LA LEY DE LA INTERPRETACIÓN DE LOS COTRARIOS: GIUSSEPI RUIZ PÉREZ
La ley de la unidad y lucha de contrarios es la médula y esencia de la dialéctica materialista. Por
oposición a la metafísica, la dialéctica parte del criterio de que las cosas y los fenómenos de la Naturaleza llevan implícitas contradicciones internas, que son la fuente del proceso de desarrollo. Mientras examinamos las cosas en forma estática, cada una aisladamente, no tropezamos con las contradicciones que llevan en sí. Pero apenas comenzamos a examinarlas en su conexión mutua, en su movimiento, desarrollo y mutación, entramos en el reino de las contradicciones. En la Naturaleza siempre hay algo que nace y se desarrolla, y algo que muere y caduca. La lucha entre lo viejo y lo nuevo, entre lo que muere y lo que nace, entre lo caduco y lo que se desarrolla, constituye la ley del proceso de evolución.
Ley de la unidad y la lucha de los contrarios
Ley universal de la realidad y de su conocimiento por el pensamiento humano, que expresa la esencia, el “núcleo” de la dialéctica materialista. Cada objeto encierra los contrarios. Por estos últimos, el materialismo dialéctico entiende los elementos, “aspectos”, que (1) se hallan en unidad indisoluble, (2) se excluyen mutuamente, y no sólo en relaciones distintas, sino incluso en una sola, es decir, (3) se penetran mutuamente. No hay contrarios sin su unidad, no hay unidad sin contrarios. La unidad de los contrarios es relativa, pasajera, mientras que la lucha entre ellos es absoluta. Esta ley explica la “fuente” interna objetiva de todo movimiento, sin recurrir a ninguna fuerza ajena, lo que permite comprender el movimiento como automovimiento. El pensamiento dialéctico no disocia el todo, dividiendo de modo abstracto los puntos extremos, sino que, por el contrario, asimila el todo como lo orgánico, como sistema en el que los contrarios se penetran mutuamente, condicionando todo el proceso de desarrollo. Esta ley expresa del modo más concentrado la contraposición del pensamiento dialéctico al metafísico intelectivo, que interpreta la “fuente del movimiento como diferente del movimiento mismo y exterior a él, y la unidad como lo existente al margen de la diversidad. La metafísica suplanta el movimiento y la unidad concreta de la diversidad con la descripción exterior del movimiento y de los aspectos del objeto confrontados solo exteriormente. Toda la historia de la dialéctica es la historia de la lucha en torno a estos problemas y de los intentos de resolverlos. El progenitor de la dialéctica de las contradicciones es Heráclito. En la elaboración de esta idea es excepcional el mérito de Hegel, que en la investigación del problema de la contradicción hizo lo máximo que se podía hacer desde las posiciones del idealismo. Según marxismo interpretó y elaboró con espíritu materialista la Ley de la unidad y la lucha de los contrarios como ley del conocimiento y ley del mundo objetivo (Lenin). El enfoque de esta ley desde el punto de vista del principio de la coincidencia de la dialéctica, la lógica y la teoría del conocimiento, está dirigido contra su reducción a una suma de ejemplos, a que se le comprenda como ley universal del ser y el pensamiento. La universalidad objetiva de dicha ley es la base de sus funciones metodológicas en el conocimiento. La contradicción dialéctica en el conocimiento no se reduce a la colisión entre tesis y antítesis, sino que consiste en avanzar hacia su solución. Comprender la contradicción dialéctica significa comprender cómo se despliega y resuelve. El proceso de desarrollo transcurre a través del choque de los contrarios tanto interiores como exteriores. La dialéctica enfoca los contrarios exteriores no como esencias eternas distintas, sino como resultado del desdoblamiento de lo único y, en definitiva, como derivados de los contrarios interiores. La doctrina marxista del desarrollo social se basa en el empleo de dicha ley, en la investigación de las contradicciones de la sociedad, fundamenta la tesis sobre la lucha de clases como fuerza propulsora del desarrollo de la sociedad dividida en clases y deduce de ello sus conclusiones revolucionarias. LA LEY DE LA INTERPRETACIÓN DE LOS COTRARIOS: GIUSSEPI RUIZ PÉREZ