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Grimaldi Nicolás, 36.949.

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Trabajo individual basado en lecturas de Ferri, Garofalo e Ingenieros que circulamos clase
pasada.

Identificar, con citas textuales, el contexto, importancia, justificación o critica de ciertos


conceptos a lo largo de la obra, con comentarios personales de Uds. que justifiquen la
selección

1. La importancia de Lombroso para el positivismo

Propuso una teoría de la causalidad criminal según la cual los criminales presentan unas
características físicas identificables. La teoría del criminal nato atribuye a causas biológicas
congénitas la personalidad anómala que se entiende como patológica.

Lombroso también demostró que los delincuentes desarrollan una actividad anormal desde el
doble punto de vista psicológico y sociológico.

2. Otros autores del positivismo (crimino) mencionados como parte de la corriente


nueva.

Ferri, Garófalo.

3. ¿Qué otros nombres se le da al positivismo criminológico en tanto escuela penal?

Desde los comienzos de la criminología señalárnosle en su literatura científica dos tendencias


diversas: la una quiso atribuir toda la etiología a los factores antropológicos; la otra quiso
atribuirla, casi exclusivamente, a los sociales

4. Presencia del Evolucionismo en la explicación particular del autor

5. El papel y la importancia de la Ciencia, en el texto

Las investigaciones científicas modernas enseñaron que las condiciones del medio influyen de
manera indiscutible en la determinación del fenómeno delictuoso. Estas investigaciones
demostraron que las condiciones del medio social suelen impulsar al hombre hacia el delito.

A su vez, mostraron evidencias irrefutables de que no existen dos individuos cuya constitución
fisio psíquica sea idéntica; esas desigualdades hacen que la acción de causas análogas se
traduzca por reacciones distintas en cada individuo a punto de que en iguales circunstancias
un sujeto reacciona en sentido delictuoso mientras otro se mantiene honesto.

5. Lenguaje médico. Términos empleados, metáforas, etc.

Podría replicarse diciendo con un alienista italiano, que, en último resultado, "la enfermedad
no es más que la vida en condiciones anormales, y que, desde este punto de vista, no hay
oposición absoluta entre el estado de salud y el estado de enfermedad.

7. Concepción del delito como entidad ontológica o natural

Para el loco, el delito es un bien, si se quiere, un medio de procurarse placer, porque, como
observa Maudsley, la ejecución del homicidio proporciona una verdadera complacencia al que
lo ha cometido en virtud de una impulsión morbosa irresistible; pero lo que distingue al
alienado del delincuente es la naturaleza anormal de este placer y el hecho de no buscar otro,
cometiendo un delito. El delincuente, es verdad, tiene también anomalías afectivas, pero éstas
consisten en hallarse desprovisto, más o menos completamente, de ciertos dolores simpáticos,
de ciertas repugnancias, que entre las gentes honradas son muy fuertes para contenerlas en la
pendiente de ciertos actos. Una cosa es la existencia de un atractivo morboso que, aun sin
provocación exterior, arrastra a ejecutar la acción, y otra cosa es la carencia interna de una
repulsión que hace que no se ceda a las tentaciones exteriores.

8. Determinismo-libre arbitrio de los hombres

La escuela penal clásica establece categorías desiguales de delitos y considera que los
delincuentes, por estar dotados de libre albedrío, son responsables de los delitos que
cometen.

La evidencia de las investigaciones científicas mostró que no existen dos individuos cuya
constitución fisio psíquica sea idéntica; esas desigualdades hacen que la acción de causas
análogas se traduzca por reacciones distintas en cada individuo, con independencia absoluta
de su libre albedrío, a punto de que en iguales circunstancias un sujeto reacciona en sentido
delictuoso mientras otro se mantiene honesto.

El método científico general, aplicado al estudio particular de los fenómenos de la patología


humana o social, enseña que conviene estudiarlos desde tres puntos de vista: sus causas, sus
manifestaciones y su tratamiento.

En lugar de presuponer el libre albedrío del delincuente busca el determinismo de su acto


antisocial: en su constitución orgánica y en las condiciones del ambiente en que vive.

9. Peligrosidad

El degenerado, moral o físicamente, dice Tarde, es un degenerado, remontándose uno a su


inmediata genealogía se descubre casi siempre la explicación de estas anomalías, y
precisamente por esto es inútil prescindir de sus padres y qué se yo de cuántas generaciones
más, para interrogar a los antepasados fabulosos de sus depravaciones o de sus
deformaciones.
Es por el peligro que conlleva su física general, aunque hay delitos que no pueden atribuírselo
de igual manera a sus antepasados.

10. Concepto del delincuente y el delito, en general

Antes se decía que delito “es toda violación del derecho”. Pero así era imposible aplicar al
estudio del Derecho Penal los nuevos métodos científicos. Por eso, era importante hacer una
cosa: que el delito dejara de ser una abstracción jurídica y se lo empezase a considerar como
un hecho concreto determinado por causas.

Los partidarios de la escuela sociológica sostuvieron que, sin la acción del medio no bastan las
condiciones psíquicas del delincuente; los de la escuela antropológica han demostrado que el
medio por sí solo no crea delincuentes. Ambos han estado en lo cierto: los dos son
indispensables. Pero lejos de pensar que se excluyan recíprocamente, debieron reconocer que
ninguno de ellos basta para explicar toda la etiología criminal.

El delito no se produce sin que exista una perturbación de la actividad psicológica capaz de
modificar la conducta social; esa perturbación puede ser permanente, transitoria o accidental.

Esa anormalidad constituye el carácter criminoso o implica la predisposición al delito; en


algunos se manifiesta como deficiencia del sentido moral, en otros como trastorno intelectual
que les impide juzgar el acto criminoso según la ética propia del ambiente en que viven y, por
fin, en otros, consiste en una insuficiente resistencia al impulso que tiende a ejecutar el acto
delictuoso.

11. Finalidad de la pena-sanción (porque algunos utilizan la segunda palabra)

12. Importancia de la cárcel para el estudio de la delincuencia

Pero fuera de este hecho general, que demuestra, como ha dicho Lombroso y repitió Espinas,
que la reincidencia constituye, no la excepción, sino la regla en la vida criminal, podemos
encontrar en la estadística la indicación de las formas de delito en que más predomina la
reincidencia, y en done, por tanto, se encuentran en mayor número los delincuentes
habituales o incorregibles.

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