Está en la página 1de 2

1) LAS DEFINICIONES DE LA RELIGIÓN

Definiciones de la religión puede haber tantas como autores


hay en sociología o antropología. “La variedad de creencias y
organizaciones religiosas es tan inmensa que los estudiosos han
encontrado grandes dificultades en alcanzar una definición de
religión generalmente aceptada” (Giddens, (1989) sociología, p.
489) A continuación voy a transcribir algunas más conocidas,
para posteriormente continuar con la definición de E. Durkheim y
J. Wach, como autores, quizás los más representativos en sus
tratados de sociología de la religión.

“La religión se halla constituida por una serie de valores


supremos expresados en un credo, objetivados por los vehículos
del culto y socializados por una conducta que se adapta a los
normas religiosas que unen a los miembros dentro de un mismo
grupo religioso”. Pitirim A. SOROKIN (1969), Sociedad cultura
y personalidad. Su estructura y su dinámica. Sistema de
sociología general, Madrid, Aguilar, p. 359).

Giddens, siguiendo a E. Durkheim, primero habla de lo que


no es religión: primero no debe identificarse con el monoteísmo
(creencia en un dios). Tampoco debe identificarse con
prescripciones morales que controlan el comportamiento de los
creyentes. En tercer lugar, “la religión no se ocupa
necesariamente de explicar cómo el mundo ha llegado a ser como
es”. El cristianismo explica el origen del mundo en el libro del
Génesis, pero otras religiones tienen otro tipo de explicaciones. Y
en cuarto lugar, “la religión no puede identificarse con lo
sobrenatural como algo intrínsecamente implica la creencia en un
universo `más allá del ámbito de los sentidos’. El confucionismo,
por ejemplo, se ocupa de aceptar la armonía natural del mundo,
no de encontrar verdades `detrás de él’” (Giddens, Sociología, p.
485).

Y una vez que explica lo que no es religión, describe las


características de todas las religiones, como Durkheim. Escribe

1
que todas las religiones “implican un conjunto de símbolos,
invocan sentimientos de reverencia, y están vinculadas a rituales
o ceremonias (como los servicios eclesiásticos) practicados por
una comunidad de creyentes. Todos estos elementos requieren
cierta elaboración. Impliquen o no dioses las creencias en una
religión, existen prácticamente seres u objetos que inspiran que
inspiran actitudes de respeto o admiración. En algunas religiones,
por ejemplo, las personas creen en y reverencian una `fuerza
divina’, más que dioses personalizados. En otras religiones hay
figuras que no son dioses, pero en las que se piensa con
reverencia, como Buda o Confucio” (Giddens, Sociología, p.
485).

También podría gustarte