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CORRESPONDENCIA

a b
Abscesos cerebrales múltiples
de etiología micótica en un
individuo inmunocompetente

Los abscesos cerebrales múltiples son muy po-


co frecuentes; se estima su incidencia en 0,9
por cada 100.000 personas/año [1]. A pesar de
que su incidencia en la población general ha
disminuido a lo largo del último siglo [1],
hemos asistido a un aumento progresivo en
individuos inmunodeprimidos; este hecho se
ha atribuido a la pandemia del sida, así como
al uso creciente de antibióticos de largo es-
pectro, inmunosupresores y corticoides [2,3].
La mortalidad ha tendido a disminuir [2-4],
hecho que se atribuye a una mayor eficacia de
los fármacos antimicrobianos, nuevas técnicas
quirúrgicas [5] y una mayor disponibilidad de
los medios imaginológicos [6]; sin embargo,
se asocia a secuelas neurológicas importantes,
de impacto menor cuanto antes se haya reali-
zado el diagnóstico y se haya instituido el tra- c d
tamiento [3].

Hombre de 39 años, comerciante de fruta –con


epilepsia idiopática de inicio en la infancia y
crisis de inicio focal con generalización se-
cundaria, parcialmente controlada con carba-
macepina, fenitoína y clonacepam–, que pre-
sentó un cuadro de hemiparesia derecha, mo-
noparesia crural izquierda, cefaleas y náuseas,
con empeoramiento progresivo a lo largo de
dos semanas. No evidenciaba factores de ries-
go para la infección por el virus de inmunode-
ficiencia humana (VIH) ni antecedentes de
inmunosupresión, neoplasia u otra enferme-
dad crónica. Se encontraba apirético y sin sín-
tomas o señales que sugirieran un síndrome
infeccioso focal o sistémico.
La tomografía axial computarizada (TAC)
craneoencefálica, sin contraste, reveló múlti-
ples lesiones nodulares de la sustancia blanca
subcortical, bilaterales y sin efecto de masa.
Figura. Resonancia magnética craneoencefálica en secuencia T1 tras la administración de gadolinio: a,b) El
La resonancia magnética (RM) craneoencefá- examen inicial revela múltiples lesiones nodulares subcorticales, con captación en anillo y edema circun-
lica (Figura, a,b) confirmó la presencia de dante; c,d) El examen de control tras tres meses de terapia muestra regresión casi total de las lesiones.
múltiples lesiones cerebrales bilaterales, de ca-
rácter quístico, de predominio en la sustancia
blanca periventricular y subcortical parietal y realizaron exámenes endoscópicos del tubo (250 mg/día por vía endovenosa) que se cum-
centro semioval izquierdo, con edema perile- digestivo, que fueron negativos para el proce- plió durante cinco semanas, seguido en el am-
sional y refuerzo de la señal en anillo tras la so neoplásico. bulatorio con fluconazol (400 mg/día por vía
administración del contraste. En el laboratorio Se inició el tratamiento empírico para la oral) y que se mantiene hasta el día de hoy. La
no se detectaron señales de infección o inmu- toxoplasmosis y el absceso cerebral bacteria- serología antitoxoplasmosis fue negativa y el
nosupresión. El hemograma y la bioquímica no con pirimetamina (50 mg /6 h por vía oral), análisis de Candida en el suero y el LCR fue
general fueron normales. La radiografía de tó- sulfadiacina (1,5 g/6 h por vía oral), ceftriaxo- positivo, por lo que se encontraba en el límite
rax, el ecocardiograma transesofágico y la na (2 g/12 h por vía endovenosa) y metronida- de la normalidad.
TAC torácica y de los senos perinasales no zol (500 mg/6 h por vía endovenosa) y el tra- De manera gradual se asistió a una mejora
mostraron alteraciones. El examen citoquími- tamiento antiedema con dexametasona (5 mg/ clínica e imaginológica progresivas, con una
co del líquido cefalorraquídeo (LCR) apenas 12 h por vía endovenosa). Después de una se- regresión total de los déficit neurológicos al
mostró una leve hiperproteinorraquia (81 mg/ mana de tratamiento –al mantenerse la falta cabo de un mes del tratamiento antifúngico.
dL). Las exploraciones en el LCR de células de definición en el diagnóstico y producirse En la actualidad el paciente se halla asintomá-
neoplásicas y de anticuerpos para virus neuro- un empeoramiento clínico progresivo, princi- tico, aunque mantiene lesiones residuales dis-
trópicos fueron negativas. Las serologías para palmente de las señales de hipertensión intra- cretas en la RM de control (Figura, c,d). Du-
el VIH 1 y 2, detección del antígeno p24 y pa- craneal– se efectuó una biopsia cerebral este- rante el ingreso, desarrolló linfopenia autoli-
ra la sífilis fueron negativas, así como los anti- reotáxica. El examen de cultivo bacteriológi- mitada con valores mínimos de 300/μL y can-
cuerpos antinucleares, anti-ADN, anticito- co fue negativo y no se realizaron cultivos en didiasis esofágica que se atribuyen a la corti-
plasma de los neutrófilos, complemento, enzi- un medio propio para hongos. El examen his- coterapia prolongada y esta última, a su vez, a
ma conversora de la angiotensina, antígeno car- tiológico mostró la presencia de hifas múlti- la antibioterapia de largo espectro.
cinoembrionario, antígeno del cáncer 19.9, ples, sin identificación histioquímica de la
antígeno específico de próstata y α-fetoproteí- especie. Se suspendió el tratamiento en curso y Los abscesos cerebrales son procesos supura-
na. La inmunofijación sérica fue normal. Se se inició otro con anfotericina B liposómica tivos focales del parénquima cerebral que re-

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sultan de la inflamación cerebral (cerebritis) ció el tratamiento antifúngico con una exce- 13. Mamelak AN, Mampalam TJ, Obana WG,
con necrosis y encapsulamiento subsiguiente lente respuesta, y en la actualidad se mantiene Rosenblum ML. Improved management of
[2]. Pueden tener su origen en una extensión con fluconazol, dado que no existían directri- multiple brain abscesses: a combined surgical
de un proceso supurativo contiguo (45-50%), ces establecidas en cuanto a la duración del and medical approach. Neurosurgery 1995; 36:
en una diseminación hematógena (25%), tras tratamiento en pacientes inmunocompetentes. 76-85.
un traumatismo o cirugía (10%) o tener una 14. Sofianou D, Selviarides P, Sofianos E, Tsa-
causa criptogénica (15%) [7-12]. La mayoría En resumen, la etiología micótica de abscesos kris A, Foroglou G. Etiological agents and
de los abcesos en individuos inmuncompeten- cerebrales múltiples en individuos inmuno- predisposing factors of intracranial abscesses
tes es de origen bacteriano, frecuentemente competentes, aunque es poco frecuente, se in a greek university hospital. Infection 1996;
polimicrobiano; Streptococccus es el agente debe tomar en consideración en el diagnóstico 24: 144-6.
más común, y el responsable del 70% de los diferencial de aquellas lesiones. El grado de 15. O’Donoghue MA, Green HT, Shaw MD. Ce-
abcesos cerebrales [13-16]. En el contexto de sospecha de afectación de estos agentes es rebral abscess on Merseyside 1980-1988. J
la inmunosupresión, la frecuencia de los más elevado en presencia de una respuesta de- Infect 1992; 25: 163-72.
agentes se relaciona con el tipo de inmunode- ficiente a la antibioterapia empírica. 16. Seydoux C, Francioli P. Bacterial brain abs-
ficiencia. Los pacientes con neutropenia son En presencia de un cuadro clínico e imagi- cesses: factors influencing mortality and se-
susceptibles a las infecciones por bacilos nológico con estas características, el recurso quelae. Clin Infect Dis 1992; 15: 394-401.
gramnegativos y ciertos hongos como Asper- de la biopsia cerebral precoz puede ser deci- 17. Murthy JM, Sundaram C, Prasad VS, Purohit
gillus, Candida y Mucoraceae. En el caso de sivo para el desenlace. Tan sólo ésta posibili- AK, Rammurti S, Laxmi V. Aspergillosis of
inmunodeficiencia celular, Listeria monocy- ta de manera definitiva el diagnóstico y orien- central nervous system: a study of 21 patients
togenes, Nocardia asteroides, micobacterias, ta hacia el tratamiento específico para una seen in a university hospital in South India. J
Criptococcus neoformans y Toxoplasma gon- patología que, de otra forma, tendría un de- Assoc Physicians India 2000; 48: 677- 81.
dii son los más agentes más implicados [3]. senlace fatal. 18. Sharma BS, Khosla VK, Kak VK, Banerjee
Los abscesos cerebrales de causa micótica AK, Vasishtha RK, Prasad KS, et al. Intracra-
se observan más frecuentemente en pacientes R. Guerreiro, M. Rodrigues, nial fungal granuloma. Surg Neurol 1997; 47:
inmunodeprimidos; Aspergillus o Zygomice- P. Fontoura, J. Pinto-Marques 489-97.
tes son los agentes más prevalentes [17-19]. 19. Dubey A, Patwardhan RV, Sampth S, Santosh
Resultan raros en ausencia de inmunosupre- Aceptado tras revisión externa: 11.05.06. V, Kolluri S, Nanda A. Intracranial fungal
sión, y aparecen en contextos epidemiológi- Servicio de Neurología. Hospital de S. Bernardo. Se- granuloma: analysis of 40 patients and re-
cos específicos, asociados a la exposición am- túbal, Portugal. view of the literature. Surg Neurol 2005; 63:
biental de esporas en gran cantidad [19]. Se Correspondencia: Dr. Rui Guerreiro. Serviço de Neu- 254-60.
localizan de manera más frecuente en los ló- rologia. Hospital de S. Bernardo. Rua Camilo Caste-
bulos frontales y en la fosa craneal anterior [19]. lo Branco. 2900 Setúbal, Portugal. Fax: (+351) 265
549 050. E-mail: rpguerreiro@gmail.com
Las manifestaciones clínicas resultan de la
localización y las dimensiones de las lesiones; Enfermedad del desembarco
las más comunes son: fiebre, 37-75%; cefalea, BIBLIOGRAFÍA
56-94%; déficit neurológicos focales, 49-75%; (mal de débarquement)
alteraciones del estado de la consciencia, 10- 1. Nicolosi A, Hauser WA, Musicco M, Kurland en la vida moderna
100%; convulsiones, 12,5-47%; náuseas y vó- LT. Incidence and prognosis of brain abscess
mitos, 31-77%; rigidez de la nuca, 11%; y pa- in a defined population: Olmsted County, La enfermedad del desembarco es un síndro-
piledema, 6,3-50% [1,13,15,16]. Minnesota, 1935-1981. Neuroepidemiology me reconocido desde hace varios años. En
El diagnóstico se asienta en las pruebas de 1991; 10: 122-31. 1881, Irwin observó que existe una adapta-
imagen (TAC y RM) y fundamentalmente en 2. Mathisen GE, Johnson JP. Brain abscess. ción al movimiento pasivo (viaje en barco), y
el aislamiento del agente en el examen del Clin Infect Dis 1997; 25: 763-79. que ésta puede ser suficientemente intensa co-
cultivo tras la biopsia estereotáxica [3]. El 3. Calfee DP, Wispelwey B. Brain abscess. mo para persistir la sensación de vaivén aun
planteamiento del tratamiento en la mayoría Semin Neurol 2000; 20: 353-60. en tierra: este autor denominó a este síndrome
de los casos incluye drenaje quirúrgico y te- 4. Heilpern KL, Lorber B. Focal intracranial mal de débarquement (MdD) [1]. Se describe
rapia antimicrobiana [2,3]. La aspiración o infections. Infect Dis Clin North Am 1996; típicamente como una sensación de oscilación
excisión están indicadas en todas las lesiones 10: 879-98. o balanceo de la persona respecto al entorno
superiores a 2,5 cm o que causan efecto de 5. Tunkel AR. Brain abscess. Curr Treat Op- sin sensación clara de vértigo. Se trata clásica-
masa [13]. En caso de lesiones múltiples y/o tions Infect Dis 2000; 2: 449-60. mente de una entidad vaga e indolente desen-
de acceso difícil, se recomienda el tratamien- 6. Rosenblum ML, Joff JT, Norman D, Wein- cadenada típicamente después de un viaje en
to médico aislado. En estos casos se debe ini- stein PR, Pitts L. Decreased mortality from barco, aunque se han descrito síntomas simi-
ciar el tratamiento antimicrobiano empírico, brain abscesses since advent of computerized lares tras un viaje en avión [2] y automóvil
de manera que se cubra el espectro de los tomography. J Neurosurg 1978, 49: 658-68. [3]. Se debe diferenciar de la cinetosis, una en-
agentes más frecuentes, mientras se esperan 7. Chun CH, Johnson JD, Hofstetter M, Raff MJ. tidad que surge directamente durante el movi-
los resultados de los exámenes de los cultivos Brain abscess: a study of 45 consecutive cases. miento y cuyo síntoma más constante son las
para bacterias aerobias, anaerobias, micobac- Medicine (Baltimore) 1986; 65: 415-31. náuseas.
terias y hongos [3]. 8. Arseni C, Civrea AV. Cerebral abscess se- Hasta el año 2003 se habían comunicado só-
En este caso, nos encontrábamos ante un condary to otorhinolaryngological infections. lo 46 casos de MdD; de ellos, más de la mitad
paciente apirético, sin foco infeccioso detecta- Zentralbl Neurochir 1988; 49: 22-36. corresponden a una encuesta publicada por
ble, sin evidencia de inmunodeficiencia y sin 9. Kangsanarak J, Navacharoen N, Fooanant S, Hain et al [4]. Existen diferencias entre distin-
un contexto epidemiológico específico, que Ruckphaopunt K. Intracranial complications tos autores sobre cuándo considerar MdD se-
presentaba múltiples lesiones cerebrales de of suppurative otitis media: 13 years experi- gún la duración de los síntomas [5]: desde el
etiología desconocida; asistimos a un empeo- ence. Am J Otol 1995; 16: 104-9. momento del desembarco o tras 48 horas de
ramiento clínico e imaginológico progresivos 10. Small M, Dale BA. Intracranial suppuration persistencia de los síntomas (que algunos au-
a pesar del tratamiento empírico instituido, 1968-1982: a 15 year review. Clin Otolaryn- tores denominan ‘MdD persistente’) [6]. Hay
motivo por el cual el recurso de la biopsia es- gol Allied Sci 1984; 9: 315-32. un acuerdo general en considerar el MdD co-
tereotáxica fue fundamental para establecer el 11. Yang SH. Brain abscess: a review of 400 cas- mo una entidad poco reconocida más que po-
diagnóstico. Aunque no fue posible aislar en el es. J Neurosurg 1981; 55: 794-9. co frecuente. En este sentido, presentaremos
cultivo el agente implicado, existía una clara 12. Hakan T, Ceran N, Erdem I, Berkman MZ, cinco casos de MdD diagnosticados en el últi-
evidencia histológica de la presencia de hifas Goktas P. Bacterial brain abscesses: an evalu- mo año y discutiremos los hallazgos clínicos y
que confirmaron la etiología micótica. Se ini- ation of 96 cases. J Infect 2006; 52: 359-66. los mecanismos fisiopatológicos.

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