación registral muchas veces se deja de lado principios fundamentales como la publicidad.
En Guatemala todos los Registros, excepto el Registro de la Propiedad Inmueble
forma parte de algún Ministerio y en consecuencia de la Administración Pública, derogando presupuesto del estado y sujetos a disposiciones de los Ministerios a los que pertenecen sin ser autónomos.
El Registro de la Propiedad Inmueble en Guatemala, está supeditado a el
Organismo Ejecutivo, el Registrador Titular de cada Registro es nombrado por la Presidencia a través de su Secretaria Privada, se rige por su propia normativa y por los preceptos contenidos en diferentes leyes registrales.
La calificación Registral es un acto administrativo, sujeto a Recursos específicos
(ocurso, amparo) dentro de la propia materia. La calificación Registral debe ser uniforme y predictiva, con ello evitar abusos de poder y arbitrariedades (Guías de Calificación Registral), actualmente el Registro se rige, además de todas las normas legales registrales, a las Guías de Calificación Registral, que son medios jurídicos creados y avalados por los miembros de la Comisión Nacional Registral, en donde se establece el procedimiento a seguir en diferentes casos que puedan suscitarse dentro del proceso registral, sin embargo la interpretación que se le da a dichas guías llega a ser en muchas ocasiones personal, convirtiéndose entonces la calificación registral en poco objetiva, uniforme y predictiva, atendiendo al pensamiento y racionalización de cada una de las personas involucradas en el proceso registral.
El Proceso Registral lo preceden otros Procesos ya sean de carácter notaria
(Instrumentos Públicos) Judicial (Resoluciones Judiciales, Despachos, autos, decretos, sentencias) o Administrativos (Expropiación). Cada uno de estos conllevan principios y características separadas al Proceso Registral, en consecuencia, al llegar al momento de Registro estos procesos anteriores no pueden ser dejados de lado, se le debe de dar la importancia debida.
La calificación debe ser limitada únicamente a la valoración del Instrumento
Público que contiene el negocio jurídico, en cuanto a su forma y contenido y si este es válido o no para ser registrado.
Los derechos y garantías fundamentales de los ciudadanos dentro del Proceso
Registral, incluyen como mínimo la calificación motivada, evitando caer en la sobre calificación o la calificación personal e infundada, de igual manera una calificación de un solo tracto es decir que se incluyan todos los motivos tanto de la denegatoria como de la aceptación de alguna inscripción, esta debe ser amplia y se debe de dar por escrito para formar expediente y sobre todo precedentes, la calificación registral debe de ser uniforme y homogénea, guiada por leyes y principios para hechos iguales o semejantes.
El documento del autor Cavallé, me ha parecido de suma importancia y valor pues
en el diario acontecer del Proceso Registral en el cual de alguna u otra manera me veo involucrada laboralmente, he podido percibir todas y cada una de las falencias de las que se habla en el documento, me atrevería a decir, sin dudar a equivocarme que dentro del Proceso Registral Guatemalteco, se violentan a diario los derechos y garantías de los ciudadanos, me preocupa de sobremanera la falta de integración de los criterios registrales, pues existen tantos criterios como operadores, registradores, apoyo y demás auxiliares del proceso registral, espero que a través de alguna reforma coercitiva al Código Civil o a la ley que le sea pertinente, se logre dejar de lado el criterio individualista y se puedan concatenar todos los conocimientos involucrados en favor de todos los ciudadanos con el objeto de salvaguardar la propiedad y todas sus características.