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El Evangelio cambia todas las cosas

“El evangelio cambia tu vida cuando lo obedeces y perdonas”


Colosenses 3:12-13

Introducción

A. La semana pasada hablaba de como la falta de perdón afecta el cuerpo en nuestra


salud. Y eso es algo que no solamente los médicos dicen. Dios también considera
esto en su Palabra: Proverbios 11:17 RV90---- TNM.
1. No cabe duda que muchos de nuestros males nosotros mismos los buscamos
por no procurar la Palabra de Dios para solucionar nuestros asuntos
relacionales.
B. Afortunadamente hay historias extraordinarias de perdón que son ejemplo y nos
enseñan que verdaderamente se puede actuar como Dios nos pide que lo
hagamos.
1. El predicador de la india
2. “El cometer errores es humano, el perdonar es divino”.
C. ¿Cómo puede una persona llegar a perdonar tan fácilmente a quien lo ha ofendido
tanto? Esta es la pregunta que estaré contestando en esta mañana
1. La respuesta es Dios. Dios, mediante el Espíritu Santo es el único que puede
ayudar a una persona a perdonar: cualquier ofensa y a quien quiera que sea su
ofensor.
D. ¿Por qué será que las personas batallan tanto para perdonar hasta el grado de vivir
infelices, llenos de resentimiento y amargura?
1. Porque no hacen lo que Dios dice respecto al perdón.
2. Porque van siguiendo sus propios consejos. Y les resulta más placentero anidar
sentimientos malsanos, aunque estos les carcoman el alma.
E. Por ejemplo, antes de ver lo que Dios dice respecto al perdón veamos algunas
formas en las que la gente responde a los conflictos o problemas con los demás.
1. Hay personas que tratan de escapar. Y cuando la gente trata de escapar lo que
manifiesta es que prefieren evitar los problemas existentes en lugar de
solucionarlos. Hay muchas formas en las que una persona puede tratar de
escapar:
a) Evitando hablar del tema… es verdad que hablar con alguien acerca de los
conflictos que rompen una relación no es nada fácil, pero evitar hablar no
soluciona nada: por eso alguien dijo en forma de poema: “me enojé con mi
amigo, se lo exprese y sano mi alma. Me enojé con mi enemigo, lo callé, y
se convirtió en rencor”.
b) Negando que existe un problema: es que yo no tengo nada con tal
persona… Voy a hacer de cuenta que este problema no existe y voy a
continuar adelante. No se puede caminar adelante y salir ileso sin
solucionar los conflictos.
c) Huyendo del problema: hay personas que prefieren irse de la casa, del
trabajo, de la iglesia, de una relación, en lugar de enfrentar sus problemas
para buscar soluciones. Un ejemplo de este tipo de personas son los que
buscan el divorcio, son los hijos que se van de la casa de una mala forma,
los miembros que abandonan una iglesia y se van a otra porque prefirieron
no solucionar sus problemas con quien los tuvieron.
d) En casos extremos (cuando se dejan acumular por tanto tiempo los
problemas) y ya no se sabe qué hacer con ellos, una manera trágica de
escapar es el suicidio. La puerta más falsa que una persona decide tomar
para salir de los conflictos. Una vez leí una frase en el Facebook que decía:
“cuando persona se suicida no es porque quiera acabar con su vida, es
porque quiere acabar con el dolor y el sufrimiento”. El dolor y el sufrimiento
no se termina quitándose la vida; se termina cuando perdonas a las
personas que te causaron ese dolor que sientes.
2. Hay personas que responden a los problemas atacando. Cuando las personas
responden con ataques lo que manifiestan, es que, lo que más les interesa es
ganar el conflicto en lugar de sanar una relación. Las formas más comunes son:
a) Agresión: ataques verbales para intimidar, violencia física, o buscar
cualquier forma de dañar a la persona con la que tienen un conflicto.
b) Hacer sentir siempre culpable a la otra persona es una forma de atacar en
lugar de solucionar.
c) Hay muchos casos de problemas no solucionados que terminan en
asesinato. Quizás muchos de nosotros no vamos a vernos inmiscuidos en
un asesinato físico. Porque podemos decir: yo no llegaría a tanto. Pero le
tengo una mala noticia: si como cristianos guardamos odio, desprecio,
rencor, resentimiento hacia a otra persona, somos culpables de asesinato
(1 Juan 3:15; Mateo 5:21, 22)
F. Volvamos a la pregunta: ¿Cómo puede una persona llegar a perdonar tan
fácilmente a quien lo ha ofendido tanto? Repito la respuesta: Dios, mediante el
Espíritu Santo es el único que puede ayudar a una persona a perdonar. Por eso, lo
primero que tiene que hacer es venir a una relación con Dios por medio del
evangelio. Porque si una persona no ha experimentado el perdón de Dios, es muy
difícil que pueda perdonar a otros. Colosenses 3:12-13

I. La única forma de solucionar nuestros problemas por la vía del perdón es dejándonos
guiar por lo que Dios nos dice en su Palabra.
A. Ilustración de guiar al hermano Miguel a la gran bodega… ¿Qué hubiera pasado si el
hermano hubiera dicho: no le voy a hacer caso y no lo voy a seguir y hubiera
tomado otro rumbo?...
B. De esta misma forma Dios nos guía con su palabra para la solución de nuestros
problemas, y especialmente con el problema del perdón. Porque el evangelio es un
tema de perdón. Y en el evangelio Dios nos muestra lo importante que es para Él la
reconciliación, y por medio de él y lo que hizo por nosotros, nos inspira a hacer lo
necesario para reparar cualquier daño que hayamos causado y para perdonar
cualquier daño que nos hayan hecho.
1. ¿Qué pasa si nosotros despreciamos la guía de Dios y decimos: no creo que esta
sea la manera de solucionar este problema con mi herman@, espos@; hijos,
padres? Vamos a seguir respondiendo a los problemas con los demás de
manera equivocada: tratando de escapar justificándonos o atacar
defendiéndonos a capa y espada.
2. Si usted quiere que Dios los ayude a perdonar usted tiene que hacer lo que Dios
le dice
C. Dios dice claramente lo que debemos hacer para poder perdonar:
1. Lo primero que tenemos que hacer para perdonar es recordar cuanto me ha
perdonado Dios a mí: “de la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo
vosotros”.
a) El Señor Jesucristo nos enseña eso también cuando le preguntaron ¿Cuántas
veces debo perdonar a mi hermano? Contó una parábola (Mateo 18:23ss)
de un hombre…
b) Proverbios 19:11; ¿Cuál es la clave para no guardar resentimiento? Pasar
por alto la ofensa. Pero no podemos pasar por alto la ofensa si antes no
recordamos cuantas ofensas Dios nos ha pasado por alto a nosotros.
2. A veces se nos hace difícil perdonar, según nosotros por el tamaño de la ofensa.
Pero yo creo que es mucho más grande las ofensas que le hemos hecho a Dios,
y, sin embargo, él nos ha perdonado, y, de hecho, nos sigue perdonando.
3. Tal vez la mayoría de nosotros nunca nos veamos en la necesidad de perdonar a
un asesino que nos mató a un familiar. Pero todos nos enfrentamos a diario,
quizás muchas veces en un solo día, con la necesidad de perdonar al esposo o
esposa, a los hijos, a los compañeros de trabajo o de escuela, al vecino que le
echa la basura de su lado, que le atraviesa el carro en su cochera, que le hace
mala cara; y esta tarea no es menos importante. Porque, así como los grandes
incendios de los bosques empiezan con un simple cerillo, los grandes problemas
de rencor y odio empiezan con los pequeños problemas no solucionados.
4. ¿Qué más puedo hacer para perdonar aparte de recordar todo lo que Dios me
ha perdonado? Yo le creo a Dios, y otra forma efectiva para perdonar es orando
(Marcos 11:25). Orar, orar, orar, orar….
5. Otra forma es buscar la solución de los problemas hablando con el propósito de
llegar a la reconciliación “si tu hermano tiene algo contra ti… ve y reconcíliate”.
Esto significa resolver problemas relacionales a través del reconocimiento de
nuestras faltas y nuestra participación en el conflicto, a través de la confesión
de esas faltas.
a) Es muy necesario reconocer nuestras faltas y confesarlas ante las personas
relacionadas en el conflicto para poder llegar al fin del asunto que es la
reconciliación (proverbios 28:13). No podemos prosperar en nuestras
relaciones si no hay un reconocimiento y confesión de nuestras faltas. Esto
aplica en todas nuestras relaciones: esposos, padres a hijos, hijos a padres,
hermanos, personas con relaciones sentimentales…. Vecinos, compañeros
de trabajo, de escuela, hermanos en la fe…
6. Debemos dar muestras de perdón una vez que lo hemos otorgado: dejando a
un lado el deseo de venganza y ayudando cuando lo necesiten (Romanos 12:17-
21).

Conclusión (Qué hacer para lograr perdonar) respuestas pendientes


A. ¿Cómo puede una persona perdonar tan fácilmente a otra persona que le ha
hecho daño?
1. La respuesta es Dios. Dios puede ayudarle. Lo único que usted tiene que hacer
es dejar ya su manual de vida y comenzar a seguir la guía que Dios le da. Eso le
ayudará a comenzar la vida abundante que Cristo vino a darle por medio del
evangelio.
B. Para terminar, le recuerdo ordenadamente los cuatro pasos a obedecer para
conseguir perdonar:
1. Recuerde todo lo que Dios le ha perdonado y le sigue perdonando.
2. Ore, ore, ore. Por usted y por la persona que no puede perdonar
3. Hable del problema con la persona con el propósito de reconciliarse
4. Una vez que ha perdonado, muéstrelo con sus hechos
5. Recuerde, tal vez la mayoría de nosotros nunca nos veamos en la necesidad de
perdonar a un asesino que nos mató a un familiar. Pero todos nos enfrentamos
a diario, quizás muchas veces en un solo día, con la necesidad de perdonar,
porque todos tenemos conflictos cotidianos que no debemos permitir que se
conviertan en grande incendio que después sea mucho más difícil de apagar.

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