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Entre los parámetros físicos de evaluación del neonato (varones) que implicarían un
desarrollo motor normal se encuentra:
- El peso común entre varones está entre 2´6 y 4´5 kg.
- El perímetro craneal está entre 32´6 y 37 cm.
- Puntuación Apgar entre 7 y 10.
En la evolución y conquista del dominio motor podemos citar las siguientes leyes:
- Ley céfalo-caudal: Las partes que están más cerca de la cabeza se controlan
antes que las más lejanas.
- Ley próximo-distal: El desarrollo va desde la parte central del cuerpo hacia las
partes más lejanas.
- Ley de actividades en masa a las específicas: supone la tendencia a pasar de la
utilización de músculos grandes a los más pequeños.
- Ley de desarrollo de flexores y extensores: poseen primacía los movimientos
de los músculos flexores (la capacidad de coger objetos –flexor- es anterior a la
de soltarlos – extensores-).
1.1. Principales actos motores.
1.1.1. Los reflejos.
Reflejos inalterables a lo largo de toda la Fisiológicos: estornudos, tos, pupilar…
vida
Reflejos arcaicos (responsables de la Babinski: consiste en extender los dedos
supervivencia en los primeros meses de la del pie como en abanico cuando se
vida) estimula la planta.
Moro: Cuando al perder el sustento,
extiende y flexiona los brazos rápidamente.
Hozamiento o puntos cardinales: si
excitamos las comisuras de la boca gira la
cabeza para chupar el estímulo.
Reflejos que reaparecen como conductas Marcha: si colocamos al bebe en posición
aprendidas vertical sostenido por las axilas y sobre una
superficie dura efectuará un movimiento
similar a la marcha.
Subida de escalón: sostenido al bebé por
las axilas si estimulamos el empeine con
una superficie dura y fría efectuará un
movimiento como de subida de escalón.
Reptación: si colocamos al bebé decúbito
prono sobre una superficie dura y
horizontal.
Natación: si introducimos al bebé en un
medio acuático realiza un movimiento
rítmico y coordinado semejante al nado.
Reflejos que se transforman en Succión.
conductas voluntarias. Prensión: si estimulamos la palma del bebé
con un objeto cerrará la mano, por el
contrario si estimulamos el dorso la abrirá.
1.1.2. Los automatismos.
A- La presión. Desarrollo:
1ª Etapa 0-4 meses: Aparece primero la conducta refleja de prensión.
Al final de la etapa el reflejo de Grasping se va relajando y comienzan a
manifestarse los primeros signos de actividad voluntaria.
2ª Etapa 4-6 mes: Se da una coordinación entre lo visual y el espacio táctil. Hacia el
sexto mes ya es capaz de alcanzar los objetos con mayor precisión.
3ª etapa 6-10 meses: El niño ya es capaz de coger el objeto deseado.
Hacia el sexto mes se da una aproximación lateral y su prensión es palmar, el
objeto es cogido entre los últimos dedos y la palma.
Hacia el séptimo u octavo mes el codo se hace más flexible y comienza el uso del
pulgar. Ya es capaz también de pasarse un objeto de una mano a otra, con lo que la
exploración se hace más perfecta.
Hacia el noveno y décimo mes ya entran en juego las articulaciones del hombro,
codo, muñeca, mano y dedos. La toma del objeto se caracteriza por la utilización de
pinza, es decir, índice y pulgar opositor.
4ª etapa: esta capacidad que ha adquirido el niño le servirá de base para aprender
actos más complejos y destrezas (utilizar la cuchara, beber en taza, etc.)
B- La locomoción.
La locomoción evoluciona de forma ordenada, siguiendo la ley cefalocaudal.
1ª etapa 0-5 meses: Desde el nacimiento hasta el 5º mes se va obteniendo un control
postural de la parte superior del tronco que permite al niño pasar de la posición tumbada
a elevar el pecho, estar sentado con ayuda en la espalda y agitar las piernas.
2ª Etapa desde el 5º mes: Adquiere un control postural del tronco y las piernas y ya es
capaz de sentarse solo, ponerse de pie con ayuda y rodar sobre el costado.
3ª etapa: El niño lleva a cabo esfuerzos para desplazarse y avanzar reptando sobre el
vientre.
4ª etapa hacia los 10 meses: El niño ya es capaz de ponerse de pie ayudándose de
objetos que se encuentran en sus desplazamientos por reptación.
5ª etapa: En esta última etapa se da un control del equilibrio y coordinación de la
marcha, primero con ayuda y posteriormente solo. Los primeros pasos son inseguros:
piernas separadas, pies que se elevan mucho, el cuerpo inclinado hacia delante y los
brazos extendidos. Parece que el niño está preparado para protegerse de posibles caídas,
progresivamente irá adquiriendo más control, y puede decirse que la marcha está
definitivamente automatizada alrededor de los 3 años; el ritmo, equilibrio, alternancia
de brazos y velocidad serán casi perfectos al final de la etapa infantil.
c- El control postural:
- Control muscular de la cabeza y cuello: El RN puede girar la cabeza hacia
ambos lados estando boca arriba. Con un mes eleva un poco el mentón y gira la
cabeza para apoyarla sobre el otro lado de la cara. El levantar la cabeza entre 45
y 90º cuando está boca abajo lo conseguirá hacia los 3 meses.
El sostén cefálico total cuando está sentado lo conseguirá hacia el 4º mes, y el
levantar la cabeza cuando está boca arriba hacia el 5º.
- Girar el cuerpo sobre sí mismo: a los 5 meses boca arriba es capaz de ponerse
boca abajo y el giro inverso será posterior.
- Mantenerse sentado solo: un buen tono muscular le permitirá sentarse sin apoyo
al término del 7º mes. Las pérdidas de equilibrio enriquecen los reflejos de
caída.
d- El tono muscular:
El niño al nacer presenta un grado de hipertensión en los miembros e hipotonía en el eje
corporal. Por el tono axial que se manifiesta en el tronco y la cabeza se observa que la
musculatura del cuello es insuficiente para mantener el peso de la cabeza, se observa
también una ausencia de control en los músculos vertebrales y lumbares para tener
erguida la espalda. En cuanto a las miembros, brazos y piernas, cuando el niño está
sentado o tumbado no puede extender los miembros superiores e inferiores, y se da una
rigidez en la flexión de los mismos. Esto da como resultado la posición característica
del recién nacido, conocida como postura fetal.
A medida que va madurando el sistema nervioso, va llevando a cabo el control del tono
muscular, y por tanto de la postura, el equilibrio y los movimientos.