Cambio, ciclo de vida y crisis:

Ya todos habrán oído alguna vez que “crisis es igual a oportunidad”. Pues bien, qué mejor momento
histórico el que estamos viviendo en el mundo, frente a la presencia del COVID-19, para pensar en lo
que significa una crisis y cómo nos paramos frente a ella.

Si vemos cómo reaccionaron los primeros gobiernos que sufrieron la presencia de este virus y lo
comparamos con las medidas que fueron tomando los gobiernos que lo recibieron después,
podemos observar la diferencia entre los distintos ejecutores respecto al poder de anticipación, de
comprensión de la realidad, de la captación de que algo había cambiado y que había que actuar en
consecuencia... Las medidas tomadas en un caso y en el otro deberían al menos darnos diferentes
niveles de respuestas respecto a las consecuencias.

Pues bien, algo así pasa en las compañías permanentemente. Las empresas que son capaces de
abrirse al cambio, de anticiparse a que afuera las cosas no siguen igual, son empresas abiertas al
aprendizaje con capacidad de adaptación y por lo tanto de supervivencia. Hoy día la velocidad de los
cambios es altísima... siempre me gusta recordar que durante años de mi niñez se compraba el
potecito de yogur que venía siempre igual, con el mismo dibujo, colores, etc. Pero ahora, cada vez
que vas al supermercado aparecen nuevas opciones y alternativas a los yogures, es muy poco
probable que en un mismo año compres el mismo yogur al principio y al final. Y podemos pensar en
muchísimos ejemplos cotidianos: los celulares, la ropa, paquetes de galletitas, golosinas, etc. Pero
esta velocidad de los cambios no se limita solamente a los productos... pensemos en las empresas y
las formas en que se hacen las cosas. O dando un paso más todavía, cómo internet fue cambiando
los negocios, como la digitalización fue transformándolos... Pasamos de reservar una habitación de
hotel para las vacaciones de forma directa para hacerlo a través de una plataforma como Booking.
Com y luego dimos un paso más, adiós a las habitaciones de hoteles, ahora reservamos casas o
departamentos a través de AirBnB. Rappi, Glovo, Uber, WhatsApp... Podemos pensar en distintos
modelos de negocios y cómo se han ido transformando.

Vuelvo a la capacidad de anticiparse al cambio de aquellos que tenían un negocio frente al cambio
del entorno, ¿fueron sus CEOs personas capaces de ver esos cambios o pensaban que todo seguía
igual? ¿fueron las compañías lo suficientemente abiertas al aprendizaje para adaptarse? No sé si
recuerdan a Blockbuster... ¿no tendrían que haber sido ellos los que crearan a Netflix?

A lo largo del ciclo de vida de las compañías, que se asimila a la campana de Gauss, ellas van
enfrentando distintas crisis provocadas por los cambios internos y externos. Cada vez que la
compañía logra sortear esa crisis, da un paso más hacia su fortalecimiento y afirma su supervivencia.
Es así como podemos distinguir 4 grandes etapas en el ciclo de vida: nacimiento, crecimiento,
madurez y obsolescencia. (En la bibliografía y en los artículos de la clase encontrarán las
características de cada una de ellas y un buen gráfico, que les recomiendo que lean con
detenimiento.) Pues bien, podríamos decir que para pasar de una etapa a otra, ha habido capacidad
del dueño o del gerente en anticiparse a los cambios y en adaptarse a ellos con éxito, superando las
crisis que se presentaban. La única etapa por la que no debería pasar una compañía abierta al
aprendizaje, o si pasa que sea lo menos duradera posible, es la de la obsolescencia. ¿Por qué?
Porque una compañía abierta al aprendizaje, estaría atenta a “no dormirse” en los éxitos pasados y
estaría analizando el entorno, comunicándose, interpretándolo y tomando medidas al respecto. Es
por eso que el proceso de planeamiento viene justamente a jugar un rol clave en esta etapa, porque
justamente ayuda a detectar oportunidades en las crisis y hacer un punto de inflexión en la curva
para que la compañía se reinvente y comience una nueva etapa de crecimiento y expansión.
Pensando nuevamente en el virus que nos preocupa a todo el mundo, ¿Qué estamos haciendo
nosotros para adaptarnos a este nuevo escenario? ¿Notaron lo dinámico que ha sido todo en este
tiempo? Sin ir más lejos, pensemos cómo también nosotros somos capaces o no de adaptarnos a lo
que está pasando, como estar tomando la clase por este medio, por ejemplo.