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El documento habla sobre cómo mejorar la dicción al hablar en público. Explica que una mala pronunciación de palabras puede distorsionar el mensaje o hacerlo incomprensible. Sugiere que la lectura en voz alta es el principal ejercicio para resolver problemas de articulación y fortalecer los músculos de la boca, lo que lleva a una pronunciación más clara. Recomienda dedicar 10 a 15 minutos de lectura en voz alta tres veces por semana para empezar a notar una mejora en la dicción.
El documento habla sobre cómo mejorar la dicción al hablar en público. Explica que una mala pronunciación de palabras puede distorsionar el mensaje o hacerlo incomprensible. Sugiere que la lectura en voz alta es el principal ejercicio para resolver problemas de articulación y fortalecer los músculos de la boca, lo que lleva a una pronunciación más clara. Recomienda dedicar 10 a 15 minutos de lectura en voz alta tres veces por semana para empezar a notar una mejora en la dicción.
El documento habla sobre cómo mejorar la dicción al hablar en público. Explica que una mala pronunciación de palabras puede distorsionar el mensaje o hacerlo incomprensible. Sugiere que la lectura en voz alta es el principal ejercicio para resolver problemas de articulación y fortalecer los músculos de la boca, lo que lleva a una pronunciación más clara. Recomienda dedicar 10 a 15 minutos de lectura en voz alta tres veces por semana para empezar a notar una mejora en la dicción.
Dicción? ¿Cómo Mejorar Nuestra Dicción al Hablar en Público?
Si a la fecha has presentado algunos problemas de dicción cuando
debes hablar en público, sabrás muy bien que esta situación es al final de cuentas una barrera comunicativa; produce que nuestro mensaje se distorsione o bien, que simplemente no se entienda y con ello el sentido de hablar en público se pierde.
Para comenzar es necesario comprender, que con una mala dicción
nos referimos a una mala pronunciación de las palabras, tanto de consonantes como también de vocales, esto altera el mensaje y se presta para la ambigüedad –la posible interpretación del mensaje de distintas formas–, esto se enfatiza aún más en nuestro variado y rico idioma.
Es necesario mencionar, que el proceso para mejorar nuestra
dicción usualmente lleva algo de tiempo, no es instantáneo. Pero afortunadamente gracias a Dios, por caótico que parezca este problema, este tiene su solución y lo conseguimos principalmente por medio de ejercicios. La lectura, por ejemplo, nos ayuda a reconocer como se escriben y por lo tanto como se pronuncian las palabras, además claro, de la riqueza de vocabulario que esta buena práctica nos aporta. Para ilustrar este punto, se ha podido conocer como algunas personas dicen: “redondante”, en lugar de “redundante”, “redundancia”, el cadáver muerto de un difunto fallecido, como lo diría Chespirito =).
Por otro lado, también se encuentran personas con la dificultad
para pronunciar la “rr”, y por ello deben estar evitando palabras tan básicas como “desarrollo” “carretera” “perro” y aún más “ferrocarril”. La famosa confusión entre “concientes” y “conscientes” y la lista podrían continuar.
Para mejorar nuestra dicción, la lectura debe ser en voz
alta, este es el principal ejercicio para resolver nuestros problemas de articulación, así fortalecemos nuestro aparato bucal, incluyendo la lengua como principal miembro, y al mismo somos conscientes de nuestra propia pronunciación.
Asigna alrededor de 10 a 15 minutos tres días por semana para una
lectura en voz alta, con ello empezarás a notar una nueva nitidez en tu pronunciación.
Para ayudarte y bridarte más recursos relacionados al curso de
oratoria, te dejo con este video elaborado por Leandro Delgado: