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Materia: Criminología
TEMA 1
ENFOQUE ANTROPOLOGICO.
Esta corriente surge en Italia a fines del siglo XIX, y sus autores más destacados fueron Cesare
Lombroso, Enrico Ferri y Raffaele Garofalo.
Los autores positivistas defienden anormalidad biológica del delincuente, no sostienen que la
criminalidad se deba únicamente a factores biológicos, pero sí postulan que en caso de que la
persona carezca de predisposición biológica en ningún caso delinquirá. El positivismo se opone
de manera radical a la concepción de racionalidad en el acto delictivo de la Escuela Clásica
criminología, en la cual rige el libre albedrío.
Cesare Lombroso es considerado el fundador de la “Escuela Positivista”, siendo “El hombre
delincuente” (1876) su primera y más emblemática obra. El autor, influido por las teorías de
Darwin, formula la hipótesis de que los criminales, son seres atávicos, es decir, que han quedado
en un estadio anterior de la evolución humana que el resto de la población. Para corroborar su
hipótesis, realizó investigaciones sobre cráneos de criminales convictos, analizando sus
semejanzas con los del hombre primitivo descendiente del mono, concluyendo que una gran parte
de los delincuentes analizados compartirían rasgos característicos de atavismo. Debido a esto,
los llama “delincuentes natos” y, considera que por esta anormalidad biológica, tienen una
predisposición a delinquir tan fuerte que la sociedad poco o nada puede hacer para evitarlo, por lo
que correspondería incapacitarlos.
La escuela positivista considera que existen consideraciones biológicas (hereditarias
generalmente) que predisponen a la delincuencia, es por ello que se divide en tres tipos de
Positivismo: Biológico, Psicológico y Social.
Positivismo Biológico:
Este tema fue ampliado por la Escuela Italiana y a través de los escritos de Cesare Lombroso y
la criminología antropológica que identificaron las características físicas asociadas con la
degeneración, lo que demuestra que los delincuentes eran retrocesos atávicos a una forma
evolutiva anterior. Estos delincuentes que padecen atavismo, han nacido bajo una herencia que
no es común de la especie humana actual. Lombroso había creado la Teoría del delincuente
nato refiriéndose a que una parte de los delincuentes tienen una predisposición delictiva tan fuerte
que la sociedad nada o muy poco puede hacer para evitar que lleguen a delinquir. Realizó para
probar esta Teoría su primera investigación con 101 cráneos de delincuentes italianos, analizando
en qué medida existen semejanzas antropométricas con el hombre primitivo, descendiente del
mono. Sus resultados en otro estudio con delincuentes presos, destacan que los hombres que
fueron analizados (1.297 en total) muestran con mayor proporción que en a población normal,
rasgos primitivos (frente salida, escasa capacidad craneal o el volumen de las ojeras).
Enrico Ferri, discípulo de Lombroso, continuaba la misma corriente toda vez que en todo
delincuente existe una persona biológicamente anormal. Si bien la del delincuente nato es la más
relevante en otros delincuentes dicha anormalidad biológica es solo una predisposición que se
realiza cuando concurren factores de carácter ambiental. Fue Ferri quien complementa los
estudios antropométricos de Lombroso con la estadística de la criminalidad, contemplando
factores como edad, clima, lugar, sexo, renta o educación. En este momento es cuando se
plantea la concepción plurifactorial de la delincuencia, este nombre responde a que el delito
responde a tres ordenes: antropológicas (raza, edad, sexo, constitución
física), sociales (educación, adicciones, condiciones económicas) y físicas (clima, estación del
año). Ferri realiza una clasificación de cinco categorías:
Locos: quienes su locura puede ser heredada o adquirida
Ocasionales: hay una mínima posibilidad de delincuencia y solo cuando el entorno social
sea desfavorable, delinquirán.
YA EN EL AÑO 1913 Charles Goring no pudo corroborar las características, pero encontró a los
criminales más cortos, más ligeros y menos inteligentes, es decir, encontró que la criminalidad es
"normal" en lugar de "patológica" e introdujo una escala para medir dónde se colocó a cada
individuo. Llegó a la conclusión de que los delincuentes tendían a la mesomorfia. La
investigación moderna podría relacionar el tamaño físico con el atletismo y la agresión, porque
las personas físicamente más fuertes tienen la capacidad de usar la violencia con menos
posibilidades de sufrir heridas en cualquier represalia. Por lo demás, dicha investigación temprana
ya no se considera válida. El desarrollo de la genética ha producido otra posible causa inherente
de criminalidad, con el cromosoma y otros factores genéticos identificados como significativos
para seleccionar la herencia en lugar del medio ambiente como la causa del crimen ES DECIR
Innato o adquirido
Sin embargo, la evidencia de los estudios familiares, de gemelos y de adopción no
muestra evidencia empírica concluyente para preferir ninguna de las causas.
EN 1985 Hay una serie de estudios acreditados que demuestran un vínculo entre inteligencia
inferior y criminalidad
ESTUDIOS DE Wilson - Herrnstein parten de considerar como dato que resulta de todos los
estudios empíricos, el hecho de que el cociente de inteligencia medio de la población que
delinque esta entre 8 y 9 puntos por debajo de la población. Aquel que considera como buena
opción la delincuencia lo hace por tres factores según ellos, la baja inteligencia le lleva al fracaso
a nivel educativo por lo que deberá esperar poco del mercado laboral; segundo, que esta
relacionado con un pensamiento a corto plazo; y por último, se asocia la baja inteligencia con la
impulsividad, es decir no realizar el análisis costo-beneficio a la hora de cometer un delito por lo
que lleva a un menor razonamiento moral.
Otros factores médicos
La testosterona y la adrenalina se han asociado con la agresión y la violencia, y el
estado de excitación y excitación asociados con ellos. El consumo excesivo de alcohol puede
disminuir los niveles de azúcar en la sangre y conducir a la agresividad, y el uso de químicos en
alimentos y bebidas se ha asociado con hiperactividad y algunos comportamientos delictivos.
Positivismo Psicológico:
Positivismo social:
Adolphe Quetelet, quien descubrió que las tasas de delitos son relativamente constantes, y
la Escuela de Chicago que, bajo el liderazgo de Robert E. Park, consideraba la ciudad como
una forma de superorganismo, dividida en zonas comprometidas en un proceso continuo de
invasión, dominio y sucesión). Mientras tanto, Émile Durkheim identificó a la sociedad como
un fenómeno social, externo a los individuos, con el crimen como parte normal de una
sociedad saludable. La desviación no era más que un "establecimiento de límites", empujando
para determinar los límites actuales de moralidad y aceptabilidad. La idea básica es que, si
bien el delincuente esta determinado a delinquir y eso imposibilite tomar como base de la pena
la responsabilidad individual, la sociedad debe defenderse de la delincuencia ya sea
atacando (instrumentos preventivos) o evitando que los delincuentes reincidan (medios
represivos).
Benigno Di Tullio la definió de la siguiente manera: «Es la ciencia de las conductas antisociales y
criminales basada en la observancia y el análisis profundo de casos individuales, normales,
anormales o patológicos».
Este término fue empleado por primera vez a fines del año 1883 por el antropólogo francés Pablo
Topinnard. Aun cuando se toman por hito de su surgimiento como ciencia los trabajos de
Lombroso a fines del siglo XIX, no se puede negar la previa existencia de importantes aportes a
este campo, el que por necesidad siempre ha atraído la atención de todos. 9,10
Al analizar las variadas definiciones que se han conformado para la Criminología, su alcance, la
atribución de métodos y hasta su objeto de estudio, se observa una variabilidad que expresa el
momento histórico y el lugar en que se emitió el criterio; así como la posición política, ideológica y
hasta filosófica de quien lo emitió, entre otros factores influyentes a tener en cuenta. 11