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RESUMEN DEL LIBRO:

Maquiavelo inicia el libro dirigiéndose a Lorenzo de Medicis. Desarrolla las clases de principados
existentes siendo éstos: los principados hereditarios y los nuevos, los primeros son aquellos en
donde una misma familia ha reinado en ellos largo tiempo, en esta clase de principado es más fácil
mantenerse en el poder; por otra parte los principados nuevos, se dividen en dos: los primeros
aquellos que lo son del todo nuevos y los segundos los que se incorporan al estado hereditario del
príncipe que los adquiere, estos últimos también llamados mixtos, los cuales tienen una
subdivisión los estados que se agregan pueden ser de la misma provincia y de la misma lengua que
el estado que los adquiere o no pueden serlo.

Maquiavelo continúa manifestando que a la fecha en que escribía su obra los principados habían
sido gobernados de dos formas distintas: por un príncipe que elije entre sus siervos a los ministros
que lo ayudarán a gobernar, o por un príncipe asistido por nobles.

En el caso de los principados que antes de ser ocupados se regían por sus propias leyes, hay tres
formas de conservar el dominio sobre esos territorios: primero, destruirlo; después, radicarse en
él; por último, dejarlo regir por sus leyes. Manifiesta que para dominar una ciudad en donde sus
ciudadanos estén acostumbrados a vivir libre primero debe ser arrasada.

Respecto de aquellos que por suerte obtienen un estado sea mediante regalo o por su compra, es
decir con armas y fortunas ajeas, expone Maquiavelo que si bien no encuentran obstáculos en su
camino si los hay respecto de mantenerse en el poder, caso contrario ocurre con aquellos que
obtienen el poder por méritos propio quienes vencen las adversidades de llegar a ser príncipes y
habiendo logrado su cometido les es más fácil mantenerse en tal posición porque en el camino
han aprendido el arte de gobernar.

Aquellos que llegan a ser príncipes mediante la realización de múltiples delitos expone Maquiavelo
que deben cometerlos en un solo acto, para que sus consecuencias no se extiendan en el tiempo,
de esa forma gobernaran más tranquilos que cometiendo crímenes en forma gradual.

Por último, dentro de los modos de adquirir el principado aparece el principado civil, con relación
a este tema Maquiavelo habla de la lucha constante entre el pueblo y los nobles para ocupar el
gobierno, de esta cuenta expone “Porque en toda ciudad se encuentran estas dos fuerzas
contrarias una de las cuales lucha por mandar y oprimir a la otra que no quiere ser mandada ni
oprimida. Y del choque de las dos corrientes surge uno de estos tres efectos: o principado, o
libertad, o licencia.”

Respecto de cómo deben medirse las fuerzas de los principados esto se hace poniendo atención a
si los estados pueden sostenerse por sus propios medios durante un conflicto o si, en cambio
necesitan de algún tipo de ayuda externa por no contar con los medios necesarios para afrontar
esta clase de sucesos.

En relación con los principados eclesiásticos Maquiavelo explica que se apoyan en antiguas
instituciones religiosas que son tan potentes y de tal calidad, que mantienen a sus príncipes en el
poder sea cual fuere el modo en que éstos procedan y vivan. Esta clase de principados no están
sujetos a los inconvenientes a que se enfrentan los demás son los únicos principados seguros y
felices.
Para Maquiavelo las buenas leyes y las buenas tropas son indispensables para gobernar, donde
hay buenas tropas necesariamente deben existir buenas leyes por este motivo evita hablar de las
leyes para enfocarse en las tropas. Clasifica las tropas en propias, mercenarias y auxiliares o
mixtas, las últimas dos no son recomendadas para un príncipe, debido a la falta de lealtad y los
motivos que tienen para actuar descansan en el beneficio económico que esperan obtener del
príncipe, las tropas que un príncipe debe tener son las propias, ya que estas le son leales y el
vínculo que tienen va más allá de un beneficio económico.

Un príncipe no debe gastar sus energías más que en enfocarse en el arte de la guerra, es lo que
eleva a los súbditos a ser príncipes y su desatención hace perder tal categoría a los que la
ostentan. Aún en tiempos de paz un príncipe debe trabajar en el arte de la guerra, esto lo puede
hacer por medio de la acción o por el estudio; a través de la acción el príncipe debe preparar física
y mentalmente a sus tropas, establecer la organización de las tropas también es importante así
como el conocimiento de las tierras de su estado; respecto del estudio, todo príncipe debe
analizar la historia, darse cuenta de los pasos que siguieron los grandes príncipes para llegar y
mantenerse en el poder, debe seguir los pasos de los personajes ilustres para imitarlos.

Maquiavelo continúa su libro escribiendo sobre las conductas que los príncipes deben observar,
pues hay conductas que aunque parezcan malas son las que mejores resultados le brindarán y
aunque en la mayoría de los casos se hable de ser buena persona un príncipe debe actuar como
mejor le convenga pues solo así podrá mantenerse en el gobierno.

El ser considerado prodigo o despilfarrador es una conducta que todo príncipe debe evitar, pues
sus consecuencias son negativas, despilfarrar su fortuna no está bien para un príncipe. La
prodigalidad solo es buena para Maquiavelo cuando se realiza con los recursos de otros, cuando se
realiza sobre aquellas fortunas tomadas de quienes son vencidos en la guerra.

En cuanto a que si es mejor ser temido que amado, Maquiavelo expone que todo príncipe
desearía ser amado, pero la mejor cualidad es ser temido, la crueldad será buena cuando vaya
enfocada en mantener a su pueblo unido.

Todo príncipe debería cumplir sus promesas, sin embargo, esto no es posible si se quiere
mantener en el poder, cuando las circunstancias lo permiten se deben incumplir las promesas.

Todo príncipe debe evitar ser odioso y despreciable, para eso es preciso que evite ciertas
conductas como ser expoliador, apoderarse del patrimonio de otros así como de sus mujeres, ser
voluble, frívolo, afeminado, pusilánime e irresoluto, por otro lado las cualidades que deben
imperar en su conducta son grandeza, valentía, seriedad y fuerza, debe además poseer buenas
armas y buenas alianzas.

Para ser estimado un príncipe debe ser franco y directo cuando se dirija a los demás, si temores de
externar sus posturas.

Todo príncipe debe saber elegir a sus ministros, rodearse de personas capaces y fieles, pues esto
demuestra sabiduría de su parte. Debe también evitar la adulación de hombres que no sean de su
confianza, para ello es importante elegir un grupo de personas sabias a quienes consultarle sobre
todos los aspectos posibles, de modo que solo ellos puedan juzgar sus decisiones.
Termina el libro exponiendo la necesidad de que surja un nuevo príncipe ya que para Maquiavelo
las condiciones estaban dadas para que gobernara en Italia un príncipe capaz de enfrentarse a los
barbaros, se entiende el mensaje a Lorenzo de Medicis para tomar acción y comenzar con esa
tarea.

OBJETIVO DEL LIBRO:

Desde mi punto de vista el objetivo que Nicolás Maquiavelo tenia al escribir el libro “El Príncipe”
era ofrecer una guía a Lorenzo de Medicis, gobernante de Florencia, Italia, sobre como debe un
gobernante dirigir un Estado, le explica cómo debe actuar y le brinda ejemplos para que durante
su gobierno pueda desenvolverse y prosperar. En pocas palabras el objetivo del libro es ser una
guía para gobernar un Estado.

MI OPINIÓN:

De la lectura del libro “El Príncipe”, se puede apreciar que a pesar de haber sido escrito a
principios del siglo XVI específicamente en el año de 1,513, muchos de sus postulados son
aplicables hoy en día, es una guía sobre como un gobernante debe conducirse para prosperar en
las labores que conlleva ser la cabeza de un estado.

El libro inicia explicando las clases de principados y su forma de obtenerlos, cuales son los que
benefician y los que perjudican en mayor medida a cada gobernante. Maquiavelo demuestra su
vasto conocimiento sobre el pasado, pues en cada uno de los 26 capítulos de su libro aprovecha
para ejemplificar con casos reales sus postulados. Pero no solamente ejemplifica con sucesos
pasados también demuestra que su conocimiento del presente de aquella época citando ejemplos
contemporáneos.

El libro ocupa temas de suma importancia que aún hoy en día pueden ser aplicados, como el uso
de los ejércitos, la importancia de mantener buenas relaciones con el pueblo, y con las personas
que ostentan altos mandos, hacerse acompañar de personas capacitadas y la forma de actuar en
determinadas situaciones, así como no hacerse odiar por el pueblo.

Con la lectura de la obra Maquiavelo nos lleva a aquellas épocas y nos hace entender el actuar de
algunos dirigentes, es un libro que se ocupa de mostrarnos la forma en que la política se
desarrollaba, como los gobiernos mantenían relaciones entre sí, la importancia de la guerra y de
cómo algunos con estatus social alto dentro de la sociedad pueden influir para derrocar príncipes y
poner en el mando a quien mejor les convenga.

En general el libro me pareció una magnifica forma de adentrarse en las tareas que todo gobierno
debe enfrentar, así como quienes son los actores principales (gobernante, ministros, personas con
grandes fortunas, ejercito, y el pueblo).

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