¿Una Venida “Menor”

En El Año 70 d.C.?

Hay muchos que piensan que ocurrió “algún tipo de venida” cuando la destrucción de Jerusalén,
pero toman el cuidado de aclarar que era una venida “menor” de Jesús y que el retorno “mayor”
de Cristo está todavía en el futuro. Lo llaman “una venida en juicio sobre la nación judía”. Sin
embargo, la cuestión que nos enfrentamos es la siguiente: “¿En qué parte de la Escritura hay una
distinción entre una venida menor en juicio y un retorno mayor de Cristo?”. Ni Jesús ni los
escritores del Nuevo Testamento indican a cuál retorno se refieren. Ninguno de ellos dice jamás
“Ahora estoy hablando de una venida menor para terminar con el mundo judío, pero en otra
ocasión trataré de la venida mayor para poner fin al universo”.

Hay que considerar la posición del cristiano del primer siglo que vivía antes de la destrucción de
Jerusalén en el 70 d.C., y tenía acceso solamente a algunos de los libros del Nuevo Testamento.
¿Hubiera sabido este Cristiano que Jesús estaba hablando de “dos venidas diferentes del Hijo del
Hombre”, separadas por miles de años? Para nosotros ahora, nos es bastante difícil distinguir
entre las varias venidas y vivimos ¡después del año 70! El Nuevo Testamento no enseña dos
diferentes parusías de Cristo. Iba a volver una sola vez, y esta sucedió en el primer siglo cuando
Jerusalén fue destruida. ¿Cómo puede volver otra vez, si no se ha ido? Vino en el primer siglo
(en el año 70 d.C.) y no se ha ido, y todavía está presente con nosotros y así estará siempre. La
idea de “presencia” es uno de los sentidos de la palabra Griega parusía.

Los credalistas (los que siguen a un credo) están en contra del retorno final de Cristo en el
pasado. Pero a la vez, algunos de ellos creen que hubo algún tipo de regreso menor de Cristo en
70 d.C., y que habrá otra venida final en el futuro. Esta idea de venidas múltiples es tanto en
contra de los credos como el Preterismo Pleno. El hecho es que los credos no mencionan ningún
tipo de parusía en el 70 d.C. (sea venida menor o mayor). Así que si la idea de la venida final en
el 70 d.C. esté en contra de los credos, así también la idea de una venida menor.
Afortunadamente los credos no son inspirados, lo que hace que esto no nos sea un problema
considerable. Lo que todos debemos comprender es que los credos pueden estar equivocados. Si
nuestra comprensión del tiempo y de la naturaleza del cumplimiento de la profecía bíblica se
mejora con el paso del tiempo, y si encontramos que los credos contienen interpretaciones y
aplicaciones erróneas, entonces para el bien de las futuras generaciones de la Iglesia, debemos
corregir los credos. Los que sugieren que hubo nada más una venida “menor” en el 70 d.C.,
deben estar igualmente preocupados acerca de este problema con los credos así como nosotros
los Preteristas Plenos. Después de todo, en cuanto a los credos, estamos los dos grupos, en la
misma posición.

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J. Hendrix-Weidner