Está en la página 1de 11

Género Leptospira (leptospirosis)

241 David A. Haake y Paul N. Levett

ESQUEMA DEL CAPÍTULO


Definición Diagnóstico • Los pacientes con insuficiencia renal oligúrica
• La leptospirosis se debe a la infección • Para poder hacer un diagnóstico clínico es deben someterse cuanto antes a hemodiálisis
por espiroquetas patogénicas del género necesario un alto grado de sospecha en función o diálisis peritoneal, que sólo suelen ser
Leptospira. de la exposición epidemiológica. necesarias durante un corto período de tiempo.
• Las pruebas serológicas son útiles si son
Epidemiología Prevención
positivas, pero tienen una baja sensibilidad
• La leptospirosis es una zoonosis de distribución • La estrategia preventiva más eficaz es reducir
durante la primera semana de la enfermedad.
mundial. el contacto directo con animales que puedan
• Los signos y síntomas de la leptospirosis precoz
• La leptospirosis se mantiene en la naturaleza estar infectados y el contacto indirecto con
son muy inespecíficos.
por la infección renal crónica de los animales agua y tierra contaminadas con orina.
portadores, sobre todo roedores. Tratamiento • Se recomienda la quimioprofilaxis con 200 mg
• Las infecciones se producen típicamente tras • Debe instaurarse el tratamiento antibiótico de doxiciclina una vez a la semana en aquellos
el contacto ocupacional o recreativo con agua (v. tabla 241-4) tan pronto como se sospeche de la sujetos que vayan a estar inevitablemente
  o tierra contaminadas con orina de roedores. enfermedad. En casos leves se recomienda el uso expuestos a ambientes endémicos.
• En los países en vías de desarrollo con de doxiciclina, amoxicilina o ampicilina por vía
viviendas mal acondicionadas aparecen brotes oral. En casos más graves se utiliza ceftriaxona,
de leptospirosis en entornos urbanos de forma ampicilina o penicilina por vía intravenosa.
regular tras lluvias fuertes o inundaciones. • Los pacientes con insuficiencia renal precoz
con disfunción renal de gasto elevado e
Microbiología
hipopotasemia deben ser tratados mediante
• Se han identificado 21 especies de leptospiras,
repleción de volumen agresiva y suplementos
de las cuales se sabe que 11 son patogénicas
de potasio.
(v. tabla 241-1).

La leptospirosis es una zoonosis de distribución mundial producida ETIOLOGÍA


por espiroquetas patogénicas del género Leptospira. La enfermedad «Leptospira» deriva del griego leptos (delgado) y del latín spira (enros-
se notifica de forma muy insuficiente, particularmente en regiones cado). En efecto, las leptospiras miden tan sólo 0,1 mm de diámetro y de
tropicales, aunque los intentos recientes de vigilancia indican que 6 a 20 mm de longitud. Las células tienen extremos apuntados, y uno o los
puede ser la zoonosis más frecuente1. La enfermedad se mantiene en dos habitualmente están curvados en un gancho característico (fig. 241-1).
la naturaleza por la infección renal crónica de los animales portadores, La motilidad se la confiere la rotación de los flagelos axiales que hay
que excretan el microorganismo en la orina y contaminan el entorno. debajo de la vaina de la membrana y que están insertados en extremos
La infección humana se produce bien por contacto directo con orina o opuestos de la célula y se extienden hacia la región central8. Debido a su
tejidos infectados o bien, con más frecuencia, por exposición indirecta pequeño diámetro, las leptospiras se ven mejor con microscopia de campo
a los microorganismos en el suelo húmedo o en el agua. La mayoría de oscuro, y aparecen como espiroquetas muy móviles (fig. 241-2). Las
las infecciones humanas probablemente son asintomáticas; el espectro leptospiras se cultivan fácilmente en medios con polisorbato y albúmina
de la enfermedad es muy amplio y varía desde una enfermedad febril si se obtiene la muestra antes del inicio del tratamiento antibiótico9.
indiferenciada hasta una enfermedad multisistémica grave con tasas Históricamente se ha clasificado el género Leptospira en dos espe-
de mortalidad elevadas. La gran variación de las manifestaciones cies, L. interrogans y L. biflexa, compuestas por cepas patogénicas y
clínicas es responsable en parte del grado significativo de diagnóstico no patogénicas, respectivamente. En cada una de las especies se han
insuficiente. identificado grandes números de serovares utilizando anticuerpos aglu-
tinantes. La especificidad de serovar viene conferida por los antígenos O
HISTORIA del lipopolisacárido (LPS)10. Se han descrito más de 250 serovares de
Weil describió en Heidelberg en 1886 un síndrome de enfermedad leptospiras patogénicas; debido a los grandes números de serovares,
multisistémica grave que se manifestaba con ictericia profunda y aquéllos relacionados antigénicamente se agruparon en serogrupos por
deterioro de la función renal. Previamente se había descrito una enfer- comodidad para el estudio serológico.
medad que probablemente fuera leptospirosis, aunque no se puede Actualmente las leptospiras se clasifican en diversas especies defi-
atribuir definitivamente la etiología a una infección leptospirósica 2. nidas por el grado de proximidad genética, determinado mediante la
Las leptospiras se vieron por primera vez en piezas de autopsia de un reasociación del ADN11,12. A día de hoy hay 21 especies con nombre,
paciente que se pensaba que tenía fiebre amarilla3, aunque no se ais- que incluyen patógenos (p. ej., L. interrogans), saprofitos no patogénicos
laron hasta varios años después, casi simultáneamente, en Alemania y (p. ej., L. biflexa) y especies de patogenicidad indeterminada (p. ej.,
Japón4. Continuó la confusión diagnóstica entre la leptospirosis ictérica L. inadai) (tabla 241-1)13. Algunas especies contienen cepas patogénicas
grave y la fiebre amarilla, e importantes investigadores, como Stokes y no patogénicas. Esta clasificación está respaldada por el secuenciado
y Noguchi, murieron en su intento de descubrir el microorganismo del gen del ARN 16S (fig. 241-3)14, aunque es diferente de la clasificación
etiológico4. Se han publicado varias revisiones bien documentadas2,4-7. serológica antigua5.

2864 © 2016. Elsevier España, S.L.U. Reservados todos los derechos


Descargado para Alex Castañeda (acastanedas1@upao.edu.pe) en Antenor Orrego Private University de ClinicalKey.es por Elsevier en mayo 22, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2864.e1

PALABRAS CLAVE
espiroqueta; hemorragia pulmonar; hepatorrenal; interrogans; Leptos-
pira; leptospirosis; meningitis aséptica; no oligúrica; ratas; síndrome

Capítulo 241  Género Leptospira (leptospirosis)


de Weil

Descargado para Alex Castañeda (acastanedas1@upao.edu.pe) en Antenor Orrego Private University de ClinicalKey.es por Elsevier en mayo 22, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2865

Capítulo 241  Género Leptospira (leptospirosis)


FIGURA 241-1  Micrografía electrónica de barrido de células de FIGURA 241-3  Árbol filogénico sin raíz basado en las secuencias de
Leptospira interrogans que muestra la estructura helicoidal y los los genes del ARNr 16S de Leptospiraceae obtenidas de GenBank. Las
extremos curvados (ganchudos) (aumento original ×60.000). (Por especies incluidas en los serovares patogénicos (v. tabla 241-1) se agrupan
cortesía de Rob Weyant, Centers for Disease Control and Prevention.) por separado de las especies no patogénicas y de las especies con patoge-
nicidad intermedia.

El sistema de nomenclatura de los serogrupos no tiene ninguna base


taxonómica, aunque se conserva porque la determinación del probable
serogrupo mediante el estudio serológico tiene cierta utilidad epide-
miológica. Sin embargo, en algunos pacientes las respuestas serológicas
pueden guardar muy poca relación con el serovar, sorprendentemente15.
Se ha determinado la secuencia del genoma de varias especies y cepas
de Leptospira16-20, y se está realizando el secuenciado de otras 200 cepas
a través del proyecto Leptospira Genomics and Human Health. La dis-
ponibilidad de estas secuencias genómicas ya ha llevado a un mejor
conocimiento de la patogenia de las infecciones leptospirósicas.

EPIDEMIOLOGÍA Y TRANSMISIÓN
La leptospirosis es endémica en todo el mundo. Las infecciones humanas
son endémicas en la mayoría de las regiones y la incidencia máxima
se da en la estación lluviosa en regiones tropicales, y desde finales de
verano hasta principios de otoño en las regiones templadas21. En países
FIGURA 241-2  Leptospiras observadas en microscopia de campo en vías de desarrollo con viviendas mal acondicionadas, los brotes de
oscuro (aumento original ×100). (Por cortesía de Mildred Galton, Public leptospirosis suelen aparecer de forma regular después de lluvias fuertes
Health Image Library, Centers for Disease Control and Prevention.) o inundaciones22. Es probable que haya una gran infraestimación de la
incidencia de la leptospirosis debido a la escasa capacidad diagnóstica
en las regiones en las que la magnitud de la enfermedad es mayor1. En
Estados Unidos la mayor incidencia se encuentra en Hawái; la vigilan-
TABLA 241-1  Especies de Leptospira y algunos cia activa en 1992 detectó una incidencia anual de aproximadamente
serovares patogénicos 128 casos por 100.00023. La leptospirosis ya no es una enfermedad de
ESPECIE SEROVARES PATOGÉNICOS SELECCIONADOS declaración obligatoria a nivel nacional en Estados Unidos, aunque sigue
L. interrogans Icterohaemorrhagiae, Copenhageni, Canicola, Pomona,
siendo enfermedad de declaración obligatoria en más de 20 estados.
Australis, Autumnalis, Pyrogenes, Bratislava, Lai La leptospirosis se mantiene en la naturaleza por la infección renal
L. noguchii Panama, Pomona crónica de los animales portadores. Los principales reservorios son los
L. borgpetersenii Ballum, Hardjo, Javanica
roedores y otros mamíferos pequeños, aunque el ganado y los animales
L. santarosai Bataviae
de compañía también son fuentes significativas de infección en seres
humanos. La infección de los animales portadores habitualmente se
L. kirschneri Bim, Bulgarica, Grippotyphosa, Cynopteri
produce durante la lactancia, y una vez infectados los animales pueden
L. weilii Celledoni, Sarmin
excretar leptospiras en la orina de forma intermitente o continua a lo
L. alexanderi Manhao 3 largo de toda la vida.
L. alstonii Sichuan La infección se produce por contacto directo o indirecto con la orina
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.

L. meyeri Sofia o los tejidos de los animales infectados. El contacto directo es importante
L. wolffii Khorat para la transmisión a veterinarios, trabajadores de establos de vaquerías,
L. kmetyi Manilae trabajadores de mataderos, carniceros, cazadores y manipuladores de
L. wolbachii No patógeno animales (se ha descrito la transmisión en niños que manejan cachorros
L. biflexa No patógeno y en cuidadores de perros). El contacto indirecto es más frecuente, y es
L. vanthielli No patógeno responsable de la enfermedad después de la exposición a suelo mojado
L. terpstrae No patógeno o agua. La inmensa mayoría de los casos se adquiere por esta vía en los
L. yanagawae No patógeno trópicos, ya sea por exposición ocupacional al agua, como en el cultivo
L. idonii No patógeno
de arroz o de malanga, o por la exposición a terreno húmedo y agua
durante actividades de ocio.
L. inadai No determinado
La exposición recreativa se ha hecho relativamente más importante,
L. fainei No determinado
muchas veces asociada a turismo de aventura en áreas endémicas tropi-
L. broomii No determinado
cales. Se han producido varios brotes extensos transmitidos por el agua,
L. licerasiae No determinado con unas tasas de ataque de hasta el 42%, originados en una única fuente,
Descargado para Alex Castañeda (acastanedas1@upao.edu.pe) en Antenor Orrego Private University de ClinicalKey.es por Elsevier en mayo 22, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2866
poco después de acontecimientos deportivos24,25. En los últimos años cen un superantígeno que puede producir activación inespecífica de los
ha habido un aumento de casos de leptospirosis entre los perros de las linfocitos T en personas susceptibles. Se han propuesto otros mecanis-
regiones orientales de Norteamérica y en el medio oeste26 asociado a un mos inmunitarios, como inmunocomplejos circulantes, anticuerpos
cambio de los serovares predominantes que producen la enfermedad27,28.
Parte III  Agentes etiológicos de las enfermedades infecciosas

anticardiolipídicos y anticuerpos antiplaquetarios, aunque no se ha


Los fabricantes de vacunas veterinarias han respondido a este problema demostrado su importancia. Aunque los mecanismos inmunitarios o
autorizando nuevas vacunas caninas que contienen estos nuevos serovares. autoinmunitarios pueden influir en algunos casos de uveítis por leptos-
piras40, en un elevado porcentaje de estos pacientes se puede detectar
PATOGENIA ADN de leptospiras en el humor acuoso mediante PCR41.
Las leptospiras entran en el cuerpo a través de cortes y abrasiones, por Muchos de los estudios más recientes han analizado la participación
las membranas mucosas o las conjuntivas y por inhalación de aerosoles de las lipoproteínas de superficie en la patogenia de la leptospirosis42. La
de gotitas microscópicas. La deglución de agua de lago contaminada fue principal lipoproteína de la membrana externa, LipL32, está muy con-
el único factor de riesgo conductual identificado en un estudio de casos- servada en los distintos serovares patogénicos43. LipL32 es un objetivo
controles de un gran brote de leptospirosis en el triatlón de Springfield importante de la respuesta inmunitaria humana44 y parece que participa
de 199824. Sin embargo, después de la ingesta probablemente la mucosa en la patogenia de la nefritis tubulointersticial45. Las leptospiras virulen-
oral sea una vía de entrada más importante que el tracto intestinal. Tras tas responden al aumento de la osmolaridad de los tejidos del huésped
su entrada en el cuerpo hay diseminación hematógena generalizada, induciendo la expresión de las proteínas de superficie multifunciona­
alcanzándose unos niveles de hasta 106 leptospiras por milímetro de les Lig que median las interacciones con la fibronectina, el fibrinógeno y
sangre, medidos de forma cuantitativa mediante la reacción en cadena otros factores de la matriz extracelular46. Las proteínas Lig son antígenos
de la polimerasa (PCR)29. Los microorganismos atraviesan rápidamente tempranos; en fases tempranas de la infección se elaboran anticuerpos
las membranas tisulares, dando lugar a la invasión del sistema nervioso inmunoglobulina M (IgM) frente a sus repeticiones similares a inmuno-
central y del humor acuoso del ojo. La migración transendotelial de las globulinas, lo que ofrece un abordaje para mejorar la detección de la
espiroquetas es facilitada por una vasculitis sistémica, que explica un infección aguda47. La proteína LenA similar a la endostatina se une a
amplio espectro de enfermedad clínica. Se puede producir lesión vascular la proteína reguladora del complemento, factor H, lo que indica una
grave, que da lugar a hemorragia pulmonar, isquemia de la corteza renal y participación importante en la resistencia sérica48.
necrosis de las células epiteliales tubulares, y destrucción de la arquitectura
hepática, que produce ictericia y lesión hepatocelular, con o sin necrosis30. MANIFESTACIONES CLÍNICAS
No se conoce por completo el mecanismo mediante el cual las leptos- La infección leptospirósica se asocia a un amplio espectro de gravedad,
piras producen la enfermedad. Entre los posibles factores de virulencia se que varía desde enfermedad subclínica seguida por seroconversión hasta
incluyen mecanismos inmunitarios, producción de toxinas, adhesinas y dos síndromes reconocibles clínicamente: una enfermedad sistémica
otras proteínas de superficie. La susceptibilidad de los seres humanos a la autolimitada, que se ve en aproximadamente el 90% de las infecciones,
leptospirosis se puede relacionar con un reconocimiento inadecuado del y una enfermedad grave y potencialmente mortal, que se acompaña por
LPS de las leptospiras por el sistema inmunitario innato31,32. El receptor cualquier combinación de insuficiencia renal, insuficiencia hepática y
tipo Toll (TLR) 4 humano, que responde a concentraciones muy bajas neumonitis con diátesis hemorrágica2,6,7. En algunos pacientes la enfer-
de LPS de gramnegativos (endotoxina), parece ser incapaz de unirse medad tiene dos fases distintas: una fase septicémica inicial a la que sigue
al LPS de las leptospiras32,33, tal vez debido al residuo fosfato metilado una disminución transitoria de la fiebre, seguida por una fase inmune en
específico de su lípido A34. A diferencia del TLR4 humano, el TLR4 del la cual aparecen los síntomas graves. Sin embargo, en muchos casos no
ratón puede reconocer el LPS de la leptospira, y se ha demostrado que es evidente la distinción entre estas dos fases; además, muchos pacientes
desempeña un papel fundamental en la prevención de la infección mortal tienen únicamente el inicio de la segunda fase de la enfermedad.
por leptospirosis en ratones33,35. La lesión hística directa también puede El período de incubación medio es de 10 días, con un intervalo de
deberse a la producción de toxinas hemolíticas, que pueden actuar como entre 5 y 14 días; puede ser difícil determinar las exposiciones precisas,
esfingomielinasas, fosfolipasas o proteínas formadoras de poros36,37. lo que da lugar a una imprecisión significativa en los períodos de incu-
Se ha propuesto que mecanismos inmunitarios influyen en la gra- bación estimados. La fase septicémica aguda de la enfermedad comienza
vedad de los síntomas38. La investigación del brote ya mencionado súbitamente con fiebre intermitente elevada (38 a 40 °C) y cefalea, escalo-
que se produjo tras un campeonato de triatlón identificó el antígeno fríos, temblores y mialgias; afectación conjuntival (ojo rojo sin secre-
leucocitario humano (HLA) DQ6 como factor de riesgo independiente ciones); dolor abdominal; anorexia, náuseas y vómitos; diarrea, y tos y
de leptospirosis39. La localización estructural de los polimorfismos de faringitis. Raras veces se produce una erupción cutánea maculopapular
HLA-DQ6 asociados a la enfermedad indicó que las leptospiras produ- pretibial (tabla 241-2). El derrame conjuntival y el dolor muscular a la

TABLA 241-2  Síntomas y signos al ingreso en pacientes con leptospirosis en series de casos extensas
PUERTO CHINA, VIETNAM, COREA, BARBADOS, SEYCHELLES, BRASIL, HAWÁI, INDIA,
RICO, 1963128 1965129 1973130 1987131 199051 1998132 199922 2001133 2002134
PORCENTAJE CON: (n = 208) (n = 168) (n = 93) (n = 150) (n = 88) (n = 75) (n = 93) (n = 353) (n = 74)
Ictericia 49 0 1,5 16 95 27 93 39 34
Anorexia — 46 — 80 85 — — 82 —
Cefalea 91 90 98 70 76 80 75 89 92
Derrame conjuntival 99 57 42 58 54 — 28,5 28 35
Vómitos 69 18 33 32 50 40 — 73 —
Mialgias 97 64 79 40 49 63 94 91 68
Artralgias — 36 — — — 31 — 59 12
Dolor abdominal — 26 28 40 43 41 — 51 —
Náuseas 75 29 41 46 37 — — 77 —
Deshidratación — — — — 37 — — — —
Tos 24 57 20 45 32 39 — — —
Hemoptisis 9 51 — 40 — 13 20 — 35
Hepatomegalia 69 28 15 17 27 — — 16 —
Linfadenopatía 24 49 21 — 21 — — — 15
Diarrea 27 20 29 36 14 11 — 53 —
Exantema 6 — 7 — 2 — — 8 12

Descargado para Alex Castañeda (acastanedas1@upao.edu.pe) en Antenor Orrego Private University de ClinicalKey.es por Elsevier en mayo 22, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2867

Capítulo 241  Género Leptospira (leptospirosis)


FIGURA 241-4  Naturaleza bifásica de la leptospirosis y estudios complementarios importantes en diferentes fases de la enfermedad. Las
muestras 1 y 2 para serología son muestras de fase aguda; 3 es una muestra en la fase de convalecencia que puede facilitar la detección de una respuesta
inmunitaria diferida, y 4 y 5 son muestras de seguimiento que pueden aportar información epidemiológica, como el probable serogrupo infectante. LCR, líquido
cefalorraquídeo. (Modificada de Turner LH. Leptospirosis. Br Med J. 1969;1:231-235; y de Levett PN. Leptospirosis. Clin Microbiol Rev. 2001;14:296-326.)

palpación, más llamativo en la pantorrilla y en la región lumbar, son La forma más distintiva de enfermedad grave que puede aparecer
los hallazgos físicos más característicos, aunque pueden aparecer en después de la fase aguda es la enfermedad de Weil, que se caracteriza por
una pequeña proporción de casos (v. tabla 241-2). Otros signos menos deterioro de la función hepática y renal. Los casos más graves pueden
frecuentes son linfadenopatía, esplenomegalia y hepatomegalia. La fase progresar directamente desde la fase aguda, sin la breve mejoría caracte-
aguda dura de 5 a 7 días. Los análisis de laboratorio habituales son ines- rística de los síntomas, hasta una enfermedad fulminante, con fiebre por
pecíficos, aunque son indicativos de una infección bacteriana. Se pueden encima de 40 °C e inicio rápido de insuficiencia hepática, insuficiencia
cultivar leptospiras en la sangre y el líquido cefalorraquídeo (LCR) renal aguda, neumonitis hemorrágica, arritmias cardíacas y colapso
durante la fase aguda de la enfermedad, aunque en esta fase los signos circulatorio7. La tasa de mortalidad en los pacientes que presentan la
meníngeos no son llamativos. También se pueden cultivar leptospiras en enfermedad grave ha variado desde un 5% hasta un 40%2,5,6,51. En un
la orina, comenzando aproximadamente 5-7 días después del inicio de estudio de 840 pacientes hospitalizados con leptospirosis grave (tasa
los síntomas (fig. 241-4). El análisis de orina muestra proteinuria leve y de letalidad del 14%) se encontró que el riesgo de muerte aumentaba
piuria, con o sin hematuria, y cilindros hialinos o granulosos. La muerte con la edad, especialmente en adultos de 40 años o mayores22,52. Se ha
es poco frecuente en la fase aguda de la enfermedad. encontrado que la alteración del estado mental es el principal factor
La fase inmunitaria de la enfermedad generalmente dura de 4 a 30 días predictivo de muerte22,53. Otros signos de mal pronóstico son insuficien-
(v. fig. 241-4). La desaparición de las leptospiras de la sangre y el cia renal aguda (oliguria, hiperpotasemia, creatinina sérica >3 mg/dl),
LCR coincide con la aparición de anticuerpos IgM7,49. Los microorganis- insuficiencia respiratoria (disnea, crepitantes pulmonares, infiltrados
mos se pueden detectar en casi todos los tejidos y órganos, y en la orina en la radiografía de tórax), hipotensión y arritmias22. En pacientes ictéri-
durante varias semanas, dependiendo de la gravedad de la enfermedad. cos la alteración de la función hepática es desproporcionada en relación
Además de los síntomas de la fase aguda descritos en el párrafo previo, con los hallazgos anatomopatológicos bastante leves e inespecíficos.
la fase inmune se puede caracterizar por cualquiera (o todos) de los La concentración sérica de bilirrubina conjugada puede aumentar hasta
siguientes síntomas y signos: ictericia, insuficiencia renal, arritmias 80 mg/dl, acompañada por elevaciones menores de las transaminasas
cardíacas, síntomas pulmonares, meningitis aséptica, derrame conjun- séricas, alanina aminotransferasa y aspartato aminotransferasa, que
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.

tival con o sin hemorragia, fotofobia, dolor ocular, dolor muscular a la raras veces son mayores de 200 U/l54. Esto contrasta claramente con la
palpación, adenopatías y hepatoesplenomegalia (v. tabla 241-2). El dolor hepatitis vírica. La ictericia se resuelve lentamente, aunque casi nunca se
abdominal no es infrecuente, y puede ser un indicador de pancreatitis. produce muerte por insuficiencia hepática si no hay insuficiencia renal.
La meningitis aséptica, con o sin síntomas, es característica de la fase En la autopsia se ven cambios degenerativos en los hepatocitos, puede
inmune de la enfermedad y aparece en hasta el 80% de los casos. En áreas haber hipertrofia de las células de Kupffer, la colestasis es evidente, y se
endémicas, una proporción significativa de todos los casos de meningitis observa eritrofagocitosis e infiltrados de células mononucleares55. No
aséptica puede deberse a infección leptospirósica50. Los pacientes sintomá- hay necrosis hepatocelular.
ticos consultan con cefalea pulsátil intensa, bitemporal y frontal, con o sin La afectación renal se caracteriza inicialmente por una forma hipo-
trastorno confusional. Hay pleocitosis linfocítica, con recuentos celulares potasémica no oligúrica específica de insuficiencia renal. Los datos
totales en general menores de 500/mm3. Las concentraciones de proteínas fundamentales son alteración de la reabsorción de sodio, aumento de la
en el LCR están moderadamente elevadas, entre 50 y 100 mg/ml; la con- llegada de sodio a la porción distal y pérdida de potasio. La alteración de
centración de glucosa en el LCR es normal. Pueden producirse con poca la reabsorción de sodio parece deberse a la pérdida selectiva del canal
frecuencia complicaciones neurológicas graves como meningoencefalitis, de sodio ENaC en el epitelio tubular proximal. La concentración de
hemiplejía, mielitis transversa y síndrome de Guillain-Barré5. nitrógeno ureico en sangre habitualmente es menor de 100 mg/dl y la
Descargado para Alex Castañeda (acastanedas1@upao.edu.pe) en Antenor Orrego Private University de ClinicalKey.es por Elsevier en mayo 22, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2868
concentración sérica de creatinina habitualmente es menor de 2-8 mg/dl incluye extrasístoles ventriculares y taquicardia ventricular64. La fibri-
durante la fase aguda de la enfermedad56. Se produce trombocitopenia lación auricular se asocia a enfermedad más grave65. Puede producirse
sin coagulación intravascular diseminada, que puede acompañar a la dis- súbitamente colapso cardiovascular con shock, que puede ser mortal si
función renal progresiva57. La biopsia renal muestra nefritis intersticial
Parte III  Agentes etiológicos de las enfermedades infecciosas

no se administra un tratamiento de soporte intensivo. En la autopsia se


aguda; también puede haber glomerulonefritis por inmunocomplejos58. observa miocarditis intersticial con afectación inflamatoria del sistema
Si no se reponen las pérdidas de electrólitos y de líquido los pacientes de conducción66; en el estudio autópsico también es frecuente observar
pueden tener insuficiencia renal oligúrica. En los casos mortales los arteritis coronaria aguda y aortitis67.
riñones están tumefactos y amarillos, con prominencia de los vasos
sanguíneos corticales30. Entre los hallazgos histológicos destaca un DIAGNÓSTICO DE LABORATORIO
infiltrado tubulointersticial mixto difuso de células inflamatorias de Métodos de detección directos
linfocitos, células plasmáticas, macrófagos y leucocitos polimorfonu- Se ha utilizado para el diagnóstico la visualización directa de las leptos-
cleares, acompañado de áreas focales de necrosis tubular55. piras en la sangre o la orina mediante el estudio microscópico de campo
El síndrome de hemorragia pulmonar grave (SHPG) puede ser una oscuro (tabla 241-3). Sin embargo, con frecuencia se confunden los
manifestación llamativa de la infección y se puede producir sin insufi- artefactos con leptospiras, y el método tiene valores bajos de sensibilidad
ciencia hepática ni renal59. Puede haber hemoptisis franca simultánea- (40,2%) y de especificidad (61,5%)68. Se han aplicado distintos métodos
mente al inicio de la tos durante la fase aguda de la enfermedad60. Sin para la detección directa, como tinción con inmunofluorescencia, tin-
embargo, la hemorragia con frecuencia no es evidente hasta que se ha ción con inmunoperoxidasa y tinción con plata. Estos métodos no se
intubado al paciente; se debe sospechar SHPG en pacientes con signos utilizan mucho debido a la ausencia de reactivos comerciales y a que su
de dificultad respiratoria, independientemente de que tengan o no sensibilidad es relativamente baja. Se ha intentado detectar el antígeno
hemoptisis. Cuando hay afectación pulmonar progresiva, las alteraciones de las leptospiras en sangre y orina, aunque sin un éxito significativo. Se
radiográficas que se ven con más frecuencia en los lóbulos inferiores han desarrollado muchos métodos de análisis mediante PCR69-71 y varios
evolucionan desde densidades nodulares pequeñas (en «copo de nieve») métodos de amplificación isotérmica mediada por bucle (LAMP)72-74
hasta infiltrados alveolares parcheados; es infrecuente la consolidación para detectar leptospiras, pero se han evaluado relativamente pocos
confluente, aunque puede aparecer61. La fisiopatología del SHPG en estudios clínicos prospectivos74,75 y no se han realizado estudios
es compatible con un síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA) multicéntricos de múltiples métodos de diagnóstico molecular. La
con lesión pulmonar difusa, deterioro del intercambio gaseoso y cambios principal ventaja de la PCR es la perspectiva de confirmar el diagnós-
hemodinámicos indicativos de shock séptico62. En la autopsia los pul- tico durante la fase aguda temprana (leptospirémica) de la enfermedad,
mones están muy congestionados y tienen áreas focales de hemorragia55. antes de la aparición de los anticuerpos IgM, cuando es probable que el
Histológicamente, la lesión del endotelio capilar produce congestión con tratamiento tenga su máxima utilidad76. Para el diagnóstico precoz
focos de hemorragia intersticial intraalveolar, lesión alveolar difusa y el suero o el plasma son el tipo de muestra óptima. La orina también se
desorganización grave del espacio aéreo63. Habitualmente no hay infil- puede utilizar para la PCR, pero la de pacientes graves con frecuencia
trados inflamatorios. está muy concentrada y puede inhibir las reacciones de la PCR. En los
Raras veces se produce insuficiencia cardíaca congestiva. Sin embar- casos fulminantes, en los que se produce la muerte antes de la serocon-
go, son frecuentes los cambios electrocardiográficos inespecíficos64. versión, la PCR puede tener mucha utilidad para el diagnóstico69,77. El
En más de la mitad de los pacientes a los que se realiza monitoriza- diagnóstico histológico (fig. 241-5) tradicionalmente se basaba en la
ción cardíaca continua se pueden observar arritmias cardíacas, como tinción mediante impregnación con plata3, pero la tinción inmunohisto­
fibrilación, flúter y taquicardia auricular e irritabilidad cardíaca, que química tiene mayor sensibilidad y especificidad78,79.

TABLA 241-3  Pruebas diagnósticas utilizadas habitualmente para la leptospirosis


PRUEBA SENSIBILIDAD*,† ESPECIFICIDAD*,† COSTE‡ VENTAJAS INCONVENIENTES§ BIBLIOGRAFÍA
Cultivo 5-50% 100% ++ Ofrece evidencia definitiva. Lento; requiere bastante Levett; OMS98
Aplicable al diagnóstico experiencia
en humanos y en animales
Microscopia de campo 104 bacterias/ml Baja; confusión con + Diagnóstico rápido y sencillo. Poco fiable; requiere Levett, 20015;
oscuro fibras proteicas Aplicable al diagnóstico confirmación OMS98
en humanos y en animales
Prueba de aglutinación 90% >90% +++ Prueba de referencia||. Requiere un panel de Levett, 20015;
microscópica (MAT) Aplicable al diagnóstico antígenos vivos, difícil OMS98
en humanos y en animales (experiencia), laboriosa.
Problemas con los animales
portadores seronegativos
Análisis de >90% 88-95% ++ Rentable y relativamente Serología, requiere OMS98
inmunoabsorción rápido (1-2 h) confirmación mediante MAT
ligado a enzimas
(ELISA)-IgM
Prueba de aglutinación 82% 95% ++ Fácil, rápido (30 s), rentable Serología, requiere OMS98
en látex confirmación mediante MAT
Pruebas de flujo lateral 81% 96% ++ Fácil, rápido (10 min), sangre Serología, requiere OMS98
capilar, rentable confirmación mediante MAT
Reacción en cadena 100% 93% +++ Diagnóstico precoz. Pocas pruebas validadas, Ahmed y cols.,
de la polimerasa Aplicable al diagnóstico sofisticada, equipamiento 201176
(PCR) en tiempo real en humanos y en animales costoso, requiere
experiencia
*La sensibilidad y la especificidad dependen en gran medida de una serie de factores: del estadio de la enfermedad, del tipo y fabricante de la prueba y del panel de materiales
clínicos utilizados para el análisis5,135.

La sensibilidad del cultivo depende principalmente de la vía y del tiempo que tarda en llegar la muestra al laboratorio. La MAT es la prueba de referencia, correspondiéndole
una sensibilidad del 100%; sin embargo, al compararla con el cultivo esta prueba no es óptima. Las sensibilidades de las otras pruebas serológicas se comparan con la MAT.

Excluidos los costes del equipamiento.
§
La serología tiene el inconveniente de que detecta los anticuerpos 7-10 días después del comienzo de la enfermedad; para entonces es demasiado tarde para el tratamiento
antibiótico, que debería instaurarse en los 4 primeros días.
||
Para la confirmación serológica es necesario analizar muestras de plasma tanto de la fase aguda como de la fase de convalecencia, para detectar seroconversión o un
aumento significativo en los títulos.
Modificada de Hartskeerl RA, Collares-Pereira M, Ellis WA. Emergence, control and re-emerging leptospirosis: dynamics of infection in the changing world. Clin Microbiol
Infect. 2011;17:494-501.

Descargado para Alex Castañeda (acastanedas1@upao.edu.pe) en Antenor Orrego Private University de ClinicalKey.es por Elsevier en mayo 22, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2869

TABLA 241-4  Antimicrobianos recomendados


para el tratamiento y la quimioprofilaxis
de la leptospirosis

Capítulo 241  Género Leptospira (leptospirosis)


INDICACIÓN COMPUESTO DOSIS
Quimioprofilaxis Doxiciclina 200 mg v.o. una vez a la semana
Tratamiento de la Doxiciclina 100 mg 2 veces al día v.o.
leptospirosis leve Ampicilina 500-750 mg c/6 horas v.o.
Amoxicilina 500 mg c/6 horas v.o.
Tratamiento de Penicilina G 1,5 MU i.v. c/6 horas
la leptospirosis Ceftriaxona 1 g i.v. c/24 horas
moderada o grave Ampicilina 0,5-1 g i.v. c/6 horas

técnicas91-94. Además del tipaje molecular se ha estudiado la espectrome-


tría de masas de desorción/ionización láser asistida por matriz acoplada
a un analizador de tiempo de vuelo (MALDI-TOF) para identificar
Leptospira en las muestras95.

MÉTODOS DE DETECCIÓN
INDIRECTOS
La mayoría de los casos de leptospirosis se diagnostican mediante serolo-
gía. El método de análisis estándar de referencia es la prueba de aglutina-
ción microscópica (MAT), en la que se hacen reaccionar antígenos vivos
que representan diferentes serogrupos de leptospiras con muestras de
suero y después se examinan mediante microscopia de campo oscuro para
detectar aglutinación9. Debido a las variaciones regionales en las cepas que
producen la infección se consideró importante incluir los serovares locales
en los paneles de MAT de cada laboratorio. Hace poco se ha cuestiona-
do este punto de vista96. La MAT es una prueba compleja de mantener,
realizar e interpretar, y es fundamental que el laboratorio participe en un
programa de evaluación de competencia que garantice su precisión97. El
uso de MAT está restringido a algunos laboratorios de referencia.
FIGURA 241-5  Cortes de riñón teñidos con tinción de plata (A) y tinción Se define un caso de leptospirosis con confirmación serológica por un
inmunohistoquímica (B) que muestran la presencia de múltiples leptospiras aumento de cuatro veces del título de MAT frente a uno o más serovares
en los túbulos. (A por cortesía del Dr. Martin Hicklin, Public Health Image entre muestras de suero de fase aguda y de convalecencia realizadas en
Library, Centers for Disease Control and Prevention; B por cortesía de Juanne paralelo98. Un único título de al menos 1 : 800 en presencia de síntomas
Layne, University of the West Indies, Barbados.) compatibles es un dato sólido a favor de una infección reciente o actual99.
Sugiere una infección reciente o actual un título único de al menos
1 : 200 obtenido después del inicio de los síntomas100. Son frecuentes las
Aislamiento e identificación seroconversiones tardías, de modo que hasta el 10% de los pacientes
Las leptospiras se pueden aislar de la sangre, el LCR y los líquidos de no tienen seroconversión en los 30 días siguientes al inicio del cuadro
dializado peritoneal durante los primeros 10 días de la enfermedad. Las clínico. Puede haber anticuerpos con reacción cruzada en relación con
muestras se deben obtener mientras el paciente está febril y antes del sífilis, fiebre recurrente, enfermedad de Lyme, hepatitis vírica, infección
inicio del tratamiento antibiótico. Se deben inocular directamente una por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), legionelosis y
o dos gotas de sangre en el medio de cultivo a la cabecera del paciente. enfermedades autoinmunitarias101.
Se ha descrito la supervivencia de leptospiras en medios de hemocultivo La interpretación de la MAT se complica por la reacción cruzada
comerciales o en muestras de sangre refrigeradas durante varios días80,81. entre diferentes serogrupos, especialmente en muestras de fase aguda5.
La orina se puede cultivar después de la primera semana de enfermedad. La reactividad cruzada en muestras agudas se puede atribuir a los anti-
Las muestras se deben recoger en condiciones asépticas en recipientes cuerpos IgM, que pueden persistir durante varios años102. La MAT es
estériles y sin conservantes, y se deben procesar poco tiempo después de la un método de análisis específico de serogrupo y no se debe utilizar para
obtención; se obtienen los mejores resultados cuando el retraso es menor inferir la identidad del serovar infectante15. Sin embargo, el conocimiento
de 1 hora porque las leptospiras no sobreviven bien en entornos ácidos9. del probable serogrupo puede tener utilidad epidemiológica para deter-
Los cultivos se realizan en medios con albúmina y polisorbato, como minar las posibles exposiciones a reservorios animales.
el EMJH (Ellinghausen-McCullough-Johnson-Harris)82, que está dis- La aplicación diagnóstica de la MAT está limitada por su sensibi-
ponible comercialmente. Los cultivos primarios se realizan en un medio lidad relativamente baja cuando se estudian muestras de suero en fase
semisólido (agar al 0,2%), al que habitualmente se añade 5-fluorouracilo aguda103. Otros métodos de análisis mediante aglutinación que detectan
como agente selectivo. Los cultivos se incuban a 30 °C durante varias inmunoglobulinas totales, como el método de aglutinación indirecta,
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.

semanas porque el crecimiento inicial puede ser lento. tienen valores de sensibilidad similarmente bajos en muestras de fase
Las leptospiras aisladas se identifican hasta el nivel de serovar aguda, aunque tienen elevadas sensibilidades de caso cuando se analizan
mediante métodos serológicos tradicionales83,84. La disponibilidad de muestras de las fases aguda y de convalecencia104. Los anticuerpos IgM
estas técnicas está limitada a algunos laboratorios de referencia. No se pueden detectar después de aproximadamente el quinto día de la
obstante, los métodos moleculares como la electroforesis en gel de enfermedad, y se dispone de métodos para la detección de IgM en diver-
campo pulsado se muestran prometedores en cuanto a la identificación sos formatos104-107. El uso de estos métodos como pruebas de cribado
rápida de la mayoría de las muestras85. La identificación de la especie ofrece la posibilidad de mejorar la capacidad diagnóstica de muchos
se consigue mediante la secuenciación del gen 16S de ARNr en las laboratorios, particularmente en países en vías de desarrollo, en los que
muestras14 o secuenciando los productos directamente por PCR76,86. Se se producen la mayoría de los casos de leptospirosis108.
están aplicando potentes técnicas moleculares, como la tipificación de
la secuencia de múltiples locus (MLST) y el análisis de múltiples locus TRATAMIENTO
con número variable de repeticiones en tándem (MLVA), al análisis El tratamiento antibiótico se debe iniciar tan pronto como se plantee la
epidemiológico de la leptospirosis87-90. A medida que van surgiendo sospecha durante la evolución de la enfermedad. Se han realizado pocos
más datos sobre el genoma se van estandarizando cada vez más estas estudios aleatorizados o controlados con un placebo109-112, y los que se
Descargado para Alex Castañeda (acastanedas1@upao.edu.pe) en Antenor Orrego Private University de ClinicalKey.es por Elsevier en mayo 22, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2870
han realizado han dado resultados contradictorios. Puede ser difícil protectoras adecuadas dependen de la actividad, aunque incluyen llevar
demostrar los efectos beneficiosos terapéuticos de los antibióticos en botas, gafas protectoras, ropa protectora y guantes de goma. En los
poblaciones en las que los pacientes consultan para recibir asistencia entornos tropicales caminar descalzo es un factor de riesgo frecuente117.
Parte III  Agentes etiológicos de las enfermedades infecciosas

médica con enfermedad tardía o grave, o ambas. Sin embargo, la enfer- La inmunización del ganado y de los animales de compañía con
medad grave habitualmente se trata con penicilina por vía intravenosa, y vacunas muertas es una práctica habitual, tanto para prevenir la enfer-
la enfermedad leve, con doxiciclina oral (tabla 241-4). Se ha demostrado medad como para reducir la exposición en humanos. Para mantener
que la ceftriaxona una vez al día es tan eficaz como la penicilina113. Se la inmunidad es necesaria la revacunación periódica (habitualmente
han descrito reacciones de Jarisch-Herxheimer en pacientes tratados con anual)118. Además, aunque estas vacunas previenen la enfermedad,
penicilina114. Se debe monitorizar a los pacientes tratados con penicilina tal vez no prevengan la infección y la colonización renal; por tanto,
debido al aumento de la morbilidad y la mortalidad de dichas reacciones. en ocasiones tienen poco efecto sobre el mantenimiento y la trans-
El tratamiento de soporte es fundamental en los pacientes hospita- misión de la enfermedad dentro de la población animal en la que se
lizados. Los pacientes con nefropatía temprana con disfunción renal aplican. Las vacunas bovinas y porcinas que se utilizan actualmente en
de gasto elevado e hipopotasemia deben recibir repleción de volumen Estados Unidos contienen los serovares Icterohaemorrhagiae, Canicola,
intensiva y suplementos de potasio para evitar la deshidratación grave Grippotyphosa, Pomona y Hardjo, mientras que las vacunas caninas
y la necrosis tubular aguda56. En los pacientes que progresan hasta contienen todos los serovares excepto Hardjo. Las nuevas vacunas para
insuficiencia renal oligúrica el inicio rápido de la hemodiálisis reduce uso bovino estimulan una respuesta de mecanismo celular de tipo 1
la mortalidad, y habitualmente es necesario sólo a corto plazo. La dis- frente al serovar Hardjo119,120 y parecen proteger frente a la colonización
función renal producida por la leptospirosis habitualmente es reversible renal y la eliminación urinaria121.
por completo115. Los pacientes que precisan ventilación por SHPG tienen La inmunización de seres humanos no se realiza de forma habitual.
disminución de la distensibilidad pulmonar y se les debe tratar como En Francia se dispone de una vacuna que contiene el serovar Icterohae-
casos de SDRA. Se ha demostrado que las estrategias de ventilación morrhagiae para trabajadores de ocupaciones de riesgo elevado122 y se ha
protectora, como volúmenes circulantes bajos (<6 ml/kg) para evitar la desarrollado una vacuna para uso humano en Cuba123. La inmunización
lesión alveolar debida a las presiones de ventilación elevadas, mejoran se ha utilizado más en países asiáticos para prevenir las epidemias a gran
considerablemente las tasas de supervivencia116. escala en trabajadores agrícolas.
En las personas que inevitablemente estarán expuestas a leptospiras en
PREVENCIÓN entornos endémicos se recomienda la quimioprofilaxis (v. tabla 241-4).
La prevención de la leptospirosis se puede conseguir evitando las Se ha demostrado que la doxiciclina semanal (200 mg) es eficaz en
exposiciones de riesgo elevado, adoptando medidas de protección, con personal militar sin exposición previa al que se sometió a entrenamiento
inmunización y mediante el uso de quimioprofilaxis, en combinaciones en la selva124. Se ha estudiado la profilaxis con doxiciclina después de
variables dependiendo de las circunstancias ambientales y del grado de unas lluvias excesivas en poblaciones locales de áreas endémicas125,126.
actividad humana. La enfermedad sintomática se redujo significativamente en un estudio,
Las exposiciones de riesgo elevado incluyen inmersión en agua fría, aunque se encontraron datos serológicos de infección por igual en
como en la natación, y contacto con animales y sus líquidos corporales2. pacientes y controles125. Las limitaciones de la doxiciclina son la induc-
La eliminación de las leptospiras del entorno no es una solución prácti- ción de fotosensibilidad, la elevada frecuencia de efectos secundarios
ca, aunque la reducción del contacto directo con animales posiblemente digestivos, las restricciones de calcio en la dieta y su contraindicación en
infectados y el contacto directo con el suelo y el agua contaminados por mujeres gestantes y niños. La sensibilidad in vitro de las leptospiras a la
orina sigue siendo la estrategia preventiva más eficaz de que se dispone. azitromicina127 y su semivida más prolongada indican que este fármaco
La aplicación constante de medidas para el control de los roedores es sería una alternativa razonable a la doxiciclina; sin embargo, se deben
importante para reducir la magnitud de la contaminación. Las medidas realizar estudios clínicos para validar este abordaje.

Bibliografía seleccionada 29. Agampodi SB, Matthias MA, Moreno AC, Vinetz JM. Utility
of quantitative polymerase chain reaction in leptospirosis
57. Edwards CN, Nicholson GD, Hassell TA, et al. Thrombocy-
topenia in leptospirosis: the absence of evidence for dis-
diagnosis: association of level of leptospiremia and clini- seminated intravascular coagulation. Am J Trop Med Hyg.
La bibliografía completa está disponible en studentconsult.es.
cal manifestations in Sri Lanka. Clin Infect Dis. 2012;54: 1986;35:352-354.
1249-1255. 59. Zaki SR, Shieh WJ. Leptospirosis associated with outbreak of
5. Levett PN. Leptospirosis. Clin Microbiol Rev. 2001;14:296-326.
30. Arean VM. The pathologic anatomy and pathogenesis of acute febrile illness and pulmonary haemorrhage, Nicaragua,
6. Edwards GA, Domm BM. Human leptospirosis. Medicine.
fatal human leptospirosis (Weil’s disease). Am J Pathol. 1995. The Epidemic Working Group at Ministry of Health
1960;39:117-156.
1962;40:393-423. in Nicaragua. Lancet. 1996;347:535-536.
7. Feigin RD, Anderson DC. Human leptospirosis. CRC Crit
38. Abdulkader RC, Daher EF, Camargo ED, et al. Leptospirosis 60. Yersin C, Bovet P, Merien F, et al. Pulmonary haemorrhage as
Rev Clin Lab Sci. 1975;5:413-467.
severity may be associated with the intensity of humoral a predominant cause of death in leptospirosis in Seychelles.
9. Levett PN. Leptospira. In: Versalovic J, et al., eds. Manual of
immune response. Rev Inst Med Trop Sao Paulo. 2002;44: Trans R Soc Trop Med Hyg. 2000;94:71-76.
Clinical Microbiology. 10th ed. Washington, DC: American
79-83. 61. Im JG, Yeon KM, Han MC, et al. Leptospirosis of the lung:
Society for Microbiology Press; 2011:916-923.
39. Lingappa J, Kuffner T, Tappero J, et al. HLA-DQ6 and inges- radiographic findings in 58 patients. Am J Roentgenol.
15. Levett PN. Usefulness of serologic analysis as a predictor of
tion of contaminated water: possible gene-environment 1989;152:955-959.
the infecting serovar in patients with severe leptospirosis.
interaction in an outbreak of leptospirosis. Genes Immun. 63. Nicodemo AC, Duarte MI, Alves VA, et al. Lung lesions in
Clin Infect Dis. 2003;36:447-452.
2004;5:197-202. human leptospirosis: microscopic, immunohistochemical,
16. Ren SX, Fu G, Jiang XG, et al. Unique physiological and
41. Chu KM, Rathinam R, Namperumalsamy P, Dean D. Iden- and ultrastructural features related to thrombocytopenia.
pathogenic features of Leptospira interrogans revealed by
tification of Leptospira species in the pathogenesis of uveitis Am J Trop Med Hyg. 1997;56:181-187.
whole-genome sequencing. Nature. 2003;422:888-893.
and determination of clinical ocular characteristics in south 67. de Brito T, Morais CF, Yasuda PH, et al. Cardiovascular
17. Nascimento AL, Ko AI, Martins EA, et al. Comparative
India. J Infect Dis. 1998;177:1314-1321. involvement in human and experimental leptospirosis:
genomics of two Leptospira interrogans serovars reveals
42. Haake DA. Spirochaetal lipoproteins and pathogenesis. pathologic findings and immunohistochemical detection
novel insights into physiology and pathogenesis. J Bacteriol.
Microbiology. 2000;146:1491-1504. of leptospiral antigen. Ann Trop Med Parasitol. 1987;81:
2004;186:2164-2172.
43. Haake DA, Suchard MA, Kelley MM, et al. Molecular evolu- 207-214.
18. Bulach DM, Zuerne RL, Wilson P, et al. Genome reduction
tion and mosaicism of leptospiral outer membrane proteins 71. Slack A, Symonds M, Dohnt M, et al. Evaluation of a modi-
in Leptospira borgpetersenii reflects limited transmission
involves horizontal DNA transfer. J Bacteriol. 2004;186: fied Taqman assay detecting pathogenic Leptospira spp.
potential. Proc Natl Acad Sci U S A. 2006;103:14560-14565.
2818-2828. against culture and Leptospira-specific IgM enzyme-linked
21. Trevejo RT, Rigau-Perez JG, Ashford DA, et al. Epidemic
46. Choy HA, Kelley MM, Chen TL, et al. Physiological osmotic immunosorbent assay in a clinical environment. Diagn
leptospirosis associated with pulmonary hemorrhage-Nica-
induction of Leptospira interrogans adhesion: LigA and LigB Microbiol Infect Dis. 2007;57:361-366.
ragua, 1995. J Infect Dis. 1998;178:1457-1463.
bind extracellular matrix proteins and fibrinogen. Infect 74. Sonthayanon P, Chierakuhl W, Wuthikanen V, et al. Accu-
22. Ko AI, Galvao Reese M, Ribeiro Durado CM, et  al.
Immun. 2007;75:2441-2450. racy of loop-mediated isothermal amplification for diagnosis
Urban epidemic of severe leptospirosis in Brazil. Lancet.
47. Croda J, Ramos JG, Matsunaga J, et al. Leptospira immuno- of human leptospirosis in Thailand. Am J Trop Med Hyg.
1999;354:820-825.
globulin-like proteins as a serodiagnostic marker for acute 2011;84:614-620.
24. Morgan J, Bornstein SL, Karpati AM, et al. Outbreak of
leptospirosis. J Clin Microbiol. 2007;45:1528-1534. 75. Thaipadungpanit J, Chierakuhl W, Wuthikanen V, et al.
leptospirosis among triathlon participants and commu-
54. Edwards GA, Domm BM. Leptospirosis, II. Med Times. Diagnostic accuracy of real-time PCR assays targeting 16S
nity residents in Springfield, Illinois, 1998. Clin Infect Dis.
1966;94:1086-1095. rRNA and lipL32 genes for human leptospirosis in Thailand:
2002;34:1593-1599.
56. Abdulkader RC, Seguro AC, Malheiro PS, et al. Peculiar a case-control study. PLoS One. 2011;6:e16236.
25. Sejvar J, Bancroft E, Winthrop K, et al. Leptospirosis in
electrolytic and hormonal abnormalities in acute renal 76. Ahmed A, Grobusch MP, Klatser P, Hartskeerl R. Molecular
“Eco-Challenge” athletes, Malaysian Borneo, 2000. Emerg
failure due to leptospirosis. Am J Trop Med Hyg. 1996; approaches in the detection and characterization of Leptos-
Infect Dis. 2003;9:702-707.
54:1-6. pira. J Bacteriol Parasitol. 2011;S5-002.

Descargado para Alex Castañeda (acastanedas1@upao.edu.pe) en Antenor Orrego Private University de ClinicalKey.es por Elsevier en mayo 22, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2871
80. Haake DA, Dundoo M, Cader R, et al. Leptospirosis, antibodies in patients presenting with acute febrile illness 129. Wang CN, John L, Chang TF, et al. Studies on anicteric lep-
water sports, and chemoprophylaxis. Clin Infect Dis. in Barbados 1979-1989. Eur J Epidemiol. 2001;17:601-608. tospirosis. I. Clinical manifestations and antibiotic therapy.
2002;34:e40-e43. 109. McClain JBL, Ballou WR, Harrison SM, Steinweg DL. Chinese Med J. 1965;84:283-291.
85. Galloway RL, Levett PN. Application and validation of PFGE Doxycycline therapy for leptospirosis. Ann Intern Med. 130. Berman SJ, Tsai C, Holms K, et al. Sporadic anicteric leptos-

Capítulo 241  Género Leptospira (leptospirosis)


for serovar identification of Leptospira clinical isolates. PLoS 1984;100:696-698. pirosis in South Vietnam. A study of 150 patients. Ann Intern
Negl Trop Dis. 2010;4. 110. Edwards CN, Nicholson GD, Hassell TA, et al. Penici- Med. 1973;79:167-173.
90. Thaipadungpanit J, Wuthiekanun V, Chierakuhl W, et al. A llin therapy in icteric leptospirosis. Am J Trop Med Hyg. 131. Park YK, Park SK, Rhee YK, Kang SK. Leptospirosis in
dominant clone of Leptospira interrogans associated with an 1988;39:388-390. Chonbuk Province of Korea in 1987. Korean J Intern Med.
outbreak of human leptospirosis in Thailand. PLoS Negl Trop 111. Watt G, Padre LP, Tuazon ML, et al. Placebo-controlled trial 1990;5:34-43.
Dis. 2007;1:e56. of intravenous penicillin for severe and late leptospirosis. 132. Yersin C, Bovet P, Merien F, et al. Human leptospirosis in
94. Boonsilp S, Thaipadungpanit J, Amornchai P, et al. A single Lancet. 1988;1:433-435. the Seychelles (Indian Ocean): a population-based study. Am
multilocus sequence typing (MLST) scheme for seven patho- 113. Panaphut T, Domrongkitchaiporn S, Vibhagool A, et al. Cef- J Trop Med Hyg. 1998;59:933-940.
genic Leptospira species. PLoS Negl Trop Dis. 2013;7:e1954. triaxone compared with sodium penicillin G for treatment 133. Katz AR, Ansdell VE, Effler PV, et al. Assessment of the
98. World Health Organization. Human Leptospirosis: Guidance of severe leptospirosis. Clin Infect Dis. 2003;36:1507-1513. clinical presentation and treatment of 353 cases of labo-
for Diagnosis, Surveillance and Control. Geneva: WHO; 2003. 124. Takafuji ET, Kirkpatrick JW, Miller RN, et al. An efficacy ratory-confirmed leptospirosis in Hawaii, 1974-1998. Clin
102. Cumberland P, Everard CO, Wheeler JG, Levett PN. trial of doxycycline chemoprophylaxis against leptospirosis. Infect Dis. 2001;33:1834-1841.
Persistence of anti-leptospiral IgM, IgG and agglutinating N Engl J Med. 1984;310:497-500.
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Descargado para Alex Castañeda (acastanedas1@upao.edu.pe) en Antenor Orrego Private University de ClinicalKey.es por Elsevier en mayo 22, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2871.e1

Bibliografía completa 31. de Souza L, Koury MC. Isolation and biological activities
of endotoxin from Leptospira interrogans. Can J Microbiol.
59. Zaki SR, Shieh WJ. Leptospirosis associated with outbreak of
acute febrile illness and pulmonary haemorrhage, Nicaragua,
1. World Health Organization. Leptospirosis worldwide, 1999.
1992;38:284-289. 1995. The Epidemic Working Group at Ministry of Health
Wkly Epidemiol Rec. 1999;74:237-242.
32. Werts C, Tapping RI, Mathison JC, et al. Leptospiral endoto- in Nicaragua. Lancet. 1996;347:535-536.
2. Faine S, Adler B, Bolin C, Perolat P. Leptospira and leptos-

Capítulo 241  Género Leptospira (leptospirosis)


xin activates cells via a TLR2-dependent mechanism. Nature 60. Yersin C, Bovet P, Merien F, et al. Pulmonary haemorrhage as
pirosis. 2nd ed. Melbourne: Australia: MediSci; 1999.
Immunol. 2001;2:346-352. a predominant cause of death in leptospirosis in Seychelles.
3. Stimson AM. Note on an organism found in yellow-fever
33. Nahori MA, Fournie-Amazouz E, Que-Gewirth NS, et al. Trans R Soc Trop Med Hyg. 2000;94:71-76.
tissue. Public Health Reports (Washington, DC). 1907;22:541.
Differential TLR recognition of leptospiral lipid A and 61. Im JG, Yeon KM, Han MC, et al. Leptospirosis of the lung:
4. Everard JD. Leptospirosis. In: Cox FEG, ed. The Wellcome
lipopolysaccharide in murine and human cells. J Immunol. radiographic findings in 58 patients. Am J Roentgenol.
Trust Illustrated History of Tropical Diseases. London: The
2005;175:6022-6031. 1989;152:955-959.
Wellcome Trust; 1996:111-119:416-418.
34. Que-Gewirth NS, Ribeiro AA, Kalb SR, et al. A methy- 62. Marotto PC, Marotta PC, Nascimento CM, et al. Acute lung
5. Levett PN. Leptospirosis. Clin Microbiol Rev. 2001;14:296-326.
lated phosphate group and four amide-linked acyl chains injury in leptospirosis: clinical and laboratory features, out-
6. Edwards GA, Domm BM. Human leptospirosis. Medicine.
in Leptospira interrogans lipid A. J Biol Chem. 2004;279: come, and factors associated with mortality. Clin Infect Dis.
1960;39:117-156.
25420-25429. 1999;29:1561-1563.
7. Feigin RD, Anderson DC. Human leptospirosis. CRC Crit
35. Chassin C, Picardeau M, Goujon JM, et al. TLR4- and 63. Nicodemo AC, Duarte MI, Alves VA, et al. Lung lesions in
Rev Clin Lab Sci. 1975;5:413-467.
TLR2-mediated B cell responses control the clearance of human leptospirosis: microscopic, immunohistochemical,
8. Goldstein SF, Charon NW. Motility of the spirochete Leptos-
the bacterial pathogen. Leptospira interrogans. J Immunol. and ultrastructural features related to thrombocytopenia.
pira. Cell Motil Cytoskeleton. 1988;9:101-110.
2009;183:2669-2677. Am J Trop Med Hyg. 1997;56:181-187.
9. Levett PN. Leptospira. In: Versalovic J, eds. Manual of
36. Lee SH, Kim S, Park SC, Kim MJ. Cytotoxic activities of 64. Parsons M. Electrocardiographic changes in leptospirosis.
Clinical Microbiology. 10th ed, Washington, DC: American
Leptospira interrogans hemolysin SphH as a pore-forming Br Med J. 1965;2:201-203.
Society for Microbiology Press; 2011:916-923.
protein on mammalian cells. Infect Immun. 2002;70:315-322. 65. Sacramento E, Lopes AA, Costa E, et al. Electrocardiographic
10. Bulach DM, Kalambaheti T, de la Pena-Moctezuma A, Adler
37. Narayanavari SA, Kishore NM, Sritharan M. Structural alterations in patients hospitalized with leptospirosis in the
B. Lipopolysaccharide biosynthesis in Leptospira. J Molec
analysis of the Leptospiral sphingomyelinases: in silico Brazilian city of Salvador. Arq Bras Cardiol. 2002;78:267-270.
Microbiol Biotechnol. 2000;2:375-380.
and experimental evaluation of Sph2 as an Mg-dependent 66. Arean VM. Leptospiral myocarditis. Lab Investig. 1957;6:
11. Yasuda PH, Steigerwalt AG, Sulzer KR, et al. Deoxyribonu-
sphingomyelinase. J Mol Microbiol Biotechnol. 2012;22: 462-471.
cleic acid relatedness between serogroups and serovars in
24-34. 67. de Brito T, Morais CF, Yasuda PH, et al. Cardiovascular invol-
the family Leptospiraceae with proposals for seven new
38. Abdulkader RC, Daher EF, Camargo ED, et al. Leptospirosis vement in human and experimental leptospirosis: pathologic
Leptospira species. Int J Syst Bacteriol. 1987;37:407-415.
severity may be associated with the intensity of humoral findings and immunohistochemical detection of leptospiral
12. Brenner DJ, Kaufman AF, Sulzer KR, et al. Further determi-
immune response. Rev Inst Med Trop Sao Paulo. 2002;44: antigen. Ann Trop Med Parasitol. 1987;81:207-214.
nation of DNA relatedness between serogroups and serovars
79-83. 68. Vijayachari P, Sugunan AP, et al. Evaluation of darkground
in the family Leptospiraceae with a proposal for Leptospira
39. Lingappa J, Kuffner T, Tappero J, et al. HLA-DQ6 and inges- microscopy as a rapid diagnostic procedure in leptospirosis.
alexanderi sp. nov. and four new Leptospira genomospecies.
tion of contaminated water: possible gene-environment Indian J Med Res. 2001;114:54-58.
Int J Syst Bacteriol. 1999;49:839-858.
interaction in an outbreak of leptospirosis. Genes Immun. 69. Brown PD, Gravekamp C, Carrington DG, et al. Evaluation
13. Smythe L, Adler B, Hartskeeri RA, et al. Classification of
2004;5:197-202. of the polymerase chain reaction for early diagnosis of
Leptospira genomospecies 1, genomospecies 3, genomospecies
40. Plank R, Dean D. Overview of the epidemiology, micro- leptospirosis. J Med Microbiol. 1995;43:110-114.
4 and genomospecies 5 as Leptospira alstonii sp. nov., Leptos-
biology, and pathogenesis of Leptospira spp. in humans. 70. Merien F, Baranton G, Perolat P. Comparison of polymerase
pira vanthielii sp. nov., Leptospira terpstrae sp. nov., Leptospira
Microbes Infect. 2000;2:1265-1276. chain reaction with microagglutination test and culture for
yanagawae sp. nov., respectively. Int J Syst Evol Microbiol.
41. Chu KM, Rathinam R, Namperumalsamy P, Dean D. Iden- diagnosis of leptospirosis. J Infect Dis. 1995;172:281-285.
2013;63:1859-1862.
tification of Leptospira species in the pathogenesis of uveitis 71. Slack A, Symonds M, Dohnt M, et al. Evaluation of a modi-
14. Morey RE, Galloway RL, Bragg SL, et al. Species-specific
and determination of clinical ocular characteristics in south fied Taqman assay detecting pathogenic Leptospira spp.
identification of Leptospiraceae by 16S rRNA gene sequen-
India. J Infect Dis. 1998;177:1314-1321. against culture and Leptospira-specific IgM enzyme-linked
cing. J Clin Microbiol. 2006;44:3510-3516.
42. Haake DA. Spirochaetal lipoproteins and pathogenesis. immunosorbent assay in a clinical environment. Diagn
15. Levett PN. Usefulness of serologic analysis as a predictor of
Microbiology. 2000;146:1491-1504. Microbiol Infect Dis. 2007;57:361-366.
the infecting serovar in patients with severe leptospirosis.
43. Haake DA, Suchard MA, Kelley MM, et al. Molecular evolu- 72. Koizumi N, Nakajima C, Harunari T, et al. A new loop-
Clin Infect Dis. 2003;36:447-452.
tion and mosaicism of leptospiral outer membrane proteins mediated isothermal amplification method for rapid, simple,
16. Ren SX, Fu G, Jiang XG, et al. Unique physiological and
involves horizontal DNA transfer. J Bacteriol. 2004;186: and sensitive detection of Leptospira spp. in urine. J Clin
pathogenic features of Leptospira interrogans revealed by
2818-2828. Microbiol. 2012;50:2072-2074.
whole-genome sequencing. Nature. 2003;422:888-893.
44. Flannery B, Costa D, Carvalho FP, et al. Evaluation of recom- 73. Lin X, Chen Y, Lu Y, et al. Application of a loop-mediated
17. Nascimento AL, Ko AI, Martins EA, et al. Comparative
binant Leptospira antigen-based enzyme-linked immuno- isothermal amplification method for the detection of pat-
genomics of two Leptospira interrogans serovars reveals
sorbent assays for the serodiagnosis of leptospirosis. J Clin hogenic Leptospira. Diagn Microbiol Infect Dis. 2009;63:
novel insights into physiology and pathogenesis. J Bacteriol.
Microbiol. 2001;39:3303-3310. 237-242.
2004;186:2164-2172.
45. Yang CW, Wu MS, Pan MJ, et al. The Leptospira outer mem- 74. Sonthayanon P, Chierakuhl W, Wuthikanen V, et al. Accu-
18. Bulach DM, Zuerne RL, Wilson P, et al. Genome reduction
brane protein LipL32 induces tubulointerstitial nephritis- racy of loop-mediated isothermal amplification for diagnosis
in Leptospira borgpetersenii reflects limited transmission
mediated gene expression in mouse proximal tubule cells. of human leptospirosis in Thailand. Am J Trop Med Hyg.
potential. Proc Natl Acad Sci U S A. 2006;103:14560-14565.
J Am Soc Nephrol JASN. 2002;13:2037-2045. 2011;84:614-620.
19. Picardeau M, Bulach DM, Bouchier C, et al. Genome
46. Choy HA, Kelley MM, Chen TL, et al. Physiological osmotic 75. Thaipadungpanit J, Chierakuhl W, Wuthikanen V, et al.
sequence of the saprophyte Leptospira biflexa provides
induction of Leptospira interrogans adhesion: LigA and LigB Diagnostic accuracy of real-time PCR assays targeting 16S
insights into the evolution of Leptospira and the pathogenesis
bind extracellular matrix proteins and fibrinogen. Infect rRNA and lipL32 genes for human leptospirosis in Thailand:
of leptospirosis. PLoS One. 2008;3:e1607.
Immun. 2007;75:2441-2450. a case-control study. PLoS One. 2011;6:e16236.
20. Chou LF, Chen YT, Lu CW, et al. Sequence of Leptospira
47. Croda J, Ramos JG, Matsunaga J, et al. Leptospira immuno- 76. Ahmed A, Grobusch MP, Klatser P, Hartskeerl R. Molecular
santarosai serovar shermani genome and prediction of viru-
globulin-like proteins as a serodiagnostic marker for acute approaches in the detection and characterization of Leptos-
lence-associated genes. Gene. 2012;511:364-370.
leptospirosis. J Clin Microbiol. 2007;45:1528-1534. pira. J Bacteriol Parasitol. 2011;:S5-002.
21. Trevejo RT, Rigau-Perez JG, Ashford DA, et al. Epidemic
48. Stevenson B, Choy HA, Pinne M, et al. Leptospira interro- 77. Brown PD, Carrington DG, Gravekamp C, et al. Direct
leptospirosis associated with pulmonary hemorrhage-Nica-
gans endostatin-like outer membrane proteins bind host detection of leptospiral material in human postmortem
ragua. 1995. J Infect Dis. 1998;178:1457-1463.
fibronectin, laminin and regulators of complement. PLoS samples. Res Microbiol. 2003;154:581-586.
22. Ko AI, Galvao Reese M, Ribeiro Durado CM, et  al.
ONE. 2007;2:e1188. 78. Alves VAF, Vianna MR, Yasuda PH, DeBrito T. Detection
Urban epidemic of severe leptospirosis in Brazil. Lancet.
49. Turner LH, Leptospirosis I. Trans R Soc Trop Med Hyg. of leptospiral antigen in the human liver and kidney
1999;354:820-825.
1967;61:842-855. using an immunoperoxidase staining procedure. J Pathol.
23. Sasaki DM, Pang L, Minette HP, et al. Active surveillance
50. Silva HR, Tanajura GM, Tavares-Neto J, et al. [Aseptic 1987;151:125-131.
and risk factors for leptospirosis in Hawaii. Am J Trop Med
meningitis syndrome due to enterovirus and Leptospira 79. Guarner J, Shieh WJ, Morgan J, et al. Leptospirosis mimic-
Hyg. 1993;48:35-43.
sp in children of Salvador, Bahia]. Rev Soc Bras Med Trop. king acute cholecystitis among athletes participating in a
24. Morgan J, Bornstein SL, Karpati AM, et al. Outbreak of
2002;35:159-165. triathlon. Human Pathol. 2001;32:750-752.
leptospirosis among triathlon participants and commu-
51. Edwards CN, Nicholson GD, Hassell TA, et al. Leptospirosis 80. Haake DA, Dundoo M, Cader R, et al. Leptospirosis, water
nity residents in Springfield, Illinois. 1998. Clin Infect Dis.
in Barbados. A clinical study. West Ind Med J. 1990;39:27-34. sports, and chemoprophylaxis. Clin Infect Dis. 2002;34:
2002;34:1593-1599.
52. Lopes AA, Costa E, Costa Y, et al. Comparative study of e40-e43.
25. Sejvar J, Bancroft E, Winthrop K, et al. Leptospirosis in
the in-hospital case-fatality rate of leptospirosis between 81. Palmer MF, Zochowski WJ. Survival of leptospires in
“Eco-Challenge” athletes, Malaysian Borneo. 2000. Emerg
pediatric and adult patients of different age groups. Rev Inst commercial blood culture systems revisited. J Clin Pathol.
Infect Dis. 2003;9:702-707.
Med Trop Sao Paulo. 2004;46:19-24. 2000;53:713-714.
26. Ward MP, Glickman LT, Guptill LE. Prevalence of and risk
53. Esen S, Sunbul M, Leblebicioglu H, et al. Impact of clinical 82. Zuerner R. Laboratory maintenance of pathogenic Leptos-
factors for leptospirosis among dogs in the United States
and laboratory findings on prognosis in leptospirosis. Swiss pira. Curr Protoc Microbiol. 2005;:1:Chapter 12:Unit 12E.
and Canada: 677 cases (1970-1998). J Am Vet Med Assoc.
Med Wkly. 2004;134:347-352. 83. Dikken H, Kmety E, Serological typing methods of leptos-
2002;220:53-58.
54. Edwards GA, Domm BM. Leptospirosis, II. Med Times. pires. Bergan T, Norris R, eds. Methods in Microbiology, 11.
27. Prescott JF, McEwen B, Taylor J, et al. Resurgence of leptos-
1966;94:1086-1095. Salt Lake City, UT: Academic Press; 1978:260-295.
pirosis in dogs in Ontario: recent findings. Canad Vet J.
55. Zaki SR, Spiegel RA, Leptospirosis. Nelson AM, Horsburgh 84. Terpstra WJ. Typing Leptospira from the perspective of a
2002;43:955-961.
CR, eds. Pathology of Emerging Infections, 2. Washington, reference laboratory. Acta Leiden. 1992;60:79-87.
28. Brown CA, Roberts AW, Miller MA, et al. Leptospira inte-
DC: American Society for Microbiology Press; 1998:73-92. 85. Galloway RL, Levett PN. Application and validation of PFGE
rrogans serovar grippotyphosa infection in dogs. J Am Vet
56. Abdulkader RC, Seguro AC, Malheiro PS, et al. Peculiar elec- for serovar identification of Leptospira clinical isolates. PLoS
Med Assoc. 1996;209:1265-1267.
trolytic and hormonal abnormalities in acute renal failure Negl Trop Dis. 2010;:4.
29. Agampodi SB, Matthias MA, Moreno AC, Vinetz JM. Utility
due to leptospirosis. Am J Trop Med Hyg. 1996;54:1-6. 86. Perez J, Goarant C. Rapid Leptospira identification by direct
of quantitative polymerase chain reaction in leptospirosis
57. Edwards CN, Nicholson GD, Hassell TA, et al. Thrombocy- sequencing of the diagnostic PCR products in New Caledo-
diagnosis: association of level of leptospiremia and clinical
topenia in leptospirosis: the absence of evidence for dis- nia. BMC Microbiol. 2010;10:325.
manifestations in Sri Lanka. Clin Infect Dis. 2012;54:1249-1255.
seminated intravascular coagulation. Am J Trop Med Hyg. 87. Ahmed N, Devi SM, Valverde Mde L, et al. Multilocus
30. Arean VM. The pathologic anatomy and pathogenesis of
1986;35:352-354. sequence typing method for identification and genotypic
fatal human leptospirosis (Weil’s disease). Am J Pathol.
58. Lai KN, Aarons I, Woodroffe AJ, Clarkson AR. Renal lesions classification of pathogenic Leptospira species. Ann Clin
1962;40:393-423.
in leptospirosis. Aust N Z J Med. 1982;12:276-279. Microbiol Antimicrobials. 2006;5:28.

Descargado para Alex Castañeda (acastanedas1@upao.edu.pe) en Antenor Orrego Private University de ClinicalKey.es por Elsevier en mayo 22, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2871.e2
88. Salaun L, Merien F, Gurianova S, et al. Application of mul- 103. Cumberland P, Everard CO, Levett PN. Assessment of the 120. Brown RA, Blumerman S, Gay C, et al. Comparison of
tilocus variable-number tandem-repeat analysis for mole- efficacy of an IgM-ELISA and microscopic agglutination test three different leptospiral vaccines for induction of a type
cular typing of the agent of leptospirosis. J Clin Microbiol. (MAT) in the diagnosis of acute leptospirosis. Am J Trop Med 1 immune response to Leptospira borgpetersenii serovar
2006;44:3954-3962. Hyg. 1999;61:731-734. hardjo. Vaccine. 2003;21:4448-4458.
Parte III  Agentes etiológicos de las enfermedades infecciosas

89. Slack A, Symonds M, Dohnt M, Smythe L. An improved 104. Levett PN, Branch SL, Whittington CU, et al. Two methods 121. Bolin CA, Alt DP. Use of a monovalent leptospiral vaccine
multiple-locus variable number of tandem repeats analysis for rapid serological diagnosis of acute leptospirosis. Clin to prevent renal colonization and urinary shedding in cattle
for Leptospira interrogans serovar australis: a comparison Diagn Lab Immunol. 2001;8:349-351. exposed to Leptospira borgpetersenii serovar Hardjo. Am J
with fluorescent amplified fragment length polymorphism 105. Levett PN, Branch SL. Evaluation of two enzyme-linked Vet Res. 2001;62:995-1000.
analysis and its use to redefine the molecular epidemiology immunosorbent assay methods for detection of immuno- 122. Nardone A, Capek I, Baronton G, et al. Risk factors for
of this serovar in Queensland, Australia. J Med Microbiol. globulin M antibodies in acute leptospirosis. Am J Trop Med leptospirosis in metropolitan France: results of a national
2006;55:1549-1557. Hyg. 2002;66:745-748. case-control study, 1999-2000. Clin Infect Dis. 2004;39:
90. Thaipadungpanit J, Wuthiekanun V, Chierakuhl W, et al. A 106. Smits HL, Ananyina YV, Cheresky A, et al. International 751-753.
dominant clone of Leptospira interrogans associated with an multicenter evaluation of the clinical utility of a dipstick 123. Martinez R, Perez A, Quinones Mdel C, et al. [Efficacy and
outbreak of human leptospirosis in Thailand. PLoS Negl Trop assay for detection of Leptospira-specific immunoglobulin safety of a vaccine against human leptospirosis in Cuba]. Pan
Dis. 2007;1:e56. M antibodies in human serum specimens. J Clin Microbiol. Am J Public Health. 2004;15:249-255.
91. Cerqueira GM, McBride AJ, Hartskeel RA, et al. Bioinforma- 1999;37:2904-2909. 124. Takafuji ET, Kirkpatrick JW, Miller RN, et al. An efficacy
tics describes novel loci for high resolution discrimination 107. Smits HL, Hartskeerl RA, Terpstra WJ. International multi- trial of doxycycline chemoprophylaxis against leptospirosis.
of leptospira isolates. PLoS One. 2010;5:e15335. centre evaluation of a dipstick assay for human leptospirosis. N Engl J Med. 1984;310:497-500.
92. Ahmed A, Thaipadungpanit J, Boonsilp S, et al. Comparison Trop Med Int Health. 2000;5:124-128. 125. Sehgal SC, Sugunan AP, Murhekar MV, et al. Randomi-
of two multilocus sequence based genotyping schemes for 108. Signorini ML, Lottersberger J, Tarabla HD, Vanasco NB. zed controlled trial of doxycycline prophylaxis against
Leptospira species. PLoS Negl Trop Dis. 2011;5:e1374. Enzyme-linked immunosorbent assay to diagnose human leptospirosis in an endemic area. Int J Antimicrob Agents.
93. Bourhy P, Collet L, Clement S, et al. Isolation and characteri- leptospirosis: a meta-analysis of the published literature. 2000;13:249-255.
zation of new Leptospira genotypes from patients in Mayotte Epidemiol Infect. 2013;141:22-32. 126. Gonsalez CR, Casseb J, Montero FG, et al. Use of doxycycline
(Indian Ocean). PLoS Negl Trop Dis. 2010;4:e724. 109. McClain JBL, Ballou WR, Harrison SM, Steinweg DL. for leptospirosis after high-risk exposure in Sao Paulo. Brazil.
94. Boonsilp S, Thaipadungpanit J, Amornchai P, et al. A single Doxycycline therapy for leptospirosis. Ann Intern Med. Rev Inst Med Trop Sao Paulo. 1998;40:59-61.
multilocus sequence typing (MLST) scheme for seven 1984;100:696-698. 127. Hospenthal DR, Murray CK. In vitro susceptibilities of
pathogenic Leptospira species. PLoS Negl Trop Dis. 2013;7: 110. Edwards CN, Nicholson GD, Hassell TA, et al. Penici- seven Leptospira species to traditional and newer antibiotics.
e1954. llin therapy in icteric leptospirosis. Am J Trop Med Hyg. Antimicrob Agents Chemother. 2003;47:2646-2648.
95. Rettinger A, Krupka I, Grunwald K, et al. Leptospira spp. 1988;39:388-390. 128. Alexander A, Benenson A, Byrne R. Leptospirosis in Puerto
strain identification by MALDI TOF MS is an equivalent 111. Watt G, Padre LP, Tuazon ML, et al. Placebo-controlled trial Rico. Zoonoses Res. 1963;2:152-227.
tool to 16S rRNA gene sequencing and multi locus sequence of intravenous penicillin for severe and late leptospirosis. 129. Wang CN, John L, Chang TF, et al. Studies on anicteric lep-
typing (MLST). BMC Microbiol. 2012;12:185. Lancet. 1988;1:433-435. tospirosis. I Clinical manifestations and antibiotic therapy.
96. Murray CK, Gray MR, Mende K, et al. Use of patient-specific 112. Costa E, Lopes AA, Sacramento E, et al. Penicillin at the late Chinese Med J. 1965;84:283-291.
Leptospira isolates in the diagnosis of leptospirosis emplo- stage of leptospirosis: a randomized controlled trial. Rev Inst 130. Berman SJ, Tsai C, Holms K, et al. Sporadic anicteric leptos-
ying microscopic agglutination testing (MAT). Trans R Soc Med Trop Sao Paulo. 2003;45:141-145. pirosis in South Vietnam. A study of 150 patients. Ann Intern
Trop Med Hyg. 2011;105:209-213. 113. Panaphut T, Domrongkitchaiporn S, Vibhagool A, et al. Cef- Med. 1973;79:167-173.
97. Chappel RJ, Goris M, Palmer MF, Hartskeerl RA. Impact triaxone compared with sodium penicillin G for treatment 131. Park YK, Park SK, Rhee YK, Kang SK. Leptospirosis in
of proficiency testing on results of the microscopic agglu- of severe leptospirosis. Clin Infect Dis. 2003;36:1507-1513. Chonbuk Province of Korea in 1987. Korean J Intern Med.
tination test for diagnosis of leptospirosis. J Clin Microbiol. 114. Friedland JS, Warrell DA. The Jarisch-Herxheimer reaction 1990;5:34-43.
2004;42:5484-5488. in leptospirosis: possible pathogenesis and review [see 132. Yersin C, Bovet P, Merien F, et al. Human leptospirosis in the
98. World Health Organization. Human Leptospirosis: Guidance comments]. Rev Infect Dis. 1991;13:207-210. Seychelles (Indian Ocean): a population-based study. Am J
for Diagnosis, Surveillance and Control. Geneva: WHO; 2003. 115. Andrade L, de Francesco Daher E, Seguro AC. Leptospiral Trop Med Hyg. 1998;59:933-940.
99. Faine S. Guidelines for the control of leptospirosis. vol. Offset nephropathy. Semin Nephrol. 2008;28:383-394. 133. Katz AR, Ansdell VE, Effler PV, et al. Assessment of the
Publication No. 67. Geneva: World Health Organization; 116. Amato MB, Barbas CS, Medeiros DM, et al. Effect of a protec- clinical presentation and treatment of 353 cases of labo-
1982. tive-ventilation strategy on mortality in the acute respiratory ratory-confirmed leptospirosis in Hawaii, 1974-1998. Clin
100. Centers for Disease Control and Prevention. Case definitions distress syndrome. N Engl J Med. 1998;338:347-354. Infect Dis. 2001;33:1834-1841.
for infectious conditions under public health surveillance. 117. Douglin CP, Jordan C, Rock R, et al. Risk factors for severe 134. Bharadwaj R, Bal AM, Joshi SA, et al. An urban outbreak
MMWR Recomm Rep. 1997;46:1-55. leptospirosis in the parish of St. Andrew, Barbados [letter]. of leptospirosis in Mumbai, India. Jpn J Infect Dis. 2002;55:
101. Bajani MD, Ashford DA, Bragg SL, et al. Evaluation of four Emerg Infect Dis. 1997;3:78-80. 194-196.
commercially available rapid serologic tests for diagnosis of 118. Bey RF, Johnson RC. Current status of leptospiral vaccines. 135. McBride AJ, Santos BL, Queiroz A, et al. Evaluation of four
leptospirosis. J Clin Microbiol. 2003;41:803-809. Prog Vet Microbiol Immunol. 1986;2:175-197. whole-cell Leptospira-based serological tests for diagnosis
102. Cumberland P, Everard CO, Wheeler JG, Levett PN. Persis- 119. Naiman BM, Alt D, Bolin CA, et al. Protective killed Leptos- of urban leptospirosis. Clin Vaccine Immunol. 2007;14:
tence of anti-leptospiral IgM, IgG and agglutinating anti- pira borgpetersenii vaccine induces potent Th1 immunity 1245-1248.
bodies in patients presenting with acute febrile illness in comprising responses by CD4 and gammadelta T lymphocy-
Barbados 1979-1989. Eur J Epidemiol. 2001;17:601-608. tes. Infect Immun. 2001;69:7550-7558.

Descargado para Alex Castañeda (acastanedas1@upao.edu.pe) en Antenor Orrego Private University de ClinicalKey.es por Elsevier en mayo 22, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.

También podría gustarte