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República Bolivariana de Venezuela.

Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria.

Universidad Politécnica Territorial del Norte del Táchira Manuela Sáenz.

La fría, estado Táchira.

Características y criterios en la construcción


de fundaciones.

PNF: Construcción Civil.


Trayecto: T4 trimestre 12.
Unidad curricular: Fundaciones y Muros.
Profesor: Ing. Román Sánchez.
Estudiante: Samuel Romero Olave.
C.I:20.368.411

La Fría, Mayo de 2021.


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Capacidad de carga y comportamiento del suelo.

Se denomina capacidad portante a la capacidad del terreno para soportar las cargas
aplicadas sobre él. Técnicamente la capacidad portante es la máxima presión media de
contacto entre la cimentación y el terreno tal que no se produzcan un fallo por cortante del
suelo o un asentamiento diferencial excesivo. Por tanto, la capacidad portante admisible debe
estar basada en uno de los siguientes criterios funcionales:

- Si la función del terreno de cimentación es soportar una determinada tensión


independientemente de la deformación, la capacidad portante se denominará carga de
hundimiento.

- Si lo que se busca es un equilibrio entre la tensión aplicada al terreno y la deformación


sufrida por este, deberá calcularse la capacidad portante a partir de criterios de asiento
admisible.

Las propiedades mecánicas de un terreno suelen diferir frente a cargas que varían casi
instantáneamente y cargas casi permanentes. Esto se debe a que los terrenos son porosos, y
estos poros pueden estar total o parcialmente saturados de agua. En general los terrenos se
comportan de manera más rígida frente a cargas de variación casi instantáneamente ya que
estas aumentan la presión intersticial, sin producir el desalojo de una cantidad apreciable de
agua. En cambio bajo cargas permanentes la diferencia de presión intersticial entre diferentes
partes del terreno produce el drenaje de algunas zonas.

En el cálculo o comprobación de la capacidad portante de un terreno sobre el que existe


una construcción debe atenderse al corto plazo (caso sin drenaje) y al largo plazo (con
drenaje). En el comportamiento a corto plazo se desprecian todo los términos excepto la
cohesión última, mientras que en la capacidad portante a largo plazo (caso con drenaje) es
importante también el rozamiento interno del terreno y su peso específico.

Interacción suelo – infraestructura – superestructura.

La interacción del suelo con la estructura o suelo-estructura, es el estudio del


comportamiento de la interface de la estructura de cimentación y la masa de suelo. Este
estudio tiene como objetivo encontrar la configuración de deformación y los elementos
mecánicos de la estructura de cimentación y el suelo, debido a las acciones o cargas
gravitacionales y accidentales. La interacción suelo-estructura consiste en encontrar un
sistema de fuerzas que aplicadas simultáneamente a la estructura y a la masa de suelo
produzcan la misma configuración de desplazamientos diferenciales entre los dos elementos,
debiendo cumplir con las condiciones de equilibrio y continuidad, ecuaciones fundamentales
del Análisis Estructural.

Por lo tanto, es necesario conocer el comportamiento de la masa del suelo y el


comportamiento del material de la estructura de cimentación, vigas, placas, pilas y pilotes
entre las típicas. La primera la estudia la Mecánica de Suelos y la segunda la Mecánica de 2
Materiales. Existen dos enfoques del problema de interacción suelo-estructura que se
denominan: interacción dinámica suelo-estructura e interacción estática suelo-estructura.

La interacción dinámica suelo-estructura estudia el comportamiento dinámico del sistema


cimentación-masa de suelo. El análisis del problema de interacción dinámica se inicia a fines de
la década de los años sesenta fundamentalmente por el comportamiento sísmico de plantas
nucleares desplantadas en suelos deformables, actualmente los estudios se han desarrollado
para analizar los efectos de interacción en construcciones muy esbeltas como edificios y
chimeneas cimentados en suelos compresibles.

Si tuviera que elegirse el terreno donde se ubicará la construcción se recomendaría un lugar


de suelo firme, libre de amplificaciones locales, generadas por los movimientos sísmicos, así
como de asentamientos excesivos y pérdida de capacidad de apoyo. Sin embargo, si el edificio
se tuviera que cimentar en suelo blando, es conveniente usar pilas o pilotes para apoyarlo en
estratos firmes. Cuando esto no es posible se tendrán que aplicar los métodos de interacción
suelo-estructura. Aunque también se presenta la interacción entre el suelo y las pilas o pilotes.

El objetivo de la interacción estática suelo-estructura es realizar un análisis estructural de la


subestructura y superestructura considerando el efecto de la rigidez de la masa del suelo. En
las estructuras de cimentación sobre suelos compresibles y de alta compresibilidad surge el
problema de determinar los hundimientos totales y diferenciales, éstos generan elementos
mecánicos, fuerzas axiales y cortantes y momentos flexionantes y torsionantes, en toda la
construcción. Los hundimientos dependen de la compresibilidad del suelo y de la rigidez o
flexibilidad de la estructura de cimentación.

Por lo expuesto anteriormente se concluye que no en todos los casos de diseño de


cimentaciones se deberá tomar en cuenta la interacción suelo-estructura, por ejemplo en
edificios pequeños cimentados en suelos rígidos, los hundimientos diferenciales del terreno
son pequeños y no tienen importancia en el Análisis Estructural.

Fundaciones superficiales.

La cimentación es referida a la acción y el efecto de los elementos estructurales del edificio


encargado de transmitir las cargas del terreno, por lo que la cimentación se realizará en
función del mismo, o con elementos apoyados a este suelo distribuyéndose de forma que no
superan la presión admisible, que puede admitir, aceptar o tolerar que produzca cargas
zonales. La cimentación constituye el elemento intermedio que permite transmitir las cargas
que soporta una estructura al suelo subyacente, de modo que no rebase la capacidad portante
del suelo, y que las deformaciones producidas en éste sean admisibles para la estructura.

Las Cimentaciones Superficiales reparten la fuerza que le transmite la estructura a través de


sus elementos de apoyo sobre una superficie de terreno bastante grande que admite esas
cargas. Se considera cimentación superficial cuando tienen entre 0,50 m. y 4 m. de
profundidad, y cuando las tensiones admisibles de las diferentes capas del terreno que se
hallan hasta esa cota permiten apoyar el edificio en forma directa sin provocar asientos
excesivos de la estructura que puedan afectar la funcionalidad de la estructura; de no ser así,
se harán Cimentaciones Profundas. 3
Debe considerarse como posible que en un mismo solar se encuentren distintos tipos de
terreno para una misma edificación; esto puede provocar asientos diferenciales peligrosos
aunque los valores de los asientos totales den como admisibles.

Existen varios tipos de fundaciones superficiales, los cuales se detallan a continuación:

Zapatas centradas

Este tipo de zapata se caracteriza por mantenerse arriostrada o amarrada utilizando una
riostra de hormigón u concreto que se arma de sección inferior a la zapata.

Zapatas excéntricas

Estas zapatas se caracterizan por que la carga no está centrada en el cimiento, es un caso en
donde la pared o el pilar de carga que se apoya sobre una zapata, continua o aislada, se
encuentra tocando el límite del predio, y por lo tanto la carga no se puede centrar en el
cimiento, esto puede suceder por razones de propiedad del predio.

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Zapatas continúas.

Este tipo de zapata se encarga de sostener los muros de carga que se encuentran alineados
muy cerca sobre un terreno de alta resistencia, media o baja. Con frecuencia se usan en hileras
de muros y columnas para que sostengan las columnas alineadas o los muros de carga cuando
se encuentran cerca.

Zapatas combinadas

Las zapatas colindantes o combinadas, por lo general se utilizan como base para dos o más
columnas que están cerca. Su principal objetivo es el de evitar cargas excéntricas en la zapata
final, en las zapatas combinadas las columnas no están ubicadas en su centro, sino que se
encuentran ubicadas de manera excéntrica, esto ocurre con mucha frecuencia en las columnas 5
perimetrales.
Losa de fundación.

Una losa de cimentación o cimentación en losa es una losa de cimentación combinada que
cubre toda el área debajo de una estructura y soporta toda la estructura. Este tipo de cimiento
es más apropiado y adecuado cuando la presión del suelo permitida es baja, o la carga es
pesada, y las zapatas extendidas cubrirían más de la mitad del área del plan; además, cuando
el suelo contiene lentes de estratos compresibles que probablemente causen un asentamiento
diferencial considerable, losa de cimentación es muy adecuada, ya que tendería a tender un
puente sobre los puntos erráticos, en virtud de su rigidez.

En ocasiones, el principio de los cimientos flotantes puede aplicarse mejor en el caso de los
cimientos de losa de cimentación, para minimizar los asentamientos. Una losa de cimentación
generalmente descansa directamente sobre el suelo o las rocas: sin embargo, también puede
asentarse sobre pilotes, si el estrato duro no está disponible a una profundidad
razonablemente pequeña.

Sistemas constructivos.

El sistema constructivo es un conjunto de elementos, materiales, técnicas, herramientas,


procedimientos y equipos, que son característicos para un tipo de edificación en particular. Un
ejemplo claro de elemento es el ladrillo, que permite levantar muros, hacer pisos y techos. A
continuación se mencionan algunos de los sistemas constructivos más utilizados.

Construcción tradicional: Se entiende por sistema tradicional al que está compuesto por
estructura de paredes portantes (ladrillos, piedra, o bloques etc.); o concreto armado. Paredes
de mampostería: ladrillos, bloques, piedra, o ladrillo portante, etc. revoques interiores,
instalaciones de tuberías metálicas o plásticas y techo de tejas cerámicas, placas, o losa plana.
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Es un sistema de obra húmeda. Es el sistema de mezcla, badilejo y palas.
Sistema constructivo de paneles estructurales: Dentro de este sistema prima la utilización de
paneles formados por 2 mallas de acero vinculadas por tensores de alambre de acero
galvanizado con una placa intermedia aislante térmica. A la que se le coloca, una vez ubicados
en su destino, concreto proyectado. Se construye sobre una platea de vigas de encadenado,
sobre la que se montan los paneles; se refuerzan con hierro los ángulos y finalmente se ubican
las cañerías de las instalaciones y se proyecta el mortero o revoque en una o dos capas.

Sistema constructivo de madera: Es un sistema económico y con buenas aislaciones Se utiliza


fundamentalmente en el interior en zonas madereras, tienen una integración especial con el
medio. Las hay íntegramente maderas horizontalmente uno arriba del otro encastrados en sus
esquinas, o con el sistema de estructura independiente en madera y paredes interior y exterior
de madera en forma de listones.

Sistema constructivo de módulos prefabricados: En el sistema de módulos tridimensionales,


se construyen módulos prefabricados en forma seriada y secuencial, formados por paredes,
piso y techo que contienen carpinterías, aislaciones, instalaciones, solados, revestimientos y
todas las terminaciones necesarias, son módulos autosuficientes. Se utilizan siempre en
dimensiones que sean transportables por camión u otros medios y se montan en su lugar
definitivo con grúa.

Sistema de muros: Se denomina muro de carga o muro portante a las paredes de una
edificación que poseen función estructural; es decir, aquellas que soportan otros elementos
estructurales del edificio, como arcos, bóvedas, vigas o viguetas de forjados o de la cubierta.

Cálculos de estructuras.

El análisis estructural o cálculo estructural es particularmente importante para que los


ingenieros estructurales se aseguren de que comprenden completamente las rutas de carga y
los impactos que las cargas tienen en el diseño de ingeniería. Permite a los ingenieros o
diseñadores garantizar que una pieza de equipo o estructura sea segura para su uso bajo las
cargas estimadas que se espera que resista.

El análisis estructural se refiere al uso de las ecuaciones de la resistencia de materiales para


encontrar los esfuerzos internos, deformaciones y tensiones que actúan sobre una estructura
resistente, como edificaciones o esqueletos resistentes de maquinaria. Igualmente el análisis
dinámico estudia el comportamiento dinámico de dichas estructuras y la aparición de posibles
vibraciones perjudiciales para la estructura.

Métodos de análisis estructural.


Determinación de esfuerzos.

El tipo de método empleado difiere según la complejidad y estructuras muy sencillas entre
los que se encuentran la teoría de vigas de Euler-Bernoulli es el método más simple, es
aplicable solo a barras esbeltas sometidas a flexión y esfuerzos axiales. Naturalmente no todas
las estructuras se dejan analizar por este método. Cuando existen elementos estructurales 7
bidimensionales en general deben emplearse métodos basados en resolver ecuaciones
diferenciales.

Métodos programables.

Así, para determinar esfuerzos sobre marcos o pórticos se usa frecuentemente el método
matricial de la rigidez basado en el modelo de barras largas, que modeliza los elementos
resistentes como elementos unidimensionales sometidos predominantemente a flexión.
Cuando se trata de analizar elementos más pequeños o con forma irregular donde pueden
producirse concentraciones de tensiones se usan métodos numéricos más complejos como el
método de los elementos finitos.

Determinación de resistencia y rigidez.

A partir de los esfuerzos se pueden calcular directamente los desplazamientos y las


tensiones. En el caso del método de los elementos finitos se suele determinar directamente el
desplazamiento sin necesidad de calcular los esfuerzos internos. Una estructura correctamente
diseñada además de ser funcional y económica debe cumplir obligatoriamente dos criterios
razonables de seguridad:

-El criterio de resistencia, consistente en comprobar en que en ninguno de sus puntos el


material sobrepasa unas tensiones admisibles máximas.

-El criterio de rigidez, consistente en comprobar que bajo las fuerzas y solicitaciones actuantes
los desplazamientos y deformaciones de la estructura no sobrepasan un cierto límite. Dicho
límite está relacionado con criterios de funcionalidad, pero también de estabilidades o de
aplicabilidad de la teoría de la elasticidad lineal.

Modelos materiales.

Dentro del análisis estructural es importante modelizar el comportamiento de los


materiales empleados mediante una ecuación constitutiva adecuada. Los tipos modelos de
materiales más frecuentes son:

-Modelo elástico lineal e isótropo, el más usado, ya que el teorema de Rivlin-Ericksen permite
establecer que para deformaciones suficientemente pequeñas todo sólido elástico es
asintóticamente lineal e isótropo.

-Modelo elástico lineal ortotrópico, constituye una modificación de modelo isótropo para
materiales cuya resistencia y comportamiento depende de la dirección, laminados, elementos
de madera, etc., requieren modelos ortótropos para ser adecuadamente modelizados.

-Modelos de plasticidad y viscoplasticidad. Los metales a partir de ciertos valores de tensión


experimentan deformaciones plásticas irreversibles, así como otras no linealidades. El cálculo
plástico a costa de complicar las leyes materiales da una predicción más exacta de las cargas
de colapso o fallo de las estructuras, así como un ahorro en material al poder tener en cuenta
el rango de trabajo de los materiales en el que estos están experimentando transformaciones
irreversibles pero sin alcanzar las cargas de fallo o colapso.
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Método de los nodos.
El método de los nodos o método de los nudos, consiste en el planteamiento de equilibrio
mecánico de cada uno de los nodos o nudos de una armadura simple. Un nodo es cada uno de
los puntos donde concurren dos o más barras. El equilibrio global de la estructura implica el
equilibrio local de cada uno de los nodos. Para que el método de los nodos sea aplicable a una
estructura concreta deben cumplirse algunas condiciones geométricas, entre ellas: Que la
estructura tenga nodos articulados o se comporte de manera similar a una estructura de nodos
articulados.

Que el número de barras sea inferior a una cierta cantidad dada por el número de barras:

Para armaduras bidimensionales con fuerzas de trabajo sobre su plano el número de nodos
“n” y el número de barras “b” debe satisfacer: 2n-3=b. Si el número de barras es inferior se
tiene un mecanismo para el cual puede no existir equilibrio, y si el número de barras es
superior el número de esfuerzos incógnita supera al de ecuaciones de la estática linealmente
independientes.

Para una estructura tridimensional, la relación es: 3n-4=b.

Elementos de fuerza cero.

El análisis de armaduras por el método de nodos se simplifica de manera considerable si


podemos identificar primero aquellos elementos que no soportan carga. Esos elementos de
fuerza cero se usan para incrementar la estabilidad de la armadura durante la construcción y
proporcionar soporte adicional si se modifica la carga aplicada. Por lo general, los elementos
de fuerza cero de una armadura se pueden encontrar por inspección de cada uno de sus
nodos, haciendo un diagrama de cuerpo libre a la armadura y haciendo una sumatoria de
fuerzas. Por lo general, los elementos de fuerza cero se pueden determinar de las siguientes
formas:

-Si solo dos elementos forman una armadura y no se aplica ninguna carga extra o reacción de
soporte al nodo, los dos elementos deben ser elementos de fuerza cero.

-Si tres elementos forman un nodo de armadura en el cual dos de los elementos son
colineales, el tercer elemento es un elemento de fuerza cero siempre que no se aplique
ninguna fuerza exterior o reacción de soporte al nodo.

Análisis de estructuras hiperestáticas.

Este tipo de estructuras no pueden ser analizadas únicamente mediante las ecuaciones de
la estática o de equilibrio, ya que estas últimas proporcionan un número insuficiente de
ecuaciones. Los problemas hiperestáticos requieren condiciones adicionales usualmente
llamadas ecuaciones de compatibilidad que involucran fuerzas o esfuerzos internos y
desplazamientos de puntos de la estructura. Existen varios métodos generales que pueden
proporcionar estas ecuaciones: método matricial de la rigidez, teoremas de Castigliano,
teoremas de Mohr y teorema de los tres momentos.

Análisis dinámico de estructuras.

Otra área importante del diseño de maquinaria, análisis de vibraciones y diseño sísmico de
edificios es el análisis dinámico. En este tipo de análisis se buscan las respuestas máximas de
ciertos parámetros (aceleraciones, desplazamientos, esfuerzos, etc.) que se producen en una
estructura bajo cargas dinámicas o variables con el tiempo. Eso en general requiere el uso de 9
ecuaciones diferenciales. Algunos aspectos frecuentes del análisis dinámico incluyen: análisis
modal, determinación de frecuencias propias y determinación de fenómenos de resonancia.

Criterios de diseño de la infraestructura.

El tipo de cimentación se selecciona en función el tipo de terreno, del tipo de estructura y


de la interacción con los edificios próximos. El terreno influye por su capacidad portante, por
su deformabilidad, por la existencia de nivel freático, por su excavabilidad o alterabilidad,
entre otros. En el tipo de estructura son determinantes las cargas, las tolerancias a los asientos
y la presencia de sótanos. Son muy susceptibles aquellos edificios cercanos antiguos con
cimentación somera o cuando las cargas van a ser muy diferentes entre los edificios próximos.

La cimentación por zapatas constituye la solución tradicional por economía y facilidad de


ejecución. Es una buena solución cuando la resistencia del terreno es de media a alta, sin
estratos blandos interpuestos. Es la cimentación ideal si el terreno presenta una cohesión
suficiente para mantener verticales las excavaciones, no existe afluencia de agua y el nivel de
apoyo se encuentra a menos de 1,5 m, si bien se puede rellenar la diferencia con un concreto
pobre en el caso de mayores profundidades. En edificios ligeros y muros de carga se utilizaban
zapatas de concreto en masa, si bien hoy día se realizan con concreto armado. Cada pilar
asienta de forma independiente sobre cada zapata. Como inconveniente cabe citar la escasa
resistencia a giros y a desplazamientos horizontales, que pueden resolverse con riostras,
zapatas combinadas o vigas de cimentación.

La cimentación por losa se utiliza en terrenos menos resistentes o heterogéneos,


especialmente para tensiones admisibles menores a 0,15 N/mm2. Es económica si la superficie
de la cimentación supera la mitad de la extensión que ocupa el edificio. Una ventaja adicional
es que anula o reduce los asientos diferenciales. Asimismo se aconseja cuando el edificio
presenta un sótano bajo el nivel freático, combinado con muros pantalla. La facilidad
constructiva sugiere losas de canto constante, salvo en edificios con zonas cargadas de forma
diferente para garantizar la compatibilidad de las deformaciones.

Se recurre a la cimentación por pilotaje cuando no existe terreno firme a una profundidad
alcanzable mediante zapatas o pozos, normalmente más de 5 m. Los pilotes reducen los
asientos de la estructura, cuando la permeabilidad u otras condiciones del terreno impiden la
ejecución de cimentaciones superficiales, existen cargas muy fuertes o concentradas o bien se
pretende evitar la influencia sobre cimentaciones adyacentes.

Sistema de cargas.

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Las cargas estructurales son las fuerzas externas aplicadas a los elementos resistentes, o
también su propio peso. Las cargas se expresan en unidades de peso, en unidades de peso por
longitud o en unidades de peso por superficie unitaria, o sea, kg; kg/m y kg/m², según el
Sistema Métrico Decimal.

Estas cargas son aplicadas a los diferentes elementos de las estructuras de las edificaciones,
los que constituyen a su vez, un conjunto de miembros estructurales. Cada uno de estos
miembros está constituido por un material con determinada forma volumétrica y sujeto a
realizar uno o varios esfuerzos, cuando forman parte de la estructura. Como los esfuerzos son
consecuencias de las cargas, es necesario conocer o suponer las cargas a que va a estar
sometido cada uno de esos miembros.

Tipos de cargas

Las cargas, según su naturaleza pueden ser: estáticas, de repetición o cíclicas, y de impacto;
según su disposición pueden ser distribuidas y concentradas.

Según su naturaleza

Estáticas:

Son las que se aplican gradualmente y se consideran constantes después de aplicadas. Para
estudiarlas se dividen en cargas vivas o accidentales y en cargas muertas o permanentes.

Cargas vivas: Son aquellas que algunas veces pueden estar aplicadas a los miembros y otras no.
Ejemplo de esto puede ser un aula, que en ocasiones puede estar vacía y en otras están todos
los estudiantes; o las graderías de un estadio, que estarán llenas de público cuando se exhibe
un evento y en otras no.

Cargas muertas: Son las que tienen carácter de permanente sobre el miembro que actúan.
Ejemplo, el peso de una placa que soporta el piso, el relleno debajo de ese piso, y el piso.

Cargas de repetición.

Se aplican un gran número de veces a un miembro produciéndose efectos variables que


motivan desgaste y/o rotura del material. Ejemplo, cuando se aplica un doblado alternativo a
un alambre hasta que se produce la fatiga y este se rompe.

Cargas de impacto.

Se aplican en un relativamente corto tiempo, es decir, súbitamente, siendo generalmente


aplicadas por un cuerpo en movimiento al ponerse en contacto con un cuerpo resistente.
Ejemplos serían: un tren o automotor pasando sobre un puente; efectos de un terremoto; la
fuerza del viento en un ciclón, etc.

Según su disposición.

Cargas distribuidas

Son las que se encuentran repartidas en determinada área. Estas pueden ser
uniformemente distribuidas, uniformemente variables y variables. 11
Uniformemente distribuidas: Son las que se reparten de forma uniforme. Ejemplo: si se
esparce arena sobre una cubierta en cantidades tales que tenga una misma altura en toda el
área; el peso de los pisos también es una carga distribuida.

Uniformemente variable: Usando el ejemplo anterior, si esa arena tiene una altura en un lado
de la cubierta, y en el lado opuesto una altura diferente, siempre que su variación sea lineal,
esto nos dará una carga que varía uniformemente, o sea, una carga uniformemente variable.

Variable: Si la arena de los ejemplos anteriores se regara en montones, sin orden en cuanto a
su altura y área de ocupación, se dice que estamos frente a una carga variable.

Cargas concentradas.

Son las que se aplican en un área pequeña, en comparación con la total del miembro
resistente. Ejemplo: el peso de una máquina herramienta en una esquina del taller.

Tensión admisible del suelo de fundación.

Este dato es tan importante, porque precisamente es el que cuantifica la capacidad


portante o resistencia del terreno, o lo que es lo mismo, cuánta carga es capaz de soportar
encima sin hundirse. Representa la tensión (Fuerza por unidad de superficie) que puede
soportar el terreno a determinada profundidad, y su unidad de medida es normalmente
kilogramos por centímetro cuadrado (Kg/cm2).

Los valores de tensión admisible que se suelen encontrar en los suelos oscilan entre los 0,5
y 3 Kg/cm2. Una tensión admisible baja indica un suelo problemático para la estabilidad de los
cimientos, y por el contrario un valor cercano a los 3, o superior, indica un muy buen terreno
para construir. Factores muy relevantes sobre el coste o la viabilidad de cualquier obra.

Aun así conocer solo el valor de la tensión admisible de un terreno puede no bastar según el
caso; es por este motivo, que es un dato que suele venir acompañado por dos complementos
que tienen la finalidad de dar más contexto a la información obtenida, y por lo tanto brindar
un conocimiento más profundo sobre el suelo y su composición. Estos dos complementos son:
El Coeficiente de Balasto y el Nivel del Firme.

Coeficiente de Balasto.

Para entender el coeficiente de balasto, debemos conocer que la tensión admisible de un


terreno, viene definida como el punto en el que el asiento (deformación) de dicho terreno no
supera a una pulgada, o 2.54 centímetros. El coeficiente de balasto mide la rigidez del terreno
a través de la relación que hay entre la tensión admisible y el asiento que sufre dicho terreno.

Nivel del Firme.

Se conoce como “Firme” al estrato donde se encuentra la tensión admisible necesaria para
poder soportar las cargas correspondientes a la construcción, es decir, la profundidad donde
podemos encontrar un estrato apto para sostener el edificio. No es lo mismo conseguir un
estrato firme a 1 metro de profundidad que a 7 metros, esta diferencia afecta sensiblemente a
la hora de escoger un tipo de cimentación u otra. 12
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