Materia: Metodología Bíblica

Profesor: Fernando Gonzalez

Autobiografía Cesar David González Perez

Mi llegada al mundo y primeros años
Nací hace cuarenta y ocho años, un 16 de enero de 1973, en el Hospital Antonio María Pineda,
situado en la ciudad de Barquisimeto. Siendo el primero mis hermanos y primos por parte de mi
familia materna, mi nacimiento fue muy celebrado. Los primeros años de mi vida fueron muy felices,
rodeado de una familia conformada por adultos, hasta que cumplí cuatro años y llego mi primer
hermano.
La etapa de la escuela
A los tres años fui escolarizado en un kínder de la zona, siendo una etapa que recuerdo como feliz e
inocente. Mis notas en aquella época eran relativamente elevadas, y aprender a leer precozmente
con la ayuda de mi abuela supuso el nacimiento de lo que sería una gran fortaleza: la comprensión
lectora. Las matemáticas sin embargo fueron una asignatura en la que nunca destaqué.
Recuerdo muchas tardes leyendo en la biblioteca de casa de la modesta casa mi abuela, ya que
entre los cuatro y cinco años mis padres se separaron y posteriormente divorciaron, situacion por la
que me volví retraído y no salía mucho a jugar con amigos de la escuela o el vecindario, recuerdo
las vacaciones con mis tíos en Valencia y/o Valera.

Adolescencia: una fase compleja

La adolescencia fue para mí complicada. Dado que, pese a no ser sociable y extremadamente
reservado, en aquella época logre hacer amistades fuertes, con unos pocos amigos que aún hoy en
día conservo. La lectura y el interés por la filosofía me introdujo en el pensamiento ideológico, lo
que hizo que empezara a acercarme a organizaciones partidistas (algo que terminaría por
convertirse en una vocación). Asimismo, empezaría a participar en movimiento scout, del cual soy
hoy día director Ejecutivo Nacional. Esa etapa también fue muy emocionante, descubriendo los
primeros amores, no siempre correspondido y empezando a viajar por distintas ciudades del
occidente del país.
Durante este tiempo mi madre tuvo segundas nupcias y llegaron dos hermanos más una hembra y
un varón. Por su parte mi padre también se casó nuevamente y tuvo tres hijos más, un varón dos
hembras, con los cuales el contacto no ha sido el más frecuente, pero lo he propiciado desde mi
persona.
Otro aspecto que me fue especialmente difícil en aquella época fue la de decidir mi futuro
profesional. Cruzaba por mi cabeza desde niño estudiar derecho (lo que yo creía que era la base de
los estadistas), además de opciones como pedagogía, siendo mi madre, padre y mayoría de tíos
paternos y maternos educadores. Sin embargo, terminaría por decidirme por estudiar Ciencia
Política. Gracias al apoyo de mi madre, pude iniciar estudios en la Universidad de los Andes, los
cuales conseguí culminar laureado con éxito y con la nota suficiente como para ser el mejor alumno
de toda la universidad en el año que egresé.

Iniciando mi vida adulta

Una vez egresado de la universidad, conseguí empleo en la Fundación para el Desarrollo de las
Comunidades y el Municipio en mi ciudad natal, empleo que tuve la oportunidad de encontrar, recién
graduado cuando aún servía como barman y mesonero en un lujoso hotel de la ciudad de Mérida,
trabajo que realicé en paralelo con mis últimos años de estudios en pregrado, y donde tuve la
oportunidad de servir a quien luego sería mi jefe en Fundacomun Lara. Luego de un par de años,
con una meteórica carrera que me llevaría a ser coordinador regional del programa de alimentación
escolar, me fui a otro ente gubernamental como coordinador operativo: la Fundación Arcoíris. En
este tiempo me divorcie de la que fue mi primera esposa por ocho años. Luego de lo cual conocí a
mi segunda esposa, una colega que me acompaño en el trabajo de la Fundación Arcoíris. Fue una
etapa dura, de un nuevo comienzo, un cambio de gobierno hizo que saliese de la Fundación Arcoíris
y recibiese una propuesta como consultor en el Estado Falcón, donde termine siendo Gerente de
Operaciones de la Fundación Alcom. En la ciudad de Coro durante ese tiempo recibí muchas
bendiciones: nació mi segunda y muy amada hija Natalia, adquirí vivienda propia, pero la mayor de
ellas, el Señor dispuso que lo conociese y puso en mi camino al Pastor Eduar Rojas, quien por largo
tiempo me predico con testimonio y amistad, despertando en mí el interés por conocer a Dios.
Estando en Coro, conocí al Director de Nutrición del Estado Falcón, quien más adelante me
propondría para ser Director de Nutrición en el Estado Lara, con lo cual volvería una vez más a mi
ciudad natal, donde a pesar de tener expertica logística en el área alimentaria tenia carencias en el
enfoque sanitario; por lo cual inicie estudios de postgrado en el área de la Gerencia de Salud. Ejercí
el cargo de Director Regional, entre diatribas y construcción de consensos con Colegios Profesionales
y sindicatos de trabajadores, por no ser yo un profesional con pregrado en una carrera tradicional de
la salud, hasta que recibiera de la Directora Ejecutiva del Instituto la propuesta de encargarme de la
Dirección Nacional de Gestión Alimentaria, la cual acepté. Implicando esto mi traslado a la Ciudad de
Caracas, donde todavía hoy resido.
Estando en Caracas, debido a la distancia, falta de madurez y permanecer en el mundo se deterioró
mi segundo matrimonio a tal punto que me llevo a la separación y posterior divorcio. En lo laboral,
luego de cumplir funciones en el Instituto Nacional de Nutrición, fui designado como Coordinador de
la Sala Situacional del Servicio Nacional de Atención a la Infancia y a la Familia, tiempo en el cual
inicie estudios doctorales en Ciencias Gerenciales, el cual culmine satisfactoriamente doctorándome
a los 38 años.
Situación actual
Estando en Caracas conocí a la mujer del propósito para mi vida, la cual es mi esposa, amiga,
compañera y socia de al menos 3 proyectos empresariales que hemos emprendido juntos. Uno de
ellos de tipo agroindustrial, lo que me llevo al campo a producir pimentones en invernadero por
cinco años, en la zona de Barlovento. Durante mi estancia en la Caracas he ejercido la docencia
universitaria a nivel de pregrado y postgrado, en la Universidad Central de Venezuela, la Universidad
Simón Rodríguez, la Academia Militar de Venezuela, La Escuela Nacional de Administración y
Hacienda Pública. Así mismo, en el plano académico, curse y culmine en ese tiempo estudios post
doctorales en ciencias gerenciales, y participe como investigador en la publicación de artículos en
revistas científicas indexadas y del libro “La Ultima Frontera de la Gerencia”.
He recibido junto a mi esposa Lietzka, grandes bendiciones, aceptamos juntos al Señor, nos
bautizamos y hoy día servimos como líderes en una iglesia hija del Ministerio Centro de Esperanza. Y
lo mejor de todo vivimos un matrimonio dichoso donde hemos aprendido a vivir el propósito que
Dios tiene para nuestras vidas.
Entre mis fortalezas puedo decir, modestia aparte, que me caracteriza la facilidad para el
pensamiento abstracto, la profundidad en el análisis, la seriedad y determinación con que tomo las
cosas, el aprecio por la belleza intrínseca, la sensibilidad y el sacrificio por otros. Con respecto a las
debilidades o áreas de mejora de mi persona que he identificado y en las que estoy trabajando para
mejorar están: la susceptibilidad a veces extrema (cada vez menos), la memoria implacable de
cosas negativas (lo cual me dificulta el perdón, la misericordia de Cristo me ayuda a superar esto);
y en algunos casos mi estilo de liderazgo podría caer en el autoritarismo.
Y aunque ya han pasado varios años así llegamos al día de hoy, catorce de abril de 2021, en un
momento de mi vida en la que mi vida profesional y ministerial aún debe continuar durante muchos
años más y he conseguido junto a un socio iniciar un proyecto que va a traer éxito: PubliK-t.com,
una plataforma digital de comercialización de bienes y servicios, a la vez que afronto el que sin duda
será mi mayor proyecto: el liderazgo del área de consolidación de mi congregación.