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DE CHIMBORAZO”
CÁTEDRA: Nefrología
DOCENTE: Dra. Nilvia Serrano
Los requerimientos diarios de cloro para un adulto son de 750 mg, proviniendo su
aporte sobre todo de los alimentos salados, frutas y vegetales, carnes procesadas y
vegetales enlatados. El cloro ingerido es absorbido casi totalmente en el intestino
(aparece una escasa cantidad en las heces) y se elimina por el sudor y sobre todo en el
estómago como ácido clorhídrico.
HIPERCLOREMIA
Concepto
Se denomina así el exceso de cloro en el líquido extracelular (Cl >106 mEq/L). Suele
asociarse a hipernatremia y a acidosis metabólica (dado que las concentraciones de
cloro y bicarbonato suelen estar relacionadas de forma inversamente proporcional).
Etiología
Entre las causas de hipercloremia se encuentran el aumento de la ingesta o la absorción
intestinal de cloro, la acidosis y/o la retención de cloro por los riñones. El aumento de la
ingesta dietética de cloro (generalmente en forma de cloruro sódico) suele conllevar un
aumento desproporcionado de la cloremia dado que además se favorece la pérdida de
agua, lo que eleva la hipercloremia aún más.
Finalmente, las situaciones que producen acidosis metabólica con anion-gap normal
conllevan una hipercloremia (acidosis tubulares renales, insuficiencia renal,
intoxicación por salicilatos e hiperaldosteronismo) así como la hipernatremia. Diversos
fármacos pueden inducir hipercloremia como la ingestión directa de cloruro amónico,
las resinas de intercambio iónico (que producen un intercambio en el intestino de
potasio por cloro) así como los fármacos inhibidores de la anhidrasa carbónica (que
impiden la eliminación renal de cloro).
La reanimación hídrica del paciente críticamente enfermo con solución salina a grandes
volúmenes es una de las principales causas que generan hipercloremia y
subsecuentemente acidosis metabólica hiperclorémica secundaria, siendo vistas en
pacientes con sepsis, politraumatizados y quemados.
Manifestaciones clínicas
La sintomatología de la hipercloremia son fundamentalmente los de la acidosis
metabólica como:
Taquipnea
Letargo
Astenia
Respiración de Kussmaul
Arritmia y coma.
En ocasiones se asocian edemas, hipertensión y otros signos de hipervolemia. Otros
síntomas pueden ser:
Diagnóstico
En la analítica encontraremos, además de la hipercloremia (Cl >106 mEq/L),
encontraremos hipernatremia (Na >145 mEq/L), acidosis metabólica (pH<7.35 y
Bicarbonato <22 mEq/L) con anion gap normal (8-14 mEq/L).
Ionograma
Gasometría arterial
Tratamiento
El tratamiento de la hipercloremia incluye la corrección de la causa así como aquellas
medidas encaminadas a restablecer el balance ácido-básico y electrolítico. Se restringirá
la ingesta de cloro y sodio, se administrará agua por vía oral. Se puede corregir la
acidosis metabólica mediante la administración de Ringer lactato que conducirá a su
transformación hepática en bicarbonato.
En los casos de hipercloremia severa, la administración de bicarbonato sódico IV
aumentará directamente la concentración de bicarbonato sérico, lo que facilita además la
excreción renal de cloro.
HIPOCLOREMIA
Concepto
Deficiencia del cloro en el líquido extracelular reflejado por un nivel de cloro sérico de
menos de 96mEq/L. Cuando los niveles de cloro sérico caen, los niveles de sodio,
potasio, calcio, y otros electrolitos pueden ser afectados. Si mucha cantidad de cloro y
sodio se pierde, puede ocurrir la alcalosis hipoclorémica.
Etiología
Generalmente, la causa más frecuente es la pérdida de cloro, bien a través del sudor, el
tracto gastrointestinal o el riñón, si bien puede ser causada por un ingesta deficiente de
cloro, como en los casos de administración de soluciones intravenosas carentes de cloro
(solución glucosada, por ejemplo) en pacientes en dieta oral absoluta y en personas con
dietas bajas en sal. Las pérdidas digestivas de cloro ocurren en los casos de vómitos
repetidos, diarreas, cirugía gástrica, aspiración continua de contenido gástrico,
ileostomía y fístulas. Las pérdidas renales suceden en los casos de tratamiento con
diuréticos, sobre todo los tiacídicos, y todas aquellas nefropatías pierde-sal. Las
situaciones de alcalosis metabólica, déficit de sodio y potasio, así como las alteraciones
hidroelectrolíticas en los casos de cetoacidosis diabética y la insuficiencia suprarrenal.
Manifestaciones clínicas
Los síntomas de la hipocloremia incluyen:
Irritabilidad
Agitación
Hiperactividad de los reflejos
Tetania
Hipertonicidad y calambres
Mareos
Arritmias cardíacas
Bradipnea
Coma
Parada respiratoria.
Diagnóstico
En la analítica generalmente encontraremos, junto a la hipocloremia (Cl <96 mEq/L),
hiponatreamia (Na <135 mEq/L) y alcalosis metabólica (pH >7.45 y bicarbonato >26
mEq/L).
Ionograma
Gasometría arterial
Tratamiento
El tratamiento de la hipocloremia se basa en el tratamiento de la causa de la misma, así
como el reemplazamiento del cloro tanto oral (con una infusión salina) o intravenoso,
mediante solución salina normal (suero fisiológico 0.9%).
Además, se deberán corregir las alteraciones iónicas asociadas como la hiponatremia, la
hipopotasemia y, en su caso, la alcalosis. Solo en los casos rebeldes al tratamiento con
suero fisiológico se puede plantear tratar con cloruro amónico.
Bibliografía
1. Luis Del Carpio-Orantes. Balance del Cloro [Internet]. ResearchGate. unknown;
2018 [cited 2021 Jul 29]. Available from:
https://www.researchgate.net/publication/329870997_Balance_del_Cloro
2. Hipocloremia - EcuRed [Internet]. Ecured.cu. 2021 [cited 2021 Jul 29].
Available from: https://www.ecured.cu/Hipocloremia