El evangelio cambia todas las cosas

“El evangelio te hace una persona generosa”

2 Corintios 8:9

Introducción
A. Videos de malos ejemplos
B. La manipulación es una forma muy efectiva para convencer a la gente de que dé su dinero. La
manipulación es usada por muchos líderes (Hno. GGG).
C. Implementar el engaño es otra forma muy efectiva para que la gente de su dinero. Haciendo
promesas que Dios no hace, poniendo como ejemplo a personajes del A.T. que fueron
prosperados, exigiendo que traigas la décima parte de tus ingresos y que con eso Dios te
bendecirá, te prosperará.
D. Yo estoy convencido de que Dios quiere que seamos generosos a la hora de dar. A la hora de
ayudar de alguien en necesidad.
1. Pero Dios no quiere que seamos generosos siendo engañados.
2. Dios no quiere que seamos generosos siendo manipulados.
E. Dios quiere que seamos generosos con un claro y correcto entendimiento de su Palabra.
F. El Señor Jesucristo en los evangelios enseñó sobre la generosidad.
1. Él dijo que debemos hacer tesoros en el cielo (…).
2. Él dijo que no podemos servir a dos señores: a Dios y a las riquezas (al dinero) (…)
G. Lo primero que yo quiero dejar en tu mente es que: Dios quiere que seamos generosos de una
manera apropiada. Y de manera apropiada es no siendo manipulados ni engañados, sino
enseñados correctamente con su Palabra. ¿Cómo puede Dios lograr que seamos generosos?
O.T. El apóstol Pablo, inspirado por el E.S. nos enseña cómo podemos llegar a ser personas generosas.
Y lo que vamos a ver a continuación es, cómo Dios quiere y puede lograr eso en nosotros por medio
del evangelio. Mire cómo pronuncia el evangelio 2 Cor. 8:9
El apóstol está hablando a los corintios acerca de una ofrenda que ellos desde el año pasado habían
prometido dar para los hermanos de Jerusalén que estaban pasando por necesidad… y ahora el apóstol
les recuerda ese compromiso que hicieron con el propósito de que lo lleven a cabo….
Con esto en mente, y recordando el verso 2 Cor. 8:9 en la NTV “ustedes conocen la gracia generosa de
nuestro Señor Jesucristo. Aunque era rico, por amor a ustedes se hizo pobre para que mediante su
pobreza pudiera hacerlos ricos” podemos ver que:

I. Dios quiere que seamos generosos porque Él es generoso.

A. Dios mostró su generosidad para con nosotros por medio del evangelio. El evangelio es que
Cristo vino, murió, fue sepultado y resucitó.
1. Veamos lo que dice el versículo: “aunque era rico”. Podemos entender que esto se refiere a
cuando estaba en el cielo antes de su venida.
2. Si Cristo era rico estando en el cielo, ¿cuándo se hizo pobre? Cuando vino a la tierra, cuando
siendo Dios vino a nacer de una mujer al igual que nosotros siendo criaturas. Cuando dejó el
cielo y vino a la tierra a buscar y a salvar lo que se había perdido.
 3. Según lo que dice el versículo, el generoso amor o la generosa gracia de Dios a través de
Jesucristo tuvo una razón de ser: “que nosotros fuéramos enriquecidos”; en otras palabras,
que nosotros fuéramos bendecidos con el efecto que trajo su venida a esta tierra y su
propósito, que fue morir por nosotros y resucitar de entre los muertos para darnos vida. Que
nosotros fuéramos enriquecidos espiritualmente con el perdón de nuestros pecados y con la
esperanza de la vida eterna.
B. Lo que está diciendo el verso es, que, Dios, por amor fue generoso con nosotros. Y su amor y su
generosidad nos la mostró por medio del evangelio de su Hijo Jesucristo (Juan 3:16; Romanos
8:32: el que no escatimó ni a su propio hijo, sino que lo entregó por todos nosotros…)
C. Necesitamos meditar en lo que Dios hizo por nosotros. Necesitamos meditar y llenar nuestra
mente de la generosidad de Jesucristo para con nosotros. Porque solo cuando lo entendemos,
cuando lo reflexionamos, es que podemos llegar a ser como Dios quiere que seamos.
1. Piense, Cristo fue generoso con nosotros, ¿cómo debemos de ser nosotros?
2. Cuando un corazón entiende que Cristo fue generoso al venir y salvarlo, a darle una
esperanza, a darle una mejor vida, ese es un corazón que no necesita que se le manipule ni
que se le engañe para que dé con generosidad. Porque entendiendo la Escritura y siguiendo
el ejemplo de Cristo debe brotar del corazón la generosidad, y el evangelio cambia a una
persona tacaña y la hace una persona desprendida, compartida con quien tiene necesidad.
Cuando comprendes verdaderamente el evangelio y lo que Dios hizo contigo a través de él,
forzosamente ya no serás la misma persona en cuestión de dar o compartir de lo que tienes.
3. Te fijas como el evangelio puede transformar tu mente, tu vida, tus hábitos. El apóstol Pablo
pudo haber recurrido a la ley o al A.T. para convencerlos de que dieran (el A.T. está lleno de
pasajes que hablan de dar a los necesitados, de dar para el tabernáculo, para el templo).
Pero no lo hizo, el apóstol recurrió al evangelio, porque el evangelio es mucho más
transformador que la ley. Por eso quien no es una persona generosa es porque no ha
comprendido completamente el evangelio de Cristo en su vida.

Conclusión
A. Aclaro este punto: Dios quiere que seamos personas generosas y quiere lograrlo por medio del
evangelio. ¿Cómo?
1. Cristo, por amor fue generoso con nosotros al dejar su riqueza y venir a pobreza para
enriquecernos o bendecirnos con el perdón de nuestros pecados, y con la esperanza de la
vida eterna.
2. En la medida que comprendemos ese evangelio de amor y generosidad, seremos igual que
Cristo a la hora de dar o compartir cuando alguien tiene una necesidad. Sin ser manipulados
ni engañados. Porque el evangelio por si solo es capaz de transformarnos en personas
generosas.

B. ¿Por qué predico sobre este tema? Porque es necesario que como ministerios, como iglesias,
como individuos seamos generosos para la difusión del evangelio y así avance la obra de Dios.
 Ahorita que estamos reunidos de diferentes partes podemos darnos cuenta de que somos lo
mismo. Somos el mismo cuerpo de Cristo, el mismo pueblo Dios (no importa si estas en E.U., en
Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila, Chihuahua, Baja California, Puebla, Nayarit). Somos el
mismo cuerpo, y lo que nos une es Cristo, es el evangelio, entonces debemos procurar siempre
es el avance de la obra de Cristo.
C. Si nuestros intereses son los de Cristo entonces debemos preocuparnos y ocuparnos en apoyar
a nuevos predicadores para que comiencen nuevas iglesias (rogad al Señor de la mies …)
D. Cuando yo inicié con este sueño de comenzar una Iglesia nueva yo no tenía el sustento para
hacerlo y comencé orando y elaborando un proyecto y tocando puertas en iglesias, con
hermanos que creía pudieran ayudar. Y algunas respuestas:
1. No está en nuestros planes ayudar a misiones
2. Otras ni siquiera me contestaron
3. Y yo concluí que las razones fueron estas: Si no eres mi amigo, si no eres mi familia, y si no
me conviene no te puedo ayudar. Y esa no es la mentalidad de Cristo.
4. Recibí ayuda de una iglesia… de hermanos que personalmente me decían aunque sea con
poquito hermano…
E. Esto no lo hago en forma de queja (gracias a Dios no nos ha faltado nada porque Dios ha tenido
cuidado de nosotros y la ayuda ha estado llegando poco a poco). Lo hago para que seamos
conscientes de que si Dios nos ha puesto en una Iglesia, en un ministerio, en un lugar es para
beneficio de su obra y que si Dios nos da, es para bendecir a otros. Y para que nuestra tarea y
nuestra ocupación sea la difusión del evangelio para salvar a los perdidos y que si no lo puedo
lograr yendo lo puedo hacer aportando… eso es lo que los filipenses hacían con Pablo. Por eso
él les dice en el 1:3-5 “Doy gracias a mi Dios siempre que me acuerdo de vosotros, siempre en
todas mis oraciones rogando con gozo por todos vosotros, por vuestra comunión en el
evangelio, desde el primer día hasta ahora”. NVI Porque han participado conmigo en el
evangelio. Y más adelante les dice cómo han participado: mandándole para sus necesidades
una y otra vez.
F. Esta obra en Cholula, no es mía, es de Dios primeramente, y es del Colegio y es de todos los
hermanos que han aportado para nuestras necesidades. Porque así es la forma como Dios
trabaja, con personas generosas que entienden que el evangelio tiene que correr más allá de su
lugar, de su vecindad, más allá de donde sus pies puedan llegar, y eso lo puede lograr apoyando
a quien pueda ir a predicar.
G. El pasaje famoso que usamos para la ofrenda de 2 Corintios 9:6-8 (…) está dentro de este
contexto de la ofrenda que Pablo pide para los que están en necesidad. Y la promesa es que en
la medida en que seamos generosos Dios nos va a dar para que tengamos en todas las cosas
todo lo suficiente para seguir dando (abundando en buenas obras).
H. Yo le invito a que mire en su congregación (…); mire aquí en el colegio bíblico (…); busque a su
alrededor y verá que muchos han dejado de predicar porque no tienen ayuda, y verá que
muchos siguen predicando pero necesitan apoyo económico. Dios quiere que seamos
generosos porque Cristo fue generoso con nosotros y no hay mejor forma de serlo que
aportando para que el evangelio se siga difundiendo.