Existen muchas, miles de religiones en el mundo, la pregunta es, ¿qué tiene el cristianismo que no tienen todas esas demás religiones? A Jesucristo y su sacrificio. En una ocasión me dijo llorando un hermano (Javier)…. Dios tiene un plan para salvar a la humanidad, y es la humanidad la que debe adaptarse a ese plan, y no Dios el que se debe adaptar al plan que cada una de las religiones o denominaciones formule. El maravilloso plan para salvar al hombre es el evangelio; y uno de los elementos que incluye este evangelio, es la muerte de nuestro Señor Jesucristo en la cruz en favor de los pecadores. La Biblia nos enseña que Dios no salvará a ningún ser humano fuera del evangelio, fuera del sacrificio de Cristo. Por más caminos que el hombre invente, por más atajos que quiera tomar para llegar al cielo no lo podrá lograr fuera del sacrificio de Cristo. Fuera de la muerte, sepultura y resurrección de Cristo ningún ser humano será salvo. Hoy día, en muchas denominaciones se predica gracia barata, gracia donde Dios hace todo y Él es el responsable y el que tiene la obligación de salvarnos; tal gracia no sirve. La verdadera gracia no olvida, no pasa por alto, y no abroga la ira de Dios. La verdadera gracia absorbe la paga, la pena y el castigo por el pecado; pero solo a aquellos que han escuchado el evangelio, que lo han creído, que se han sentido mal por fallarle a Dios y se han arrepentido de sus pecados y por consecuencia, con fe en la muerte y resurrección de Cristo, han sido bautizados; y que de alguna manera continuamos adelante esforzándonos por alcanzar lo que Dios nos ha prometido: la salvación de nuestras almas. Y dice Hechos 4:12; todo esto se logra únicamente con el sacrificio de Cristo; y eso es lo que cada primer día de la semana recordamos al participar de estos elementos… Recuerde y agradezca a Dios que usted se encuentra dentro de esa gracia salvadora que no tiene ninguna otra religión. En estos tiempos de pandemia donde no podemos reunirnos nuevamente para participar todos juntos como iglesia, reúnase con su familia, ponga su jugo y su pan, y recuerden el sacrificio que hizo Cristo a su favor. Porque ese es el propósito e la reunión dominical según Hechos 20:7