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CARLOS OTALVARO
(MAGISTER)
UNIVERSIDAD DE CORDOBA
FACULTAD DE EDUCACION Y CIENCIAS HUMANAS
DEPARTAMENTO DE ESPAÑOL Y LITERATURA
LICENCIATURA EN LITERATURA Y LENGUA CASTELLANA
PSICOLOGIA EVOLUTIVA ESPAÑOL GB-2
MONTERIA-CÓRDOBA
2021
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Tabla de contenido
INTRODUCCION..................................................................................................................................3
LA TEORÍA PSICOSEXUAL DE SIGMUND FREUD..................................................................................4
FASE ORAL......................................................................................................................................4
FASE ANAL......................................................................................................................................5
FASE FÁLICA...................................................................................................................................7
ETAPA LATENTE..............................................................................................................................9
FASE GENITAL (Madurez hasta la muerte)...................................................................................10
CONCLUSIÓN....................................................................................................................................11
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS........................................................................................................13
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INTRODUCCION
La Psicología del Desarrollo tiene como objeto el estudio científico de los cambios y la
estabilidad de la persona a lo largo de todo el ciclo vital, desde la fecundación hasta la
muerte. Por ello, vemos muchas teorías que nos explican justamente lo anterior, tratan de
buscar respuesta a la pregunta ¿Cómo se desarrolla evolutivamente el ser humano? y aún
más importante, ¿qué factores influyen en el desarrollo de éste? Por lo anterior, se
destacan muchos autores y personajes que centraron sus estudios en esta materia, entre
los cuales se encuentra Freud, quien postuló una importante teoría en la cual explica este
proceso de desarrollo y que se centra en una perspectiva sexual. Freud explica desde el
punto sexual, que a lo largo del ciclo vital del ser humano éste atraviesa por 5 etapas,
teoría considerada como Psicosexual. Dado lo anterior, se dará énfasis en dicha teoría,
estudiándola y explicando en qué consiste, al igual que los cimientos en los cuales se basa
Freud para presentarla.
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Para Freud, la infancia es una etapa crucial en la que se da forma a nuestra personalidad y
comportamiento como adultos. Consideraba el desarrollo como un proceso discontinuo,
creía que cada uno de nosotros debe pasar por una serie de etapas durante la infancia, las
llamadas etapas psicosexuales.
A lo largo de este periodo, en donde la zona erógena es la boca, el bebé depende por
completo de alguien que le cuide y la zona oral es la que más se asocia a la satisfacción de
las necesidades biológicas y los sentimientos placenteros.
Durante la fase oral las actividades relacionadas con la alimentación como la succión y la
masticación son lo más importante.
El principal reto al que se enfrenta el bebé durante el periodo de dependencia oral es el
de consolidar actitudes básicas: dependencia, independencia, confianza y apoyo en los
demás.
Al principio, el bebé no es capaz de distinguir su propio cuerpo del pecho de su madre y
esto le permite experimentar la ternura y el amor hacia sí mismo. Sin embargo, con el
tiempo el pecho será sustituido por una parte de su propio cuerpo: el bebé se chupará el
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dedo o la lengua para reducir el estrés causado por la falta de atención, por eso es tan
importante no interrumpir la lactancia.
Si se impide tajantemente que los bebés utilicen su boca para satisfacerse, esto podría
producir un bloqueo que haría que ciertos problemas quedasen fijados en el inconsciente
(según Freud).
La principal fuente interacción del bebé se realiza a través de la boca, que es de vital
importancia para la alimentación, pero además el niño a través de ella obtiene placer
gracias a actividades satisfactorias como la degustación y la succión. Debido a que el bebé
es totalmente dependiente de los cuidadores (que son los responsables de su
alimentación), el pequeño también desarrolla un sentido de confianza y comodidad a
través de esta estimulación oral.
El conflicto principal en esta etapa es el proceso de destete: el niño pasa a ser menos
dependiente de sus cuidadores y pierde las gratificaciones que obtenía con la succión.
La fijación del comportamiento en esta etapa puede ocurrir por dos razones:
1. Frustración o bloqueo de las necesidades del niño.
2. Sobreprotección, el niño tiene muchas oportunidades de manejar sus propias funciones
internas. Esto hace que el niño desarrolle un sentimiento de dependencia e
incompetencia.
Si la fijación se produce en esta etapa, Freud creía que el individuo tendría problemas con
la dependencia o la agresión. La fijación oral puede generar problemas con la bebida, la
comida o la necesidad de fumar.
Luego de darse por culminada la etapa oral, se pasa a la anal. En esta fase, los niños y
niñas ya comienzan a mantener el control de sus esfínteres en el proceso de defecación,
esta actividad según Freud se encuentra vinculada con la sexualidad y placer. Esta etapa
se analiza a partir de la observación de rasgos de erotismo anal y de aquel placer en los
niños que se da por medio del acto de la defecación o de la acumulación y retención de la
materia fecal y al valor simbólico que se le atribuye a las heces. Aquí la libido se sitúa al
alrededor de la zona erógena anal y se articula a una altura dinámica la dualidad actividad-
pasividad, en donde se le atribuye el nombre de pulsión de dominio a la actividad, que
consta del despliegue del deseo implementando fuerza y teniendo la dirección de
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Para los niños y niñas el hecho de eliminar orines o heces es algo que consideran natural,
normal y que contiene placer; es más, lo ven como un tipo de obsequio que regalan a los
padres, actúan de esta manera porque para ellos es como desprenderse de una de las
partes de su cuerpo que dan a su padre y madre. Las heces para los niños y las niñas
tienen una imagen de una creación fabricada por ellos mismos, mencionando que les
parece agradable su textura, su olor e incluso su color. Los niños y niñas deben aprender a
cooperar con una persona más poderosa esto causa experiencias nuevas de satisfacción y
ansiedad. La satisfacción viene de cumplir los deseos de sus padres, avisar y controlar. La
ansiedad proviene de la vergüenza y la desaprobación de los demás, la función
autoconservadora del erotismo anal viene determinada por el proceso de evacuación de
los intestinos y la vejiga y por el placer que causa el haberlo hecho de la manera correcta.
Este sentimiento de bienestar recompensa al iniciar esta fase los frecuentes malestares y
tensiones padecidos por los niños y niñas, mientras que sus intestinos aprenden a realizar
adecuadamente su función todos los días.
Esta etapa comienza porque en los niños y niñas se da una mejor formación de
excrementos, se presenta un mayor desarrollo del sistema muscular y el ambiente social
solicita un mejor control de sus evacuaciones, sumergiéndose de tal manera, en la
dimensión en la que ellos son capaces de descargar de forma voluntaria y poseen la
habilidad de saber distribuir propia y conscientemente las acciones de expulsar y retener.
Dicha fase se caracteriza por la lucha de los niños y niñas por su autonomía, empiezan a
ver el mundo como yo – tú, mí, mío. Son fáciles de convencer si han decidido hacer lo que
se espera de ellos, pero es difícil de encontrar la manera de que desee justamente eso.
Los niños y niñas al mismo tiempo quieren acercarse y soltarse, acumular y descartar,
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aferrarse y arrojar. Por lo tanto, las relaciones sociales están marcadas por la antítesis
soltar – aferrarse.
Esta es la etapa en la que la zona erógena se encuentra en los genitales, por esto la
principal sensación de placer es entonces la de orinar; de igual modo, aquí se da inicio a la
curiosidad de las diferencias que radican entre mujeres y hombres, niños y niñas, notando
las evidentes distinciones entre la forma de vestir, de ser y en la forma de los genitales. Se
caracteriza por una unión de las pulsiones parciales bajo la primacía de los genitales, pero
a diferencia de la organización genital puberal, el niño o la niña no distinguen en esta fase
más que un solo órgano genital, el masculino, y la oposición de los sexos equivale a la
oposición fálico – castrado. Freud considera que en esta fase hay una organización muy
similar a la del adulto, por tanto, la ubica como genital. El niño o niña elige un objeto
sexual externo y direcciona hacia este objeto sus tendencias sexuales. Lo que la diferencia
de la organización sexual madura es que sólo reconoce como órgano genital, el masculino.
Aquí en esta etapa es donde interviene el llamado Complejo de Edipo, este Complejo
desempeña un papel fundamental en la estructuración de la personalidad y en la
orientación del deseo sexual, es el "conjunto organizado de deseos amorosos y hostiles
que el niño experimenta respecto a sus padres. En su forma llamada positiva, el complejo
se presenta como en la histórica de Edipo Rey: deseo de muerte del rival que es el
personaje del mismo sexo opuesto. En su forma negativa, se presenta a la inversa: amor
hacia el progenitor del sexo y odio y celos hacia el progenitor del sexo opuesto. De hecho
estas dos formas se encuentran, en diferentes grados, en la forma llamada completa del
complejo de Edipo". (Laplanche, Jean y Jean – Bertrand Pontalis, 1994, p. 61).
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Aquí, los niños y niñas comienzan una actividad de masturbación, permanecen largos
ratos tocando sus genitales y no únicamente por el placer que sienten, sino porque al ser
descubierto por ellos mismos tienden a querer conocerlo y explorarlo. A esta edad, la
sexualidad infantil hace referencia a cómo descubren su pertenencia a determinado sexo,
cómo adquieren características, conductas y comportamientos que son distintivos de su
sexo y de cómo reaccionan frente las sensaciones de placer que manan de su cuerpo. El
niño o niña descubre que pertenece a un sexo porque ha logrado un control suficiente
sobre su cuerpo, que le permite explorar aspectos de la vida que involucran a los otros, ya
no se le limita sólo a él. Además, porque la utilización del lenguaje le permite preguntar,
observar y pensar. El lenguaje le permite un diálogo interno que le lleva a investigar y
explorar.
Desde otra perspectiva, el desarrollo de su inteligencia le posibilita realizar comparaciones
entre las cosas y darles una clasificación. Tiene la capacidad de diferenciar entre un genital
y otro y agrupar en una misma categoría a todos los que tienen pene y diferenciarlos de
los que tienen vagina, empieza a clasificar a hombres y mujeres y se incluye en uno u otro
por comparación. El descubrimiento del sexo lleva al niño o niña a explorar y conocer
más, proceso que lleva a cabo de dos maneras:
PREGUNTAR: El niño(o niña pregunta porque desea conocer más. Esto puede
causar ansiedad en los padres. De las respuestas que los adultos le den al niño o
niña, depende que éste se forme una idea correcta o incorrecta de la sexualidad.
Los niños y niñas buscan respuestas que no sean complejas, solo un poco de
información, puesto que retomarán sobre el tema una y otra vez.
MANIPULAR: Es en esta etapa cuando el niño o niña empieza a tocar sus genitales
por el placer que resulta de esto y con intenciones de conocer más. Muchas veces
en los adultos la idea de saber que su hijo o hija se masturba, puede causarles
sensaciones de incomodidad.
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Ésta es una edad en la que el niño o niña también puede presentar la conducta de
mostrar sus genitales, mirar los genitales de otros y siente una curiosidad constante por la
anatomía de los individuos del sexo opuesto o del mismo. Estas conductas son normales y
no tienen las connotaciones que le da el adulto. Al descubrir el niño o niña que pertenece
a un sexo determinado, empieza a imitar al progenitor de su mismo sexo. El niño se fija en
el modelo masculino que tiene más próximo, el padre y la niña en el femenino, la madre.
Ellos quieren parecerse a sus papás.
Esta capacidad para imitar es adquirida por el niño y la niña no solo porque descubren que
pertenecen a un sexo sino porque es una forma de acceder al padre del sexo opuesto. En
su elaboración del Complejo de Edipo el niño y la niña "se dan cuenta" de que
pareciéndoseles al padre del mismo sexo pueden lograr que el padre del sexo opuesto se
"enamore" de él o ella. Cuando aparece la prohibición del incesto en la relación padre, hija
o madre, hijo y la castración como castigo, el niño o niña reprime su deseo que el
progenitor, las características culturales y comportamentales que caracterizan a cada sexo
han sido adquiridas por el infante por medio de la imitación.
Por esto, el niño o niña aprende a comportarse según su sexo, puesto que la imitación le
permite entender esas conductas. El niño o niña necesita imitar las actividades que
realizan los padres porque debe probar los diferentes comportamientos para aprender
normas de conducta adecuados para su sexo.
Por esta razón no es necesario forzar a los niños y niñas a que aprendan a ser hombres o
mujeres. Ellos mismos, en su proceso de imitación irán aprendiendo a hacerlo sin
necesidad de exigencias o imposiciones innecesarias. Lo importante es que los modelos
por imitar sean lo suficientemente adecuados.
Como en las etapas anteriores, la genital también agrega una modalidad de relación social
que es la conquista. El niño o niña aprende a conquistar, a competir, a insistir para
alcanzar una meta y esto es lo que le produce placer.
En la personalidad del niño aparecen estructuras como el ego y el superego. Son los
principios básicos de la teoría de la estructura de la personalidad de Freud, a continuación,
se presenta un esquema:
CONCLUSIÓN
Dado lo anterior, se determinó que para Freud casi todo se refería a lo sexual en el
desarrollo de las personas, pero también anexando la participación del ámbito social. Lo
que el niño o niña hacen según la zona erógena de la etapa, la crianza que ofrecen la
familia y el contexto histórico determina que el niño o niña pueda formarse como
persona.
Para el psicoanálisis la libido es la energía sexual que realza con placeres específicos
algunas funciones vitales como el comer, la regulación intestinal y el movimiento corporal.
"Sólo después de haber resultado exitosamente una cierta secuencia de esos usos
pregenitales de la libido, la sexualidad del niño(a) alcanza una breve genitalidad infantil,
que de inmediato se vuelve cada vez más latente, transformada y desviada, pues la
maquinaría genital sigue siendo inmadura y los primeros objetos del deseo sexual
inmaduro están prohibidos para siempre por el tabú universal del incesto". (Erikson, Eric,
1993, p.53)
las etapas oral, anal, genital, y fálica del desarrollo psicosexual son una unión a partir de la
cual se moldea la mayor parte de la personalidad adulta, si llegasen a ocurrir una fijación
específica dependerá de la fase en la que se dañó el desarrollo, un desarrollo psicosexual
que transcurre de manera apropiada, conllevan a la formación plena de la personalidad.
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
https://www.ceupe.com/blog/etapas-del-desarrollo-psicosexual-segun-freud.html
https://psicologiaymente.com/psicologia/etapas-desarrollo-psicosexual-sigmund-freud
https://isfap.com/etapas-psicosexuales-desarrollo-freud/