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Evapotranspiración

Diagrama de zonas ecológicas considerando las magnitudes de precipitación y evapotranspiración.

La evapotranspiración se define como la pérdida de humedad de una superficie por


evaporación directa junto con la pérdida de agua por transpiración de la vegetación. Se
expresa en milímetros por unidad de tiempo.

Evaporación y transpiración[editar]

Dentro del intercambio constante de agua entre los océanos, los continentes y la atmósfera,


la evaporación es el mecanismo por el cual el agua es devuelta a la atmósfera en forma
de vapor; en su sentido más amplio, involucra también la evaporación de
carácter biológico que es realizada por los vegetales, conocida como transpiración y que
constituye, según algunos la principal fracción de la evaporación total. Sin embargo, aunque
los dos mecanismos son diferentes y se realizan independientemente no resulta fácil
separarlos, pues ocurren por lo general de manera simultánea; de este hecho deriva la
utilización del concepto más amplio de evapotranspiración que los engloba.

Ciclo hidrológico y balance energético[editar]

La evapotranspiración constituye un importante componente del ciclo y balance del agua. Se


estima que un 70% del total de agua recibida por una zona (precipitación) es devuelta a la
atmósfera a través del proceso, mientras que el 30% restante constituye
la escorrentía superficial y subterránea. Junto con ser un componente del ciclo hidrológico, la
evapotranspiración interviene en el balance calorífico y en la redistribución de energía
mediante los traspasos que de ella se producen con los cambios de estado del agua,
permitiendo así un equilibrio entre la energía recibida y la perdida. El conocimiento de las
pérdidas de agua mediante el proceso permite tener un acercamiento a las disponibilidades
del recurso y consecuentemente puede realizarse una mejor distribución y manejo del mismo.
Aplicación[editar]

En términos aplicados, quizás una de las más conocidas referencias al fenómeno venga de
la climatología y de la consideración y utilidad de la evapotranspiración como un indicador
de aridez de las distintas zonas, basado en un largo registro de observaciones de distintos
elementos climáticos en un número suficiente de años. Sin embargo, donde la
evapotranspiración ha ganado un lugar realmente importante es en la evaluación de los
volúmenes de agua involucrados, que teniendo interés en sí mismos, son indispensables en
las tareas de planificación y gestión de los recursos hídricos, en ciertos estudios
medioambientales y en la cuantificación de las demandas hídricas de la vegetación,
especialmente de los cultivos.

Evapotranspiración: definiciones y conceptos[editar]

Los factores que intervienen en el proceso de evapotranspiración son diversos, variables en el


tiempo y en el espacio y se pueden agrupar en aquellos de orden climático, los relativos a
la planta y los asociados al suelo.1 Esta diversidad de factores, por una parte, ha dado lugar a
distintas orientaciones al abordar el complejo fenómeno y diferentes respuestas ante su
estimación; ha favorecido, por otro lado, el desarrollo de una serie de conceptos tendientes a
lograr una mayor precisión de ideas al referirse al fenómeno y surgen como un intento de
considerar las distintas condiciones de clima, suelo y cultivo prevalecientes en el momento en
que el fenómeno ocurre. Estas definiciones o conceptos, entre otros, son: uso consuntivo,
evapotranspiración potencial, evapotranspiración de referencia o del cultivo de referencia,
evapotranspiración real y cultivo de referencia.

Uso consuntivo o evapotranspiración[editar]


Los primeros estudios que abordaron el tema del riego hablaron de utilización consuntiva,
cantidad de agua que se expresaba en metros cúbicos por hectárea regada. Luego, en1941,
la División de Riegos del Ministerio de Agricultura de los Estados Unidos y la Oficina
Planificadora de Recursos Nacionales, definieron el concepto de uso consuntivo o
evapotranspiración como “la suma de los volúmenes del agua utilizada para el crecimiento
vegetativo de las plantas en una superficie dada, tanto en la transpiración como en la
formación de tejidos vegetales y de la evaporada por el terreno adyacente ya sea proveniente
de la nieve o de las precipitaciones caídas en un tiempo dado”. 2 Más tarde, en1952, H.F.
Blaney y W.D. Criddle definieron “uso consumo o evapotranspiración” en términos muy
similares a los anteriores como “la suma de los volúmenes de agua usados por el crecimiento
vegetativo de una cierta área por conceptos de transpiración y formación de tejidos vegetales
y evaporada desde el suelo adyacente, proveniente de la nieve o precipitación interceptada en
el área en cualquier tiempo dado, dividido por la superficie del área”. 3
Evapotranspiración potencial (ETP)[editar]
Existe acuerdo entre los diversos autores al definir la ETP, concepto introducido por Charles
Thornthwaite en 1948, como la máxima cantidad de agua que puede evaporarse desde un
suelo completamente cubierto de vegetación, que se desarrolla en óptimas condiciones, y en
el supuesto caso de no existir limitaciones en la disponibilidad de agua. 4Según esta definición,
la magnitud de la ETP está regulada solamente por las condiciones meteorológicas o
climáticas, según el caso, del momento o período para el cual se realiza la estimación.

El concepto de ETP es ampliamente utilizado y desde su introducción ha tenido gran


influencia en los estudios geográficos del clima mundial; de hecho su diferencia respecto de
las precipitaciones (Pp-ETP) ha sido frecuentemente usada como un indicador de humedad o
aridez climática. También ha influido sobre la investigación hidrológica5 y ha significado el
mayor avance en las técnicas de estimación de la evapotranspiración. 6

Evapotranspiración de referencia o evapotranspiración del cultivo


de referencia (ETo)[editar]
La noción de ETo ha sido establecida para reducir las ambigüedades de interpretación a que
da lugar el amplio concepto de evapotranspiración y para relacionarla de forma más directa
con los requerimientos de agua de los cultivos. Es similar al de ETP, ya que igualmente
depende exclusivamente de las condiciones climáticas, incluso en algunos estudios son
considerados equivalentes,7 pero se diferencian en que la ETo es aplicada a un cultivo
específico, estándar o de referencia, habitualmente gramíneas o alfalfa, de 8 a 15 cm de altura
uniforme, de crecimiento activo, que cubre totalmente el suelo y que no se ve sometido a
déficit hídrico.8 Es por lo anterior que en los últimos años está reemplazando al de ETP.

Evapotranspiración real, actual o efectiva (ETr) [editar]


No obstante las mayores precisiones alcanzadas con la incorporación de algunos de los
conceptos anteriores, las condiciones establecidas por ellos no siempre se dan en la realidad,
y aquella evapotranspiración que ocurre en la situación real en que se encuentra el cultivo en
el campo, difiere de los límites máximos o potenciales establecidos. Para referirse a la
cantidad de agua que efectivamente es utilizada por la evapotranspiración se debe utilizar el
concepto de evapotranspiración actual o efectiva, o bien, más adecuadamente, el de
evapotranspiración real.

La ETr es más difícil de calcular que la ETP o ETo, ya que además de las


condiciones atmosféricas que influyen en la ETP o ETo, interviene la magnitud de las reservas
dehumedad del suelo y los requerimientos de los cultivos. Para determinarla se debe corregir
la ETP o ETo con un factor Kc dependiente del nivel de humedad del suelo y de las
características de cada cultivo.9
Coeficiente de cultivo (Kc)[editar]
Como puede desprenderse del apartado anterior, un coeficiente de cultivo, Kc, es
un coeficiente de ajuste que permite calcular la ETr a partir de la ETP o ETo. Estos
coeficientes dependen fundamentalmente de las características propias de cada cultivo, por
tanto, son específicos para cada uno de ellos y dependen de su estado de desarrollo y de sus
etapas fenológicas, por ello, son variables a lo largo del tiempo. Dependen también de las
características del suelo y su humedad,10 así como de las prácticas agrícolas y del riego. 11

Se hace alusión a estos Kc en numerosas publicaciones, puesto que permiten conocer


la ETr a partir de la ETP o ETo evitando el uso de métodos más precisos, pero de más difícil
aplicación. Pueden encontrarse en literatura especializada o bien derivarse de acuerdo a los
lineamientos establecidos por la FAO.12

La evapotranspiración se produce a través de la evaporación del agua presente en la superficie terrestre,


junto con la que está en mares, ríos y lagos y la que procede también de la tierra, incluyendo la transpiración
de los seres vivos, en especial de las plantas. Como resultado de este proceso se determina la formación de
vapor atmosférico, que, al llegar a las condiciones de condensación, retorna en parte a la superficie en forma
de precipitación líquida o sólida.

Por tanto la evapotranspiración es la consideración conjunta de los procesos de evaporación y transpiración.


La diferencia entre estos dos conceptos está en la participación de los seres vivos en el segundo, que es el
proceso físico a través del cual sus superficies pierden agua a la atmósfera mediante el proceso de
transpiración. Su inclusión en un concepto único con la transpiración se debe a la dificultad de medirlos por
separado. Por tanto la evapotranspiración se produce desde:

 La evaporación del agua transpirada por los seres vivos.


 La superficie del suelo y de la vegetación inmediatamente después de la precipitación.
 La superficie de la hidrosfera: ríos, lagos, embalses, océanos.
 Elsuelo,pudiendotratarsedeaguarecientementeinfiltradaodeaguaqueseacerca de nuevo a la superficie
después de un largo recorrido a través del subsuelo.
La evapotranspiración depende de:

 El poder evaporante de la atmósfera: de la radiación solar, de la temperatura, de la humedad y del viento.


 De la salinidad del agua.
 Del grado de humedad del suelo.
 Del tipo de planta.
 Evapotranspiración (ET)

En condiciones naturales evaporación y transpiración son fenómenos


interdependientes. El concepto de Evapotranspiración se introdujo debido a la
dificultad de discriminar evaporación y transpiración. 

La importancia cuantitativa de este proceso es muy grande. Como promedio


global, el 57% de la precipitación anual es devuelta a la atmósfera por
evapotranspiración alcanzando del 90% y hasta del 100% en zonas áridas y
desiérticas. Las cantidades de agua que por este proceso vuelven a la atmósfera y
la energía necesaria para ello, alcanzan cifras realmente notables. En un día
cálido, es frecuente que en algunas zonas los valores de evapotranspiración
oscilen entre 3-4 mm/día, lo que viene a equivaler a 30-40 Tm/Ha/día,
requiriendo una energía del orden de 18-24M de KCal. 

La evapotranspiración tiene gran importancia, especialmente respecto al total de


agua recibida por una zona, que muy frecuentemente, es del orden del 70% de
ésta, llegando en algunos lugares al 90%. En la España peninsular, las pérdidas
totales por evapotranspiración son unas 3 veces superiores a las pérdidas al mar
por los ríos. 

 Concepto

Evapotranspiración es el resultado del proceso por el cual, el agua cambia de


estado líquido a gaseoso, y directamente, o a través de las plantas, vuelve a la
atmósfera en forma de vapor. 

El término sólo es aplicable correctamente a una determinada área de terreno


cubierta por vegetación. Ante la ausencia de vegetación, sólo se puede hablar
de evaporación. 

La evapotranspiración (ET) es el proceso por el cual el agua es transferida desde


la superficie terrestre hacia la atmósfera. Incluye tanto la evaporación de agua en
forma sólida como líquida directamente del suelo o desde las superficies
vegetales vivas o muertas (rocío, escarcha, lluvia interceptada por la vegetación),
como las pérdidas de agua a través de las superficies vegetales, particularmente
las hojas. 

La evapotranspiración constituye la transferencia total de agua desde una


superficie vegetada a la atmósfera. 

La evapotranspiración depende, entre otros, de dos factores muy variables y


difíciles de medir: el contenido de humedad de suelo y el desarrollo vegetal de la
planta. Por esta razón Thornthwaite (1948) introdujo el término
de evapotranspiración potencial o pérdidas por evapotranspiración, en el doble
supuesto de un desarrollo vegetal óptimo y una capacidad de
campo permanentemente completa. 

En torno al concepto de evapotranspiración, existen algunos términos a tener en


cuenta:

 Uso consuntivo del agua: cantidad de agua consumida en una zona,


al satisfacer, total o parcialmente. Para el caso de demanda agrícola,
los términos uso consuntivo y evapotranspiración pueden
considerarse como sinónimos. 
 Demanda de agua para riego: estrechamente relacionada con el
concepto de evapotranspiración, pero no son equivalente, pues
tienen como base de cálculo la diferencia entre evapotranspiración
potencial y evapotranspiración real. 

Tampoco son sinónimos uso consuntivo agrícola y demanda de agua para riego.
Esta debe considerar las pérdidas por aplicación y conducción del agua además
de las necesidades estrictas y aquel debe incluir la parte de precipitación que se
pierde por evapotranspiración. 

La evapotranspiración es un componente fundamental del balance hidrológico y


un factor clave en la interacción entre la superficie terrestre y la atmósfera. Su
cuantificación se hace necesaria en contextos tan diferentes como la producción
vegetal, la planificación y la gestión de recursos hídricos o estudios ambientales
y ecológicos.

 Unidades
La unidad más usual para expresar las pérdidas por evapotranspiración es, el mm
de altura de agua, lo que equivale a 10 m3/Ha. La medida siempre se refiere a
un determinado intervalo de tiempo.

 EVAPOTRANSPIRACIÓN POTENCIAL

El término Evapotranspiración Potencial (ETP) fue acuñado por primera vez y de


forma independiente por Penman (1948) y Thornthwaite (1948) en un intento de
optimizar el contenido en el suelo y en el desarrollo vegetal.
Definieron ETP como la tasa máxima de evaporación de una superficie
completamente sombreada por un cultivo verde, sin limitación en el suministro
hídrico. 

La ETP sería la evaporación que se produciría si la humedad del suelo y la


cobertera vegetal estuvieran en condiciones óptimas. 

Pero como la definición de ETP resultaba poco útil, desde el punto de vista de su
aplicación, dando lugar a interpretaciones diversas, se desarrolló a nivel
agronómico el concepto de Evapotranspiración de referencia (ETr),
llegándose a la conclusión que para obtener valores razonables de ETP, la
cubierta vegetal debería quedar explícita en la definición de ETP.

Se desarrollaron dos definiciones de ETP según el cultivo de referencia:

- ETP sobre gramíneas (ETo). Desarrollada por Doorembos y Pruitt (1977) para
la FAO.
- ETP sobre alfafa. Desarrollada por Jensen et al (1971).

La ETP que da la alfafa es diferente a la de las gramíneas, ya que ésta desarrolla


una superficie aerodinámicamente más rugosa que las gramíneas. 

Como la definición de ERr seguía sin dar lugar a un auténtico método estándar,
Smith et al. (1990) propusieron una nueva definición basada en la combinación
de la ecuación de Penman-Monteith, según la cual la ET de referencia (ETo)
sería la tasa de ET de un cultivo hipotético con valores fijos de altura (12 cm),
resistencia de la cubierta vegetal (70 s/m) y albedo (0,23), que representa la ET
de una superficie extensa cubierta de gramíneas verdes, de altura uniforme y
crecimiento activo, que cubre totalmente el terreno y no padece de falta de agua. 
Una vez conocido la evapotranspiración de referencia (ETr) de un cultivo o
región, ésta se multiplica por un factor corrector específico, denominado
coeficiente de cultivo, obteniéndose así la ETP de un cultivo concreto. 

  EVAPOTRANSPIRACIÓN REAL (suelo)

Es la evapotranspiración real que se produce en las condiciones reales existentes. 

El método más conocido es el de Penman-Monteith (1965) derivado de la


ecuación de combinación. Combina la ecuación del balance de energía y los
gradientes de humedad, temperatura y velocidad del viento. Con ella se elimina
la necesidad de medidas en la superficie evaporante y medidas a diversas alturas
sobre la superficie como requieren los métodos del "gradiente" y del "perfil del
viento" respectivamente, como se venía haciendo hasta la introducción de esta
ecuación. Combina información meteorológica y fisiológica y asume que las
copas vegetales pueden asimilarse a una superficie uniforme como una única
fuente de evaporación (big-leaf), lo que supone una considerable simplificación
de la realidad, particularmente cuando se aplica a cubiertas estratificadas
(multicapas) o con distintas superficies evaporantes (multifuentes). 

La distribución dispersa y agrupada en mosaicos de vegetación típica de regiones


semiáridas constituye un ejemplo de dónde no se satisface la fórmula de Penman-
Monteith, por lo que trabajos posteriores extendieron el modelo a dos o más
fuentes. La interacción entre fuentes se estudia como combinación de resistencias
en serie y paralelo hasta una altura de referencia, por encima de la vegetación
donde los efectos de la heterogeneidad espacial ya no son perceptibles.

En general, los modelos que toman de partida la ecuación de combinación, se


basan en la teoría de la difusión turbulenta (teoría de la K, K-Theroy), para
describir los flujos de calor, vapor de agua y momento a través de las copas.  El
uso de esta teoría para vegetación dispersa ha sido cuestionado tanto desde el
punto de vista teórico como observacional., ya que asume que la longitud
característica de los remolinos dominantes sea menor que la distancia sobre la
cual los gradientes cambian apreciablemente. Esto no siempre ocurre en los
rodales de vegetación dispersa. 

Otras aproximaciones son los modelos que describen el sistema físico formado
por el conjunto suelo-planta-atmósfera (SVAT) en un perfil unidimensional
desde una profundidad de suelo determinada hasta la copa vegetal. El sistema
considera tanto los flujos de agua como de energía y establece que el suelo y la
vegetación actúan como almacén de agua que se llena y vacía por diferentes
entradas y salidas. Los flujos están regulados por unos gradientes de
concentración y unas resistencias. Se establecen diferentes capas, tanto en suelo
como en vegetación, siendo este uno de los aspectos que diferencia distintos
modelos SVAT, siendo más complejos cuanto mayor sea el número de capas
considerado. Los mayores esfuerzos de estas aproximaciones radican en: el
esfuerzo que supone la parametrización sobre todo en suelo; la no consideración
de la variabilidad espacial; y las premisas de condiciones de estado estacionario
entre suelo y vegetación.

Diferentes trabajos han demostrado que las predicciones de ET obtenidas con


modelos tipo SVAT no son significativamente diferentes de las obtenidas por
modelos basados en la ecuación de combinación, por lo que la teoría de la K,
sigue siendo ampliamente aceptada. 

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