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EXPLORACIÓN DE LA FUNCIÓN CEREBELOSA

 Prueba de dedo a nariz: se le pide al paciente que toque su


propia nariz y el dedo de la mano del explorador de forma
rápida y alterna. Debe tocar el dedo y después la nariz. Los
pacientes con patología cerebelosa pasan su objetivo
(hipermetría).
 Prueba de talón a rodilla: con el paciente acostado en decúbito
supino se le pide que deslice el talón de una extremidad

inferior hacia abajo por la espinilla de la otra, comenzando en la


rodilla. En pacientes con enfermedad cerebelosa el talón oscila
de un lado a otro.

 Movimientos alternos rápidos: a la capacidad de realizar


movimientos rápidos y alternos se le llama  Estos movimientos
se pueden realizar en las extremidades superiores e inferiores.
Se pide al paciente que prone y supine la mano sobre la otra
rápidamente. La alteración de la realización de estos
movimientos se llama adiadococinesia.
 Marcha: el paciente camina en línea recta para que lo
exploremos marcha. Después podemos explorar la marcha en
puntillas, en talones y que camine con marcha de tándem (un
pie colocado delante del otro). Un paciente con ataxia
cerebelosa caminará con una marcha de base amplia, con los
pies muy separados, haciendo que el paciente se tambalee de
lado a lado (marcha de borracho).

TRATAMIENTO FISIOTERÁPICO EN EL SINDROME CEREBELOSO.

Los objetivos generales en el tratamiento en la patología del cerebelo


es el de obtener un movimiento voluntario lo más armónico y
coordinado posible, entrenar el equilibrio y reeducar la marcha.

Generalmente este tipo de pacientes tiende  mucho a sufrir caídas


por lo que antes de empezar nuestro tratamiento es importante tener
en cuenta siempre la Seguridad de nuestro usuario, para evitar
cualquier tipo de accidente.

1. TRABAJO DE COORDINACIÓN
1.1 .Coordinación óculo-manual, bimanual y espacio-temporal:

 Lanzamiento de pelota ( con una mano, dos manos, dos veces


una y después la otra, etc.)
 Ejercicios para encajar objetos pequeños.
 Enhebrar collares

1.2 Coordinación dinámica general:

 Ejercicio de pedaleo en decúbito supino


 Volteos
 Reptación
 Marcha a 4 patas
 Marcha en rodillas

2. TRABAJO DE EQUILIBRIO

 Ejercicios en piscina de vaso poco profundo.


 En bipedestación trabajamos con cargas alternantes,
disminuyendo la base de sustentación, realizando ejercicios que
separen los miembros superiores de la línea media como
transportar objetos.
 Transferencias desde rodillas a bipedestación con el mínimo
apoyo posible ( dos manos, una mano, sin manos).
 Estimular las reacciones de equilibrio llevando el tronco fuera
de la línea media con diferentes actividades que sobretodo le
sean motivacionales a nuestro paciente.

3. REEDUCAR LA MARCHA
El objetivo es normalizar el tipo de marcha de nuestro paciente con el
menor número de ayudas externas posibles.

 Marcha en paralelas
 Marcha con andador
 Marcha guiadas( el terapeuta colocado detrás puede guiar
mediante contactos manuales el movimiento de cintura
escapular y/o pélvica)
 Marcha en tándem, en puntillas, en talones.
 Marcha en soldado ( levantado una rodilla y el brazo contrario)
No podemos olvidar que aquí sólo hay unas simples pautas y que
será cada terapeuta el que de manera individualizada elija su
tratamiento sabiendo que es lo que más hace falta en cada momento.
Lo más importante es lograr una adherencia al tratamiento por parte
de nuestro usuario, por lo que para ello el tratamiento debe ser
motivador, ameno e innovador.

Evaluación de fisioterapia
El fisioterapeuta realizará diferentes maniobras para evaluar los
síntomas, así como unos test específicos para determinar el tratamiento
adecuado para cada paciente. Enumeraremos algunos de los test más
comunes que disponemos para la correcta evaluación.

o 1- Evaluación nistagmo: se realizará una evaluación de los


movimientos oculares involuntarios que aparecen ante un episodio
de vértigo.
o 2- Evaluación del reflejo vestíbulo ocular (VOR): el VOR es el
encargado de fijar la mirada mientras se mueve la cabeza. Para
realizar la prueba se mueve la cabeza del paciente mientras se le
pide que mire a un punto fijo. Si hay lesión la mirada se moverá
junto con la cabeza y no será capaz de fijarla en un punto fijo. Esto
causará una sensación de visión borrosa en el paciente.
o 3- Head thrust test: pedimos fijación ocular mientras se mueve
rápidamente la cabeza en todas las posiciones. Si hay alteración
será incapaz de fijar la mirada.
o 4- Cancelación del VOR: se le pide al paciente seguimiento visual
de sus pulgares con los brazos en extensión. Si este test está
alterado la patología será de origen CENTRAL.
o 5- Diferentes escalas de valoración:

o 6- Valoración del equilibrio: Utilizaremos diferentes escalas


validadas con el objetivo de evaluar el riesgo de caída derivado del
desequilibrio provocado por el vértigo o el mareo. Una de las más
utilizadas es la escala de Berg. Nos resultará útil para comparar la
situación del paciente durante el tratamiento y valorar la eficacia
del mismo.
o 7- Valoración funcional de la marcha: Se valorará la estabilidad del
paciente ante cambios de ritmo, cambios de la posición de la
cabeza, obstáculos o marcha con ojos cerrados entre otras.

Los objetivos básicos del tratamiento irán orientados a disminuir el


desequilibrio, la oscilopsia y mejorar la posibilidad de una visión clara
durante el movimiento. Para conseguir unos buenos resultados tras la
intervención es importante comenzar lo antes posible con la
rehabilitación vestibular.

En pacientes agudos se comenzará realizando periodos cortos de


ejercicios. Por el contrario, en crónicos nuestra actuación estará centrada
en fomentar el aumento en el rango de los movimientos.

Los ejercicios irán orientados a conseguir una compensación vestibular


que haga disminuir los síntomas. Se realizarán de manera progresiva y
se irá de menos a más complejidad de ejecución

Maniobras de reposicionamiento canalicular como la de Epley son


algunas de las maniobras que realizará el profesional para aliviar los
síntomas de vértigo.

Ejercicios para restablecer el VOR:


El paciente realizará giros de cabeza mirando a un punto fijo que estará
situado a 1 metro de distancia. La velocidad de giro será constante.
Se comenzará a realizarlos en sedestación. A medida que el paciente lo
vaya tolerando se incrementará la velocidad de los movimientos de la
cabeza. El paciente deberá descansar entre cada ejercicio hasta que
desaparezcan los síntomas de mareo.

Se realizarán durante 4 semanas y mínimo durante dos meses.

Si se produce habituación durante la realización de los ejercicios


comenzaremos a aumentar la complejidad de los mismos. Por ejemplo,
realizar el mismo seguimiento visual anterior, pero estando de pie.

Una vez que mejora la situación del paciente y la sensación de mareo es


menor, comenzaremos a realiza ejercicios de habituación. Estos
ejercicios son más complejos y se realizarán sobre superficies inestables
(FOAM), mantenimiento del equilibrio con ojos cerrados, ejercicios de
doble tarea combinados con la marcha, o marcha hacia atrás.

Finalmente, el paciente realizará ejercicios de sustitución, que son


ejercicios que el paciente podrá realizar de manera autónoma en su
domicilio a modo de mantenimiento. La terapia con la Wii o el taichí son
algunos de los más recomendados.

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