Está en la página 1de 29

VICTIMOLOGÍA

¿Qué es la victimología?
¿Qué es la victimología? Como bien comentábamos anteriormente, la victimología es una
disciplina científica que forma parte de la criminología. Se ocupa de estudiar a las víctimas
de los hechos criminales o delictivos. Esta ciencia se ocupa de analizar a las víctimas en
todas las fases de la victimización.

La victimología es la ciencia que estudia la víctima, desde el punto de vista de su


sufrimiento en sus tres etapas de victimización.

• La primera como víctima directa del delito;


• La segunda como objeto de prueba por parte de los operadores judiciales del Estado en
el proceso de investigación.
• La tercera la víctima como sujeto de sufrimiento silencioso en su angustia, estrés,
depresión, marginación social al revivir o recordar los sucesos en las cuales se produjo la
comisión del delito. La victimología, apartándose de la criminología, busca redescubrir a la
víctima en sus derechos: a la verdad, a la reparación y, a que se haga justicia en un
proceso penal donde tenga todas sus garantías como las tiene el procesado

FUNDAMENTOS VICTIMOLÓGICOS VICTIMIZACIÓN PRIMARIA


Teorías de la desigualdad social, del cambio social y cultural.
VICTIMIZACIÓN SECUNDARIA: Interaccionismo simbólico.
VICTIMIZACIÓN TERCIARIA: Enfoques psicoanalíticos y teorías cognoscitivas.
VICTIMIZACIÓN GENERAL: Legislaciones de carácter penal y demás relativos y
aplicables del Orden Jurídico Nacional.

1.1. COMPONENTES DISPOSICIONALES EN EL ENGRANAJE


DEL DELITO

Según la Teoría general del delito, los elementos del delito o elementos del crimen
son el conjunto de características y componentes esenciales que constituyen todo
delito.
A través de ellos es posible el estudio de este, a través de una descomposición
estructural. Dichos elementos no son independientes. De hecho, son tomados en
cuenta en cada caso puntual por los jueces o las autoridades encargadas de emitir
algún juicio penal. No existe un consenso exacto y universal respecto a cuáles son
los elementos del delito, ya que existen variaciones al respecto en las distintas
jurisprudencias de los países. Éstos se clasifican en positivos o negativos,
dependiendo de si conducen, respectivamente, a la condena o a la absolución del
acusado.
Sujetos del delito. Las personas o individuos involucrados en el cometimiento de
un delito, y que de acuerdo a su rol en el mismo pueden ser:

1. Sujeto activo. La persona física que comete el delito penal.

2. Sujeto pasivo. La persona que sufre el delito ya sea una persona personal
(persona física) o persona impersonal (persona jurídica o moral).

• La acción del delito. Todo delito implica una acción u omisión voluntaria llevada
a cabo por un individuo (actus reus), y que da origen al delito. Dichas acciones
deben ser intencionales, voluntarias y conscientes, de modo que un sonámbulo,
un demente o una persona inconsciente no son culpables de las acciones u
omisiones cometidas, como tampoco lo es un epiléptico de los espasmos de su
cuerpo.

• La tipicidad del delito. Se llama “tipicidad” a la adecuación de la acción a los


delitos tipificados en la ley, o sea, al tipo de delito del que se trata, cuáles son sus
características y elementos prohibitivos, etc. A fin de cuentas, todo lo que sea
ilegal debe estar contemplado en la ley

• La antijuridicidad del delito. Cuando se habla de “antijuridicidad”, se refiere


exactamente a lo opuesto al derecho: a que un acto es en esencia contrario al
ordenamiento jurídico vigente. Así, los delitos son actos antijurídicos, declarados
como tales cuando se los compara con lo contemplado en el ordenamiento jurídico
de la nación. Los eventos antijurídicos carecen de justificación posible, ya que
incumplen una norma jurídica explícita.

• La culpabilidad del delito: En este caso se trata de una relación psicológica del
autor del delito respecto al acto cometido, de acuerdo con cuatro formas generales
de culpa o responsabilidad:
1. Imprudencia: Cometer un delito por acción, pudiendo hacer de más para
evitarlo.
2. Negligencia: Cometer un delito por inacción.
3. Impericia: Cometer un delito debido a carecer de los conocimientos mínimos
necesarios para hacer lo que se hacía.
4. Inobservancia de reglamentos. Ocurre cuando se vulneran las reglas
conocidas (por ende, cayendo en imprudencia) o cuando teniendo conocimiento
de que existen reglamentos, se los desconoce (cayendo, entonces, en
negligencia).
• Punibilidad del delito. Este elemento, muy debatido en ciertos órdenes
jurídicos, supone la existencia de una pena imponible una vez probados los demás
elementos del delito para el caso en cuestión.
1.2. ÍNDOLE DE LA RELACIÓN VÍCTIMA-AUTOR DEL DELITO
En cualquier caso, siempre se encuentra que existe una relación entre víctima y
victimario, que puede ser muy simple (el puro hecho victimal) o extraordinariamente
complicada. Elegir a una víctima no equivale a escoger un objeto.

La víctima tiene vida propia, personalidad, un camino recorrido, sus propias creencias,
deseos, ilusiones. No puede pensarse en un sujeto “activo” que selecciona a un sujeto
“pasivo”. Por esta razón es tan importante, para dilucidar el tema, estudiar las relaciones
entre ambas partes, en el fenómeno que Mendelshon llama “pareja penal”, para
diferenciarla de la “pareja criminal” que estudió Scipio Sighele.

La pareja criminal la componen dos sujetos que unen sus esfuerzos para tener mayor
éxito en su empresa delincuencial; es la forma más simple y primitiva de delincuencia
organizada, y sigue sus propias reglas. La pareja penal es la relación víctima-victimario,
que en principio es antagónica, aunque no en todos los casos, como hemos comentado,
pues hay ocasiones en que se dificulta la distinción, o los papeles pueden turnarse y
cambiar de un momento a otro.

La relación previa de víctima y criminal es un hecho de gran trascendencia que puede


aclararnos gran parte de la dinámica, ya que hay casos en los que se elige a una víctima
por ser conocida y en otros se selecciona exactamente por ser desconocida. En la misma
tónica, hay delitos que nunca se cometerían a un conocido y, por el contrario, hay ilícitos
que es imposible cometer si no se conoce a la víctima (estupro, incesto, abuso de
confianza, violencia intrafamiliar).

Se plantean cuatro posibilidades en lo relacionado con conocimiento-desconocimiento:

A) Víctima y victimario se conocen, por lo tanto hay una vinculación interpersonal que
puede ser de mayor o menor grado.

B) El criminal conoce a la víctima, pero esta no a su victimario (por lo que lleva una
ventaja sobre ella).

C) La víctima conoce al criminal, pero este no conocía a la víctima.

D) Víctima y victimario no se conocían previamente, eran desconocidos, el encuentro es


fortuito.

1.3. APORTACIONES DE LA VICTIMOLOGÍA A LA CRIMINOLOGÍA EL DERECHO


VICTIMAL

Es el conjunto de principios, valores, normas y procedimientos jurídicos locales,


nacionales e internacionales tendientes a requerir, posibilitar y controlar las prerrogativas
y pretensiones de las víctimas del delito y abuso de poder. Debemos por ello acudir a esta
ciencia, que convierte a la víctima en un emisor y receptor de actos y hechos jurídicos,
conformando un conjunto de normas que delineen la relación del Estado con las víctimas.
EL DERECHO VICTIMAL PARTE GENERAL

Definimos al Derecho Victimal Parte General como el conjunto de principios y normas


jurídicas que tutelan las garantías de las víctimas del delito y del abuso de poder, las
cuales precisan el alcance de su tutela y crean mecanismos para hacerla efectiva.

EL DERECHO VICTIMAL PARTE ESPECIAL

Definimos el Derecho Victimal Parte Especial como el conjunto de estándares, normas


jurídicas, lineamientos, procedimientos y protocolos especializados que permiten brindar
una atención con calidad a cada clase de víctima, grupo o comunidad, según el delio que
sufrieron. Este Derecho se hace efectivo a través del modelo de atención
correspondiente.

LA CONSTELACIÓN DE LA JUSTICIA VICTIMAL

Cada autor desde hace tiempo incluye en sus libros un esquema de cómo la Victimología
se relaciona con otras disciplinas, básicamente las llamadas “Ciencias Penales”. Esto con
el fi n de hacer conciencia sobre la necesidad científica de resolver los problemas o
desarrollar temas precisamente con el apoyo de los conocimientos que todas las ciencias
aportan en un trabajo interdisciplinario.

CONSTELACIÓN DE LA JUSTICIA VICTIMAL

I. Ciencias Jurídico-Penales
➢ Derecho Constitucional
➢ Derecho Penal

➢ Derecho Procesal Penal


➢ Derecho Policial
II. Ciencias Jurídico-Restaurativas
➢ Derecho Victimal

➢ Derecho Civil
➢ Justicia Restaurativa

➢ Derecho Humanitario
➢ Derecho Consuetudinario
III. Ciencias Jurídico-Humanistas
➢ Derecho a la Salud

➢ Derecho de los Derechos Humanos


➢ Derecho de Protección Civil
➢ Justicia Transicional

➢ Derecho Internacional Consuetudinario


➢ Derecho Humanitario Internacional
IV. Ciencias Crimino-Victimológicas
➢ Psicológica Victimológica

➢ Sociología Victimológica
➢ Biología Victimológica

➢ Antropología Victimológica
➢ Sociología Victimológica

➢ Criminología
V. Ciencias Médico-Victimológica
➢ Medicina Forense
➢ Psiquiatría Forense
VI. Disciplinas Instrumentales
➢ Metodología Victimológica

➢ Victimología Forense
➢ Criminalística

➢ Geomántica Victimológica
➢ Gestión de Crisis

➢ Perspectiva de Género
VII. Ciencias Histórico-Filosóficas
➢ Deontología victimológica
➢ Historia de la Victimología

➢ Victimología Comparada
VIII. Disciplinas de la Política Victimal
➢ Política Social
➢ Política del Desarrollo Social

➢ Derecho de Asistencia Social


➢ Prevención del delito

➢ Prospectiva Victimológica
➢ Seguridad Humana

➢ Seguridad Ciudadana

2.-LA “VICTIMODOGMÁTICA”

Desde hace tiempo se viene hablando de “Victimodogmática”, como aquella orientación


sistemática que se dedica a analizar las incidencias de la Victimología en el ámbito de la
teoría del delito y en los tipos penales, es decir –dentro de la dogmática penal. La
hipótesis central de esta Victimodogmática se basa en los descubrimientos de la
Victimología de que ciertas víctimas provocan o favorecen el hecho delictivo, creando una
“co-responsabilidad” que influye sobre la calificación jurídico-penal de la conducta del
autor, en términos de atenuar su responsabilidad o eximirla totalmente de ella.

2.1.- Las ideas precursoras: VON HENTING, MENDELSHON

El planteamiento no es nuevo, ya lo encontramos en Mendelsohn, en su obra fundacional,


en donde realiza una primera clasificación de las víctimas, de acuerdo con su
culpabilidad, y reconoce una escala que va desde una víctima totalmente inocente, hasta
una víctima culpable.

Schünemann habla de una fi gura dogmática de la parte general, gemela de las


aportaciones de la víctima y representada por el principio de autorresponsabilidad. La
imposición de la pena como última ratio del Estado, no es apropiada en aquellos casos en
los cuales la víctima no merece protección o no necesita de protección.

En resumen, las consecuencias jurídico-penales de esta “Victimodogmática” son:

1. La víctima potencial debe ser obligada por medios coactivos jurídico-administrativos, a


impedir su propia posibilidad de llegar a ser víctima, de tal manera que, en virtud del
principio de autorresponsabilidad, se niega la protección jurídico-penal de las víctimas
cuando son ellas mismas las que crean o incrementan el riesgo de la lesión.
2. La víctima potencial debe asumir por sí misma (en ciertos casos) el control social.
3. Se toma en cuenta el comportamiento de las víctimas para elegir e imponer la pena.
4. Se retoma lo ya conocido en la parte especial, en cuanto hay hechos que se vuelven
lícitos por el consentimiento o por determinadas características o comportamiento de
las víctimas. Como puede apreciarse en esta breve referencia, la llamada
victimodogmática (penal) se convierte en el ya anunciado y temido “arte de culpar a
las víctimas”, y es en realidad una negación de los principios básicos de la(s)
Victimología(s) que, desde su nacimiento, son pro-víctimas.

La victimología en el derecho extranjero


Sin lugar a duda, el máximo avance de la Victimología se debe a las reuniones
internacionales conocidas como Symposia, pues han permitido el conocimiento y el
intercambio de ideas entre personas de diversas especialidades, y de ellos han nacido
sociedades, revistas, etcétera.
El primero fue en Jerusalén en 1973, El primer Symposium de Jerusalén fue un éxito,
logró atraer la atención de los especialistas de diversas ramas y obtuvo el reconocimiento
internacional para la Victimología.
El segundo tuvo lugar en Boston 1976, alentando la investiga ción comparada y abriendo
nuevos campos de trabajo.
El de Münste 1979 permitió la organización de la Sociedad Mundial de Victimo logia
(WSV).
El de Tokio-Kioto 1982 fortaleció la sociedad y amplio la comunicación internacional.
En el de Zagreb 1985 se logró la redacción final de la "Declaración de principios básicos
de justicia para las víctimas"
El sexto en Jerusalén 1988 centró la atención en las diversas victimologías.
El de Río 1991 planteo la problemática latinoamericana.
El de Adelaide 1994 presentó abundante información comparada
El de Amsterdam 1997 presento muy interesantes aspectos críticos
El de Montreal (2000).

La victimologia en el derecho español y mexicano


En México hemos tenido un importante desarrollo victimológico en la teoría y en la
práctica, que se inicia con las discusiones sobre la reparación del daño y los primeros
estudios de víctimas en la decada de los años treinta.
En 1969 se publica la Ley Sobre Auxilio a las Víctimas del Delito del Estado de México,
norma pionera en la materia.
En los años setenta, se inician los primeros estudios propiamente victimológicos.
Para la década de los ochenta, se fundó la primera cátedra de Vicimología (en el
INACIPE, Instituto Nacional de Ciencias Penales) y se realizan las investigaciones sobre
víctimas.
El III Congreso Nacional de Criminología (organizado por la Sociedad Mexicana de
Criminología y la Universidad Autónoma de S.m Luis Potosí) se celebró en febrero de
1989, y se dedicó por completo a la Victimología. Desarollaron cinco grandes temas:
· Aspectos generales
· lo jurídico
· las víctimas
· la victimización
· la problemática en Medicina Forense.
En 1993 México reforma su Constitución Federal para reconocer los derechos de las
víctimas del delito y en el 2000 realiza una nueva reforma, ampliando las garantías
victímales.
En el año 2000 se organiza el postgrado en Victimología en el INACIPE, se realiza el I
Congreso Nacional de Victimología (Ciudad Juárez, Chihuahua) y se funda la Sociedad
Mexicana de Victimología.

LA DOGMÁTICA VICTIMAL O VICTIMODOGMÁTICA (VICTIMOLÓGICA)

Habiendo asentado ya la existencia de un Derecho Victimal autónomo, el paso


siguiente es el desarrollo de una verdadera dogmática, como señaló Lima en su
momento, “es necesario concebir y crear una nueva disciplina en el campo de las
llamadas ciencias jurídico-penales, éste es el Derecho Victimal que debe ser una
ciencia normativa que se encargue del estudio de los derechos de la víctima, lo que
puede consistir en el derecho de hacer, no hacer o recibir algo, conferido por la ley o
la constitución de un país, además del estudio del procedimiento que debe usarse
para hacerlo efectivo”. Es de aclararse que, cuando en nuestras primeras obras
hablamos de “victimodogmática”, la interpretamos siempre dentro del Derecho Victimal
y no en el Derecho Penal. En esta forma, la Victimodogmática es el estudio de las
normas que conforman el Derecho Victimal, para desentrañar su signifi cado y hacer
una correcta interpretación con base en la doctrina victimológica que nos señala los
principios rectores, varios de los cuales hemos ya mencionado. Distinguimos entonces
una Victimodogmática Penal, incrustada en la dogmática penal y que gira alrededor
del sujeto pasivo del delito, buscando su corresponsabilidad y una Victimodogmática
Victimal, autónoma, que estudia e interpreta las normas del Derecho Victimal, y que
está centrada en la víctima, buscando su protección.

3.-TIPOLOGÍA

Las tipologías se elaboran a nivel científico con distintos objetivos, en el caso de la


Victimología son las herramientas que permiten:
• Estudiar fenómenos de victimización.

• Fundamentar la individualización de sanciones para el delincuente (a más impacto y más


daño causado a las víctimas, “justifican” el establecimiento de penas más severas).

• Derivar estrategias de intervención victimal (modelos de atención).

• Detectar necesidades y vulnerabilidades de grupos victímales para especializar los


servicios.

• Estructurar programas victimológicos especiales (planes de protección física para las


víctimas).

• Elaborar tablas (matrices) de riesgo.

Planear programas de tratamiento especial según las consecuencias que causó el delito
(estrés post traumático).

• Iniciar estudios de factores victímales (de riesgo) por grupo de víctimas.

La tipología victimal de Benjamín Mendelsohn, clasifica a las víctimas de la siguiente


forma:
1– Víctima completamente inocente o víctima ideal: Esta víctima no ha tenido ninguna
culpa del suceso o hecho y nada ha aportado para desencadenar la situación.
2 – Víctima de culpabilidad menor o víctima por ignorancia: Esta víctima desencadena el
hecho por un impulso no voluntario y tiene cierto grado de culpa en su propia
victimización.
3 – Víctima tan culpable como el infractor o víctima voluntaria:
     3.1 – Aquellas que cometen suicidio echándolo a suertes
     -- Suicidio por adhesión:
       – Eutanasia, donde la víctima solicita ayuda para morir
       – Pareja que pacta el suicidio
4 – Víctima más culpable que el infractor:
     4.1 – Víctima provocadora: Esta víctima atrae por su propia conducta, a que el
delincuente cometa el ilícito penal. La conducta realizada por la víctima crea y favorece la
conclusión del hecho.
     4.2 – Víctima por imprudencia: Desencadena el hecho por falta de control.
5 – Víctima más culpable o víctima únicamente culpable:
     5.1 – Víctima infractora: En este caso, el agresor se convierte en víctima. Aquí el autor
se refiere a la legítima defensa, en la que el sujeto realiza un ilícito penal para defenderse.
     5.2 – Víctima simuladora: Estas víctimas, son las que tienen algún tipo de interés, ya
sea propio o ajeno. Un ejemplo, podría ser el de aquella persona que pretende cobrar un
seguro, haciéndose pasar por víctima de una situación catastrófica, que en realidad no
vivió.
     5.3 – Víctima imaginaria: Son aquellas personas, que debido a factores de naturaleza
bio-psico-social, van a creerse víctimas de un delito del que, en realidad, no lo son. Como
ejemplo de este tipo de víctimas imaginarias, podemos citar a personas que presentan
enfermedades mentales (Individuos con cuadros de paranoia, histriónicos, etc.

Estudio científico de la victima


La Victimología como una nueva ciencia
A partir de las obras de Von HentigIl, B. Mendelsohn y otros
pioneros, el estudio sobre las víctimas va adquiriendo un progresivo interés, hasta
conformar una nueva disciplina científica.

La Victimología es una ciencia joven, sobre la cual se asientan los pilares de un nuevo
sistema de justicia, capaz de reordenar equilibrar el orden social. Va afianzándose como un
campo de investigación científico que se encarga del estudio de las víctimas en general,
impulsando durante los últimos años un proceso de revisión científica del rol de la víctima
en el suceso criminal; una re definición del mismo a la luz de los conocimientos empíricos,
el
protagonismo, neutralización y redescubrimiento, son lemas que nos reflejan su desarrollo.
La década de los setenta es, sin duda, el período de consoli-dación de la Victimología
como una disciplina cientifica.
En este sentido, la celebración del I Simposio Internacional de Victimología Jerusalén,1973)
al cual muy pronto siguieron otros , atrajo la atención de especialistas de distintas
procedencias y, sobre todo permitió un reconocimiento internacional para la Victimología
Ahí se decidió, además, que estas reuniones se celebrarían en futuro cada tres años.

FACTORES VICTIMOGENOS

DEFINICIÓN: Por factor victimógeno entendemos todo aquello que favorece la


victimización, o sea las condiciones o situaciones de un individuo que lo hacen proclive a
convertirse en víctima.

CLASIFICACIÓN DE FACTORES.
1. Factores endógenos (ciertas deficiencias orgánicas).

2. Los factores exógenos (de orden social).

1.- EXÓGENOS.

Los factores exógenos son aquellos que se encuentran fuera del individuo. Los factores
exógenos pueden ser de muy diversa naturaleza: telúricos, espaciales, temporales,
sociales, etcétera. Los factores exógenos son aquellos que se encuentran fuera del
individuo y son mutables, son deficiencias del orden social que hacen proclive a una
persona hacer víctima: (Pasillas, M. 2013)

-Estado civil.

-Nivel económico

-Procedencia.

-Profesión.

-Espacio y tiempo victimal.

-Escolaridad.

-Familia.

2.- ENDÓGENOS.

A diferencia de los factores exógenos que están fuera del individuo, los endógenos están
dentro del mismo. Los factores endógenos son propios del individuo, están implícitos en la
persona (interno inherente a la persona), son deficiencias orgánicas y físicas que presenta
un individuo, los más conocidos son:

• Factores biológicos: Menores y los ancianos por ser considerados como débiles. -La
edad. -Sexo. -Grupo étnico.

• Factores psicológicos y psiquiátricos: incluyen depresión, fobia, el alcoholismo.

-Factor cognitivo: minorización en los procesos mentales; persona que tenga deficiencia
auditiva, disminuida la capacidad de atención y disminuida la inteligencia y la memoria.

El pensamiento lógico nos previene contra la victimización.

La inteligencia es uno de los factores estudiados; la mayoría de los autores concuerdan


en que las deficiencias intelectuales facilitan la victimización. En teoría, a mayor
inteligencia menor victimización. La víctima de los delitos de astucia es concebida siempre
como menos inteligente que el victimario.

RELACION VICTIMA- VICTIMARIO

a) Víctima y victimario se conocen, por lo tanto hay una vinculación interpersonal que
puede ser de mayor o menor grado. b) El criminal conoce a la víctima, pero esta
no a su victimario (por lo que lleva una ventaja sobre ella). c) La víctima conoce al
criminal, pero este no conocía a la víctima.

PERCEPCION DE LA VICTIMA POR PARTE DEL CRIMINAL

a) INTRODUCCION: Esta percepción va a depender mucho del tipo de delito y de la


relación entre victimario y víctima dentro las variables conocimiento desconocimiento.

Hay que hacer constar que en determinados delitos el victimario no percibe a la víctima
como persona sino, más bien, como un simple objeto (por ej. en casi todos los delitos
contra la libertad e indemnidad sexual vemos como el delincuente trata a la víctima como
un objeto para poder satisfacer sus deseos sexuales. Así, si el agresor conoce a la
víctima lo habitual es que actúe sobre ella infravalorándola y cuando es desconocida
normalmente el sujeto actúa bajo el estímulo de drogas o alcohol para silenciar así, en
cierto sentido, su propia conciencia y una vez que comete el ilícito, el sujeto trata de
distanciarse afectivamente de la víctima llegando incluso a considerarla como culpable).

b) VIOLENCIA/AGRESION Y VIOLENCIA/CASTIGO

Estos dos tipos de violencia fueron estudiados y señalados por PERRONNE y NANNINI
según la percepción que tenga el maltratador sobre su víctima.

1° "Violencia/agresión": Se da cuando el victimario descarga su ira contra la víctima sin


ningún tipo de causa.

2° "Violencia/castigo": Parte de una desigual relación en la que el victimario pretende con


su acción "corregir" a la víctima.

La primera parte de una motivación subjetiva ya que el agresor actúa por el mero hecho
de ocasionar un mal a la víctima. En el segundo, intenta corregir determinadas faltas que
cree ver en la víctima (es lo que viene a conocerse como ·violencia educativa")
IMILITUDES ENTRE EL CRIMINAL Y LA víctima

a) CONCEPTO: El punto de partida es la formulación de una hipótesis para poder


determinar si tanto víctima como victimario reúnen semejanzas en ciertos delitos y, para
ello, va a jugar un importante papel la edad de la víctima. Esta hipótesis será afirmativa en
los supuestos de víctimas jóvenes (sujetos mayores entre 18 y 30 años).

La regla general de partida es correlacionar víctima y delincuente jóvenes en un mismo


estrato socioeconómico y de cercanía geográfica. En los E.E.UU México y Australia se ha
verificado empíricamente esta hipótesis y se ha de mostrado la correlación que existe
sobre la variable edad en relación con el sexo, nivel socioeconómico, estado civil, etc y las
agresiones violentas por parte de jóvenes delincuentes sobre jóvenes víctimas.
b) ESPECIAL MENCION A LA VIOLENCIA DOMESTICA: Siempre que se menciona este
tipo de violencia se habla de la hipótesis de lo que ha venido en llamarse "víctima
predispuesta" por algunos autores.

Pero, ¿Y si en lugar de hablar de víctimas predispuestas pensamos en mujeres que se


separan y después vuelven a ser maltratadas por sus nuevas parejas?; ¿Son también
víctimas predispuestas por ello? Creemos que no y en estos casos hay que investigar
otras variables relacionadas con unos rasgos de personalidad determinantes en sus
actuaciones.

RODRIGUEZ MANZANERA habla de ciertos caracteres comunes entre víctima y criminal


asociados a ciertos patrones de conducta y actividades que pueden influir en la
generación de actos violentos tanto desde el punto de vista de la delincuencia como de la
victimización.

En concreto, refiere el siguiente esquema;

Características entre agresor/víctima (Edad. sexo, estado civil ,etc.):

Propensión a correr riesgos (1)

Propensión al alcohol, drogas, etc.(2)

Propensión a la violencia (3)

Estos tres elementos son factores que pueden determinar la generación tanto de víctimas
como de delincuentes según el tipo de delito de que se trate.

Son hipó tesis que hay que investigar en profundidad y, aunque en algunos países se ha
demostrado su validez empírica, en otros, sin embargo, no se han llegado a completar
estos análisis (por ej. en España).

VI) EL "ITER VICTIMAE"

Si el "iter criminis" es el proceso íntegro del delito, ya que comienza con la representación
de una idea (fase interna) y acaba con su consumación (fase externa de llevar a cabo el
hecho o a manifestarlo),el "iter victimae''es el camino que sigue la víctima para llegar a ser
victimizada (aquí sólo cabe la fase externa.

La victimología propugna que cuando estudiemos un determinado delito lo deberíamos


hacer analizando tanto el "iter criminis" como el "iter victimae". RODRIGUEZ
MANZANERA nos hace una relación de la siguiente manera:
El delito se dará cuando se llegue al punto de intersección entre el iter criminis y el iter
victimae y no tiene porqué acabar con la consumación del mismo, sino cuando éste se
agota (por ej. el hijo que mata a su padre para heredar consume el delito de homicidio,
pero el delito no se agota hasta que no reciba la herencia). Otra hipótesis es pasar de
pareja penal a pareja criminal según este gráfico:

SINDROME DE ESTOCOLMO

Trastorno psicológico temporal que aparece en la persona que ha sido secuestrada y que
consiste en mostrarse comprensivo y benevolente con la conducta de los secuestradores
e identificarse progresivamente con sus ideas, ya sea durante el secuestro o tras ser
liberada.

Grupos vulnerables
grupo y de vulnerable. es un conjunto de individuos, animales u otros elementos.
Vulnerable, por su parte, es aquel o aquello que es susceptible de sufrir algún tipo de
menoscabo o daño, ya sea moral o físico.
Se consideran como grupos en situación de vulnerabilidad a grupos poblacionales como
las niñas, los niños y jóvenes en situación de calle, los migrantes, las personas con
discapacidad, los adultos mayores y la población indígena, etc.
Niños
Los niños discapacitados, los niños refugiados (especialmente aquellos que se
encuentran solos) y los niños en conflicto con la ley son sólo ejemplos de niños a los que
se les concede protección especial bajo la Convención sobre los Derechos del Niño y
otros instrumentos internacionales sobre derechos humanos.
Artículo 4. De conformidad con el principio del interés superior de la infancia, las normas
aplicables a niñas, niños y adolescentes se entenderán dirigidas a procurarles,
primordialmente, los cuidados y la asistencia que requieren para lograr un crecimiento y
un desarrollo plenos dentro de un ambiente de bienestar familiar y social.
Atendiendo a este principio, el ejercicio de los derechos de los adultos no podrá, en
ningún momento, ni en ninguna circunstancia, condicionar el ejercicio de los derechos de
niñas, niños y adolescentes.
La vulnerabilidad en los niños se relaciona con diversas circunstancias, desde las
condiciones para su desarrollo en materia de alimentación, acceso a servicios de salud y
educación, como en la presencia de discapacidad, necesidad de trabajo entre otros.
Algunos ejemplos son:
· En materia de maltrato, los tipos más frecuentes son el físico, omisión de cuidado y
emocional.
· Las mayores agresiones se dan a niños entre 6 y 12 años.
· En el país de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) 2007
hay 29.6 millones de niños entre cero y 13 años.
· La población ocupada es de 1.1 millones entre los niños de 5 y 13 años.
· La Comisión Nacional de los Derechos Humanos define al maltrato infantil como. “Todo
acto u omisión encaminado a hacer daño, aun sin esta intención pero que perjudique el
desarrollo normal del menor”.
· El Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF, 2005) lo define como:
“los menores de edad que enfrentan y sufren ocasional o habitualmente, violencia física,
emocional, o ambas, ejecutadas por actos de acción u omisión, pero siempre en forma
intencional, no accidental, por padres, tutores, custodios o personas responsables de
ellos”.
· La Norma Oficial Mexicana en 1999 define al maltrato infantil como: “Acto u omisión
único o repetitivo, cometido por un miembro de la familia, en relación del poder- en
función del sexo, edad y la condición física- en contra de otro u otros integrantes de la
misma, sin importar el espacio físico donde ocurra el maltrato físico, psicológico, sexual o
abandono”.
· La Sociedad Internacional para la Prevención del Maltrato y Descuido de Menores,
después de una comparación de definiciones de 58 países, señala que “el maltrato o la
vejación de menores abarca todas las formas de malos tratos físicos y emocionales,
abuso sexual, descuido o negligencia o explotación comercial o de otro tipo, que originen
un daño real o potencial para la salud del niño, su supervivencia, desarrollo o dignidad en
el contexto de una relación de responsabilidad, confianza o poder”.
· La UNICEF señala por su parte que: “las menores víctimas de maltrato y abandono son
aquel segmento de la población conformado por niños, niñas y jóvenes hasta los 18 años
que sufren ocasional o habitualmente actos de violencia física, sexual o emocional, sea en
el grupo familiar o en las instituciones sociales. El maltratado pude ser ejecutado por
omisión, supresión de los derechos individuales y colectivos e incluye el abandono
completo o parcial
Mujeres
Las mujeres que además tienen una pertenencia a un grupo social más vulnerable a la
discriminación son las indígenas, las mujeres trabajadoras del hogar, las mujeres con
discapacidad, mujeres jóvenes, mujeres adultas mayores, mujeres niñas, mujeres pobres,
tienen una situación de vulnerabilidad prácticamente en todos
Ancianos
Los factores que hacen del adulto mayor una persona vulnerable frente al maltrato son la
pérdida del rol social, la baja autoestima, los niveles de dependencia derivados de
algunas patologías, los bajos niveles de ingresos económicos que los obliga a vivir con
otros o a depender económicamente de ellos
Indígenas
Lo mismo diría respecto a los indígenas de México: no son “grupos vulnerables” por su
condición étnica en sí, sino que son grupos en situación de vulnerabilidad porque sus
derechos no son plenamente respetados en sus comunidades ni fuera de ellas. Por ello
propongo lo siguiente: Una Cédula de Identidad Indígena.
Los pueblos indígenas son el grupo de personas más vulnerable y marginado del mundo
1, quienes nacen en el seno de una comunidad indígena tienen las probabilidades en
contra ya que un 33% va a vivir en situación de pobreza extrema, lo cual es una cifra dura
y bastante injusta que nos dice que prácticamente 1 de cada 3 niñxs que nacen en estas
comunidades vivirán en condiciones muy precarias durante los años más importantes en
el desarrollo tanto físico como mental de cualquier ser humano.
Indocumentados
Migrantes Particularmente Vulnerables. Así define la Organización Internacional de las
Migraciones (OIM) a las personas migrantes cuyas condiciones les enmarcan en un
escenario de vulnerabilidad, que les empuja a la falta de derechos tan básicos como el
acceso a la salud.
Minusválidos
Es una situación que sigue invisible para muchos, por ello se les considera un grupo
vulnerable; para cumplir con su inclusión es necesario generar una cultura al respecto y
difundir el conocimiento de la Convención sobre los Derechos de las Personas con
Discapacidad, cuyos principios generales destacan el respeto a la dignidad, la autonomía
individual, la no discriminación, la participación e inclusión, la igualdad de oportunidades,
la accesibilidad y la equidad entre el hombre y la mujer.
Es así como la condición de vulnerabilidad se agrava por la segregación; estas personas
suelen verse excluidas de manera generalizada de la vida social, económica y política,
por la estigmatización directa o la falta de consideraciones hacia sus necesidades en el
diseño de políticas, programas y servicios, indicó Lázaro
EL ROL DE VICTIMA EN LOS DELITOS CONVENCIONALES

Delito
El delito, en sentido estricto, es definido como una conducta, acción u omisión típica
(tipificada por la ley), antijurídica (contraria a Derecho), culpable y punible. Supone una
conducta infraccional del Derecho penal, es decir, una acción u omisión tipificada y
penada por la ley. La palabra delito deriva del verbo latino delinquiere, que significa
abandonar, apartarse del buen camino, alejarse del sendero señalado por la ley. La
definición de delito ha diferido y difiere todavía hoy entre escuelas criminológicas. Alguna
vez, especialmente en la tradición, se intentó establecer a través del concepto de Derecho
natural, creando por tanto el delito natural. Hoy esa acepción se ha dejado de lado, y se
acepta más una reducción a ciertos tipos de comportamiento que una sociedad, en un
determinado momento, decide punir. Así se pretende liberar de paradojas y diferencias
culturales que dificultan una definición universal

Victima

Se denominarán víctimas directas aquellas personas físicas que hayan sufrido algún daño
o menoscabo económico, físico, mental, emocional, o en general cualquiera puesta en
peligro o lesión a sus bienes jurídicos o derechos como consecuencia de la comisión de
un delito o violaciones a sus derechos humanos reconocidos en la Constitución y en los
Tratados Internacionales de los que el Estado Mexicano sea Parte.

Las víctimas tendrán, entre otros, los siguientes derechos: I. A una investigación pronta y
eficaz que lleve, en su caso, a la identificación y enjuiciamiento de los responsables de
violaciones al Derecho Internacional de los derechos humanos, y a su reparación integral;
II. A ser reparadas por el Estado de manera integral, adecuada, diferenciada,
transformadora y efectiva por el daño o menoscabo que han sufrido en sus derechos
como consecuencia de violaciones a derechos humanos y por los daños que esas
violaciones les causaron; III. A conocer la verdad de lo ocurrido acerca de los hechos en
que le fueron violados sus derechos humanos (…) ; IV. A que se le brinde protección y se
salvaguarde su vida y su integridad corporal (…) VI. A solicitar y a recibir ayuda,
asistencia y atención en forma oportuna, rápida, equitativa, gratuita y efectiva por personal
especializado (…); VII. A la verdad, a la justicia y a la reparación integral a través de
recursos y procedimientos accesibles, apropiados, suficientes, rápidos y eficaces; VIII. A
la protección del Estado(…) Lo anterior incluye el derecho a la protección de su intimidad
contra injerencias ilegítimas, así como derecho a contar con medidas de protección
eficaces cuando su vida o integridad personal o libertad personal sean amenazadas o se
hallen en riesgo en razón de su condición de víctima y/o del ejercicio de sus derechos;
(…) IX. A solicitar y a recibir información clara, precisa y accesible sobre las rutas y los
medios de acceso a los procedimientos, mecanismos y medidas que se establecen en la
presente Ley; X. A solicitar, acceder y recibir, en forma clara y precisa, toda la información
oficial necesaria para lograr el pleno ejercicio de cada uno de sus derechos; (…)XVIII. A
acudir y a participar en escenarios de diálogo institucional; (…) XX. A participar en la
formulación, implementación y seguimiento de la política pública de prevención, ayuda,
atención, asistencia y reparación integral.

Además de los deberes establecidos para todo servidor público, los funcionarios de
organismos públicos de protección de derechos humanos, en el ámbito de su
competencia, deberán: (…) V. Solicitar, cuando sea conducente, medidas cautelares
necesarias para garantizar la seguridad de las víctimas, familiares o bienes jurídicos; (…)
VII. Utilizar todos los mecanismos nacionales e internacionales para que de manera eficaz
y oportuna, se busque fincar las responsabilidades administrativas, civiles o penales por
graves violaciones a derechos humanos.

Protección de sus derechos/ género/ acceso a la justicia/ medidas para sancionar ataques
(artículos 8, 9, 10, y 40)

Las víctimas recibirán ayuda provisional, oportuna y rápida de acuerdo a las necesidades
inmediatas que tengan relación directa con el hecho victimizante para atender y garantizar
la satisfacción de sus necesidades (…) a partir del momento de la comisión del delito o de
la violación de los derechos o en el momento en el que las autoridades tengan
conocimiento del delito o de la violación de derechos.

Las víctimas tendrán derecho a la asistencia y a la atención, los cuales se garantizarán


incluyendo siempre un enfoque transversal de género y diferencial. Se entiende por
asistencia el conjunto integrado de mecanismos, procedimientos, programas, medidas y
recursos de orden político, económico, social, cultural, entre otros, a cargo del Estado,
orientado a restablecer la vigencia efectiva de los derechos de las víctimas, brindarles
condiciones para llevar una vida digna y garantizar su incorporación a la vida social,
económica y política (…). Se entiende por atención, la acción de dar información,
orientación y acompañamiento jurídico y psicosocial a las víctimas, con el objeto de
facilitar su acceso a los derechos a la verdad, a la justicia y a la reparación integral,
cualificando el ejercicio de estos.

Las víctimas tienen derecho a un recurso judicial adecuado y efectivo, ante las
autoridades independientes, imparciales y competentes, que les garantice el ejercicio de
su derecho a conocer la verdad, a que se realice con la debida diligencia una
investigación inmediata y exhaustiva del delito o de las violaciones de derechos humanos
sufridas por ellas; a que los autores de los delitos y de las violaciones de derechos, con el
respeto al debido proceso, sean enjuiciados y sancionados; y a obtener una reparación
integral por los daños sufridos. Las víctimas tendrán acceso a los mecanismos de justicia
de los cuales disponga el Estado, incluidos los procedimientos judiciales y administrativos.

Cuando la víctima se encuentre amenazada en su integridad personal o en su vida o


existan razones fundadas para pensar que estos derechos están en riesgo, debido al
delito o de la violación de derechos humanos sufrida, las autoridades del orden federal,
estatal, del Distrito Federal o municipales de acuerdo con sus competencias y
capacidades, adoptarán con carácter inmediato, las medidas que sean necesarias para
evitar que la víctima sufra alguna lesión o daño. Las medidas de protección a las víctimas
se deberán implementar con base en los siguientes principios: I. Principio de protección:
Considera primordial la protección de la vida, la integridad física, la libertad y la seguridad
de las personas; II. Principio de necesidad y proporcionalidad: Las medidas de protección
deben responder al nivel de riesgo o peligro en que se encuentre la persona destinataria,
y deben ser aplicadas en cuanto sean necesarias para garantizar su seguridad o reducir
los riesgos existentes; (…)  IV. Principio de oportunidad y eficacia: Las medidas deben ser
oportunas, específicas, adecuadas y eficientes para la protección de la víctima y deben
ser otorgadas e implementadas a partir del momento y durante el tiempo que garanticen
su objetivo.

PAREJA CRIMINAL

El progresivo interés por la víctima fue acompañado e incentivado por diversos factores o
circunstancias: En primer lugar, el legado de los pioneros de la nueva ciencia, Von Hentig
y B. Mendelsohn, cuyos estudios se circunscribieron a la "Pareja Criminal" y demostraron
la recíproca interacción existente entre autor y víctima, contribuyendo a un nuevo enfoque
de la víctima, dándole una nueva imagen, más realista y dinámica, como sujeto activo -no
como un mero objeto- capaz de influir en la configuración del hecho delictivo, en su
estructura dinámica y preventiva. Poco a poco se van desarrollando las investigaciones
respecto a las víctimas, pasando del estudio de la pareja criminal y fenómeno de
interacción al estudio de otro tema del que resulta un núcleo de conocimientos sobre
actitudes y propensiones de los sujetos para convertirse en víctimas, tipología victimaria,
daños que padecen las víctimas como consecuencia del delito (victimización secundaria),
la criminalización de determinadas infracciones equivocadamente denominadas "delitos
sin víctimas".

DERECHO VICTIMAL

El Derecho Victimal es el conjunto de principios, normas y procedimientos jurídicos,


locales, nacionales e internacionales, tendientes a requerir, posibilitar y controlar las
prerrogativas y pretensiones de las víctimas de delitos y abusos de poder. El fundamento
inicial del Derecho Victimal es, a nivel internacional, la “Declaración sobre los Principios
Fundamentales de Justicia relativos a las víctimas del delito y relativos a las víctimas del
abuso de poder” (ONU, 1985). Es claro que existía una buena cantidad de normas
nacionales (la primera Ley sobre auxilio a víctimas del delito en México es de 1969), pero
un poco dispersas; es la “Declaración” la que se convierte en el punto de referencia y de
orientación general. En la última década del siglo XX, principian a proliferar, en todo el
mundo, las disposiciones legales que reconocen derechos a las víctimas, y en este siglo
se ha llegado a una cobertura muy apreciable (México ha realizado ya cuatro reformas
constitucionales, mejorando sustancialmente la situación jurídica). Con este material, se
puede considerar que hay fuentes suficientes para reconocer que existe un verdadero
Derecho Victimal, anclado en normas internacionales (próximamente se tendrá una
Convención de derechos de las víctimas), constitucionales (en varios países) y locales,
muchas de ellas independientes de los códigos penales, lo que da a este derecho una
gran autonomía. El Derecho Victimal tiene varios principios, por ejemplo, Beristain
menciona en repetidas ocasiones el principio del “in dubio pro victima”, que se enfrenta,
en caso de duda, al “in dubio pro reo”. Baratta nos habla del principio de la primacía de la
víctima, en que se respete su prerrogativa, se establezcan límites de la intervención
penal, se dé prioridad a medidas restitutivas (en lugar de represivas); en una palabra, se
le considere la parte principal del conflicto. María de la Luz Lima propone los principios de
solidaridad (compasión, reconocimiento y universalidad), subsidiaridad (el Estado
coadyuva y colabora), reciprocidad (dar y recibir), inmediatez (respuesta oportuna y ágil),
consenso, jerarquía.

REPARACION DEL DAÑO

 La reparación del daño es una pena pecuniaria que consiste en la obligación impuesta al
delincuente de restablecer el statu quo ante y resarcir los perjuicios derivados de su delito.
(Diccionario Jurídico Mexicano. Instituto de Investigaciones Jurídicas página 2791.)
El artículo 29 del Código Penal de aplicación en el Distrito Federal por los delitos de la
competencia de los Tribunales Comunes; y en toda la República para los delitos de la
competencia de los Tribunales Federales, establece que la sanción pecuniaria comprende
la multa y la reparación del daño.
El numeral 34 del mismo Ordenamiento, dispone que la reparación del daño que deba ser
hecha por el delincuente tiene el carácter de pena pública y se exigirá de oficio por el
ministerio público, con el que podrán coadyuvar el ofendido, sus derechohabientes o su
representante, en los términos que prevenga el Código de Procedimientos Penales.

CLINICA VICTIMOLOGICA

Es el estudio clínico, tratamiento y rehabilitación de los que padecen por una conducta
antisocial, no solo se refiere al sujeto pasivo si no también a los afectados que pueden ser
familiares.

En si es tratar de entender a la víctima, su conducta y el fenómeno victimal, se busca


entonces formular un diagnóstico, proponer un pronostico y dar un tratamiento cuando así
lo requiera.
La palabra clínica uno de los sentidos mas extendidos de la palabra es para referir a la
diciplina de la medicina que se ocupa de la observación directa del paciente y de su
posterior tratamiento dependiendo su situación.

Identifica a la víctima como un sujeto único con su propia personalidad y problemática,


con necesidades y motivaciones particulares y que por lo tanto debe ser estudiado y
tratado de forma individualizada

Debe ser capacitado de manera adecuada todo aquel personal que se ocupa de las
víctimas.

La víctima es analizada con los exámenes pertinentes al delito o daño que se le cometió.

Las técnicas clínicas:

a) Entrevista: preparación, aplicación, redacción e interpretación.

b) Examen médico

c) Examen psicológico

d) Encuesta social

Diagnóstico:

Este dependerá de conocer el tipo de daño, la magnitud y naturaleza de este y asi darle
un tratamiento si este lo requiere.

Atención a la crisis

 Atención psicológica (En casos de urgencia y/o terapia breve)


 Atención jurídica
 Canalización de la victima a las instituciones correspondientes
 Informar y orientar sobre los derechos y procedimientos previstos en el
orden jurídico mexicano en materia de procuración y administración de
justicia.

PERFIL DE PERSONAL
El perfil victimológico consiste en elaborar una biografía de la victima que
incluya todos los datos necesarios para llegar a conocer a esa persona en la
perfección ya que las características de la victima nos puedan ayudar a
explicar las motivaciones del agresor o del asesino y darnos datos importantes
sobre quien puede ser el autor de ese delito, Westham afirmaba en su obra
“The Show of Violence “ que no se puede comprender la psicología del asesino
o agresor sin comprender a la victima.

PREVENCIÓN

El trabajo preventivo victimológico, es decir, el trabajo preventivo con la víctima y no


con el delincuente es una herramienta que pretende cerrar las puertas al crimen al
enseñar o educar al ciudadano común para generar en él una conciencia igualmente
preventiva, que le permita escapar de la tan temida victimización. Con lo anterior,
estaríamos previniendo el delito de manera integral pero con especial atención a la
educación preventiva victimológica, es decir, estaríamos haciendo prevención del
delito pero, desde una perspectiva victimológica. Así entonces, es necesario
considerar el momento de realizar estrategias anticrimen a las víctimas, coordinando y
entablando las acciones necesarias para que llegue hasta ellas la información
oportuna para evitar el ya señalado proceso de victimización. ¿Y qué se persigue al
realizar estrategias anticrimen desde una perspectiva victimológica? Bueno, pues, en
términos técnicos estaríamos haciendo lo siguiente: evitando que el iter criminis y el
iter victimae se encuentren, estaríamos disminuyendo el riesgo victimal, estaríamos
haciendo prevención y/o profilaxis victimal, estaríamos reduciendo los factores que
favorecen la victimogénesis, y con ello, estaríamos haciendo más fuerte la capacidad
de nuestra población de defenderse preventivamente del delito y cerrando el camino al
criminal, evitando que cometa crímenes y reduciendo de esta manera la criminalidad

Estas son algunas:

• Al ir a un cajero automático para extraer dinero, no hacerlo solo; es preferible ir


acompañado y en un horario diurno.
• Si un vehículo se empareja con el que conduce, mantener la calma, bajar cristales y
cooperar a fin de evitar sustos y ser percibidos como sospechosos del crimen
organizado, ser secuestrables, etc.

• En el caso de balaceras o enfrentamientos, tirarse al suelo y no escandalizarse, a fin


de evitar ser confundido.

• No compartir números de cuenta, contraseñas o información confidencial.

• No dar sus contraseñas a desconocidos.

• No andar por la calle solo o a altas horas de la noche.

• No mostrar joyas, dinero o valores en público.

• Usar vestimenta adecuada en mujeres.

• No salir con extraños que se conozca en la calle.

• No abrir la puerta a extraños.

• En caso de extorsión telefónica, colgar y denunciar.

• No participar en la corrupción (tránsito, policías u otros).

VICTIMA NO CONVECIONAL

VICTIMA POR ABUSO DE PODER

Las personas que, individual o colectivamente, hayan sufrido daños, inclusive lesiones
físicas o mentales, sufrimiento emocional, pérdida financiera o menoscabo sustancial de
los derechos fundamentales como consecuencia de acciones y omisiones que violen la
legislación penal vigente en los Estados Miembros.

VICTIMIZACION POLITICA
Es un comportamiento o conducta en la cual el político o candidato se presenta hacia el
público como víctima de una injusticia real o ficticia, regularmente cometida por el partido
en el gobernó o un grupo político contrario al suyo

VICTIMIZACION DEL SISTEMA PENAL

La victimización secundaria se deriva de las relaciones de la víctima con el sistema


jurídico-penal y, en no pocas ocasiones, resulta incluso más nociva que la primaria, al
incrementar el daño causado por el delito con otros de dimensión psicológica o
patrimonial.

VICTIMIZACION SUPRANACIONAL

La comunidad social, en relación con el genocidio, delitos de cuello blanco y terrorismo de


Estado, y determinados grupos sociales lesionados en sus derechos y a través del
sistema penal, todo ello en relación con la tortura, excesos en materias de prisiones
preventivas, existencias de leyes criminógenas, etc.

VICTIMIZACION Y NEOCOLONIALISMO

El neocolonialismo, a diferencia del colonialismo, busca la influencia de forma indirecta.


Es decir, el control que buscan ejercer en dichos países colonizados, se produce a través
de una serie de personas que, siendo residentes en dicho país, poseen la nacionalidad de
los colonizadores. Pues, cabría añadir el hecho de que, de querer hacerlo de forma
directa, dicha práctica sería ilegal

VICTIMA Y REACCION SOCIAL

Muchos autores coinciden en definir la victimización secundaria como las consecuencias


psicológicas, sociales, jurídicas y económicas negativas que dejan las relaciones de la
víctima con el sistema jurídico penal, supone, un choque frustrante entre las legítimas
expectativas de la víctima y la realidad institucional, involucrando una pérdida de
comprensión a cerca del sufrimiento psicológico y físico que ha causado el hecho
delictivo, dejándolas desoladas e inseguras y generando una pérdida de fe en la habilidad
de la comunidad, los profesionales y las instituciones para dar respuesta a las
necesidades de las mismas (Kreuter, 2006; Soria 1998; Landrive, 1998). Así mismo se
entiende como una segunda experiencia víctima que resulta con alguna frecuencia siendo
más negativa que la primaria, y puede llevar a incrementar el daño causado por el delito
con otros de dimensión psicológica o patrimonial. (Berril y Herek, 1992; Beristain, 1995,
1999; García-Pablos, 2003; Landrove, 1998; ONU, 1999; Wemmers, 1996)

Para Palacio (2001) la victimización secundaria se refiere a un proceso a través del cual,
el sujeto ha provocado la victimización primaria es victimizado por las instancias de
control social formal (como las prisiones).

Según Beristain (1996) la victimización secundaria hace referencia a la mala o


inadecuada atención que recibe la víctima una vez entra en contacto con el sistema de
justicia.

Del mismo modo, autores como Montada (1991; 1994) y Albarrán (2003) consideran que
la victimización secundaria es una reacción social negativa generada como consecuencia
de la victimización primaria, donde la víctima reexperimenta una nueva violación a sus
derechos legítimos, cuando la policía, las instituciones sociales y gubernamentales
intervienen con el fin de reparar la situación de la víctima, a nivel económico, social, físico
y psicológico. Así mismo, Berril y Herek (1992) añaden que este tipo de victimizaciones
ocurren cuando los otros (que no han sido víctimas) responden de forma negativa a las
víctimas, por su condición sexual, racial, étnica o religiosa.

Para Albertin (2006), la victimización secundaria se deriva de las relaciones entre la


víctima y las instituciones sociales (servicios sociales, sanitarios, medios de
comunicación, jurídicos, etc.), quienes en algunas oportunidades brindan una mala o
inadecuada atención a la víctima (Beristain, 1999)

La victimización secundaria en este último sentido no solo ocurre como consecuencia


directa de la actuación criminal, sino también a través de la respuesta de instituciones e
individuos particulares en la atención que se les brinda a estas. Comprende la negación
de los derechos de las víctimas, especialmente por condiciones de género o sexual,
cultura, raza, etnia, edad, entre otros, así mismo involucra la negación del reconocimiento
de la experiencia particular frente al hecho delictivo. (Campbell, 2005; Albarrán, 2003;
ONU, 1985; 1999; Cohen y McKay, 1984)

El término victimización secundaria recibe distintas denominaciones:


Victimización Criminal: Colectivos o personas que sufren o han sufrido las consecuencias
del delito. Así mismo, deben considerarse otras personas o colectivos susceptibles de
padecer los efectos de esta (producida por las instituciones, sistemas sociales, ideología,
discursos, etc.). Albertin (2006).

Desviación Deriva: Victimización de personas discriminadas por su condición sexual, de


quienes se cree, no tienen derecho a protección civil, recibiendo un tratamiento negativo
por parte del sistema de justicia, tras ser víctimas de un hecho delictivo (Harri, 1992,
citado por Berril y Herek 1992)

Revictimización o Doble Victimización: Son repetidas situaciones por las que tienen que
pasar las víctimas después de haber sido afectada por algún delito (especialmente aquel
como el abuso sexual), ante los organismos judiciales, viéndose obligadas a testificar un
número infinito de veces, perjudicandose psicológica y emocionalmente de manera más
profunda y traumática a la víctima. “A partir de la denuncia, las víctimas de cualquier delito
deben enfrentar numerosas situaciones en el ámbito de la justicia, que las hace sufrir.
Largas esperas en pasillos, interminables recorridos por diversas oficinas, nuevas
citaciones que con frecuencia las llevan a arrepentirse de haber hecho la denuncia”.
Rozanski, (2003)

La revictimización también incluye la mala intervención psicológica terapéutica o médica


que brindan profesionales inescrupulosos y mal entrenados para atender situaciones que
revisten características particulares. Rozanski, (2003)

Cabe aclarar que el término revictimización en ocasiones se utiliza para referirse a


múltiples victimizaciones producidas por el mismo agresor o diferentes agresores en
diferentes momentos, estas situación se describe especialmente en delitos como la
agresión sexual (generalmente por parte del conyugue o pareja, o en casos como el
incesto) (Campbell y Raja, 2005; Risser, Hetzel-Riggin y Thomsen, 2006) y la violencia
conyugal, donde la víctima es una y otra vez agredida por su compañero, padre o
padrastro. Este artículo no se relaciona con este tipo de revictimización.

VICTIMA Y CONTROL SOCIAL


El control social de delito como objeto de la Criminología: control social formal e informal.
Efectividad del control social. Evolución y tendencias del control social penal
Giro metodológico de gran importancia al que no ha sido ajena la teoría del
etiquetamiento y de la reacción social.
Más que enriquecer el objeto de la Criminología, supone un nuevo modelo o paradigma,
con mucha carga ideológica
Control social = conjunto de estrategias, instituciones y sanciones sociales que pretenden
promover y garantizar dicho sometimiento del individuo a los modelos y normas
comunitarias.
Dos clases de instancias para la conformidad del individuo a la disciplina social:
Control social formal: policía, justicia, administraciones penitenciarias.
Control social informal: la familia
El control social informal: pasa por la familia, la escuela, la profesión, etc… Culmina con
su actitud conformista, interiorizando las partes aprendidas (proceso de socialización)
Cuando éste proceso fracasa, entran en funcionamiento las instancias formales.
El control social formal: imponen sanciones cualitativamente distintas de las sanciones
sociales. Etiquetamiento del infractor que le atribuye un singular estatus
Norma, sanción y proceso, son tres componentes fundamentales de cualquier control
social
grado de formalización: previsibilidad, controlabilidad o vinculación a principios de
conformidad con las normas.
El control social penal es un subsistema del control social: difiere de éste en sus fines,
métodos y grado de formalización
FACTORES DEL CONTROL SOCIAL
Efectividad: es un tema problemático
Hipótesis de Gilport: buen indicador del grado de efectividad o consolidación de un
sistema normativo
La cultura, el derecho, la costumbre, y los restantes sistemas normativos ejercen presión
para aceptar la conformidad con la norma
Control social penal: limitaciones estructurales
El incremento de las tasas criminales no depende únicamente de los controles sociales,
sino de otros factores: no se puede depender únicamente del control social para la
prevención del crimen
Evolución y tendencias del control social penal:
proceso histórico de racionalización del control social formal (penal)
contenido, extensión y forma de la reacción penal
Ejemplo: desaparición de los castigos corporales, la pena capital, sustitución de las penas
de prisión por otras, etc…
en conflictos especiales y de escasa relevancia social (domésticos o protagonizados por
infractores jóvenes y menores)
sustituir la intervención formal por mecanismos infomales (reparación del daño a coste del
infractor)
tiene un alcance muy limitado, no disponemos de alternativas globales válidas para
asumir las funciones del Derecho Penal.
el control social formal tiene aspectos negativos, pero asegura al menos una respuesta
racional, igualitaria, previsible y controlable
La evolución histórica del control social no es uniforme ni lineal:
debilitamiento de los lazos familiares y comunitarios: escasa confianza en el control social
informal
actúan de forma complementaria al control social formal, más que proponer alternativas
válidas o sustitutivas de aquel.
VICTIMA Y DERECHOS HUMANOS
Se entenderá por “víctimas” las personas que, individual o colectivamente, hayan sufrido
daños, inclusive lesiones físicas o mentales, sufrimiento emocional, pérdida financiera o
menoscabo sustancial de los derechos fundamentales, como consecuencia de acciones u
omisiones que violen la legislación penal vigente en los Estados Miembros, incluida la que
proscribe el abuso de poder.

Podrá considerarse “víctima” a una persona, con arreglo a la presente Declaración,


independientemente de que se identifique, aprehenda, enjuicie o condene al perpetrador e
independientemente de la relación familiar entre el perpetrador y la víctima. En la
expresión “víctima” se incluye, además, en su caso, a los familiares o personas a cargo
que tengan relación inmediata con la víctima directa y a las personas que hayan sufrido
daños al intervenir para asistir a la víctima en peligro o para prevenir la victimización. 3.
Las disposiciones de la presente Declaración serán aplicables a todas las personas sin
distinción alguna, ya sea de raza, color, sexo, edad, idioma, religión, nacionalidad, opinión
política o de otra índole, creencias o prácticas culturales, situación económica, nacimiento
o situación familiar, origen étnico o social, o impedimento físico.

Acceso a la justicia y trato justo


. Las víctimas serán tratadas con compasión y respeto por su dignidad. Tendrán derecho
al acceso a los mecanismos de la justicia y a una pronta reparación del daño que hayan
sufrido, según lo dispuesto en la legislación nacional.

Se establecerá y reforzarán, cuando sea necesario, mecanismos judiciales y


administrativos que permitan a las víctimas obtener reparación mediante procedimientos
oficiales u oficiosos que sean expeditos, justos, poco costosos y accesibles. Se informará
a las víctimas de sus derechos para obtener reparación mediante esos mecanismos.

. Se facilitará la adecuación de los procedimientos judiciales y administrativos a las


necesidades de las víctimas:

a) Informando a las víctimas de su papel y del alcance, el desarrollo cronológico y la


marcha de las actuaciones, así como de la decisión de sus causas, especialmente cuando
se trate de delitos graves y cuando hayan solicitado esa información;

b) Permitiendo que las opiniones y preocupaciones de las víctimas sean presentadas y


examinadas en etapas apropiadas de las actuaciones, siempre que estén en juego sus
intereses, sin perjuicio del acusado y de acuerdo con el sistema nacional de justicia penal
correspondiente;

c) Prestando asistencia apropiada a las víctimas durante todo el proceso judicial;

d) Adoptando medidas para minimizar las molestias causadas a las víctimas, proteger su
intimidad, en caso necesario, y garantizar su seguridad, así como la de sus familiares y la
de los testigos en su favor, contra todo acto de intimidación y represalia;

e) Evitando demoras innecesarias en la resolución de las causas y en la ejecución de los


mandamientos o decretos que concedan indemnizaciones a las víctimas.

Se utilizarán, cuando proceda, mecanismos oficiosos para la solución de controversias,


incluidos la mediación, el arbitraje y las prácticas de justicia consuetudinaria o autóctonas,
a fin de facilitar la conciliación y la reparación en favor de las víctimas.

También podría gustarte