CORE: ARTE O LECTURA CRÍTICA

Trabajo N°5
Nombre: Fernanda Fuentes Aguilera

Profesor/a: Lía Karmelić Visinteiner

Sección 3

La obra seleccionada para este trabajo es del pintor James Jebusa Shannon, que data del año
1906, titulada “El buque de plata” y se encuentra actualmente en el Museo de Bellas Artes. Sus
dimensiones son de alto 76.2 cm y de ancho 118 cm. La popularidad del retrato artístico de
Shannon se debió a su habilidad para pintar retratos que apelaban al gusto estético de la época.
Adoptó la pincelada de la pintura francesa moderna, mientras que al mismo tiempo empleó los
recursos compositivos del arte académico del siglo XVIII, todo con estilo y bravura. En 1904 viajó a
Nueva York con su esposa e hija para la primera de tres estancias prolongadas (1905, 1906, 1907),
donde realizó varias exposiciones individuales en la Knoedler Gallery. Shannon fue uno de los
retratistas irlandeses más notables del siglo XIX y XX, y sus obras están representadas en muchos
museos importantes, incluido el Metropolitan de Nueva York.

Ahora haciendo hincapié en la textura de la pintura, donde la tela es la mayor protagonista en el

lienzo. El gran vestido que utiliza la mujer que sostiene además un barco entre sus manos, junto
con las grandes telas detrás de ella y sobretodo la delicada naturalidad de la pose de la
protagonista y la facilidad y el lujo del uso del pincel, ubican al retrato de Shannon dentro del
contexto del naturalismo pictórico. Esta corriente de arte que comienza en el siglo XIX
mayoritariamente tiene como tendencia al reflejo más completo y absolutamente exacto de la
realidad en todas sus manifestaciones y detalles. En las artes visuales, esta tendencia se manifiesta
constantemente, de vez en cuando tomando forma en direcciones históricas concretas,
tendencias, escuelas, métodos creativos y técnicas de maestros individuales. El naturalismo se ha
utilizado con muchos significados diferentes. Se aplica predominantemente a la pintura y, en su
sentido más amplio, describe cualquier arte que represente un asunto real, más que religioso e
imaginario. Implica un estilo en el que el artista intenta observar y luego registrar fielmente el
tema que tiene ante sí sin idealización ni estilización deliberada.

Como explica Terry Smith es su texto “El arte contemporáneo”: “Hoy el arte está determinado de
una forma más profunda por su situación dentro de la contemporaneidad. Sin lugar a dudas, los
logros y los defectos del arte modernista, colonial y autóctono todavía plantean desafíos
ineludibles a la práctica actual, pero ninguno de ellos, por su cuenta o todos juntos, logra ofrecer
un marco capaz de abarcar en su totalidad los problemas de la práctica o la interpretación”. (Pág.
19)

En las anteriores líneas, el autor expresa que el arte en si ha sufrido cambios, donde el arte
contemporáneo de hoy esta determinado de otra forma respecto al arte que estamos analizando
en la obra de Shannon o en las demás que pronto profundizare.

“La contemporaneidad se manifiesta no sólo en la inaudita proliferación de arte, o en sus

variaciones aparentemente infinitas, sino ante todo en la emergencia y la confrontación de modos
muy distintos de hacer arte y de emplearlo para comunicarse con los demás”.

Nuevamente, Smith deja en manifiesto, la clara ruptura que hay entre el arte del 1800 y el arte
contemporáneo. Éste último, se mueve entre tres corrientes fundamentales, la primera se refiere
a las recompensas y los inconvenientes que traen aparejados la economía neoliberal, el capital
globalizado y las políticas neoconservadoras, la segunda hace referencia al giro poscolonial y la
tercera corriente hace alusión al cambio generacional. (Pág. 20,21)

Ahora, profundizando en las demás pinturas y comparándolas con la obra principal en cuestión (El
buque de plata), todas se ubican entre los años 1846 a 1906, agrupándolas todas dentro del
mismo movimiento pictórico de la época, el naturalismo. La primera pintura se titula “Doña Julia
Codesido Oyagüe de Mora”, del creador Raymond Monvoisin y realizada en 1846. El artista francés
se dedica se dedica al óleo, y con esta técnica abarca múltiples estilos: en el neoclasicismo de su
formación donde agrega un espíritu romántico y el naturalismo que emerge en América
controlado por un racionalismo estricto y tiende a ser un idealismo más tradicional. Ésta es la
pintura que mas se aleja de la obra anterior descrita en cuanto a los años, sin embargo, ambas se
sitúan dentro del mismo movimiento. Las dos obras son retratos de mujeres, y cumplen con
características similares en cuanto al estilo del lienzo. Se puede observar que en la obra de
Monvoisin utiliza una mayor amplitud de colores, pero, aun así, los estilos son parecidos.

En cuanto a la segunda obra, “Retrato del pintor Mochi”, del artista Alfredo Valenzuela Puelma
que data del 1885, se ubica más cercana a la fecha de la obra que analizamos en un principio.
Como se puede esperar, ambas obras se ubican dentro del mismo movimiento, al igual que la
pintura Doña Julia Codesido Oyagüe de Mora, y también el protagonista del lienzo es la de una
figura, pero en este caso una figura masculina. Los colores no son muy parecidos respecto a la
obra de Shannon, en este caso, el artista utiliza colores más claros, donde sigue siendo bien
definida la figura. Se cumplen las características del naturalismo, al expresar sin exageraciones el
objeto en cuestión, el cual, se basa en la filosofía de que solo las leyes de la naturaleza son válidas
para explicar el mundo y que el hombre está sujeto a un condicionamiento biológico y social
inevitable.

La tercera y última obra es del autor Raymond Monvoisin nuevamente, titulado “Retrato de José
Santos Tornero Montero” del año 1855. Este lienzo también se encuentra dentro del movimiento
ya descrito y concuerda con las especificaciones del movimiento. En este caso, es también un
retrato de una figura masculina, donde se puede observar la delicadeza del pincel al retratar a la
persona sin protuberancias o detalles de más. Los colores son más bien oscuros y con poca
luminosidad, pero siempre dejando a la figura como la protagonista.

Para concluir con este análisis, podemos destacar que las cuatro obras se destaca el movimiento
pictórico del naturalismo, donde se tiene como protagonista a figuras humanas. En los dos casos
primeros son figuras femeninas y en los dos últimos son de figuras masculinas. El movimiento del
naturalismo se tiene como principal característica retratar lo que observa el artista, por lo que la
influencia de elementos externos deberían quedar al margen de lo que se esta retratando.