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ETAPAS

PRIMERA

lo colonial no  se entiende como un sóIó proyectó hómógeneizadór estatal, slnó


que paralelamente existieron cuatro proyectos políticos, económicos, sociales y
culturales, En la primera etapa los cuatro proyectos se entrelazaron, con el
claró predominio estatals:

 el de la Corona española, el de la Corona, de dominio y construcción del


Imperio
 el de la Iglesia,: :; el de la Iglesia, con una sorprendente falta de
estructura Institucional en los primeros años, que buscó convertir a los
Indios a la nueva fe: por tanto conversión y conquista fueron Indisoluble
 el de los particulares : (conquistadores) fueron el brazo ejecutor del
proyectó estatal y la Corona tuvo que pactar con ellos para su
realización
 las élites Indígenas. El proyectó de los Indios no era homogéneo: por un
lado, existía el proyecto de las élites Incaicas que Incluía la versión
abiertamente rebelde y resistente con Mancó Inca, refugiado en la selva,
y la otra del pactó de Paullu Inca con el nuevo poder. Por otro lado, las
élites locales del Cóllasuyu tuvieron sus propios proyectos y planes que
no siempre coincidían con los de los Incas.

SEGUNDA

aproximadamente a partir de 1542, el proyecto del Estado para el


establecimiento de un nuevo orden colonial,

Institución de la administración mediante el sistema de. virreinatos,


audiencias, corregimientos y la Real Hacienda.

Debido a que las relaciones de poder se caracterizaban por la ausencia


física y la lejanía del rey, se empleó un mecanismo que posibilitó el
funcionamiento del sistema colonial basado en el monopolio político del
poder real que Impulsaba y fomentaba luchas de competencia entre
diversas estructuras políticas.

El establecimiento de este sistema permitió vigilar a los conquistadores y


sus descendientes que controlaban los recursos económicos y la vida
política a nivel local y regional.

Paulatinamente, el poder económico y político de los encomenderos se fue


mermando y se conformó un nuevo grupo social compuesto por los
poderosos mineros, hacendados y comerciantes.
Los proyectos de la Iglesia no fueron homogéneos en su forma de proceder
y actuar. Las distintas órdenes religiosas tenían sus propias ¡deas sobre el
destinó de la población indígena, con objetivos propios y sueños que no
siempre coincidían con los de la Corona. En cuanto a los proyectos
indígenas, hasta la llegada del virrey Toledo seguía viva la resistencia Inca
en Vilcabamaba y, por ende, el proyecto de oposición al régimen de la
dominación. Las investigaciones muestran la relación posible que hubo
entre los Incas y los señores étnicos locales. Los mallkus  fueron expuestos
a una creciente presión por parte de los particulares y del Estado que
pretendían obtener mayores exacciones y gozar de la mano de obra, pero
varios de ellos lograron negociar con el poder colonial, manteniendo su
riqueza y poder como señores naturales. El proyecto de la Corona en tierras
bajas con la constante ampliación de los dominios españoles, tropezó con
un obstáculo Importante: la existencia de pueblos indígenas que resistieron
y pararon este avance.

TERCERA ETAPA "el orden colonial"1569 a 1581


las medidas y reformas implementadas por el virrey Francisco de Toledo en su
larga gestión de gobierno, de, imperó en Charcas y en el conjuntó del territorio
peruano hasta los albores de la Independencia en el siglo XIX.

Es a partir de las reformas toledanas que surgió claramente un mundo indígena


diferenciado del español: la llamada "República de Indios". La sobrevivencia
de la población indígena y su aporte (a través del tributo, la mita y otras
contribuciones) era vital para el sostenimiento del orden colonial. Es por esto que
Toledo garantizó el acceso a la tierra, el reconocimiento de las autoridades
tradicionales, la prohibición de la presencia de españoles en los pueblos de indios y
otras concesiones a las comunidades indígenas. Estas medidas fueron el germen de
la exclusión y el racismo, pero irónicamente, también contribuyeron a la
pervivencia del mundo indígena hasta nuestros días.

La mita colonial:

Estos antecedentes de la mita colonial se reconocen desde fines de la


década de 1540, cuando los encomenderos enviaban contingentes de
trabajadores nativos, incluso desde regiones muy distantes, para
distribuirlos en Potosí, por plazos y tareas variables en el marco del
cumplimiento de los servicios personales; durante la década de 1560, a
estos envíos privados se sumó la asignación de tareas rotativas a un
contingente de quinientos tributarios lupaca de Chucuito bajo
administración directa de la corona; hacia principios de la década de 1570,
el corregidor de Potosí distribuyó indios entre los mineros

A. Mita:
Mita, fue un sistema de trabajo obligatorio aplicado sobre los indios varones comprendidos
entre 18 y 50 años.
B. Mitayos:
Mitayos, eran los indígenas que trabajaban en la mita, también se le denominó “indios de
cédula”.
C. Reclutamiento de los mitayos:
El reclutamiento de mitayos, era realizado por el corregidor a través del Cacique.
D. ¿Quién estableció la mita durante la colonia?:
La mita en el virreinato, fue establecida por el Virrey Francisco Toledo.
E. Utilización de las masas indígenas:
La mita fue un mecanismo de utilización de los servicios personales de la masa indígena por
un salario miserable, que, en la práctica quedaban en manos del corregidor o del
encomendero.
F. Mitas aplicadas sobre el indio:
Mitas en el Virreinato del Perú: La mita minera, la mita obrajera, la mita agraria, la mita de
plaza, la mita de tambos.

CUARTA ETAPA (siglo XVII),

las élites lócales criollas y españolas (mineros, comerciantes, hacendados)


constituyeron la fuerza económica pujante de esta sociedad,
aprovechándose del trabajó de los indios y gozando de los privilegios
otorgados por la Corona. Los mineros formaban un grupo que recibió
muchos beneficios a cambió de la producción minera ininterrumpida.
Cualquier intentó por limitar estos privilegios fracasaba debido a la presión
ejercida por los mineros y a la dependencia de la Corona hacia los envíos de
la plata. Este y otros grupos se valieron, además, de la insuficiencia del
control y de la corrupción de la administración colonial para desarrollar una
actividad económica sin igual, paralela a la oficial.

En el siglo XVII, los procesos de movilidad de la sociedad indígena


alcanzaron niveles extraordinarios y se produjeron cambios en la
composición social de la población en diversas zonas. Detrás de la aparente
descomposición de las comunidades se encontraban sólidas estructuras
étnicas y de parentesco que vinculaban a los indígenas con su lugar de
origen a través de las obligaciones fiscales, sociales y familiares.

Virgen del cerro: De autor anónimo del siglo XVIII, en técnica de óleo sobre
lienzo la pintura "Virgen del Cerro" es la de mayor trascendencia iconográfica
del Museo de la Casa de Moneda en Potosí - Bolivia.  
El cuadro mas significativo de la pintura potosina es aquel que representa a
la Virgen Maria inmersa en el Cerro de Potosí, es la Virgen confundida con la tierra y
por lo tanto confundida con la Pachamama. El lienzo de la Virgen-Cerro es el mejor
ejemplo de sincretismo donde lo cristiano y lo indígena se unen..  

En la parte superior, la Santísima Trinidad, representada por tres figuras


diferentes, participa de la coronación: El Padre Eterno vestido con capa pluvial,
el Hijo mostrando los ornamentos del sacerdote para la misa y el Espíritu Santo
personificado por una paloma. A derecha e izquierda se hallan los arcángeles:
San Miguel. con una cruz y espada en las manos y San Gabriel, sosteniendo
un corazón.  Esta escena celestial está dividida de la terrenal por un
rompimiento de gloria, representado con nubes y querubines.  Los dioses de
los Incas, Inti (Sol) y Quilla (Luna) también presencian la coronación.  
En la parte inferior de la pintura, la escena terrenal muestra varias alegorías; el
origen del nombre de la ciudad de Potosí, interpretándose que Huayna Capac,
Emperador de los Incas, llegó en el año 1462 al sitio que ahora ocupa la ciudad
y quedo maravillado al observar el cerro que se conocía como Sumaj Orcko
(Cerro Hermoso), ordenando a sus vasallos explorar la montaña. Al cumplir
ellos la orden, escucharon el estruendo "Potojsi", de ahí deriva el nombre
Potosí.
Francisco Pizarro y Diego Almagro (Nuevo Toledo – Alto Perú. Audiencia de Charcas)

Tuvieron conflictos sobre los limites territoriales al Diego Almagro no encontra suficiente
mineral de extracción y riquezar es Nuevo Toledo por lo que se devuelve a Cuzco y se enfrenta a
Pizarro, pero es derrotado en la Batalla de las Harinas y ejecutado. Por lo que Pizarro se dirige a
Cochabamba pero tiene que enfrentarse con los indios

1540 se reparten solares por lo que se da la configuración de la ciudad de la Plata

El Fraile Dominico Bartolome de las casas denuncia los abusos que estaban cometiendo contra
los indigena

Economía /

El Alto Perú durante toda la época colonial fue fundamentalmente agropecuario,


aunque se sacrifican sus magníficas posibilidades en beneficio de la minería, pues siendo la
obtención de metales preciosos el nervio esencial de toda la actividad económica, la agricultura y la
ganadería sólo fueron valoradas como riqueza subsidiaria, auxiliar.

Obstáculos al desarrollo agrario. En relación con el carácter secundario de la producción


agropecuaria, se puede considerar la falta de progresos técnicos notables en este aspecto. No se hizo
transformación alguna en lo que se refiere a sistemas de cultivar el suelo, manteniéndose en esencia
los mismos métodos, herramientas, etc., de los siglos anteriores, que a su vez eran en gran medida
pervivencia de tiempo prehispánicos.

escasez de mano de obra, afectada, por una parte, por la disminución


de la población indígena (que es, además, absorbida en grandes cantidades por la minería)
y, por otra, por el insuficiente abastecimiento de esclavos negros, tan esenciales para las plantaciones
costeras

NOTAS: La mano de obra libre el salario fluctuaba entre cuatro y seis reales al día. Y la adquisición de un
esclavo estaba entre 400 a 500 pesos, pues se trataba de una inversión de corta duración que tenía como
promedio de vida en función agrícola 30 años como maxímo.

El poder económico en Charcas durante el siglo XVIII se encontraba en manos


de los azogúeros / mineros poseedores de grandes fortunas, de los
hacendados, dueños de grandes propiedades y grandes comerciantes. Estos
grupos en su gran mayoría fueron compuestos por los criollos, sin embargo,
mestizos e inclusive familias cacicales se beneficiaban también de estas
actividades económicas, generando así una élite económica más abierta que en
otros lugares de América.
la producción agraria se cotiza libremente en el mercado según la ley de la oferta y la demanda y
determinado por tres factores:

 1. El factor climático,
 El precio máximo de un producto en competencia con un homólogo de superior calidad,
 El costo de comercialización de algunos bienes, donde la participación de la materia prima
y el trabajo es sensiblemente menor, y a veces insignificante en la configuración del precio
de venta.

INDUSTRIAS

Industria alimentaria: la obtención de la corteza de la quina -uno de los pocos productos que se
exportaban a España y que se extraía principalmente en Huánuco, Carabáya y las montañas del
Alto Perú. Especialmente en Charcas, la industria del sebo derivada de la ganadería vacuna y ovina,
pero con una insuficiente producción, por lo que era necesario importar sebo de Chile.

 El medio de pago que, atado a las oscilaciones de la cotización de la plata y el oro, produce
modificaciones en los mercados monetarios
la forma típica del comercio colonial hasta fines del XVIII es el arancel de repartos, un instrumento
que asegura al corregidor una ganancia legal equivalente a la tercera parte del valor vendido; con
todo, estos funcionarios exceden sus prerrogativas, venden cada vez más mercancías superfluas a
precios cada vez más altos, procurando cobrar cuanto antes con el fin de introducir nuevos
repartos

Real, Castilla La Mancha), constituyen monopolios de Estado. También lo es en la producción


interna el tabaco, cuyos productores deben entregarlo a los estancos oficiales encargados de su
venta al público. La innumerable serie de expedientes relacionados con su cultivo y tráfico
clandestino prueban que el monopolio no aspira nunca a la perfección.

el Presidente de Charcas, Ignacio Flórez, proyecta un Estanco oficial para la coca~ destinado a
recaudar fondos para mantener adictas a las tropas luego del tembladeral de 1780-82. Su
argumento central es que el estanco aseguraría a los productores una rápida venta, inmune a las
oscilaciones climáticas o financieras. Se compraría a 74 reales el cesto de primera calidad y a 70 el
de segunda, vendiéndoselos a 112 con un 50 por ciento de ganancia.

El comercio de arriería Muchas arrias de mulas se crían en el distrito sureño de Chichas y se


invernan en los valles de Salta y Jujuy. El activo giro de importaci6n procedente de esos valles
multiplica el número de forasteros dedicados al tráfico y contratación de mulas de carga.
El comercio de cereales En general, el comercio de cereales sigue criterios muy sencillos: al
aproximarse la cosecha y según la abundancia que prometa, los labradores tratan de vender los
acopios y rezagos del año anterior a precios estimulantes antes que la propia cosecha se encargue
de rebajarlos. Compran el grano y las harinas los cargadores y merchantes de las provincias altas y
quizás, los comuneros de la Puna que vienen en busca de maíz y trigo con el dinero producido por
la venta de sal o carbón. Las compras se hacen en las ferias agrícolas cochabambinas de Arque o
Tapacari o en la misma villa de Cochabamba

Los intercambios entre regiones Aunque el abastecimiento rural a sus ciudades sea bastante
heterogéneo (no debe pensarse que el maíz y las papas predominen absolutamente) el Alto Perú
es en su conjunto un gran mercado importador. La producción minera y la amonedación oficial
creanuna gran oferta monetaria superior al valor total de la producción agropecuaria regional,
permitiendo una permanente incorporación de metálico a los circuitos mercantiles de larga
distancia. Debe recordarse, por otra parte, que los sistemas de recaudación impositiva,
comercialización y renta (cuidadosamente aceptados por Ja administración borbónica) procuran
desviar una parte importante de ese excedente monetario hacia el Río de la Plata.

La masa monetaria excedente del valor producido por la agricultura regional se constituye en un
fuerte estímulo para financiar la importación de mercancías europeas a través del monopolio
gaditano o del contrabando. Potosí, foco distribuidor del flujo metálico, es entre todos los
mercados de la zona, y por ese motivo, el más manifiestamente importador48. Según las cifras
consignadas en el cuadro4, hacia 1794 más de las dos terceras partes del valor consumido salen al
Perú como pago de importaciones de aguardiente y vino, bebidas consumidas en Potosí o
distribuidas hacia el norte, hasta La Paz, y por las Punas circundantes en todo el ancho radio del
distrto minero.

Los circuitos comerciales Pueden reconocerse dos clases de circuito comercial: el que une entre sí
a los mercados monetarios con intereses complementarios y el que vincula zonas productoras
específicas con mercados monetarios. En el primer caso predomina el gran mercader y la
mercancía europea; en el segundo el productor-transportista y el «fruto de la tierra». A esto
corresponde, respectivamente, un intercambio predominantemente metálico, en oro o plata
según sus ciclos de alza o baja, y un intercambio predominante en términos de reciprocidad.

El eje La Paz-Potosí, trazado sobreel Camino Real que une, proyectándose al Sudeste y al
Noroeste, Lima con Buenos Aires, prefigura el principal canal de circulación de
mercanc=asimportadas y del mayor volumen de metal; con él se articulan distintas rutas
comerciales incorporándose en diferentes estaciones en su trayecto.

Los intercambios internos

el mercado aldeano es micro-regional, como en la Puna, y que su expansión sólo puede


desarrollarse sobre áreas aún más marginales, donde la incidencia del circuito sea nula. Es, en
general, un mercado de subsistencia que vincula estrechamente el control vertical y la
reciprocidad, extendiéndose al punto de incorporar la mayor parte del comercio comunal.

El comercio entre la Intendencia de Cochabamba y las otras Intendencias Los cereales, que
constituyen el 72 por ciento de las exportaciones cochabambinas, sirven para financiar la
importación de textiles y coca, cuya calidad no puede superar la plantación lugareña. Las compras
en el exterior cubren el 85 por ciento del valor vendido, lo que arroja un pequeño saldo comercial
positivo que las remesas oficiales en metal pierden completamente, estableciendo un déficit
financiero equivalente al 11 por ciento de las exportaciones. En pago de lo importado sale del
primero sólo plata amonedada o en pasta, y menos frecuentemente oro.
El comercio entre la ciudad de Cochabamba y las tres regiones periféricas integrantes de su
Intendencia El comercio entre el principal mercado monetario de la región y las regiones
periféricas de Mizque, Vallegrande y Santa Cruz demuestra (cuadros 6-A, 6-E y 6-C) un alto grado
de subordinación en perjuicio de éstas debido, fundamentalmente, a que la capital de la
Intendencia y los partidos integrantes de su distrito actúan como intermediarios entre la demanda
de estas regiones periféricas y el abasto externo. La ciudad de Cochabamba y sus distritos anexos
destinan una parte de lo comprado a revenderlo en esas tres regiones dependientes, lo que
invierte el déficit que se produciría si se restringiese el intercambio sólo a su propia producción.
Compárense las columnasdel saldo en el cuadro 6 y las diferencias existentes si se considera o no
la reventa.

La nueva ruta comercial: Todo este auge por el comercio convirtió al puerto del
Callao hasta bien entrada la época colonial en el más importante de la América
española. Por eso no debería sorprender que fuera, en ese tiempo, victima de
ataques de piratas, corsarios y filibusteros.
Contrabando: También se intensifica el contrabando desde Buenos Aires, a causa de la
avalancha de mercaderías francesas introducidas en el Río de la Plata al arnparo del monopolio del
suministro de negros en América, concedido en el año l70l a la ComLitorol de Chinchct hosta lo
punta de Sangallón, dibujodo por Louis de Brunet, de 1708. Es una pruebo del tráfico froncés en el
Pacífico durante la guerra de Sucesión. Podrd odvertirse hasts qué extremo recogían los dotos que
pudieron ser importontes. En la penínsulo de Poracas, por ejemplo, se señolan los cerrotes de
arena y sol, como se consigna, junto al pueblct de Poracas, que es lugar de pescodores donde el
desembarco es-fácil. Se señala también el lugar donde estuvo el pueblo de Pisco hasÍa el desasÍre
de 1680, en que se reliró más al inlerior, por lo que en el mapa.figuro como Pisque Nouvelle.
Llamomos la atención sobre la construcción que ctparece junto ol litoral de Pisco paro representar
el almacén de las mercancías desembarcadas. 671 pañía Real de Guinea. El Asiento de Negros
autorizaba a los franceses para desembarcar artículos que teóricamente figuraban como
dedicados al sostenimiento de los esclavos, y la posibilidad también de extraer en pago de los
mismos tanto metales como productos de la tierra. Es evidente que esto permitiría un amplio
intercambio de mercancías y los franceses no desaprovecharán la ocasión, practicando un intenso
contrabando cuyo foco principal estará en este caso en Buenos Aires, desde donde sus artículos
irradian hacia el interior, a Chile y especialmente a Charcas.

LA HOJA DE COCA

La hoja de coca tiene unas propiedades medicinales y una significación social y religiosa que le
confirieron unas características muy especiales durante los períodos preincaico, incaico, colonial y
republicano. En la época colonial era un producto de uso corriente por los indígenas del altiplano,
especialmente si tenían que realizar esfuerzo físico. Este era el caso del trabajo minero, ocupación
que consumía la mayor parte de la producción de hoja de coca proveniente de los cocales de
Cuzco primero y, a partir del siglo XVII, de La Paz. Los mineros atribuían a la coca propiedades que
les eran necesarias para desarrollar eficientemente su trabajo; sin ella, incluso se negaban a entrar
a la mina. La coca también era utilizada como elemento de cambio y pago en especie del trabajo
en la mina. Por estas razones, minería y coca formaron en la época colonial, e incluso hoy día, un
binomio indisoluble en las alturas andinas, de modo que no fue posible la una sin la otra, al menos
con la intensidad con que las explotaciones mineras se desarrollaron. Por tanto, la hoja de coca
hizo posible la llegada al Viejo Mundo de elevadas cantidades de metales preciosos los cuales, no
sólo sanearon la Hacienda de la metrópoli sino que, además, cambiaron las bases económicas del
mundo occidental. España y Europa tienen, por ello, una deuda de gratitud con tan singular planta.

NOTA: El virrey TOLEDO bajo supertisciones ecleciasticas y moralistas en algún momento decide
prohibir o disminuir el consumo de coca por parte de los indígenas en las minas y en cambio
aumentar las porciones de alimentación, lo que genero una molestia en los indígenas que
argumentaron la necesidad de esto para poder trabajar. Los mineros distribuían el consumo de la
coca a lo largo de la jornada laboral con el fin de que los efectos estimulantes no decayeran
durante las horas que duraba el trabajo.

Industrio
Al igual que la agricultura y la ganadería, la industria tiene un marcado carácter complementario,
y aunque en algunos aspectos se alcanza un notable desarrollo, la mayoría de las industrias
coloniales no tiene otra perspectiva que la de ser actividades económicas de tipo doméstico -vinculadas,
fundamentalmente, a la alimentación y el vestido-, que durante el siglo xvIII, en lugar de
seguir el noimal proceso de su crecimiento, se limilan a sobrevivir, encontrándose a fines de la
centuria en completa decadencia.
En el Alto Perú tiene cierta importancia la industria maderera y sus derivados, utilizándose
principalmente las maderas de cedro y ébano para Ia construcción, fabricación de muebles y utillaje
minero, pero sin llegar a aprovecharse bien la magnífica riqueza forestal altoperuana. obtención de
la corteza de la quina.

Los obrajes son realmente las primeras fábricas americanas y su implantación se debió a la escasez
y carestía de las telas y la incapacidad de la industria española para satisfacer la demanda de sus
colonias, facilitándose luego su desarrollo por la proliferación del ganado lanar y la abundancia y
casi gratuidad de la mano de obra. Estos centros producían toda clase de tejidos de lana y algodón
(paños, frazadas, bayetas, tocuyos, jergas, ponchos, alfombras, colchas, medias, etc.)

En 1545 se fundó en jauja el primer taller de manufactura textil, llamado obraje. Si bien estos
textiles no llegaron a tener el refinamiento logrado por los antiguos peruanos, la calidad de la
producción era suficiente para satisfacer a los florecientes mercados urbanos y mineros. Los
primeros obrajes fueron instalados por los encomenderos, quienes monopolizaban el poder y la
riqueza de las regiones. -uno de los pocos productos que se exportaban a España y que se extraía
principalmente en Huánuco, Carabáya y las montañas del Alto Perú, La fabricación de sombreros de
paño se extendió pronto, siendo los principales centros productores, además de Lima,Cuzco, La Paz,
Oruro, Chuquisaca y Potosí
La gonadería. Finalmente, y por lo que se refiere a la ganadería, ésta tuvo en el Bajo y Alto Perú
significación propia, aunque revistió el mismo carácter adjetivo que la agricultura, y en ningún
momento alcanzó la importancia económica que tuvo en la Argentina o en otras zonas de la
América hispana. Desde el principio hubo una neta tendencia a la localización geográfica del
ganado importado por los españoles, pero sólo dos tipos encontraron su localización adecuada: el
ovino y el caprino. El ganado lanar se diseminó por las zonas de pastos naturales de la sierra, en
los llanos orientales y zonas altiplánicas charquinas, y su propagación fue el principal elemento
para el fomento de la industria textil u obrajera. En cuanto al ganado cabrío, alcanzí un desarrollo
extraordinario en los valles del norte de la costa, en especial en Trujillo, Piura y Lambayeque
(donde da lugar a una importante industria de cordobanes). Respecto al ganado vacuno, sin tener
una locaIización geográfica definida, se aclimató en varios sitios coincidentes con los del ganado
lanar (sobresale Ayacucho, cuya riqueza de vacunos origina una notable industria de curtiembres)
y, por excepción, en cabeceras de montaña, co-

La gonadería. Finalmente, y por lo que se refiere a la ganadería, ésta tuvo en el Bajo y Alto
Perú significación propia, aunque revistió el mismo carácter adjetivo que la agricultura, y en ningún
momento alcanzó la importancia económicaque tuvo en la Argentina o en otras zonas de la América
hispana. Desde el principio hubo una neta tendencia a la localización geográfica del ganado importado
por los españoles, pero sólo dos tipos encontraron su localización adecuada: el ovino y el caprino

MINERIA

La economía peruana se fundamenta preferentemente en su riqueza minera, siendo la producción


argentífera -sobre todo de Potosí- el índice más sensible de la situación económica virreinal.
Igualmente fundamental es la producción de azogue de la mina de Huancavelica, ya que el tanto
por ciento de plata obtenida era consecuencia directa del mercurio empleado, quedando así
indisolublemente ligados el interés de producción de los dos principales centros mineros.
Tres factores fundamentales intervienen en la mayor o menor producción de plata, a saber: a/ la
riqueza de los filones en explotación; b) la mano de obra disponible para labrarlos; y c/ la
abundancia de azogue mediante el cual verificar la extracción de plata.

DIVISIONES ADMINISTRATIVAS

Desde 1542 aproximadamente, lo que es el actual territorio boliviano


dependió administrativa y jurídicamente del Virreinato Peruano. Por su
gran extensión, fue dividido en varias audiencias.
En 1561 se creó la Real Audiencia de Charcas que dependió del
Virreinato Peruano hasta el año 1776. La jurisdicción territorial de la
Audiencia de Charcas se extendía desde el Cuzco, al norte, hasta
Buenos Aires (incluyendo Paraguay y Tucumán) al sur y desde el
Océano Pacífico (Atacama) al oeste, hasta la frontera con el Brasil, al
este.
En 1661, al erigirse una nueva Audiencia, la de Buenos Aires los
territorios del Río de La Plata, Tucumán y Paraguay, pasaron a
depender de ella. Se tenían, en lo que hoy es el territorio boliviano, 4
provincias y corregimientos además de 2 misiones: La Paz (incluía
Chiquitos, Azángaro, Lampa, Carabaya y Paucarcolla, actualmente en
el Perú), Potosí (con Atacama y Oruro), Charcas (parte del
departamento actual de Potosí y parte del de Chuquisaca), Santa Cruz
de la Sierra (que incluía a Cochabamba y Mizque) y las dos misiones
de Mojos y Chiquitos.
En 1776 se creó el Virreinato del río de la Plata, o Buenos Aires, y
Charcas pasó a depender de esta nueva unidad administrativa y
política. La jurisdicción de la Audiencia de Charcas se dividió entonces
en 4 intendencias, subdivididas cada una en partidos, reemplazando
así a los corregimientos. En 1782 se crearon las intendencias de La
Plata, Potosí, Cochabamba (que incluía Santa Cruz de la Sierra y las
gobernaciones de Mojos y Chiquitos) y La Paz. En 1784, se creó la
Intendencia de Puno (Chucuito, Puno, Lampa, Azángaro y Carabaya)
que en 1796 pasó a depender del Virreinato del Perú y de la Audiencia
del Cuzco. Tarija, en cambio, formó parte inicialmente de la Intendencia
de Potosí pasando en 1806 a Salta.

1 AUTORIDAD EN EL EXTERIOR EL REY


1 AUTORIDAD EN EL TERRITORIO EL VIRREY:

DIVISIÓN ADMINSITRATIVA DE CHARCAS primera mitad del siglo xvrII

CORREGIMIENTOS DIOCESIS (P.650

GOBIERNO

VIRREY

AUDIENCIAS

AUTORIDADES PROVINCIALES Y LOCALES ( GOBERNADORES Y CORREGIDORES)

CABILDOS O CONSEJOS DE CIUDAD


Potosí, ciudad que nunca tuvo corregidor
propio al estar incluida en la jurisdicción
del de La Plata. A partir del establecimiento de la
Audiencia de Charcas, su corregidor pasó a residir
en Potosí, pero sin dejar de ser corregidor de
La Plata, ciudad en la que juraba el cargo
CABILDOS INDIGENAS (Alcaldía mayor era un cacique) contribuyeron a hispanizar las
comarcar pues debian hablar castellano y se encargaban de cobrar los tributos

Bibliografía

Laviana Cuetos, M. L. (1983). Perú y Charcas, 1700-1760.

Bridikhina, E. (2015). De lo colonial en los tomos de Bolivia, su historia. Tinkazos, 18(37), 89-99.

García, E. O. (2008). Coca y minería en el Alto Perú durante el periodo colonial. De re metallica
(Madrid): revista de la Sociedad Española para la Defensa del Patrimonio Geológico y Minero, (10),
99-107.

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