Está en la página 1de 5

PAPEL DE LA ANTROPOLOGÍA APLICADA Primeras aplicaciones La

aplicación era una preocupación central de los primeros antropólogos en Gran


Bretaña (en el contexto del colonialismo) y Estados Unidos (con un enfoque en
la política hacia los nativos americanos). Antes de tomar en cuenta lo nuevo, se
deben considerar ciertos peligros de lo antiguo. Para el imperio británico,
específi camente sus colonias africanas, Malinowski (1929a) propuso que la
“antropología práctica” (su término para la antropología aplicada colonial) debe
centrarse en el proceso de “occidentalización”: la difusión de la cultura europea
en las sociedades tribales. Malinowski no cuestionó la legitimidad del
colonialismo ni el papel del antropólogo para hacerlo funcionar. No vio nada
malo en ayudar a los regímenes coloniales al estudiar la posesión y el uso de la
tierra para recomendar cuánto debían conservar los locales y cuánto
conseguirían los europeos.
Antropologías académica y aplicada La antropología aplicada no
desapareció durante las décadas de 1950 y 1960, pero la académica tuvo su
mayor crecimiento después de la Segunda Guerra Mundial. El baby boom, que
comenzó en 1946 y alcanzó su pico en 1957, alimentó la expansión del sistema
educativo estadounidense, por tanto, de empleos académicos. Se abrieron
universidades de pregrado, comunitarias y de cuatro años, y la antropología se
convirtió en una parte estándar del curriculo universitario. Durante las décadas
de los cincuenta y los sesenta, la mayoría de los antropólogos estadounidenses
eran profesores universitarios, aunque algunos todavía trabajaban en agencias
y museos. La era de la antropología académica continuó a lo largo de la
década de los setenta. En especial durante la guerra de Vietnam, los
estudiantes de pregrado acudieron en masa a las clases de antropología para
aprender acerca de otras culturas.
Antropología aplicada hoy En la actualidad, la mayoría de los antropólogos
aplicados ven su trabajo como radicalmente alejado de la perspectiva
colonialista. La antropología aplicada moderna, por lo general, se percibe como
una profesión de ayuda, dedicada a auxiliar a los locales, pues los
antropólogos denuncian la privación de derechos en los foros políticos
internacionales. Sin embargo, los antropólogos aplicados también resuelven
problemas para clientes que no son pobres ni desprovistos de poder, pues
trabajan para negocios, tratan de resolver el problema de aumentar las
ganancias de su empleador o cliente. Sin embargo, en la investigación de
mercado, pueden surgir confl ictos éticos dado que los antropólogos tratan de
ayudar a las compañías a operar de manera más efi ciente y rentable. Las
ambigüedades éticas también están presentes en la gestión de patrimonio
cultural (GPC), al decidir cómo preservar restos e información signifi cativa
cuando los sitios históricos se ven amenazados por el desarrollo u obras
públicas. A una fi rma de gestión de patrimonio cultural usualmente la contrata
alguien que busca construir una carretera o una fábrica. En tales casos, el
cliente puede tener un fuerte interés en un resultado enel que no aparezcan
sitios que necesiten protección.
ANTROPOLOGÍA DEL DESARROLLO La antropología del desarrollo es la
rama de la antropología aplicada que centra su atención en el estudio de los
confl ictos sociales y la dimensión cultural del desarrollo económico. Los
antropólogos del desarrollo no sólo llevan a cabo políticas planifi cadas por
otros; también planifi can y guían la política. (Para discusiones más detalladas
sobre los temas de la antropología del desarrollo, vea Edelman y Haugerud,
2004; Escobar, 1995; Ferguson, 1995; Nolan, 2002; y Robertson, 1995.) Sin
embargo, los dilemas éticos con frecuencia confrontan a los antropólogos del
desarrollo (Escobar, 1991/1995). A menudo nuestro respeto por la diversidad
cultural es ofendido, porque
Los esfuerzos por extender la industria y la tecnología pueden acarrear
profundos cambios culturales, de ahí las amenazas a la diversidad cultural. Por
lo general, la ayuda extranjera no arriba a los lugares donde las necesidades y
el sufrimiento son mayores, debido a que se emplean de acuerdo con las
prioridades políticas, económicas y estratégicas de donadores internacionales,
líderes políticos y grupos de interés poderosos.
Equidad En la actualidad, las políticas de desarrollo persiguen la meta de
promover la equidad. Equidad creciente signifi ca reducir la pobreza y distribuir
la riqueza de manera más igualitaria. Sin embargo, si los proyectos se plantean
para aumentar la equidad, deben contar con el apoyo de gobiernos reformistas.
Los ricos y poderosos por lo general se resisten a los proyectos que amenazan
sus intereses establecidos. Es más probable que algunos proyectos de
desarrollo, particularmente esquemas de irrigación, incrementen las
disparidades en la riqueza; es decir, que impacten de manera negativa la
equidad. Una distribución de recursos inicialmente inequitativa (en particular de
la tierra) con frecuencia se convierte en la base de mayor sesgo después del
proyecto. El impacto social de la nueva tecnología tiende a ser más severo y
contribuye negativamente a la calidad de vida y a la equidad, cuando las
entradas se canalizan a través del rico.
ESTRATEGIAS PARA LA INNOVACIÓN Los antropólogos del desarrollo,
preocupados por los confl ictos sociales y la dimensión cultural del desarrollo
económico, deben trabajar de manera conjunta con los locales para ayudarles
a valorar e identifi car sus deseos y necesidades para el cambio. Existen
diversas demandas locales que requieren recursos para realizar proyectos de
desarrollo; sin embargo, con frecuencia se gastan recursos en lugares que no
lo requieren y se abandonan otros en los que sí son necesarios. La
antropología del desarrollo puede ayudar a ordenar las necesidades en los
diferentes lugares y ajustar los proyectos. Un aspecto relevante a tomar en
cuenta en los proyectos que se pretendan echar a andar es poner en primer
lugar a la gente, y consultarla para que esos proyectos respondan a los
requerimientos que expresan (Cernea, 1991). Después, los antropólogos del
desarrollo pueden trabajar y garantizar formas socialmente compatibles para
realizar un buen proyecto.
Sobreinnovación En un estudio comparativo que realicé, los proyectos
compatibles y exitosos evitaron la falacia de la sobreinnovación (demasiado
cambio). Se esperaría que la gente se resistiese a los proyectos de desarrollo
que requieran cambios mayores en sus vidas diarias. La gente usualmente
quiere cambiar lo sufi ciente para conservar lo que tiene. Los motivos para
modifi car el comportamiento provienen de la cultura tradicional y de las
pequeñas preocupaciones de la vida cotidiana. Los valores de los campesinos
no son tan abstractos como “aprender una mejor forma”, “progresar”, “aumentar
el conocimiento técnico”, “mejorar la efi ciencia” o “adoptar técnicas modernas”.
En vez de ello, sus objetivos están aterrizados y son específi cos. La gente
quiere aumentar la producción en un campo de arroz, acumular recursos para
una ceremonia, que sus hijos vayan a la escuela o tener sufi ciente dinero para
pagar los impuestos.
Subdiferenciación La subdiferenciación es la tendencia falsa de ver a “los
países menos desarrollados” con más semejanzas entre sí. Las agencias de
desarrollo con frecuencia ignoraban la diversidad cultural (por ejemplo, entre
Brasil y Burundi) y adoptaban un enfoque uniforme ante conjuntos de personas,
de suyo, muy diferentes. Al pasar por alto la diversidad cultural, muchos
proyectos también han tratado de imponer nociones de propiedad y unidades
sociales incompatibles. Con mucha frecuencia, un diseño social erróneo
supone o 1) unidades productivas propiedad privada de un individuo o pareja,
trabajadas por una familia nuclear, o 2) cooperativas que al menos
parcialmente se basan en modelos del ex bloque del Este y los países
socialistas.
Modelos indígenas Muchos gobiernos no están genuina o realistamente,
comprometidos con el mejoramiento de las vidas de sus ciudadanos. La
interferencia de las grandes potencias también evita que los gobiernos
promulguen las reformas necesarias. No obstante, en algunas naciones, el
gobierno actúa más como un agente del pueblo. Madagascar es un ejemplo de
lo anterior. Los malgaches de Madagascar, antes del origen del Estado, se han
organizado en grupos de descendencia; es decir, un grupo de parentesco cuya
solidaridad social se determina por la creencia de que cuentan con ancestros
comunes. Los merina, creadores del mayor Estado precolonial de Madagascar,
integraron los grupos de descendencia en su estructura, convirtiendo a los
miembros de grupos importantes en consejeros del rey, y por tanto, les
otorgaron autoridad en el gobierno. El estado Merina tomó provisiones para la
gente que gobernó. Recaudó impuestos y organizó la mano de obra para
proyectos públicos de trabajo. Como recompensa ofreció la redistribución de
recursos a los campesinos que lo necesitaban; también les garantizó
protección contra la guerra y las incursiones esclavistas y les permitió cultivar
en paz sus campos de arroz.
ANTROPOLOGÍA Y EDUCACIÓN La atención a la cultura también es
fundamental para la antropología y la educación, cuyas investigaciones toma
en cuenta desde los salones de clase y se extienden hasta los hogares,
vecindarios y comunidades (vea Spindler, 2000, 2005). En los salones de clase
los antropólogos observan las interacciones entre profesores, alumnos, padres
y visitantes. El clásico reporte de Jules Henry del salón de clase de una
escuela primaria estadounidense (1955) muestra cómo los alumnos aprenden a
conformarse y competir con sus pares. Los antropólogos ven a los niños como
criaturas culturales completas, cuyas enculturación y actitudes hacia la
educación pertenecen a un contexto que incluye familias y pares.
ANTROPOLOGÍA URBANA Alan y Josephine Smart (2003) han señalado que
las ciudades desde hace mucho tiempo están infl uenciadas por fuerzas
globales, incluidos el capitalismo mundial y el colonialismo. Sin embargo, los
roles de las urbes en el sistema mundial cambiaron recientemente como
resultado de la nueva compresión sobre el espacio-tiempo derivada de los
modernos sistemas de transportación y comunicación. Esto es: todo parece
más cercano hoy, porque el contacto y el movimiento son mucho más sencillos.
En el contexto de la globalización contemporánea, los medios masivos pueden
volverse tan importantes como los factores locales en la guía de las rutinas
diarias, los sueños y las aspiraciones. La gente vive en lugares particulares,
pero sus imaginaciones y vínculos no tienen que estar confi nados localmente
(Appadurai, 1996).
Urbano frente a rural Al reconocer que una ciudad presenta un contexto social
muy diferente al de una aldea tribal o de campesinos, uno de los primeros
estudiosos de la urbanización, el antropólogo Robert Redfi eld, se centró en los
contrastes entre las vidas rural y urbana. Él comparó las comunidades rurales,
cuyas relaciones sociales se dan sobre una base cara a cara, con las ciudades,
donde lo impersonal caracteriza a muchos aspectos de la vida. Redfi eld (1941)
propuso que la urbanización se estudiara a lo largo de un continuo rural-
urbano. Describió las diferencias en valores y relaciones sociales en cuatro
sitios que abarcaban tal continuo. En la península de Yucatán, en México, Redfi
eld comparó una aislada comunidad indígena de habla maya, un poblado
campesino rural, una pequeña ciudad provincial y una gran capital. Varios
estudios en África (Little, 1971) y Asia estuvieron infl uenciados por la visión de
Redfi eld de que las ciudades son centros a través de los cuales las
innovaciones culturales se dispersan hacia las áreas rurales y tribales.
ANTROPOLOGÍA MÉDICA La antropología médica es tanto académica-teórica
como aplicada-práctica e incluye a antropólogos de los cuatro subcampos (vea
Anderson, 1996; Briggs, 2005; Brown, 1998; Dressler et al., 2005; Joralemon,
2006; Singer y Baer, 2007). Los antropólogos médicos examinan cuestiones
sobre cuáles enfermedades y condiciones de salud afectan a poblaciones
particulares (y por qué) y cómo los padecimientos se construyen socialmente,
diagnostican, gestionan y tratan en diversas sociedades.
ANTROPOLOGÍA Y NEGOCIOS Carol Taylor (1987) discute la utilidad de un
“antropólogo en residencia” en una gran organización compleja, ya sea un
hospital o una empresa. Un etnógrafo de libre movimiento puede ser un “bicho
raro” perceptivo cuando la información y las decisiones usualmente se mueven
a través de una jerarquía rígida. Si se le permite observar y conversar
libremente con todos los tipos y niveles de personal, el antropólogo puede
adquirir una perspectiva única acerca de las condiciones y problemas de la
organización. Además, las compañías de alta tecnología, como Xerox, IBM y
Apple, han empleado antropólogos en diversos roles. Al observar de cerca
cómo las personas realmente usan los productos de cómputo, los antropólogos
trabajan con ingenieros para diseñar unos más amigables con el usuario.
LA CARRERA DE ANTROPÓLOGO Muchos estudiantes universitarios
encuentran interesante la antropología y consideran especializarse en ella. No
obstante, sus padres o amigos pueden desalentarlos al preguntar: ¿qué tipo de
empleo vas a conseguir con una especialidad en antropología?. El primer paso
para responder tal pregunta es considerarla en términos más generales: ¿qué
haces con una especialidad universitaria? La respuesta es “no mucho, sin una
buena cantidad de esfuerzo, pensamiento y planeación”. Una encuesta de
graduados del Colegio Literario de la Universidad de Michigan mostró que
pocos de los egresados tenían empleos claramente vinculados con sus
especialidades. Las carreras de medicina, derecho y muchas otras profesiones
requieren de estudios de posgrado. Aunque muchas universidades ofrecen
grados de licenciatura en ingeniería, negocios, contabilidad y trabajo social, con
frecuencia se requieren grados de maestría para conseguir los mejores puestos
en dichos campos. Los antropólogos, también necesitan un grado avanzado,
casi siempre un doctorado, para encontrar empleos atractivos en la academia,
en museos o en antropología aplicada.

También podría gustarte