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UNIVERSIDAD DEL CARIBE

TEMA

ASIGNATURA

SUSTENTANTE

SANTO DOMINGO D, N .REPUBLICA DOMINICANA


2019
INDICE

INTRODUCCIÓN...........................................................................................................2

Antecedente de la extradición........................................................................................3
Conceptos de extradición..............................................................................................4
Tipos de extradición en República dominicana.............................................................8
La extradición activa......................................................................................................8
La extradición pasiva.....................................................................................................8
Tratados de extradición más importantes firmados por la República Dominicana.....10
Extradición más trascendental firmada por la República Dominicana........................13

CONCLUSIÓN.............................................................................................................18
BIBLIOGRAFÍA...........................................................................................................19
INTRODUCCIÓN

En este trabajo haremos una breve revisión con todo lo relacionado con la
Extradición.

La extradición en la República Dominicana está regulada por el Código Procesal


Penal, la Convención de Palermo y los Tratados de Extradición Bilaterales
firmados entre los Estados.

La extradición es el procedimiento judicial (penal-administrativo) por el cual una


persona acusada o condenada por un delito conforme a la ley de un Estado es
detenida en otro Estado y devuelta al primero para ser enjuiciada o para que
cumpla la pena ya impuesta.

Si bien existe una cooperación internacional muy activa para la represión de los
delitos, continúa existiendo la regla de que un Estado está obligado a conceder la
extradición de un delincuente extranjero, solamente si existe tratado internacional
con el Estado requirente o Convención Internacional sobre extradición, de la que
ambos estados sean firmantes. Cuando no hay tratado o convención internacional,
el Estado requerido está facultado para acordar la extradición, pero no está
obligado a concederla. Sin embargo la obligación señalada no es absoluta pues
siempre el estado requerido conserva la facultad soberana de no conceder la ex-
tradición si de acuerdo a su legislación interna no se cumplen los requisitos
establecidos para tal efecto.

Posteriormente incluiremos las definiciones que nos brindan los diferentes autores
sobre el concepto de extradición desde la perspectiva del Derecho Internacional
Público.

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Antecedente de la extradición

La extradición, imaginada como institución jurídica, ha sido manejada y analizada


desde hace mucho tiempo. Ya en la Antigüedad y en la Edad Media, se
concretizaban técnicas de entrega de personas por la comisión de delitos
cometidos en otros territorios distintos de los Estados solicitados.

El profesor Leoncio Ramos, especifica que la misma fue usada en tiempos


remotos, y se cita un acuerdo relativo a ella concertado entre Ramsés II con el
Príncipe Cheta, tratado contenido en un instrumento diplomático de tiempos de
Moisés, y en virtud del cual ambos soberanos se enredaban a entregarse
recíprocamente los delincuentes súbditos del Estado peticionario, y a tratarlos con
indulgencia. También fue conocida y usada formula el mismo autor- en Grecia y
Roma.

Conviene destacar, en igual forma, el tratado de extradición suscrito en el año


1836 entre el Príncipe Benevento con los magistrados de Nápoles, y el suscrito
entre el Emperador Lotario y Venecia en el año 1840. El auge de la extradición se
produce, sin embargo, durante los siglos XVIII y XIX, cuando se generan múltiples
tratados entre los distintos Estados en el contexto de las relaciones
internacionales. Esto luego del proceso histórico de surgimiento de los Estados
Nacionales Europeos.

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Así lo explica Arroyo Gutiérrez al plantear que

“La modernidad hizo surgir los Estados nacionales europeos (siglos XVI, XVII y
XVIII), unidades políticas fuertes, centralizadas y jurídicamente delimitadas, que
propiciaron un nuevo clima para el desarrollo de instituciones como la entrega de
fugitivos, pero se conservó el carácter eminentemente político de esas entregas.
El puro capricho arbitrario y deseos de venganza de los señores feudales, fue
sustituido por eufemismos como “la razón de Estado” o “el deber internacional”,
tras de la cual se escondía la verdadera razón: perseguir y eliminar enemigos
políticos.”

En este contexto, la Revolución Francesa de 1789 pone en el centro de la disputa


los derechos del hombre y, por esa vía, en torno al Derecho Internacional y a la
extradición, la necesidad de precisar la persecución política susceptible del
derecho de asilo y el seguimiento por delincuencia común, propia de la
extradición. Ya el convenio de 29 de septiembre de 1765 entre Carlos III de
España y Luis XV de Francia, habla de la entrega del malhechor común por faltas
graves, pero perpetuamente sin excluir la entrega por razones políticas.

Pero no es sino hasta el siglo XIX y con el informe de la Revolución Francesa y el


moderno Estado de Derecho que, a partir del “Tratado de Paz de Amiens” (1803)
entre Francia, España e Inglaterra, donde manifiestamente se habla de
delincuencia común y no se alude la política y, a partir de la Ley Interna Belga del
1 de octubre de 1833, se perfecciona la estructura formal y material de las leyes

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de extradición actuales, referidas únicamente a la entrega de delincuentes
comunes y expresamente preciso del perseguido por razones políticas.

El proceso de extradición se ha edificado a través de la historias sobre múltiples


premisas doctrinales. Dicho principio se desarrolla, de acuerdo a como lo
establece en su gran mayoría la doctrina jus-internacionalista, en el recuadro de la
concepción de una disposición internacional conformado por los Estados.

Conceptos de extradición.

La extradición se podría definir como la entrega del acusado de un hecho punible,


para ser juzgado, mediante la petición de un Estado, donde el delito se consumó,
hecho por aquel Estado en que buscó refugio.

Para otros autores la extradición no es más que un simple acto material de


entrega del culpable, la cual se considera que lo que está en esparcimiento no es
la eficacia de un fallo judicial privativo de libertad, sino la locución misma de la
jurisdicción del Estado.

La procedencia de la extradición proviene de la palabra TRADITIO, que representa


tradición, es decir, el traspaso de la cosa, de forma que el traditio es la esencia de
esta creación, se ubica el fugado para que sea apresado por el gobierno donde se
refugiado y entregado al Estado que lo requiere para castigarlo, florecería
entonces EXTRADITIO.

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De esta manera se subraya la lucha frente al delito como lo dijera Cesar Becaria:
La seguridad de no hallar ningún lugar en la tierra donde el crimen pueda persistir
impune seria el medio más poderoso para prevenirlo. Esta institución se basa en
la necesidad de que los Estados se auxilien recíprocamente con el fin de que la
justicia punible quede compensada, a través de la extradición se da una verdadera
cooperación de los Estados que median parar asegurar de esta forma la aplicación
de la ley y que el delito no quede arbitrario.

Para la Suprema Corte de Justicia de la República Dominicana la extradición debe


ser concebida como el procedimiento de entrega que un Estado realiza a otro, de
una persona inculpada, acusada o procesada por un crimen o delito de derecho
común quien se halla en su territorio, para que en el secundario país se le enjuicie
penalmente o se establezca una pena, procedimiento realizado conforme a
normas establecidas de valide dentro del derecho interno de un Estado en el
ámbito del derecho internacional, atendiendo a los compendios de colaboración y
correlación entre los Estados.

En fin, la extradición, no es más que la entrega coercitiva de una persona buscada


por un Estado y efectuada por el Estado que absorbe esa solicitud. La extradición
de un individuo implica en todos los casos un proceso penal y el cumplimiento de
una pena privativa de libertad.

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Hay que diferenciar visiblemente entre la expulsión y la extradición, ya que aunque
lograran parecerse, en el sentido de que envuelven un destierro de un territorio
determinado y la dificultad o privación de persistencia en una exclusiva
jurisdicción, tienen tipologías absolutamente diferentes.

La extradición es una resolución jurisdiccional de que entrega una persona a un


Estado extranjero, para que sea procesado. Lo que implica la coexistencia de un
proceso y un credencial judicial, refrendada o fundada en tratados internacionales
de cooperación judicial.

La expulsión, es una disposición de política, que consiste en sacar del país o


poner afuera de sus fronteras a personas que trascienden o acontecen en
inconvenientes para las autoridades de turno, bajo el pretexto de ser perniciosos
para la sociedad o el gobierno. Esta medida solo es adaptable a extranjeros y es
un absoluto imperativo de nacionalidad.

La figura de la extradición aparece señalada en el artículo 160 del Código


Procesal Penal y es significativo señalar aquí desde el principio, que estas
disposiciones, predominante inauguran entre nosotros un modo de proceder
definitivamente novedoso, circunstancia que emprenderemos.

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La extradición se rige por la Constitución, las normas de los tratados, convenios y
acuerdos internacionales adoptados por los poderes públicos y su ley especial, en
aquello que no se oponga a este código.

Se puede mencionar, los tratados internacionales, las leyes de cada país, la


costumbre y sus jurisprudencias.

El tratado de extradición de más categoría e importancia que se ha firmado en la


República Dominicana, es el de los Estados Unidos de Norteamérica, aprobado
por resolución del congreso nacional en noviembre del año 1909, y permanece
vigente desde el 1910 hasta hoy entonces.

Hay que resaltar que todo procedimiento de extradición dispone la existencia de


dos condiciones fundamentales que son la de una infracción y la de un agente
incriminado.

Desde el año 1969 hasta el año 2004, el procedimiento de extradición de la


República Dominicana, era de carácter administrativo, pues la Ley 489, concedía
competencia y mando único y meramente al Poder Ejecutivo para resolver en todo
lo relativo a esta materia, por lo cual toda investigación y averiguación le estaba
concedida al Procurador General de la República, quien mediante interrogatorios,
establecía la procedencia o no de tal pedido.

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Favorablemente este es un escenario concluyentemente superado y a partir de la
entrada en vigencia de las habilidades del Código Procesal Penal, se ha
judicializado la manera de extradición en la República Dominicana disponiendo en
el artículo 164 todo lo concerniente a este tema.

Recibida la solicitud de extradición por la Cámara Penal de la Suprema Corte de


Justicia, se convoca a una audiencia oral dentro de los treinta días siguientes a la
notificación dirigida al solicitado. A esta audiencia concurren el imputado, su
defensor, el ministerio público y el representante del Estado requirente, quienes
exponen sus alegatos. Concluida la audiencia, la Suprema Corte de Justicia
decide en un plazo de quince días.

Igualmente y por tratarse en el caso de la especie, de todo un proceso judicial,


perpetuo al solicitado de acuerdo a las conjeturas normales de los procesos
penales de los tribunales, solo que frente a la Cámara Penal de La Suprema Corte
de Justicia, es viable que el Estado requirente escoja para este procedimiento
especial su adecuado abogado.

Los Estados extranjeros pueden designar un abogado para que defienda sus
intereses en este procedimiento.

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La entrada en vigor de la Normativa Procesal Penal, la forma de extradición en la
República Dominicana se judicializó, pues es la Suprema Corte de Justicia,
individualmente la Cámara Penal, la que ahora tiene capacidad y atribuciones para
ventilar sobre la naturaleza o no de la misma.

Tipos de extradición en República dominicana.

En la República Dominicana existen dos modalidades de extradición que son la


activa y la pasiva.

La extradición activa

Este tipo de extradición es aquella que es relatada al Estado donde habite o se


encuentre la persona solicitada, por parte de los mandos de la República
Dominicana. A proporción de nuestro Código Procesal Penal, lo establece de la
siguiente manera:

Cuando se tiene noticias de que un imputado respecto del cual se ha presentado


la acusación y se ha dictado una medida de coerción privativa de libertad, se halla
en país extranjero, el juez o tribunal competente tiene la facultad de ordenar el
trámite de su extradición, a petición del ministerio público o de las partes. La
Secretaría de Estado de Relaciones Exteriores certifica y hace las traducciones
cuando corresponda, y presenta la solicitud ante el gobierno extranjero en el plazo
máximo de dos meses.

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La extradición pasiva

La pasiva es la que se verifica, en aquellos casos en que es a los mandos de la


República Dominicana, a los que se les hace conveniente la solicitud.

La solicitud de extradición de una persona que se halle en territorio de República


Dominicana debe ser remitida por el Poder Ejecutivo a la Suprema Corte de
Justicia para que ésta decida lo que corresponda.

De aquí en lo adelante, por razones atendibles, nos referiremos únicamente a la


Extradición Pasiva, por ser ésta aquella sobre la que instituyen nuestras
instituciones y asimismo la que genera el procedimiento de extradición
debidamente dicho.

Hay que destacar de aquellos casos en que el solicitado en extradición decide


acogerse espontáneamente al pedido, debido a que en estos casos, se desecha
del trámite ordinario, estando por comprobarse únicamente la libertad y sabiduría
del consentimiento.

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Hay que destacar que la extradición activa cuando se tiene noticias de que un
imputado respecto del cual se ha mostrado la acusación y si se ha mandato una
medida de coerción exclusiva de libertad, se haya en un Estado extranjero, el juez
tiene la facultad de establecer el trámite de su extradición, a cuestación del
Ministerio Público o de las partes del proceso.

El Ministerio de Relaciones Exteriores auténtica y hace las traducciones cuando


incumba, y muestra la solicitud ante el gobierno extranjero en el término máximo
de dos (2) meses.

De igual modo la extradición pasiva cuando se encuentra en la República


Dominicana, y debe ser enviada por el Presidente de la República Dominicana a la
Cámara Penal y de la Suprema Corte de Justicia, para que esta concluya si se
inicia etapa de judicialización.

Hay resaltar que no menos importante de las facultades que tiene la Cámara
Penal de la Suprema Corte de Justicia, la propia puede establecer la aplicación de
medidas de coerción, en correspondencia a la persona pedida en extradición,
siempre que se solicite la existencia de un dictamen o de una orden, se establezca
con luminosidad la naturaleza del hecho punible y que se trata de un caso en el
cual provenga la prisión preventiva.

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En cuanto al semblante de la legislación puramente local, la extradición está
comprendida en la ley 489 del 22 de octubre del 1969, reformada por la ley 278,
del 29 de Julio de 1998.

Tratados de extradición más importantes firmados por la


República Dominicana.

La República Dominicana ha firmado numerosos tratados de cooperación


internacional, relacionada con la extradición, desde el año 1874 con la República
de Haití hasta hoy en día, que recientemente se firmó un nuevo acuerdo con los
Estados Unidos de América.

El acuerdo de Paz, Amistad, Comercio, Navegación y Extradición suscrito en


Puerto Príncipe, capital de Haití, por los diplomáticos y el Presidente Ignacio
González el día nueve de noviembre de 1874 fue el primer experimento
diplomático entre la República Dominicana y la República Haití, de solucionar sin
las armas las diferencias relativos a los asuntos fronterizos entre los dos países.

El Tratado entró en vigor el ocho de febrero de 1875, destacando el artículo 2 el


objetivo primordial del Tratado: habrá paz perpetua y amistad franca y leal entre la
República Dominicana y la República de Haití, así como los ciudadanos de ambos
Estados, sin excepción de personas y lugares .

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De acuerdo con el acuerdo en su artículo 12, Haití, colocaría a disposición de la
República Dominicana, el aditamento de 150,000.00 pesos en efectivo, para fines
de estudios estadísticos y tal pago por los perjuicios económicos producidos por
Haití.

Otro aspecto encantador del Tratado en su artículo 11, es el adeudo de ambas


naciones por edificar el llamado camino de hierro que acoplaría a Haití con
República Dominicana, lo que se nombra en la actualidad Autopista Internacional,
la cual está partida por las Aduanas de entrambos países. En la actualidad es la
grafía más rápida de los dos países comunicarse, lo que transgrede en el
comercio.

La importancia del Tratado convive en las regulaciones entre los dos países, lo
que palpaba el Estado de paz, el comercio, los nacionales, regulación de la
navegación y el aspecto diplomático, reconociendo en los artículos 25, 26, 27 y
28, donde se plantea la inmunidad de los agentes diplomáticos y el acatamiento
de los archivos de los consulados, adelantándose en este semblante a la
Convención de Viena de 1962 sobre Asuntos Diplomáticos.

Sin embargo, por una cadena de inconvenientes el acuerdo no surtió el resultado


esperado, razón por la cual los dos países firmaron una serie de protocolos y
acuerdos, que obtuvieron hasta el gobierno de Trujillo.

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Pero hay que destacar que el tratado de mas importante firmado por la República
Dominicana es con los Estados Unidos, esto se debe a que las ciudadanos
dominicano se van a residir para ese país debido a la situación de que se obtiene
empleo de una forma más rápida. El tratado de la República Dominicana y
Estados Unidos se firmó el 19 de junio de 1909, la cual el mismo que entró en
vigencia 1910. El mismo es de gran importancia ya que todo viajan para hay ese
país por la situación económica

El Tratado acuerda las infracciones por las cuales se concederán a los fugitivos
que se alberguen en uno y otro Estados. Podemos citar entre esas
contravenciones el asesinato, tentativa de asesinato, bigamia, incendio, piratería,
aborto, violación, comercio carnal con menores de 12 años.

Como es lógico sospechar para la época en que se firmó el Acuerdo no existía el


delito de Tráfico Ilícito de Narcóticos, con la extensión que ha logrado en estos
días.

El Acuerdo entonces se suple de la Convención de las Naciones Unidas en contra


el Tráfico Ilícito de Narcóticos y Sustancias Controladas, de 1988, y ratificada por
República Dominicana en 1993 y nuevamente ratificada el 12 de enero 2015.

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Los artículos del 6 al 11 perfeccionan todos los aspectos sobre la extradición por
la infracción de tráfico ilícito de drogas estimulantes.

La República Dominicana ha firmado acuerdo de cooperación internacional con


muchos países tanto del continente americano, el europeo y el asiático, dentro de
los países que se pueden mencionar que han firmado acuerdo con la República
Dominicana y se mantienen vigentes hasta hoy, están los siguientes:

República de China

Chipre

Dinamarca

Ecuador

El salvador

España

Estados Unidos de América

Federación de Rusia

Filipinas

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Finlandia

Francia

Guatemala

Italia

República Helénica (Grecia)

Rumania

Soberana orden de malta

Suecia

Suiza

Trinidad y Tobago

Ucrania

Uruguay

Venezuela

Vietnam

Yamahiria arabe libia popular socialista

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Yugoslaviam, entre otros países.

Extradición más trascendental firmada por la República


Dominicana.

En la República Dominicana se han extraditado varias personas a distintos países,


pero más a los Estados Unidos de América, ya que los malhechores cometen más
delitos en dicho país debido a la gran población de dominicanos que reside en ese
país.

El acuerdo de gran relevancia e importancia fue el que ocurrió con Quirino Ernesto
paulino Mediante el decreto 103-05, del Presidente Leonel Fernández que acogió
la sentencia de la Suprema Corte de Justicia, la cual ordenaba la extradición a
Estados Unidos del ex capitán, denigrado de traficar con 1,387 kilos de cocaína a
dicho país.

La entrega en extradición se disponía en el entendido de que Paulino Castillo bajo


ninguna ocurrencia se le impondrá la pena de muerte, en el caso de que se
evidenciare su culpabilidad respecto de las contravenciones por las cuales ha sido
extraditado y deberá ser juzgado.

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Uno de los fundamento del decreto refiere que el gobierno de los Estados Unidos
de América a través de su embajada confirmada en el país, mediante su nota
Diplomática número 04 de fecha 11 de enero de 2005, ha preciado del Gobierno
Dominicano, el desembolso en extradición del propuesto Quirino Ernesto Paulino
Castillo.

El decreto presidencial que entre los Estados Unidos de América y la República


Dominicana se suscribió y confirmó un Tratado de Extradición en el año 1910, el
cual en su Artículo Vll concede a las altas partes contratistas, la facultad de
trasladar a sus nacionales.

Añade que la cooperación internacional de la especie fue solicitada, en fecha 11


de enero 2005, al auxilio del instrumento internacional ya mencionado, el cual es
vinculante entre los Estados partes.

Otro de los motivo afirma que la Cámara Penal de la Suprema Corte de Justicia
expresó como regular y válida en cuanto a la forma y el fondo dicha preocupación
de extradición y puso a cargo del Procurador General de la República la diligencia
y ejecución del fallo.

Hay que destacar que se considera de gran importancia para el país ya que el ex
capitán, Quirino Ernesto Paulino, era perseguido por la DEA y era de gran

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importancia porque pertenecía a una mafia de gran poder en dicho Estado Unidos,
la cual habían introducido más de 10,000 toneladas de droga .

Tras el arresto de del ex capitán Castillo, más de 60 dominicanos que se


consideran parte importante de la red del ex capitán de éste fueron detenidos y
subsiguientemente extraditados, Lidio Nin Terrero, Eduardo Rodríguez
(Eduardito), José Ramón Ortega, Erwin Méndez, César Bueno, y Tirso Cuevas
Nin. Incluyendo además algunos familiares de Castillo como la esposa y los hijos
de éste.

Hay que resaltar que no menos importante fue la extradición del dominicano
Ramón Antonio del Rosario Puente, mejor conocido como Toño Leña, la cual fue
condenado a 72 meses de prisión luego de admitir su culpabilidad en la
importación de cinco kilos de cocaína o más y un kilogramo o más de heroína .

Toño Leña, también conocido como El Palo, El Tronco y El Bate, se expresó


culpable luego de llegar a un convenio con la Fiscalía, pero las condiciones de
dicho acuerdo se conservan en la confidencialidad.

Hay que destacar que Leña era quien tenía las relaciones en Suramérica. Era
quien trasladaba la droga para República Dominicana según la DEA, y expresaron

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que un tipo muy importante para el área del Caribe durante una entrevista para el
periódico el Día.

Toño Leña habría contrabandeado con toneladas de cocaína, se establece que


aunque no tiene un número específico sobre la cantidad traficada por Toño Leña
hacia Puerto Rico, la misma oscila entre 10 mil y 20 mil kilos de cocaína durante
los diez años de mayor actividad del capo.

En el año 2010, fue apresado Yubel Enrique Méndez (Oreganito), y


posteriormente fue extraditado   a  los Estados Unidos.

Alegadamente  Oreganito” participó en la distribución de más de 1,000 kilos de


cocaína desde el año 2002  al  2005.

Yubel Enrique Méndez, era la mano derecha del narcotraficante José David
Figueroa Agosto, se recuerda que este resultó baleado por desconocidos durante
un tiroteo en el parqueo de Plaza Lama, ubicado entre las Avenidas 27 de Febrero
y Winston Churchill, 7 de mayo del 2015.
El procurador general de la República, en ese momento, Francisco Domínguez
Brito, manifestó que el ex narco herido no tiene cuentas pendientes con la justicia
dominicana, debido a que cumplió condena en los Estados Unidos y que regresó
al país igual como lo hizo Quirino Ernesto Paulino, luego de haber sido entregado
a las autoridades norteamericanas.

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CONCLUSIÓN

Es también norma corriente para la extradición, que si el delito que motiva su


solicitud tiene una pena menor en la nación requerida, no se imponga por los
tribunales del país requirente una pena mayor, e incluso que la pena sea sustituida
por la inmediata inferior.

Por tanto, y en atención a lo antes expuesto se puede decir que la extradición es


el procedimiento por medio del cual una persona imputada o sancionada por un
delito conforme a la ley de un Estado, es detenida en otro y restituida para ser
procesada o para que cumpla la pena ya impuesta.

Es necesario enfatizar, que si bien existe una colaboración internacional muy


activa para la detención de los delitos, continúa existiendo la regla de que un
Estado está obligado a conceder la extradición de un delincuente extranjero,
solamente si existe tratado internacional con el Estado que requiere la extradición.
Cuando no hay tratado, el Estado requerido está facultado para acordar la
extradición, pero no está obligado a concederla.

La extradición constituye una de las manifestaciones más tangibles de solidaridad,


que hace que los países se unan en la lucha contra el crimen. Es un acto por el
que un Estado hace entrega a otro de una persona inculpada o condenada por la

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comisión de infracciones de índole criminal, que se encuentra en el territorio del
primero, para que el Estado requirente la juzgue o haga cumplir la sentencia
impuesta. Implica un acto de asistencia judicial internacional regido por una serie
de principios, plasmados en los tratados internaciones, y a falta de éstos por las
leyes internas de los países.

Es un principio tan indispensable en nuestros días, que sin su existencia tanto el


Derecho Internacional como el Derecho Penal nacional de cualquier país se verían
incompletos.
BIBLIOGRAFÍA
 Basado en el secuestro criminal cometido por los particulares, del vii curso
internacional de criminologia, del expositor: dr. Juan francisco monclus
contreras, santo domingo, d. N. Rep. Dom. 2006

 Código Penal Dominicano

 Arias Núñez, L. (1998) “La Extradición, Interpretación y Aplicación en


República Dominicana”, Edición Carol.

 Arroyo Gutierrez, José Manuel, “La Extradición: nociones y principios


generales”, en “Ciencias

 Artículo 1 de la ley 314 orgánica de la secretaria de Relaciones Exteriores.

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