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La función administrativa del Estado colombiano se rige por los principios de igualdad, moralidad, eficacia, economía, celeridad, imparcialidad y publicidad. Las autoridades administrativas deben coordinarse para cumplir con los objetivos del Estado y tendrán controles internos de acuerdo con la ley. La Constitución Política de 1991 establece que la administración pública en Colombia se descentraliza, delega y desconcentra funciones para servir de manera eficiente los intereses generales.
La función administrativa del Estado colombiano se rige por los principios de igualdad, moralidad, eficacia, economía, celeridad, imparcialidad y publicidad. Las autoridades administrativas deben coordinarse para cumplir con los objetivos del Estado y tendrán controles internos de acuerdo con la ley. La Constitución Política de 1991 establece que la administración pública en Colombia se descentraliza, delega y desconcentra funciones para servir de manera eficiente los intereses generales.
La función administrativa del Estado colombiano se rige por los principios de igualdad, moralidad, eficacia, economía, celeridad, imparcialidad y publicidad. Las autoridades administrativas deben coordinarse para cumplir con los objetivos del Estado y tendrán controles internos de acuerdo con la ley. La Constitución Política de 1991 establece que la administración pública en Colombia se descentraliza, delega y desconcentra funciones para servir de manera eficiente los intereses generales.
ARTICULO 209. La función administrativa está al servicio de los intereses generales y se
desarrolla con fundamento en los principios de igualdad, moralidad, eficacia, economía, celeridad, imparcialidad y publicidad, mediante la descentralización, la delegación y la desconcentración de funciones.
Las autoridades administrativas deben coordinar sus actuaciones para el adecuado
cumplimiento de los fines del Estado. La administración pública, en todos sus órdenes, tendrá un control interno que se ejercerá en los términos que señale la ley.