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El término Gestalt proviene del alemán y fue introducido por primera vez
por Ehrenfels. No tiene una traducción transliteral, pero es comprendida como
“forma”, “figura”, “configuración”, “estructura” o “creación”.
Para la Gestalt, la mente configura y dá sentido -por medio de ciertas leyes- a
los elementos que llegan a ella, a través de la percepción o de la memoria
(pensamiento, inteligencia y resolución de problemas). Al experimentar el entorno,
esta configuración tiene un carácter primario por sobre los elementos que la
conforman, y la suma de estos últimos por sí solos no podría llevarnos, por tanto, a la
comprensión del funcionamiento mental. Este planteamiento se ilustra con el
axioma: El todo es mayor que la suma de sus partes, con el cual se ha identificado con
mayor frecuencia a esta escuela psicológica (lo que seguirá siendo una premisa para la
Psicología sistémica).
Entre las leyes de la Gestalt, tenemos:
I. Psicoanálisis
Mucho antes de la historia profesional del padre del Psicoanálisis, el francés Jean-
Martin Charcot hipnotizaba y podía modificar ciertas sintomatologías psicológicas
donde no aparecía problemas orgánicos, asociados en ese entonces a la histeria.
Interesado por este tema, Freud fue a aprender de Charcot en 1885. Un año después
regresa a Viena y junto a Breuer observan un descubrimiento del último, que fue
bautizado como Catarsis, refiriéndose al hecho de evocar o recordar un hecho
traumático reprimido, que al ser reobservado, genera modificaciones en la conducta
de la misma persona.
Tras años de experiencia clínica, Freud propuso la teoría de que los síntomas
histéricos y neuróticos tenían como causa, núcleos traumáticos reprimidos en el
inconsciente (Gran descubrimiento de este autor) por ser moralmente inaceptables
para el Yo del sujeto. Freud postuló que estos núcleos patológicos consistían en «uno o
varios sucesos de precoz experiencia sexual, perteneciente a la más temprana
infancia» que terminaban siendo dolorosos para ser asumidos por el sujeto. Cabe
recordar que la época en que se establecen estos descubrimientos se caracterizaba por
una intensa presión social sobre el autocontrol, lo que da orden contextual y temporal
a sus descubrimientos.
II. a. Conductismo
La psicología conductual de manera general se preocupa por la forma como las
personas organizan los datos para responder a su entorno y establecer acciones
adaptables al mismo. Presentan grandes herramientas para interpretar ese contexto,
darle sentido en la persona, centrándose en la conducta, en la respuesta que el sujeto
da a su entorno.
b. Cognitivo
Esta perspectiva surge en los años 50 y 60 como reacción al conductismo, para
tratar de explicar lo que éste denominó como la caja negra. En sus ecuaciones no se
preocupaba sobre lo que le sucedía a la persona, y cómo le sucedía, su cambio de
conducta, se preocupaba por el resultado. Eso que pasaba para obtener un resultado,
le llama la caja negra. Entonces la perspectiva cognitiva busca develarla:
El énfasis está propuesto para hacer observable las formas en que la persona o
sujeto procesa la información para modificar su conducta. La psicología cognitiva es
una de las adiciones más recientes a la investigación psicológica y estudia diversos
procesos denominados cognitivos, tales como la resolución de problemas, el
razonamiento (inductivo, deductivo, abductivo), la percepción, la toma de decisiones y
la adquisición del lenguaje y su influencia en el desarrollo de las personas.
Los principales exponentes de la psicología cognitiva son Alan Baddeley, Jerome
Bruner, Hermann , Lev Vigotsky, David Ausubel y Jean Piaget.
Esta orientación psicológica lleva a otro nivel las posibilidades de modificar la
conducta, observando en estadíos o etapas de desarrollo, la forma como el sujeto se
construye bio-psico-sociológicamente en relación a su contexto cultural e histórico,
estableciendo diversas perspectivas de estimulación y nuevas formas de promover el
proceso de enseñanza-aprendizaje para potenciar el crecimiento humano. Aspectos
que transformarían aún más las dinámicas pedagógicas adaptadas a las características
bio-neuro-socio-psicológicas de cada persona; demarcando nuevas estrategias para
influir lingüísticamente en cada cual e investigando la importancia del mismo lengüaje
en el desarrollo colectivo del individuo.
Entre sus teorías centrales encontramos: Las zona proximales de desarrollo de
Vigotsky, los estadíos psicogenéticos de Piaget, El Giro o Pensamiento Narrativo de
Brunner, entre otros.
III. Humanismo
Se denomina psicología humanista a una corriente dentro de la psicología, que
nace como parte de un movimiento cultural más general surgido en Estados Unidos en
la década de los sesenta del siglo pasado, y que involucra planteamientos en ámbitos
como la política, las artes y el movimiento social denominado Contracultura. La
psicología humanista es una escuela que pone de relieve la experiencia no verbal y los
estados alterados de conciencia (que van más allá de la experiencia religiosa y las SPA),
como medio de realizar nuestro pleno potencial humano.
Quienes desarrollan este modelo provienen de las escuelas anteriores y buscan
resaltar los aspectos humanos no tenidos en cuenta por éstas. Pretende la
consideración global de la persona y la acentuación en sus aspectos existenciales
basados en la libertad, el conocimiento, la responsabilidad, la historicidad, la plenitud y
la responsabilidad, abogando por una Psicología no predictiva y determinativa, por
una Psicología del crecimiento humano.
IV. Transpersonal
La psicología transpersonal aborda el potencial más elevado de la humanidad,
también el reconocimiento, comprensión y actualización de los estados de conciencia,
de los estados espirituales y trascendentes.
El término transpersonal significa “más allá” o “a través” de lo personal, y se refiere
a las experiencias, procesos y eventos que trascienden nuestra limitada sensación
habitual de identidad y nos permiten experimentar una realidad mayor, más
significativa, más completa.
Usando el método científico, ha ido aproximando el diálogo entre la práctica
psicológica (fundamentalmente clínica) y ciertos principios de las tradiciones
espirituales.
Los orígenes de la Psicología transpersonal se pueden rastrear hasta
1901-2 cuando el psicólogo estadounidense William James enfocó el
estudio de las experiencias religiosas desde un enfoque psicológico,
basado en el estudio de las experiencias directas de personas individuales.
Documento:
Marco Teórico: Desde la Psicología social, desde la Psicología humanista
BIBLIOGRAFÍA