Está en la página 1de 4

Poder Judicial de la Nación

CÁMARA NACIONAL DE APELACIONES DEL TRABAJO -


SALA II
SENTENCIA INTERLOCUTORIA NRO.: 81684

EXPEDIENTE NRO.: 62517/2015

AUTOS: GUTIERREZ, JUAN ANDRES c/ EXPERTA ART SA s/ACCIDENTE -


LEY ESPECIAL

Buenos Aires, 19 de diciembre de 2019

VISTO Y CONSIDERANDO:
A fs. 600 el perito psicólogo apeló la resolución del
21/06/2019 de fs. 594/595, en tanto desestimó el planteo del citado perito quien pretendía
se rechace el prorrateo solicitado por la parte demandada.
En torno al planteo de inconstitucionalidad articulado por la
actora y el perito psicólogo contra el art. 8 de la Ley 24.432 , no puede soslayarse lo
dispuesto por la C.S.J.N. in re “Ricci, Oscar Francisco Augusto c/ Autolatina Argentina
S.A.”, del 28/04/1998 (R 229.XXXI), en cuanto al carácter excepcional de la admisibilidad
de la introducción de la cuestión federal en la etapa de ejecución, ya que sostuvo que “la
cuestión federal debe formularse en la primera oportunidad procesal”, y que sólo podría
admitirse excepcionalmente, en razón de la índole de los derechos en juego, y en tanto las
particularidades de la causa pudieren llevar a considerar configurada la desnaturalización
del fin esencial de las normas. La parte actora y el perito no efectuaron planteo alguno en
el momento procesal oportuno.
En virtud de tales consideraciones, el planteo de una cuestión
constitucional en la etapa de ejecución contraviene los principios que rigen el
contradictorio (arts. 34, 163 y concs. del CPCCN) y su planteo en la instancia revisora
soslaya lo dispuesto en los arts. 271 y 277 del CPCCN.
Tal como lo sostuvo el más Alto Tribunal en distintos
pronunciamientos, el sometimiento voluntario a un determinado régimen jurídico, sin
expresa reserva, determina la improcedencia de su impugnación ulterior con base
constitucional (Fallos: 149:137: 170:12; 304:1180; 325:1922).
La Corte Suprema de Justicia de la Nación, el pronunciarse
en la causa “Rodríguez Pereyra, Jorge Luis y otra c/ Ejército Argentino s/ daños y
perjuicios” (el 27-11-12; R.401XLIII), afirmó la facultad que tienen los jueces de todas las
instancias para declarar de oficio la inconstitucionalidad de cualquier disposición
normativa cuya aplicación implique la afectación concreta de las garantías emanadas de la
Constitución Nacional o de los Tratados de igual jerarquía; y remarcó el consiguiente
deber de efectuar dicha declaración ante la comprobación efectiva en cada causa de una
Fecha de firma: 19/12/2019
Alta en sistema: 20/12/2019
Firmado por: VICTOR ARTURO PESINO, JUEZ DE CAMARA
Firmado por: GREGORIO CORACH, JUEZ DE CAMARA
Firmado por: JUAN SEBASTIAN REY, SECRETARIO INTERINO

#27536669#251973561#20191220110436394
vulneración de tales garantías, aun cuando la interesada hubiera omitido efectuar un
planteo constitucional específico.
En esa misma causa, el Más Alto Tribunal explicitó también
las circunstancias y condiciones en las cuales resultaría admisible una declaración de
inconstitucionalidad ex oficio; y, a su vez, estableció los límites procesales dentro de los
cuales puede ser ejercida dicha facultad. Sostuvo la Corte Suprema que: “… Desde esta
perspectiva, el contralor normativo a cargo del juez presupone un proceso judicial
ajustado a las reglas adjetivas aplicables entre las cuales revisten especial relevancia las
que determinan la competencia de los órganos jurisdiccionales y, sobre todo, las que fijan
los requisitos de admisibilidad y fundamentación de las presentaciones o alegaciones de
las partes. Es conveniente recordar, al respecto, que la descalificación constitucional de
un precepto normativo se encuentra supeditada a que en el pleito quede palmariamente
demostrado que irroga a alguno de los contendientes un perjuicio concreto en la medida
en que su aplicación entraña un desconocimiento o una restricción manifiestos de alguna
garantía, derecho, título o prerrogativa fundados en la Constitución; es justamente la
actividad probatoria de los contendientes así como sus planteos argumentales los que
debe poner de manifiesto tal situación.
En este sentido se impone subrayar que cuanto mayor sea la
claridad y el sustento fáctico y jurídico que exhiban las argumentaciones de las partes,
mayores serán las posibilidades de que los jueces puedan decidir si el gravamen puede
únicamente remediarse mediante la declaración de inconstitucionalidad de la norma que
lo genera.
Como puede apreciarse, el reconocimiento expreso de la
potestad del control de constitucionalidad de oficio no significa invalidar el conjunto de
reglas elaboradas por el Tribunal a lo largo de su actuación institucional relativas a las
demás condiciones, requisitos y alcances de dicho control.
14) Que, en tal sentido, cabe recalcar la jurisprudencia de
esta Corte según la cual la declaración de inconstitucionalidad al importar el
desconocimiento de los efectos, para el caso, de una norma dictada por un poder de
jerarquía igualmente suprema, constituye un remedio de ultima ratio que debe evitarse de
ser posible mediante una interpretación del texto legal en juego compatible con la Ley
Fundamental, pues siempre debe estarse a favor de la validez de las normas
(Fallos:14:425; 147:286). Además, cuando exista la posibilidad de una solución
adecuada del litigio, por otras razones que las constitucionales comprendidas en la causa,
corresponde prescindir de estas últimas para su resolución (Fallos: 300:1029; 305:1304).
En suma, la revisión judicial en juego, por ser la más
delicada de las funciones susceptibles de encomendarse a un tribunal, solo es practicable
como razón ineludible del pronunciamiento que la causa requiere, de manera que no debe
llegarse a una declaración de inconstitucionalidad sino cuando ello es de estricta
Fecha de firma: 19/12/2019
Alta en sistema: 20/12/2019
Firmado por: VICTOR ARTURO PESINO, JUEZ DE CAMARA
Firmado por: GREGORIO CORACH, JUEZ DE CAMARA
Firmado por: JUAN SEBASTIAN REY, SECRETARIO INTERINO

#27536669#251973561#20191220110436394
Poder Judicial de la Nación
CÁMARA NACIONAL DE APELACIONES DEL TRABAJO -
SALA II
necesidad…”. (C.S.J.N. Autos ”Rodriguez Pereyra Jorge Luis y otra c/ Ejército Argentino
s/ daños y perjuicios”, antes citado).
En el caso de autos, advierto que no se verifican las
circunstancias que, en el marco de la doctrina emanada del Más Alto Tribunal, pudiera
conducir a una declaración de inconstitucionalidad de oficio. En efecto, no está
“palmariamente demostrado” que el precepto normativo sub examine, irrogue un perjuicio
concreto ni que su aplicación entrañe “…un desconocimiento o una restricción manifiestos
de alguna garantía, derecho, título o prerrogativa fundados en la Constitución…”. Por otra
parte, lo cierto es que la actora y el perito interviniente en autos no efectuaron planteo ni
desarrollo argumental alguno tendiente a sostener la afectación concreta de una garantía o
derecho emanado de la Constitución Nacional en su primera presentación en la causa,
como para que, ante la comprobación de esa afectación, el Tribunal pudiera declarar la
inconstitucionalidad de oficio de la norma que la origina (aun cuando tal declaración no
hubiera sido pedida en forma específica por el interesado). En otras palabras, la omisión de
“planteos argumentales” concretos en la etapa procesal oportuna y la consiguiente ausencia
de prueba que demuestre que la aplicación del precepto en cuestión implica en el caso
concreto de estos autos “un desconocimiento o una restricción manifiestos de alguna
garantía, derecho, título o prerrogativa fundados en la Constitución”, obsta decisivamente
a la posibilidad de que sea declarada su inconstitucionalidad en el marco de esta causa.
Como reiteradamente lo ha sostenido la Corte Suprema de
Justicia de la Nación, la declaración de inconstitucionalidad de un precepto de jerarquía
legal (o de contenido normativo), constituye la más delicada de las funciones susceptibles
de encomendarse a un tribunal de justicia, pues configura un acto de suma gravedad
institucional que debe ser considerado como “ultima ratio” del orden jurídico (C.:S.J.N:,
24.2.81, “Vialcol S.A. c/ Agua y Energía Eléctrica”, L.L.14-7-81, pág 2; 2-12-93,
“Cocchia, Jorge c/ Nación Argentina”, en F:316:2624; 26-12-96, “Monges, Analía c/
U.B.A.” en F:319:3148; y F:312:235, entre muchos otros).
Sin perjuicio de ello, corresponde señalar que el Máximo
Tribunal se ha pronunciado acerca de la validez constitucional del art. 8 de la ley 24.432, y
además se sostuvo que la “limitación contenida en la norma cuya validez se impugna, se
ciñe a la responsabilidad del condenado en costas y no al quantum de los honorarios
profesionales” (F:332:921 in re “Abdurramán Martín c/ Transportes Línea 104 S.A. s/
Accidente” del 5/5/09 y F.332;1276 in re “Villalba, Matías Valentín c/ Pimentel José y
otros s/ Accidente”-ley 9688” del 27/5/09).
En tal sentido, cabe puntualizar que, si bien la Corte Suprema
de Justicia de la Nación sólo decide en los procesos concretos que le son sometidos, y su
fallo no resulta obligatorio para casos análogos, los jueces inferiores tienen el deber de
conformar sus decisiones a aquellos (cfr. doct. Fallos 25:364), máxime si se tiene en
cuenta que ha descalificado sentencias que se apartan de sus precedentes, cuando no
Fecha de firma: 19/12/2019
Alta en sistema: 20/12/2019
aportan nuevos argumentos
Firmado por: VICTOR ARTURO PESINO, JUEZ DE CAMARA
que justifiquen modificar la posición sentada, en su carácter de
Firmado por: GREGORIO CORACH, JUEZ DE CAMARA
Firmado por: JUAN SEBASTIAN REY, SECRETARIO INTERINO

#27536669#251973561#20191220110436394
intérprete supremo a la C.N. (ver Fallos 307:1094, in re “Cerámica San Lorenzo I.C.S.A.”
del 4/7/1985).
Asimismo, los razonamientos en torno a que la solución legal
afecta los principios consagrados en los arts. 14 bis, 17 y 18 de la C.N., han sido
desestimados también por la C.S.J.N. en el precedente “Villalba” (F.232:1276) al afirmar
que “… la eventual posibilidad de que los profesionales intervinientes ejecuten a su
cliente no condenado en costas por el saldo impago de honorarios que pudiese resultar
del prorrateo legal, no resulta violatoria, en el caso del principio protectorio del
trabajador ni el derecho de propiedad reconocido en la C.N. (…). En efecto, la naturaleza
alimentaria del crédito reconocido al trabajador no empece a que éste deba contribuir, en
alguna proporción, con el costo del litigio que decidió promover para el reconocimiento
de su derecho”.
Las consideraciones expresadas y la circunstancia de que la
parte actora y el profesional interviniente no demostraron que la aplicación de la norma
impugnada desnaturalice el crédito reconocido en su favor, no permiten apartarse de la
doctrina sentada por la Corte Suprema de Justicia en el precedente citado.
Por todo lo expuesto, corresponde confirmar la resolución de
fs. 594/595, en cuanto admitió la aplicación del art. 277 modificado por el art. 8 de la Ley
24.432, e imponer las costas de Alzada en el orden causado, en atención a la naturaleza de
la cuestión debatida (art. 68, 2do párrafo del CPCCN).
Por lo que el Tribunal RESUELVE: 1) Confirmar la
resolución de fs. 594/595 en todo lo que fue materia de apelación y agravios. 2)
Imponer las costas de Alzada en el orden causado. 3) Hágase saber a los interesados
lo dispuesto por el art. 1 de la ley 26.856 y por la Acordada de la CSJN Nº 15/2013, a
sus efectos.
Regístrese, notifíquese y devuélvase.

Víctor A. Pesino Gregorio Corach


Juez de Cámara Juez de Cámara

cfr

Fecha de firma: 19/12/2019


Alta en sistema: 20/12/2019
Firmado por: VICTOR ARTURO PESINO, JUEZ DE CAMARA
Firmado por: GREGORIO CORACH, JUEZ DE CAMARA
Firmado por: JUAN SEBASTIAN REY, SECRETARIO INTERINO

#27536669#251973561#20191220110436394

También podría gustarte