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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACION SUPERIOR


UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DE LOS LLANOS CENTRALES “ROMULO
GALLEGOS”
ÁREA DE INGENIERÍA, ARQUITECTURA Y TECNOLOGIA
FACULTAD DE INGENIERÍA CIVIL
PRACTICA PROFESIONAL

Informe

Integrante:
Vanesa Rojas CI:26.973.119
Leidysel Vargas CI:27.238.735
Marielena Castillo CI:26.179.594
¿Qué es Fundación?

Se conoce como fundación a la acción o efecto de fundar, de instituir. También,


fundación alude al conjunto de obras y trabajos necesarios para asentar los
fundamentos de una construcción.

En el área de la arquitectura y construcción, fundación es la parte inferior de las


paredes o pilares, en contacto directo con el terreno y transmitiendo a este las
cargas que recibe de la estructura. En referencia a este punto, es de suma
importancia asentar en suelo firme, que soporte el peso de toda la construcción y
cargas accidentales, sin asentamiento

las fundaciones son las conexiones entre lo que se conoce como superestructura y
el terreno que la soporta. Pero esta conexión tiene una particularidad: los miembros
que conecta (la superestructura y el terreno) pueden poseer rigideces muy
diferentes. Es por eso que las fundaciones deben ser diseñadas de tal manera que
la máxima presión transmitida de la superestructura al terreno, no cause una
deformación excesiva o la ruptura del suelo que la soporta (Taylor, 1948).

Las cargas de la superestructura son transmitidas por columnas, por muros de


carga, o por otros miembros de carga, hacia las fundaciones. En algunos casos, el
material de fundación es un suelo muy resistente, por lo que, de acuerdo a la
experiencia, usualmente no se esperan problemas importantes relacionados con las
fundaciones. En otros casos, el material inmediatamente debajo de la estructura
puede ser de calidad tan pobre, que las cargas de la superestructura deben ser
transmitidas mediante pilotes a estratos más profundos, de mayor resistencia.

A pesar de que los que constructores han reconocido la importancia de fundaciones


firmes a lo largo de incontables generaciones, y la historia de la construcción de
fundaciones se extiende por miles de años, la disciplina Ingeniería de Fundaciones
como la conocemos hoy en día, no comenzó su desarrollo hasta finales del siglo XIX
(Coduto, 2001). En muchas construcciones antiguas (y no tan antiguas, vale
decirlo), los diseños de fundaciones estuvieron basados únicamente en experiencias
previas, intuición, y sentido común. A través de ensayo y error, los constructores
desarrollaron reglas para el dimensionamiento y construcción de fundaciones.

Importancia de las fundaciones

Es lógico que al momento de planificar una obra civil, se tome de primera mano las
cargas que contendrá la estructura, para que estará destinada la misma y el diseño
arquitectónico que se le dará, pero antes que todo esto, es obligatorio que
realicemos los estudios geológicos pertinentes en el lugar de ejecución,
sencillamente porque al tener un suelo con una composición inestable, de nada nos
servirá hacer una mega construcción, cuando la superficie que será nuestra ancla,
no tiene la capacidad de soporte de carga requerida, haciendo que nuestros diseños
queden en un segundo plano y no centremos directamente en el mejoramiento del
suelo.

Lo único que buscamos a la hora de fundar, es un terreno que nos permita disipar
las cargas que se trasmiten de toda la estructura hasta el subsuelo, ya que el suelo
presenta una resistencia de estas cargas, pues el también contiene cargas
verticales que se encuentran con las estructurales. Dependiendo de todo esto, es
que se hallaran asentamientos, deformaciones, desplazamientos, entre otros
aspectos. Existentes en el área de la construcción. El estudio de las fundaciones
está comprendido en leyes físicas, como la tercera ley de newton, donde expresa
que todo cuerpo que ejerza una fuerza sobre otro, también recibirá una fuerza
“rebote” por parte de su semejante, ya que el otro cuerpo aplicara una fuerza de
igual magnitud a la que recibe, pero de distinta dirección.

Cuando deseamos comenzar a construir nuestras fundaciones, tenemos que elegir


de buena forma, los materiales que utilizaremos para la estructura, ya que todos
ellos serán un factor influyente en las cimentaciones, por lo cual estas estarán
diseñadas bajo parámetros constructivos acorde a la estructura. A partir de allí
tenemos los distintos tipos de fundaciones, entre las cuales se conocen: Zapatas,
Losas portantes y pilotes.

Clasificación por fundaciones

Las fundaciones tienen su clasificación más práctica a partir de la profundidad a la


cual son construidas. En este sentido podemos clasificarlas en:

 Fundaciones Superficiales
 Fundaciones Profundas
 Fundaciones intermedias

El rango de profundidad de estas fundaciones suele estar entre 1 y 3m para


fundaciones superficiales, entre 4 y 6m para fundaciones intermedias y entre 8 hacia
adelante para fundaciones profundas. Obviamente no existe un límite marcado entre
estas categorías. La clasificación definitiva está dada más que nada por el método
constructivo junto con la profundidad de cada uno de estos elementos.

Fundaciones superficiales:
Cuando el estudio de suelos muestra varios de los siguientes puntos, podemos
considerar construir con fundaciones superficiales:

 Buena capacidad portante ADMISIBLE del suelo una vez aplicados los
factores de seguridad, con valores desde los 100 KN/m2 hacia arriba
 Cargas bajas a moderadas por columna
 Suelos granulares o arcillas no expansivas
 Estructuras con baja o nula carga lateral

Fundaciones profundas:
Por el contrario, cuando no existan las circunstancias mencionadas, se deberán
considerar fundaciones profundas o semiprofundas.

Por ejemplo, algunas situaciones adicionales en las cuales se deba considerar la


construcción de pilotes se da cuando:

 La edificación se fundará encima un talud inestable


 El suelo es muy compresible o susceptible a consolidaciones considerables
 Las cargas son muy altas y se necesita llegar a estratos de roca

Fundaciones intermedias:
Es lógico pensar que las fundaciones intermedias se aplican en casos donde se
necesita plantar zapatas a profundidades intermedias mayores a los 3 metros sin
embargo no se necesitan profundidades tan grandes como para considerar pilotaje.
Es en estos casos donde las pilas de fundación o zapatas con pedestales largos son
la mejor solución. Esto se verá más adelante en el artículo.

Fundaciones superficiales:
A la vez, dentro de esta clasificación se pueden considerar diferentes tipos de
fundaciones según su necesidad.

Zapatas aisladas:
Es el tipo más común de fundación superficial. Se utiliza en la mayoría de las
construcciones aporticadas donde las cargas provienen exclusivamente de
columnas y necesitan transmitirse hacia el suelo.
Las zapatas aisladas son comúnmente utilizadas para cimientos poco profundos con
el fin de transportar y extender cargas concentradas, causadas por ejemplo por
columnas o pilares. Las zapatas aisladas pueden ser de material reforzado o no
reforzado. Sin embargo, para la base no reforzada, la altura de la base debe ser
mayor para proporcionar la separación de carga necesaria.

Las formas cuadradas suelen ser las más comunes por su facilidad constructiva. Sin
embargo, en algunos casos se adoptan bases circulares cuando el elemento
estructural a soportar tiene sección circular. Este es el caso de tanques de agua con
pilares circulares, faros, turbinas eólicas u otros similares.

Zapatas corridas:
Se utilizan exclusivamente para soportar muros de contención o muros portantes.
Es muy común que dé inicio se confunda a este tipo de zapatas con las vigas de
fundación, que se verán más adelante. La diferencia entre ambas radica en que las
zapatas corridas sostienen siempre cargas distribuidas uniformemente en
profundidad. En cambio, las vigas de fundación soportan particularmente cargas
puntuales.

Zapata combinada:
Como su nombre lo indica, consiste en la combinación de dos (o más) zapatas
formando una sola. Esta situación es común en casos donde existe un solapamiento
entre áreas de zapata o las zapatas están muy cerca una de otra. Entonces, una
zapata combinada conformada por dos zapatas unidas trabaja redistribuyendo el
esfuerzo en general de mejor manera que dos zapatas aisladas.

Si se tiene entonces un solapamiento entre las superficies A1 y A2 producto de las


cargas P1 y P2 respectivamente, se deben sumar y combinar ambas superficies
formando una superficie At = A1+A2 cuyo centroide sea igual al centroide de las dos
cargas P1 y P2 o al centroide de las áreas A1 y A2.

La zapata resultante será la siguiente:

Vigas de cimentación:
Las vigas de cimentación son un caso muy similar al de zapatas combinadas. Sin
embargo, este tipo de fundación tiene dos diferencias concretas:

1) La primera diferencia radica en que las vigas de fundación trabajan en general


con toda una fila de cargas puntuales en línea. En cambio, una zapata combinada
suele combinar en general solo dos cargas.
2) La segunda diferencia radica en el tipo de análisis llevado a cabo en este tipo de
fundación. Cuando se decide solucionar la distribución de esfuerzos hacia el suelo
mediante una viga de fundación, por lo general hoy en día el análisis se realiza a
partir de la interacción suelo – estructura. Por tanto, se concibe a la viga como un
elemento deformable apoyado sobre un lecho elástico.

Si bien también puede concebirse a una viga de fundación como un elemento rígido
con una distribución de esfuerzos constante en su base, esta solución arroja vigas
muy robustas y costosas. Es por eso que este análisis suele no ser el más
conveniente.

No debe confundirse este tipo de fundación con el de una zapata corrida. Las
zapatas corridas sostienen cargas distribuidas y uniformes desde la superestructura.
En cambio, una viga de cimentación suele sostener cargas puntuales producto de
columnas hacia el suelo, en una suerte de esfuerzos no uniformes en el contacto
entre hormigón y suelo.

Es común que las vigas de fundación tengan un elemento rigidizado en forma de


viga T invertida para que las deformaciones de la viga se reduzcan y los esfuerzos
en el suelo sean más uniformes, como en la siguiente imagen. A pesar de contar
con este rigidizado, la viga de fundación no se convierte en una zapata corrida, pues
el principio de análisis sigue siendo el de una viga que soporta cargas puntuales.
También pueden armarse vigas en dos direcciones perpendiculares formando una
especie de losa de fundación con huecos o vanos sin concreto reforzado en los
centros de las cuadriculas formadas por las vigas.

Losa de fundación:
En muchos lugares también se la llama Losa Radier, platea de fundación o losa de
cimentación. Consiste en una losa sobre la cual se apoya toda la estructura,
distribuyendo de manera más o menos uniforme, los esfuerzos hacia el suelo.

El principio de cálculo de las losas de cimentación o de fundación es exactamente


igual al principio de cálculo de las vigas de fundación, pero en un concepto
tridimensional. O sea, la losa se apoya sobre un lecho elástico conformado por
resortes de elasticidad igual al coeficiente de carga o coeficiente de balasto del
suelo.

El análisis de este tipo de losas por mucho tiempo se realizó bajo reglas empíricas
llegando siempre a un armado de la estructura de losa bajo un concepto de
distribución de esfuerzos constante en el suelo y losa de fundación rígida.

Sin embargo, con la ayuda de los computadores y software de cálculo, se puede


ahora tener un mejor conocimiento de los esfuerzos en el suelo y estructura en base
a la interacción suelo – estructura y a la deformación de ambos materiales.

Cimentaciones profundas:
La clasificación de pilotes es más o menos grande dentro de esta categoría, y no
entraré en mucho detalle respecto a los tipos de pilotes. Sin embargo, basta
mencionar por el momento que existieron a lo largo de la historia de la construcción
pilotes de diferentes materiales, como madera, concreto, acero e incluso bambú a
modo de micro pilotes.
Además, la clasificación de pilotes no solo se da en
base al material, sino al método constructivo,
existiendo pilotes vaciados en sitio, pilotes hincados a
golpes, pilotes insertados a presión, siendo los dos
últimos más complejos en su instalación por la
necesidad de maquinaria.

Por otro lado, existe la clasificación de pilotes en


función al tipo de resistencia que otorgan respecto a la
carga aplicada. Existiendo así pilotes que resisten por
fricción, otros por cabeza, y la combinación de ambos.

Cimentaciones intermedias:
Muchos libros categorizan
a este tipo de cimentaciones dentro del tipo
cimentaciones profundas, ya que su concepto de
resistencia es más o menos parecido al de pilotes.

La diferencia entre este tipo de fundaciones con las


de pilotes radica más que nada en el método
constructivo y a la relación diámetro – profundidad de
estos elementos. A diferencia de los pilotes, las
pilas de fundación pueden ser excavadas a mano y
además entrar profundidades en promedio
de 5[m], lo que las pone en una categoría intermedia
entre zapatas y pilotes.

Las excavaciones de este tipo de fundaciones pueden ser de sección circular o


cuadrada. Se prefiere muchas veces una pila de sección cuadrada por su sencillez
de doblado de los aceros. En este sentido es importante mencionar dos de los tipos
más comunes de armado de pilas de fundación cuadrada.
La primera de las dos opciones mostradas arriba consiste en una zapata vaciada
sobre una carpeta de hormigón pobre. El dimensionamiento de esta zapata cumple
las mismas reglas de diseño de una zapata aislada, pero encima se concibe un
pedestal o «dado» robusto que impide al elemento pandearse en el tramo enterrado.
Además, que permite un buen recubrimiento de los aceros lateralmente con
concreto.

La segunda opción consiste en el relleno de terreno de excavación con hormigón


pobre, a una dosificación de 2 bolsas de cemento por m3 de agregado. Este
agregado puede ser incluso tierra mejorada granular traída de un banco de material.
Esta segunda opción podría concebirse como «fundación sobre terreno mejorado»
donde la zapata se construye sobre el relleno de hormigón pobre.

Tipo de fundaciones aislada

Las zapatas aisladas son utilizadas para la creación de columnas singulares, se


suelen incorporar en estructuras de carga moderada, son aplicadas en edificaciones
u obras que tienen juntas de dilatación y recaen en una sola columna para transmitir
las cargas sobre el terreno.

Tipos de zapatas aisladas:

Zapatas flexibles: El canto (altura) de estas zapatas es menor que el vuelo (largo)
en las dos direcciones de la zapata. Este tipo de zapata soporta fuerzas de tracción
y de compresión de la estructura.

Zapatas deformables o rígidas: El canto es igual o menor que el vuelo máximo


medido en ambas direcciones.

Zapatas excéntricas o de medianería: En estas zapatas la carga no se centra en el


cimiento, es el caso en el cual el pilar o la pared de carga (medianera) que apoya
sobre una zapata, aislada o continua, está tocando el límite del predio, y la carga no
puede quedar centrada en el cimiento (puede ser por cuestiones de propiedad del
predio).

Zapatas centradas: Este tipo de zapata se mantiene amarrada o arriostrada con


riostras de concreto u hormigón armado de sección inferior a la zapata.

Zapatas rectangulares: Son zapatas que presentan lados desiguales.

Zapatas circulares: Su característica principal es su forma circular.


Zapatas cuadradas: Son las que presentan sus lados iguales.

Las zapatas combinadas o colindantes: Son empleadas como base de dos o más
columnas cercanas. Su objetivo es evitar excéntricas cargas en la última zapata. En
estas zapatas las columnas no se ubican en su centro sino de forma excéntrica, lo
cual ocurre con frecuencia en las columnas perimetrales.

Las zapatas combinadas suelen combinarse con vigas de atado, para equilibrar
cargas, evitando que la cimentación se vuelque o se gire.

Las zapatas corridas o continuas: Sostienen los muros de carga que están
alineados muy cerca sobre un terreno de resistencia alta, media o baja. Son
frecuentemente utilizadas en hileras de muros y columnas, para sostener columnas
alineadas o muros de carga cuando están cerca.

Adicionalmente, las zapatas se categorizan según sus medidas. Las zapatas rígidas
llevan una armadura que permite soportar una mayor fuerza de flexión, la armadura
presenta un diámetro de 12mm impidiendo los efectos de corrosión, estas zapatas
rígidas deben tener un recubrimiento de concreto de mínimo 8cm y entre 25 a
50kg/m3 de hierro.

Las zapatas macizas: Se emplean en cimentaciones continuas, transfieren las


fuerzas de manera piramidal, presentando una forma triangular, su muro de carga
puede ser excéntrico o centrado. Su esfuerzo es de compresión y pueden o no tener
armadura en su interior.

Las zapatas flexibles: Pueden soportar fuerzas de tracción y compresión, su ángulo


no asciende a los 45 grados en el triángulo de distribución de los esfuerzos, se
deben emplear entre 50 y 100kg/m3 de hierro para realizar su armazón.

Construcción de una zapata aislada:

Para la construcción de una zapata aislada, se debe tener en consideración que


esta debe ir arriostradas. Lo cual se hace mediante riostras de hormigón armado de
sección inferior a la zapata.

 Armado inferior: Utilizando un mallazo de barras cruzadas y con una


separación entre barras que se recomienda no supere los 30 cm.
 Recubrimiento anticorrosivo: Separando las armaduras entre 5 a 10
centímetros desde el borde y el fondo de la zapata. Esto puede variar en
función del tipo de hormigón usado y las características del suelo.

 Barras: La recomendación es que se debe utilizar barras de grandes


diámetros, previniendo posibles corrosiones.

 Armadura longitudinal: La armadura longitudinal del pilar debe llegar hasta el


mallazo. Es por ello que se debe colocar armaduras de espera iguales a las
de los pilares.

 Solape mínimo: Se debe considerar, por lo menos, unas 30 veces el diámetro


de la barra más gruesa del pilar.

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