OBITER DICTA

La expresión de “OBITER DICTA” viene del latin Obiter - de paso y dicta - dictar,
prescribir o prescripto. Esta expresión latina en español significa “DICHO PASO” y
se refiere a los argumentos mencionados en la parte de las consideraciones de la
resolución judicial o sentencia la cual confirma la decisión principal pero le falta
poder vinculante ya que de por sí, su naturaleza es simplemente complementaria.
“Dictum es todo aquello que dice a propósito del tema, o incluso lateralmente, y sin
vinculación con el thema decidendum, lo cual no es entonces un precedente judicial”
(Gordillo, Introducción V-33). El obiter como consecuencia presentan una conexión
entre argumentación y resolución la cual es adoptada por el tribunal en caso de
virtud en donde esa argumentación es excelente para la decisión que se acoge. Es
decir es un argumento el cual en la sentencia se puede considerar obiter y en otra
puede que no.

RATIO DECIDENDI

Este concepto es conocido como “la formulación general, la cual va más allá de las
particularidades del caso, de la regla o razón general la cual constituye la base de la
decisión específica judicial” Es decir, esta no da soluciones a los problemas útiles
que congrega la lectura de la jurisprudencia. Si se abandona la labor lectora
espontánea y extraña al imperativo de igualdad, universalidad y racionalidad del
precedente, entonces el precedente de los jueces describe y a la vez contrapone
dos tipos de conceptos sobre la la ratio decidendi, en donde la primera es “Formal y
constructiva” es decir, esta se encuentra en las expresiones de los jueces anteriores
en forma de enunciados y argumentos, por ende puede ser encontrada en una
sentencia previa. La segunda menciona que, la ratio no se encuentra
explícitamente formulada y depende de una racionalización siguiente de la
sentencia por parte del, el cual decide el nuevo caso. La diferencia entre estas dos
posiciones en la versión de Diego Lopez Medina, se basa en el valor asignado a
los hechos del caso como también la relación de dicha decisión. Desde el punto de
vista formal este solo se basa en importantes consideraciones generales de la
doctrina las cuales pueden ser extraídas literalmente del texto de la sentencia, pero
desde lo Constructivo, esta relación se basa en los hechos y decisiones en las
cuales es determinante que ningún argumento genérico de la motivación puede ser
atendido sin el contexto que lo rodea. Al hacer a un lado los hechos para centrarse
en un discurso jurídico abstracto se podría decir que es un acto corto de vista que
desconoce y reduce la amplitud del derecho jurisprudencial.
DECISUM

El Decisum se refiere a la resolución concreta del caso, es decir, es la determinación

específica en donde se dice que el acusado es o no es culpable en términos
penales, si el demandado debe o no responder en materia civil cuando al
peticionario, el juez de tutela o no su derecho, si la disposición a imputar es o no
retirada del ordenamiento.

En la sentencia SU-047/99 se dice que en la construcción de la teoría de la obligatoriedad

de los precedentes judiciales, la corte constitucional utiliza los conceptos de Decisum, Ratio
Decidendi y Obiter Dicta, en donde determinan las partes de la decisión judicial
constituyente fuente formal de derecho. El Decisum, es decir, la resolución concreta del
caso, la que determina si la norma debe salir o no del ordenamiento jurídico en materia
constitucional. Lo anteriormente mencionado tiene efectos erga omnes y fuerza vinculante
para todos los operadores jurídicos. La ratio decidendi, la cual se entiende como la
formulación general del principio razón o regla general que constituyen la base necesaria de
la decisión judicial específica, esta también tiene fuerza vinculante general. Los obiter dicta
o en español los dichos de paso, no tienen poder vinculante, pero sí tiene una fuerza
persuasiva que depende del prestigio y jerarquía del tribunal, y constituyen criterio auxiliar
de interpretación.

Como también en la Sentencia C-037 de 1996 la Corte admitió que “tendrían fuerza
vinculante los conceptos consignados en la parte motiva que guarden una relación estrecha,
directa e inescindible con la parte resolutiva; en otras palabras, aquella parte de la
argumentación que se considere absolutamente básica, necesaria e indispensable para
servir de soporte directo a la parte resolutiva de las sentencias y que incide directamente en
ella.”