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Stefanía Quevedo

Filosofía:
-Es necesaria para preguntarse acerca del principio de unidad que reúne la
multiplicidad de las cosas, denominado ser. Sin unidad no hay inteligibilidad.
-El hombre conoce explicando lo múltiple a partir de lo uno. La metafísica era
designada como sabiduría, porque se ocupa de conocer el principio de unidad,
no de una región de lo real (ciencia) sino de todo lo que es. Se ocupa del
unum, el uno, la unidad de todo lo que es.
- A través del conocimiento del unum, el hombre sabrá porque hace todo lo que
hace (causa final) y quien es el que lo hace (causa eficiente).
Universidad:
-se ocupa de dar satisfacción a la naturaleza humana, ya que en ella se
cultivan los saberes, pero en dirección al UNO total. Todos los saberes
particulares tienen sentido cuando se ordenan en función del conocimiento del
UNO total.
- O sea a partir de la filosofía primera o metafísica. Por tanto, no existió, existe
ni existirá Universidad sin filosofía pues sería una pura Diversidad. Se
considera que el estudiante es “elemento vivo y constitutivo de la Universidad,
que es la corporación de estudiantes y profesores que, por la investigación y la
docencia, se ordena a la contemplación de la verdad.”
- Es imposible agotar el conocimiento, ya que sabiendo de la existencia de la
Realidad infinita se inician en la búsqueda, en la investigación, a fin de
descubrir nuevos aspectos de lo infinito.
CONOCER
-Es la posesión intencional de un objeto por parte del sujeto
-La posesión implica u n sujeto que posee y un objeto poseído. Esta es de
carácter espiritual con todas sus posibilidades, no tiene límites.
-Intencional nos refiere a la existencia de una polaridad dentro del
conocimiento, por un lado, el sujeto cognoscente y por otro el objeto de
conocimiento.
-Al ser diferentes podemos establecer una relación entre ambos, en cambio si
estuviésemos hablando de una mismidad no podría existir una relación, es
decir, no habría acción de conocer.
-al objeto de conocimiento se lo puede denominar inteligible y esto a su vez
implica una inteligencia que lo capta: ES LO INTELIGIBLE DEL OBJETO LO
QUE DETERMINA LA INTELIGENCIA DEL SUJETO.
-el objeto, es decir lo inteligible, la realidad, LA VERDAD no puede ponerse en
duda, el sujeto tiene como objeto de conocimiento lo verdadero.
PENSAR
-Al obj de conocimiento se lo podía denominar inteligible, entendible. Es lo
inteligible del objeto lo que determina la inteligencia del sujeto. Solo es
inteligible lo que ES, la nada no puede ser objeto de conocimiento. El objeto es
la verdad, es cognoscible por el sujeto cognoscente, por lo tanto es inteligible.
Si lo inteligible fuese lo absoluto, se deduciría que su correlativo (la inteligencia)
debería ser una inteligencia absoluta; pero en tal caso, lo inteligible y la
inteligencia serían lo mismo: hablaríamos de una mismidad perfecta.

Pensar es distinto de conocer por el simple hecho de que el conocimiento, para lo que
sea, requiere un sujeto cognoscente, un objeto de conocimiento y una acción de
conocer. En cambio, cuando se hablar del pensar, solo podemos hablar de una sola cosa.
Stefanía Quevedo

ENTE
-El primer objeto de conocimiento es el ente. Entendemos que el hombre
razona, y su inteligencia comienza cuando concibe el ente.
-Al afirmar que el ente es algo ya entiende que el ente es igual a lo que es, o
sea que el ente es igual al ente, formulado así el llamado principio de identidad.
Y este ente, no puede ser y no ser al mismo tiempo y bajo el mismo respecto,
lo cual constituye el principio de contradicción.
-También existe el principio del tercero excluido que afirma que entre ente y no
ente no hay término medio.
-Y por último el principio de causalidad, tan evidente como los anteriores, que
expresa que el ente viene del ente, por la sencilla razón de que no puede venir
de la nada, porque la nada no es.
- Estos principios son ontológicos, porque todos derivan de la intuición
originaria de la intuición humana, el ente; y lógicos, porque son consecuencia
de lo real.

CIENCIA Y FILOSOFÍA
CIENCIA
-conjunto sistemático de conocimientos acerca de un determinado objeto con
un método y lenguaje específico. Utiliza postulados: no son evidentes, se
afirman como una posibilidad de inteligibilización, de unidad de los fenómenos,
o sea, de la multiplicidad.
FILOSOFÍA
-Trata de averiguar si pueden existir o existen realmente, qué constitución
tienen, qué propiedades características deben poseer, y a qué finalidades se
orientan los seres no perceptibles para los sentidos, pero cuya existencia
vislumbra la razón como bases estables necesarias en que pueden
desarrollarse los fenómenos.
-Sus objetos escapan a los alcances de los medios y los métodos de las
ciencias particulares, sus principios son siempre más próximos a los supremos,
los conocimientos filosóficos se adquieren por un proceso netamente racional y
tienen siempre mayor universalidad que los científicos. Utiliza principios: Son
evidentes, no se pueden negar porque sería una contradicción.

METAFÍSICA
- Es la ciencia fundamental desde el momento en que se ha establecido que el
ente es el primer principio del conocimiento. Su objeto es preguntarse ¿qué es
el ente? Como la palabra lo dice, este conocimiento va más allá de lo físico,
alude a lo supra físico, a lo inteligible.
- Es la ciencia suprema de la razón humana. Es la que da las preguntas y
respuestas decisivas para buscar y encontrar el sentido definitivo de toda la
realidad y este sentido no es otro que la verdad, de la que nadie puede
prescindir nunca.
EL PRINCIPIO DE LAS COSAS
Los griegos denominan al princ de las cosas como el ARJÉ. Este es la
naturaleza PHYSIS. Esta engendra todas las cosas, quienes luego de cumplir
su periplo existencial desembocan nuevamente en ellas. El elemento
constitutivo de la physis fue buscando por diferentes pensadores.
Stefanía Quevedo

-TALES: Aseguraba que todo provenía del agua, es decir, que el agua es igual
al todo, por lo tanto, todo es igual al agua, entonces todo es igual a todo y lo
mismo es igual a lo mismo.
-ANAXIMENES: A diferencia de Tales, este pensador decía que el elemento
constitutivo de la naturaleza era el AIRE. Pero a igual que Tales, el elemento
constitutivo de la naturaleza no podía reducirse a un elemento determinado.
-ANAXIMANDRO: el principio debe ser lo suficientemente indeterminado para
dar cuenta de TODO lo determinado y múltiple; sin reducirse a nada de ello en
particular.
-HERÁCLITO: produce un gran cambio, le interesaba encontrar un fundamento
de las cosas que sea inmanente a las cosas mismas. Para él, las osas están en
constante cambio, este devenir no se cumple según las leyes arbitrarias del
azar, sino que se cumplen según una necesidad: LA RAZÓN, inmanente del
mundo. Esta razón era lo UNO, inmanente de la multiplicidad y el cambio, rige
el devenir de todas las cosas.
PARMÉNIDES
POEMA
PROEMIO:
-Es una narración mítica-simbólica, metafórica que contiene imágenes y
representaciones que tienen por debajo una explicación racional. Su lenguaje
es metafórico-alegórico (es literal, realista). Parménides describe en él lo que
es la vida filosófica, narra el recorrido del filósofo por el camino de la verdad,
arrastrado por el deseo (erótico) que va desde la oscuridad (ignorancia) hacia
la luz (sabiduría). Así la verdad se le es revelada.
-El relato es del viaje de la ignorancia (noche) hacia la sabiduría (luz). Las
yeguas (en representación de lo femenino que arrastra al amor) lo conducen
hacia la ruta de la diosa, quien le revelará la verdad, el camino del saber, que
llegará a mostrarles después de pasar ciertos obstáculos.
-El camino que le revela la diosa es el “corazón imperturbable de la verdad bien
redonda” y no el de la opinión de los mortales que no encierran una creencia
verdadera, ya que se fundan en las apariencias.
-El proemio es el planteamiento del pensamiento de Parménides, donde deja
sentado la concepción del ser: el núcleo de la verdad que no cambia y es
siempre verdad, eterna, perfecta, etc. Que se diferencia de lo múltiple: mutable,
imperfecto, aparente, no exite,

CUERPO: Argumenta su posición y en el podemos distinguir 3 caminos


del pensar.

-EL PRIMER EL CAMINO, LA VERDAD: afirma que el Ser Es y no es No-ser,


es la vía de la creencia, de la verdad. El Ser es entendido a partir del principio
de identidad ya que pensar es pensar al Ser; entonces el objeto del
pensamiento es el Ser, lo inteligible, y es lo universalmente inteligible.
-EL SEGUNDO CAMINO, NO SER: es impracticable, ya que no se puede
pensar a partir de la nada. Es un camino negado al conocimiento, porque no
puede decirse ni pensarse el no Ser. El no ser no existe. Admitir el no Ser es
admitir el no Ente, el no es: y este es la nada, y la nada no existe, lo único que
existe es el ser.
-EL TERCER CAMINO, LA OPINIÓN (COSTUMBRE): es el del ser y no-ser, el
ser lo mismo y no lo mismo. Es recorrido por los mortales errantes, engañados
Stefanía Quevedo

por los sentidos, que captan las apariencias, confundiendo el ser y el no ser,
cambiando constantemente de dirección. Es el mundo de la opinión regida por
los sentidos, que captan la multiplicidad (lo cambiante).
COMO PIENSA AL SER
-Piensa a este como una totalidad, no hay nada que no sea ser
- Pensar es siempre pensar al ser. Ya que fuera del ser nada existe que pueda
pensarse, el no ser, no existe por lo tanto no puede pensarse.
-CARACTERÍSTICAS:
• ingénito, ya que no tuvo nacimiento, no fue creado;
• imperecedero, porque no puede pasar a no ser, si debe morir no es, no
hay nada que lo destruya;
• completo ya que no le falta nada, la razón no puede estar inacabada,
esta terminada por todas partes como una esfera bien redonda;
• inmutable, carece de cambios;
• Eterno, no tiene principio ni fin, no fue ni será, está fuera del tiempo;
• homogéneo; es una unidad, es uno, único, no hay nada fuera del ser,
todo es;
• inmóvil ya que el movimiento es apariencia y por lo tanto si hubiese
alguno estaría dirigido hacia el no ser;
• indivisible, porque si pudiera separarse, los espacios entre el ser serían
el no-ser y este no existe.
COSMOVISIÓN GRIEGA
ESPACIO: Carecen de la idea de una relación espacio-temporal infinita; ven el
mundo como una obra limitada, modelada, como una esfera. No trasciende los
límites del mundo. Su sentimiento de la vida, su concepción y su pensamiento
se realizan dentro de aquel, pasan por alto la cuestión de si pudiera existir algo
fuera o por encima del mismo. Para él el mundo es simplemente el todo.
RELIGIÓN: -Por su fe religiosa conoce un padre de los dioses y de los
hombres, pero este pertenece al mundo de la bóveda celeste. Sabe de un
poder del hado que domina a todos, incluso a los dioses más altos, de una
justicia rectora y de un orden racional que regulan y dirigen todo acontecer.
Todos estos poderes divinos no son algo contrapuesto al mundo sino que
constituye su orden supremo. - En la esfera de la religiosidad se tiene el
sentimiento de que el mundo es divino. Nace de una arjé, de un principio
interno y recorre el camino que el orden y el destino le señalan; pero principio,
orden y destino son algo que le es intrínseco. Constituye lo único existente, la
realidad total de naturaleza divina. Lo divino es el elemento primario y
misterioso del mundo y el mundo está en el hombre (relación religiosa
fundamental).
MITO: También son divinas las diversas realidades y energías del mundo; de
este sentimiento brota el mito. Los mitos son figuras y acontecimientos que dan
una explicación del mundo y de sus elementos, e igualmente del hombre, que
se contrapone al mundo en virtud de su espíritu y a pesar de ello, pertenece
también al mundo. Los mitos ofrecen al hombre la posibilidad de orientarse en
la existencia. Constituyen una unidad, no de orden sistemático-racional sino de
orden vital.
Stefanía Quevedo

LIBERTAD: Se organizaban en ciudades estado llamadas Polis. El hombre ES


dentro de la polis, vive en una democracia no de “libertades absolutas” sino de
verdades relativas. Una libertad colectiva, PARA participar. El mero hecho de
tener razón y esta ser muestra herramienta de subsistencia, podemos buscar a
través de ella la libertad (que nos confiere).
PLATÓN
PRIMERA NAVEGACIÓN: Simboliza el recorrido que realiza por la filosofía
impulsada por el viento de la filosofía naturalista.
SEGUNDA NAVEGACIÓN: Representa la aportación personal de Platón, la
navegación realizada gracias a sus propias fuerzas, su contribución personal.
Se produce con esto, una revolución del pensamiento con la recuperación de
los temas onto-cosmológicos a la que llamó Segunda navegación y lo llevó al
descubrimiento de una realidad suprasensible, una dimensión suprafísica del
ser (de un género no físico), del ser inteligible que no había sido anunciada por
la precedente filosofía de la physis.
En la primera navegación hay una vinculación demasiado estrecha con los
sentidos y lo sensible: todos los filósofos habían tratado de explicar los
fenómenos apelando a causas de tipo físico y mecánico (agua, aire, tierra,
fuego, calor, frío, etc). En la segunda Platón intenta una radical liberación
respecto a los sentidos y a lo sensible y un desplazamiento hacia el plano del
puro razonamiento y de lo que se puede captar con el intelecto y con la
mente exclusivamente.
• EJEMPLO: Queremos explicar por qué es bella una cosa. Los filósofos
naturalistas recurrían a elementos puramente físicos, como el color, la figura,
etc. Para Platón es preciso postular la existencia de una causa superior, que
por ser una verdadera causa será algo no sensible, sino inteligible. Se trata de
la idea o forma pura de lo bello en sí, que hace que las cosas empíricas sean
bellas, es decir, se realicen a través de la forma, del color y de la proporción
que por fuerza se requieren para ser bellas.
Afirma que para que exista cualquier objeto físico, hay una causa suprema y
última que no es de carácter físico, sino de carácter metafísico. La segunda
navegación conduce a reconocer la existencia de dos planos del ser: uno de
ellos, fenoménico y visible, mientras que el otro es invisible, metafenoménico,
aprehensible sólo con la mente y en consecuencia puramente inteligible.
MUNDO DE LAS IDEAS
-Las causas de la naturaleza no física fueron denominadas por Platón como
idea o forma, no son representaciones puramente mentales sino substancias.
-No son pensamientos sino aquello que piensa el pensamiento cuando se
libera de lo sensible, son el verdadero ser, la esencia de las cosas, lo que hace
que cada cosa sea lo que es. Las ideas expresan el carácter de absoluto.
-El mundo de las ideas está compuesto por una multiplicidad de ideas que no
han sido generadas, son incorruptibles, inmutables. Este mundo es un sistema
organizado y ordenado jerárquicamente.
-La idea superior es la del Bien: Convierte a las ideas en cognoscibles y a la
mente en cognoscente, y produce el ser y la substancia ya que está por encima
de ella.
-El Uno actúa como principio formal, y junto con el principio de multiplicidad
denominado “Díada” o “Dualidad indefinida” crean el mundo de las ideas. El
Stefanía Quevedo

Uno delimita y determina (le da forma) a la multiplicidad: es principio de ser


(todas las ideas son la delimitación de algo ilimitado), es principio de verdad
porque sólo lo determinado resulta inteligible, y de valor, porque la delimitación
implica orden y perfección.
DEMIURGO
-En la teología platónica es necesario hacer una distinción entre lo divino
impersonal y Dios y los dioses personales. El mundo ideal es divino, en todos
sus planos, la idea del Bien es divina pero no es Dios-persona; en la cumbre de
la jerarquía de lo inteligible hay un ente divino (impersonal) y no un Dios
personal.
-El Demiurgo posee rasgos de persona, de Dios puesto que conoce y quiere
pero es jerárquicamente inferior al mundo de las ideas, ya que no lo sólo lo
crea, sino que depende de él- El demiurgo ni siquiera crea la materia de la cual
está hecho el mundo, ya que también ella le preexiste. Es un hacedor o artífice
del mundo, no un creador del mundo.
(politeísmo estructural)
//Al igual que el mundo inteligible procede del Uno, que actúa como principio
formal, y la Díada indeterminada que actúa como principio material (inteligible),
así el mundo físico procede de las ideas que actúan como principio formal y de
un principio material sensible de un principio ilimitado e indeterminado de
carácter físico//. mediador-dios.
RELACIÓN ENTRE MUNDOS
Pone en cuestión la relación que hay entre las ideas y el mundo sensible:
-Mimesis ¿Porque hay idea en el mundo sensible? Porque las cosas imitan las
ideas correspondientes “perfectas” en sus devenires.
-Presencias: si las cosas son inteligibles es porque en ellas aparece la idea.
No está presente como algo que se extiende materialmente sobre todos ellos,
está presente como algo no material como el sol iluminando (pero también
critica esta explicación porque dice que esto no es un concepto sino una
imagen)
- Participación: el mundo sensible participa de las ideas por ende es parte: Si
todo individuo se multiplica por toda idea se pierda la unidad y la idea se vuelve
múltiple y no explica nada. Si participan en partes los individuos pueden
participar en partes diferentes por ende no tienen la misma idea completa
CONOCIMIENTO
ANAMNESIS
-Raíz del conocimiento en Platón. Una forma de recuerdo de algo que existe
desde siempre, en el alma. El punto de vista mítico se relaciona con la idea de
que el alma ha contemplado y ha conocido toda la realidad, la realidad del más
allá y la realidad de este mundo. Debido a ello, concluye Platón, es fácil
comprender cómo puede conocer y aprender el alma. Lo único que puede
extraer de sí misma la verdad que posee substancialmente y que posee desde
siempre: extraer de sí misma es un recordar.
- Las ideas son realidades objetivas absolutas que, mediante la amnamesis, se
imponen como objeto de la mente. Puesto que la mente a través de la
reminiscencia capta las ideas pero no las produce, ya que las capta con
independencia de la experiencia, es plausible hablar de conocimiento del a
Stefanía Quevedo

priori o de primera concepción del a priori en la historia de la filosofía


occidental.
LOS GRADOS DE LA OPINIÓN Y LA CIENCIA
La anamnesis explica la raíz o la posibilidad del conocimiento, porque explica
que el conocer se hace posible en la medida en que tenemos en nuestra alma
una intuición originaria de lo verdadero. Las fases y los modos específicos de
conocer los desarrolla en la República y en los diálogos dialécticos.
• Opinión: En la República parte desde el principio según el cual el
conocimiento es proporcional al ser, de modo que sólo lo que es máximamente
ser es perfectamente cognoscible mientras que el no ser es absolutamente
incognoscible. Dado que existe una realidad intermedia entre el ser y el no ser,
esto es lo sensible, P concluye que existe un conocimiento intermedio entre
ciencia e ignorancia, un conocimiento que no es conocimiento propiamente
dicho y que se llama opinión. Se divide en dos grados de lo sensible:
IMAGINACIÓN (sombras e imágenes sensibles de las cosas) y CREENCIA (las
cosas y objetos en sí mismos).
• Ciencia: La opinión es casi siempre falaz, según afirma en el Menón,
para otorgar fundamento a la opinión sería preciso vincularla con el
conocimiento causal, es decir, consolidarla mediante el conocimiento de la
causa de la idea. Entonces, dejaría de ser una opinión y se transformaría en
ciencia o episteme. Se divide en dos grados de lo inteligible:
CONOCIMIENTO MEDIO (dianoia, relacionado con los elementos visuales) y
PURA ITELECCIÓN (noesis, captación pura de las ideas y del principio
supremo y absoluto del cual dependen todas)
DIALÉCTICA
-Es una forma de captar el mundo de las ideas y su estructura, en esto consiste
la verdad. A partir del intelecto y la intelección se captan las ideas, una en una,
hasta llegar a la suprema.
-dialéctica ascendente (la que libera de lo sensible, lleva hacia las ideas y de idea
en idea nos permite llegar a la idea suprema)
-descendente (se parte de la idea suprema hacia las demás)
ERÓTICA
-Vincula la temática de la belleza con la temática del eros y del amor. Este es
entendido como fuerza mediadora entre lo sensible y lo suprasensible, fuerza
que eleva, a través de los diversos grados de belleza, hasta la metaempírica
Belleza en sí. Y puesto que lo bello para los griegos coincide con el Bien o es
un aspecto del bien, así el Eros es una fuerza que eleva hacia el Bien, y la
erótica a su vez se manifiesta como una vía alógica que lleva hasta lo Absoluto.
Para P el amor es sed de belleza y de bondad, posee muchos caminos que
conducen a diversos grados de bien, el verdadero amante es aquel que los
sabe recorrer a todos hasta el final, para alcanzar la visión suprema, hasta
llegar a la visión de lo que es absolutamente bello.
• El grado más bajo en la escala del amor, es el AMOR FISICO, que es el
deseo de poseer el cuerpo bello con objeto de engendrar en los bello, otro
cuerpo. Este amor físico ya es deseo de inmortalidad y de eternidad.
• Luego está el grado de los AMANTES FECUNDOS no en sus cuerpos
sino en sus almas. Entre los amantes pertenecientes a la dimensión del espíritu
Stefanía Quevedo

se hallan, en una escala progresivamente más elevada, los amantes de las


almas, de las artes, de la justicia y de las leyes, de las ciencias puras.
• En la culminación de la escala del amor, se halla la visión de la Idea de
lo BELLO EN SÍ, de lo Absoluto.
EL HOMBRE SEGÚN PLATÓN
Tiene una concepción dualista del hombre. Las relaciones entre el alma y
cuerpo es dualista porque además del elemento metafísico-ontológico se
introduce el factor religioso del orfismo, que transforma la distinción entre el
alma (suprasensible) y cuerpo (sensible) en una oposición. Por esto se
considera que el cuerpo no es tanto el receptáculo del alma, a quien le debe la
vida y sus capacidades sino más bien la tumba y la cárcel del alma, es decir,
un lugar de expiación del alma. El cuerpo es la raíz de todo mal, es origen de
amores alocados, pasiones, enemistades, discordias, ignorancia y demencia:
todo esto es lo que lleva la muerte al alma.
LA ESCATOLOGÍA EN PLATÓN
-El hombre se encuetra de paso en la tierra y la vida terrena es como una
prueba. La verdadera vida se encuentra en el más allá, el Hades (lo invisible).
Allí, el alma es juzgada, teniendo en cuenta solo las señales de justicia e
injusticia.
CRITICA A LA ESCRITURA
-Imposibilidad de objetivar el pensamiento al situarlo fuera del sujeto.
destructora de la memoria ya que a través de la representación gráfica deja de
ser necesario el hecho de memorizar, debilitando el pensamiento. En tercer
lugar, es imposible plantearle dudas a un texto escrito, a diferencia de la
oralidad con la cual se puede obtener una explicación mediante el intercambio
verbal.
-esta misma imposibilidad de poder establecer una relación recíproca impide la
capacidad de defensa de ese escrito.
EL ESTADO PLATÓNICO
-Si el político se transforma en filosofo (o viceversa) se puede construir el
verdadero Estado, fundamento del bien y la justicia; porque para los griegos
construir una ciudad quiere decir, conocer al hombre y el lugar de éste en el
universo: el estado es una ampliación de nuestra alma, es un “gran hombre” y
nace porque ningún individuo es autosuficiente.
-Platón establece una clara correlación, entre el alma y el estado a través de
los ciudadanos, así la estructura de la ciudad se verá reflejada en el alma
racional, en la irascible, y en la concupiscible, pero a su vez cada ser
(ciudadano) tiene desarrollada una de ellas más que las otras.
-Por esta razón es que él afirma que todos no somos iguales;
• GOBERNANTES. Aquellos que tienen más desarrollada el alma
racional, serán los que deban gobernar, en tal sentido lo harán los sabios y
prudentes.
• GUARDIANES. En una segunda jerarquía, en los que destacan lo
irascible del alma serán los guardianes, o sea los encargados de cuidar la
ciudad ya que poseen valentía, valor y fortaleza.
• PUEBLO. Y en una última categoría los que poseen sólo el alma
concupiscible se dedicarán a la producción, son los que deben poseer mesura
y templanza.
Stefanía Quevedo

LA CIUDAD PERFECTA ES AQUELLA EN LA QUE PREDOMINA LA TEMPLANZA EN LA


PRIMERA CLASE, EN LA SEGUNDA LA FORTALEZA Y EN LA TERCERA LA SABIDURÍA.
LA JUSTICIA ES LA ARMONÍA DE ESTAS TRES VIRTUDES (ESTAS TRES PARTES DEL
ALMA): CUANDO CADA CLASE Y CADA INDIVIDUO HACE LO MEJOR POSIBLE SUS
FUNCIONES Y AQUELLO QUE POR NATURALEZA Y POR LEY ESTÁN LLAMADOS A
HACER. ADEMÁS, DEBE HABER UNA PERFECTA CORRESPONDENCIA ENTRE LAS
VIRTUDES DEL INDIVIDUO Y DE LA CIUDAD.
FORMAS DE ESTADO
Monarquía (un solo hombre gobierna e imita al político ideal): si se corrompe pasa a
ser tiranía.
Aristocracia (una multitud de hombres ricos imita al político ideal): si se corrompe
pasa a ser oligarquía.
Democracia (es el pueblo el que gobierna tratando de imitar al político ideal): si se
corrompe pasa a ser demagogia.
● CUANDO LOS ESTADOS ESTÁN CORRECTAMENTE GOBERNADOS LO
MEJOR ES LA MONARQUÍA, CUANDO LOS ESTADOS ESTÁN CORRUPTOS LO
MEJOR ES LA DEMOCRACIA POR QUE GARANTIZA LA LIBERTAD. PLATÓN
ACONSEJA LA CONSTITUCIÓN MIXTA Y UNA IGUALDAD PROPORCIONAL, LA
LIBERTAD Y LA IGUALDAD EN SU JUSTA MEDIDA.
LA ALEGORÍA DE LA CAVERNA
Este mito hace referencia a unos hombres que están atados de modo que no
pueden darse vuelta, en una caverna cuya entrada está abierta hacia la luz, por
lo que sólo pueden mirar las sombras en la pared del fondo de la caverna.
Estas sombras son reflejo de objetos que pasan por allí transportados por otros
hombres que van hablando y sus voces retumban en la caverna. Al no haber
visto jamás otras cosas, creerán que aquellas sombras constituían la única y
verdadera realidad. Si un prisionero lograra escaparse, le costaría acostumbrar
su vista, pero una vez que lo haya hecho comprendería que se trata de cosas
mucho más verdaderas que las que antes veía y ahora le parecen sombras.
-El mito tiene cuatro significados:
-Según los grados ontológicos de la realidad, es decir lo sensible, que en
apariencia son las sombras de la caverna y en si mismo los objetos; y lo
suprasensible, o sea las ideas y el sol que es entendido como el Bien.
-Según los grados del conocimiento, la visión de las sombras simboliza la
imaginación y la visión de los objetos la creencia.
-Según lo místico y teológico, la vida sensible es la vida en la caverna y la vida
en el espíritu es la vida a plena luz, el paso de lo sensible a lo inteligible es una
conversión, la visión del bien y la contemplación de lo divino.
-Según la concepción política, el regreso del que se liberó de las cadenas es
sin dudas el filósofo-político, quien permanecía contemplando lo verdadero. El
verdadero político usa el poder como un servicio para hacer el bien.
ÉTICA
Dentro de la ética platónica hay dos paradojas:
• Huida del cuerpo: Desarrollada en el Fedón. El alma debe tratar de huir
lo más posible del cuerpo y por ello el verdadero filósofo desea la muerte y la
verdadera filosofía es un ensayo de muerte. La muerte es un episodio que,
desde el punto de vista ontológico, únicamente hace referencia al cuerpo. No
sólo no perjudica al alma, sino que le acarrea un beneficio al permitirle una vida
más verdadera plenamente unida a lo inteligible. Esto significa que la muerte
del cuerpo inaugura la auténtica vida del alma. La huida del cuerpo es el
reencuentro con el espíritu.
Stefanía Quevedo

• Huida del mundo: La huida del mundo significa transformarse en


virtuoso y tratar de asemejarse a Dios. El mal no puede desaparecer siempre
tiene que haber algo opuesto y contrario al bien, tampoco puede hallar cobijo
entre los dioses, sino que debe por necesidad merodear sobre esta tierra y
alrededor de nuestra naturaleza mortal. Y este huir es un asemejarse a Dios en
aquellos que le es posible a un hombre; y asemejarse a Dios es adquirir justicia
y santidad y al mismo tiempo, sabiduría.
Ambas paradojas tienen idéntico significado: huir del cuerpo quiere decir huir
del mal del cuerpo, a través de la virtud y el conocimiento, huir del mundo
quiere decir huir del mal del mundo.

DIFERENCIAS ENTRE PLATÓN Y ARISTÓTELES

• ONTOLOGÍA.
PLATÓN: Afirma que hay dos mundos, sensible e inteligible. El primero, una
simple apariencia donde las cosas están sujetas al cambio; el segundo, el de
las ideas, el verdadero.
ARISTOTELES: Solo existe un mundo, las esencias de las cosas no están en
otro plano, sino que se encuentran en las cosas mismas. No necesitamos que
la idea de ser humano se encuentre en otro mundo, existe realizada en los
seres humanos particulares. Decir que las ideas son paradigmas y que las
cosas particulares participan en ellas, no es sino construir metáforas poéticas.
• ANTROPOLOGÍA.
PLATÓN: Plantea un dualismo antropológico, el hombre se divide en cuerpo y
alma. El cuerpo cambia y se deteriora hasta que un día muere, pero el alma
permanece: es eterna e inmortal.
ARISTÓTELES: También es dualista, pero no cree que el alma sea inmortal ni
eterna, El alma es el principio de vida, por tanto, al dejar de existir esta también
lo hace. Esta no es exclusiva del ser humano, hay tres tipos: a- Vegetativa (se
encarga de las actividades biológicas, pertenece a las plantas) b- Sensitiva (se
encarga del conocimiento sensible, junto con la primera se encuentra en los
animales) c- Racional (Exclusiva de los hombres y mujeres, su función es la
actividad intelectiva y la voluntad, junto con las 2 anteriores conforman al
hombre).
• GNOSEOLOGÍA (conocimiento).
PLATÓN: Anamnesis, el conocimiento está en nuestro interior, en nuestra
alma, aunque no lo recordemos.
ARISTÓTELES: Dentro de nosotros no hay ningún alma cargada de
conocimiento. Cuando nacemos, nuestra mente es una tabula rasa. A través de
la experiencia sensible iremos adquiriendo conocimientos, procesados a partir
del entendimiento.
• ÉTICA.
PLATÓN: Equilibrio de las diferentes partes del alma y así llegar al
conocimiento de la idea del BIEN.
ARISTÓTELES: Plantea que no existe esa idea suprema de bien, sino que
existen muchos bienes. Además, no puede ser algo simplemente teórico, no
basta con conocerlo: si queremos ser buenos y justos, necesitamos practicar el
bien y la justicia realizando buenos actos. El fin de nuestra vida, es la felicidad.
Para conseguirla debemos combinar tres cosas: virtud, contemplación y bienes
externos.
Stefanía Quevedo

• POLÍTICA.
PLATÓN: Plantea un Estado ideal, dividido jerárquicamente, en el cual cada
uno/a hace lo que le corresponde. De esta forma, se llega a la justicia.
ARISTÓTELES: Plantea un zoon politikón: animales políticos por naturaleza.
Por naturaleza nos relacionamos con otros, de esta forma se crean las
sociedades en las cuales interactuamos, aprendemos y vivimos. El fin del
Estado debe ser la felicidad y la perfección moral de los ciudadanos.

ARISTÓTELES S IV a.C
METAFISICA
• INDAGA LAS CAUSAS Y LOS PRINCIPIOS PRIMEROS
-deben necesariamente ser finitas en cuanto a su número y se
reducen a las siguientes: causa formal, causa material, causa
eficiente y causa final.
2. INDAGA EL SER EN CUANTO SER
El ser en Aristóteles tiene múltiples significados. Todo lo que no sea
pura nada pertenece a la esfera del ser, tanto si se trata de una
realidad sensible como de una realidad inteligible. La multiplicidad y
diversidad de los significados del ser no implica una pura
homonimia, porque todos y cada uno de los significados del ser
comportan una referencia común a una unidad, es decir, una
estructural referencia a la substancia. Por tanto, el ser es substancia
o una actividad de la substancia: siempre y en todos los casos, es
algo que se relaciona con la substancia. Distingue 4 grupos de
posibles significados del ser:
• CATEGORÍAS: Constituyen las divisiones originarias del ser o los
supremos géneros del ser.
1.substancia 6. Pasión o padecer,
2.Cualidad 7. Dónde o lugar
3. Cantidad 8. Cuándo o tiempo
4. Relación 9. Tener, llevar
5. Acción o actuar 10. Estar
Únicamente la primera categoría posee una substancia autónoma, mientras
que todas las demás presuponen a aquella y se fundamentan en su ser.
(metafísica)

• ACTO Y POTENCIA: -Se trata de significados originarios, que no se


pueden definir haciendo referencia a otros elementos, si no en una reciproca
relación entre ambos ilustrados mediante ejemplos. La materia es potencia, es
una capacidad de asumir o recibir la forma. La forma se configura como acto o
actualización de esa capacidad. El acto posee prioridad y superioridad sobre la
potencia que constituye el modo de ser de las substancias eternas. La potencia
y el acto se dan en todas las categorías.
• ACCIDENTE: Es el Ser casual y imprevisto. Depende de otro Ser y no
está vinculado con este de manera esencial. Es un Ser que no es siempre, ni
en la mayoría de los casos, sino solo a veces, casualmente.
Stefanía Quevedo

• EL SER COMO VERDADERO Y EL NO SER COMO FALSO: El Ser


como verdadero es aquel propio de la mente humana que piensa y sabe unir
las cosas que están unidas en la realidad o separarlas tal como están
separadas en la realidad. El ser falso, o mejor el no ser falso, aparece cuando
se une lo separado o se separa lo unido en la realidad.

SUBSTANCIA
Define a la metafísica como una teoría de la substancia. La problemática de la
sustancia es la más compleja porque es el eje en torno al cual giran los demás
significados del ser. Los problemas principales son qué substancias existen y si
son sensibles o suprasensibles, y qué es la substancia en general. La
substancia en general es entendida de tres maneras:
1) COMO MATERIA, principio constitutivo de las cosas sensibles, sirve como
sustrato de la forma. Si eliminamos la materia, eliminaríamos todas las cosas
sensibles. La materia por si misma es potencialidad indeterminada y
únicamente puede actualizarse y transformarse en algo determinado si recibe
tal determinación mediante una forma. La materia pues solo impropiamente es
sustancia.
2) COMO FORMA es el principio que determina, actualiza, realiza la materia,
constituye aquello que es cada cosa, su esencia, y por lo tanto es substancia
de pleno derecho. Se trata de una forma que es el elemento constitutivo
intrínseco de la cosa misma (es una forma-en-la-materia).
3) COMPUESTA DE MATERIA Y FORMA. Toda sustancia está constituida por
materia y forma: la materia es una potencia, o sea un elemento indeterminado
que necesita de una forma que la actualice para alcanzar su configuración. La
forma resulta entonces, el acto de la materia, aquello que la perfecciona,
determina y específica, forjando junto con ella el ente. La forma hace que el
ente sea lo que es, al actualizar la materia, confiriéndole de esa manera su
rostro inteligible. La realidad del ente depende, por ello, de la forma, porque ella
es como el fundamento o raíz última del ente. Al hacerlo ser lo que es, la forma
constituye la entidad misma del ente, o, dicho de otro modo, establece al ente
en su entidad.
CLASIFICACIÓN DE LAS SUBSTANCIAS.

-La sustancia segunda, que es universal, es idea, tiene una existencia sólo mental,
es abstracta y no existe “en el mundo de las ideas” como establecía Platón sino en la
mente.
-Substancia primera que se divide en:
Stefanía Quevedo

1)SUSTANCIA SEPARADA: se caracteriza por ser acto puro, el Dios en


Aristóteles, que es la causa última de todo movimiento y no tiene materia, y las
55 inteligencias que tienen un motor individual que explica el movimiento de
esas 55 esferas celestes, movidas a su vez por el motor inmóvil
2)SUSTANCIA SENSIBLE. se refiere a los compuestos formados por materia y
forma, de los que se tiene experiencia.
1) Supralunares: son astros y esferas celestes que tienen movimiento
circular, son sustancias eternas hechas de un quinto elemento llamado Éter,
que es un material indestructible, por lo que no tienen principio ni fin.
2)Las sublunares son las de la tierra, con movimiento lineal de generación y
corrupción, son temporales y están hechas de los cuatro elementos: agua, aire,
tierra y fuego.
MOVIMIENTO
Si la física es la teoría de la susbstancia en movimiento, se hace evidente que la explicación de
ese movimiento constituirá su parte principal.

Gracias a la metafísica sabemos que el ser posee muchos significados y que un grupo de
estos significados se halla determinado por la pareja ser en potencia y ser en acto. Se trata
de un no ser relativo, dado que la potencia es real porque es capacidad real y posibilidad
efectiva de llegar al acto. El movimiento o el cambio en general consisten, precisamente, en
pasar desde el ser en potencia hasta el ser en acto. Así el movimiento no supone en absoluto el
no ser como una nada, sino el no ser como potencia, lo cual es una forma de ser, se desarrolla
en el cauce del ser y constituye un paso desde el ser (potencial) hasta el ser (actualizado. No
obstante Aristóteles agrega otros razonamientos en torno al movimiento y llega a establecer
cuales son todas las formas posibles de movimiento y cual su estructura ontológica.

La potencia y el acto se refieren a las diversas categorías y no solo a la primera. Por


consiguiente también el movimiento que es un paso desde la potencia al acto, se referirá a
diversas categorías.

• El cambio según la substancia es la generación y la corrupción.

• El cambio según la cualidad es la alteración

• El cambio según la cantidad es el aumento y la disminución

• El cambio según el lugar es la traslación.

En todas sus formas, el devenir supone un substrato (ser potencial) que pasa desde un término
hasta su opuesto; en el primer caso desde un término hasta su contradictorio, y en los otros
tres, desde un término hasta su contrario. Solo los compuestos de materia y forma pueden
cambiar, porque solo la materia implica potencialidad la estructura hilemorfica (integrada por
materia y forma) de la realidad sensible, que necesariamente implica materia- y por lo tanto
potencialidad- es la raíz de todo movimiento.
TIEMPO
-el tiempo y el movimiento son incorruptibles, porque antes de la generación del
tiempo tendría que haber existido un antes y con posterioridad de su destrucción
debería haber un después. tiempo es eterno.
-El mismo razonamiento puede aplicarse al movimiento, ya que según Aristóteles el
tiempo no es otra cosa que una medida del movimiento, una determinación de éste.
¿CON QUÉ CONDICIÓN SUBSISTE UN MOVIMIENTO ETERNO?
Sólo en el caso que subsista un primer principio que sea su causa, el cual debe: en
primer lugar ser eterno, dado que si el movimiento es eterno también lo es su causa.
Stefanía Quevedo

En segundo lugar, el principio debe ser inmóvil ya que sólo lo inmóvil es causa
absoluta de lo móvil. Por último, el principio debe estar totalmente exento de
potencialidad, es decir, debe ser puro acto.
¿Qué condiciones requiere el movimiento?
El motor inmóvil (lo que mueve) y el móvil (lo que se mueve, que cambia pero
conserva su identidad a través del tiempo).
Mueve como el amado mueve al amante, por el deseo. Es perfecto porque no se
mueve, permanece inmutable, y al ser perfecto los móviles quieren permanecer en el
ser como Dios. Este motor inmóvil no tiene materia, es puro pensamiento, puro acto,
puro ser. Es el máximo grado del ser y del pensar, no es idea ni es persona. Se piensa
a si mismo eternamente y no conoce el mundo ni lo puede pensarlo porque el mundo
cambia, se mueve. De esta manera, el motor inmóvil no puede cambiar su
pensamiento, pues dejaría de ser inmóvil.
-El motor inmóvil (Dios) no es providente, no gobierna el universo porque no es dueño
de él, no lo ha creado.
-no es trascendente, no es algo separado del cosmos como el Dios cristiano, es un
más allá en relación al cosmos. Aristóteles lo descubre como motor del universo del
cosmos.
¿Existe un móvil límite?
Si, es el que siempre es móvil y en ningún caso motor: la materia prima. Es pura
potencia, puro poder ser, y no puede existir por si misma sino unida a una forma.
El movimiento da razón a la multiplicidad por dos principios: el motor inmóvil
(causa generatriz del movimiento; causa final porque mueve como bien, como el
amado mueve al amante, es el bien apetecido por los motores móviles; y por ser
puro acto es causa formal del movimiento) y la materia prima (pura potencia, es
la causa material). Ambos son necesarios porque sin ellos no se explica el
movimiento y son eternas, porque siempre hay movimiento. Son la primera
causa de todo.
TIPOS DE CAMBIO
SUSTANCIAL: Supone la modificación fundamental de la sustancia, es decir,
generación y corrupción.
ACCIDENTAL: No afecta a la sustancia sino a sus accidentes.los accidentes no
exixten por si mismos sino que necesitan de una sustancia:
• Cuantitativo
• Locativo
• Cualitativo
DIOS
Permanece siempre, porque el acto de su vivir es placer. Se halla en una condición
superior, es vida porque la actividad de la inteligencia lo es, y también es eterno y
óptimo. Dios sólo piensa la cosa más excelente, es decir, él mismo; es pensamiento
de pensamiento.
-Es eterno, inmóvil, acto puro, está exento de potencialidad y de materia, es vida
espiritual y pensamiento de pensamiento. No puede tener un tamaño determinado y
debe carecer de partes y ser indivisible. Debe ser también, impasible e inalterable.
-un monoteísmo más tendencial que efectivo, porque trató de separar nítidamente el
primer motor de los motores, colocándolo sobre un plano distinto por completo.
-Dios se piensa a sí mismo pero no piensa las realidades del mundo y de los hombres.
Él no creó el mundo, es el mundo el que se produjo en tendencia hacia Dios, atraído
por la perfección
MEDIEVALES

EL OCASO DE LA EDAD MEDIA


Stefanía Quevedo

Se describirán, a grandes rasgos, la esencia de la visión medieval del mundo,


el tránsito hacia las concepciones y formas de pensamiento de la Edad
Moderna y, por último, la imagen de la existencia que de ahí denota.
SENTIMIENTO DE LA EXISTENCIA E IMAGEN DEL MUNDO EN LA EDAD
MEDIA
• -Al igual que el hombre antiguo, el hombre medieval carece de la idea de
un todo infinito del espacio y el tiempo, mas bien, ve al mundo como una
estructura limitada, una simple esfera.
Sin embargo, el medieval considera la existencia de una instancia superior al
mundo, una experiencia divina que lo trasciende, que esta fuera del mismo.
Aquí difiere del griego en tanto este último ve al mismo mundo como el Todo,
es en el mundo en donde existe y se desarrolla el Ser, en él se acaba.
Otra diferencia entre estos hombres de distintos periodos históricos resulta de
la posición antigua de interrogación constante, preguntándose y re-
preguntándose sobre como es el mundo, considerando que nada tiene carácter
definitivo.
• El hombre medieval tiene la certeza de una Realidad Divina
trascendente del mundo. Dios está fuera y, a su vez, dentro del mundo, debido
a que este es creado por Él y, por lo tanto, es su soberano. Dios no necesita
del mundo ya que existe en sí y se basta a sí mismo. Dios crea libre y
omnipotentemente al mundo, de la nada.
La construcción de la Edad Media estuvo cimentada por, entre otras cosas, el
sistema de sus ordenes cósmico y existencial, propio de la tendencia
germánica hacia lo universal y total.
Los polos en los que está suspendido el mundo son, por un lado, la última
“capa” del cosmos, la luz de Dios (el paraíso), y, por otro lado y de manera
opuesta, el interior del planeta Tierra (infierno).
Por fura y por encima de todos los datos de la existencia cósmica hay un punto
de apoyo absoluto: la Revelación, formulada a través de la Iglesia y percibida
por los individuos a través de la fe.
El pensador medieval carece del deseo de llegar a un conocimiento de la
realidad empíricamente exacto, por lo que puede reproducir ideas servilmente.
Por lo que se refiere a las instituciones de la vida en común, al Estado y a la
sociedad, hay dos grandes ideas que las dominan: la Iglesia (el Papa) y el
Imperio (el Emperador), apoyadas en la gracia divina y configurando a partir de
ella la vida en el mundo. El Papa posee la triple corona y las llaves de Pedro; el
Emperador viste el manto azul tachonado de estrellas y lleva el globo imperial.
Son minuciosamente organizadas (símbolos, cargos, funciones, etc.). La
estructura global de la existencia humana mantiene su fundamento en la
soberanía supraterrena de Dios y se configura a partir de ella.
En el curso de la historia también existe un orden: La Creación, la Encarnación
del Hijo de Dios y el Fin del Mundo y el Juicio.
En el culto surge una ordenación total de la existencia desde un punto de vista
directamente religioso. Por medio de fórmulas simbólicas, el culto renueva en
cada momento histórico el acontecimiento salvador eternamente válido
(escrituras, pinturas, esculturas, rituales, fechas, celebraciones).
• Al hombre medieval lo acongoja un intenso anhelo por la verdad,
dándole suma importancia al saber. Sin embargo, no va tras la realidad de la
naturaleza o de la historia para comprobarla de forma empírica y dominarla por
medio de la teoría, sino que, a base de meditación, se abisma en la verdad
Stefanía Quevedo

para construir desde ella una concepción espiritual de la existencia. Los


fundamentos de la verdad en cuanto tales le son dados de forma autoritaria a
través de las Escrituras y la doctrina de la Iglesia; es a partir de ellos que se
interpretan y entienden los datos experimentales y se obtiene una gran
cantidad de nuevos saberes.
A esto hay que agregarle que el contenido simbólico de la existencia para el
hombre medieval (ve símbolos en todas partes). Todo parece revelar algo por
encima de su propio ser. Así, toda forma se convierte en símbolo, remitiendo a
algo que la trasciende.
En cuanto a la autoridad, es falso hablar de “falta de libertad”. Esto debido a
que el hombre medieval considera a la autoridad como referencia al Absoluto,
como punto de apoyo en el mundo. Esto se modifica a partir de la segunda
mitad del siglo XIV, despertándose el anhelo de libertad individual de
movimientos y, con él, la sensación de estar coartada por la autoridad.
La angustia del hombre medieval nace del peso de la limitación cósmica frente
al ímpetu expansivo del alma que encuentra la calma en ese constante
trascender a un mundo superior.
La naturaleza significa la totalidad de las cosas, ordenadas y unificadas como
obra del Dios soberano.
El hombre, en tanto sujeto, constituye la unidad del individuo humano y el
soporte de su vida espiritual en tanto criatura de Dios y cumplidor de Su
voluntad.
El hombre medieval tiene una doble situación: por un lado es criatura de Dios,
sometido a Él; por otro era imagen de Dios. Era, por un lado, absolutamente
inferior a Dios pero, por otro, superior a las restantes criaturas. El hombre se
hallaba bajo la mirada de Dios y ejercía el señorío espiritual sobre el mundo.
GENESIS DE LA IMAGEN DEL MUNDO EN LA EDAD MODERNA
• La estructura medieval del mundo empieza a descomponerse en el siglo
XIV y prosigue en los siglos XV, XVI y XVII. Para comprender ello,
observaremos las distintas esferas de la vida del hombre medieval.
Uno de los principales puntos a considerar es el origen de la ciencia moderna.
A partir de la segunda mitad del siglo XIV, el hombre comienza a anhelar
conocer de manera directa la realidad de las cosas a través de sus propios ojos
y llegar a un juicio fundamentado en forma crítica, independientemente de
esquemas previos. Esto derivaría, a su vez, en el moderno experimento, la
teoría racional, la critica humanista, la historiografía de las fuentes, la doctrina
moderna del Estado y el Derecho.
A nivel económico, la actividad mercantil cobra libertad y adquiere sentido en si
misma (proceso que había comenzado en Italia a fines del siglo XIII), hablamos
del nacimiento del sistema económico capitalista, en el que cuada quien puede
poseer todo cuanto pueda adquirir sin quebrantar las normas jurídicas vigentes.
La propiedad hace saltar los estratos sociales aun vigentes y abre el acceso a
clases y oficios hasta entonces reservados a los privilegiados. Nace la
Economía.
En el campo de la acción política, la meta es la conquista, defensa y
explotación del poder, sin depender en demasía de las valoraciones éticas y
religiosas. Autores como Maquiavelo y Hobbes refuerzan esta evidencia. En
este periodo podemos observar la constitución de Estados nacionales
modernos.
Stefanía Quevedo

Respecto a las concepciones cosmológicas, se descubre la expansión


indefinida del mundo en todas las direcciones. La astronomía descubre que la
tierra gira alrededor del sol, dejando de ser la tierra el centro del universo.
Se considera discutible la doctrina bíblica de la historia sobre un comienzo y un
final determinados. Se abre paso a la concepción de una evolución histórica
procedente de un pasado cada vez más amplio (debido al estudio de las
fuentes, monumentos y restos culturales) y en curso hacia un futuro cada vez
más remoto; esta mirada de la historia pone al descubierto las relaciones que
vinculan a cada acontecimiento con los demás, quitando a la existencia
humana de un punto de apoyo objetivo.
El hombre moderno comienza a descubrir y a conquistar nuevas zonas de la
tierra. Se siente con posibilidades de aventurarse por el mundo ilimitado y
dominarlo.
Aparece la conciencia de la personalidad a partir de la cual el individuo se
convierte en algo interesante para sí mismo, centrándose en él la observación y
el análisis psicológico.
La angustia de la Edad Moderna procede de la conciencia del hombre de no
tener un punto de apoyo simbólico que ofrezca seguridad inmediata.
• Los elementos fundamentales de la nueva imagen de la existencia para
el hombre moderno:
- El concepto de naturaleza propio de la Edad Moderna responde a lo dado de
modo inmediato, el conjunto de energías y materias, de seres y leyes,
presupuesto a la existencia individual. De este criterio “natural” se deducen
valoraciones ligadas a lo recto, lo bueno, lo perfecto, lo justo (el hombre natural
de Rousseau, el racionalismo de la Ilustración, etc.). Lo natural no es algo que
puede ser trascendido y se considera definitivo todo de lo que ello se derive. El
hombre mismo pertenece a la naturaleza.
- La subjetividad, presentada como “personalidad”, forma humana que se
desarrolla por su propia capacidad e iniciativa. El sujeto constituye el soporte
de los actos admitidos como validos y es, igualmente, la unidad de las
categorías que determinan esa validez, encontrando su definición más enérgica
en la filosofía de Kant. En ella, el sujeto lógico, ético, estético, es algo primario
y mas allá de ese sujeto nada puede alcanzarse con el pensamiento. Tiene
carácter autónomo, existe en sí mismo y fundamento el sentido de la vida del
espíritu. Entre la naturaleza y el sujeto-personalidad se sitúa el mundo de los
actos y obras humanos, que tiene como polos esos dos elementos pero, al
mismo tiempo, goza de propia autonomía frente a ellos.
- El concepto de cultura se resignificó en tanto el mundo dejo de ser creación y
se convirtió en “naturaleza”, la obra humana dejo de estar al servicio exigido
por la obediencia a Dios y paso a ser “creación” y el hombre, antes adorador y
servidor, se convirtió en creador; así, en el deseo de “cultura” el hombre
emprende la tarea de construir la existencia como obra suya, es decir, la
cultura representa la encarnación de la obra humana, la cual es independiente
frente a Dios y a Su Revelación.
Dicho esto, lo existente se presenta, desde la conciencia moderna, en la
naturaleza, el sujeto-personalidad y la cultura. Fenómenos correlativos que se
estructuran y que no pueden ser sobrepasados, no necesitan justificación
exterior a sí mismos, ni toleran norma alguna sobre si.
• Frente a este contexto, la fe cristiana y, más concretamente, la Iglesia
se ve “obligada” a adoptar una actitud defensiva frente al avance moderno. A
Stefanía Quevedo

partir de ahora, la fe ya no constituye la base indiscutible de la existencia, sino


que debe justificar su pretensión de verdad. Comienza a sentirse en un mundo
extraño e incluso hostil.
Para la Modernidad, el hombre no está sometido a la mirada de Dios, sino que
es autónomo, tiene libertad de acción y ya no constituye el centro de la
Creación, sino que es una parte más del mundo. Se les quita centralidad al
hombre y a Dios.
En este contexto, se experimentan con mayor urgencia las contradicciones en
la interioridad del hombre entre el deseo de verdad y la resistencia a ella e,
incluso, entre las ideas de bien y de mal.
SAN AGUSTÍN
RELACIÓN FE-RAZÓN.
Se propone alcanzar la fe en las escrituras, el asentamiento de estas verdades
de fe ha de estar precedido por algún trabajo de la razón: aunque no sean
demostrables, se puede demostrar que es legítimo creerlas y de esto ha de
encargarse la razón. Hay una doble actividad de esta: se razona para creer y
se cree para entender, ya que solo se puede entender lo que se cree. La
filosofía de San Agustín es una filosofía para entender las creencias, sabio será
quien logre coincidir filosofía y teología.
HOMBRE
Es un compuesto de alma y cuerpo. Cuando piensa como cristiano lo define
como la unidad de cuerpo y alma, cuando filosofa cae en el platonismo por el
cual “hay una jerarquía en la que el alma sólo está unida al cuerpo por la
acción que ejerce sobre él para vivificarlo. El alma es el guardián del cuerpo y
lo vigila constantemente, forma parte de todo, está presente en cada parte”.
Los cuerpos de todos los hombres estaban en potencia en la materia desde el
origen, porque el mundo de San Agustín se despliega en el tiempo. Agustín no
considera al cuerpo como una prisión sino como consecuencia del pecado
original, por lo que debemos librarnos de él. En parte se debe a la visión que
tenían los medievales respecto a la vida terrena: es transitoria. Lo que importa
es lo que está después.
DEMOSTRACIÓN DE LA EXISTENCIA DE DIOS
Dios existe porque existe la verdad, es la verdad misma y es el que pone la
verdad dentro de nosotros. El conocimiento inteligible proviene de Dios, Él va a
iluminarnos para que encontremos la verdad.
CONOCIMIENTO SENSIBLE
Conocer es aprehender por el pensamiento un objeto que no cambia y cuya
estabilidad permite retenerlo bajo la mirada del espíritu. La verdad es el
descubrimiento de una regla por el pensamiento, que se somete a ella y debe
ser inmutable, eterna, necesaria y trascendente. Así, la verdad depende del
ser, porque sólo es verdadero lo que verdaderamente existe. No son los
objetos sensibles los que nos enseñan la verdad que les corresponde, nosotros
tampoco somos la fuente de la verdad es porque también somos mutables. La
forma en que se impone la verdad a la razón es porque la verdad es
trascendente respecto a la razón. La verdad está en la razón, por encima de la
razón. La verdad además es inteligible y es Dios.
ILUMINACIÓN
Este Dios, además de principio de la inteligencia lo mismo que de lo inteligible
es la fuente de todo conocimiento. En El, en efecto, en la inteligencia divina
Stefanía Quevedo

subsisten las Ideas, formas principales, razones estables y ejemplares de todo


lo que es.
Así pues, en Él y solo por Él podemos conocer todas las cosas volviéndonos de
fuera a lo interior y de lo interior a lo superior. Para San Agustín tal
conocimiento no puede ser más que sobrenatural y no accesible al hombre
más que en la gloria. Pero todas las cosas encuentran en Dios su punto de
apoyo y la razón de su carácter absoluto e inmutable, esto es, vemos todas las
cosas en una luz causada en nosotros por Dios, la Luz increada, y no podemos
conocerlas más que de esta manera. Ser y conocer son una sola y misma
cosa, pero en Dios y solo en Dios, no en el hombre. Es en esta luz producida
en nosotros por Él, y gracias a esta iluminación, por la que contemplamos y
comprendemos las cosas inteligibles, lo mismo que percibimos los objetos
visibles en la luz del sol que Él ha creado. Pero para esto es necesario tener
los ojos muy sanos, es preciso alejar los obstáculos que se oponen a este
conocimiento, despegarnos de lo sensible y mirar con atención para llegar, en
fin, a ver.
TRINIDAD
Agustín concibe la naturaleza divina antes que a las personas. La trinidad será
la unidad de la naturaleza divina que se despliega en tres personas: Padre, Hijo
y Espíritu Santo. Dios no significa Padre, sino la divinidad (no como persona en
particular). Es Dios-trinidad quien se despliega sin sucesión de tiempo o de
naturaleza en tres personas. El alma humana es la estructura en donde se
encuentran los indicios más seguros de lo que puede ser la Santísima Trinidad:
conocerse a sí mismo es conocer a Dios, ya que creó su obra a imagen y
semejanza suya. El alma es como el padre y de su ser engendra la inteligencia
de sí misma, cono el Hijo o como el verbo; la relación de este ser a su
inteligencia es una vida, como el Espíritu Santo.
CREACIÓN
Agustín insiste en explicar que la propia mutabilidad de las cosas exige un ser
eterno e inmutable como causa de ellas. Su perspectiva siempre apunta a un
mundo trascendente. Las formas y perfecciones que descubrimos en las cosas
son leves reflejos de las ideas eternas existentes en la mente de Dios, modelos
conforme a los cuales Dios crea.
Dios crea el universo inteligentemente y con libertad absoluta, lo hace en razón
de su bondad y de su deseo de compartir con las criaturas parte de su bondad.
Todo lo que ha creado Dios, es bueno. En contraste con los maniqueos que
consideran que la materia era sustancialmente mala y contra los neoplatónicos
que veían en la materia el principio del mal y la imperfección, la materia a la
cual Dios hacer surgir de la nada, es buena. Distingue entre: Materia formada y
no formada/informe, esta última es algo intermedio entre el ser y el no ser “casi
nada”, tiene una realidad mínima, ambas han sido creadas de la nada. El
mundo ha tenido su principio en el tiempo, Dios creó todo a la vez, aunque no
todo en el mismo grado de perfección. San Agustín no habla de evolución, Dios
implanto en la materia el principio de cada especia y cada una llega a su
desenvolvimiento total bajo un tiempo y circunstancias determinadas. Hay una
tendencia a minimizar la eficiencia de las criaturas para exaltar el poder y la
actitud creadora de Dios: la causa real de la verdad no es la mente humana,
sino la acción divina de iluminar.
NOCIONES ETICAS.
Stefanía Quevedo

Para llegar a la felicidad se necesitan todos los recursos de la mente y del


corazón. El centro del interés es Dios, todo tiene significado en tanto se lo
impulsa hacia Dios. El amor es la fuerza que atrae hacia Él y el amo que nos
une no es simplemente natural, sino un don sobrenatural.
El hombre se ha esclavizado a sus pasiones y al mundo sensible, lo cual lo
aparta de su propia alma y de Dios. El hombre, al haber perdido su libertad por
el pecado original, solo puede reconquistarla por la gracia de Dios. Solo gozara
de perfecta libertad en su próxima vida, cuando ya sea incapaz de pecar.
CIUDAD DE DIOS
Los hombres quedan unidos a él por su amor y se unen entre si y forman una
asociación de seres racionales unidos por unánime concordancia en las cosas
que aman. El amor es la base de la sociedad y la hace diferente de otra. A
partir de esto se dan dos amores y dos ciudades:
- Amor de Dios Ciudad de Dios: su cabeza es Cristo, se ama a Dios en Cristo y
los hombres están predestinados a rendir con el credo.
- Amor de sí mismo y el mundo Ciudad del Mundo: los hombres aman al mundo
y se aman a sí mismos más que a Dios y sufren castigo eterno con los
demonios.
Lo básico para diferenciar ambas ciudades es su amor. Su separación
completa se dará en el juicio final. San Agustín estudia junto a la naturaleza
como a la historia en su dimensión supra temporal. La ciudad de Dios sirvió de
modelo para la teología de la historia.
PROBLEMA DE LA CERTEZA: ¿DE QUE PODEMOS ESTAR SEGUROS?
Los académicos dirán que la certeza es imposible, ante esto, Agustín afirmará
que es posible conocer muchas cosas con certeza, no podremos saber qué
alternativa es correcta pero en si ya son verdaderas las proposiciones
disyuntivas.
Por otro lado, los escépticos afirman que no podemos confiar en nuestros
sentidos, ni siquiera podemos estar seguros de que el mundo existe.
El hombre sabio sabrá que no se puede conocer a través de los sentidos, sino
que para conocer la verdad debemos distinguir entre imágenes verdaderas e
imágenes falsas.
CAMINO INTERIORISTA
Para descubrir la verdad debemos conocernos a nosotros mismos. Cuando el
hombre mira hacia adentro conoce otras verdades y al captar estos objetivos
no ve las cosas sensibles sino las leyes enteras, inteligibles y necesarias.
¿Este verdadero conocimiento (necesario y sin cambio) puede estar presente
en nuestras almas cambiantes y contingentes? La verdad somete a la mente y
la rige, no puede ser causada por una mente individual ya que es pública y
abierta. La verdad existe sobre la mente humana, es necesaria, inmutable y
eterna.
ALMA
Usar el método de reflexión para descubrir la verdad no significa negar la
existencia del mundo, sino enfocarse en lo que Agustín considera
verdaderamente real e inteligible, Dios. El mismo método lo pone en contacto
con el centro del hombre, que es el ALMA. Al escapar del escepticismo, se
halla a sí mismo como una mente que trasciende la materia. El alma se conoce
a sí misma como una inteligencia incorpórea, al igual que la propia verdad,
inmortal. El auténtico hombre es el alma y el cuerpo es un instrumento de esta.
Stefanía Quevedo

SANTO TOMÁS
El contexto de las universidades es importante debido a la disputa entre la
Iglesia (cristianismo, la Universidad de Paris estaba incluida en este sector) y
los profesores seculares (influenciados por las traducciones de Aristóteles y
que fomentaban a las ciencias por si mismas).
Nacido en Italia, perteneciente a la Orden de los Dominicos.
EXISTENCIA DE DIOS.
La cuestión de Dios no es evidente a nuestra mente debido a que nuestra
inteligencia no es compatible o comparable con la existencia de Dios.
La existencia de Dios es, por un lado, necesaria, ya que no se nos aparece
como evidente y, por otro lado, posible, ya que podemos encontrar atributos en
los entes. Los entes son evidentes para nosotros, sin embargo, tienen aspectos
que no pueden justificare por sí mismos, por lo que requieren una causa (Dios).
Demostraciones:
1) Movimiento (sinónimo de cambio): El paso de la potencia al acto requiere de
una causa que ponga a la potencia en acto, esa causa, a su vez, requiere de
otra que actúe de tal manera y así sucesivamente, esto nos llevaría a la
suposición de que todos los entes están en constante movimiento… Sin
embargo, el problema sería que no habría una causa, sino una constante
regresión. La causa es el Primer Motor Inmóvil, el cual es puro acto y jamás
cambia.
2) Causa eficiente: La causa de un ser no puede estar en si mismo ya que, de
ser así, no habría causa. La propuesta es, al igual que antes, el Primer Motor
Inmóvil, en tanto agente externo que pueda dar acto a la potencia.
3) Contingente (algo que es pero que pudo no haber sido) y necesario (no
puede no ser): todos los seres son contingentes ya que nacen y mueren, por lo
tanto, siendo todo el mundo contingente, no es necesaria su existencia (ya que
no puede darse a si mismo su propia causa) y, de esta manera, necesita de
una causa (necesaria, es decir, que no pueda no ser) que le de su existencia.
4) Las cosas tienen atributos que las hacen mayores o menores
bellas/perfectas, estos atributos corresponden a Dios.
5) El orden del mundo permite que todas las cosas persigan un fin,
respondiendo a la Naturaleza, este movimiento finalistico requiere de
inteligencia, la cual se presenta, incluso, en los seres irracionales y para que
esto sea posible se requiere de una inteligencia suprema y racional que ordene
los movimientos finalistas.
ATRIBUTOS DE DIOS
Podemos conocer cuáles son los atributos de Dios pero no cómo son en Dios.
Las cosas guardan semejanzas con su causa (Dios), haciendo analogía con la
relación de un padre con un hijo (semejanzas físicas, ideales, etc.). Así,
podemos conocer los entes, los cuales tienen semejanzas con su causa, a
pesar de que no podamos conocerlas EN la causa (es decir, EN DIOS), las
conocemos en la Naturaleza creada (las cosas).
NOCION DE ENTE
Ente = lo que tiene ser; “lo que” responde a la esencia, la naturaleza, lo
definible, lo que hace que una cosa sea lo que es; “ser” hace referencia al acto
de ser/existir, lo que hace que el ser sea. No hay nada fuera de la existencia. El
puro ser no está en el ente, sino en su causa (Dios).
NOCION DE CRACION DE LA NADA
Stefanía Quevedo

El ente es lo que tiene ser, por lo tanto es contingente, ya que TIENE ser, no
ES ser. De esta mantera, no puede ser su propia causa y necesidad de una
causa que sea puro ser (puro acto de existir subsistente). La esencia de Dios
es existir o, dicho de otra forma, no tiene esencia porque es puro existir.
La relación (“de arriba hacia abajo”) entre Ser (Dios) y el ente no es necesaria,
sino libre ya que no hay ningún factor externo que doblegue o haga actuar a
dicho Ser para que ponga en acto la potencia del ente, sino que es una
creación de la nada.
Esta creación de la nada es a partir de la cual existe el ente (todo), es un puro
acto de existir. Dios puede crear porque es un ser personal que tiene voluntad
creadora, libertad y poder (omnipotencia divina).
ANTROPOLOGIA
Tomas busca reformar la noción aristotélica del hombre, considerado como una
sustancia (cosa) que contiene materia (cuerpo; cumple con ciertas
características materiales) y forma (alma intelectiva, propia de la vida humana),
sosteniendo:
- El hombre es una unidad (cuerpo y alma) y su alma es inmortal. Aquí es
donde tiene su complicación, ya que si el alma es inmortal ¿por qué el cuerpo
no lo es? El humano es una sustancia, sin embargo, su forma es en sí mis ma
una sustancia que es intelectiva (inmaterial) y, por ende, subsiste a pesar de
que necesita de un cuerpo para conocer. Luego de la muerte el cuerpo resucita
(a pesar de haberse corrompido previamente) y se une al alma, ya que el
hombre es, necesariamente, cuerpo y alma.
DESCARTES
LA RAZÓN COMO CRITERIO DE VERDAD
CRITERIO DE RAZÓN
El criterio de verdad es el patrón que utilizamos para determinar la verdad o
falsedad de un juicio. Para establecerlo podemos acudir a una autoridad de
validez (Biblia) o a la experiencia, por ejemplo, sin embargo, Descartes se
enfrenta contextualmente a una autoridad que ha comenzado a derrumbarse y
al escepticismo frente al análisis empírico. Buscará principios sólidos, firmes y
estables en otro lado.
LAS MATEMATICAS Y LOS CDR
Las proposiciones matemáticas no deben su verdad a la experiencia, sino que
están inmunes a cualquier desmentido de ella, es decir, no dependen de la
misma experiencia sino de la razón. Las matemáticas le sirvieron a Descartes
de paradigma en la búsqueda de verdades absolutamente ciertas que le
sirvieran de apoyo en la reconstrucción de la totalidad del edificio de la ciencia
y la filosofía.
FILOSOFÍA CARTESIANA
DUDA METÓDICA
Descartes comienza dudando de todas las cosas, considerando como falso
cuanto pueda ponerse en duda, buscando eliminar aquellas opiniones y falsas
creencias que se habían apoderado de su espíritu y que amenazaban con
ocultarle la verdad.
De lo primero que duda es de los sentidos porque muchas veces lo han
engañado “y es prudente no fiarse nunca por completo de quienes nos han
engañado una vez”. Luego duda, también, de estar en determinado lugar
actuando de determinada manera, ya que es posible que sea un sueño. Sin
embargo, incluso en las ilusiones habrán algunas cosas simples y universales
Stefanía Quevedo

que son verdaderas y existentes formadas por las imágenes que residen en
nuestro pensamiento tales como la naturaleza corporal, la extensión, la figura,
la magnitud y su número.
A pesar de lo antedicho, es posible que exista un Dios maligno que nos engañe
haciéndonos parecer cosas como ciertas y evidentes.
PIENSO, LUEGO SOY.
Si se duda de todo, al menos es cierto que duda, y si duda es porque piensa, y
si piensa existe en tanto ser pensante. No se puede eliminar el pensar sin caer
en una contradicción y si se está seguro de que se piensa, también se está
seguro de que se existe.
De aquí, Descartes extrae la regla general que le guiara en los sucesivos pasos
de la investigación de la verdad: la evidencia racional, la cual se caracteriza por
la claridad (aquello presente y manifiesto a un espíritu atento) y la distinción
(aquello que es tan preciso y tan diferente que solo comprende lo que
manifiestamente aparece a quien lo considera como es debido).
El hombre es una cosa que piensa. Este pensar hace referencia a la vivencia
en general (duda, entendimiento, afirmación, negación, deseo, rechazo,
imaginación, etc.).
Descartes es un idealista en tanto admite como verdad primera la existencia de
su propio yo y de sus pensamientos e ideas.
LA EXISTENCIA DE DIOS
- Para probar la existencia de Dios deberá partir de la única verdad que posee:
la certeza de la propia existencia como cosa pensante. Examinando los
pensamientos tenemos ideas (imágenes de las cosas); se advierte, además,
que entre las ideas hay algunas que parecen haber nacido con uno (innatas),
otras extrañas (adventicias) y otras inventadas (ficticias). Las ideas que
representan sustancias contienen mas realidad objetiva que las que
representan modos o accidentes y, también, las que representan una sustancia
infinita deben tener más realidad objetiva que las que representan sustancias
finitas. Toda idea es efecto de una causa, sin embargo, dicha causa no puede
ser otra idea ya que lo menos perfecto no puede producir lo más perfecto (debe
haber tanta realidad en la causa como en el efecto). Debido a que entre las
ideas que un hombre tiene esta la idea de Dios (sustancia infinita, eterna,
inmutable, independiente, omnisciente y omnipotente) la existencia de Él queda
demostrada, ya que solo una sustancia verdaderamente infinita puede ser la
causa de la existencia de una idea del Ser infinito en el hombre; es decir, la
presencia de la idea de lo perfecto e infinito en el hombre es prueba de la
existencia de Dios.
- No hay duda de que yo existo, sin embargo, debo, necesariamente, mi
existencia a Dios, ya que de no ser así me la debería a mí mismo (no carecería
de perfección y sería similar a Dios), a haber existido siempre (se necesita de
una continua creación) o a causas menos perfectas que Dios (no sería posible
la existencia de la idea de Dios en mi mente).
- Argumento ontológico: tenemos la idea de un ser sumamente perfecto, el cual
es inseparable de su esencia. No se puede concebir a Dios sin que este exista,
es decir, la existencia es inseparable de la idea de Dios, luego Dios existe
verdaderamente. Es imposible concebir a Dios sin su existencia ya que la
existencia es una perfección y Él es el Ser sumamente perfecto.
EXISTENCIA DE LAS COSAS MATERIALES
Stefanía Quevedo

Sera necesario, para Descartes, “echar mano” a su doctrina de la “veracidad


divina” para tener seguridad de que las cosas materiales existen efectivamente
y que no son una mera ilusión. Sólo estaremos seguros de la veracidad de la
realidad de nuestras ideas en tanto Dios exista y, siendo la suma perfección, no
nos engañe.
MÉTODO
MÉTODO CARTESIANO
- Primera regla: la evidencia es criterio de la verdad, consistiendo dicha
evidencia en la claridad (aquello presente y manifiesto a un espíritu atento) y la
distinción (aquello que es preciso y diferente a todo lo demás). Habrá que evitar
dos vicios en la búsqueda de la verdad: tomar por verdadero lo que no es
(precipitación, tomar por verdadera una idea confusa) y negarse a aceptar la
verdad de lo evidente (prevención, negarse a aceptar la claridad y distinción de
una idea). No se debe juzgar antes de que el juicio se nos aparezca como
evidente, ni juzgar a base de ideas preconcebidas ni juzgar mas allá de lo que
se nos aparece como claro y distinto. En definitiva, dividir las dificultades hasta
alcanzar los elementos o naturalezas simples, que se aprehenden por intuición.
- Luego debemos dividir cada una de las dificultades (aquello en que se
encuentra la verdad o falsedad) que se examinen en tantas partes como sea
posible y en cuantas partes permita su mejor solución. Esta división estará
limitada por las naturalezas simples, las cuales son, por un lado, el objetivo de
la división, y, por otro, los elementos indivisibles que constituyen el último
término del conocimiento. Son captadas por la intuición, la cual es una
captación simple e inmediata del espíritu que no deja lugar a dudas. Luego se
comienza a utilizar la deducción (operación por la cual se infiere una cosa de
otra) en pos de ofrecer seguridad a las verdades, en tanto parta de principios
ciertos. La deducción implica una sucesión de intuiciones. En definitiva,
ascender por deducción de los elementos simples al conocimiento complejo.
- Conducir ordenadamente los pensamientos en grados, comenzando por los
objetos más simples y fáciles de conocer hasta los conocimientos de los más
compuestos, lo que nos permitirá conocer las dificultades con la misma
seguridad que podemos captar las naturalezas simples. En definitiva, se debe
examinar con cuidado la cadena deductiva para estar seguro de que no se ha
omitido nada ni se ha cometido ningún error.

DAVID HUME
ACTITUD Y PROPOSITOS.
Hume es un escéptico que, aplicando un procedimiento empirista, llega a la negación de
toda sustancia, tanto material como espiritual y a la de cualquier clase de causalidad.
Los brillantes resultados de la aplicación del método experimental a las ciencias de la
naturaleza movieron a Hume a intentar una empresa semejante en el estudio de la
naturaleza humana y en la moral.
EMPIRISMO
Todo conocimiento humano comienza en los sentidos, experiencia, y termina en ellos.
Partiendo de la afirmación de que sólo es válido lo experimentable, se deberá concluir
necesariamente en lo que concluyó el mismo Hume: no hay conocimiento. Todo es
mera creencia. Se cree que es así pero nunca se sabrá si es verdaderamente así, la verdad
no existe. La única verdad de la que se podría hablar es la multiplicidad, sin ninguna
unidad. Así se vuelva a plantear el problema de la época moderna, todo termina en la
Stefanía Quevedo

falta absoluta de certeza, ya que nuestros conocimientos no son ni si quiera


conocimiento sino mera creencia. ¿Qué son las ciencias? Nada.
NUESTRO CONTENIDO DE CONCIENCIA.
Respecto al origen y la clasificación de nuestras ideas, Hume parte de una actitud
fenomenista, analizando el contenido de conciencia o lo que aparece en nuestros
sentidos y en nuestra mente. No conocemos los objetos exteriores tal como son en si,
sino nuestras percepciones, las cuales pueden ser impresiones (representaciones
exteriores, intentas, fuertes y vivaces; sentimientos, pasiones emociones) o ideas
(representaciones internas, débiles, pálidas, menos vivaces; memoria, imaginación,
entendimiento). Entre sentir (impresiones) y pensar (ideas) existe una diferencia: su
grado de fuerza y vivacidad con la que impresionan el espíritu y penetran en nuestra
conciencia.
Las impresiones/sensaciones son el material primario de nuestro conocimiento a partir
de las cuales provienen las ideas. Sin embargo, la causa de las impresiones es
perfectamente inexplicable por la razón humana.
Impresiones e ideas pueden ser simples o compuestas. Podemos descomponer la
percepción compleja de una manzana en un conjunto de percepciones simples que
combinan color, olor, sabor, gusto, etc. De las impresiones sensibles se originan dos
clases de ideas: la memoria (recuerdos; cuya complejidad reproduce la de las
impresiones directas, son fuertes y vivas) y la imaginación (imágenes; más débiles y
menos vivaces; puede combinar ideas simples entre sí).
De igual forma, las ideas complejas son una combinación, agregación o agrupación de
las ideas simples.
LA ASOCIACION.
Las ideas compuestas/complejas se forman mediante la agrupación o combinación de
ideas simples en virtud de la asociación, es decir, de una tendencia que rige dicha
combinación de ideas simples, no lo hace de manera fortuita ni arbitraria. Esta
asociación se rige por: semejanza y desemejanza; continuidad en el tiempo y en el
espacio; relación de causa y efecto.
LAS IDEAS UNIVERSALES
Tenemos ideas universales, las cuales no son más que ideas particulares anexas a un
término concreto que les da una significación más extensa. Es decir, comprende un
conjunto de impresiones particulares semejantes que nuestra mente asocia a un nombre
común. Las ideas universales se forman mediante la ley de asociación, la costumbre
(utilizar una denominación común) y la tendencia evocadora (elimina lo contrario y
asimila lo que le conviene). Cuando varios objetos semejantes se presentan
reiteradamente en nuestra experiencia, les aplicamos un mismo nombre común,
prescindiendo de todas sus diferencias intensivas o extensivas.
LA SUSTANCIA.
Hume niega toda sustancia, tanto material como espiritual. Tendemos a suponer, debido
a nuestra costumbre de asociar ideas, la existencia de una sustancia como causa
permanente de aquellas impresiones, la cual permitiría explicar la permanencia de ellas
en el tiempo. Pero semejante concepto carece de valor real y objetivo ya que cae fuera
del campo de nuestra experiencia, no es más que una ficción de nuestra fantasía.
CRITICA A LA NOCIÓN DE METAFÍSICA
Niega toda sustancia porque es una idea compleja basada en la relación de identidad
objetiva, unida a la estabilidad y permanencia en el tiempo. Esto nos lleva a creer en una
causa permanente debajo de las impresiones y la atribuímos a una sutancia, llegando a
un principio
LA SUSTANCIA PSIQUICA. EL YO SUBSISTENTE.
Stefanía Quevedo

El procedimiento de formación de la idea del yo sustancial es idéntico al de la sustancia


física, en este caso, hallar una realidad permanente que sustente y unifique en el tiempo
la variable y discontinua cantidad de percepciones. Sin embargo, solamente percibimos
un conjunto de percepciones diferentes que se suceden unas a otras con una celeridad
inconcebible y que están en perpetuo flujo y movimiento. La causalidad es la única idea
que puede ser prolongada mas allá de nuestros sentidos, permitiéndonos salir del orden
de la experiencia para afirmar la existencia de realidades o cosas que caen fuera del
campo de nuestras percepciones directas.
EL PRINCIPIO DE CAUSALIDAD.
Hume critica el principio de causalidad. La experiencia solamente nos suministra dos
fenómenos, A y B, que se suceden uno después de otro, son ideas distintas y separables,
que podemos considerar independientemente una de la otra. Para demostrar que una es
causa de la otra deberíamos poder demostrar una relación necesaria entre ambas, pero
esa relación necesaria no la percibimos por la experiencia, sino que la establecemos en
virtud de la costumbre o de una tendencia subjetiva, por lo tanto, no es demostrable.
Así, por ejemplo, tenemos la impresión visual de una llama a la que sigue la impresión
táctil de calor, ambos son hechos que están en conjunción constante y que siguen uno a
otro pero no podemos afirmar su conexión necesaria ni, por consiguiente, su relación
causal. Por lo tanto, el principio de causalidad no es evidente por intuición ni puede
demostrarse a priori por ningún raciocinio.
VALOR EMPIRICO DEL PRINCIPIO DE CAUSALIDAD.
Tenemos el hecho de experiencia de que ciertas impresiones o ideas se hallan en
conjunción constante, en donde una acompaña o sigue regularmente a la otra. Siempre
que revive en la memoria una impresión o idea, nos hacer evocar siempre el recuerdo de
la idea o impresión correspondiente. Sin embargo, la asociación constante de dos
impresiones no implica una relación causal, sino simplemente la apreciación de
continuidad y sucesión de dos fenómenos. Si pretendemos demostrar un nexo
ontológico necesitamos estar seguros de la constancia de leyes naturales o de semejanza
en experiencias pasadas con las futuras, sin embargo, pueden existir cambios ene l curso
de la naturaleza y, por lo tanto, no podemos tener la certeza de nuestra deducción.
El valor empírico del principio de causalidad es que permite relacionar mentalmente una
sucesión de fenómenos o ideas de manera constante, convirtiéndose en costumbre.

KANT
INTENCION EN LA CRP (1781)
Buscará fundamentar la física de Newton tras la crítica de Hume y determinar
la posibilidad o imposibilidad de la metafísica, para esto convertirá a la razón en
un problema y se preguntará 3 cosas: qué puedo conocer, qué debo hacer y
qué puedo esperar. ---- ¿QUÉ ES EL HOMBRE?
Buscará, además, establecer los límites del conocimiento e investigará lo que
hay de puro en todas las ciencias.
CIENCIA
Va a componerse de elementos que procedan de la experiencia o bien de
aquellos puros que la razón agrega por encima de la experiencia. Forman parte
de ella juicios que pueden ser:
• Analíticos: El predicado se encuentra contenido en el sujeto, son
explicativos y tienen 3 atributos: universales, necesarios y verdaderos. SON A
PRIORI
Stefanía Quevedo

• Sintéticos: Aquellos donde el predicado no está contenido


necesariamente en el sujeto, sino que este amplia el contenido del sujeto, A su
vez, pueden ser:
-Juicios sintéticos a posteriori (la conexión sujeto-predicado es meramente
factual y contingente. No son universales ni necesarios).
-Juicios sintéticos a priori: Las condiciones para que estos sean posibles van
a estar expresadas en el problema que Kant dividirá en 3 partes (Analítica
Trascendental, Estética T. y Dialéctica T.).

ESTÉTICA TRASCENDENTAL
-Es un estudio de las condiciones de posibilidad del conocimiento sensible.
-El sujeto aportará 2 intuiciones puras (en ellas no hay nada que pertenezca a
la razón, su finalidad será estructurar y ordenar lo recibido en los sentidos):
• ESPACIO: Es a priori, lejos de estar derivado de la experiencia es el
supuesto de esta, no podemos tener experiencia de nada si no es en el
espacio. Todas las percepciones sensibles tienen que tener la forma del
espacio. Es una condición que el sujeto impone a la cosa para que sea
cognoscible para nosotros. Una intuición pura u trascendental.
• TIEMPO: Es a P., cualquier percepción sensible es una VIVENCIA y
cada vivencia es un ACONTECER y todo acontecer es LLEGAR a SER lo que
no se era todavía. El tiempo es el carril donde todo acontece, Podemos
concebir muy bien el tiempo sin acontecimientos, pero no podemos concebir un
acontecimiento sin el tiempo.
El espacio y el tiempo son las formas de la sensibilidad. Y por sensibilidad
entiende Kant la facultad de tener percepciones. El espacio es la forma de la
experiencia o percepciones externas, el tiempo es la forma de las vivencias o
percepciones internas. Más toda percepción externa tiene dos caras, es
externa por cuanto está constituida por un elemento representativo, pero es
interna por cuanto que al mismo tiempo que yo percibo la cosa sensible voy al
mismo tiempo, dentro de mí, sabiendo que la percibo. El tiempo tiene una
posición privilegiada, porque es forma de la sensibilidad externa e interna,
mientras que el espacio sólo es forma de la sensibilidad externa. Esta posición
privilegiada del tiempo, que comprende en su seno la totalidad de las vivencias,
tanto en su referencia a objetos exteriores, como en cuanto a acontecimientos
interiores, es la base y fundamento de la compenetración que existe entre la
geometría y la aritmética.
ANALÍTICA TRASCENDENTAL
Intentará averiguar que es aquello que, en el conocimiento, proviene
únicamente del entendimiento. Cuál es la forma en la que el entendimiento
piensa los objetos. En este nivel descubrirá los conceptos o categorías que
integrarán en una unidad superior la multiplicidad de fenómenos descubiertos
en el nivel de la sensibilidad. Además, intentará responder cómo son posibles
los JSP en la física, cómo tener conocimientos a priori de objetos reales.
Decimos que algo es REAL cuando lo consideramos como sujeto de juicio, la
función mental de formular juicios será a su vez la de establecer verdades.
LA FUNCIÓN DEL ENTENDIMIENTO Y LAS CATEGORÍAS
Las categorías son las condiciones de posibilidad de los JSP e la física. Va a
proponerse exponer el fondo mismo de su pensamiento filosófico. El punto de
partida de Kant es que tenemos un conocimiento universal y necesario de la
naturaleza, pero para que este se de se requieren CONDICIONES, las cuales
Stefanía Quevedo

se deducen de los juicios. Los juicios que podamos tener sobre las cosas,
independientemente de su contenido, tienen una serie de PRESUPUESTOS
(categorías).
Las CATEGORÍAS son, entonces, formas a priori del sujeto que conoce, las
formas de enlazar los fenómenos que tiene el entendimiento. En Aristóteles, las
categorías eran las formas del ser; en Kant son actos del entendimiento para
volver la experiencia inteligible, conceptos a priori.
ESQUEMA TRASCENDENTAL
La palabra trascendental deriva de trascendente, que significa lo que existe en
sí y por sí, independientemente de mí. En una vivencia hay la vivencia misma y
luego el objeto al cual la vivencia se refiere, el objeto intencional de la vivencia.
Si yo tengo la percepción de una lámpara, tengo esa percepción como un
conjunto de sensaciones en las cuales estoy viviendo, que están viviendo en
mí. La vivencia es pues inmanente a mí, está dentro de mí, es una modificación
de mí mismo, de mi conciencia, pero esa vivencia señala hacia la lámpara que
existe independientemente de mí en el mundo real. Esa lámpara es
trascendente. En toda vivencia hay una vivencia misma que es inmanente
al yo, y hay un objeto de la vivencia que es trascendente al yo. Para Kant
el objeto del conocimiento no es un objeto cuya realidad sea en sí y por sí, sino
que tiene una realidad distinta de mi vivencia, ciertamente, pero no en sí y por
sí. El objeto tiene una realidad objetiva, cuya objetividad no es lo que es, sino
en relación con el sujeto. El objeto del conocimiento no tiene para Kant una
realidad metafísica en sí y por sí, sino que tiene realidad en cuanto es objeto de
conocimiento y nada más. Para designar Kant esta cualidad o propiedad de lo
objetivo que no es en sí mismo, pero que es el término al cual va enderezado el
conocimiento, usa la palabra trascendental. Para que algo sea objeto del
conocimiento se tienen que dar ciertas condiciones en el sujeto. Son las
condiciones trascendentales de la objetividad, que son los supuestos,
condiciones que partiendo del sujeto han de realizarse para que el objeto
sea en efecto objeto de conocimiento.
Se habla de estética trascendental en el sentido de las condiciones que
posibilitan la constitución del fenómeno, de analítica trascendental en el sentido
de las condiciones que posibilitan la constitución del objeto de conocimiento al
relacionar los fenómenos entre sí, y se habla de dialéctica trascendental en el
sentido de una ilusión trascendental por tratarse de una nueva unidad que no
es lograble por el hombre. Podríamos decir, aunque no es del todo exacto, que
trascendental es lo mismo que unidad. Son las formas a priori, ya sean de la
sensibilidad, del entendimiento o de la razón, las condiciones que posibilitan el
conocimiento. Sin formas, o sea, sin a priori, no puede haber conocimiento.
El yo trascendental sería el principio primero y supremo de síntesis, aquello
que posibilitaría las formas a priori, las que, a su vez, dentro de los límites que
hemos supuesto, posibilitarían todo conocimiento. Es un yo lógico, una
condición que establece a priori las condiciones, las leyes, que posibilitan todo
conocimiento humano. Es la condición a priori de todos los a priori.
Toda deducción trascendental consistirá en que las condiciones para que un
conocimiento sea posible, impriman al mismo tiempo su carácter a los objetos
de ese conocimiento. Ponemos a los objetos reales, los caracteres del espacio
y del tiempo (que no son objetos, sino algo que nosotros proyectamos en los
objetos) y como lo hemos proyectado, les hemos inyectado a priori ese carácter
Stefanía Quevedo

de espaciales, luego encontramos constantemente en la experiencia ese


carácter, puesto que previamente se los hemos inyectado
DIALÉCTICA TRASCENDENTAL
• En la dialéctica trascendental Kant se pregunta si la metafísica es
posible. En la dialéctica trascendental se verifica una discusión de la razón
consigo misma, un choque de tesis y antitesis, en que se discute la posibilidad
de la metafísica. La metafísica pretende que existe en la razón humana la
posibilidad de aprehensión cognoscitiva que recaiga no sobre fenómenos, no
sobre objetos a conocer sometidos al espacio , al tiempo y a las categorías,
sino sobre cosas en sí mismas. Esas cosas en sí, no nos son dadas en la
experiencia sensible. La Dialéctica corresponde a la razón, la razón pone las
ideas a priori de Dios, alma y mundo. Éstas ideas no pueden ser nunca objeto
del conocimiento humano ya que no ingresan por la experiencia, no constituyen
la materia del fenómeno. Porque cuando nosotros inspeccionamos nuestra
propia vida psíquica para ver si descubrimos el alma, no descubrimos más que
una serie de vivencias y a cada una de esas vivencias las acompaña la
representación de estar referida al yo, pero yo mismo, el alma, no la
descubrimos en ninguna parte. No hay una percepción sensible del alma, que
sería una de las condiciones fundamentales del conocimiento. El concepto de
universo, mundo, también es un concepto construído, no está dado por la
experiencia sensible. No hay ninguna percepción de una cosa que se llame
universo. Tampoco de Dios tenemos percepción sensible. La razón llega a
estos objetos porque la razón es un poder sintetizante, de formar unidades
sintéticas entre algo y algo. Ese poder se documenta en el juicio, el juicio es
una función sintética de la razón. Nuestra razón es esencialmente una facultad
de síntesis, de unión, que trata de llegar a unidades que comprendan,
absolutamente, la totalidad de lo sintetizable, de lo unible. Esas uniones totales,
esas síntesis totales, son los objetos tradicionales de la metafísica. Lo que
llamamos alma es la síntesis que la razón verifica de todas nuestras vivencias.
En el concepto de universo la razón ha hecho la síntesis total de todo objeto a
conocer, de todo cuanto existe. Y en Dios ha hecho la síntesis suprema, la
síntesis en cuyo seno está contenida radical o germinalmente la última
suprema razón, no solo de las cosas que existen del mundo, del universo, sino
también de mis vivencias y de mi alma misma. A esaas unidades supremas
que se llaman el alma, el universo y Dios, Kant les da el nombre de ideas.
• Estas ideas son formas puras sin contenidos. Simples ideas reguladoras
de todo conocimiento, pero que no constituyen objetos de conocimiento. Es
“como si” ellas posibilitaran un nueva unidad superior a la lograda por la
Estética y la Analítica Trascendental. La idea de mundo posibilitaría una
supuesta nueva unidad de todos los fenómenos experimentables por el
hombre, la idea de alma nos daría una supuesta unidad de todos los
fenómenos psicológicos y la idea de Dios nos posibilitaría una supuesta unidad
de la totalidad de los fenómenos, ya sean mundanos, ya sean humanos.
• La dialéctica trascendental demuestra que la razón humana, en su labor
teorética, cognoscitiva, no puede hacer metafísica, pero también demuestra
que tampoco puede refutar la metafísica que se haga por otras vías.
ANTINOMÍAS
• El segundo gran problema de la metafísica de Kant es el problema del
universo.
Stefanía Quevedo

• El método de discusión en esta segunda parte es lo que Kant llama


antinomias de la razón pura. Si nosotros adoptamos el punto de vista de lo
metafísicos y consideramos el universo como una cosa en si e intentamos
predicar de universo propiedades metafísicas, nos encontramos con este
sorprendente resultado: que del universo podemos predicar afirmaciones
contradictorias y, sin embargo, de ser contradictorias, las dos afirmaciones son
igualmente demostrables. Cada una de estas contraposiciones de tesis y
antitesis, igualmente probatorias acerca del universo, las llama Kant
antinomias. Y descubre que en la metafísica existen cuatro antinomias.
• Primera Antinomia
• Tesis: el universo tiene un principio en el tiempo y limites en el espacio.
• Antitesis: el universo es infinito en el tiempo y en el espacio.
• La tesis y la antitesis enuncian proposiciones contradictorias. Sin
embargo las dos proposiciones se pueden demostrar con igual fuerza
probatoria.
• Tesis: el universo tiene que tener un principio en el tiempo, porque si el
universo no tuviese un principio en el tiempo, no tendría eso que llamaos
acontecer. El acontecer es, que todo lo que existe empieza a existir en un
momento y sesa de existir en otro momento. Si el universo es algo que existe
tiene que haber empezado a existir en otro momento del tiempo. Por otra parte,
tampoco puede ser infinito en el espacio, sino que tiene que tener un limite.
Cuando existe, existe porque representa una realidad que no es simplemente
el espacio mismo, sino algo en el espacio. Pero si algo hay en el espacio, tiene
que dejar de ser en el espacio cuando a cumplido su realidad y tener por
consiguiente un limite.
• Antitesis: es igualmente demostrable, porque si suponemos que el
universo tuvo un principio en el tiempo, ¿qué había antes del universo, antes
de que este existiera? No tiene sentido suponer que antes del universo no
existía nada, porque de nada no proviene nada.
• Para que el universo exista, tenia que existir algo antes del universo y
ese algo existía en el tiempo. Mas si existió algo antes del universo en el
tiempo, es que no habíamos tomado la palabra universo en su pleno sentido,
porque teníamos que incluir también ese algo.
• Segunda Antinomia
• Se refiere también esta vez a la estructura del universo en el espacio.
• Tesis: todo cuanto existe en el universo esta compuesto de elementos
simples, e indivisibles.
• Antitesis: lo que existe en el universo no esta compuesto de elemento
simples, sino de elementos infinitamente divisibles.
• Tesis: Si suponemos que algo existe, ese algo se disuelve en la nada o
tiene que componerse de elementos atómicos, indivisibles que ya no pueden
sufrir mayor división; que son simples.
• Antitesis: es también verdadera, porque si suponemos algo que existe
en el espacio, ese algo es real, ocupa un lugar en el espacio; y si ocupa un
lugar del espacio, posee extensión; y si posee extensión es divisible. Porque el
punto indivisible no posee extensión; el punto no es una realidad, sino que es
una hipótesis matemática.
• Tercera Antinomia
• Tesis: El universo tiene que haber tenido una causa, que no sea ella a
su vez causada.
Stefanía Quevedo

• Antitesis: El universo no puede tener una causa, y que a su vez esta


causa sea causada.
• Tesis: en virtud de la categoría de causalidad, no podemos suponer
nada real que no sea efecto de una causa.
• Antitesis: pero, si no nos detenemos en la investigación de las causas,
todo nuestro conocimiento de las cosas reales esta colgado de una incógnita,
de una contingencia absoluta. (Argumentación de Aristóteles acerca del ser
necesario)
• Cuarta Antinomia
• Es una variedad de la tercera.
• Tesis: ni en el universo ni fuera de él no puede haber un ser necesario.
• Antitesis: en el universo o fuera de él tiene que haber un ser necesario.
• Podemos, acerca del universo emitir tesis contradictorias e igualmente
plausibles a los ojos de la pura razón. Tiene que haber aquí un error: y el error
consiste, según Kant, en lo siguiente: En las dos primeras antinomias, que Kant
llama matemáticas, el error, consiste en que se ha tomado el espacio y el
tiempo como cosas en si mismas, en vez de tomarlos como formas de nuestra
facultad de conocer aplica o imprime a los fenómenos. Tomando el espacio y el
tiempo como cosas en si mismas, encontraremos que el espacio tiene que
tener un principio, un limite, y no tiene que tenerlo al mismo tiempo.
• La solución de las dos primeras antinomias consiste en decir que son
falsas las tesis y las antitesis, porque se parte de un supuesto contrario a las
antitesis, porque se parte de un supuesto contrario a las leyes y condiciones
del conocimiento.
• Pero en las dos ultimas antinomias, la solución para Kant es la contraria.
Las tesis y las antitesis, pueden ambas ser verdaderas. Porque las tesis se
toman en el sentido ajustado a las leyes del conocimiento. Pero las dos
antitesis se salen de las condiciones de todo conocimiento posible y se refieren
a cosas “en sí” mismas. Ahora bien, supongamos que exista en el campo de la
conciencia humana una actividad que no sea la actividad de conocer, pero que
pueda conducirnos a la aprehensión o captación de las cosas metafísicas.
Entonces, las tesis y las antitesis serán perfectamente compatibles, porque las
tesis son validas en el mundo de los fenómenos, mientras que las antitesis son
validas en el mundo de los noumenos. Si en efecto se encuentra una vía
distinta de la del conocimiento, que nos conduzca a las cosas metafísicas,
entonces las tesis son validas para la ciencia fisicomatemática, y las antitesis
son validas para esa actividad, no cognoscitiva, que nos haya podido conducir
a las realidades metafísicas.
METAFÍSICA COMO CIENCIA
Las argumentaciones de la metafísica, se salen de los limites de la experiencia;
toman por objeto a conocer lo que no es objeto a conocer. La metafísica por
consiguiente comete la falla esencial de querer conocer lo incognoscible. Es,
pues es una disciplina imposible. Pero esta es imposible como conocimiento
científico, es decir como ciencia; ¿No habrá otra vía, otro camino, que no sea el
del conocimiento científico, teórico y que nos conduzca a las cosas “en sí” de la
metafísica? Supongamos que haya una vía no científica, sino apoyada en otra
actividad de la conciencia humana, que no sea actividad de conocer; entonces
la Dialéctica Trascendental adquiere una importancia colosal. Porque si bien es
cierto que la dialéctica trascendental demuestra que la razón humana, en su
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labor cognoscitiva, teorética, no puede hacer metafísica, también demuestra


que no puede refutar la metafísica que por otras vías se haga.
• Kant prepara el terreno para una nueva metafísica que antes no había
existido. Los anteriores como Decar, Santo Tomas, etc. eran metafísicos en la
medida en que creían que la metafísica era una ciencia. Kant barre
absolutamente con todo eso. Habiendo eliminado del idealismo iniciado por
Decar, el residuo de realismo de la cosa “en si”, hace ver que la cosa en si es
absolutamente inaccesible a ningún conocimiento teórico. Por eso la metafísica
no podrá ser nunca objeto de un conocimiento racional. Pero hay una
metafísica (la que inaugura Kant) no solo posible, sino real, basada no en la
conciencia cognoscente, no en el conocimiento racional, sino en otras
actividades de la conciencia humana que no tienen nada que ver con el
conocimiento. A la cual Kant va conceder a la razón racionante que no puede
demostrar la existencia de dios, ni la libertad, ni la inmortalidad del alma y
también la obliga a callarse si por otros lados el hombre encuentra la solución a
estos puntos claves.
JSP EN LA METAFISICA: NO SON POSIBLES
Porque la metafísica es una ciencia muy discutida, es una ciencia que cada
filosofo que viene al mundo, la vuelve a rehacer. Es una ciencia donde ninguna
verdad esta establecida. Es una ciencia de la que se duda que pueda existir. Si
resulta que son posibles, entonces se estudiara como lo son y si no son
posibles, entonces no hay metafísica o esta tiene que tener forzosamente un
fundamento que no sea el que hasta ahora ha venido teniendo.
• La metafísica pretende que existe en la razón humana la posibilidad de
un acto de aprehensión cognoscitiva que recaiga sobre los fenómenos, no
sobre los objetos a conocer, sometidos al espacio, al tiempo y a las categorías,
sino sobre cosas en sí mismas. Esta es una falta esencial contra la definición y
descripción misma del conocimiento. Por consiguiente se trata para Kant de
descubrir donde esta y en que consiste esa ilusión que la metafísica se hace,
de llegar a cosas en sí mismas por medio de ideas racionales.
• Primero, esos objetos, esas cosas en si, a la conquista de las cuales se
encaminan la metafísica, no nos son dadas en la experiencia sensible; no hay
ninguna cosa en el espacio y en el tiempo que sea eso que llamamos el alma.
• No hay pues, una percepción sensible del alma, que seria una de las
condiciones fundamentales del conocimiento. Segundo, cuando la metafísica
habla del mundo, del universo, es también ese concepto de universo un
concepto construido, pero que no esta dado en la experiencia sensible, hay
percepción sensible por ejemplo de esta lámpara, de aquel árbol, pero no de
esa totalidad llamada universo. Tercero, tampoco de Dios tenemos percepción
sensible.
• La razón llega a formar estos objetos (alma universo y dios) porque la
razón es un poder sintetizante; es el poder de sintetizar impresiones, de formar
síntesis. Ese poder sintético de la razón se documenta en el juicio. El acto de
juzgar es el acto por el cual un sujeto A y una determinación B, se unen en la
formula del juicio que dice: A es B. El juicio es una función sintética de la razón.
Nuestra razón es esencialmente una facultad de síntesis, de unión.
• Esa facultad de uniones, de síntesis, es perfectamente legitima cuando
recae sobre el material dado por la experiencia. Pero aquí la razón hace
funcionar su capacidad de síntesis, la hace no solo sobre los datos sensibles
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que la experiencia les trae, sino continuamente y cada vez más; y la hace
funcionar cada vez mas por fuera de los limites de la experiencia.
• Cuando hace esta síntesis sobre síntesis, quiere hacer mas, hasta que
llegue a las unidades que comprendan, absolutamente, la totalidad de lo
sintetizable, de lo unible.
• Esas uniones totales, síntesis totales, son los objetos tradicionales de la
metafísica. Lo que llamamos alma, es la síntesis de la razón que verifica de
todas nuestras vivencias. En el concepto de universo, la razón ha hecha la
síntesis total de todo cuanto pueda contraponerse al yo pensante, todo objeto a
conocer, todo cuanto existe. Y en Dios ha hecho ya la suprema de las síntesis,
no solo de las cosas que existen en el mundo, del universo, sino también de
mis vivencias y de mi alma misma.
• A esas unidades totalitarias que se llaman alma, universo y dios, Kant
las llama Ideas.
• Estas síntesis totalitarias se fundamentan en algo, entre las condiciones
del conocimiento posible y por tanto de la posible objetividad esta la condición
de que todo cuanto nos aparece como objeto a conocer, todo fenómeno, en
suma, es por una parte condicionado por otro anterior y por otra parte,
condicionante del que le sigue.
• El afán de conocer, el acto de conocer, va sucesivamente pasando de
un efecto a su causa; y esta aparece condicionada por otra causa y así
sucesivamente, y por consiguiente la labor racional de ir de condición en
condicionante y de condicionante en otra no se extingue más.
• Ese afán de la razón, revela que ella aspira al fondo de sí misma para
llegar a lo incondicionado.
• En vez de ir de condición en condición, es un proceso infinito, en una
serie infinita, salta sobre la serie, toma la totalidad de la serie, la sintetiza en
una idea y estatuye el alma, el universo y dios.
• Este salto ilegitimo de lo condicionado a la totalidad incondicionada es
justamente el que la metafísica comete en cada uno de sus tramites, para
llegar a los términos a los que ella quiere llegar.
CONCIENCIA MORAL
• Nuestra persona humana no consta solamente de la actividad de
conocer. Es mas: la actividad de conocer, el esfuerzo por colocarnos enfrente
de las cosas para conocerlas, es solamente un de las tantas actividades que el
hombre ejecuta.
• Entre otras hay una forma de actividad espiritual que podemos
condensar en el nombre de “conciencia moral”.
• Esta, contiene dentro de sí un cierto numero de principios, en virtud de
los cuales el hombre rige su vida. Acomodan su conducta a esos principios y
por otra parte tienen en ellos una base para formular juicios morales acerca de
sí mismos y de cuanto les rodea. Esa conciencia moral es un hecho, un hecho
de la vida humana, como el hecho del conocimiento.
• Esa conciencia moral que contiene principios evidentes, tan claros como
lo son los principios del conocimiento, los principios lógicos de la razón. Hay
juicios morales que son también juicios, como pueden serlo los juicios lógicos
de la razón raciocinante.
• Ese conjunto de principios que constituyen la conciencia moral,
encuentra Kant la base que puede conducir al
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• Hombre a la aprehensión de los objetos metafísicos. A ese conjunto de


principios de conciencia moral, Kant le da un nombre. “Razón Practica”. Lo
hace para demostrar que en la conciencia moral actúa algo que sin ser la razón
especulativa, se asemeja a la razón. Son también principios racionales,
principios evidentes de la aprehensión interna de su evidencia. Por lo tanto los
puede llamar legítimamente razón.
• Es la razón aplicada a la acción, a la practica, aplicada a la moral.
LO COMPLETAMENTE BUENO
• Un análisis de estos principios de la conciencia moral, conduce a Kant a
los calificativos morales (bueno, malo, inmoral, meritorio, etc.). Estos
calificativos morales, que nosotros solemos muchas veces extender a las
cosas, no convienen sin embargo a las cosas. Nosotros que esta cosa o
aquella es buena, pero en rigor de verdad, las cosas no son buena o malas,
porque en ellas no hay merito ni demérito. Por consiguiente los calificativos
morales no pueden predicarse de las cosas, que son indiferentes al bien y al
mal: solo pueden predicarse del hombre, de la persona humana. Lo único que
es verdaderamente digno de ser llamado bueno o malo es el hombre, a
personas humanas.
• Y ¿por qué es el hombre el único ser, del cual se puede predicarse la
bondad o la maldad moral?
• Porque el hombre verifica los actos y en la verificación, el hombre hace
algo, estatuye una acción; en esa acción podemos distinguir dos elementos: lo
que hace efectivamente y lo que quiere hacer.
• Los predicados bueno, malo, etc., predicados morales, no corresponden
tampoco a los que efectivamente el hombre hace, sino estrictamente a lo que
quiere hacer. Porque muchas veces se hace lo que no se quiere hacer y no se
hace lo que se quiere hacer.
• No pues el contenido de los actos, no pues al contenido efectivo; no
pues a la materia del acto convienen los calificativos morales de bueno o malo,
sino a la voluntad misma del hombre.
• Lo único que verdaderamente puede ser bueno o malo es la voluntad
humana.

¿Qué es un imperativo? ¿Qué es, en que consiste una voluntad buena?
• Todo acto voluntario se presenta a la razón, a la reflexión, en la forma de
un imperativo. Todo acto, en el momento de iniciarse, de comenzar a
realizarse, aparece a al conciencia bajo la forma de mandamiento: hay que
hacer esto, esto tiene que ser hecho, esto debe ser echo. Esa forma de
imperativos, se especifica según Kant, en dos clases; los que él llama
imperativos hipotéticos y los imperativos categóricos.
• La forma lógica, la forma racional, la estructura interna del imperativo
hipotético, es la que consiste en sujetar el imperativo mismo, a una condición.
Por Ej. : “si quieres sanar de tu enfermedad, toma la medicina”. El imperativo
es “toma la medicina”, pero ese imperativo esta limitado, no es absoluto, no es
incondicional, sino que esta puesto bajo la condición “de que quieras sanar”. Si
tu me contestas: “no quiero sanar”, entonces no es valido el imperativo. El
imperativo: “toma la medicina” es pues solamente valido bajo la condición de
que “quieras sanar”.
• Otros imperativos se llaman categóricos; aquellos que justamente
en que la inoperatividad, el mandamiento, el mandato, no esta puesto bajo
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condición ninguna. El imperativo entonces impera, como dice Kant,


incondicionalmente, absolutamente; no relativa y condicionalmente, sino
de un modo total, absoluto y sin limitaciones. Por Ej. Los imperativos de
la moral se suelen formular de esa manera, sin condiciones: “honra a tus
padres”; “no mates a otro hombre”; y en fin, todos los mandamientos
morales bien conocidos.
• FORMALISMO MORAL
• Toda acción implica una materia y una forma. La materia es lo que se
hace o se omite, la forma esta dada por el porque se hace o porque se omite.
Por ende la formulación, será una acción que denote una voluntad pura y moral
cuando es hecha respondiendo al deber ser. Osea al imperativo categórico.
Uno hace la acción para cumplir el deber no para obtener nada a cambio. Se
pregunta por el como actuar, de buena voluntad. La inteción con la que yo
comiense a realizar mi acción va a ser la que determine la moralidad de la
misma.
AUTONOMÍA MORAL
• La voluntad es autónoma cuando ella se da si misma su propia ley, y es
heterodónoma cuando la recibe de alguien externo, ejemplo los diez
mandamientos. Solo es autónoma aquella formulación de la ley moral que pone
en la voluntad misma el origen de la propia ley, esto obliga a que la propia ley
que se origine en la voluntad y no sea una ley puramente formal. Lo que
quieras que hagas, hazlo conforme a la ley moral, es decir conforme al
imperativo categórico, (obrar según el deber ser, y de manera tal que lo que
uno hace puede ser transformado en ley universal).
• La voluntad moral es puramente autónoma lo que implica que debe
también ser libre. Y es libre en tanto en cuanto, supone que no hay una causa
producto de un efecto anterior, comienza la acción desde cero, además
significa poder vencer lo móviles sensibles y hacer lo que se debe. Como no se
tiene conciencia d la libertad, es justamente la ley moral la que me hace tener
conciencia, de ella. La ley moral es la toma de conciencia de la libertad,
mientras que la libertad es la razón de existir de la ley moral.
• El principio autónomo de la moral, se expresa en el imperativo
categórico, entendido como un juicio sintético a priori en e que se sintetizan, la
voluntad afectada por la sensibilidad y la idea de una voluntad pura. Síntesis
del ser fenoménico con el deber ser (voluntad universal) lo que hace posible
esta síntesis es la libertad.
• (en el apunte - fotocopia- hace toda una referencia a la libertad en
relación a la conciencia moral, que mas alla de que nose si podría explicarla,
me pareció mas pertinente esto que el tipo dijo en clase).
IMPERATIVOS CATEGORICOS
los imperativos categóricos son posibles porque todo acto al momento de
iniciarse esta regido por un mandato, "debo hacer esto". Esta forma de
imperativo es inherente a todos acto posible, se dividen en dos, imperativos
hipotéticos e imperativos categóricos. Mientras que los primeros actúan bajo
una condición (debo estudiar para aprobar) los segundos operan total, absoluta
e ilimitadamente (debo estudiar por estudiar, no para obtener un beneficio)este
actuar por la acción misma, por el deber ser, actuar de buena voluntad hace
que los actos sean morales.
• Los imperativos categóricos pueden ser rápidamente convertido en
hipotéticos. Ej: debo estudiar (cate). Debo estudiar sino me quedo libre, en este
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último caso mi acción esta condicionada por el miedo a perder la materia, por
ende mi acción no es moral.
• El hombre debe actuar por respeto a la ley moral, donde la ley moral no
tiene un contenido, en el sentido legal sino como imperativo categórico. Actuar
de manera tal que la máxima de tu acción pueda ser transformada en ley
universal.
• El imperativo es también la forma de relacionarse de la subjetividad
imperfecta de mi voluntad con la objetividad de la ley moral.
¿LOS IMPERATIVOS SON JSP?
• Sabiendo el concepto de lo que es un imperativo, que es un imperativo
categórico y que es un juicio sintético a priori se podrá exponer esta asociación.
• Un imperativo categórico para que se lo considere un juicio a priori, este
debe ser independiente de la experiencia, es decir que no tiene que tener su
origen en la experiencia, por ejemplo si alguien le pregunta a otro si honrar a
los padres es lo correcto, no es necesario que se pruebe tal situación par
comprobar que es lo que todo hombre virtuoso debe hacer es decir, hacerlo
sin tener intereses particulares, uno los honra porque así debe ser.
• Y además son verdaderos necesarios y universales (lo que debe ser)
son sintéticos, porque en la noción de todo fenómeno tiene que tener una
causa (ser virtuoso) y que es preciso detenerse en esa serie de causas hasta
llegar a Dios. No tiene que haber un análisis del sujeto, pues este nos llevaría a
afirmar, únicamente, la serie infinita de causas. Es por esto, que también en la
metafísica hay juicios sintéticos a priori.
• En suma, los imperativos categóricos deben ser obtenidos por intuición,
obtenidos fuera del razonamiento discursivo,, obtenido fuera del análisis
conceptual y al mismo tiempo independiente de la experiencia (puro)
POSTULADOS ÉTICOS
Los postulados que Kant determinan son tres:
• La libertad:
El postulado primero lo extrae de la ética.
Si nuestra voluntad en decisiones internas estuviese irremediablemente sujeta,
como cualquier oto fenómeno de la física, a la ley de la causalidad, sujeta a un
determinismo natural, entonces, ¿Qué sentido tendría el que nosotros
vituperásemos (reprobar, censurar) al criminal o veneramos al santo? Hay una
valoración de nuestra parte, que hacemos que unos hombres en el sentido
positivo y otros en el sentido negativo. ¿Qué sentido tendría esta voluntad si no
fuese libre? Es pues absolutamente evidente, que la voluntad tiene que ser
libre, so pena de que se saque la conclusión de que no hay moralidad. Pues
bien, si la moralidad es un hecho tendremos que extraer las condiciones de la
posibilidad de la conciencia moral. Y una primera condición de la conciencia
moral es que postulemos como verdadera la libertad de la voluntad. Es de
suma importancia recordar que la conciencia moral más que un conocimiento
es un acto de valoración, es decir, es el que pone en contacto directo con un
mundo puramente inteligible, en un mundo de realidades suprasensible,
inteligibles, a las cuales solo podemos llegar con directas intuiciones de
carácter moral que nos pone en contacto con esa otra dimensión de la
conciencia humana, que valorativa y moral.

• La inmortalidad (del alma):


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Si la libertad humana es libre, sé la voluntad humana nos permite penetrar en


ese mundo inteligible, nos a enseñado que ese mundo inteligible no esta sujeto
a las formas de espacio, de tiempo y categorías si nuestro yo, como persona
moral, no esta sujeto al espacio, tiempo y categorías, no tiene sentido para él
hablar de una vida más o menos corta. El tiempo no existe aquí. En suma, el
alma humana, la conciencia humana moral y la voluntad libre son ajenas al
espacio y al tiempo
• La existencia de Dios
-Por último, la existencia de Dios viene igualmente traída por las necesidades
evidentes de la estructura inteligible moral del hombre.
Este postulado es el aseguramiento de que en ese mundo (suprasensible) no
hay abismo entre el ideal y la realidad, el aseguramiento de que en ese mundo
no hay separación o diferenciación entre lo que yo quisiera ser y lo que soy,
entre lo que mi conciencia moral quiere que yo sea y lo que la flaqueza humana
en el campo de lo fenoménico hace que sea.
-La realidad fenoménica está regida por la naturaleza, por el engarce (unión)
natural de causas y efectos, que son ciegos para los valores morales. Es por
esto, que no tiene coincidencia lo real con lo ideal. Por lo tanto es
absolutamente necesario que tras este mundo, en un lugar metafísico al otro
lado este mundo, este realizada esa plena conformidad entre lo que “es” en el
sentido de realidad y lo que “debe ser” en el sentido de la conciencia moral.
Ese acuerdo, que no se da en nuestras vidas fenoménicas (por que en ellas
predominan la causalidad física y natural) requiere una unidad sintética
superior entre ese “ser” y el otro “debe ser”. Y a esa unión o unidad sintética de
lo más real que puede haber con lo más ideal que puede haber, la llama Kant
Dios
-Dios ese aquel ente metafísico en donde la más plena realidad esta unida a la
más plena idealidad.
-Por ejemplo cuando nosotros buscamos un ideal de bondad, encontramos en
el mundo solo algo parcial de este ideal. Por lo tanto es necesario que allá otro
mundo, un ente en el cual, en efecto, esa aspiración nuestra, de que lo real y lo
ideal, estén perfectamente unidos, ese es justamente Dios.
VIRTUD Y FELICIDAD
• La relación entre virtud y felicidad nos dé causa y efecto, es decir, que
en el concepto de virtud esta implícito el de felicidad, ni viceversa.
• Los griegos, tenían dos ramas en las que el hombre “debía trabajar”
• Hay que buscar la virtud y consecuentemente la felicidad.
• Hay que buscar la felicidad y consecuentemente la virtud.
• Kant considera ha estos dos postulados como falsos, pues él considera
que los accionar humano debe “estar sujeto” a juicios sintéticos a
priori(necesarios, universales y verdaderos)
• La relación que se da entre la virtud y la felicidad sé en dos niveles,
estos son:
1. Fenoménico: El hombre que busca la felicidad para luego obtener la
virtud, no alcanza a la última por ser una persona egoísta. ¿Por que? Pues
porque busca su satisfacción personal y no por el bien de todos.
Pero un hombre virtuoso, es decir que busca la virtud por la virtud misma,
puede no ser un hombre feliz ¿es justo que un hombre que toda su vida a
buscado la virtud por si misma no obtenga la felicidad?
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2. Inteligible: Hay que postular (no conocer, pues es inteligible) que el hombre
que busca la virtud por el simple deseo de ser virtuoso, le corresponda la
felicidad, pues no seria racional que una persona que fue virtuosa (probo) en la
vida no sea feliz. Es decir que obtenga la felicidad como premio por su camino
y por su lucha en toda su vida.
Pero, entonces, ¿Qué debo hacer?¿Y que voy a obtener?
El hombre esta siempre sometido a los móviles sensibles y el hombre debe
adecuarlos a leyes universales. Como un hombre debe ser en toda su vida “un
ser ” virtuosa por si mismo, no queda otra que la felicidad la obtenga en otro
tiempo, es decir después de muerto. Pero... ¿qué me asegura que un hombre
virtuoso obtiene la felicidad después de muerto?
Debe existir un Dios (por ponerle un nombre) que haga esto. Pero para que
este Dios cumpla esta función debe ser: omnisciente (pues tiene que saber que
hombre a sido virtuoso y quien no), todopoderoso (pues debe tener el poder
para otorgar la felicidad) e inmutable (pues es quien debe dar la felicidad
alguien que es inalterable)

NIETZSCHE
LOS TRES NIVELES DEL PENSAMIENTO NIETZSCHEANO
Nietzsche representa la crítica más extrema de la religión, la filosofía, la ciencia y la
moral. Sospecha que nuestro camino histórico (el del hombre europeo) ha sido uno
errado, a partir del cual nos hemos extraviado, volviéndose necesario dar un cambio
de rumbo renunciando a todo lo que se ha considerado como “santo”, “bueno” y
“verdadero”.
Toda la obra de Nietzsche elude una y otra vez la tarea de realizar una elaboración
sistemática, conceptual, un desarrollo largo y coherente de ideas sistemáticas
orientadas a una finalidad conceptual. Sin embargo, no termina de escapar a un
pensamiento acabado.
Nietzsche se pregunta por el ser, el mundo, la existencia en tres niveles sucesivos, cada
uno de los cuales responden a un aspecto esencial del pensamiento nietzscheano: el
aspecto crítico, el destructivo y el reconstructor.
¿Qué es la vida tal como ha sido comprendida por el hombre? El hombre la ha
comprendido en función de un sentido objetivo y trascendente, desarrollado por
Platón y el cristianismo y sobre el que se funda toda la cultura europea, el cual es una
gran mentira que hay que desenmascarar. Bajo esta premisa, Nietzsche anuncia la
muerte de Dios (aspecto crítico).
De la primera pregunta surge la segunda ¿qué es, pues, la vida tal como en verdad es?
Es sinsentido. De aquí la inevitabilidad del nihilismo (al cual Nietzsche pretende
superar). La muerte de Dios significa, también, la muerte del sentido, de todo sentido
(aspecto destructivo).
Surge, entonces, la tercera pregunta: ¿Cómo ha de ser comprendida la vida por el que
sabe cómo es en verdad? Aquí reside la filosofía de Nietzsche, su búsqueda por
encontrar un rincón de sentido en el universal sinsentido, aquí tenemos al eterno
retorno de lo mismo, la voluntad de poder, el ultrahombre, la transvaloración de todos
los valores.
Stefanía Quevedo

LA MUERTE DE DIOS
El hombre tiene la necesidad dar sentido a su vida y para ello crea el valor. Esta actitud
evaluadora del mundo, de lo que existe, ha funcionado a la luz del sentido objetivo y
trascendente. Ello se encuentra en la filosofía de Platón, según la cual, para
comprender el mundo sensible hay que comprender el mundo inteligible o metafísico.
El mundo de las ideas es un supuesto (necesario) para el mundo sensible. Es en el
mundo inteligible donde existe la verdad, la bondad, la belleza, la posibilidad de ser;
desde esta concepción se basa toda la cultura occidental para considerar las “normas”
a partir de las cuales medimos y fundamentamos lo verdadero y bueno del mundo.
Platón concibe a este absoluto metafísico que solo se necesita a sí para ser como la
idea de “bien”. A su vez, será desde esta concepción que los teólogos cristianos
introducirán la idea de Dios.
Contrariamente a esta partida metafísica, Nietzsche postula en La gaya ciencia que
Dios ha muerto. Es un “insensato” el que lleva la noticia de la muerte de Dios, un
hombre que ve lo que otros no ven, al cual se lo cataloga (por ello) como loco ya que, a
quienes habla, no comprenden ni tienen consciencia de la gravedad del
acontecimiento del cual todos han sido autores, el hombre aun no han dado cuenta de
la libertad y del ocaso que implica su accionar. La antigua y tranquila confianza (en
Dios) se ha trocado en duda. Lo que ha muerto (o está en trance de morir) no es Dios,
sino la fe del hombre en él. Hasta ahora, Dios vivió en la conciencia de los hombres,
ahora los hombres empiezan a desterrarlo de ella. Dios ya no es una fuerza viva,
presente y operante en la historia del hombre. Lo que también significa el
desmoronamiento del mundo metafísico.
Este desmoronamiento es lo que permite dar cuenta de la tremenda radicalidad
filosófica de Nietzsche, ya que sin metafísica y sin Dios, se desmorona la verdad, el
valor, la moralidad, la libertad, el sentido, la razón; ya no hay una fundamentación que
tenga ligada a sí un sistema de valores e ideales. El carácter total del mundo resulta en
caos, en un sinsentido, en ausencia de orden, de estructura, de belleza o de finalidad.
La muerte de Dios se convierte en un acto liberador y humanizador, que muestra el
fondo de lo que el hombre es. Nietzsche fomenta la aparición de ese nuevo hombre
que no considera las categorías morales metafísicas, sino que impone a voluntad de
creación su sentido sobre las cosas y es alentado por un anhelo desmedido de no ser
superado por otro.
Los motivos de la muerte de Dios son tres:
- un motivo ético en tanto el hombre se opone a la moral y a las leyes morales
provenientes de Dios. si se quiere destruir las leyes morales se vuelve necesario
destruir al mismo Dios;
- un motivo humanista en tanto el hombre se posiciona como un incesante creador de
valores, imponiendo su voluntad sobre las cosas, haciendo necesaria la exclusión de
Dios ya que con su existencia, el hombre no puede propiamente crear nada ya que
todo ha sido creado por Él;
- un motivo teológico en tanto el hombre es alentado por un deseo desmedido de ser
que no quiere dejarse superar por nadie, ni siquiera por Dios.
Estos tres motivos se orientan al mismo sitio: el ultrahombre.
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La primera consecuencia de la muerte de Dios es, trascendiendo de las sombras de la


noche que se aproxima, avizorar la libertad infinita del espíritu. Esas sombras que se
trascienden hacen referencia a la consecuencia inmediata de la descreencia metafísica,
la demolición, destrucción, ruinas y eclipse del sol que ello implica, ya que sin Dios, la
realidad entera se hunde en la nada, el hombre siente que se ciernen en torno suyo la
noche y el frio. Este hundimiento es un acto de gravedad excepcional ya que pone fin
al sentido de la historia como la conocemos. La muerte de Dios no es un suceso
confortable, sino, más bien, una verdad amarga. Sin embargo, tal vez sólo ella pueda
elevar al hombre, en tanto deje de correr hacia el seno de un Dios.
EL NIHILISMO
Nihilismo y la muerte de Dios son en el fondo el mismo acontecimiento. Si el mundo
suprasensible se ha desmoronado, entonces no queda nada en donde el hombre
pueda apoyarse ni nada hacia donde pueda orientarse. El nihilista sostiene una
extrema increencia, una opinión de que tener algo por verdadero (fe) es
necesariamente falso, ya que lo verdadero no existe; para el nihilista el existir no tiene
sentido.
Que Dios haya muerto, que la verdad suprema se haya vuelto dolor, que el mundo
verdadero haya devenido en fábula (platonismo, cristianismo, kantismo, positivismo y
nihilismo) son tres modos de definir al nihilismo y, a su vez, de expresar el sentido
oculto de la historia metafísica. Nietzsche también observa lo que el hundimiento del
mundo suprasensible deja en pie: el desaparecer de la distinción entre mundo
verdadero y mundo aparente, por lo tanto, el desaparecer del mundo aparente en
cuanto aparente, luego lo que queda es este mundo, tal cual es. El mundo “verdadero”
de la metafísica es, en realidad, un mundo aparente, y el mundo que la metafísica
tenia por “aparente” es, en realidad, el verdadero. No hay más que un mundo, un
universo, una naturaleza en tanto situadas en el espacio y el tiempo del devenir y de la
vida.
Sin embargo, surge ahora el problema de si lo sensible como sensible se basta a sí
mismo, de si es posible una comprensión del ente que no consista en la posición del
ser.

EL ETERNO RETORNO DE LO MISMO


El origen del eterno retorno se encuentra en el deseo de permanencia, de eternidad de
todo hombre profundo. Ahora bien, si no hay otro mundo que este, ni otra vida que
esta y este mundo y esta vida pasan… ¿Cómo conceder peso de eternidad a lo que es
pasajero? Nietzsche acude en busca de respuesta a un mito: el eterno retorno de lo
mismo.
El pensamiento del eterno retorno es ambivalente, claro está, y busca reconocer al
devenir mismo, a la vida en su inmanencia, al valor de la eternidad. La idea del eterno
retorno busca mostrar que todo lo que puede suceder ya ha sucedido. La infinitud del
pasado exige que haya acaecido todo lo que puede acaecer y, si el futuro es infinitito,
todo lo que puede suceder, tiene que suceder y ya ha sucedido. Todo lo que ocurre en
el tiempo tiene que haber ocurrido y volver a ocurrir una vez más en tanto el tiempo
sea pasado y futuro infinitos (“el sendero de la eternidad es curvo”). En consecuencia,
Stefanía Quevedo

este instante y todo lo que hay en él ya ha existido y tiene que volver a existir. Si todo
retorna, todo es en vano, no hay voluntad ni atrevimiento que valga. Lo que nace y
muere, lo que se rompe y se recompone, el entero devenir, todo lo que transcurre en
el tiempo (intratemporal) es finito, pero el tiempo en el que transcurre es infinito, por
lo tanto, cuando el curso de las cosas ha terminado, tiene que volver a empezar, tiene
que repetirse de nuevo una y otra vez. El tiempo se convierte de recto en curvo,
circular, gira sobre sí mismo, en el que el fin coincide con un nuevo comienzo; también
desaparecen las diferencias dentro del tiempo, el pasado y el futuro, el aquí y el allá
son una misma cosa ya que la repetición es siempre de lo mismo, imposibilitando la
idea de un primer hecho a la base de todas las repeticiones. Sin embargo, la cosa
concreta, individual, en su aquí y ahora, aparece como irrepetible, es decir, en el plano
de la individualidad, la existencia es siempre irrepetible, tiene carácter de único, en
tanto es un paso irretornable en el rio del tiempo y esto es lo que le confiere valor a
nuestra vida y mueve al hombre que conoce su fugacidad a vivir su interioridad; de
esta manera el eterno retorno se concibe como una doctrina ética a partir de la cual se
considera que lo que se quiere, se lo debe querer de tal manera que se quiera su
eterno retorno, por lo tanto, cada instante resulta decisivo para la eternidad.
Nietzsche parece querer pensar lo impensable ya que el tiempo se convierte a la vez
en lo fijo (ya decidido) y en lo abierto (todavía por decidir), otorgando al pasado el
carácter abierto del futuro y al futuro la estabilidad del pasado.
El eterno retorno es la única manera de afirmar que el ser es necesidad y que esta
necesidad no reside en otra parte que en el devenir. Esta idea es el resultado de la
necesidad de absolutizar este mundo a través del devenir ya que, donde no hay lugar
para un Dios trascendente, creador del mundo, sólo queda la totalidad de este.
El pensamiento del eterno retorno le otorga al devenir una apariencia de necesidad
pero no por ello le da finalidad y sentido, justamente es esto de lo que carece en
mayor medida en tanto es el eterno retorno de lo mismo. La repetición, lejos de
suprimir la ausencia de sentido, la confirma: la nada eterna, la forma extrema del
nihilismo.
EL ULTRAHOMBRE
El ultrahombre es un nuevo tipo de hombre que se hace cargo efectivamente
del nihilismo y de su superación, se encarga de sobreponerse a la vez a Dios y
a su muerte.
El hombre, ese ser que se trasciende a sí mismo, se ha trascendido hasta hoy
en dirección hacia Dios, el ultrahombre trasciende en dirección a sí mismo y a
este mundo terreno. El ultrahombre es un anunciado por Nietzsche como una
promesa de futuro ya que aun no ha existido sobre la tierra y él será fiel a la
tierra, será capaz de decir si a la vida, será un hombre libre, capaz de darse a
sí mismo el bien y el mal y de imponer sobre sí mismo como ley su propia
voluntad. De lo que se trata en el pensamiento del ultrahombre no es solo de
superar a Dios, sino también las consecuencias negativas de su muerte; no es
cuestión de dejar al hombre sin valores, sino de empujarle a la creación de
nuevos valores. Exigente consigo mismo, valiente ante el riesgo y renunciante
frente a la pequeña felicidad.
Stefanía Quevedo

Ahora bien, en el camino hacia el ultrahombre, el problema surge del último


hombre, aquel que ha superado a Dios pero no a la nada, aquel que perdió
todo ideal pero no se propone metas, no trasciende a sí mismo, no se atreve a
nada, sin valores, sin anhelo, sin esperanza, sin capacidad de creación. Esta
ha sido el que en efecto ha devenido en nuestro tiempo.
El ultrahombre y el último hombre son las dos caras de la misma moneda: la
muerte de Dios.
El ultrahombre es expuesto en Así hablo Zaratustra, cuando Nietzsche alude a
las tres transformaciones del espíritu: de camello a león y de león a niño. El
camello hace referencia al hombre que hace reverencia ante la sublimidad de
Dios y de la ley moral, su espíritu quiere grandes y pesadas tareas para
demostrar su fuerza, subordinado al deber. En su camino hacia el desierto, el
camello se transforma en león, representando al hombre que se libera de Dios
y de la ley moral, sustituyendo el “deber” por el “querer”, haciendo ley su
voluntad. Sin embargo, esta libertad del león es meramente negativa, ciega de
valores, es una “libertad de (Dios)” pero no una “libertad para”, por lo tanto, el
león debe transformarse en niño para dictar nuevos valores, siendo un ser
inocente, garantizando un nuevo comienzo.
LA VOLUNTAD DE PODER
La vida es voluntad de poder. Nietzsche, en este punto, entiende a la voluntad
como la esencia oculta de todo lo real, el carácter global de la existencia, es
autoposición, autoafirmación como voluntad de poder, poder de llegar a ser
cada vez más poderosa. Para llegar a esta idea Nietzsche parte de la
consideración de que ha encontrado en todo lo viviente, voluntad de poder. En
los movimientos de la vida instintiva, en actividades de la vida social humana
como la política, en los procesos físico-químicos propios de la naturaleza se da
la tendencia de la vida a crecer, a desarrollarse, a hacerse más fuerte, a
someter otras vidas, a acumular poder.
¿Qué pretende Nietzsche al hacer de la voluntad de poder el meollo de la
realidad? Consolidar definitivamente su propia concepción del mundo.
La voluntad de poder se suma al concepto físico de fuerza como “principio
interno de determinación”. La fuerza siempre se dice en relación a otra fuerza,
a su vez, la diferencia de cualidad entre las distintas fuerzas se expresa por sus
diferencias irreductibles de cantidad y se contraponen incesantemente. Así, la
voluntad de poder es el principio inscrito internamente en la misma fuerza,
principio a partir del cual se establece la diferencia de cantidad entre las
fuerzas y la cualidad de cada una y del cual proviene la tensión de las fuerzas
entre si y, por ende, el incesante movimiento del universo nietzscheano. En el
encuentro de unas fuerzas con otras, cada una recibe su quantum de poder,
definido por la acción (violencia) que ejerce y por la que resiste, consiste, pues,
en combinaciones de fuerzas que luchan por el poder, que quieren llegar hasta
donde pueden y, con ello, dominan y son dominadas.
Desde este supuesto de voluntad de poder, Nietzsche interpreta todos los
fenómenos. La voluntad de poder, en efecto, es la fórmula que expresa el
devenir mismo como lucha de fuerzas.
LA TRANSVALORACION DE TODOS LOS VALORES
Tras haber presentado la muerte de Dios y el nihilismo que de ella resulta como
la “desvalorización de todos los valores”, Nietzsche presenta su propio
pensamiento como una transvaloración de todos los valores, como una
posición de valor cuyo criterio es la vida concebida como voluntad de poder.
Stefanía Quevedo

Los valores son condiciones de la voluntad de poder, son proyecciones que la


vida realiza inconscientemente para afirmar y experimentar su poder. Un
pueblo, una cultura, se afirman en la vida proyectando puntos de vista sobre el
valor. Detrás de todos los juegos valorables esta la vida, la cual no tiene valor
en sí porque el valor total del mundo es invaluable; como formaciones de la
voluntad de poder, los valores son relativos a la vida. Así, según sea la
voluntad de poder, tal será la moral.
En suma, Nietzsche concibe lo que llamamos realidad como un mar agitado en
el que hay olas que van y vienen pero nada permanente. Nuestros conceptos
filosóficos y científicos son falsificaciones más o menos útiles con las que
pretendemos aprehender el devenir, introduciendo por debajo de su corriente
salvaje un sostén que nos permita asirlo. En hombre solo prospera bajo la
comprensión de la regularidad de sus percepciones, de la capitalización de sus
experiencias, las cuales configuran nuestro conocimiento, el cual es un
instrumento de nuestro poder que ejercemos sobre el medio que nos rodea.
Así, el hombre busca apoderarse de lo real a través de axiomas lógicos, de
principios.
Sin embargo, la verdad no existe, es sólo un error necesario, es decir, sin el
cual no podríamos vivir.
Así, tenemos los grandes temas del pensamiento de Nietzsche:
- La muerte de Dios como derrumbamiento del mundo metafísico.
- El nihilismo como desvalorización de todos los valores.
- El eterno retorno como el intento de superar el nihilismo confiriendo al devenir
el carácter del ser.
- El ultrahombre como el nuevo tipo de hombre que se hace cargo
efectivamente de la muerte de Dios y del nihilismo y su superación.
- La voluntad de poder como la esencia de toda realidad.
- La transvaloración como el intento de transformación de todos los valores
desde el criterio de la voluntad de poder.
El punto de mira de Nietzsche es al revés del de la metafísica, rechazando toda
trascendencia, pensando el devenir como ser, concibiendo lo sensible y terreno
como lo auténtico ya que no quiere saber nada de un nivel de realidad distinto
de la realidad de este mundo.

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