Iglesia Bautista Independiente De La Cantarero

INSTRUCCIONES SOBRE SOLTERÍA, MATRIMONIO Y SEPARACIÓN

1 Corintios 7:8-16

Hay un mal propio del ser humano: hablar lo que no sabemos o no debemos. Es
común escuchar a personas que siempre tienen una opinión para todo, una
mejor idea o una crítica. Lo cierto es que, aunque sepamos muchas cosas no
podemos saberlo todo. Por lo anterior, una de las características del sabio es
Proverbios es que este es capaz de callar: “En las muchas palabras no falta
pecado; mas el que refrena sus labios es prudente” (10:19) y “Mas el hombre
prudente calla” (11:12). Debemos conocer nuestros límites y callar cuando sea
conveniente.

Lo anterior tiene relevancia en lo que respecta a la soltería y el matrimonio, pues

siempre habrán “expertos” que tendrán todas las respuestas. Muchas personas
se dedican a construir parejas ideales, a determinar el tiempo propicio para
casarse, explicar las razones de ciertos problemas en el matrimonio… todo lo
anterior sobre su propio criterio y no sobre lo que enseña la Escritura.

Los creyentes solo tienen una fuente de verdad autorizada, fiel, divina, confiable,
inerrante y suficiente: la Biblia. Fuera de ella lo que hay son opiniones de mentes
limitadas y cambiantes. Por lo anterior, debemos conocerla, identificarnos con
ella, familiarizarnos con su pensamiento, profundizar en sus verdades porque
ahí está Dios revelándose, allí está su voluntad.

El tema de la soltería y el matrimonio siempre tendrá relevancia, pues siempre

habrán solteros y casados. Es así que lo que haremos hoy es contestar las
preguntas que tenían en los corintios y que Pablo respondió a través de todo el
capítulo (7:1). En esta sección particularmente trataremos sobre: ¿Qué deben
hacer las personas frente a la soltería? ¿Deben las parejas de cristianos
separarse? Y ¿Cómo deben vivir sus vidas aquellos cristianos que están
casados con inconversos? Sea nuestro Dios con la guía de su Espíritu
ayudándonos con su Palabra.
I. ¿QUÉ DEBEN HACER LAS PERSONAS FRENTE A LA SOLTERÍA? vv. 8-9

a. Para poder entender el pasaje es pertinente recordar algunas tensiones

dentro de la iglesia de Corinto, esto nos llevará a entender la intención de Pablo
en esta sección. Esta iglesia se encontraba en un contexto de inmoralidad, el
culto a la diosa Afrodita era un reflejo de ello. Muchos creyentes habían venido a
Cristo y salieron de un contexto bastante perverso (6:9-11).

Por lo anterior, existían sinceras dudas sobre la naturaleza del sexo, es decir,
¿es malo? O bien habían hermanos que tomaron decisiones extremas al
respecto: unos estaban promoviendo el celibato, otros la abstinencia sexual
dentro del matrimonio, e incluso unos estaban prohibiendo que sus hijas se
casaran.

Pablo está en esta sección ordenando la confusión en la iglesia de Corinto. Él le

está mostrando la voluntad de Dios para que ellos dejen los argumentos que
había creado según sus propios criterios. Lo más sabio que podemos hacer
como creyentes es renunciar a nuestra forma de pensar y poner nuestro corazón
para ser moldeado por la voluntad de Dios.

b. En esta sección, Pablo apunta su atención a dos grupos: “solteros” y “viudas”.

Un soltero es una persona que no está casada, es decir, que no está frente a
Dios y la sociedad unido con alguien. Una viuda hace referencia a una mujer que
debido a la muerte está en una condición de soltería. En ambos casos la idea
apunta a individuos que están en legítimas condiciones para contraer
matrimonio. El soltero tiene la libertad para casarse (en el Señor para los
creyentes), el viudo (a) tiene la libertad para casarse porque la muerte ha
disuelto su vínculo matrimonial.

A ellos Pablo les dice: “bueno les fuera quedarse como yo”. Muchos eruditos
concuerdan en la posibilidad que Pablo hay sido viudo por las siguientes
razones:

 Es muy probable que Pablo haya pertenecido al Sanedrín, el cual era un

grupo de 7 líderes religiosos que regían los aspectos espirituales de
Israel. Uno de los requisitos era que fuesen casados, puesto que en esa
cultura la soltería tenía matices de deshonra.
  Pablo, además, era fariseo radical, tanto que dijo “y en el judaísmo
aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo
mucho más celoso de las tradiciones de mis padres.” (Gál. 1:14). Dentro
de esta secta el matrimonio era un requisito.

¿En qué sentido es beneficiosa la soltería? En el sentido que un soltero no está

atado a los compromisos de familia y por consiguiente puede servir al Señor.
Pablo, desde su conversión, se dedicó por entero al Reino de Dios; enfrentó
muchas circunstancias que en matrimonio no hubiese podido superar. La
soltería es una bendición cuando esta se usa en el marco del propósito para la
misma: vv. 32-34. En Lucas 2 se relata el episodio de la presentación del Señor
en el templo, allí se encontraba Ana de quien se dice: vv.36-37. Ella invirtió su
soltería en el Señor.

c. Después de exponer lo referente a la soltería Pablo reconoce una realidad y

presenta un mandamiento. La realidad es que existe una tensión sexual natural
que puede ser de tropiezo al no ser satisfecha: “estarse quemando”, por ende, si
esto ocurre hay un mandamiento: “cásense”.

Evidentemente, en el contexto de toda la Biblia existen condiciones para tomar

este paso: 1. Deben ser en el Señor 2. Debe ser una decisión con madurez
espiritual: entender las circunstancias de alrededor como el compromiso con el
Señor, la familia, el carácter, la carrera, sus metas, entre otras cosas. 3. Debe
ser una decisión rápida para evitar la tentación sexual. Por lo anterior, los
creyentes no debemos presionar a los solteros a tomar decisiones fuera de los
parámetros bíblicos: “con tal que te casés”, “mejor es quedarse solo”…La
oración y el discipulado son esenciales.

II. ¿DEBEN LAS PAREJAS DE CRISTIANOS SEPARARSE? vv. 10-11

a. En la misma confusión con relación al matrimonio, Pablo aborda el problema

de algunos matrimonios: habían parejas de creyentes que estaban pensando en
la posibilidad de separarse. Por el contexto de los primeros versículos es
probable que algunos hermanos en el afán de ser más espirituales estaban
buscando el celibato, otros tal vez no se sentían cómodos en el hogar o bien,
estaban considerando a otra persona como cónyuge.
En respuesta a estos argumentos dice Pablo: v.10 “sino el Señor”, el punto aquí
es que durante su ministerio terrenal el Señor Jesucristo ya había dado
enseñanzas con relación al divorcio:

1. .El Señor explicó que el propósito del matrimonio era que dos fueran uno;
la sentencia en Génesis es clara: “lo que Dios juntó no lo separe el
hombre” (Gén. 2:24).
2. En la ley Moisés permitió el divorcio pero únicamente en caso de adulterio;
el Señor explicó que esto es por causa de la “dureza del corazón”, por
ende, un permiso de gracia de Dios para la parte inocente.
3. Sin embargo, para Dios el divorcio es aborrecible en cualquier otra
circunstancia como “incompatibilidad”, “diferencias en cuanto al dinero”,
“nuevo matrimonio”, “conflictos de carácter”, etc. Malaquías 2:16 dice: “El
Dios de Israel ha dicho que él aborrece el divorcio”.

b. Fuera de lo expuesto a la enseñanza de Jesucristo, el mandamiento para los

creyentes es “La mujer no se separe del marido”, es decir, que los cristianos no
deben ver la separación como una opción. ¿Qué hacer cuando surjan
diferencias fuertes? Reconciliarse. Evidentemente que existen conflictos muy
complejos, pero Dios ha dado a su pueblo la dirección del Espíritu Santo, su
Palabra y la capacitación de hombres sabios en la iglesia para poder solventar
tales diferencias.

III. ¿CÓMO DEBEN VIVIR SUS VIDAS AQUELLOS CRISTIANOS QUE ESTÁN
CASADOS CON INCONVERSOS? vv. 12-16

a. El contexto de esta pregunta también es pertinente analizarla. Es muy posible

que muchas parejas se sintieran en conflicto espiritual en relación a su vida
matrimonial puesto que podrían pensar que sus relaciones “mixtas” fueran de
deshonra para el Señor. Sin embargo, a la luz de la Escritura el estado en el que
venimos al Señor no interferirá en nuestra aprobación frente a Él: vv. 17-20, 24.

Es importante aclarar en este punto, que la idea central de Pablo es calmar las
conciencias de aquellos que siendo inconversos y en matrimonio vinieron al
Señor. No debe entonces un creyente refugiarse en esta verdad para decidir
casarse con un inconverso, pues en ese caso tal creyente tendrá que enfrentar
los amargos frutos de su desobediencia. Nunca un matrimonio en yugo desigual
será mejor que la soltería. Hermanos, seamos sabios en dar palabra bíblica

b. Con respecto a los matrimonios en desigualdad espiritual, Pablo aborda dos

casos posibles: 1. El inconverso quiere seguir en el matrimonio 2. El inconverso
quiere salir del matrimonio. En este apartado Pablo dice: “yo digo, no el Señor”
en relación a que Jesucristo no abordó el tema en su ministerio terrenal, pero
que a través de su apóstol daba este mandamiento. De no ser así, 2 Tim. 3:16
es mentira.

En cuanto al primer grupo dice Pablo que los matrimonios no deben separarse:
vv. 12-13. Si el inconverso no tiene problema con la fe del creyente y ambos son
capaces de vivir con cierta armonía, el matrimonio debe permanecer junto. Pero
añadido a lo anterior, el texto expone una bendición particular: v.14. ¿Esto es
salvación por obras? No, pero una persona creyente puede ser receptora de
bendiciones particulares que traerán gracia y misericordia al resto de su familia,
incluyendo salvación si es la voluntad de Dios.

c. Finalmente, la segunda exhortación a este grupo apunta a aquellos que viven

con un inconverso, que por la fe de su cónyuge, quiere salir de su matrimonio. A
estos Pablo les dice: vv. 15-16. Los creyentes en este contexto pueden ser libres
y no vivir una vida de sufrimiento si el cónyuge.

CONCLUSIONES

1. Hermanos, debemos ser sabios, pero sobre todo bíblicos al momento de

aconsejar a solteros. Debemos tener un cuidado especial es dar una
perspectiva bíblica al respecto y no una construida según la opinión
popular. El matrimonio no es superior a la soltería. La soltería es un
espacio de servicio y preparación que Dios bendice. Finalmente, el
matrimonio debe ser construido con sabiduría en dependencia del Señor.
2. Los matrimonios cristianos no están autorizados a separarse, ni siquiera
por razones aparentemente espirituales. El Señor ha establecido un
principio de perpetuidad únicamente con el permiso de separación en caso
de adulterio.
3. El cónyuge que está casado con un inconverso, en caso de que este
decide salirse del matrimonio, tiene libertad para terminar su matrimonio y
no vivir en esclavitud.
4. Como punto importante, cada vez que la Biblia permite la separación está
abriendo las puertas para un nuevo matrimonio.

12 de junio de 2021