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Juicios Ejecutivos y

Procedimientos Especiales
Tercerías y abandono de procedimiento ejecutivo
Al hablar de tercerías se refiere a la intervención de cualquier tipo tercero en el procedimiento; un
tercero puede ser o no interesado, interesados pueden ser coadyuvantes, independientes o
excluyentes, mientras que los no interesados pueden ser peritos, testigos o receptores. Los
interesados son aquellos quienes les interesa el resultado del juicio, mientras que a los no
interesados no.
Las tercerías se pueden entender en un sentido amplio o restringido, amplio supone que cualquier
intervención que tenga el tercero en el procedimiento es una tercería, mientras que en el sentido
restringido se habla de tercería cuando interviene el terceto en el procedimiento ejecutivo porque
tiene derecho que la ley reconoce.
Las tercerías se encuentran reguladas en el CPC, y si bien en código no señala explícitamente cual
es la naturaleza jurídica de la tercería, se entiende de acuerdo a la doctrina que hay que distinguir
entre tercería de dominio u otras tercerías, si estamos frente a una tercería de dominio
entendemos que su naturaleza jurídica es una sentencia definitiva porque es el mismo CPC el que
señala que a este tipo de tercerías se le va a “aplicar” el procedimiento ordinario para su
tramitación, pero sin la duplica y la réplica. Mientras que, en el otro tipo de tercerías, ya sea
posesión, prelación o pago, se le aplica necesariamente las reglas de los incidentes; entonces por eso
se dice que en este caso es una sentencia interlocutoria.
Tercería de dominio
Acto jurídico procesal que realiza un tercero en donde el reclama en contra del embargo de un bien
que es de su dominio. Su finalidad es que se excluya el bien embargado, es decir que no sea
rematado o vendido. Su fundamento se da en que la persona que invoca la tercería, lo hace en contra
de un simple tenedor o poseedor de la cosa, entonces el alega su dominio en contra de ella.
La oportunidad para invocarla (desde cuando hasta cuándo) se da desde que se trabó el embargo, y
en el hasta se debe distinguir en si es un bien mueble o inmueble; en un bien mueble es hasta antes
de la adjudicación del martillero y en uno inmueble hasta antes del acta de remate. Es importante
distinguir porque se entiende que en la traba del embargo eventualmente la persona podía recuperar
la cosa, luego la cosa ya se encuentra susceptible de ser rematada.
La tramitación de la tercería de dominio es distinta de las otras tercerías, se tiene que tramitar en un
cuaderno separado y se le aplican las normas del procedimiento ordinario salvo la replica y la
duplica, porque se busca que sea un proceso más expedito. Al interponer la tercería se abre lo que es
el “cuaderno de tercería” (recordemos que en el procedimiento ejecutivo tenemos el cuaderno
principal, el de apremio y en este caso el de tercerías).
Para revisar los efectos que genera el interponer una tercería primero hay que distinguir entre el
cuaderno ejecutivo y el de apremio. El cuaderno ejecutivo no se suspende, porque al tercerista no le
importa si se continua o no con el procedimiento. Mientras que el de apremio la regla general es que
no suspende, se continua el procedimiento, salvo si esa tercería se está haciendo valer en razón de
un instrumento publico otorgado con anterioridad a la fecha de la presentación de la demanda
ejecutiva. Importa suspender el cuaderno de apremio porque así no se remata el bien del que se
alega el dominio.
Si se acepta la tercería de dominio, el bien va a ser excluido porque se esta reconociendo el dominio
de este tercero sobre el bien. En el caso que no se acepte, no se va a restituir el bien a dicho tercero.
En el caso de que no se alcance a resolver esta tercería y el bien se remata (porque faltó acompañar
dicho instrumento publico previo por ejemplo), el tercerista debería dirigirse contra el poseedor, en
este caso el ejecutado pues a él se le embargó el bien, para que este le restituya el bien que ha sido
despojado de su propiedad.
Esta tercería es muy difícil de probar (el dominio), y por ello se creó la tercería de posesión.
Tercería de posesión
Inicio como una creación jurisprudencial, pues al ser tan difícil probar el dominio de los bienes
embargados, para facilitar la prueba del tercerista se creó la tercería de posesión.
Es un acto jurídico procesal de un tercero que reclama en el procedimiento ejecutivo que él tiene la
posesión respecto del bien embargado, por lo que busca que se alce el embargo. Es muy parecida a
la tercería de dominio, siendo sus finalidades las mismas, que se excluya el bien del embargo. Al
probar la posesión se presume el dominio. El fundamento es que el poseedor intenta la tercería
porque el ejecutado a quien le embargaron el bien es solo el mero tenedor de la cosa, o sea que la
tenia en nombre y lugar de otro y por ende no debió ser embargada la cosa. La oportunidad de
hacerlo valer es igual a la de la tercería de dominio.
En cuanto a la tramitación, esta es distinta de la de dominio pues el legislador le otorgo una
tramitación ordinaria, mientras que a la de posesión, prelación y pago le otorgó una tramitación
incidental. Una vez que se presenta la tercería el tribunal tiene que dar traslado para que la parte
haga valer sus derechos pertinentes y por ende se debe tramitar conforme al articulo 81 y sgts del
CPC.
En cuanto a sus efectos, nuevamente se distingue entre el cuaderno ejecutivo y el de apremio. El
cuaderno ejecutivo no se suspende, por la misma razón que en la tercería de dominio. El cuaderno
de apremio si le interesa que se suspenda pues es el que está destinado (13:29) a la realización de
los bienes para obtener el pago de la deuda; entonces por regla general este cuaderno no se
suspende, salvo que se acompañen antecedentes que constituyan a lo menos una presunción grave
de la posesión que se invoca. El segundo efecto es la ampliación del embargo, porque
eventualmente si se acoge la tercería, el bien estaría fuera del embargo y significa que el ejecutante
tiene menos bienes sobre los cuales realizar un remate y obtener el pago de deudas. Con la
ampliación del embargo se pueden incorporar nuevas cosas para que al momento de rematar los
bienes se pueda pagar la deuda.
Tercería de prelación
Al hablar de tercería de prelación, nos referimos a que hay un tercero que busca que se le pague
preferentemente con el producto que se obtenga de la realización del bien, pues esta persona alega
que tiene una preferencia para que se le pague, es decir un crédito de mejor derecho. Como sabemos
las únicas causas de las preferencias son el privilegio y la hipoteca.
La finalidad es distinta de las anteriores, acá si interesa que el bien esté embargado y rematado; lo
que se busca es el pago preferente. El fundamento es que se respete las normas de la prelación, de
su crédito de mejor derecho, lo cual se regula en el artículo del 2465 y sgts del Código Civil.
En esta tercería, la oportunidad de interposición es desde la interposición de la demanda ejecutiva
hasta antes del pago del crédito, pues si ya se pagó no hay saldo para pagar la deuda.
Los requisitos para interponerla son:
- Que sea un 3ero
- Hacer valer crédito ejecutivo
- Preferencias que señale la ley (la mas común es la hipoteca)
- Acompañar el titulo en que consta el crédito
La tramitación de la tercería es de forma incidental, necesariamente le tribunal deberá darle traslado
a la parte contraria, pero en el plazo respectivo, el tribunal debe resolver, ya sea que la parte
contraria se pronuncie o no (parte contraria será el ejecutante y el ejecutado). Recordemos que
cuando tenemos un incidente eventualmente se puede o no abrir el termino de prueba, esto
dependerá del tribunal.
Los efectos de esta tercería es que no se suspenden los cuadernos, pues al tercero no le interesa que
se paralice el procedimiento. Cuando se verifica el remate en si mismo, el tribunal manda a
consignar el producto (que se pague el producto) hasta que la sentencia se encuentre firme de la
tercería (resuelta). Siempre y cuando esta tercería se acoja.
Tercería de pago
Acto jurídico procesal de un tercero en donde le sujeto lo que busca es concurrir a prorrata con el
ejecutante en el pago de lo que se debe. Aquí existen distintos créditos donde ninguno de los sujetos
tiene mejor derecho que otro, el tercero no tiene mejor derecho que el ejecutante, por lo que se debe
pagar a prorrata, es decir en razón de las proporciones de sus propios créditos. Es importante señalar
que este sujeto interpone la tercería pues no existen otros bienes con los cuales pagar su crédito.
La finalidad es concurrir al producto, al saldo respectivo, pues busca que se le pague. Al
encontrarse en igualdad de condiciones con el ejecutante, el tercero tiene derecho de concurrir al
pago mismo.
La oportunidad de hacer valer la tercería es la misma que en la de pago, es decir desde la
interposición de la demanda ejecutiva hasta antes del pago del crédito.
Los requisitos para hacerla valer son:
- Que sea 3ero
- Hacer valer crédito ejecutivo
- Deudor no tenga otros bienes que los embargados para pagar, el tercerista debe demostrar
que el ejecutado no tiene más bienes.
La tramitación se puede dar de 2 formas, la primera es interponer la tercería de forma incidental, es
decir acompañando antecedentes que el deudor no tiene mas bienes, la segunda es que el sujeto
inicie un nuevo procedimiento ejecutivo ante el tribunal competente; una vez interpuesto este
procedimiento ejecutivo, en vez de que este sujeto embargue bienes nuevamente, este solicitará al
tribunal que conocerá de su juicio que oficie al tribunal primigenio para que cuando el ejecutante
remate los bienes y obtenga el producto, le remita a este tercerista la parte que le corresponde.
Los efectos de esta tercería, al igual que la anterior, son que no se suspenden los cuadernos, pues al
tercero le interesa que se siga con el procedimiento. El tribunal debe resolver la tercería para que se
consignen los fondos respectivos.
Abandono del procedimiento
Es la sanción que la ley impone a las partes del juicio, las cuales encontrándose en la obligación de
dar el impulso procesal, no realizan gestiones en orden a conseguir la conclusión del procedimiento.
Esto se regula en los arts., 153 inc. 1 y 2 del CPC.
Artículo 153.- “El abandono podrá hacerse valer sólo por el demandado, durante todo el juicio y
hasta que se haya dictado sentencia ejecutoriada en la causa.
En los procedimientos ejecutivos el ejecutado podrá, además, solicitar el abandono del
procedimiento, después de ejecutoriada la sentencia definitiva o en el caso del artículo 472. En
estos casos, el plazo para declarar el abandono del procedimiento será de tres años contados
desde la fecha de la última gestión útil, hecha en el procedimiento de apremio, destinado a obtener
el cumplimiento forzado de la obligación, luego de ejecutoriada la sentencia definitiva o vencido el
plazo para oponer excepciones, en su caso. En el evento que la última diligencia útil sea de fecha
anterior, el plazo se contará desde la fecha en que quedó ejecutoriada la sentencia definitiva o
venció el plazo para oponer excepciones. En estos casos, si se declara el abandono del
procedimiento sin que medie oposición del ejecutante, éste no será condenado en costas.”
El inciso segundo señala que en los procedimientos ejecutivos se puede solicitar el abandono del
procedimiento después de que se encuentra ejecutoriada la sentencia definitiva, o en el caso del art.
472 CPC, después de que se haya generado la conversión procesal.
En este caso debemos distinguir; en el procedimiento tenemos el cuaderno principal, el ejecutivo y
el de tercería. Entonces el abandono del procedimiento se puede decretar en distintos cuadernos, y
por ello se distingue.
¿Es aplicable o no el abandono del procedimiento a las gestiones preparatorias de la vía ejecutiva?
Existen 2 posturas; unos señalan que esto si es posible mientras que otros dicen que no podría
hacerse, porque la gestión preparatoria de la vía ejecutiva es una gestión prejudicial. Al ser anterior
al procedimiento ejecutivo, no seria contencioso, y por ello no podría pedirse el abandono.
¿Qué ocurre con el título ejecutivo en el caso de que el procedimiento ejecutivo sea abandonado?
Nuevamente hay diferentes posturas; unas señalan que el titulo ejecutivo se mantiene vigente, pero
otros dicen que el titulo ejecutivo es parte del procedimiento ejecutivo, entonces al ser parte, se
entiende que si se abandona el procedimiento se estaría abandonando el titulo ejecutivo también.
Abandono del procedimiento en el cuaderno ejecutivo
Aquí se aplica el art. 152 del CPC
Artículo 152.- “El procedimiento se entiende abandonado cuando todas las partes que figuran en
el juicio han cesado en su prosecución durante seis meses, contados desde la fecha de la última
resolución recaída en alguna gestión útil para dar curso progresivo a los autos.”
Entonces, los requisitos son:
1.- Inactividad de las partes
2.- Transcurso del tiempo, 6 meses desde la última resolución recaída en una gestión útil destinada a
darle curso progresivo a los autos.
La oportunidad para hacerlo valer es desde que el sujeto ha sido notificado válidamente, y en el
hasta se debe distinguir entre si el sujeto no opuso excepciones desde que vence el plazo para
oponerlas o bien si el sujeto opuso excepciones antes de que se encuentre firme la sentencia que se
pronuncia sobre las excepciones.
Abandono del procedimiento en el cuaderno de apremio
Se aplica el inciso 2 del art. 153 del CPC
(…) “En los procedimientos ejecutivos el ejecutado podrá, además, solicitar el abandono del
procedimiento, después de ejecutoriada la sentencia definitiva o en el caso del artículo 472. En
estos casos, el plazo para declarar el abandono del procedimiento será de tres años contados
desde la fecha de la última gestión útil, hecha en el procedimiento de apremio, destinado a obtener
el cumplimiento forzado de la obligación, luego de ejecutoriada la sentencia definitiva o vencido el
plazo para oponer excepciones, en su caso. En el evento que la última diligencia útil sea de fecha
anterior, el plazo se contará desde la fecha en que quedó ejecutoriada la sentencia definitiva o
venció el plazo para oponer excepciones. En estos casos, si se declara el abandono del
procedimiento sin que medie oposición del ejecutante, éste no será condenado en costas.”
Entonces los requisitos son:
1.- Inactividad de las partes
2.- Transcurso del plazo, 3 años, desde la fecha de la última gestión útil hecha en el cuaderno de
apremio.
La oportunidad para hacerlo valer es desde que se realizó la gestión útil; si esta fue realizada antes
de la ejecutoriedad de la sentencia, o antes del vencimiento del plazo oponer excepciones, el plazo
de 3 años se cuenta desde la ejecutoriedad o vencimiento de plazo. El hasta cuándo se debe
distinguir; en los bienes muebles hasta antes de la adjudicación y en los bienes inmuebles hasta
antes del acta de remate.
Abandono del procedimiento en el cuaderno de tercería
Primero debemos distinguir de que tercería se trata. En el caso de la tercería de dominio si procede
el abandono, pues esta tercería tiene sus reglas propias, se le aplican las reglas del procedimiento
ordinario y por ello se entiende como una cuestión principal del procedimiento y no accesorias
como las otras tercerías, por lo que en las otras tercerías no procede el abandono. Esta distinción
corresponde a la regla general de la mayoría de la doctrina, sin embargo, una parte minoritaria
señala que es posible solicitar el abandono en cualquiera de las tercerías ya que cada una es un
procedimiento.
El que puede solicitar el abandono en este caso es el ejecutante o el ejecutado, pues son la parte
contraria al tercerista.
¿Terceristas pueden pedir el abandono en el cuaderno principal? Nuevamente existen posturas, una
parte señala que si se podría pedir el abandono en el cuaderno principal puesto que se está viendo
afectado por este cuaderno, mientras que otros señalan que no podría hacerlo porque el tercerista
solo podría participar en su tercería, al ser un tercero respecto del procedimiento.
Si es que se decretó el abandono del procedimiento en el juicio ejecutivo, obviamente en la tercería
también se va a decretar, puesta se entiende como parte de este juicio. Al contrario, si se declara el
abandono del procedimiento en la tercería, esta no afecta al procedimiento ejecutivo.

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