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La leyenda de la pirámide localizada en el centro de Teziutlán cuenta que en su interior se encuentra una fuente de agua y tesoros de oro y plata. Según la leyenda, si se descubre la fuente y los tesoros, saldrá tanta agua que se inundará el pueblo. Se cree que la pirámide está cubierta de piedra volcánica para protegerla de los conquistadores españoles que destruían los templos.
La leyenda de la pirámide localizada en el centro de Teziutlán cuenta que en su interior se encuentra una fuente de agua y tesoros de oro y plata. Según la leyenda, si se descubre la fuente y los tesoros, saldrá tanta agua que se inundará el pueblo. Se cree que la pirámide está cubierta de piedra volcánica para protegerla de los conquistadores españoles que destruían los templos.
La leyenda de la pirámide localizada en el centro de Teziutlán cuenta que en su interior se encuentra una fuente de agua y tesoros de oro y plata. Según la leyenda, si se descubre la fuente y los tesoros, saldrá tanta agua que se inundará el pueblo. Se cree que la pirámide está cubierta de piedra volcánica para protegerla de los conquistadores españoles que destruían los templos.
Se trata de la pirámide localizada en el centro de la población y en su cima se encuentra la torre,
cuenta la leyenda que en su interior se encuentra una fuente de agua, que está llena del preciado líquido y a su alrededor ricos tesoros y artefactos de oro y plata, lugar donde se adoraba el sol, ya que se puede apreciar en el cuartel tercero en el escudo de la ciudad de Teziutlán, una pirámide con un disco en su cima teniendo el fondo de color rojo, cuenta la leyenda que si se descubre la fuente y sus tesoros como castigo de los dioses, saldrá tal cantidad de agua que se perderá el pueblo y sus habitantes, ya que se deduce que la pirámide de piedra labrada se encuentra cubierta por la piedra de origen volcánico y como los conquistadores a su paso por los señoríos y centros ceremoniales, abusando de su fuerza armada, a su paso destruían los TEOCALLIS (casa de los dioses), y por temor a eso los autóctonos las cubrieron para proteger su cultura, sus dioses y su tesoro.