Está en la página 1de 2

Había una vez un niño travieso, que

muy alegre le agradaba bailar.

Tenía un hermoso perrito sabueso,

que al pobre gatito hacía saltar Vivía


en una casita con chimenea, frente al mar.

La pequeña casita del perrito se

veía al pasar. Un día el niño salió

en su barquito a pase
divisó un pequeño bote de velas muy

bonito, y observó un bello cisne


sobre el agua del mar. Cuando
regresó, salió corriendo buscando a su

perrito; el perrito, al verlo, corrió

hacia él saltando. Al final del día, el

niño se sentó a descansar.


FIN

También podría gustarte