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REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD DEL ZULIA


FACULTAD DE ODONTOLOGIA
CATEDRA: DESARROLLO PERSONAL

AUTOESTIMA

AUTORA

RODRIGUEZ R. DIANA A. V.-25254837

SECCION 002

PROFESORA: TORO MIRLEY

MARACAIBO, 26 DE JULIO DE 2018


Autoestima

La autoestima es un factor importante a considerarse en la vida de las


personas en general y en particular, en el tema del desempeño y de las actitudes
hacia las actividades académicas de los y las estudiantes. De acuerdo con Rice
(2000), la autoestima de una persona es la consideración que tiene hacia sí
misma, además señala que ha sido denominada el vestigio del alma y que es el
integrante que le proporciona dignidad a la existencia humana. La autoestima se
desarrolla a partir de la interacción humana, mediante la cual las personas se
consideran importantes unas para las otras. El yo evoluciona por medio de
pequeños logros, los reconocimientos y el éxito.

En opinión de Maslow, citado por Stronck (2002), la mayoría de las


personas que no han desarrollado un alto nivel de estima nunca llegaran a
autorrealizarse. De Mezerville (2004) menciona que Abraham Maslow ha sido uno
de los representantes de la psicología humanista quien mas ha difundido el papel
que la autoestima desempeña en la vida de la persona, al incluirla dentro de su
conocida jerarquía de las necesidades. Para Maslow existen dos (02) tipos de
necesidades de estima, la propia y aquella que proviene de las otras personas y
ambas las ubica jerárquicamente por encima de las necesidades fisiológicas, las
de seguridad personal y las de amor y pertenencia.

La autoestima esta relacionada con muchas formas de conducta, es por ello


que hoy día encontramos muchas personas que quizá en ocasiones coincidan con
nuestros pensamientos pero otras que verdaderamente no y es allí donde vemos
la gran variedad de conductas que podemos presentar en diferentes momentos de
la vida, sobre todo ante factores influyentes en la sociedad que nos hacen cambiar
el estado de animo en ciertos momentos y que nosotros somos quienes
permitimos que estos factores nos afecten bien sea de manera positiva o negativa
en la toma de nuestras decisiones siendo capaces de afectar incluso a las
personas de nuestro entorno con nuestro comportamiento. El concepto de
autoestima nos hace ver o reconocer la capacidad que tenemos de establecer
nuestra propia identidad y atribuirnos un valor respectivo siendo esto lo que
conocemos como autoestima dejando claro que si conseguimos un buen nivel de
autoestima resistiremos las críticas, nos abriremos mejor a las personas,
aprenderemos a pedir ayuda y en general nos resultará mucho mas gratificante
vivir, lo que contribuirá también a prevenir cualquier proceso depresivo.

Componentes de la autoestima

De acuerdo con Gastón de Mezerville (2004), existen una serie de aspectos


interrelacionados que componen la autoestima y a partir de esto presento un
modelo propio al que ha denominado proceso de la autoestima considerándola en
dos (02) dimensiones complementarias, una actitudinal inferida integrada por tes
(03) componentes: la autoimagen, la autovaloración y la autoconfianza; y una
dimensión conductual observable conformada por otros tres (03) componentes; el
autocontrol, la autoafirmación y la autorrealización.

Sobre el primer componente la autoimagen consiste en la capacidad de


verse a si mismo o a si misma como la persona que realmente es, con sus
virtudes y defectos, la persona que tiene una autoestima saludable trata de estar
consciente incluso de sus errores, por cuanto la autoestima no se vincula con ser
perfecto o perfecta sino que se trata de lograr una percepción básica de las
características mas relevantes de la propia personalidad, su relación con otras
personas y con el medio ambiente, es importante decir que la autoimagen no es
un aspecto estático, incluye el conocimiento propio basado en experiencias
pasadas, al igual que las concepciones que la persona va elaborando sobre su
posible evolución futura.

Generalmente, los problemas de autoestima se asocian con una baja


autoimagen; no obstante, también es posible que una autopercepción de
superioridad señales dificultades en este aspecto, dando como resultado lo que se
le denomina pseudoautoestima; al respecto Branden citado por de Mezerville
(2004) señala “la arrogancia, la jactancia y la sobreestimación de nuestras
capacidades refleja más bien una autoestima equivocada y no, como imaginan
algunos, un exceso de autoestima. Las metas por lograr consisten en la búsqueda
de un autoconocimiento que le permita a la persona su capacidad de percibir, de
manera equilibrada tanto los aspectos positivos como negativos de su
personalidad.

Respecto al segundo componente la autovaloración, consiste en que la


persona se considere importante para si misma y para las demás, este se
relaciona con otros aspectos como la autoaceptación y el autorespeto y significa
que se percibe con agrado la imagen que la persona tiene de sí y designa la
autovaloración como el respeto a uno mismo o a una misma definiéndola como la
confianza en nuestro derecho a triunfar y a ser felices, el sentimiento de ser
respetables, de ser dignos y de tener derecho a afirmar nuestras necesidades y
carencias, a alcanzar nuestros principios morales y a gozar del fruto de nuestros
esfuerzos. La meta en este aspecto consiste en identificar aquellos medios
adecuados que satisfagan la necesidad que tiene la persona de verse a si misma
en forma positiva, de tal manera que les otorgue mayor valor y atención a las
dimensiones realmente importantes de su personalidad.

Sobre el tercer componente, autoconfianza, se señala que ésta se


caracteriza porque la persona cree que puede realizar bien distintas cosas y
sentirse segura al hacerlas, esta percepción interna favorece una buena
autoestima, sentirse cómodo o cómoda en la relación con otras personas y
manifestarse con espontaneidad, la autoconfianza se traduce en que la persona
crea en si misma y en sus propias capacidades para enfrentar distintos retos, lo
que a su vez la motiva a buscar oportunidades que le permitan poner en práctica y
demostrar sus competencias. La meta de superación personal en el aspecto de la
autoconfianza consiste en desarrollar una actitud realista de creencia en si mismo
y en sus propias capacidades, en la voluntad de ejercitarlas adecuadamente y de
disfrutar al hacerlo.

En cuanto al cuarto componente, el autocontrol, se menciona que consiste


en manejarse adecuadamente en la dimensión personal, cuidándose,
dominándose y organizándose bien en la vida, significa la capacidad de ordenarse
apropiadamente y ejercer un dominio propio que fomente tanto el bienestar
personal como el del grupo al que se pertenece, por lo tanto, el término
autocontrol incluye otros aspectos, tales como el autocuidado, la autodisciplina, la
organización propia o el manejo de si mismo o de si misma. La capacidad de
autocontrol con frecuencia se ve limitada en aquellas personas con baja
autoestima y esta falta de capacidad se manifiesta en una situación de descontrol
en diversas áreas, tales como el autocuidado, el manejo de las emociones, las
relaciones interpersonales, los hábitos de trabajo, de estudio o de la vida en
general y la falta de habilidad para organizar acciones en pro del logro de metas
deseadas. La meta de superación en este aspecto del autocontrol consiste en
adoptar destrezas adecuadas de cuidado personal y patrones de comportamiento
caracterizados por una buena disciplina y organización existencial.

Sobre el quinto componente, la autoafirmación, se define como la libertad


de ser uno mismo o uno misma y poder tomar decisiones para conducirse con
autonomía y madurez, se caracteriza por la capacidad que tiene la persona de
manifestarse abiertamente cuando expresa sus pensamientos, deseos o habilidad,
además, incluye otras capacidades tales como la autodirección y la asertividad
personal. Las personas que no se aprecian lo suficiente y valoran poco sus
capacidades y cualidades, con frecuencia se abstienen de participar o de decidir
debido al temor que les provoca el poder equivocarse frente a otras personas, este
tipo de comportamiento las conduce a anularse ante las oportunidades de
expresar sus opiniones y talentos.

La misma situación ocurre con las personas que buscan en exceso la


aprobación de otras, al no sentirse capaces de manifestar lo que realmente
piensan o sienten, se dejan conducir por la presión social, llegando incluso a
incurrir en conductas autodevaluativas lo que es distinto es el caso de quienes
procuran sentirse satisfechas consigo mismas, pues aun a riesgo de que sus ideas
o acciones puedan ser desaprobadas, las manifiestan, logrando con ella una
autoestima bastante saludable. La meta de superación en este componente es
encontrar formas saludables de expresar el pensamiento y las habilidades ante las
demás personas y en conducirse de manera autónoma, sin llegar a los extremos
de sobredependencia o autosuficiencia exagerada.
Respecto al último componente la autorrealización de Mezerville explica
que consiste en el desarrollo y la expresión adecuada de las capacidades, de
modo que la persona pueda vivir una vida satisfactoria y de provecho para si
misma y para otras personas, esto implica la búsqueda del cumplimiento de las
metas que conforman el proyecto vital de su existencia, las personas que gozan
de una buena autoestima, tienden a manifestar dos (02) características de la
verdadera autorrealización; por una parte, que sus metas sean significativas y por
otra, que le permitan proyectarse personalmente, generando beneficio para si y
para otras personas y obteniendo satisfacción de ello.

Contrario a la situación anterior, las personas con baja autoestima


generalmente se lamentan de su falta de realización personal y se asocian esta
queja con una sensación de estancamiento existencial. Las metas por alcanzar en
este aspecto exigen que la persona se proyecte mediante diversas áreas de
interés, aptitud o compromiso que le resulten significativas y para lograr este
propósito es necesario que descubra lo que le otorga verdadero sentido a su vida,
que desarrolle sus capacidades y se plantee metas que promuevan la realización
personal de su existencia.

Tipos de autoestima

Se consideran diferentes tipos de autoestima describiéndose como alta,


media y baja; veremos algunas características de cada uno de los tipos de
autoestima comenzando con autoestima alta que también se le suele conocer
como autoestima positiva siendo aquella que suele describir a las personas que se
sienten satisfechas de sí mismos y a la vez que tienen una gran confianza en sus
propias capacidades, los individuos que tienen una alta autoestima llegan a tomar
decisiones asumiendo así los riesgos que esta puedan devenir, así mismo llegan a
enfrentar diversas tareas con distintos niveles de dificultad y nunca disminuyen
sus expectativas y el modo positivo de verlas, la alta autoestima lleva a la persona
a actuar sin registrar emociones negativas, agresivas o depresivas, algo que no
sucede en individuos con autoestima baja, una autoestima alta ayuda a la persona
a manejar mucho mejor el estrés, y al mismo tiempo llega a tener efectos
positivos en su persona, sea psicológico o de salud.

El siguiente tipo de autoestima es la autoestima media donde las personas


con este tipo de autoestima registran cierta inestabilidad en la autovaloración, en
algunos momentos las personas tienden a sentirse inferiores que otros, incapaces
y débiles, mientras que en otros momentos se sienten útiles y capaces
representando una autoestima alta. Este tipo conlleva ciertos riesgos, podría
pensarse que esa fluctuación entre una visión positiva y una negativa debería
mantenerse como en una especie de equilibrio, sin embargo, la norma general es
que la autoestima media tienda a bajar, que se convierta en una baja
autoestima de la que nos cueste mucho salir; así pues, el objetivo en cuestión de
autoestima no es el equilibrio, sino mantener la autoestima en los niveles más
altos y la única forma de no sufrir problemas de autoestima, de no dejarnos vencer
por las dificultades y de seguir nuestro camino seguros, seguras, decididos y
decididas es convertir esa autoestima media o relativa en una autoestima más
alta.
Por último la autoestima baja describe aquellas personas que suelen
mostrarse inseguras e insatisfechas a todo momento; al mismo tiempo se
muestran muy sensibles ante críticas y  tienen una gran dificultad a la hora de
reclamar sus derechos, por lo tanto muchas veces se dejan pisotear por los
demás, estas personas siempre tienden a resguardarse de otras que tienen un
nivel mayor de autoestima, ya que buscan la forma de aumentar su autoestima,
una autoestima baja puede atraer diversos problemas psicológicos, como son:
vergüenza, neurosis, depresión, timidez, impaciencia, agresividad, arrogancia,
critica, rebeldía, entre otras las cuales propician conflictos en las relaciones
interpersonales.

Abraham Maslow
Fue un psicólogo humanista (1 de abril de 1908 - 8 de junio de 1970) que
tuvo parte importante en temas de autoestima e incluso influyó de manera
considerable en una teoría llamada teoría de la personalidad donde jerarquizó las
necesidades de cada individuo mediante una pirámide que posteriormente fue
reconocida como la pirámide de Maslow y que hoy día ha influido bastante en
temas de psicología y lo respectivo al tema de autoestima. Según Maslow
nuestras acciones nacen de la motivación dirigida hacia el objetivo de cubrir
ciertas necesidades las cuales pueden ser ordenadas según la importancia que
tienen para nuestro bienestar, de tal forma defendió que conforme se satisfacen
las necesidades mas básicas, los seres humanos desarrollamos necesidades y
deseos mas elevados. Mientras que algunas escuelas existentes a mediados del
siglo XX (el  psicoanálisis o el conductismo) se centraban en conductas
problemáticas y en el aprendizaje desde un ser pasivo y sin demasiadas opciones
de influir en el entorno más de lo que este influye en él, Maslow estaba más
preocupado en aprender sobre qué hace a la gente más feliz y lo que se puede
hacer para mejorar el desarrollo personal y la autorrealización. 
Como humanista, su idea era que las personas tienen un deseo innato para
autorrealizarse, para ser lo que quieran ser, y que cuentan con la capacidad para
perseguir sus objetivos de manera autónoma si se encuentran en un ambiente
propicio, sin embargo, los diferentes objetivos que se persiguen en cada momento
dependen de qué metas se han conseguido y cuáles quedan por cumplir, según la
pirámide de necesidades. Para aspirar a las metas de autorrealización, antes han
de cubrirse las necesidades anteriores como la alimentación, la seguridad, entre
otros. Por ejemplo, solo nos preocupamos de temas relacionados con la
autorrealización si estamos seguros de que tenemos un trabajo estable, comida
asegurada y unas amistades que nos aceptan.

En la Pirámide de Maslow, desde las necesidades más básicas hasta las


necesidades más complejas, esta jerarquía está compuesta por cinco niveles, las
necesidades básicas se ubican en la base de la pirámide, mientras que las
necesidades más complejas se encuentran en la parte alta. Así pues, las cinco
categorías de necesidades de esta pirámide son las fisiológicas que Incluyen las
necesidades vitales para la supervivencia y son de orden biológico y encontramos
necesidades como: respirar, beber agua, dormir, comer, sexo, refugio. Las
necesidades de seguridad son necesarias para vivir, pero están a un nivel
diferente que las necesidades fisiológicas; es decir, hasta que las primeras no se
satisfacen, no surge un segundo eslabón de necesidades que se orienta a
la seguridad personal, al orden, la estabilidad y la protección.

Las necesidades de afiliación y afecto están relacionadas con el desarrollo


afectivo del individuo, son las necesidades de: asociación, participación,
aceptación, éstas se satisfacen mediante las funciones de servicios y prestaciones
que incluyen actividades deportivas, culturales y recreativas. El ser humano por
naturaleza siente la necesidad de relacionarse, ser parte de una comunidad, de
agruparse en familias, con amistades o en organizaciones sociales. Entre estas se
encuentran: la amistad, el compañerismo, el afecto y el amor.

Seguidamente tenemos las necesidades de estima donde Maslow describe dos


tipos de necesidades de estima, una alta y otra baja. La estima alta concierne a la
necesidad del respeto a uno mismo, e incluye sentimientos tales como confianza,
competencia, maestría, logros, independencia y libertad mientras que la
estima baja concierne al respeto de las demás personas: la necesidad de
atención, aprecio, reconocimiento, reputación, estatus, dignidad, fama, gloria, e
incluso dominio. La merma de estas necesidades se refleja en una baja
autoestima y el complejo de inferioridad. El tener satisfecha esta necesidad apoya
el sentido de vida y la valoración como individuo y profesional, que tranquilamente
puede escalonar y avanzar hacia la necesidad de la autorrealización, la necesidad
de autoestima es la necesidad del equilibrio en el ser humano, dado que se
constituye en el pilar fundamental para que el individuo se convierta en el hombre
de éxito que siempre ha soñado, o en un hombre abocado hacia el fracaso, el cual
no puede lograr nada por sus propios medios.

Finalmente tenemos el nivel de autorrealización, este último nivel es algo


diferente y Maslow utilizó varios términos para denominarlo como el de motivación
de crecimiento, necesidad de ser y autorrealización que es la necesidad
psicológica más elevada del ser humano, se halla en la cima de las jerarquías, y
es a través de su satisfacción que se encuentra una justificación o un sentido
válido a la vida mediante el desarrollo potencial de una actividad. Se llega a ésta
cuando todos los niveles anteriores han sido alcanzados y completados, o al
menos, hasta cierto punto.

Autoaprendizaje

La autoestima es un proceso dinámico y multidimensional que se construye


a lo largo de la vida, se desarrolla a partir de la interacción humana, contiene
aspectos actitudinales, cognitivos, afectivos y conductuales en el que mediante el
autoconocimiento la persona puede lograr la autoaprobación y por consiguiente la
suficiente autoestima para aceptarse a sí misma y de esta manera poder
relacionarse con los demás permitiendo crear situaciones de estabilidad
emocional, empatía con las personas que se encuentran en nuestro entorno,
sobre todo hoy día donde cada uno vive en situaciones de estrés constante y las
actitudes de otras personas pueden influir en la nuestra si no tenemos fortalecidos
una serie de valores que nos ayudan a mantenernos estables o en un nivel de
autoestima alto.

Como profesionales del área de la salud nos encontramos ante infinidades


de personas con diversos tipos de autoestima sobre todo en nuestro ámbito
laboral que es odontología donde muchas personas en tal caso pacientes suelen
estar inmersos en cuadros de autoestima baja y no le dan importancia a la salud
bucal olvidándose de que lo primero que se muestra a nuestro entorno es la
sonrisa y nada más gratificante que una sonrisa saludable sin referirnos a esto con
sonrisa corregida por ortodoncia sino en ausencia de enfermedades bucodentales.

De la mano de nuestra área llevamos nuestra vida personal y muchos


pacientes en ocasiones suelen tomar nuestras actitudes, acciones y/u estilos de
vida como ejemplos a seguir para mejorar su autoestima y es allí donde nosotros
como profesionales podemos ahondar también en ese ámbito recordando que
primero somos seres humanos y luego profesionales de la salud bucal.
Particularmente expongo mi caso, tengo una hija de dos (02) años de edad, estoy
embarazada a punto de dar a luz, soy estudiante foránea y es un verdadero reto
estudiar odontología debido a las situaciones a las que he tenido que enfrentarme
para cumplir mis metas sin descuidar mi vida personal y familiar dando a conocer
a los demás que si se puede cuando se quiere y que nunca se debe dejar de
luchar por cada uno de nuestros sueños y metas.

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